DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 - DICIEMBRE 2009 SUMARIO La imagen de portada es del desaparecido “Monolito de los Carlistas” que estaba situado en las proximidades de Casa Ibáñez tras la huerta de Renales. DESDE EL ÁRBOL GORDO - REVISTA CULTURAL Pág. 01 - Portada “Monolito de los Carlistas” Pág. 03 - Sumario. CREACIÓN LITERARIA COORDINACIÓN Y MONTAJE Luís Modesto Urda Buitrago Jesús Fernández Vallejo Juan Carlos Zamora Muñoz ESCRIBEN Rosario Ramírez García Enrique Montoya Heredia Paula Martín-Moreno Romero Ángel González Puga Leandro Molina Villaseñor Andrés Carretero Sosa Francisco J. Serrano López Daniel Martín-Moreno Jesús Fernández Vallejo Javier Díaz-Moreno Fabián Martínez Redondo Cirilo Manzanares Barchino Carlos Villanueva Fernández Honorio J. Álvarez García Luis Benítez de Lugo Enrich Jaime Moraleda Sierra EDITA Bogart Cineclub IMPRIME Gráficas Villarrubia COLABORAN Ayuntamiento de Villarrubia Cooperativa “El Progreso” ISSN 1889-0318 Dep. Legal CR-460-2008 “Desde el Árbol Gordo” no se hace responsable de las opiniones emitidas libremente por sus colaboradores. Nº 4 diciembre de 2009 Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) Pág. Pág. Pág. Pág. Pág. 04 05 07 09 10 - “Poesía”. “Poemas Navideños”. “Haberlas, haylas”. “Todo por la banca”. “Microrrelatos”. MÚSICA Pág. 11 - “Influencia del rock and roll en la música y la sociedad”. CINE Pág. 15 - “Clint Eastwood y el cine”. Pág. 19 - “Duke Ellington y el cine”. HUMOR Pág. 28 - Caricatura. ENSAYO Pág. 29 - “La mujer en la sociedad”. Pág. 30 - “Realidad y curiosidades que trascienden”. ACTUALIDAD Pág. 34 - “Inculcar en el sistema educativo el hábito de la lectura,…”. Pág. 35 - “De las Tablas de Daimiel o como hacer política de aguas con un Parque Nacional”. ARQUEOLOGÍA Pág. 39 - “La necrópolis visigoda del Santuario de la Virgen de La Sierra, aportaciones desde la arqueología…”. FOTOGRAFÍA Pág. 46 - “Vista de la Hontanilla”. Aquellas personas que deseen hacernos llegar algún tipo de colaboración o cualquier sugerencia deben remitirlo a: Bogart Cineclub, Plaza de la Constitución, 20 - Villarrubia de los Ojos CP 13670 (Ciudad Real) desdeelarbolgordo@hotmail.es 3 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CREACIÓN LITERARIA - POESÍA Rosario Ramírez García-Calvillo 1 Las acequias se visten de color primavera, la tierra se engalana con sus mejores mantos, y la paz no ha menguado la magia de mis cantos porque me siento libre, de tu amor pionera. Y quise ser de nuevo primavera, en los ojos, la boca, la mirada, y tallar con la voz enamorada tu nombre con mi nombre en la madera. Quiero ser de tus ojos el eterno reflejo, tú, de mis manos quieres, edificar tu casa, te acercas a mi lado mientras el tiempo pasa, y el agua cristalina nos sirve como espejo. Y quise ser el tiempo detenido, la hoguera, la pasión en la cintura, y ser cruz y calvario y sepultura y el beso que se muere consumido. Quiero pintar la luna con pincel transparente, hacer un sol enorme con versos de colores, amanecer soñando, impregnada de olores, acariciar tu sueño con mi pasión ardiente. Y quise ser la sangre por las venas, la herida y el dolor, la eterna noche, lo que calla la boca y el reproche, la causa y el consuelo de las penas. Cuánto amor, sin que sepas, hoy te estoy regalando, me arrastra la corriente movida por tu ausencia para adorarte siempre no me falta paciencia, sentada junto al río te seguiré esperando. Y quise ser la paz que nunca acude, el rasgado clamor de la tormenta, la huella del camino, polvorienta, y el rostro del amor... Pero no pude. 4 2 Ya levantan las musas el vuelo en las tardes silentes del día, soledades ocultas se visten olvidando tristezas y envidias. Las caricias temblando en las manos dejan huellas de sombras heridas y se elevan con astros brillantes mientras dejan el alma tendida. Formas fieles de mudas imágenes hoy descansan en mentes dormidas y desean volar y ser fuerza en tu pluma de estrellas altivas. Laberinto de duendes y musas el lugar donde el verso se anida, mar sereno de playas que claman, libertad de palabras sentidas. El amor en tu piel se derrama, estandarte forjado en la vida, se ha grabado con fuego en mi cuerpo y en el alma una rosa amarilla. Seguirás recorriendo el espacio, unirás la pasión convertida en las letras del sueño invisible de las noches calladas y frías. Otra vez nacerás de la nada, tocarás con tus manos la brisa, se alzará el corazón a los cielos, mientras sea tu voz poesía. No hace falta que vuelvas, misteriosa luna de noches tibias y doradas, de versos de amapola las miradas mojaron de silencios a la rosa. No vengas más. ¿No ves que rencorosa es la voz del dolor y son espadas sangrantes las palabras acalladas? Ya sólo eres vacío, poca cosa. La pluma que persigues es cobarde, es cobarde hasta el alma y hoy no puedo fingir más la verdad, ahora es tarde. No hace falta que vuelvas. ¿No te has ido? De nuevo me has dejado con el miedo, perdida en el murmullo del olvido. 