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IGM
LOS PREPARATIVOS PARA LA GUERRA
Alemania tomó la iniciativa en la política de armamentos (para pasar de
621.000 hombres en armas a 820.000 en 1914). Causas:
-Planes de guerra: ante el doble frente, piensa desencadenar un ataque
rápido-aplastante contra Francia (Å necesita hombres y armas) y, derrotada
Francia, atacar a Rusia (Å lentitud en la movilización rusa).
-Demográficamente, Alemania se siente más débil que sus oponentes. Por
ello, necesita compensar esta debilidad, con su superioridad en armamentos
(Æ necesita tener “ventaja”).
-Austria, ante la victoria de Serbia-Rumania-Grecia en los Balcanes, necesita
tener concentradas tropas en su frontera balcánica, por lo que Alemania
piensa compensar este problema con sus tropas.
-En 1913, Rusia hace público su plan de armamentos, que amenaza con
poner en pie un ejército de 1,8 millones de soldados. Así, la única ventaja que
le cabe a Alemania es la del tiempo: tiene que tener superioridad militar lo
antes posible para poder desencadenar una guerra, antes de que Rusia de
ventaja a la Entente. Alemania tiene prisa porque comience la guerra (desde
1913).
Como respuesta a la política alemana:
•Francia, que prevé los planes alemanes-ataque masivo, desde 1913
comienza una clara política de armamento, pero se encuentra con la
oposición de la izquierda pacifista (venció en las elecc. De 1914).
•GB, el estado mayor elaboró un plan de armamento, pero el gobierno no lo
aceptó por temor a su impopularidad (más impuestos, reclutamiento
obligatorio...). Carece de ejército de tierra, pero presenta una clara
supremacía naval, que intenta aprovechar para contener a Alemania. No
obstante, el progresivo aumento de la armada alemana amenaza a la
seguridad GB, que intentará hasta 1914 un acuerdo con Alemania que evite la
guerra y la pérdida de la seguridad GB
•Rusia viendo los peligros que le acechan (avance alemán en Turquía,
expansión austríaca en los Balcanes (Rumania, Bulgaria, BosniaHerzegovina), avances griegos e italianos frente a Turquía, preparativos
militares alemanes... está decidida a resolver definitivamente los problemas:
pretende levantar un potente ejército, bien armado, que pueda hacer frente al
peligro alemán.
El resto de los países siguieron similares políticas ante el armamento de sus
rivales y/o vecinos.
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EL INICIO DE LA GUERRA
28.6.14:
asesinato de Francisco Fernando de Austria en Sarajevo.
23.7.14:
ultimátum de Austria a Serbia
Francia promete a Rusia que cumplirá sus obligaciones.
25.7.14:
Rusia afirma que no consentirá que serbia sea aplastada,
28.7.14:
Austria declara la guerra a Serbia.
29.7.14:
Rusia declara una movilización parcial.
Alemania declara que movilizará sus tropas si no se detiene la
movilización rusa.
Gran Bretaña intenta un arreglo negociado, que es rechazado por
Austria-H.
30.7.14:
Rusia inicia su movilización general
31.7.14:
Alemania da un ultimátum a Rusia y Francia.
1.8.14:
Alemania inicia su movilización general
Francia inicia su movilización general
Alemania declara la guerra a Rusia
3.8.14:
Alemania declara la guerra a Francia
4.8.14:
Ataque alemán a Bélgica
GB declara la guerra a Alemania.
LOS BELIGERANTES
ÆAlemania + Austria-H: 120 millones de habitantes (frente a 238 de la
Entente+Bélgica+Serbia). Esta «debilidad» se pensaba compensar con un
mejor armamento, una guerra corta —en la que no se notase este déficit— y
la táctica del ataque masivo.
Un segundo problema lo representaba la falta de cohesión interna de
Aust-H, cuyas nacionalidades (polacos y rutenos en Galitzia, checos en
Bohemia, eslovacos en el N de Hungría, eslovenos en Istria y Estiria, rumanos
en Transilvania e italianos en Trentino, Istria y litoral dálmata) representaban
el 49% de la población y podían ver en la guerra «una ocasión para sacudirse
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el yugo austriaco», además de que era difícil que luchasen «patrióticamente»
contra sus hermanos de Serbia y de Rusia.
Un tercer problema lo representaba la falta de autosuficiencia alemana
en cereales, grasas, materias primas básicas para la industria de armamento
(hierro, cobre...) y caucho y petróleo. Problema que se podía ver aumentado
si se producía una situación del bloqueo económico o naval.
ÆLa Entente+Serbia+Bélgica manifestaron su «superioridad demográfica»
presentando al comienzo de la guerra 170 divisiones de tierra, frente a las 150
de Alem+Aust-H. No obstante, estaban peor armadas. De estas tropas la
mayor parte las aportaron Francia y Rusia, mientras que Bélgica puso 6,
Serbia, 11 y GB, las únicas 5 de las que disponía. Con el paso del tiempo la
movilización británica hizo que aumentase su aportación considerablemente:
20 divisiones, en mayo de 1915, 35, en octubre, y 70 en primavera del año
siguiente. Junto a este ejército de tierra, la Entente contaba con las tropas
navales de GB y Francia, que le daban una clara supremacía en el mar.
Tampoco Francia y GB eran autosuficientes. Es más, la guerra en el
frente W transcurrió en la zona industrial de Francia. Así, ambos se vieron
obligados a recurrir a las importaciones, especialmente de sus colonias y,
sobre todo, de EE UU.
La cohesión interna de la Entente fue notable en Francia y GB (donde
sólo se presentó el problema irlandés), pero escasa en Rusia, donde se
desencadenó la «revolución de octubre». Entre los componentes los
problemas no eran importantes y respetaron (excepto el nuevo gobierno
revolucionario ruso) el compromiso de no firmar una paz por separado.
Turquía: firmó un tratado secreto con Alemania, contra Rusia. El 26 de
septiembre de 1914, cerró los «estrechos» a la navegación mercante, y el 1
de noviembre de 1914, entró en guerra, bombardeando Odessa y Sebastopol.
Italia: en octubre de 1914 proclamó su «neutralidad productiva», es decir, su
intención de “sacar provecho” a su neutralidad, negociando ventajas con unos
o con otros. En marzo de 1915 se iniciaron contactos formales con la Entente,
que le ofreció —por su intervención en la guerra, para abrir un segundo frente
a Austria— Trieste, Istria y la mitad del litoral dálmata, es decir, su viejo
anhelo de una posición dominante en el Adriático. El 23 de mayo de 1915,
Italia declaró la guerra a Austria-H.
Bulgaria: se decantó al lado de Austria-H, que ante el temor a un frente
italiano, decidió buscar aliados en los Balcanes que le permitiesen aliviar su
carga militar en la zona. Para atraerse a Bulgaria, Austria le prometió la
Macedonia serbia. El 14 de octubre de 1915, Bulgaria entró en la guerra,
cuando el desmoronamiento ruso parecía inminente.
Grecia: presentaba una situación muy confusa. El rey era un germanófilo y el
presidente del gobierno, Venizelos, era un nítido partidario de la alianza con
GB y Francia, que permitiese una política expansionista a costa del declinante
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imperio turco. En septiembre de 1915, ante las posiciones que iba adoptando
Bulgaria, Venizelos propuso a la Entente apoyar a Serbia, siempre y cuando
un ejército de la Entente diese cobertura a Grecia. El 2 de octubre
desembarcó en Salónica este ejército expedicionario, y el 5 del mismo mes,
Grecia declaró la guerra a Bulgaria. El rey desautorizó estos actos y los
proclamó ilegales. Venizelos dio un golpe de estado y estableció un gobierno
provisional en Salónica, al amparo de las tropas aliadas.
