GARA > Idatzia > > Eguneko gaiak Movimientos migratorios La migración en alza entre ciudadanos de la UE En 2005, la Organización Internacional para las Migraciones cifró en 191 millones los migrantes en el mundo, superando a los 176 millones registrados en 2000. Con estos datos en la mano, subraya que con la cantidad de migrantes que hay se podría constituir el quinto país más poblado del mundo. La UE en su conjunto es uno de los destinos principales de los emigrantes, si bien, el fenómeno migratorio también ha entrado en recesión. A. LERTXUNDI Ciudadanos de la UE que se van a otro estado miembro o que regresan a su lugar de origen, europeos que se mudan a países vecinos adheridos a la UE, inmigrantes llegados desde otros continentes... Eurostat acaba de hacer público un informe sobre estos movimientos migratorios en los Veintisiete. Aunque los datos corresponden a 2006, dan una visión global de este fenómeno que, lejos de la creencia popular y tomando como referencia este informe, se va ralentizando. Entre sus conclusiones, incide en que si bien el número de inmigrantes ha aumentado desde 2001, en los últimos tres, esta tendencia ascendente se ha frenado e, incluso, descendió en 2005. El mayor aumento se registró en Irlanda -que en comparación con los datos de 2002, en 2006 dobló el número de inmigrantes- y el Estado español, que en 2006 recibió a 350.000 inmigrantes más que en los cinco años anteriores-. En claro contraste con este incremento, Alemania, Austria y los Países Bajos experimentaron una notable bajada en la llegada de inmigrantes. Los porcentajes totales se situaron en el 14,17 y 11% respectivamente. Curiosamente, los movimientos migratorios aumentaron entre los ciudadanos de la UE, moviéndose de un estado miembro a otro. Según estimaciones de esta agencia, en 2006, los 27 recibieron 3,5 millones de migrantes. De ellos, el 86% (unos tres millones) eran extranjeros y el 14% ciudadanos que regresaron a sus países de origen. De esos tres millones, el 40% eran ciudadanos de los estados miembros (alrededor de 1,2 millones), mientras que el 60% restante (1,8 millones) eran ajenos a la UE. En esta última categoría se incluye a aquellos ciudadanos europeos cuyos países no están en el club de los 27 y a quienes proceden de Asia, América y África. El grupo migrante mayoritario de acuerdo a su lugar de origen fue el de los polacos (más de 290.000 personas), seguido por el de los rumanos (más de 230.000), marroquíes (14.000), británicos, ucranianos y chinos (100.000 respectivamente) y alemanes (90.000). La mayoría de los estados miembro contabilizaron más ciudadanos de fuera de la UE que de la misma. La excepción fueron Alemania, Irlanda, Luxemburgo, Hungría, Austria, Eslovaquia y Bélgica, donde las personas migrantes de otros países miembro superaron a los de fuera de la UE. La inmensa mayoría de los inmigrantes polacos se establecieron en Alemania y en Gran Bretaña. Entre los rumanos, el destino preferido fue Italia y el Estado español, elegido también por casi la mitad de los británicos migrantes. Los ciudadanos alemanes, italianos y franceses no mostraron una clara preferencia, asentándose frecuentemente en países vecinos o en los estados más grandes de la UE. El Estado español y Bélgica fueron la opción mayoritaria elegida por los marroquíes, si bien el Estado francés e Italia registraron amplios grupos de inmigrantes de esa nacionalidad. De los casi 100.000 ucranianos que emigraron a la UE, las tres cuartas partes lo hicieron a la República Checa e Italia. Otros destinos atractivos fueron el Estado español y Portugal. El Estado español y Gran Bretaña figuraron entre las preferencias de los chinos. Los albaneses lo hicieron a Grecia e Italia, mientras que los inmigrantes estadounidenses optaron en primer lugar por Gran Bretaña y Alemania. Los rusos fueron el grupo inmigrante mayoritario en Finlandia y Letonia. Este estudio estadístico revela, además, la existencia de comunidades de inmigrantes (bolivianos e indios) que escogen un estado concreto por razones históricas, lingüísticas o culturales. En cuanto al sexo, salvo en contadas excepciones, los hombres superaban a las mujeres, sobre todo, en los países del Este. En Eslovenia, por ejemplo, los hombres superaron el 80% del total de inmigrantes registrados. El Lituania y Eslovaquia, casi dos terceras partes de los inmigrantes eran hombres, así como en Rumanía, la República Checa y Alemania. La nota discordante la pusieron Chipre, Portugal y Malta. En Chipre, predominaban las mujeres inmigrantes procedentes de Sri Lanka y Filipinas, y en Portugal, de Brasil y Europa del Este. El Estado francés y Polonia también registraron más mujeres que hombres. Sólo los Países Bajos mantuvieron la misma proporción Sobre la edad media, el informe la establece en 28,8 años. Esta cifra no es sorprendente ya que, según subraya, la inmigración es un fenómeno más ligado a las personas jóvenes. Dinamarca experimentó la edad más baja. La mitad de los inmigrantes tenían menos de 25 años, mientras que el 85% no superaba los 35. Le siguen los Países Bajos y Suecia. En el lado opuesto están la República Checa y Eslovaquia, donde la mitad de los inmigrantes eran mayores de 30 años. «ilegales» En el mundo hay alrededor de 30 a 40 millones de inmigrantes «ilegales», lo que comprende entre el 15% y el 20% del contingente mundial de inmigrantes, según la ONU. Se calcula que dentro de la UE, ocho millones de personas no tienen los papeles exigidos. las mayores diásporas Los tres principales países de envío de migrantes son China, con 35 millones de ciudadanos en la diáspora, India, con 20 millones, y Filipinas, con siete millones. Los países tradicionalmente receptores son Australia, Canadá, Nueva Zelanda y EEUU. receptores Los países que en 2005 y de acuerdo a la OIM albergaban el mayor número de migrantes internacionales eran EEUU, la Federación de Rusia, Alemania, Ucrania, el Estado francés, Arabia Saudí, Canadá, India, Gran Bretaña, el Estado español y Australia. desplazados En 2007, había 26 millones de desplazados internos en 52 países, mientras que en 2006 se registraron 24,4 millones. En cuanto al número total de refugiados, la OIM estimó que, ese año, 11,4 millones de personas buscaron refugio en todo el mundo.