19.02.03 Urueña NIEVE EN URUEÑA LA CIGÜEÑA BLANCA La cigüeña blanca (Ciconia ciconia) es un ave grande de largos cuello, pico y patas. Es de color blanco, menos la mitad inferior de las alas, que son negras, y el pico y las patas, rojos. También tiene una leve mancha negra característica alrededor de los ojos. Se alimenta de anfibios, peces, insectos, saltamontes, escarabajos, lombrices y pequeños mamíferos. Puede llegar a medir un metro de altura y más de medio metro de ala, con lo que llega a poseer una envergadura total de unos 170 cm. Su vuelo es lento, con el cuello estirado y las patas sobresaliendo por detrás. Planea aprovechando las columnas de aire cálido. Construye un gran nido de ramaje, hierba y tierra. Tenerlo en la iglesia del pueblo es símbolo de paz en la Península Ibérica. Cuando era más migradora, pasaba el invierno en África, donde actualmente está protegida, y su aparición en el Norte anunciaba el fin del invierno y el inicio del buen tiempo. Ahora muchas cigüeñas (el 30% de las peninsulares) en vez de regresar a su nido estacionalmente, se quedan en él de forma sedentaria todo el año, como es el caso carrasqueño. España es el estado de la Unión Europea que actualmente cuenta con un mayor número de cigüeñas. En la cercana Reserva de las Lagunas de Villafáfila se han llegado a censar un centenar de cigüeñas juntas en el mismo invierno. Lo normal es que en el nido haya 2 cigüeñas, aunque a veces puede haber 3. Los machos y las hembras son semejantes. Pueden tener una nidada de 3 a 5 huevos blancos, que incuban durante un mes. En ® el cisco Lagares, 12 - 47862 Urueña. Valladolid TELÉFONO: 983 717 001 E-MAIL: tfmedia@tfmedia.com WEB: www.tfmedia.com/elcisco Urueña si tienen 3 cigüeños a veces tiran uno, que aparece muerto en la Calleja de Santa María. Las cigüeñas esconden la cabeza cuando viene el aire y éste las peina, pero no las tira. Son como una veleta natural, siempre están colocadas a favor del aire. Cuando cantan, claquetean o técnicamente crotorean, es decir, baten las mandíbulas en época de celo. En Urueña dicen que “pican el ajo”, con un volumen sonoro que se siente en toda la villa. Sus mayores amenazas actuales en Castilla y León son la pérdida de zonas húmedas, la realización de obras junto al nido en el período de cría y la electrocución en los tendidos eléctricos. CONFERENCIAS Y EXPOSICIONES Sábado 22 de febrero: El capitán de la Marina mercante Arturo Barreiro ofreció una conferencia titulada Prestige, claves de un naufragio. Sábado 1 de marzo: El medio natural en el antiguo Egipto será el tema central de una charla a cargo del historiador José Ramón . Navarro. Sábado 8 de marzo: Pablo Setién, del Foro Ermua, hablará sobre El ámbito vasco de rebelión democrática. Desde el 22 de febrero la sala de exposiciones del Ayuntamiento acogerá, asimismo, una muestra de fotografías del carnaval de Venecia, obra del vallisoletano Arturo Franco San José, gran aficionado a esta célebre y espectacular fiesta italiana. TELÉFONOS URGENCIAS Ambulancias De la Cuesta 983 780 025 Ambulatorio (Mota del Marqués) 983 780 154 Bomberos (Medina de Rioseco) 983 700 731 Cruz Roja (Medina de Rioseco) 983 700 536 Guardia Civil (Mota del Marqués) 983 780 020 Iberdrola (averías) 901 202 020 Seprona 062 INTERÉS Ayuntamiento 983 717 445 Botica 983 717 428 Carnicería A. de Castro 983 717 453 Encuadernación 983 717 287 Escuelas 983 717 460 Extensión Agraria 983 780 009 Fundación Joaquín Díaz 983 717 472 Funeraria Cuesta 983 717 482 La Real 983 717 041 Librería Alcaraván 983 717 018 Panadería J. Marcos 983 717 475 Regalos Azogue 655 460 032 Taxi de Urueña 983 717 490 Tf.med!a 983 717 001 Tienda 983 717 477 Kiosco 983 717 484 Restaurantes Mesón Villa de Urueña 983 717 063 Pago de Marfeliz 983 717 042 Alojamientos Villa de Urueña 983 717 063 Villalbín 983 717 470 paz y nunca máis Información de los horarios de Linecar Ida a Valladolid: lunes y viernes, a las 8 horas. Vuelta: lunes y viernes, a las 18 horas. DE HONOR: Joaquín Díaz / DIRECCIÓN: Tamara Crespo / FOTOGRAFÍA: Fidel Raso / tf med!a / REDACCIÓN: Jesús Alcaraván, Alison Canosa, Adolfo Delibes y Carmen Navarro COLABORA: Cromotex / DISTRIBUYE: Ayuntamiento de Urueña EN ESTE NÚMERO: Lucha Cuerda, María Moral Vallecillo, Xuan Porta, Ángela Torres PRESIDENTE DISEÑO: Urueña el cisco página 4 / marzo 2003 el cisco número 15 / marzo / 2003 SI NO LLOVIERE EN