3 Parada junto al río me he sentado a escucharte, se han mezclado incompletos el agua con tu llanto, y aunque soñar no cuesta, sigo amándote tanto, que se encoge mi mundo con tan sólo pensarte. 4 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CREACIÓN LITERARIA - POESÍA POEMAS NAVIDEÑOS Enrique Montoya Heredia POEMA GITANO NAVIDEÑO Color de flor de azucena tiene el chiquillo al mirarlo, y sangran las amapolas, y palidecen los nardos, y una estrella se detiene sobre la copa de un árbol. Corre, gitanillo, corre… Porque con brillo de grandes fiestas y un cesto de mimbres blancos va derramando la Luna estrellitas por el llano. ¡No corras, churumbelillo, no corras, que los gitanos están sedientos de ti y te traen más regalos! Un niño las va cogiendo porque es un niño gitano mientras su madre sonríe con risa de guinda y nardo. Toma mis tres cascabeles, toma mi pañuelo blanco, y como no tengo otra cosa toma el coral de mis labios. Las estrellas más bonitas las va el niño separando; - Toma, Madre, más estrellas para que bordes tu manto. Y en el polvo del camino se perdieron los gitanos, gitanos de verde luna llenos de gracia y encanto. Más tarde, dice la Luna; Quiero me des de regalo un lucero de cien puntas con cien reflejos dorados. Con su brillo de gran fiesta y un cesto de mimbre blanco sigue mirando la Luna a aquellos niños gitanos, que van dejando por siempre su amor eterno y humano. Y un beso estalla en la noche, un beso rueda en el llano y en la flor de una sonrisa se queda el beso engarzado. ¡Corre, mi niño, que vienen por el campo los gitanos porque vienen a traerte como siempre mil luceros de regalo! De lejos … se oye una copla que tiene “duende gitano”; la está cantando “MONTOYA” con el corazón vibrando, porque el niño de la Luna por siempre le está esperando. _____________________________________________________________________________________ Éste, descalcito y roto por el sol y viento curtido, habla con los ojos bajos entristecido y mohíno. -¿Porqué no quieres que juegue como siempre con tu Niño?, -Mira, gitanillo guapo, cuando ayer llegó a mis brazos trajo sangre en el vestido; no quiero que te lo lleves, DIÁLOGO DE LA VIRGEN MARÍA CON UN NIÑO GITANO Sierra majestuosa de los Montes de Toledo mañana de un marzo tibio, la Virgen se pone seria contemplando a un gitanillo que se le acerca a su ermita. 5 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ¡Déjame con mi cariño! Virgencita, Madre buena, si ayer llegó destrozado no fui yo, fueron los chivos que jugando lo tiraron sobre una rama de espino. ¡Déjalo que venga y juegue! ¡No quiero, déjame al Niño que ayer cuando le trajiste estaba muerto de frío. Pero, Virgencita, yo le haré una candelita con chaparros y tomillos; Y la Virgen le responde: ¡Déjame que yo caliente solamente a mi cariño! Y el niño, con lágrimas en los ojos le dice: ¡Le gusta al chiquillo tanto venirse a jugar conmigo…! Tengo que hacerle una choza con varetas de un olivo para que duerma la siesta si se quedara dormido. Y la Virgen le entristece diciendo: yo quiero sólo que duerma en mis brazos mi cariño. Sólo quiero, Virgen Madre enseñarle una jaula que tengo con cinco grillos; jugaremos con las cabras, iremos a coger nidos, bajaremos a la fuente que tiene un espejo lindo y veremos nuestras caras haciendo muecas y guiños y perderse y agrandarse cuando tiremos un chino. ¡Sólo quiero que se mire en mis ojos mi cariño! Fíjate, mi Virgen buena, con palillos de retama y junqueras del camino nos iremos junto al agua y haremos un remolino para que el agua lo mueva, ¡Verás lo que nos reímos!. No insistas, ya te he dicho que no quiero que se vaya mi cariño: Entonces si Tú no quieres, dijo con pena el chiquillo: al menos me dejarás que me quede aquí contigo. La ternura de la Virgen al fin el hielo ha fundido; la sonrisa se entreabre y una esperanza florece sobre el corazón del niño. La Virgen le da la mano y con beso de cariño le dice al Niño gitano: Que DIOS TE BENDIGA siempre por tu corazón gitano, y te dejaré mi Niño aunque sea sólo un rato para que juegue contigo y te dé un gran abrazo. VILLARRUBIA DE LOS OJOS NAVIDAD 2009 6 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CREACIÓN LITERARIA HABERLAS, HAYLAS Paula Martín-Moreno Romero Esmeralda se desperezó esa mañana con la sensación de que su cuerpo estaba más vivo que nunca, no sabía la razón, pero notaba cada nervio y cada músculo que la recorría como nunca antes los había percibido. Debe ser la resaca, se dijo, pero enseguida pensó que normalmente ésta se presenta con el efecto contrario, por lo que la descartó. Y es que la noche anterior había celebrado su cumpleaños con unos amigos en los pocos pubs de su localidad, un pueblecito de La Coruña, que contaba con algo más de dos mil habitantes. Con la excusa de que no se cumplen