Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" SISTEMAS INTEGRADOS DE GESTION BIBLIOTECARIA PARA JÓVENES “HIPERCONECTADOS” Realizar un estudio histórico de treinta años en disciplinas como puedan ser las matemáticas, la arquitectura o la propia historia, por poner sólo algunos ejemplos, es, a simple vista, insustancial. Sin embargo, si hablamos de sistemas informáticos, treinta años nos permiten calificar de “arqueología tecnológica” a las primeras generaciones de sistemas integrados de gestión bibliotecaria (SIGB). Tal y como se analiza en la ponencia, los programas de hoy en día apenas si se parecen a los de antes. No sólo han cambiado los módulos clásicos: catalogación, circulación, adquisiciones y gestión de publicaciones periódicas; sino que se han ido implementando nuevas directrices, herramientas y servicios para la localización, recuperación y gestión de la información, adaptados a un entorno social y un contexto tecnológico diferentes. Los siguientes objetivos, unos de corte más teórico otros, de carácter más técnico y, finalmente, algunos más prácticos, resumen el interés del trabajo condensado en la ponencia: - - - - Se explica en qué consiste el modelo propuesto por la IFLA en el año 1998: Requisitos Funcionales de los Registros Bibliográficos, así como las directrices GARE, GSARE, GARR para los catálogos en línea, ya que su implantación constituye un avance importante en lo referente a una mejor y más eficaz recuperación de la información. Se proporciona una imagen panorámica de los componentes y características de la circulación de fondos mediante un sistema de radiofrecuencia que permite la realización de inventarios, circulación de fondos y detección antihurto con simples microchips. Se analizan las ventajas de las publicaciones en línea, las cuales comportan un valor añadido en cuanto a formato, disponibilidad e interactividad. A consecuencia de la gran aceptación que han experimentado las publicaciones electrónicas se explica cómo va surgiendo el movimiento OAI (Open Access Initiative) cuyo objetivo no es otro que el de defender el acceso libre a la literatura científica, sin barreras económicas, legales y tecnológicas. En relación con el libre acceso y la difusión tratados en el punto anterior, la ponencia no puede darse por concluida sin antes apuntar cómo, paralelamente a la divulgación de conocimientos hasta límites, insospechados en el pasado, que permiten las nuevas tecnologías, se está gestando una nueva frontera que divide a nuestra sociedad en info-ricos e info-pobres, educados y analfabetos, para quienes la información tiene, a día de hoy, finalidades distintas. 1 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" INTRODUCCIÓN “El problema de nuestros tiempos es que el futuro ya no es lo que era entonces” Paul Ambroise Valéry Poeta y ensayista francés (1871-1945) Hace ciento cincuenta años, los científicos de todo el mundo estaban convencidos de que no quedaban grandes descubrimientos por hacer, sino sólo detalles y pequeñas pinceladas a las ya inventadas máquinas de multiplicación directa, las sumadoras con teclado, o la sumadora-restadora de Samuel Morland. Pero poco después, salieron a la luz unas cuantas curiosidades que fueron los antecedentes directos del microprocesador. El norteamericano Dr. Stibitz desarrolló, entre los años 1937 y 1939, una máquina sumadora binaria de relés a la cual llamó Complex Calculator. Por estas fechas, los europeos trabajaban también en sus proyectos de investigación como el Z-3, que no consiguió ser el primer calculador electrónico al carecer de interés para el III Reich en la II Guerra Mundial. En términos generales, nadie había previsto que en menos de cincuenta años esa conformista visión del mundo se vería trastocada de manera tan sorprendente. Con la llegada de los primeros ordenadores y las nuevas tecnologías, la vida cotidiana del siglo XX cambiaría de un modo por entonces inimaginable. Si en 1903, alguien hubiera dicho a un científico que en cien años se llegarían a transmitir a la misma velocidad datos, sonidos e imágenes, que mediante los microscopios conseguiríamos ver átomos independientes, que la gente llevaría encima teléfonos de un peso no mayor a unos gramos, que la velocidad de un coche comercial superaría los 200 Km./h..., si alguien hubiera dicho entonces todo esto al científico, sin duda alguna, lo habrían calificado de loco. La mayoría de los avances no podían predecirse en 1903, porque la “tecnología”, entonces imperante, los consideraba imposibles. Ni siquiera los investigadores mejor informados tenían la más vaga idea de lo que se avecinaba. No obstante ahora que estamos en el siglo XXI, la situación presenta una curiosa diferencia. En la actualidad no nos cuesta compartir el desencanto de Paul Ambroise Valéry. A muchos de nosotros se nos aseguró que los albores del XXI serían momentos de desarrollo tecnológico entonces inimaginable. Bien es cierto que la técnica asociada a la información no ha dejado de evolucionar e incluso continúa revolucionando la concepción clásica de términos