FEBRERO, NI BUEN PRADO NI BUEN CENTENO EL 17 DE FEBRERO DE 1968, ... Aquí los labradores estamos peor que en ningún EL DIARIO EL NORTE DE CASTILLA pueblo. Hay mucha ganadería, pero no tenemos pastos. Si pudiéramos marcharnos todos, aquí PUBLICABA UNA PÁGINA no quedaba nadie... DEDICADA A URUEÑA, Texto extraído del diario EL NORTE DE CASTILLA, sábado 17 de febrero de 1968. EN DONDE LOS VECINOS PAGO DE LOS PASTOS Y GESTIÓN DEL COTO SE QUEJABAN AMARGAMENTE DE LA SITUACIÓN DEL PUEBLO. La Junta Agropecuaria Local se reunió los pasados días 20 y 21 de enero para elaborar la lista de los pastos correspondiente a 2002. Según informó el tesorero, Carlos Rodríguez, el pasado año se han pastoreado 2.580 hectáreas y el precio por unidad ha sido de 4 euros el rastrojo, y 3 lo rastrillado. El 90 por ciento del coste ha sido abonado a los agricultores por la Junta. El resto del dinero pagado por los ganaderos se destina a la propia asociación. Respecto a la gestión del Coto, Rodríguez informó de que el precio por hectárea en 2002 ascendió a 2,26 euros, mientras que el año anterior fue de 1,80. La asociación, que se financia con las cuotas anuales de sus miembros, acordó pagar el 45 por ciento de este importe a los propietarios y donar 3.000 euros para construir unos servicios sanitarios en la panera de la Cámara. El balance de la temporada de caza es de unos 200 conejos abatidos por tres cuadrillas mediante el procedimiento del descaste. En las dos batidas de zorro autorizadas, el 12 y el 19 de enero, se cazaron cuatro de estos animales. Este mes se han solicitado nuevos permisos para la caza de zorro y corneja. el cisco página 2 / marzo 2003 el cisco LA MATANZA DEL GOCHO Y SU APROVECHAMIENTO “UN MOTIVO MÁS PARA VISITAR URUEÑA” Azucena Tapia habla con entusiasmo del nuevo restaurante que su marido, el constructor de Torrelobatón Emilio Hernández, construye en Urueña. Esta tordesillana, que a sus 42 años está a punto de convertirse en empresaria, tiene experiencia en el mundo de la restauración, ya que a los 14 años comenzó a trabajar con sus padres en el Bar Tapia. Según cuenta, el popular local, ubicado en la Plaza Mayor de su pueblo natal, era uno de los favoritos, entre otros, de Félix Rodríguez de la Fuente. Una vez recuperada la tradición familiar, Tapia espera que “comer o descansar tomando un aperitivo en nuestro restaurante sea otro motivo más para visitar Urueña”. Para ello, escogió un solar de 190 metros cuadrados situado en un privilegiado rincón del pueblo, frente al mirador de El Roto, desde donde se pueden contemplar espectaculares vistas de la llanura. Allí se levanta ya un local de dos plantas con entrada por la calle Cata Huevos. Según explica Tapia, el edificio “trata de mantener una imagen externa de arquitectura tradicional, integrada en el conjunto de Urueña, para lo cual en su día se presentaron distintas propuestas a la Comisión Provincial de Patrimonio”. Respecto a la denominación “medieval”, Tapia asegura que se trata de un intento de respetar la idiosincrasia del pueblo. “Quizá algún fin de semana o en fechas especiales organicemos cenas ambientadas en la Edad Media, aunque es algo que se verá con el tiempo”, afirma. Lo que ha llevado a sus promotores a elegir este pueblo es el “considerable crecimiento que ha experimentado en el número de visitantes durante los últimos años”. Como “mujer emprendedora”, Tapia asegura “confiar plenamente en el mundo rural y sus posibilidades”. En este sentido, destaca también como nota negativa la ausencia de ayudas públicas. “A pesar de ser mujer, mayor de 40 años, que hasta ahora no había cotizado nunca y que, además del mío, voy a crear varios puestos de trabajo en la zona rural, no he recibido ninguna de las subvenciones que solicité, todas en tiempo y forma, aunque hablar de esto daría para otro reportaje”, señala la nueva empresaria. En un principio se planteó como fecha tope de apertura la próxima Semana Santa, pero “diversas causas”, entre ellas y en última instancia, el mal tiempo, han retrasado la finalización de las obras. De ahí que el nuevo objetivo sea tenerlo listo para “mediados del mes de junio”. Datos del establecimiento: Nombre: Restaurante Medieval Los Lagares. Constructor: Rocaraz, S. L. Capacidad: 40 comensales en la planta baja y 35 en la primera. Horario: En temporada alta, estará abierto toda la semana. El resto del año, los viernes, sábados y