Rumania tenía unos intereses contrapuestos: la victoria de la Entente le
podía permitir acceder a los territorios de Transilvania, Bucovina y el Banato,
donde había rumanos. Pero la victoria de Alemania le permitiría hacerse con
la Besarabia rusa. Dadas sus relaciones con Bulgaria, Rumania se inclinaba
hacia una alianza con la Entente, pero sólo cuando la victoria de estos
apareciese clara. Así, el 17 de agosto de 1916, cuando las ofensivas
alemanas se iban agotando, Bucarest firmó un tratado de alianza y un
convenio militar con la Entente y el 27 del mismo mes declaró la guerra a
Austria. La respuesta alemana fue rápida: en noviembre comenzó la
ocupación de Rumania.
Japón: vio en la confrontación el momento adecuado para librarse de la
vigilancia europea y expandirse por el lejano oriente. No obstante, para
asegurar sus adquisiciones iba a necesitar del apoyo diplomático europeo.
Por ello, su planteamiento va a ser intentar hacerse con el territorio bajo
influencia alemana —ganándose, así, la confianza británica— y avanzar en su
influencia sobre China. EE UU va a ser el único estado que va a poner
reparos explícitos a este afán expansivo, lo que hará que GB, necesitada del
apoyo norteamericano, no quiera comprometerse con Japón. El 23 de agosto
de 1914, Japón declaró la guerra a Alemania y atacó y tomó las bases y
territorios bajo control alemán. El 15 de enero de 1915, Japón entregaba a
China las “21 demandas”, un ultimátum en el que imponía al gobierno chino
un auténtico protectorado bajo la amenaza de guerra, que prácticamente
conseguiría en su totalidad. En China, este nuevo sometimiento, dio origen a
un fuerte movimiento nacionalista (con sus dos vertientes: prooccidental y
comunista). USA, mientras tanto, no reconocía los avances japoneses, pero,
implicada en la guerra europea, no podía actuar en el Pacífico. Por eso,
esperaba al final de la guerra para utilizar sus recursos bélicos y poder frenar
a Japón.
China: controlada por Japón y en medio de la agitación nacionalista (desde
agosto del 17, prácticamente en situación de guerra civil) sólo encontraba
consuelo en las promesas norteamericanas para cuando acabase el conflicto
europeo. Por ello, a instancias EEUU, el 14 de agosto de 1917, declaró la
guerra a Alemania, a efectos de poder ocupar un lugar entre los vencedores
en las conferencias de paz y poder arreglar allí, con el apoyo de la Entente,
los contenciosos con Japón.
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EEUU
Se va a beneficiar de la concesión de créditos y del comercio originado por el
abastecimiento a GB y Francia. Además, la guerra supuso que las antiguas
potencias europeas descuidasen sus relaciones financieras y comerciales con sus
colonias y con otros países, lo que fue aprovechado por EE UU para ocupar ese
lugar de centro mundial.
EEUU será neutral hasta el 2.4.1917, aunque apoyará económicamente y
diplomáticamente a la Entente. Las causas son varias:
•La tradición aislacionista, muy enraizada en la opinión pública, hace que los
gobiernos EEUU no intervengan hasta que sus votantes-opinión pública no
esté a favor.
•EEUU no se vio implicada en la guerra hasta que la libertad de los mares no
estuvo en peligro por el bloqueo de los submarinos alemanes. La libertad de
los mares suponía el libre comercio, en que se estaba basando la nueva
hegemonía EEUU.
•El apoyo económico (créditos) a la Entente, hizo que la suerte de esta
interesase a los acreedores EEUU, que vieron como la retirada rusa de la
guerra ponía en serio peligro sus intereses, pero la existencia de inmigrantes
germanófilos, italianos, eslavos... hizo que el gobierno temiese que un apoyo
decidido y manifiesto a la Entente pusiese suponer un enfrentamiento civil
interno.
•EEUU receló de la alianza de la Entente con Rusia, en quien seguía viendo
un peligroso imperialista. Hasta que la revolución no mostró a una Rusia «al
borde del desastre», EEUU no tuvo interés en enfrentarse al peligro alemán.
•EEUU tenía intereses en el Pacífico, que ele expansionismo japonés estaba
poniendo en entredicho. De tal forma que no quería que una intervención en
Europa dejase a Japón las manos totalmente libres para continuar su
expansión.
•En octubre de 1914, las perspectivas bélicas eran las de una guerra larga de
desgaste, con lo que EEUU no tuvo ninguna sensación de que su intervención
fuese urgente. Por el contrario, podía pensar que el papel de apoyo
económico era muy beneficioso para la Entente, que de esta forma se veía
fortalecida en esa perspectiva de una guerra de desgaste. Además,
planteadas así las cosas, también se podía pensar que el desgaste europeo
podía redundar en la adopción por parte EEUU de una posición hegemónica
mundial, habida cuenta que ellos eran los que iban a mantener —con sus
créditos— el esfuerzo bélico de la Entente.
El 2 de abril de 1917 USA declaró la guerra a Alemania. Dos acontecimientos
fueron determinantes, aunque en diferente medida:
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ΚEl 17 de febrero de 1917 (hasta el 12 de marzo) comenzaba la revolución
rusa, que iba a acabar con el zarismo e iba a establecer un gobierno
provisional, presidido por Kerensky, un socialista que iba a presentar una
política dubitativa con respecto al tema de la guerra: por un lado, afirmaba
que tenía la intención de cumplir todos sus compromisos con sus aliados (no
firmar una paz por separado), pero por otro alentaba la idea de conseguir una
paz por separado. De cualquier manera, si antes de la revolución la situación
del ejército ruso ya era muy comprometida, tras la revolución se la puede
definir como catastrófica. EEUU consideraba que este ejército ya no era
operativo. De esta forma, entre febrero y marzo del 17, se puso de manifiesto
que Alemania iba a combatir en un solo frente.
ΚEl 31 de enero de 1917 el gobierno USA recibió un telegrama alemán en el
que se le comunicaba que las costas de GB y Francia quedaban bloqueadas
por la guerra submarina (Alemania, convencida de que no iba a obtener la
victoria por tierra —en diciembre de 1916 las tropas de la Entente
reconquistaban las fortificaciones de Verdún y se ponía de manifiesto que la
“ventaja alemana” se había esfumado— se lanzó a la guerra submarina, en
un intento de quebrar la salud económica de GB). La respuesta EEUU fue
romper las relaciones diplomáticas con Alemania (esperando que esto fuese
bastante para hacerla recapacitar), pero Alemania no cambió de opinión y los
armadores norteamericanos, asustados por la amenaza alemana,
restringieron sus envíos hacia Europa, congestionando los puertos y
generando una situación económica peligrosa: se ponía de manifiesto la
importancia que el comercio/créditos con la Entente tenía para el desarrollo
económico norteamericano. El 19 de marzo de 1917, el vapor Vigilentia era
hundido por los submarinos alemanes, el día 2 de abril el gobierno USA
comunicó su decisión de intervenir.
No obstante, la intervención real USA tuvo que postergarse hasta la
primavera de 1918, cuando hubo preparado y armado a los primeros contingentes
militares. Mientras tanto, EEUU envió armas, barcos y apoyo económico, pero no
actuó directamente en la guerra. Este año de dilación dio un margen de acción a
Alemania-Aust-H: intentar la «victoria definitiva» o buscar una paz de compromiso.
La importancia de la intervención EEUU se puede medir por:
−Hizo fracasar la guerra submarina, dado que el tonelaje de la flota de la
Entente aumentó más allá de la capacidad destructiva alemana
−Incrementó la eficacia del bloque de la Entente sobre Alemania y Aust-H.
−Aumentaron las disponibilidades financieras de la Entente.
−Las aportaciones militares EEUU (un millón de hombres en 1918 y dos
millones en 1919) cambiaron sustancialmente el equilibrio de fuerzas.