veinte años todos los días estuvieron de parranda casi toda la noche, bebiendo y bailando sin cesar. Su madre la esperaba para desayunar y estuvieron hablando un buen rato antes de que Esmeralda se fuera a trabajar. Era su tienda y podría permitirse llegar un pelín tarde el día después del “aniversario de su nacimiento”, como a su madre le gustaba decir. Ese día no se fue por donde siempre, algo dentro de ella le pedía dar un rodeo por el bosque, adentrarse en la espesura verde de ese trozo de Galicia, húmedo y lleno de umbría, así que decidió coger ese camino, sabía que le llevaría más tiempo, pero no le importó. Todo lo contrario, anduvo lenta, entreteniéndose, reparando en cosas en las que nunca se había fijado: la corteza de los árboles agrietándose para enseñar tímidamente su interior, el rocío en la hierba abundante reflejando colores mágicos, las mariposas que revoloteaban a su alrededor ofreciéndole un espectáculo de color y armonía… Pertenecía a esos parajes, tal vez no se había dado cuenta antes, pero hoy podía notarlo, podía sentir que nunca podría apartarse de allí, era una sensación extraña para ella, pero muy intensa, y le gustó. Cuando llegó a la tienda, había personas esperándola, que le recriminaron su tardanza. Esmeralda las miró, sonrió y ellas se quedaron paralizadas, como si hubieran sido hipnotizadas por su sonrisa, ya no hacían falta explicaciones, tampoco excusas. Fueron entrando poco a poco, y la joven las atendió con la dulzura y la paciencia que le caracterizaban. Vendía té, chocolate y otros productos procedentes de comercio justo. Y así, entre bolsitas de té y bufandas de lana virgen tejidas a mano pasó su jornada de trabajo. Sin embargo, Esmeralda había notado algo diferente: había sido capaz de escuchar, pero no escuchar sin más; sino escuchar lo que pensaban sus clientes, lo que no decían, lo que se guardaban para ellos y que de verdad reflejaba sus sentimientos. Cualquier otro día se hubiera asustado y hubiera corrido a su casa, a su madre, y le hubiera contado lo que le estaba ocurriendo, pero hoy no, hoy era distinto; no sentía miedo ni nerviosismo, ninguna sensación negativa, sólo paz fluyendo en su interior. Cuando acabó de trabajar regresó a casa, por el bosque de nuevo, pisando las hojas dormidas que crujían bajo sus pies, aspirando el aire centenario que la envolvía. De repente, le pareció percibir algo a lo lejos, una figura, tal vez un hombre que estaba cazando; no, se trataba de una silueta femenina que corría. Esmeralda intentó seguirla con sus grandes ojos verdes y avanzó lo más rápido que pudo tras ella. ¡Espera!, le gritó. Pero esa mujer no la esperaba: corría y corría, veloz como el viento. La carrera terminó en un claro del bosque, en – Aquí tiene, don Rafael. -Dele recuerdos a sus hijos, doña Aurora. 7 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 forma de círculo, y en el centro del círculo se erigía un monolito con una forma difícil de describir, que Esmeralda no pudo reconocer ni asociar con nada conocido ni visto antes. Por desgracia para ella no había rastro de la mujer. Vaya, pensó, todas estas zancadas no han servido para nada, ¿dónde se habrá metido? Un sentimiento de pena la invadió, le hubiera gustado tanto llegar a ella, mientras la perseguía había alcanzado a ver su cabello, de color claro y trenzado hasta la cintura, su cara de facciones suaves como la de un ángel y sus movimientos gráciles, similares a los de una gacela. También había notado que su ropaje era raro, como si se tratase de una túnica de color verde, que en momentos se confundía con la vegetación. Sin duda, si existiesen las hadas podría decir que acabo de ver una, se dijo Esmeralda, decepcionada, aunque a la vez alegre por la oportunidad de haber tenido esa experiencia. corría, y sin pensárselo dos veces lo cogió, lo metió en su bolso y echó a andar, decidida a explicarle a su madre lo que le había pasado y llevarla a ese lugar del bosque que después de veinte años recorriéndolo no había llegado a conocer, como si hubiera salido de la nada. En casa no había nadie, sólo una nota de su madre la esperaba y decía que esa noche tendría que trabajar, sentía mucho no poder acompañarla y le deseaba que durmiera bien, se verían por la mañana. Esmeralda agarró el trozo de tela verde y lo apretó contra su pecho, gesto que pareció consolar su desilusión. Llegó a la conclusión de que sería mejor que cenara algo y se acostara pronto porque mañana debía madrugar y no podía arrastrar tanto cansancio, demasiadas emociones para tan pocas horas. Y así lo hizo. Sobre las doce de la noche se despertó, agitada y otra vez con la sensación de estar muy viva, volvió a coger el trozo de tela, que la tranquilizó por un momento, se lo ató a la muñeca izquierda y decidió volver a dormir. Pero la luna llena de esa noche empezó a invadir la habitación con su luz y no pudo conciliar el sueño. Se