ANALISIS FOLIAR Silvana Torri INTRODUCCIÓN El análisis de tejido vegetal, usualmente conocido como análisis foliar, determina el contenido de nutrientes de una determinada parte de la planta, habitualmente la hoja. Dicho contenido constituye el producto de la integración de varios factores, tales como suelo, clima, edad, tipo de cultivo y manejo. Por este motivo, el análisis foliar es un método de diagnóstico muy utilizada para determinar el estado nutricional del cultivo, e indirectamente evaluar la fertilidad del suelo. Se asume que el órgano muestreado es el que mejor refleja el estado nutricional de la planta y que existe una relación estrecha y directa entre la provisión de nutrientes, la concentración de nutrientes en hoja y el rendimiento (Figura 1). Los objetivos del análisis foliar son: permitir una mayor precisión en el programa de fertilización, confirmar la naturaleza de síntomas visibles o prever la detección de condiciones no sintomáticas en la planta. Figura1: Relación entre rendimiento y concentración de nutrientes en hoja. 1 El análisis foliar ha adquirido mayor importancia debido un mayor conocimiento acerca de los requerimientos nutricionales durante el ciclo de los diversos cultivos florales y hortícolas, y en la medida que cobra importancia la aplicación de nutrientes mediante el fertirriego. En el caso de los cultivos frutales, se ha observado que en caso de existir deficiencia en los horizontes superficiales, y debido a su extenso sistema radical, estos cultivos pueden absorben nutrientes desde mayores profundidades que la correspondiente al muestreo de suelos. Por lo tanto, los análisis foliares brindan una información precisa en cuanto al estado nutricional, que complementan los análisis de suelo. INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS DEL ANÁLISIS FOLIAR La interpretación del análisis foliar relaciona los resultados obtenidos en el laboratorio con valores simples como la concentración crítica o concentración estándar de cada nutriente para el cultivo en estudio. Para interpretar los resultados del análisis foliar existen dos criterios: a. Rangos de suficiencia Es el más utilizado debido a su simplicidad. Los valores obtenidos del análisis foliar se clasifican en los siguientes niveles: exceso, alto, óptimo, bajo y deficiente. A cada una de estas categorías corresponde un rango de concentraciones. El rango de suficiencia se define como el rango de concentración entre el nivel crítico y la concentración por encima de la cual se produce toxicidad. La situación ideal consiste en que los valores foliares se encuentren dentro del rango de suficiencia, que indica que ese nutriente no es limitante para obtener un buen rendimiento. Para poder utilizar este criterio en el diagnóstico del estado nutricional del cultivo, debe muestrearse el mismo tejido vegetal y en la misma época en que fue determinado el estándar nutricional. La concentración de los distintos nutrientes en hoja varía a lo largo del período de crecimiento del cultivo: existe movimiento de nutrientes móviles hacia los tejidos en desarrollo, acumulación de elementos inmóviles y modificación del contenido de materia seca. En la medida que la hoja madura, se observa un incremento en la concentración de Ca y Mg y una reducción en la concentración de N y P. Otro factor de variación, que afecta a la concentración de K, es la proporción relativa del área de la lámina con respecto a la nervadura. De igual manera, la proporción relativa de área de hoja con respecto a los márgenes afecta el contenido de B y Mn ya que estos dos elementos se acumulan en concentraciones apreciablemente altas en los márgenes de las hojas. Un procedimiento de muestreo que afecte las relaciones descriptas alterará el resultado del contenido de nutrientes de la muestra analizada. Por los motivos