ETAPAS DEL CONFLICTO
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ΚHasta finales de septiembre de 1914 (∂ tras el fracaso alemán en la batalla
del Marne) guerra de movimientos: se espera una guerra rápida, con un
ataque masivo, en el que Alemania intente poner de manifiesto su
superioridad táctica y en armamentos. Se piensa que con el material
preparado y los hombres reclutados será suficiente para resolver el problema.
ΚDe octubre de 1914 a febrero de 1917 (retirada rusa de la Entente): se es
consciente de que la guerra será larga, de desgaste: en ella vencerá aquel
que más resistencia —militar, demográfica, económica, social, política—pueda oponer. Aparece el concepto de «guerra total»: se entiende que todos
los resortes del país hay que ponerlos en función de la guerra: economía de
guerra, movilización general, incorporación de la mujer al trabajo, estados de
excepción, etc...
Se plantea el problema de los abastecimientos: con los recursos
disponibles/acumulados no hay suficiente para mantener el esfuerzo bélico.
Problema que aumenta cuando los contendientes lanzan el bloqueo
económico al adversario.
En esta etapa la guerra fue esencialmente europea, careciendo de
importancia los escenarios extraeuropeos.
Se pueden diferenciar dos subperíodos:
¬ Hasta julio de 1916, en el que Alemania-Aust-H llevaron la iniciativa
y la Entente se limitó a defenderse y resistir (∂ mientras se armaban y
neutralizaban la ventaja inicial alemana). El subperíodo concluye con la
batalla de Verdún, donde Alemania intentó «desangrar» al ejército
francés y dar el golpe (antes de que perdiese su ventaja inicial) que
definitivamente inclinase la balanza a su favor, pero no lo consiguió.
∧ Desde julio de 1916, en el que la iniciativa la toma la Entente,
mientras Alemania, consciente de que la guerra no transcurre a su
favor, intenta dar un vuelco al conflicto (desde finales de 1916)
lanzando la guerra submarina
A principios de 1917, se llegó a una situación de equilibrio y comenzaron a
aparecer síntomas de agotamiento en los dos bandos: problemas de
abastecimiento, malestar social —huelgas...—, estancamiento militar y crisis
políticas.
ΚDesde febrero de 1917 a la primavera de 1918: es el período que media
entre la deserción rusa y la intervención directa EEUU (USA pone todo su
potencial en el campo de batalla), período en el que Alemania aún cree que la
guerra submarina le dará la victoria final. Alemania intenta aprovechar esa
ventaja de dos formas:
¬ Hasta el verano de 1917 intenta una negociación relativamente
ventajosa: dar una «semiindependencia» a Bélgica y negociar las
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adquisiciones territoriales con Francia (las adquisiciones de Alemania
se harían en el Este), a cambio de la paz.
∧ Con la llegada de los bolcheviques al poder en Rusia y su explícita
política de «paz por separado», Alemania cree que podrá utilizar todo
el potencial militar que conserva en el frente occidental y dar el «golpe
definitivo» antes de la intervención EEUU. Por ello, suspende los
intentos negociadores y se centra en las operaciones militares. El
principal problema le viene de que no puede sacar a todo su ejército de
los territorios rusos, dado que:
-Rusia, a petición aliada, demoró todo lo que pudo la firma del
tratado de paz (hasta el 3 de marzo de 1918, Brest Litovsk).
-Para asegurar el abastecimiento de productos alimenticios
pactado con la naciente Ucrania, tuvo que dejar importantes
contingentes militares que asegurasen las exenciones.
-Los bolcheviques dejaron un «poso» nacionalista (el principio
de «autodeterminación de los pueblos») en los territorios que
pasaron a manos alemanas, que hizo que tuviesen que
permanecer importantes retener de soldados para asegurar esas
adquisiciones.
Κ(Del 8 del 8 de 1918 al 11 del 11 de 1918) El 8 de agosto de 1918,
fracasados todos los intentos alemanes de recuperar la iniciativa, viendo
como:
−Son ahora los aliados los que la han tomado —batalla de
Montdidier— y, con el apoyo EEUU, de una forma irrefrenable, el
estado mayor alemán es consciente de que comienza el
derrumbe.
−Austria, al borde del desastre militar, desde febrero de 1918, se
hunde en medio de los movimientos nacionalistas.
−El ejército búlgaro está a punto de hundirse, lo hará en
setiembre.
La estrategia del ejército alemán va a consistir en «resistir sin
arriesgar», procurando minimizar las pérdidas, y aprovechando la capacidad
de resistencia que aún le quedaba al ejército, para:
•Intentar que EEUU, ante la perspectiva de una guerra larga y bajo la
presión de una opinión pública que comienza a percibir las pérdidas de
una guerra lejana, se distancie de las posiciones «duras» de Francia y
GB, y conseguir una paz en la que no se perdiesen las ventajas
obtenidas en Brest-Litovsk ni Alsacia-Lorena.
•En caso de que la “paz de la Entente” fuese inevitable, dejar que la
iniciativa de pedirla y negociarla recaiga en las autoridades civiles a
quienes luego se podría culpar del resultado final de la guerra.
•Mantener el mayor grado de poder militar, aun en la derrota, pensando
en la postguerra y, así:
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-Poder mantener el «estado militarista prusiano» y el poder del
ejército en la sociedad alemana.
-Sofocar las revueltas que estaban surgiendo por todo el
territorio alemán
-Poder hacer frente al peligro bolchevique, que en forma del
«espartaquismo» se estaba difundiendo entre los trabajadores
alemanes.
-Poder reiniciar, en un futuro, el rearme.
El 11 de noviembre de 1918, en Rethondes, se firmó la capitulación
alemana. El 30 de setiembre la había firmado Bulgaria, el 30 de octubre
lo había hecho Turquía y el 3 de noviembre Austria y Hungría.
LA PAZ POR SEPARADO CON RUSIA. LA REVOLUCIÓN RUSA
El 27 de febrero de 1917, a instancias del movimiento revolucionario que se
había desplegado, abdicó el zar, Nicolás II, y se estableció un gobierno provisional.
Se trataba del inicio de la república democrática. La situación rusa en esta etapa se
puede caracterizar por su precariedad:
•Con una fuerte y creciente oposición comunista (bolchevique), que
proclamaba su intención de derrocar al gobierno, conspiraba para
conseguirlo y ganaba constantemente adeptos.
•Con un ejército desorganizado e ineficaz, corroído por las deserciones
—de campesinos que volvían a su casa para estar presentes en la
«reforma agraria», de oficiales que se negaban a obedecer a las
nuevas autoridades revolucionarias... — y embargado en el mar de las
desobediencias —no se obedecía a los oficiales, a los que se tachaba
de zaristas—. Ejército que no cosechaba sino fracasos en el exterior y
que era incapaz de poner orden en el interior.
•Con una situación de marasmo económico: interrupción del comercio
interior, acaparamientos en el campo, desabastecimiento en las
ciudades, inflación galopante...
•Con una gran inestabilidad política que queda atestiguada por los
intentos de golpe de estado de los comunistas (julio-1917) y de un
sector del ejército (septiembre-1917).
Desde el punto de vista bélico esta situación se manifestó en dos vertientes:
el fracaso de las ofensivas rusas y la confusa política exterior del gobierno, que por
un lado afirmaba su intención de «no firmar la paz por separado» (res decir,
mantener los compromisos contraídos) y, por otro lado, convocaba la Conferencia
Socialista Internacional de Estocolmo para tratar, con asistencia alemana, el tema de
la paz por separado.