levantó, contemplando esa luna redonda, completa y empezó a sentir un deseo irrefrenable de ir a ese claro del bosque que había visto esa misma tarde. Una fuerza desconocida la llamaba. Con su camisón y descalza, empezó a correr hacia ese lugar, los pies empezaron a dolerle, pero al poco tiempo notó cómo se elevaba y seguía avanzando, estaba…flotando. Al principio sintió frío, y dudó si debía seguir, pero pronto éste se mitigó conforme se acercaba a ese sitio tan especial. De él surgía luz, una luz blanca y cálida que marcaba el camino. Entendió que no debía oponer resistencia, tan sólo dejarse llevar. Por fin llegó al monolito, que estaba rodeado por mujeres parecidas al hada que había visto por la tarde, todas de la mano, bailando y cantando en una lengua que no entendía pero le sonaba familiar. Había estado siempre dentro de ella. El corro de siluetas danzantes se rompió a su llegada y surgió de la luz una mujer. Su madre, claro. Ésta tomó de la mano a Esmeralda y le dijo en la lengua de los cánticos: ¡Bienvenida hija, te estábamos esperando, eres la última piedra! Decidió seguir hacia su casa, pensando si contarle ó no a su madre las cosas tan curiosas que le habían sucedido durante el día. Pero no pudo evitar darse la vuelta, para volver a ver el monolito con esas extrañas figuras que no parecían ser humanas. Lo recorrió con sus ojos verdes, los mismos ojos verdes que hicieron que su madre le pusiese de nombre Esmeralda, “su piedra preciosa”. En lo alto del monolito notó que había un trozo de la túnica de esa mujer que 8 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CREACIÓN LITERARIA TODO POR LA BANCA Ángel González Puga Son cosas de la recesión, ¿sabes?, pero no te preocupes, pasará, porque no hay mal que cien años dure ni perro que lo resista, ¿entiendes?, además, a veces tenemos que retroceder para tomar impulso, afirmarnos sobre nuestros cuartos traseros, otear con atención el horizonte, husmear en derredor y reorganizarnos para avanzar y vencer, lo aprendí en el ejército, Toby, y el ejército es una buena escuela de supervivencia para los marginados como nosotros, así que tú tranquilo, mantente ahí, campeón, vigilante sobre el felpudo de tu cajaestrado, no hay que perder la compostura, eso lo último, fíjate, hasta yo me he puesto un limpiabarros a la entrada del chamizo, para que veas, y es que España nos contempla, Toby, el primer mundo nos observa, por eso no hay que bajar la guardia nunca, eso lo último, siempre ojo avizor y la picha tiesa, Toby, como Berlusconi en Villa Certosa, faltaría más, con un par, como corresponde a un perro de pelea cordobés y a un conductor con carné de primera especial, y sí, ya sé, ya sé, no hace falte que me lo recuerdes, Toby, ya sé que no estamos en Cerdeña ni en el mejor de los mundos, a mí me lo vas a contar, chaval, claro que no, no estamos en Cerdeña ni puta falta que nos hace, mira tú, pero eso a nadie le importa, amigo, qué más da si estamos a la orilla del Turia o del Sena, qué más da, somos un grano de arena en el desierto, quién se va a preocupar de un camionero en paro y de un can sarnoso, dime, a ver, ni dios, por eso tú alerta, sin bajar la guardia, con dos cojones, es la única forma, y disculpa que me meta ahora en la garita y te deje aquí plantado defendiendo el contáiner a ti solo, tengo que descabezar un sueñecito, camarada, he pasado una noche de perros, con perdón, y no me sostengo, pero el contáiner es sagrado, ya lo sabes, como si guardáramos en él el Santo Grial, porque ahí está encerrada toda una vida, menos el piso, claro, el piso no nos cabía, y eso que era pequeñito, de los de protección social, ni la hipoteca, que esa sí que era grande y desprotegida, por eso se lo quedó el banco, que les aproveche y revienten, y por mí no te preocupes, Toby, nadie me molestará, verán la pintada: Prohibido el paso (con hache intercalada y todo, para que vean que la miseria no es enemiga de la buena ortografía) y me respetarán, seguro, porque la cultura siempre impone, ¿a que sí?, ¡ja,ja,ja!, qué vida más arrastrada, tío, menos mal que te tengo a ti, Toby, el mejor compañero del hombre, el único compañero de este hombre, porque ella también se las piró en estampida, qué iba a hacer la mujer, lo entiendo, no se lo reprocho, volvió con sus viejos, qué remedio, yo ya no tenía nada que ofrecerle, y menos a los niños, ¡pobres!, qué sabrán ellos de recesiones, ¿verdad?, mejor así, al menos con los abuelos van tirando, a ti y a mí nos da igual, Toby, estamos acostumbrados a dormir en la cabina del tráiler o a pasar la noche en blanco si se tercia, pero eso sí, como reyes, todo hay que decirlo, y comiendo en los mejores restaurantes de carretera de España, ¿te acuerdas?, y bebiendo en los puticlubs más guays de la costa...¡qué tiempos!...