tan básicos como documento, institución documental, difusión o acceso a la información. Y lo hace de forma tan arrolladora como operó en su tiempo la introducción de la imprenta. Este nuevo orden y la atenta observación de los hechos que a su alrededor sucedían, permitieron a Paul Otlet extrapolar la tecnologías de su tiempo, para proponer una visión revolucionaria a través de una mesa de trabajo que pudiera manejar el acceso al conocimiento de forma rápida y universal. Sumado a ello y a su preocupación por hacer accesible la información contenida en los documentos, destacó la importancia de la organización y la clasificación de la información, así como, la de la utilización de la tecnología para apoyar estas labores. El mecanizar el acceso a la información y relacionar los datos acumulados por el saber científico, llevó a Vannevar Bush a publicar, en julio de 1945, el artículo “As we may think”, en el cual presentaba el MEMEX, (MEMory Extension): “un dispositivo destinado al uso individual, una especie de archivo y biblioteca privada mecanizada, que permitía al usuario memorizar todos su libros, documentos y comunicaciones y, gracias a dicha mecanización, hacer consultas con extrema rapidez y flexibilidad”. 2 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" No obstante, el problema fundamental del que adolece este tipo de predicciones futuristas sobre las tecnologías es su simplismo. Los procesos de la microelectrónica nos han permitido reconducir el sueño de Otelt y de Bush hacia un nuevo objetivo: internet y el documento digital. Este desarrollo tecnológico incide notoriamente en el proceso de organización de las unidades de información y en consecuencia, en los servicios que los jóvenes empiezan a disfrutar. De tal manera, que los nuevos Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria (SIGB) se diseñan, específicamente, para el intercambio de información en Internet y para facilitar y potenciar su manejo y uso a las generaciones del futuro. PRESENTE Y FUTURO INMINENTE DE LOS SISTEMAS INTEGRADOS DE GESTION BIBLIOTECARIA (SIGB): Según Tomás Saorín, la aplicación de internet al espacio documental nos obliga a definir los SIGB como "una superficie de contacto, una ventana desde la que la biblioteca ofrece y muestra a sus usuarios el corazón mismo de su actividad"1, que permita instalar de nuevo el término "integral" en todos y cada uno de sus módulos. Es, precisamente, su desarrollo modular, el que nos permite administrar todas las tareas y servicios que gestiona una biblioteca de manera independiente pero interrelacionada. Los SIGB de última generación, además de incorporar los módulos clásicos (catalogación, circulación, adquisiciones y gestión de publicaciones periódicas), añaden nuevas herramientas y servicios que a continuación se relatan: 1. CATALOGACIÓN La catalogación, concebida como la operación por la cual se describe un documento en función de sus características formales y externas (autor, título, lugar de edición..), es una disciplina que existe desde tiempos remotos. De hecho, ya en Alejandría, se comenzó organizando la colección por el tamaño y la forma de los soportes, no obstante se conoce que a medida que fue aumentando el montante de documentos, éstos fueron organizados por títulos y materias. En la actualidad, gracias a la automatización, la catalogación no sólo ha traspasado las fronteras nacionales, (ejemplo de ello es el IBERMARC / MARC 21 en un entorno XML según ISBD) sino que frente a la catalogación manual, la aplicación de la informática a este campo nos permite presentar las siguientes ventajas2: o Mediante la importación de registros se evita la redundancia en el trabajo ya que cada documento es catalogado una sola vez: o Funciones de importación de registros en formato MARC ISO 2709, con diferentes combinaciones de juegos de caracteres. o Funciones de exportación de registros en formato MARC ISO 2709, MARC 21 XML Schema, Dublin Core ISO 15836:2003, etc. permitiendo su descarga o envío por correo electrónico. o Se asegura la difusión de la información mediante catálogos en línea. o Con la catalogación cooperativa se simplifican las tareas de corrección de errores y puesta al día de nuevos datos3. 1 Saorín Pérez, Tomás. Tesis doctoral: Modelo conceptual para la automatización de bibliotecas en el contexto digital. Director, D. José Vicente Rodríguez Muñoz. Universidad de Murcia, 2002. 2 Garrido Arilla, Mª Rosa: Tendencias que presenta la catalogación automatizada hoy. En: Revista General de Información y Documentación, Vol. 6, nº 2. Servicio de Publicaciones Universidad Complutense. Madrid 1996. 3 Garrido Arilla, Mª Rosa: Procedimientos automáticos de creación y transformación de los registros bibliográficos. En: Anales de Documentación, nº 4, 2001. 