El 25 de octubre de 1917 se llevó a cabo la revolución comunista, que
situó al frente del gobierno ruso al partido bolchevique, dirigido por Lenin. Estos,
desde el principio habían sido partidarios de la paz, y ahora consideraban aún más
importante esta paz, habida cuenta de lo precaria que era la situación de la
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revolución que habían realizado y de la necesidad que tenían de utilizar el ejército
para reprimir los movimientos contrarrevolucionarios que iban surgiendo (que
concluirán en una guerra civil). Por ello, los bolcheviques se apresuraron a declarar
su intención de negociar la paz e invitaron a la Entente a hacer lo propio,
entendiendo que si no lo hacían, Rusia quedaba libre para actuar según su
conveniencia.
−El 15 de noviembre de 1917, se promulgó el decreto sobre las
nacionalidades, en el que se establecía el derecho de los pueblos de Rusia a
elegir libremente su destino, incluso a formar estados propios. Era el primer
paso de una doble política: por un lado, se dejaba la puerta abierta para que
los territorios ocupados por Alemania-Aust-H. pudiesen desgajarse del estado
soviético; pero, por otro lado, el gobierno bolchevique se establecía como el
adalid de las libertades nacionales y, lo que será su arma diplomática,
establecía la voluntad del pueblo como criterio para que un territorio se
desgajase del estado ruso. De esta forma, cuando Alemania le exija territorios
—los territorios ocupados— a cambio de paz, los bolcheviques argüirán la
necesidad de que sean los pueblos los que lo decidan libremente. Con ello,
harán aparecer a los alemanes-aust-H. como opresores de estos pueblos, y
además el comunismo aparecerá como una doctrina de liberación nacional
(nacionalismo de izquierdas).
−El 21 de noviembre de 1917, el gobierno ruso decidió entablar negociaciones
con los gobiernos de las potencias centrales, invitando a participar a los de
sus aliados, y anunciando que, de no acudir, Rusia actuaría por su cuenta.
GB, Francia e Italia, que no aceptaban el establecimiento de un gobierno
comunista y no quieren una negociación en ese momento, se negaron en
redondo. EEUU, temiendo que Rusia se pudiese caer en poder de Alemania
(ante la hostilidad de la Entente), no veía mal la idea, pero por solidaridad con
sus aliados, no acudió.
−El 5 de diciembre, como resultado de estas primeras negociaciones, se firmó
el armisticio y comenzaron propiamente las negociaciones para la paz, que
Rusia, a instancias de sus antiguos aliados —para evitar el traslado de tropas
alemanas al frente occidental antes de la incorporación USA— e intentando
que las potencias centrales aparezcan como «invasores» (política de
plebiscitos) y que la imagen/propaganda revolucionaria se extienda, intentará
prolongar todo lo posible. Por el contrario, Alemania mostrará una gran
urgencia en concluir un tratado que le permita trasladar masivamente tropas
al Oeste y un sistema de abastecimientos desde sus nuevas adquisiciones
territoriales que le permita aliviar sus problemas de desabastecimiento.
−El 10 de enero de 1918, la Conferencia Nacional de Kiev (autoproclamada
representante de Ucrania) envió una declaración de independencia a la
conferencia de Brest-Litovsk, que fue reconocida por Austria-H, el 9 de
febrero El mismo día tropas bolcheviques entraron en Kiev.
−El 18 de febrero de 1918, las tropas de las potencias centrales reanudaron la
guerra contra Rusia para «liberar a Ucrania». En realidad, se trataba de
consolidar su independencia para poder firmar un tratado que les garantizase
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los abastecimientos
alimenticios.
que
necesitaban,
especialmente
de
productos
−El 2 de marzo de 1918, Rusia firmó la paz en Brest Litovsk, aunque
declarando que lo hacía «a la fuerza», que suponía:
•Su abandono de Curlandia, Lituania y Polonia, cuyo destino quedaba
en manos de las potencias centrales.
•El reconocimiento de la independencia de Finlandia y Ucrania.
•La evacuación de Livonia y Estonia, aunque Rusia no renunciaba a su
soberanía.
•El compromiso del gobierno ruso de no dificultar el que Alemania y
Austria-H pudiesen realizar compras en territorio ruso.
−El 3 de marzo de 1918, Rumania impotente sin el apoyo ruso, firmaba un
armisticio, que concluiría en la Paz de Bucarest (7 de mayo de 1918), por la
que Bulgaria se hacía con Dobrudja y el gobierno rumano accedía a que sus
asuntos económicos fuesen supervisados por Alemania y Austria-H (se
trataba de que estos pudiesen importar la cantidad de petróleo rumano que
necesitasen).
De esta forma, a comienzos de marzo de 1918, el frente oriental se
encontraba en paz y Alemania-Aust-H se podían, en teoría, concentrar en sus
frentes occidentales. No obstante, la realidad no era tan sencilla: las potencias
centrales no podrán trasladar todo su potencial militar al frente occidental:
•La propaganda comunista comenzaba a infiltrarse en Alemania
(espartaquistas).
•Las consignas sobre autodeterminación de los pueblos servían a la
agitación nacionalista en territorio austro húngaro.
•Las potencias centrales tuvieron que retener a un importante número
de soldados (en torno a un millón) en la zona oriental para:
-Asegurar el control de los nuevos territorios anexionados, donde
las consignas soviéticas habían generados sentimientos
nacionalistas.
-Asegurar el abastecimiento desde Ucrania, donde su
paupérrima población ponía todos los reparos posibles a las
exenciones austríacas y alemanas.
-Formar un filtro (zonas militarizadas) a la expansión de las ideas
comunistas.
La situación iba a dar un nuevo vuelco en agosto. Francia y GB, con apoyo
EEUU, propusieron a los bolcheviques el envío de un cuerpo militar expedicionario
que les ayudase en la guerra civil y sirviese para que Alemania-Aust-H tuviesen que
retener mayores contingentes en el frente oriental. El gobierno comunista se negó, y
el 5 de agosto de 1918 se produjo la intervención, pero no a favor de los
comunistas sino de los blancos (conservadores contrarrevolucionarios), lo que
reavivó la guerra civil. El gobierno ruso buscó aliados en Alemania, con la que firmó
un tratado el 27 de agosto, por el que Alemania le daría apoyo militar, a cambio de
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que Rusia renunciase definitivamente a la soberanía sobre Livonia y Estonia.
Alemania, confiada ahora por sus buenas relaciones con Rusia, podía trasladar al
frente occidental a otros 500.000 hombres, pero ya era tarde.
LA CAÍDA DE AUSTRIA-HUNGRÍA (AH)
Desde 1917, el esfuerzo militar, el bloqueo y la realidad de una monarquía
bicéfala (Viena-Budapest) condujeron a AH a una situación de desabastecimiento.
La pérdida de la iniciativa militar de las potencias centrales fue sentida con más
intensidad en este país, que además nunca había sentido la guerra como algo
nacional, sino que las diversas nacionalidades lo veían como otra imposición
germánica.
El 21 de noviembre de 1916 falleció el emperador Francisco José, partidario
de una política de dureza y de apoyo a Alemania. Carlos I, su heredero, era
partidario de una política de mayor flexibilidad, con el fin de conseguir un
«consenso» interno que permitiese a AH salir airosa de la guerra.
La Entente, conocedora de esta nueva perspectiva, el 10 de enero de 1917,
hizo pública una Declaración en la que proclamaba que no quería el
desmembramiento de AH, sino un estado que reconociese las identidades
nacionales (“autonomías”) y que se alejase de la órbita alemana. El objetivo de estas
declaraciones era atraer a AH hacia unas negociaciones «por separado»,
ofreciéndole como «prueba de buena voluntad» una declaración que tranquilizase la
agitación nacionalista.