domingos. En función de la demanda, el bar se cerraría algunos días a partir de las siete de la tarde. Tipo de comida: Tradicional e innovadora, especializada en caza. Después de la matanza del cerdo, nada más abrirle se quitaba la asadura, se partía en cachitos y se doraba en la cazuela zamorana con manteca o aceite. Cuando estaba dorada, se echaban las patatas y también se doraban. Luego se añadía agua, pimiento, sal y un poco de ajo y orégano para cocerlo todo. Después de cocido, se echaba parte de la sangre, previamente cocida a su vez. Se sacaban las tripas, las mollejas y se ponían los cerdos en las escaleras hasta el día siguiente, que los estazaban. El ajo se hacía con cebolla muy picadita y se echaba arroz encallado y sangre para las morcillas. También se hacía un frito, que se llamaba el ajo, y al que se echaba sal, pimiento, hoja de laurel, orégano y cebolla, además de una pinta de azúcar y media copa de vino blanco. Antes de hacer las morcillas se desurden las tripas, se lavan, se quita la porquería, se meten en un caldero y se dejan hasta el día siguiente para poderlas rallar con una horquilla, como las que se meten al pelo. Igual para las morcillas: se echaban en las tripas gordas, se llenaban aproximadamente unos 25 cm, se cosían y después se ponían en una sartén o en una caldera con agua a hervir unos 13 minutos y se pican para que salga el aire de la tripa, se cosen y se cuelgan. El agua de cocer las morcillas se empleaba para hacer una sopa que se llamaba caldo virote. El segundo día se estaza el cerdo y quedan distintas partes. Por ejemplo, la cabeza, se quita el forro de la cabeza que se llama cachucha con las orejas y las papadas, de donde salen las mollejas. Las papadas se echan en sal con el tocino y salen las cintas, que es el fondo del vientre. Salen los lomos, los solomillos y las costillas, la carne, los jamones (que se dejaban en sal 21 días), las paletillas, los riñones, la lengua de la cachucha y los sesos. El hueso que abre y que llega al costillar se llama el alma. Los chicharrones se hacían en una caldera grande, quitados de la carne gorda y salían de la manteca resultante de desurdir, y se llaman chicharrones de collarejo (los que salen de la tripa). Se cocían cebollas medianas en la caldera con la grasa de los chicharrones. Después se colaban y se echaba azúcar y teníamos por costumbre mandárselo a los familiares y vecinos. Se llamaba enviar y daban una propina por ello. Se quitan luego de los pies, las chitas, que antes se chupaban y ahora se tiran. Por la tarde se picaba la carne y se ponía en adobo, se echaba pimiento, sal, orégano y un poquito de ajo muy machacado con algo de agua. Si se quiere, se echa la guindilla para que esté más fuerte. Están 24 ó 48 horas en un barreño, grande o pequeño, según sea el cerdo. Antes de llenarle, al día siguiente se daba vuelta y se probaba un poco de picadillo hecho en la sartén, a ver si estaba en sazón (en condiciones). Y ya se podía llenar con las tripas bien lavadas. Se ataban los chorizos, se hacían longanizas, atadas en forma de herradura con hilo y que se llamaban tanganillos. En un varal se ponían en la cocina, colgadas al humo y a los 8 días podías ponerlos donde quisieras. Los lomos, los costillares y los solomillos, en zuza (se echaba agua, pimiento, sal y ajo) y a los costillares se les badurna de pimentón. Se tenían 5 ó 6 días, entonces se sacaban, se colgaban y se escurrían para secar colgado de la cocina. Luego de secos se partían un poco más grandes que los filetes (gruesos). Se pasaban por una sartén grande y se echaban en orzas, con aceite y manteca, y así se podían conservar hasta el verano. Los chorizos sábados o sabadeños se hacían así: se echaba la carne gordita, el librillo (el estómago) y lo de la asadura junto al sófer, que no está negro como el hígado. La vejiga se llenaba de aire como un globo y se colgaba en las vigas, se dejada secar y ya seca o coscaruda (tiesa) había quien la llenaba de manteca. Con el tocino y su cuero se hacían torreznillos. DE VIEIRAS, ERIZOS Y SOLEDADES Cuando en septiembre de 2001 llegué a Urueña por primera vez, lo último que me podía haber imaginado es que iba a vivir en el consultorio. Eran las Fiestas y había cine en la Plaza Mayor. Estuve entre vosotros como forastera y al marcharme sentí con fuerza el deseo de poderme quedar: de que hubiera entre las murallas un lugar para