3 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" o o o o FRBR4 (Requisitos Funcionales Para Registros Bibliográficos-Functional Requirements for Bibliographic Records): Es una manera de unir distintas versiones de una misma obra dentro del catálogo de una biblioteca. La aplicación de los FRBR se fundamente en tres puntos clave: o Hacer el catálogo colectivo relevante. o Reducción del número de ediciones en la pantalla de resultados. o Uso de los conceptos de los FRBR como son: obra, expresión, manifestación e ítem para explicar como deben agruparse los registros (cluster). Por ejemplo implica la posibilidad de poder decir busco La ventana indiscreta pero no me interesa una versión en particular, sino que estoy más interesado en cuándo y quién lo escribió (Cornell Woolrich, 1942). Al hallar esta información, se presentan enlaces a sus manifestaciones (las diferentes ediciones del libro) o las obras relacionadas (película Alfred Hitchcock 1954, banda sonora Franz Waxman...), pero impide que se visualicen miles de respuestas inútiles. Este sistema también ofrece al usuario la posibilidad de añadir sus propios comentarios sobre un ítem que posee un individuo, por ejemplo, "Este ítem del que soy propietario, que es una manifestación o segunda edición del título original The rear window, tiene una pequeña mancha de café en su cubierta y se localiza en la fila tercera de mi estantería". Actualmente si buscas en los catálogos tradicionales aparecen las distintas versiones y ediciones (Por ejemplo La ventana indiscreta y otros cuentos Madrid: Espasa Calpe, 2003) por separado, cada una en su propio registro bibliográfico. Tal vez una tiene anotaciones, tal vez otra es una edición en pasta dura, otra es una edición de bolsillo, etc. pero esencialmente son “la misma obra”. FRBR, aplicado correctamente en un catálogo, ligaría todas las versiones de la obra. ¿Los beneficios? Con FRBR, el usuario puede ver claramente que hay items relacionados. O tal vez, puede buscar solo libros en sus versiones traducidas al español, o solamente películas que tengamos disponibles en DVD, o solamente la versión en línea del texto o un fragmento de la película. Ejemplo práctico de su utilización: http://worldcat.org/ y http://fictionfinder.oclc.org/ GARE5, 1984 (Directrices para Registros de Autoridad y Referencia-Guidelines for Authority and Reference Entries), conjunto de directrices para normalizar los encabezamientos de los catálogos relativos a nombres de personas o entidades y a títulos uniformes, y por tanto no contempla las materias. Las GARE no son normas sino directrices; es decir, intentan proporcionar un marco general para las entradas de autoridad pero no prescriben la forma correcta de los encabezamientos ni la puntuación interna, cuestiones que confían a las reglas de catalogación de cada país. Las GARE establecen 3 tipos distintos de entradas: de autoridad, de referencia y explicativas. GSARE6, 1993 (Directrices para los Registros de Autoridad y Referencia de MateriaGuidelines for Subject Authority and Reference Entries). GARR7 (Directrices para Registros de Autoridad y Referencias-Guidelines for Authority Records and References) definen los elementos necesarios para las entradas de autoridad y la estructura que han de tener estos asientos. Pueden considerarse. como una edición revisada de las GARE. 4 "Directrices para registros de autoridad y referencias / IFLA. Ministerio de Cultura, 2004". Travesía: el portal en Internet de las bibliotecas públicas españolas, 2004. http://travesia.mcu.es/documentos/directrices_autoridad.pdf 5 Guidelines for Authority and Reference Entries. Recommended by the Working Group on an International Authority System, approved by the Standing Committees of the IFLA section on Information Technology. London: IFLA International Office for UBC, 1984. 6 Guidelines for Subject Authority and Reference Entries. Working Group on Guidelines for Subject Authority Files of the Section on Classification and Indexing of the IFLA Division of Bibliographic Control. München: K. G. Saur, 1993 (UBCIM Publicatons – New Series, v. 12). 7 Guidelines for Authority Records and References. Revised by the IFLA Working Group on Gare Revision. Formerly Guidelines for Authority and Reference Entries. München: K. G. Saur, 2001 (UBCIM Publications, New Series vol. 23). 4 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" 2. CIRCULACIÓN A finales de los noventa, un grupo de investigadores del M.I.T. llegó a la conclusión de que los esfuerzos dedicados a los sistemas automáticos de reconocimiento de objetos que se estaban desarrollando eran poco provechosos. En consecuencia, decidieron trabajar en otra vía ideando unas etiquetas de auto-identificación para cada objeto (Auto-ID). De tal manera, que un libro tendría una etiqueta que informara al sistema de reconocimiento de que era una monografía, proporcionando, además, datos sobre su autor, fecha de publicación, editorial, etc.. Esta mejora en los sistemas de reconocimiento pronto se vio superado por la adaptación de los sistemas de identificación por Radiofrecuencia RFID8 (Radio Frequency Identification) a las bibliotecas. Se basa en el control de los materiales bibliográficos según la normativa ANSI Z39.83 que, gracias a microchips emisores de radiofrecuencia ISO 18000:2004, permite la realización de inventarios, circulación