En el mismo orden de cosas, en abril de 1917, el emperador hizo saber su
plan de reformas que incluía una democratización, la concesión de estatutos de
autonomía a las nacionalidades y una reforma de la ley electoral para dar
representación a las minorías nacionales. El 5 de mayo se reunió el Parlamento de
AH, donde los representantes de las nacionalidades pudieron exponer sus
reivindicaciones. El plan, no obstante, tenía enemigos poderosos: por un lado, los
jefes militares y la aristocracia germanófilos, que los consideraban una muestra
innecesaria de debilidad, y el reino de Hungría, que siendo una nacionalidad tenía
privilegios que le permitían explotar a otras nacionalidades; por otro lado, los
nacionalistas más radicales filo rusos, que aspiraban sino a la desaparición de AH, sí
a una mengua muy notable de su poder.
El nacionalismo balcánico, mientras tanto, pasaba por una etapa de recesión:
reprimido por el ejército y con muchos de sus jóvenes en el frente, se encontraba
dividido en dos bandos:
•El filo occidental, que dependía de las posiciones de GB y Francia, y
que se encontraba «asustado» ante el avance del comunismo.
•El filo ruso, más radical y, desde la revolución, con claras influencias
comunistas.
Dos acontecimientos vinieron a transformar la situación:
12
IGM
•La caída del zarismo y la crisis rusa dejaron al bando pro ruso en una
situación de debilidad, que favoreció la unidad de los movimientos
nacionalistas.
•El debilitamiento de la posición militar de las potencias centrales y los
problemas económicos internos (en otoño de 1917, el gobierno
austríaco tuvo que destinar 30 divisiones para obligar a los campesinos
a entregar productos para abastecer a las ciudades y al ejército),
alentaron el esfuerzo nacionalista.
No obstante, la política «conciliadora» de GB-Francia hacia el gobierno de
Viena (desde junio de 1917 a febrero de 1918, la Entente intentó negociar una paz
por separado, a cambio de garantizar la integridad territorial de AH), que se vio
acompañada del «consejo» de tranquilidad a los nacionalistas, obligó a estos a
suavizar sus reivindicaciones.
Varios acontecimientos van a provocar un vuelco en la situación:
•En noviembre de 1917, los sectores contrarios a las reformas
consiguieron bloquearlas y los planes del nuevo emperador se
consideraron fracasados. Los nacionalistas perdieron la esperanza en
las vías autonomistas y pasaron a reivindicar la independencia.
•La llegada al poder ruso de los bolcheviques y las negociaciones de
paz con Alemania-AH, les condujeron a intentar radicalizar las
reivindicaciones nacionalistas con el fin de debilitar a la otra parte
negociadora.
•En febrero de 1917, la Entente dio por fracasados sus intentos
negociadores con AH y estableció como objetivo la destrucción de
AH, para lo que, entre otras cosas, decidió apoyar, económica y
políticamente, a los movimientos nacionalistas.
Así, la agitación nacionalista recobró nuevas fuerzas y se sumó a los demás
factores que estaban conduciendo a AH al desastre.
En el verano de 1918, cuando se hizo evidente que los ejércitos de las
potencias centrales iban a ser derrotados, se produjo la eclosión nacionalista.
El hundimiento del ejército búlgaro, en setiembre, ante la ofensiva del ejército
aliado en Macedonia, implementó aún más las ansias independentistas. El 4 de
octubre el gobierno de Viena se sumaba al armisticio propuesto por Alemania a la
Entente. El emperador intentó “salvar lo que pudiese del naufragio”, pero siempre irá
por detrás de los acontecimientos:
−El 18 de octubre, propuso la creación de un estado confederal en Austria (no
en Hungría). Pero los nacionalistas reclamaban ya la independencia de sus
nacionalidades.
−El 24 de octubre, se produjo la creación de nuevos gobiernos en Viena y
Budapest que iban a permitir la independencia de las nacionalidades con la
13
IGM
única condición del compromiso de mantener una relación confederal entre
ellas, a través de un Consejo Ejecutivo Común. Ese mismo día el ejército
austríaco era derrotado en Piave (por Italia).
−El 29 de octubre, los gobiernos de las nacionalidades (surgidos ahora)
comenzaron a proclamar su independencia: república yugoslava, república
checoslovaca. Al día siguiente, se proclamó el estado alemán de Austria y, al
siguiente, el estado independiente de Hungría.
La monarquía
austrohúngara quedaba disuelta.
El 3 de noviembre, Austria firmaba al armisticio con Italia (en villa-Giusti). El
11 del mismo mes, el emperador Carlos se negaba a abdicar, como exigía la
Entente, y huyó al extranjero, dejando en manos de la república austríaca la tarea de
negociar la paz.
EL DERRUMBAMIENTO DEL REICH ALEMÁN
Desde abril de 1917, comenzaron a notarse en Alemania disensiones
internas. Primero fueron una serie de huelgas que, bajo las consignas bolcheviques
—ha de notarse la penetración de las ideas comunistas— de «paz sin anexiones» y
las de «sufragio universal» paralizaron parte de la industria de guerra alemana. El
malestar continuó ante el empeoramiento de la situación económica ocasionado por
los problemas de abastecimiento y por la imposición de nuevos sacrificios a la
población para conseguir un nuevo esfuerzo bélico, ante las buenas perspectivas
que abría la situación rusa. La mayoría del Reichstag, haciéndose eco de este
malestar, apoyó, el 19 de julio de 1917, una resolución de paz, que no fue tenida en
cuenta por el mando militar.
De esta forma, se fue abriendo una brecha entre las autoridades civiles, el
pueblo alemán y el ejército. Mientras duraron las victorias militares o una esperanza
razonable de victoria, el control del poder político por parte del ejército no tuvo
oposición, pero cuando la situación se fue deteriorando, la sociedad civil se fue
alejando del estado mayor del ejército.
Entre agosto y setiembre de 1918, la situación de un profundo vuelco:
•Los intentos de «ofensiva final» (julio-1918) alemana fracasaron y, por
el contrario fueron las tropas de la Entente (8.8.18, batalla de
Montdidier) las que comenzaron una ofensiva que Alemania no podía
contener.
•El 14 de setiembre, el alto mando austríaco comunicó al alemán que
se encontraba al límite de sus fuerzas para poder contener a los
italianos.
•El 15 de setiembre, el frente búlgaro fue roto por la ofensiva franco
serbia.
•El 19 de setiembre, tropas británicas rompían el frente turco en
Palestina.
14
IGM
•El 26 de setiembre, comenzaba la ofensiva del mariscal Foch, que
llevaba a las tropas alemanas a refugiarse detrás de la línea Sigfrido y
a la guerra a territorio alemán.
•El 27 de setiembre, se producía la rendición del ejército búlgaro
(armisticio el 30).
Así, el alto mando del ejército alemán (Hindenburg y Ludendorff) a finales de
setiembre es consciente de que comenzaba el derrumbe. La sociedad civil también
y, por eso, los dirigentes de los principales partidos políticos solicitaron al emperador
cambios en el gobierno, apartar al ejército del poder y restablecer las formas
parlamentarias. Se puede decir que es en setiembre cuando la sociedad alemana
se encuentra dividida entre el ejército y los partidarios de las formas
parlamentarias. Esta brecha no se cerrará hasta 1945: la República de Weimar y el
III Reich son dos episodios de sus combates.
Es en este punto cuando comienza una estrategia de ese alto mando para
salvar el prestigio y el poder del ejército en la sociedad alemana (ver antes).
•El 29 de setiembre, los dos jefes militares, Hindenburg y Ludendorff, hicieron
oficial que las tropas alemanas ya no podían continuar la lucha y conminaron
al canciller a pedir el armisticio. De esta manera, el ejército quiere desligarse
de las condiciones de paz que se impongan a Alemania, dejando las
imágenes de la humillación en manos de la sociedad civil. El 3 de octubre,
Alemania, el nuevo canciller, solicitó el armisticio.
•El 8, 13 y 23 de octubre, notas norteamericanas señalan las condiciones
para el armisticio:
-Cese total de las hostilidades por parte alemana.