¿o ya los has olvidado, so mamón?, buen pelo tenías entonces, no como el de ahora, ¿verdad?, lo que va de ayer a hoy, hay que joderse, tirados al borde de un arroyo, basura, pura basura, quién nos lo iba a decir, campeón, si Diógenes levantara la cabeza... Pero tú duerme, recóbrate de la resaca, Vicentón, que falta te hace, y que tengas buenos sueños, que no todo va a ser malo en esta vida, hombre, aunque no entiendo por qué me has atado a mí también a tu caseta de chabolista, amigo, a tu destino de fracasado, de perdedor que dicen los americanos, ¿acaso no te fías de mi lealtad perruna?, ¿te piensas que me voy a ir con el primero que pase, con el primero que me ofrezca un mendrugo de pan, como hacéis vosotros, los hombres?, no, tío, yo no soy de esa clase de perros, no me vendo por un plato de lentejas al mejor postor, eso queda para vosotros, los humanos, vaya tipejos, al primero que podéis se la claváis, y al que le den que se quite, sois unos bultos sospechosos, de vosotros no se puede fiar ni dios, no me extraña que me digas que no me aparte de aquí, sois capaces de robar hasta a los muertos, cuánto más a un pobre desgraciado tirado al borde de la nada, a vosotros sí que había que ataros a un contáiner para que no fuerais por ahí saqueando el mundo, no tenéis remedio, y eso que dicen que sois los seres más evolucionados del planeta, permíteme que me ría, bueno, alguno hay, como ese tocayo tuyo que acaba de morir en la India, la excepción que confirma la regla, claro, y aún así lo expulsaron al pobre hace unos años por sospechoso, claro, quién se va a fiar de un hombre bueno, algo andaría buscando entre la 9 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 mierda, ¿ayudar a los pobres?, no, hombre, a los pobres hay que explotarlos como está mandado, hipotecarlos como es de ley para tenerlos bien sujetos por los huevos, y sentarlos ante el televisor para que vean que los ricos también lloran, corazón, corazón, y que vean fútbol, mucho fútbol, que eso les relaja, y de vez en cuando también conviene mostrarles una fotografía de un perro guardando una caseta y atado a un contáiner para tenerlos sobre aviso: porque si la recesión continúa, amigos, esto es lo que os espera: garita, contáiner y perro ladrador. Y aunque te cueste entenderlo, porque siempre has sido un poco duro de mollera, sólo la Banca puede sacarnos de este atolladero, Vicentón, ¿te enteras? Así que ¡Todo por la Banca! A fin de cuentas, tío, a escote nada es caro… CREACIÓN LITERARIA - MICRORRELATOS vieja diligencia atravesando el leve cauce de un riachuelo. Me acomodé con un fondo musical de Morricone, y me dejé arrullar con su lento sonar entre cálidos gemidos. De repente, una voz enérgica se oyó, y al abrir los ojos contemplé en la pantalla la figura inconfundible de Clint imponiendo la ley ejecutora de las balas. Tras la agitada noche, el pasillo de la pensión estaba en un sospechoso silencio... Miré el reloj y descubrí, con absoluta desolación, que debería esperar otros dos largos años para otro examen de oposición. En ese momento, aborrecí de por vida el maldito western. LA MORDEDURA Leandro Molina Villaseñor CIUDAD REAL Al abandonar la estación, visité aquella bulliciosa plaza árabe, exultante de típicos personajes legendarios. El horizonte exhalaba vapores y aromas que, penetrantes, alimentaban mis sentidos. Me detuve a escuchar la elocuente historia de un cuentacuentos, y enseguida descubrí que relataba una conocida historia de abogados para mí ya familiar… ¡Era el mismo relato ganador de abril en ese famoso Concurso! Me encaré al fingido narrador y le amenacé de inmediato con una querella por plagio intelectual. El aguador, percatándose de la acusación, ofreció de inmediato su interesado arbitraje en este litigio. De pronto, una solícita multitud me rodeó para exigirme su parte compensatoria de daños, prejuicios y demás provechos. En ese momento vi peligrar mi tullida nómina. El ofendido narrador, fuera de sí, inició una veloz carrera hacia mí. En la huída, tropecé con la cesta de un encantador de serpientes, que me agarró al paso y me reclamó su dañada sierpe… -¡¡¡Un dirham, por favor, para este pobre deudor amputaaaado!!! NANORRELATO Andrés Carretero Sosa Frulo corría despavorido por los pasillos oscuros de la casa. Estaba abandonada, lo sabía, pero estaba seguro de que le seguían. Bajó las escaleras y vislumbró la puerta, la salida, el fin del terror. Afuera estaba el día. El corazón amenazaba explotarle y los pulmones se le salían por la boca. Con un esfuerzo sobrehumano logró salir al exterior. Pasó quince minutos allí tumbado, descansando, sabiéndose seguro. Después se levantó, comenzó a caminar hacia la playa y miró hacia atrás pensando; "mañana volveré". Desde aquellas vacaciones, desde aquel crucero en el que naufrago en aquella isla todos los días volvía a aquella casa abandonada. El miedo a los fantasmas era la única forma de no sentirse solo. FUERA DE LA LEY Leandro Molina Villaseñor CIUDAD REAL De fondo me acompañaba un rumor