expuestos, el muestreo de tejido vegetal es muy específico, en términos de localización de la hoja o de la parte de la planta a muestrear y del estado fenológico del cultivo. En general, hay consenso en el tipo de tejido y en la época de muestreo establecida para las distintas especies: los tejidos muestreados son los que presentan una mayor sensibilidad a la variación nutricional y el momento mas adecuado para el muestreo será aquel en el que haya una relativa estabilidad de las concentraciones. En 2 la Tabla1 se presentan los procedimientos de muestreo para ciertos cultivos intensivos, así como la época más adecuada para el muestreo. Tabla 1: Técnicas de muestreo de tejidos especificas para cada cultivo. Cultivo Momento Tejido muestreado Plantación nueva Clavel Establecida Crisantemo Poinsetia En floración En Floración Rosal Durante floración Antes de formación de fruto Antes de Cultivos de cabeza formación de floral (Col, Coliflor) cabeza Cultivo de hoja (lechuga, Media estación espinaca) Antes de Melón formación de fruto Antes y durante Papa floración Raiz/cultivo de Antes de bulbo zanahoria, alargamiento de remolacha, raíz o bulbo. cebolla. A mitad de Tomate (campo) floración Manzano, peral, Almendro, Cerezo, enero - febrero Ciruelo. Higo, Olivo, Duraznero, enero - febrero Nectarina 2 - 4 semanas Arándano antes de la cosecha abril - mayo Cítricos Pepino Vid A mitad de floración 3 4to. - 5to. par de hojas de la base 5to. - 6to. par de hojas de la base Hojas superiores del tallo floral Hoja recientemente madura Hoja recientemente madura sobre tallo floral No. De plantas 20 - 30 20 - 30 20 - 30 15 - 20 25- 30 Hoja recientemente madura 12- 20 Hoja recientemente madura hacia el centro 12- 20 Hoja recientemente madura 12- 20 Hoja recientemente madura 12- 20 3ra. a 6ta. hoja desde el punto de crecimiento 15 - 20 Hoja recientemente madura 20 - 30 3ra. a 4ta. hoja del punto de crecimiento 15 - 20 Hojas de la presente estación, de ramas no fructíferas 50 - 100 Hojas basales hasta la mitad de 25 - 100 ramas no fructíferas Hojas de brotes medianos de la 50 - 100 presente estación Hojas terminales de ramas no fructíferas Pecíolo de hoja recientemente madura. 25 - 40 50 - 100 Los niveles considerados como deficientes y/o bajos indican que el elemento considerado no alcanza la concentración suficiente para el normal desarrollo de las funciones fisiológicas o procesos metabólicos en el que está implicado. Estas deficiencias pueden llegar a producir sintomatologías características en diversos órganos (hojas, frutos, raíces, etc.), que permiten, en ciertas ocasiones, realizar un diagnóstico visual. Sin embargo, es siempre necesario realizar el análisis correspondiente para verificar dicha deficiencia. La consecuencia final de dichas deficiencias suele ser una disminución significativa del vigor de la planta, o bien, de la productividad, tamaño y calidad del producto final. Los niveles foliares considerados óptimos indican que la nutrición es equilibrada y no es limitante para un correcto funcionamiento de la plantación. Los resultados del análisis foliar se interpretan utilizando tablas particulares para cada cultivo, como la que se presenta en la Tabla 2. Tabla 2: Niveles de suficiencia en tejidos en base seca para cultivos en invernadero. Nutriente N (NO3-) (%) PO4= (%) + K (%) Ca Tomate Frutilla Pensamiento Geranio 350 - 500 40 - 1000 250 - 400 300 - 480 35 - 75 30 - 50 25 - 70 40 - 70 350 - 650 150 - 350 250 - 500 250 - 400 ++ (%) 200 - 400 100 - 200 80 - 260 100 - 200 ++ (%) 35 - 80 30 - 50 40 - 75 20 - 70 29 a 15 - 30 20 - 70 25 - 60 - 150 a 800 100 a 4000 1,000 a 4,500 Mg SO4=(%) + Na (ppm) Fe 2+ (ppm) 80 - 200 80 - 250 100 - 250 100 - 300 Mn 2+ Zn (ppm) 100 - 300 100 - 400 50 - 250 40 - 150 2+ (ppm) 35 - 100 25 - 125 25 - 100 10 - 50 2+ (ppm) 7 - 20 5 - 20 5 - 40 