-Alemania debe quedar en situación de resultarle imposible la
reanudación de las hostilidades.
-Debe basarse en los 14 puntos de Wilson 1(8 de enero de 1918).
-La negociación debía llevarse a cabo con representantes del pueblo
alemán, no «con los que hasta ahora han sido sus amos».
Los jefes militares alemanes consideraron inaceptables (lo hicieron público)
estas condiciones. Dejando la responsabilidad de aceptarlas en manos de “los
políticos” (comenzó a establecerse el mito de la puñalada por la espalda),
pero sabiendo que la continuación de la guerra ya era imposible.
1
Abolición de la diplomacia secreta; libertad de navegación en todos los mares; liberalización de los
intercambios económicos mundiales; reducción de armamentos; satisfacción de las «justas
pretensiones coloniales»; evacuación del área rusa ocupada por las potencias centrales; restauración
de la plena soberanía de Bélgica; restitución a Francia de Alsacia y Lorena; rectificación de las
fronteras italianas, ajustándolas al principio de las nacionalidades; libre acceso a la independencia de
los pueblos de Austria-Hungría; evacuación de Rumania, Serbia y Montenegro; independencia de
Turquía, apertura de los estrechos e independencia de los pueblos no turcos del imperio otomano;
creación de un estado polaco independiente con libre acceso al mar; fundación de una Sociedad de
Naciones que garantice la paz mundial.
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•El 22 de octubre, el Reichstag votó reformas que devolvían Alemania al
parlamentarismo y establecían el sufragio universal en Prusia. Se trataba de
presentar ante la Entente una imagen de democracia que permitiese llevar
adelante las negociaciones.
•El 24 de octubre, otro comunicado EEUU se reafirmaba en la necesidad de
democracia en Alemania como condición previa a la negociación y establecía
que «la persistencia del emperador en el poder era un obstáculo a la paz».
•El 27 de octubre, el gobierno alemán aceptó todas las condiciones de la
Entente. Así, el 31 pidió la abdicación a Guillermo II, que se negó.
•El 3 de noviembre, estallaba el movimiento revolucionario comunista
(espartaquista) y las principales ciudades alemanas, siguiendo el ejemplo
bolchevique, veían surgir Consejos de Obreros y Soldados, como órganos
gubernativos. Los marineros de Kiel se sublevaron.
•El 9 de noviembre, Guillermo II abdicaba y se proclama la República
Alemana (Weimar).
•El 11 de noviembre se producía la capitulación alemana.
CONSECUENCIAS DE LA GUERRA
1. Pérdidas demográficas
Las bajas militares ascendieron a 8,5 millones de personas (un 15% de los
movilizados, un 2% de la población total europea y un 8% de la población activa
masculina), a los que hay que sumar los 7 millones de incapacitados permanentes
que quedaron y los 15 millones de gravemente heridos —con secuelas posteriores—
Por países, las mayores bajas las sufrieron: Alemania (2 millones), Rusia (1,7
m.), Francia (1,4 m.), Austria-Hungría (1,2 m.), Gran Bretaña (750.000), Italia
(750.000), Rumania (250.000) y Serbia (325.000, que suponían el 10% de su
población).
A estas bajas militares hay que sumar las bajas civiles, producto de las
enfermedades, el hambre y las privaciones o del propio conflicto armado. Estas
pérdidas suman 5 millones de fallecidos, a los que hay que sumar 9 millones que
aporta Rusia. Es decir, en total 14 millones de víctimas civiles.
Además, hay que tener presente el descenso en la natalidad que produjo el
conflicto y las secuelas que dejó (penurias, desnutrición, pésimas condiciones
sanitarias, desorganización...), que tuvieron consecuencias en los años siguientes
(gripes de 1919, hambrunas en Europa oriental en 1919.20...).
El resultado, pues, fue que Europa sufrió un serio agotamiento demográfico.
2. Pérdidas económicas
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IGM
Las pérdidas más aparentes fueron las ocasionadas por los propios frentes
bélicos y por las acciones de guerra económica de unos contendientes contra otros.
Estos daños fueron especialmente notables en el NW de Francia y en Bélgica, que
soportaron lo principal del frente occidental, y en las zonas oriental y suroriental de
Rusia y en los Balcanes, donde las destrucciones tuvieron efectos más nocivos dado
lo precario de su desarrollo. Se calcula que las destrucciones afectaron a 1/30 del
total del stock de capital de Europa.
No obstante, a estas pérdidas hay que añadir otras de mayor importancia, las
ocasionadas por:
•Las ventas de activos/inversiones en el extranjero de los contendientes, con
el fin de recaudar líquido para financiar el esfuerzo bélico.
•El frenazo a la inversión interior que supuso un retraso de Europa con
respecto a USA en la carrera tecnológica y en el progreso productivo.
•El abandono europeo de los mercados internacionales mientras duró el
conflicto, lo que fue aprovechado por los neutrales, por EEUU y por los
dominios británicos para extender sus tentáculos económicos —ahora que no
contaban con la competencia europea o que los propios países europeos
tenían que consentir con ello a cambio de otros favores para la guerra— en
esas zonas.
•El abandono del mantenimiento de bienes de equipo e infraestructuras
durante la guerra, lo que deterioró el estado del stock de capital.
•La ausencia de mano de obra eficiente (estaban de soldados en el frente),
que, aunque fue sustituida por mano de obra femenina o por población de las
colonias o de mayor edad, no conseguía la productividad de la anterior.
En general, se puede decir que Europa, en 1918, necesitaba una
reconstrucción, pero que necesitaba también los recursos económicos necesarios
para llevarla a cabo. Estos recursos se podían obtener de dos fuentes: el crédito
exterior o la financiación inflacionaria interna. De la opción que se tomase dependía
la economía europea y, por ende, mundial en los siguientes años.
Junto a estos problemas económicos había otros de no menor importancia:
los ocasionados por el coste económico de la guerra, que se calcula en 260.000
millones de dólares, que se cubrieron mediante la venta de los activos en el
extranjero de GB y Francia, mediante el endeudamiento externo (esencialmente de
GB y Francia con respecto a EEUU) y mediante la financiación inflacionaria
(emisiones sin respaldo). Este coste económico se sumó a los problemas de las
destrucciones y las pérdidas económicas, restando posibilidades de recuperación.
Pero, además, supuso que los contendientes se encontraron con una
situación/marco inflacionario en el que intentar la recuperación tras la guerra. Todo
ello hizo la situación aún más difícil.
3. La guerra y la situación política y social
La guerra también tuvo repercusiones en los campos social y político:
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-La guerra requirió de la participación masiva de los ciudadanos en el ejército.
Así, según la Ratio de Participación Militar (Military Participation Ratio), se
debía producir una democratización social.
-En el ejército, en el que «codo con codo» se había combatido al enemigo y al
que se agradecía la victoria —en algunos casos— se había producido una
completa mezcla de clases sociales, un espíritu igualitario, que luego los
soldados llevaron a la sociedad civil.
-La socialdemocracia y los sindicatos habían apoyado el esfuerzo bélico y
habían participado en gobiernos y organismos del estado. Ahora ejercían una
mayor influencia en la sociedad y reclamaban mejoras sociales.
-La mujer se había incorporado al mundo laboral y había participado del
esfuerzo bélico, en la paz ya no quería volver a ocupar una posición de
segundo orden.
-La guerra había requerido de un importante esfuerzo fiscal para financiarse.
El aumento de la presión fiscal tiene un efecto de igualación social. Con la
paz, los gobiernos rebajarán esta presión, pero no la reducirán del todo. El
efecto será un estado que recauda más y, por tanto, tiene mayor capacidad
de gasto. Un estado al que se reclamará que actúe para mejorar situaciones
sociales consideradas injustas y para generar los primeros atisbos de
sociedad del bienestar.