de fondos y detección antihurto. Tal y como se ha dicho RFID no es un sistema nuevo, surgió en el campo militar hace ya más de medio siglo, durante la II Guerra Mundial, para la identificación de naves (barcos y aviones) amigas o enemigas (identification, friend or foe/IFF), combinando la propagación de señales electromagnéticas con las técnicas de radar. Sin embargo, no se ha logrado adaptar para fines bibliotecarios hasta finales del siglo XX. Sus primeras aplicaciones comerciales datan de la década de los 60, cuando varias compañías desarrollaron métodos para evitar el robo de artículos en las tiendas (EAS/Electronic Article Surveillance) mediante etiquetas que almacenaban un solo bit. La simple presencia o ausencia de la etiqueta era suficiente para detectar la señal al pasar por la puerta. Dadas estas sencillas características, el coste de producción era realmente bajo con resultados muy efectivos. El sistema se basa en la transmisión de ondas de radio. Para ello, necesitamos una etiqueta RFID pegada al documento, que contendrá toda la información necesaria para su identificación (modificable y reutilizable), un lector conectado al sistema de gestión documental de la biblioteca y una antena que relacionará ambos elementos. Algunos argumentos a favor: • Si empleamos el sistema RFID para realizar el préstamo, no será necesario un contacto directo del material a prestar con el lector, lo que unido a la capacidad para identificar varios elementos al mismo tiempo nos aportará un gran ahorro de tiempo. Este sistema, además, es capaz de leer los datos de la etiqueta en un milisegundo, y por otro lado podemos prestar un lote de tres discos (por ejemplo) sin necesidad de sacarlos uno a uno de la caja. • Permite activar y desactivar el sistema antihurto al mismo tiempo que se realiza el préstamo o la devolución, de esta manera, se efectúan dos acciones simultáneamente: la propia lectura del código y, por separado, magnetización o desmagnetización del documento. • A la hora de realizar el inventario, simplemente tendremos que pasar por delante de las estanterías con un lector portátil para que éste contraste los datos recogidos con lo que tenemos registrados y nos informe acerca de qué documento nos falta. • En relación con lo anterior, usando el mismo lector portátil podremos encontrar documentos que, al estar mal colocados, en otras circunstancias daríamos por perdidos. • Por último, nos permite obtener estadísticas fiables del uso de la colección mediante la implantación de sensores en los puntos de lectura. Estos sensores registrarán cada documento que llegue a ese punto para ser consultado, con lo cual, sabremos qué es lo que más interesa a nuestros usuarios o qué parte de la colección se debe potenciar. 8 Las principales características del RFID quedan recogidas en la página web de Tagsys, máximo fabricante mundial para bibliotecas de este sistema. http://www.tagsysrfid.com/html/index.php 5 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" 3. GESTIÓN DE PUBLICACIONES PERIÓDICAS Una de las consecuencias más directas de la automatización de este módulo es la creciente "adquisición" centralizada de las publicaciones mediante licencias de acceso. Realidad ésta, que evita la compra de duplicados, la dispersión en la gestión de suscripciones y además simplifica los trámites administrativos de compra mejorando la previsión de los costes anuales de las instituciones. Sin embargo, es la publicación periódica electrónica9 en si, la que comporta un mayor valor añadido a los usuarios en cuanto a formato, disponibilidad e interactividad: VALOR AÑADIDO EN LA EDICIÓN ELECTRÓNICA FORMATO: Multimedia Realidad Virtual DISPONIBILIDAD: Ubicuidad Fácil acceso a plataformas y recursos de contenidos prácticamente ilimitados INTERACTIVIDAD: Herramientas de búsqueda Interconexión de contenidos con hiperenlaces TRANSPARENCIA: Nuevas herramientas de filtrado. Fuente. Estrategia de la industria editorial europea ante el año 2000: Europa y el desafío de los multimedios. Informe de síntesis. Luxemburgo: Comisión Europea. Dirección General XIII/E. Info 2000, 1996. Es evidente que las publicaciones en formato electrónico difieren del modelo en papel. La pregunta que surge ahora es: ¿cuáles son las ventajas y los inconvenientes de estos nuevos registros del conocimiento humano? Ventajas del documento digital o Favorece la difusión de la información. El uso de las redes telemáticas reduce el coste en la distribución y mantiene la calidad del texto original. o El número de veces que se consulta un documento no afecta al estado físico del mismo. Es decir, no se deteriora con el uso. o La utilización generalizada de documentos electrónicos por los usuarios suprime tareas repetitivas que, hoy por hoy, se siguen realizando en las instituciones. Por ejemplo, la de transportar documentos en soporte tradicional desde el depósito hasta la sala de lectura. o La fácil distribución del producto informativo. Un mismo documento puede ser consultado por varias personas a la vez sin necesidad de esperar a que el periodo de un préstamo termine. 