estrepitoso de caballos que me hacía brincar en el sofá en una intermitente dormivela. Yo resoplaba indolente, ajeno a toda aquella algarabía. En un instante, creí oír a lo lejos el chasquido de una 10 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 MÚSICA INFLUENCIAS DEL ROCK AND ROLL EN LA MÚSICA Y LA SOCIEDAD Francisco J. Serrano López Si pudiera encontrar un blanco con el sonido y sentimiento de los negros me haría rico. Estos eran los clarividentes sueños de Sam Phillips mediada la década de los 50, después de haber trabajado como pinchadiscos y productor de algunas canciones, Sam acababa de poner en marcha Sun Record, el mítico sello discográfico, que acogió a la flor y nata del naciente rock and roll. Un día de 1953 un muchacho de 18 años llamado Elvis Aaron Presley decide regalarle a su madre una canción en el día de su cumpleaños, la gente de los estudios Sun quedan sorprendidos con su voz y sus maneras y le hacen firmar un contrato de opción, para que a la primera oportunidad grabe una balada para ellos. La breve historia que sigue aunque ha sido contada centenares de veces ejemplifica a la perfección los primeros pasos de la que, con el tiempo, iba a ser la gran industria mundial del pop-rock. Transcurre 1954 en los estudios Sun Records, radicados en Memphis (Tennessee). Sam Phillips llama a Elvis Presley para que grabe la balada que tenía apalabrada desde meses atrás. Elvis se incorpora al estudio, arranca a su aire los primeros compases de “That’s all right mama!”, y aquí empieza la historia. Cuando el rock and roll saltó desde su tierra de origen a Europa, la historia iba a dar otros importantes saltos cuantitativos y uno cualitativo, nacía el pop, el cantante solista dejaba el primer plano para cederlo a los conjuntos, por otro lado los ídolos de la música juvenil ya se vendían desde un principio como una moda global, en la que además de su música participaba su corte de pelo y la longitud del mismo, las vestimentas que utilizaban, sus gestos, sus preferencias en automóviles, comidas, bebidas, ideologías, religiones y cachivaches del más diverso orden. Pocos fenómenos de masa tan universales y espectaculares como la Beatlemanía, en poco menos de un año la fama de los Beatles se extendió por el mundo y llegó a todos los continentes, cuando estaban a punto de extinguirse los sesenta, lo que en Europa se vivió como marea política deseosa de un cambio radical en la sociedad, en Estados Unidos tiene su expresión a través de las grandes reuniones de masas, para disfrutar de las flores, el amor, las drogas y la música, se vivió la era de los grandes festivales. La música rock ha ejercido desde su nacimiento hasta nuestros días una gran influencia en el mundo occidental, a partir de su aparición en 1954, cada nueva generación ha utilizado el rock como el principal medio para expresar su rebeldía y comunicar sus inquietudes e inconformismo y es que esta música siempre está de plena actualidad por su desbordante fuerza. Hay otra manera más profunda de interpretar el nacimiento del rock, durante la segunda guerra mundial, se produjo un hecho importante para comprender el nacimiento de una nueva música, en las tropas norteamericanas, blancos y negros se hermanaron en una lucha común combatieron codo con codo en las trincheras de Europa o en las islas del Pacífico, esto produjo un acercamiento entre hombres de la misma nacionalidad pero de distinta raza, que comenzaron a conocerse un poco mejor, el medio más expresivo más vital fue la música, por un lado el negro poseía la tradición de sus cantos espirituales, la energía del blues, la brillantez del jazz y el ritmo en la sangre, por otro lado el blanco cultivaba un rico folk popular, aportación de las muchas culturas de las gentes emigradas a Estados Unidos. Elvis Presley 11 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Pronto se abrió en la música una nueva generación, buscaba un lenguaje propio, una identidad común, se produjo entonces un nuevo acercamiento entre la música blanca y la negra, debido a una nueva actitud y también a la incorporación del ritmo en ambas músicas. Los negros habían combinado hacia los años 40 el ritmo con el blues, creando el llamado rhythm and blues, los blancos combinaron el ritmo con el folk dando origen al country and western, estas dos corrientes tendieron a unirse, y con ello llegó el rock and roll, que marcó la generación rock vigente hasta hoy. El arranque de esta música se produjo en 1954. Este año un músico llamado Bill Haley, editó un disco titulado “Rock around the clock” (Rock alrededor del reloj), poco tiempo después un famoso disc jockey bautizó la nueva música con el nombre de rock and roll, de alguna manera había que llamarla. Durante los años siguientes, el rock and roll arrasó musicalmente y fue el motor de todas las innovaciones que se produjeron en el campo de la música. Junto a Elvis