-La revolución comunista será un horizonte para la sociedad europea. Para
unos un horizonte pavoroso, que es necesario evitar, y para hacerlo acceden
a mejorar las condiciones de los trabajadores; para otros, una aspiración, un
aliciente más para continuar la lucha.
-El Estado, por primera vez, se ha visto impelido a actuar en economía: ha
tenido que planificar, nacionalizar sectores y dirigir empresas. Esta nueva
experiencia, que antes se consideraba imposible o, cuando menos, ineficaz,
queda como ejemplo de las funciones que un estado puede acometer. El
estado se retirará de la economía en la postguerra, pero no lo hará del todo.
Los problemas económicos y las reivindicaciones de la izquierda lo impedirán.
El resultado será una sociedad más igualitaria y más democrática, con unas
clases bajas más poderosas y mejor organizadas. Las viejas élites dominantes
tendrán que hacer frente a una situación en la que su tradicional poder es puesto en
entredicho o limitado. Los conflictos sociales y políticos estarán a la orden del día.
LA PAZ
El 18 de enero de 1919, en Versalles, se inició la Conferencia de Paz, en la
que se reunieron los delegados de los países vencedores, para fijar las condiciones
que se impondrían a los vencidos. Las condiciones acabaron fijadas el 7 de mayo, y
los vencidos las fueron firmando:
•Alemania, el 28 de junio de 1919, en Versalles.
•Austria, el 10 de setiembre de 1919, en St. Germain-en Laye.
•Bulgaria, el 27 de noviembre de 1919, en Neuilly.
•Hungría, el 4 de junio de 1920, en el Trianon.
•Turquía, el 10 de agosto de 1920, en Sèvres.
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1. Los intereses en juego
Como ya hemos señalado, las condiciones de la paz fueron pactadas sólo entre
los vencedores, y luego se impusieron a los vencidos. Pues bien, entre los
vencedores no hubo unanimidad, por el contrario, la diversidad de intereses dio lugar
a unas condiciones de paz que dejaron insatisfechos no sólo a los vencidos, que las
tomaron como una imposición o «diktat», sino también a los propios vencedores.
Estos intereses satisfechos darán lugar a diferentes interpretaciones de las
cláusulas, que serán el contenido de la política internacional durante una buena
parte del período de entreguerras.
Italia: sin tener que temer a Austria-H, y encontrando a Serbia sin la
protección de una Rusia que se encuentra embarcada en sus problemas
internos de supervivencia, aspira a poder colmar sus tradicionales
ambiciones:
-Hegemonía en el Adriático, tras el control de la costa dálmata y de
Istria y Trieste.
-Ocupar una posición dominante el parte de los Balcanes,
fundamentalmente en la zona con litoral al Adriático.
-Recuperar los territorios irredentos.
-Ocupar una posición hegemónica en el Mediterráneo oriental.
Estas ambiciones cobraban más visos de cumplirse en cuanto Italia
había participado en la guerra del lado de los vencedores y estos, en el
tratado de Londres de 1815, le habían hecho promesas en ese sentido.
No obstante, en 1919, la situación había cambiado: EEUU, aferrándose
al programa de Wilson, defendía aplicar el principio de autodeterminación de
las nacionalidades, y en el Tirol S había mayoría de población alemana y en
Istria y Dalmacia los italianos eran minoría. GB, por su parte, no veía con
buenos ojos el surgimiento de una nueva potencia balcánica, ahora que
Rusia, Austria y Turquía habían perdido cualquier posibilidad de hegemonía,
más bien preferían una situación de equilibrio, sin que ningún estado
estuviese por encima de los demás.
•Gran Bretaña: no tenía reivindicación territorial en Europa. Sus ambiciones
estaban en África y en el Próximo Oriente, donde la quiebra del poder
otomano y la actuación de Lawrence de Arabia, estaban haciendo surgir una
serie de países nuevos, que podían ser puestos bajo su esfera de influencia,
especialmente si se tiene en cuenta su riqueza petrolífera. Así, previendo la
situación, en 1916, por el pacto Sykes-Picot, GB y Francia ya se habían
repartido la posible nueva zona de influencias.
En Europa, GB es consciente de la necesidad de impedir que Alemania
siga siendo una potencia militarista que amenace la paz, pero quiere conjugar
este interés con otros:
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IGM
-Impedir una Alemania demasiado débil, que haga de Francia un
estado netamente hegemónico.
-Impedir una Alemania que, desahuciada de Europa, “cayese en los
brazos” de Rusia (exportase sus cerebros y su tecnología al país
comunista y que se convirtiese en el mercado de Rusia).
-Conseguir que Alemania se convirtiese en la principal cliente de GB.
-Impedir la bolchevización de Alemania (los espartaquistas ya habían
sido un aviso).
•Francia: ha sufrido todas las tensiones de la preguerra y ha visto como todas
sus premoniciones sobre las ambiciones alemanas se habían cumplido. Pero,
además, ha sufrido en sus territorios la desolación de la guerra,
especialmente en las regiones mineras e industriales más desarrolladas. Por
ello, quiere una Alemania que no vuelva a ser un peligro y que los vencidos
paguen los costes de la guerra y las devastaciones que han ocasionado. Los
dos objetivos son sólo uno para Francia: unos países que paguen unas
fuertes «reparaciones de guerra» necesariamente serán unos países débiles,
sin fuerza para amenazar la paz.
A la par, la recuperación de Francia tras la guerra se pensaba cargar
sobre las reparaciones alemanas.
En segundo lugar, Francia es consciente de que la victoria sólo ha sido
posible por la alianza de GB-USA-Francia. En este sentido, el gobierno
francés plantea la necesidad de mantener una alianza que pueda hacer frente
a cualquier intento alemán de revancha —Francia estimaba que en 20 o 30
años Alemania intentaría otra guerra de revancha—. Esta necesidad de
alianzas ataba de pies y manos a Francia, que tendrá que ceder en sus
aspiraciones en aras a mantener sus buenas relaciones o las promesas de
garantías que le ofrezcan sus aliados.
•EEUU: no buscaba beneficios territoriales en ningún sitio, sino crear un
sistema que garantizase la paz y poder asentar su posición hegemónica
recién adquirida. Para ello piensa impulsar la idea wilsoniana de la Sociedad
de Naciones, como organismo de arbitraje en los conflictos mundiales.
En cuanto a Alemania, la idea USA es la de un país lo suficientemente
fuerte como para hacer frente al peligro comunista y para pagar unas
indemnizaciones de guerra a los aliados europeos, que, a su vez, tienen que
pagar los créditos que EEUU les ha ido concediendo durante la guerra.
La situación interna norteamericana, no obstante, hará que todos estos
intereses y políticas se transformen. En noviembre de 1918, Wilson —los
demócratas— perdió la mayoría del Congreso y, en 1921, en las elecciones,
los republicanos, defensores del «aislacionismo», obtuvieron la mayoría. Así,
EEUU no aprobó las condiciones de paz de Versalles, no participó en la
Sociedad de Naciones y no asumió su papel de potencia hegemónica, sino
que volvió a su tradicional política aislacionista.
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IGM
En resumidas cuentas, los principales problemas a los que se intentó poner
solución en la Conferencia de Paz fueron:
¬La cuestión alemana: una Alemania débil, dividida y mermada en lo
territorial o un país capaz de rehacerse, equilibrar el poder francés y hacer
frente al enemigo comunista. Este tema se manifestaba en varios aspectos:
-La cuestión territorial:
La orilla izquierda del Rhin,
La devolución de Alsacia-Lorena
El Sarre
Los territorios polacos
-La cuestión de las reparaciones de guerra
-La cuestión del potencial militar que se dejaba tener a Alemania.