9 Nos referimos tanto a ediciones electrónicas de publicaciones impresas como a revistas electrónicas de origen digital (digital born). 6 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" o Como señala Farinella: “la información almacenada en forma de bits en lugar de átomos de papel y tinta como en el pasado, puede viajar casi a la velocidad de la luz, ser duplicada ilimitadamente y a un costo insignificante”10. Además, “las copias digitales ocupan un espacio mínimo en comparación con las toneladas de papel que necesitan los almacenes de archivos tradicionales. Se ahorra así espacio, tiempo y dinero”11. A modo de ejemplo, diremos que una columna construida con las revistas del índice anual de Medline, tendría una altura de más de doscientos metros mientras que el mismo contenido, pero en versión CD ROM12, ocuparía cerca de 960 discos con una altura aproximada de metro y medio. o El documento en soporte informático también se beneficia de la aplicación de algoritmos “que incrementan el grado de eficacia y sofisticación en la recuperación de los documentos”13 y permiten al usuario un amplio abanico de opciones de búsqueda14: Exacta: determina todas las localizaciones de una palabra. Similar: localiza palabras que guardan un cierto parecido estructural con la de la búsqueda. Máscara fija: se recupera todo ítem cuya longitud sea idéntica a la palabra de búsqueda. Máscara flexible: presenta características similares a la anterior, salvo que las posiciones no especificadas pueden ser ocupadas por un número indeterminado de caracteres, incluido el elemento vacío. Truncamientos: se recuperan documentos que contengan palabras que empiezan, terminan o presentan alguna coincidencia en la raíz con la secuencia de caracteres explicitada en la búsqueda. La mayoría de las bases de datos dan la posibilidad al usuario de componer expresiones de búsqueda compleja mediante operadores lógicos para así localizar ocurrencias entre los registros digitales que las componen. En último lugar, y no por ello menos importantes, las técnicas derivadas del procesamiento del lenguaje natural cuyos algoritmos y métodos de búsqueda mejoran, día tras día, la capacidad de respuesta de los sistemas. En este sentido, la futura web semántica en la que se está trabajando va a permitir que la información que aparece en Internet pueda ser interpretada directamente por los ordenadores sin necesidad de intervención humana. Para tal fin es necesario que la información de las páginas web se codifique mediante ontologías, “una especificación explicita y formal sobre una conceptualización compartida”15, es decir, un conjunto de definiciones de conceptos y relaciones entre ellos cuya finalidad es dar estructura y significado a los recursos contenidos en la web, de esta manera los ordenadores podrán comprender la información y convertirla en conocimiento. 10 Farinella, F. “La regulación de las firmas electrónicas y digitales”. En: El Derecho, 2000, núm. 3 (nov.). p.1. 11 Polanco Mesa, A. “El incierto legado de la cultura digital”. En: Historia e Internet, 2001, núm. 3. p. 3. Notas: artículo disponible en Web: http://www.ucm.es/info/folchia/historia [Fecha de consulta: 16 de enero de 2007] 12 Las dimensiones de un CD ROM son: 12 x 14 cms; 170 grs de peso y 129,4 mm. de grosor. 13 Ross, S. “Changing Trains at Wigan: Digital Preservation and the Future of Scholarship” [en línea]. En: The JISC/NPO Digital Preservation Workshop (3 al 4 de marzo de 1999. Inglaterra). Disponible en Web: http://www.leeds.ac.uk/cedars/OTHER/SRoss.htm [Fecha de consulta: 12 de enero de 2007]. 14 Diccionarios en soportes informáticos: los diccionarios en el horizonte del siglo XXI. Octavio Suárez Santana ... [et al.]. Madrid: ELR ediciones, 1996. p. 3. 15 Arceiz Baquero, Jose Luis. La web semántica [en línea]. Disponible en Web: http://usuarios.lycos.es/arceizb/LaWebSemantica.pdf [Fecha de consulta: 8 de enero de 2007]. 7 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" Para Claudia Salmini, existe una relación especial entre el usuario y las herramientas de búsqueda tradicionales y electrónicas. Añade que para hacer más eficiente la localización de los documentos electrónicos: “es importante consignar los datos temporales, espaciales, institucionales y de gestión de archivos, pues es necesario responder a: cómo enlazar el contexto, el contenido y la estructura de los distintos fondos de un archivo. Por lo que respecta a las herramientas de búsqueda se deben de actualizar, sobre todo las más antiguas, que no suelen contener algunos datos esenciales para el usuario”16. o Los soportes informáticos tienen la capacidad de registrar datos multimedia de tal manera que cualquier documento podrá estar compuesto no sólo de texto, sino también de sonidos, gráficos, imágenes, secuencias de animación, etc. o Favorecen, cara a los usuarios, la disponibilidad de una amplia gama de servicios como pueden ser el acceso en línea al contenido de los libros desde OPAC’s gráficos, la consulta remota a través de las redes de