Discurso de George W. Bush en conmemoración de los atentados del 11S El presidente de EEUU depositando una ofrenda en honor a las víctimas fatales. – 11/09/06, Nueva York. Cinco años después de que EE UU sufriera el peor ataque terrorista de su historia, su presidente, George W. Bush, se ha dirigido a la nación para pedir a sus ciudadanos que se unan en la guerra contra el terrorismo, a la que ha calificado de "misión de nuestra generación". En un discurso emitido desde la Casa Blanca con motivo del quinto aniversario del 11-S, el mandatario insistió: "Se trata de una lucha de civilizaciones. Estamos luchando por mantener el modo de vida de las naciones libres". En cuanto al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, supuesto cerebro del 11-S, Bush sentenció: "América te encontrará y te llevará ante la justicia". El presidente repasó la situación desde los atentados que costaron la vida a cerca de 3.000 personas en EE UU y afirmó: "Si no derrotamos ahora a esos enemigos, nuestros hijos encararán un Oriente Medio regido por estados terroristas y dictadores radicales armados con armas nucleares". Bush hizo hincapié en que, pese a que no se ha producido otro ataque terrorista en suelo estadounidense, la lucha continúa. "Ganar esta guerra requerirá los esfuerzos decididos de un país unido", apuntó, antes de instar a los estadounidenses a "dejar de lado" sus diferencias y "colaborar para superar la prueba impuesta por la historia". "América no pidió esta guerra, y cada americano lamenta que no haya terminado. Y yo también. Pero la guerra no se habrá acabado hasta que nosotros o los extremistas salgamos victoriosos", aseguró el presidente de EE UU. "Derrotaremos a nuestros enemigos, protegeremos a nuestro pueblo y convertiremos el siglo XXI en una era dorada de libertad humana", añadió. Situación en Irak Bush también se refirió específicamente a la situación en Irak, donde reconoció que se han cometido "errores". También admitió que Sadam Husein "no es responsable de los atentados" del 11 de septiembre de 2001, pero sostuvo que su régimen era una amenaza clara y "representaba un riesgo que el mundo no se podía permitir". Antes del comienzo de la guerra en Irak, el 20 de marzo de 2003, EE UU había justificado la necesidad de una invasión con el argumento de que ese país poseía armas de destrucción masiva, algo que el tiempo demostró que no era cierto. "Sean cuáles sean los errores que se hayan cometido en Irak, el peor error sería pensar que si nos retiramos, los terroristas nos dejarán en paz", insistió el presidente, quien reiteró que EE UU no saldrá de ese país hasta que haya "acabado el trabajo". El llamamiento a la unidad tiene lugar cuando una encuesta difundida por la cadena CNN afirma que la cifra de estadounidenses que culpa al Gobierno del presidente por los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, ha subido del 30 a casi el 50% en cuatro años.