triunfaron negros como Chuck Berry, Little Richard y blancos como Carl Perkins y Jerry Lee Lewis, apodado “the killer”, por su forma de tocar el piano, pero nadie como Elvis contribuyó a su popularidad y aceptación. Porque el rock tuvo, sobre todo en sus comienzos, muchos detractores, esta música era expresión de inconformismo de la juventud, muchos puritanos aseguraba que era música del diablo, obscena e inmoral, y además un invento comunista para contaminar la “limpia juventud americana”, pero poco importó que los puritanos consiguieran que muchos se fueran del rock, que no emitieran esta música por la radio o que en un programa de televisión sólo se permitiera enfocar a Elvis de cintura para arriba, pues consideraran que sus movimientos eran obscenos, el rock era imparable. En 1959 ya no quedaba nada de la rebeldía que había impregnado la primera generación del rock, el estilo musical y de vida que habían creado fueron aniquilados, Elvis que marchó para cumplir el servicio militar cuando regresó ya no quedaba nada de su primitivo espíritu y la música dejo de tener garra y la fuerza de su origen, aunque desaparecidos los pioneros, los nuevos ídolos vendieron igualmente millones de discos, con el rock and roll reconducido, orientado y manipulado, de 1959 a 1964 aparecieron en Estados Unidos nuevos estilos bailables, como el Twist, o modas musicales, como California Sound, eran destellos del viejo ímpetu pero nada más. A comienzos de los años 60 surgió de forma lenta pero implacable la voz de los nuevos folk fingers (cantantes populares), estos tenían una conciencia social, mucho más identificada con las nuevas realidades, cultivaron la canción protesta y eran declarados pacifistas, este movimiento pronto se convirtió en el pulmón de la evolución musical. Pero aunque folk fingers como Bob Dylan y Joan Baez, fueron el acicate del cambio, el auténtico rompimiento llegó a la dormida América desde Inglaterra, en este país el rock and roll había ido dejando su propia huella, sin haber sido destruida por ninguna “mayoría moral” había continuado su curso evolutivo lo mismo que una bola de nieve arrojada desde una montaña, de Inglaterra saldrían los Beatles, a partir de entonces ya nada sería igual. El rock and roll entró en Inglaterra por dos puntos: Londres y Liverpool. A la capital iban a actuar las grandes estrellas del rock americano, a Liverpool llegó la música que no tenía unos canales propios, los innovadores que no habían conseguido el estrellato. Un grupo de Liverpool empezó a tocar una variante blanda del rock a Bill Haley Otro factor que influyó en el nacimiento de la nueva música fue el avanza tecnológico que permitió el masivo consumo de la música gracias a la radio y al tocadiscos portátil. Surgió la alta fidelidad, nació la guitarra eléctrica, y los viejos discos de 78 revoluciones por minuto dieron paso a los de 33 y 45 con tres modalidades: long play (L.P. o elepé), extender play (E.P.) y single (sencillo). Los primeros grandes roqueros fueron esencialmente cantantes negros de rhythm and blues y cantantes blancos de country and western, ritmo de blues al oeste del país, pero en 1956 nació un estilo que fundía perfectamente ambas tendencias, este estilo se difundió gracias a la fuerza irresistible del “rey” Elvis Presley. 12 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 comienzos de los 60, sin embargo pronto evolucionó por otros derroteros y comenzó a reivindicar a los grandes del rock and roll como Chuck Berry. Este grupo era, claro está, los Beatles. Formado por cuatro chicos surgidos prácticamente de la calle, ellos rescataron el rock del pasado y lanzaron de nuevo a sus impulsores a la luz pública, al tiempo que lograban el milagro de unificar al mundo entero en torno al fenómeno de la música. Este grupo nacido al tiempo que se producía el auge de la cultura pop (popular) creó un nuevo orden sonoro, un nuevo estilo: el beat (golpe), cuyo nombre se debe al ritmo mantenido en la estructura de sus canciones. El 5 de octubre de 1962 los Beatles editaron su primer disco, esta fecha se considera como el nacimiento de la Década Prodigiosa, los felices años 60, durante esta década, los medios de comunicación alcanzaron un gran desarrollo, los Beatles fueron los primeros músicos que se beneficiaron de este fenómeno, con ellos la música pop alcanzó unas cotas de popularidad impresionantes. En 1964 conquistaron Estados Unidos, su actuación televisada batió todos los records de audiencia, a los pocos días ocho de sus canciones estaban entre las diez más vendidas y oídas, nunca había sucedido nada igual, y nunca ha vuelto a suceder, curiosamente, unos ingleses triunfaban llevando el rock a la nación que lo había engendrado y reivindicando a sus ídolos caídos. Las largas melenas de los Beatles eran el primer desafío de la nueva generación, pero pronto surgió un grupo que interpretaba una música