transmisión de datos, la reproducción en papel con una gran calidad o la posibilidad de trasladar esa información a un soporte tan cómodo de manejar como el CD ROM. o Las nuevas tecnologías también han permitido hacer realidad la impresión bajo demanda que, a diferencia de la edición tradicional, permite imprimir por el mismo precio unitario cien o un millón de ejemplares sin que varíe la rentabilidad de la tirada. Aunque sean muchas las ventajas asociadas al documento digital, éste también presenta una serie de limitaciones. Desventajas del documento digital o El avance en el diseño y fabricación de nuevos equipos informáticos y aplicaciones son la causa de la obsolescencia de las tecnologías que intervienen en el almacenamiento de los documentos digitales. Jeff Rothenberg advierte que, de la misma manera que ningún ordenador puede hoy leer las tarjetas perforadas de los años cincuenta, dentro de cincuenta años ningún equipo informático estará preparado para descifrar la información contenida en un CD ROM 17. o La virtualidad de la información, principalmente en los documentos telemáticos18. o La falta de tradición: el aprendizaje de los miembros de nuestra generación se ha basado en el uso del papel. Esta realidad repercute en los hábitos de consumo de información. Aunque bien es verdad que los niños que ahora están aprendiendo a leer en nuevos soportes prefieren las ventajas que les ofrecen tanto el hipertexto como los documentos multimedia. o Hoy por hoy existen grandes limitaciones económicas, políticas y culturales que debilitan el libre acceso a la mayoría de las colecciones digitales. El elevado coste de los procesos de digitalización y el mantenimiento de los servicios de información digital son sólo dos de los aspectos que repercuten más negativamente a la hora de conseguir que el documento digital se desarrolle de manera global: “el capital económico y humano necesario para tal fin en [sic] tan ingente que los procesos de digitalización avanzan con gran lentitud. A esto se suman los problemas legales sobre propiedad intelectual”19. 16 Salmini, C. “Las tecnologías de la información y el servicio al usuario”. En: XIV Congreso Internacional de Archivos: (Sevilla, 15 a 29 de septiembre de 2000). [Sevilla]: Diputación de Sevilla, [2000]. p. 15. 17 Rothenberg, J. “¿Son perdurables los documentos digitales?”. En: Investigación y Ciencia, 1995, núm. 222. pp. 8-13. 18 En esta ponencia el término documento telemático se utiliza según la definición del Real Decreto 263/1996 de 16 de febrero mediante el cual se regula el uso de las técnicas electrónicas, informáticas y telemáticas por la Administración General del Estado. Por otra parte, Angélica-Sara Zapatero define el documento telemático como “el documento que enviamos o recibimos a través de las telecomunicaciones, es el caso del correo electrónico”. En: Zapatero Lourinho, A. S. “El documento telemático: concepto, naturaleza y validación”. En: Actas de las X Jornadas de Archivos Municipales, (El Escorial 2-3 de Junio de 1994), Madrid: Grupo de archiveros municipales, 1994. pp. 91-107. 19 Polanco Mesa, A. “El incierto legado de la cultura digital”. En: Historia e Internet, 2001, núm. 3. p. 2. 8 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" En algunos casos, el profesional de la información desconoce hasta dónde llega su nivel de responsabilidad en relación con estos nuevos documentos. Por otra parte, los conocimientos técnicos que requieren su correcto tratamiento y su conservación están muy alejados de la formación que a día de hoy reciben o han recibido dichos profesionales. o El contenido de un documento electrónico está representado por signos que deben ser decodificados mediante un programa y con un procedimiento lógico que convierta el código binario, incomprensible por el hombre, al lenguaje natural. o La obsolescencia y dependencia del software obliga a prever medidas de preservación cuyo coste es a día de hoy bastante elevado. o Abundante producción editorial caracterizada por la multiplicidad y la redundancia. Como explica Lafuente: “Aun cuando la edición electrónica justifica sus bondades al multiplicar la cantidad de bits de información disponible a bajo costo, después de leer una docena de artículos la redundancia informativa es tan alta que uno empieza a agradecer a aquellos que decidieron no escribir y dedicar su tiempo a enseñar. Pero existe un agravante en relación con la redundancia informativa: El tipo de documentos que se publica es similar; y se presenta una paradoja: resultan escasos los documentos relevantes” 20. o 4. REPOSITORIO OA Crear un Repositorio OA supone defender el acceso libre a la literatura científica, sin barreras económicas, legales21 y tecnológicas. Según recoge la Budapest Open Access Initiative22 entre los beneficios atribuibles a los repositorios de libre acceso destaca el hecho de dar mayor difusión a la información: “que se favorezca el avance del conocimiento y se de mayor visibilidad a la producción científica”. Aunque existen datos que demuestran el incremento de las citas