Yo Acuso - Jose Maria Bakovic

Anuncio
Imprimir
11/16/13, 11:39 AM
DIARIO - COLUMNISTAS - 27/10/2013
Yo acuso
¿ES O NO ES VERDAD?
El 4 de abril del año 2006, cuando por primera vez encarcelaron sin juicio ni sentencia, al entonces
presidente del Servicio Nacional de Caminos Institucionalizado, José María Bakovic, escribí un artículo
encabezado con el mismo título y la misma intención con lo que suscribo hoy: Yo acuso.
Hoy me permito repetir aquellas ideas por tener la convicción de que todavía son de actualidad: dolorosa e
indignante actualidad.
En aquel comentario comparaba el sonado “caso Dreyffus” que conmovió a la opinión pública francesa a
finales del siglo XIX con el deplorable “caso Bakovic” que ha enlutado el alma de muchísimos bolivianos
bien nacidos.
Copio lo que escribí entonces:
- Una sórdida conspiración de la derecha antisemita francesa, en campaña política acusó de espía al
capitán de Estado Mayor, Alfred Dreyfus. El oficial fue juzgado por un tribunal militar y condenado a
cadena perpetua, por alta traición. Para mayor castigo, fue degradado frente a su guarnición, arrancados
sus galones de su uniforme, partido en dos su sable, símbolo del honor militar. La máxima humillación que
podía imponerse a un oficial.
El hecho conmovió a la sociedad francesa. El ya famoso escritor Emilio Zola, el año 1898 dirigió un alegato
demoledor, titulado ¡J’accuse!, (yo acuso) en el que denunciaba la felonía de la denuncia y la vileza de cada
uno de los personajes que contribuyeron a la caricatura de juicio y de sentencia condenatoria.
Copiamos aquí algunos párrafos, que no tienen desperdicio, de la extensa carta que Zola escribió al
presidente francés, Félix Faure.
¿Me permitís que, agradecido por la bondadosa acogida que me dispensasteis, me preocupe de vuestra
gloria y os diga que vuestra estrella, tan feliz hasta hoy, por la más vergonzosa e imborrable mancha?
Habéis salido sano de bajas calumnias, habéis conquistado los corazones. Aparecisteis radiante en la
apoteosis de la fiesta patriótica ¿Pero qué mancha de cieno sobre vuestro nombre –iba a decir, sobre
vuestro reino– puede impedir este abominable proceso Dreyfus? (…) Francia conserva esta mancha y la
historia consignará que semejante crimen social se cometió al amparo de vuestra presidencia.
Años después, la verdad se impuso y Dreyfus fue rehabilitado. Pero ya había tenido que soportar la injusta
ignominia y los sufrimientos del presidio, impuesto por una maquinación de unos jueces sin conciencia ética
El astuto lector habrá adivinado que estos párrafos de Zola pueden aplicarse al proceso del expresidente
del Servicio Nacional de Caminos Institucionalizado quien, a pesar de su carrera intachable y de haber
pasado de los 69 años de edad, se le encarceló sin pruebas fehacientes en las celdas de los delincuentes
rematados, siendo así que la ley prohíbe encerrar a personas de edad avanzada.
Algún aspirante a volver a los tiempos en los que el SNC era el feudo del partido de gobierno, es decir,
antes de la institucionalización, convocó a un centenar de personas a la puerta del tribunal, con ficha de
asistencia. Un magistrado de la misma ralea declaró, fuera del micrófono que se hará la voluntad del
pueblo. ¿Acaso los jueces y fiscales no juraron fidelidad a la Ley y no al griterío de la calle? Poco después
–según testimonio fidedigno– los mismos sujetos que participaron en aquella manifestación reclamaron la
recompensa que les habían prometido pero que no les fue entregada, por la sucesora de Bakovic
http://www.lostiempos.com/imprimir_art.php?id_noticia=233139&fecha=20131027
Page 1 of 2
Imprimir
11/16/13, 11:39 AM
Por mi parte –terminaba el editorialista– le deseo al señor presidente que siga su buena estrella, Pero al
mismo tiempo, recojo el clamor público de que se haga justicia con José María Bakovic, restituyéndole el
honor vilmente mancillado. ¿No será ésta una osadía que me acarree represalias?” (…)
Post data. A Dreyffus lo rehabilitaron En el caso de Bakovic, nuestro clamor no fue escuchado. A Bakovic le
condenaron a muerte y lo ejecutaron sus implacables verdugos.
Por: José Gramunt de Moragas, S.J. Columnista
COPYRIGHT © 2013 Editorial Canelas. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a
cualquier idioma sin autorización escrita de su titular.
(Impreso el 16/11/2013)
http://www.lostiempos.com/imprimir_art.php?id_noticia=233139&fecha=20131027
Page 2 of 2
Descargar