mí. Luego vinieron las gestiones, los trámites, las conversaciones por teléfono y los viajes desde Barcelona. Y el buen trato que recibí desde el primer momento por parte de todos y cada uno a los que fui conociendo, y la ilusión con la que vi cómo transformaban un consultorio y una oficina de turismo en un hogar. Ahora ya estoy aquí y EL CISCO os lo contó el mes pasado, así que en esta ocasión me presento yo misma, aunque ya he conocido a muchos de vosotros; creo que ya os habéis acostumbrado al erizo y a la vieira de mi puerta, pero me gustaría explicaros que la vieira es la señal página 3 / marzo 2003 que identifica al peregrino y, puesta en una puerta, anuncia albergue para los que caminen a Santiago; que el erizo me viene acompañando desde tierras catalanas y me dice que Urueña le gusta mucho a pesar del frío que pasa; aunque he venido a vivir sola, eso no significa que me guste estar aislada y por eso os agradezco tanto vuestra buena acogida, vuestra amabilidad y vuestro calor en este febrero de nieve. Llegar a vivir a un pueblo de doscientos y pico habitantes tiene mucho que ver con incorporarse a una familia numerosa. Tiene sus reglas, sus plazos y sus protocolos. Y no siempre se acierta a la hora de relacionarse, por lo que os pido de antemano disculpas por posibles despistes, errores u olvidos. El tiempo dejará clara la buena fe, que es lo que al final importa. Me alegra pensar que en estas Fiestas que vienen no tendré que marcharme con los forasteros, porque ya hay dentro de la muralla un sitio para mí. Muchas gracias, de nuevo, a los que lo habéis hecho posible. Lucha RECETA DE ÁNGELA TORRES EL COCIDO Contado por María Moral Vallecillo, de 88 años, y recogido por Xuan Porta. ROBO EN LA ESCUELA La escuela unitaria de Urueña sufrió un robo en la madrugada del jueves al viernes 14 de febrero. Según explicó Alfredo Escudero, director del Centro Rural Agrupado Villas del Sequillo, del que depende esta unidad, fue un “auténtico asalto”, pues los ladrones descerrajaron dos puertas y dejaron el aula revuelta, “con todos los libros tirados por el suelo”. Los objetos sustraídos fueron un ordenador (del que dejaron la impresora), un vídeo y un microondas perteneciente a la maestra, Rosa Rodríguez, además de un balón de reglamento y los 30 euros recaudados por los niños para una campaña de la ONG Manos Unidas. El valor calculado para todo ello a la hora de formalizar la denuncia fue de unos 2.000 euros. Se da la circunstancia de que tres días antes, el martes 11 de febrero, el colegio de Mota del Marqués sufrió un atraco similar. Desde la Dirección Provincial de Educación se aseguró que en ambos casos, el material escolar sería repuesto en breve. El cocido es uno de los platos más clásicos. En cada región, en cada hogar, se realiza uno peculiarmente suyo, pero el fondo es el mismo. Por sencillo que parezca, su ejecución requiere gran cuidado, principalmente vigilancia para que hierva despacio y sin parar. Los garbanzos se pondrán a remojar el día anterior en abundante agua templada, añadiéndoles un puñadito de sal. En un puchero se pondrá la carne, los huesos, el pollo o la gallina, añadiendo agua fría y un poco de sal. Se mantiene a fuego vivo hasta que empieza a hervir, quitando la espuma escrupulosamente, dejando que hierva durante una hora aproximadamente. Después se añaden los garbanzos, lavándolos previamente con agua caliente. Se vuelve a espumar y se vuelve a dejar hervir. Pasada una hora se añaden las verduras (si se desea añadir judías verdes o acelgas, se cuecen por separado). Por último, se añade el chorizo, el jamón y el tocino. El tiempo estimado de cocción es de unas cuatro horas. Nota: Es imprescindible lavar la carne para quitar los restos de plumas y huesos. Si se desea, se puede realizar el relleno que se Ingredientes para cinco o seis personas incorporará al puchero para que de un hervor. EL RELLENO Se hace con un poco de carne de pollo, tocino, al que se añade ajo y perejil. Todo ello muy picado sazonado con sal y pimienta. Se amasa con miga de pan y huevo batido confecionando unos rollos que se pasarán por harina y se freirán en aceite bien caliente. 500 g de morcillo. Uno o dos huesos de ternera. 125 g de magro de cerdo o una punta de jamón. 125 g de chorizo o morcillo según gusto. 125 g de tocino. Un cuarto de gallina o pollo. 250 g de garbanzos. Dos o tres puerros. Dos o tres zanahorias.