∧La cuestión rusa, que hacía referencia a las relaciones que se debía
mantener con el gobierno comunista y a las fronteras que había que fijar con
los nuevos estados de Polonia y Ucrania.
∨La cuestión polaca: características de nuevo estado y fronteras con
Alemania y con Rusia.
⇔El futuro de las colonias alemanas y de los acuerdos a los que GB y
Francia han ido llegando y han llegado con otros —Italia, Grecia, casas reales
árabes, Japón...— para el reparto de nuevas zonas de influencia.
Como punto que no se trató en la Conferencia de Paz pero que estuvo latente
en todas las negociaciones y marcó el futuro de las mismas estaba el del pago de
las deudas de los aliados con USA. Especialmente Francia quería considerar estas
deudas como parte de la contribución USA a la guerra, dado que sólo Bélgica y
Francia habían sufrido en sus territorios la destrucción bélica. Por tanto, defendían la
condonación de las deudas o una reducción muy drástica de las mismas. En caso
contrario, pretendían transferir estas deudas a Alemania en forma de
compensaciones. EEUU, por el contrario, entendía que esas deudas había que
pagarlas y en ningún momento pensó en cancelarlas. Pero tampoco era partidario
de hundir aún más a Alemania, lo que la situaría en una situación de grave deterioro
que la podía abocar al éxito comunista. Este tema, de vital importancia para el
resurgir de las economías europeas y, por tanto, mundiales, fue, como veremos, uno
de los más importantes.
2. Las condiciones de la paz.
Los resultados de las negociaciones, los acuerdos que se impusieron a los
vencidos fueron:
Para Alemania:
21
IGM
-Reducción de su ejército a 100.000 hombres.
-Privación de aviación, tanques y artillería pesada.
-Prohibición de estacionar tropas o levantar fortificaciones a menos de
50 Km de la orilla izquierda del Rhin.
-Ocupación aliada, durante un máximo de 15 años, de la orilla izquierda
del Rhin y del Palatinado bávaro.
-Devolución a Francia de Alsacia y Lorena.
-El territorio del Sarre (minas de carbón) estaría durante 15 años bajo
administración internacional, que encomendaría la explotación de las
minas a Francia, como compensación por las destrucciones que los
alemanes habían ocasionado en las minas francesas de carbón de
Calais y del Norte.
-Establecimiento de una comisión para que fijase la cuantía de las
reparaciones que los vencidos adeudaban a los vencedores, partiendo
del principio (establecido en la Conferencia de Paz) de que Alemania y
sus aliados habían sido los agresores. Las cantidades que se fijaron,
en una primera estimación, para Alemania fueron:
-Todos sus buques mercantes de más de 1.600 Tm.
-La mitad de los buques mercantes de entre 1.600 y 1.000 Tm.
-Una cuarta parte de la flota pesquera.
-Cesión de ganado, carbón, locomotoras y vagones de FFCC,
cables submarinos y otros bienes.
-269.000 millones de marcos oro, pagaderos en 42 anualidades.
Para Austria y Hungría: se reconocieron y ratificaron las nuevas naciones
surgidas dos meses antes: Checoslovaquia, Yugoslavia, Hungría y los
avances fronterizos de Rumania (Transilvania). Además:
-Cesión a Italia del Tirol Sur hasta Brenner, de Trieste y de Istria y de
zonas de Dalmacia.
-Prohibición de unidad con Alemania, sólo aceptable si lo reconociese
la Sociedad de Naciones.
-Prohibición de un ejército superior a los 30.000 hombres (35.000 para
Hungría).
El nuevo estado polaco: no tendría una frontera oriental reconocida por falta
de acuerdo con Rusia. Este tema se dejaba para una futura negociación. En
la frontera occidental, se reconocían como polacos todos los territorios en los
que dos tercios de su población fuese polaca: Posnania y Prusia oriental,
excepto Dantzig, que quedaba como «ciudad libre» con estatuto internacional,
y Alta Silesia, donde se realizó un referéndum en el que ganó la inclusión en
Alemania.
Para Bulgaria: cesión a Grecia de territorios de Tracia y a Yugoslavia de
pequeñas zonas limítrofes. Autorización de un ejército de un máximo de
20.000 hombres.
Para los territorios extraeuropeos se establecía:
22
IGM
•Para las antiguas colonias alemanas: pasaban a la administración
internacional, de la Sociedad de Naciones, mientras «adquirían la
madurez suficiente» para ser independientes. La Sociedad de
Naciones encomendaba o «mandaba» a otras potencias administrar
estos territorios, bajo el estatuto de «mandatos». Así, Francia se hacía
con los territorios del Congo conseguidos por Alemania en 1911, y con
parte de Camerún y de Togo. GB con África del E (Tanganica), y la otra
parte de Camerún y Togo. Bélgica obtenía el mandato sobre Ruanda y
Burundi. África del Suroeste se dejaba bajo mandato de la Unión
Sudafricana. Japón se hizo con los derechos alemanes en China y con
los archipiélagos alemanes situados al Sur del Ecuador.
•En los territorios turcos en el Próximo Oriente, que en 1916 ya habían
sido objeto de reparto entre GB, Francia (Siria litoral), Italia (posesiones
en el Sur de Anatolia) y el emir Hussein, que como pago a su
colaboración obtenía un estado independiente en Siria interior.
Sucesivos tratados entre los países de la Entente fueron perfilando aún
más el reparto hasta que el tratado de Sèvres reducía Turquía a
Constantinopla-Estambul y Anatolia central, dejando:
-Egipto para GB, como protectorado.
-Arabia para GB, como protectorado.
-Palestina para GB, como mandato.
-Mesopotamia para GB, como mandato.
-Chipre para GB.
-Siria litoral y Cilicia para Francia, como mandato.
-Tracia oriental, islas egeas (excepto Rodas) y Esmirna a Grecia.
-El Dodecaneso, Rodas y el Sur de Anatolia como área de
influencia a Italia.
-Armenia obtenía la independencia.
-Kurdistán obtenía la autonomía dentro del estado turco.
-El Bósforo y los Estrechos se desmilitarizaban y obtenían el
estatuto de internacionales.
Francia recibía la garantía de apoyo armado de sus aliados, si Alemania
incumplía lo pactado o intentaba una revancha.
3. Principales problemas:
•El problema de las nacionalidades. A pesar de los principios wilsonianos,
para construir estados «viables», de un tamaño que garantizase su
supervivencia, muchos de los nuevos países acogían a numerosos grupos
otra nacionalidad (700.000 húngaros en Checoslovaquia, 1,300.000 húngaros
en Rumania, etc.) entre los que se difundió fácilmente la doctrina nacionalista
y que, en muchas ocasiones, dieron lugar a políticas «revisionistas» en
aquellos estados de la nacionalidad de origen.
•El problema de la frontera oriental de Polonia, que se fijó en 1919, en la
llamada línea Curzon, aunque Rusia no la reconoce. Será motivo de
tensiones y conflictos armados entre los dos países.
23
IGM
•Italia se siente humillada al no conseguir toda la costa dálmata (según había
sido pactado en el tratado de Londres) y ningún mandato sobre las excolonias
alemanas.
•Alemania se siente humillada y alimenta un espíritu «revisionista» sobre el
«diktat». Procurará incumplir todo lo que pueda, para ello contará con las
divergencias que surgen entre los vencedores sobre el futuro de Alemania.
•La Sociedad de Naciones se encuentra con una situación en la que los
vencidos no tienen acceso a ella, con lo que no se les tiene en cuenta a la
hora de abordar los problemas que se suscitan con la paz, y EEUU, principal
potencia mundial no forma parte de ella, con lo que la principal fuerza de
disuasión que podría existir —la que tuviese autoridad suficiente— para
imponer los acuerdos de la Sociedad de Naciones, se abstenía de apoyarlas.
En este sentido, fue un organismo ineficaz.
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