7 - 16 30 - 80 30 - 90 20 - 80 30 - 100 0.4 0.5 0.2 - 5 1-5 - 100 - 500 - Cu B (ppm) Mo3+ (ppm) - Cl (ppm) Hay que tener en cuenta que una concentración foliar insuficiente no siempre significa que el contenido de nutrientes en el suelo sea baja, ya que muchos factores pueden afectar su absorción, del mismo modo que una concentración foliar adecuada no significa necesariamente un crecimiento óptimo. En el caso de los cultivos frutales, la desventaja que presenta este método es que debido a la época en que se realiza el muestreo foliar (a mediados de verano para el caso de los frutales de pepita y carozo) en caso de existir deficiencia no puede 4 corregirse para esa temporada, sino para la cosecha siguiente. Sin embargo, es una herramienta muy utilizada en este tipo de producción. b. Criterio de las relaciones entre nutrientes (DRIS) El método DRIS, siglas en inglés del denominado Sistema Integrado de Diagnóstico y Recomendación (Diagnosis and Recommendation lntegrated System), utiliza los cocientes entre las concentraciones de los nutrientes de los resultados del análisis foliar. El método DRIS se diseñó para: Lograr un diagnóstico válido a pesar de la edad de la planta o el tipo del tejido. Ordenar los nutrientes desde el más limitante al menos limitante Enfatizar la importancia del balance de nutrientes. Este método equipara las relaciones entre nutrientes con las homónimas obtenidas en poblaciones de rendimiento máximo u óptimo, a las que se denomina Normas DRIS, y que es específica para cada cultivo. A partir de ellas, el método provee una serie de cálculos matemáticos con el fin de obtener lo que se denominan índices DRIS. Estos índices permitirían clasificar los niveles de nutrientes. El balance nutricional es parte de la interpretación apropiada del sistema DRIS, debido a que la interacción nutricional determina en gran parte el rendimiento y la calidad del cultivo. Matemáticamente, los índices se basan en la desviación media de cada relación respecto a su valor óptimo. Por ello, el Indice DRIS óptimo debería ser cero para cualquier nutriente. Los índices negativos indican deficiencias relativas mientras que los positivos excesos respecto a los nutrientes considerados en el diagnóstico Una de las mayores ventajas de este método radica en el escaso efecto de la época de muestreo, ya que si bien en términos absolutos las concentraciones de nutrientes aumentan o disminuyen en hoja, las relaciones entre las concentraciones permanecen relativamente constantes. Para ello se debería contar con una amplia base de datos para la obtención de las normas DRIS a nivel regional, que consideren la variabilidad de los nutrientes y cultivos estudiados (características climáticas, nivel de producción, etc.) Sin embargo, éste no es un método muy utilizado en cultivos intensivos, salvo para cítricos. En el caso particular de los frutales de pepita y carozo, se observa que a veces la relación entre los nutrientes no determina el comportamiento nutricional. Por ejemplo: un manzano puede tener una buena productividad tanto con una relación N/P de 8 como de 20. USO DEL ANÁLISIS FOLIAR CON CRITERIO DE DIAGNÓSTICO Esta técnica es una herramienta de diagnóstico que permite determinar que elementos se encuentran por debajo o por encima de la concentración óptima para el crecimiento normal del cultivo. La interpretación se inicia estableciendo si el nivel de 5 nutrientes es suficiente o no. El siguiente paso consiste en determinar el motivo de la existencia de la insuficiencia y la forma de corrección. El análisis foliar por sí solo no es suficiente para realizar una correcta recomendación de fertilización. Es preciso complementarlo con el análisis de suelo, así como también la historia del cultivo: dosis de fertilizante aplicado, prácticas de manejo, rendimientos, entre otros. 6