2 Revista digital Matemática, Educación e Internet (www.cidse.itcr.ac.cr/revistamate/). Vol 9, No 1. , 2008. En el siglo III aec, Roma era la potencia mediterránea por excelencia. Roma, en su afán de conquista, se apodera de los estados helénicos y de la poderosa Cartago. La única ciudad que resiste a los embates de los romanos es Siracusa, pero ya en el 212 aec cae en manos de Roma. Durante III aec, el poder político y militar estaba en manos de los romanos, pero el poder científico, continuaba en manos de los griegos. No era la gran cultura helénica del siglo V aec, en el que habían florecido tantos filósofos, artistas y científicos, tales como Herodoto, Hipócrates, Heráclito, Parménides, Zenón, Esquilo, Sófocles, Aristófanes y Demócrito. La cultura científica helénica se ve obligada a emigrar a las colonias griegas de Asia Menor, Egipto, Italia y demás, debido a la invasión que sufrían por parte de los romanos. Es así como en Alejandría-Egipto nace el centro científico más importante del mundo griego y también el más duradero, sitio de comunicación de los más grandes investigadores de la época, tanto de griegos como de romanos. (Véase [1]). En Alejandría se construye la Biblioteca y el Museo, donde centenares de sabios y estudiosos se enseñan, trabajan e investigan. La Biblioteca fue dirigida, especialmente en la época de mayor brillo, por grandes sabios, como por ejemplo Eratóstenes. Es a este ambiente científico de Alejandría al que se vinculan directa e indirectamente las tres figuras más importantes de la matemática de la antigüedad: Euclides, Arquímedes y Apolonio. Estos fueron los miembros más representativos del período de oro de la matemática griega. En el siglo III aec nace uno de los más grandes matemáticos de todos los tiempos: Arquímedes de Siracusa. Figura 1.1 Grecia Antigua Arquḿides: su vida, obras y aportes a la matemática moderna. Edward Parra Derechos Reservados © 2009 Revista digital Matemática, Educación e Internet (www.cidse.itcr.ac.cr/revistamate/)