recibidas por los autores que han publicado el resultado de sus investigaciones en OA, muchos científicos mantienen resistencia a formar parte del movimiento, entre otras causas, por desconocimiento al procedimiento, por indiferencia al mismo, por miedo a tener enfrentamientos o conflictos con los editores, por ser reacios a compartir el resultado de su trabajo, etc. Existen dos vías de implantación de un sistema OA: - Publicaciones Open Access (método Gold) - Autoarchivo (método Green): El problema surge cuando los documentos que se desean incorporar al repositorio a su vez van a ser publicados por una editorial. En estos casos ¿Qué material podemos incluir?. La respuesta a tal cuestión depende de cuanto nos permita hacer la política adoptada por cada editorial: o Autoarchivar los artículos redactados por autores de nuestra institución o Archivar la versión pre-print; es decir, la anterior al proceso de evaluación (peer review) o Archivar la versión post-print; es decir, posterior al proceso de evaluación o Archivar las dos versiones o Archivar el PDF del editor Notas: artículo disponible en: Web: http://www.ucm.es/info/folchia/historia [Fecha de consulta: 16 de enero de 2007] 20 Lafuente López, Ramiro. El umbral del cambio: las tecnologías de la información. México: UNAM; 1997; p. 25 21 El autor, aunque cede derechos, retiene el control sobre la integridad de la obra y la facultad de ser reconocido. Creative Commons ofrece un sistema flexible de derechos de autor que permite a los autores la opción de no ejercer todos los derechos de propiedad intelectual que les permite la ley. Licencia Creative Commons España: http://es.creativecommons.org/ [Consultado: 12 de Enero de 2007] 22 Budapest Open Access Initiative. Disponible: http://www.soros.org/openaccess/read.shtml [Consultado: 02 de Enero de 2007] 9 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" Entre los servicios que puede prestar la biblioteca para incentivar el autoarchivo entre los jóvenes investigadores destacan: o Identificar y adquirir contenido institucional de valor o Hacer disponible el contenido de forma sistemática y estandarizada o Preservar el contenido o Informar sobre los derechos de autor y la propiedad intelectual o Prestar ayuda para la edición electrónica interna o Ofrecer formación en la búsqueda y la citación del contenido o Averiguar el estado de los derechos de autor y pedir los permisos necesarios o Informar de las ventajas de OA o Informar a los autores/investigadores de los abusos del mercado: El alto precio de las suscripciones representa una barrera al acceso de los resultados de la investigación científica y en consecuencia se atenta contra los dos objetivos de los autores científicos: avanzar el conocimiento científico y obtener reconocimiento. 5. OPAC / BIBLIOTECA DIGITAL: Gestión de Recursos Digitales Mientras que en las décadas de los ochenta y noventa nos preocupábamos por organizar la información para ofrecer productos y servicios eficientes; en la actualidad, el interés tiende a dirigirse más bien hacia la administración de conocimiento, entendido éste como un recurso al cual tener acceso. Si bien es cierto, que hoy son mayores las posibilidades de acceso a la información, también es verdad que la heterogeneidad y variedad de las fuentes complica cada vez más la recuperación de información por parte de los usuarios. Las bibliotecas digitales y los avances realizados en la implantación de la Web Semántica (XML/RDF, Ontologías) pueden ayudar significativamente en el objetivo perseguido de integrar las búsquedas respetando las diferentes estructuras formales y de contenidos. Hasta ese momento, y con el fin de fomentar el "autoservicio" en el sector de la información y la documentación se están implementando sistemas que dan acceso directo a colecciones de documentos digitalizados. Bien a través del opac de las bibliotecas, bien a través de portales web, se dota a los usuarios de un punto de acceso común a los recursos bibliográficos internos y a bases de datos referenciales externas utilizando un navegador. Un claro ejemplo práctico de ello es la Biblioteca Virtual del CSIC definida por la Unidad de Coordinación de Bibliotecas como: "El punto único de acceso a los recursos electrónicos del CSIC (bases de datos, revistas y libros electrónicos, portales, catálogos,...) que pone a disposición de sus usuarios una amplia gama de servicios para la gestión de la información: búsquedas simultáneas, navegación entre recursos, acceso a texto completo, fondos en las bibliotecas del CSIC, solicitud de fotocopias y préstamos, descarga de registros, factores de impacto, etc." Además de facilitar la búsqueda y recuperación documental, permite facturar a cuentas de usuarios a partir de las acciones que éstos realizan con los documentos (lectura, impresión, descarga, etc.) y control del copyright. CONSIDERACIONES FINALES RESPECTO AL FUTURO... ¿LA BRECHA DIGITAL? Las ventajas de usar la información, como instrumento necesario para controlar el poder, fueron comprendidas en la antigüedad, cuando los griegos aprendieron que para dominar a los pueblos que Alejandro Magno había conquistado era necesario comprender primero sus culturas y que para entenderlas, había que traducir y leer sus registros documentales. Así como nuestros antepasados asimilaron rápidamente la importancia de disponer información, la historia reciente también demuestra que el poder comienza por el dominio de su conocimiento. 10 Bárbara Muñoz de Solano Palacios (CINDOC-CSIC) Sistemas Integrados de Gestión Bibliotecaria para jóvenes "hiperconectados" No obstante, si hablamos de la dimensión social del acceso a la información, no sólo podremos quedarnos con las ventajas mencionadas a lo largo de la ponencia, sino que también ocupan lugar los nuevos conceptos que dividen a la sociedad española como es la Brecha Digital, entendida como: "La distancia entre quienes pueden hacer uso efectivo de las herramientas de información y comunicación y los que no pueden por ser personas mayores, con discapacidad, analfabetos y/o analfabetos tecnológicos, o personas con limitaciones económicas o en situación marginal”23 . Las redes de información y el uso de los documentos en formato electrónico pueden ser una puerta más a las diferencias entre “conectados” y “desconectados”. Según Lorenzo: "las tecnologías que van apareciendo en el mercado pueden convertirse en potentes instrumentos de discriminación social, capaces de acentuar aún más el abismo que separa a los seres humanos"24 Tal y como recoge el informe eEspaña 200625, de la Fundación France Telecom, la brecha digital en España no sólo tiende a su mitigación, sino que crece entre mayores, amas de casa, parados y residentes de zonas rurales. En ciertas zonas rurales aisladas la única posibilidad de acceso a la Red es conectarse vía satélite a precio de oro (hasta 600 euros al mes) o por el llamado "ADSL rural", que ofrece la mitad de velocidad (512kbps) de la que se puede conseguir habitualmente en una ciudad, y es más cara: la cuota mensual suele rondar los 80 euros, aunque a veces supera los 100. Los habitantes de zonas aisladas tampoco pueden beneficiarse de las ofertas conjuntas de voz, datos y televisión. Eso sin contar la odisea de lograr que un técnico vaya a casa, las tormentas que queman centralitas o las heladas que congelan el módem. Castells26 nos advierte que la disparidad entre los que tienen y los que no tienen Internet amplía aún más la brecha de la desigualdad y la exclusión social; es una compleja interacción que parece incrementar la distancia entre la promesa de la era de la información y la cruda realidad en la que está inmersa una gran parte de la población del mundo. La exclusión, por tanto no es sólo un riesgo previsto sino una realidad que, como se ha indicado en líneas anteriores, se torna más complicada ya que compromete a las posibilidades mismas de desarrollo de miles de personas. A menudo se insiste demasiado en los elementos materiales de la informática, y en cambio, nos olvidamos casi siempre, del marco pedagógico y curricular que conforman su uso. Cuando se habla de enseñanza integral no se trata únicamente de aprender a usar los recursos tecnológicos, sino también de hacer referencia a aspectos tan relevantes como el respeto por los derechos de autor, la autenticidad de los documentos o el cómo asegurar su conservación. De tal manera que el trabajo que se realiza en las bibliotecas requiere además de recursos económicos e informáticos suficientes, gente comprometida, dispuesta a dedicar tiempo y cuidado a la formación de los usuarios y a ser agentes de cambio que transmitan y comuniquen esta actitud, haciendo de lo ordinario algo extraordinario. No es ocioso mencionar que toda actividad, requiere desde las primeras etapas una abundante dosis de tesón, voluntad y pasión. En el caso del desarrollo de las nuevas tecnologías aplicadas a las bibliotecas la mejor manifestación del cambio la encontramos en la actual Sociedad en que nos encontramos caracterizada por la desmaterialización de los documentos, las bibliotecas digitales o la extensión de los sistemas integrados de gestión bibliotecaria. 23 Gutiérrez, E.. “La educación en Internet e Internet en la educación como factor supresor de la brecha digital” [en línea]. En: Congreso la Educación en Internet e Internet en la Educación. Ministerio de Educación, Madrid. Disponible en Web: http://www.inclusiondigital.net/ponen/brecha/Overview.html [Fecha de consulta: 13 de enero de 2007] 23 Lorenzo, M. “Una escuela compensatoria para el siglo XXI”. En: Lorenzo, M... [et al.] (Coords.). Organización y dirección de instituciones educativas en contextos multiculturales. Vol I. Granada: Grupo Editorial Universitario, 1999. 24 Fundación France Telecom España. e-España 2006: Informe anual sobre el desarrollo de la Sociedad de la Información en España. Disponible en: http://www.fundacionauna.com/areas/25_publicaciones/publi_251_6.asp [Consultado: 22 de Enero de 2007] 25 Castells, Manuel. La era de la información: economía, sociedad y cultura. Madrid: Alianza; 1997; vol. 3. Fin de milenio p. 370-371. 11