más agresiva, que partía de rhythm and blues negro, los Rolling Stones, el peculiar estilo violento y duro de este grupo rival de los Beatles les granjeó el sobrenombre de “los enemigos públicos nos 1”. Tras los Beatles y los Rolling hubo un alud de nuevos grupos, entre los que hay que destacar los Who, los Animals, los Hollies, Manfred Mann, Spencer David Group, los Moody Blues, Bee Gees, etc. Esta época se llamó “la era dorada del pop” nunca hubo una conmoción tan fuerte había sacudido a la sociedad en todas sus manifestaciones, porque no solo fue la música la que cambió, fue el arte, la literatura, la pintura, la forma de pensar, de vestir, etc. En apenas cuatro años miles de fantasías se hicieron realidad para los jóvenes, su forma peculiar de ver la vida culminó en el Mayo del 68, con la revolución cultural desencadenada en París, que hizo famosa la frase: “La imaginación al poder”. En España y a partir de 1964 comenzó la era dorada del pop español, proliferaron los grandes conjuntos como los Brincos, los Bravos, los Mustang, los Sirex, Lone Star, los Salvajes y muchos más, que realizaban versiones en castellano de temas extranjeros pero también marcaron las pautas de un primer estilo netamente hispano. Los años 60 fueron en Estados Unidos un tiempo de convulsión, cuando los americanos descubrieron que los soviéticos tenían instalados en Cuba misiles que apuntaban hacia su país, estuvo a punto de desatarse una guerra atómica. En noviembre de 1963 “el presidente de la esperanza”, John F. Kennedy fue asesinado y a continuación llegó la guerra de Vietnam, en la que miles de chicos de 17 a 19 años tuvieron que combatir, sin saber en muchos casos porque lo hacían. Junto al rock y el pop surgió con fuerza la voz de los folk singers, que buscaban sacudir la opinión pública con sus canciones protesta a favor de la paz y en contra de las injusticias y las desigualdades. Pronto ese folk puro, testimonial y combativo penetró en un callejón sin salida, con la masiva explosión desencadenada por los Beatles, Bob Dylan, el gran defensor de los derechos civiles, con su aspecto de niño malo, su guitarra, su armónica colgada del cuello y sus corrosivas canciones, fue el primero en comprender que la música acabaría siendo más importante que la letra, el mensaje subsistiría sólo si la música lograba captar al público. En 1965 Dylan se presentó en el festival de Newport con una guitarra eléctrica, fue el primero en abandonar el folk puro y acercarse al rock, creando un nuevo estilo: el folk rock. Durante el verano de 1967, la música pop alcanzó su punto álgido con la aparición del que está considerado como el mejor L.P. de los años 60: “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”, de los Beatles. Sgt Pepper’s no solo representó la cumbre del pop, también introdujo un nuevo concepto musical. Hasta ese momento los grupos y cantantes hacían canciones sueltas que publicaban en singles, pero con el con Sgt. Pepper’s se introdujo y comenzó a imponerse el concepto de álbum. Los grandes creadores empezaron a componer obras no canciones, por ejemplo los Who, desarroparon su primera ópera rock 13 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Tommy, en 1967. El mundo del rock esos años iba sufriendo múltiples conmociones que se sucedieron a una velocidad vertiginosa. Janis Joplin, la mejor cantante blanca de los sesenta, murió en 1970 mientras grababa su tercer L.P. Jimmy Hendrix, el más fantasioso, visceral y apocalíptico guitarra también murió en 1970, y en ese mismo año los Beatles se separaron de un modo definitivo. FOLK: Música popular en su estado más puro, nacida de la fusión del folclore de distintos pueblos emigrados a los Estados Unidos a fines del siglo XIX y principios del XX, que engendró una música autóctona y de gran trascendencia social. FOLK-ROCK: Folk electrificado, es decir, con pautas roqueras. GOSPEL: Música espiritual negra, liberadora de emociones, surgida de los cantos de los servicios religiosos. JAZZ: Música negra del siglo XX con mucho ritmo y que basa su estructura en la improvisación. En los años setenta se fusiona con el rock. POP: Música popular de los años sesenta y las siguientes décadas, es un rock elemental y comercial. RHYTHM & BLUES: Blues con ritmo, antesala del rock and roll, y primer estilo comercial de la música negra, gracias al cual llegó a un amplio público, aunque sus orígenes sean elitistas y puristas como los del blues. ROCK: Término que engloba toda la música surgida tras el nacimiento de rock and roll en 1954. ROCK SINFÓNICO: Rock con pautas de música clásica y grandes desarrollos ejecutado por músicos de gran nivel, se cultivó fundamentalmente a principios de los setenta. ROCKABILLY: Variante del rock and roll surgida en el sur de Estados Unidos a través de un mayor ritmo en la música country, está influido por los ritmos negros, basa su instrumentación en las guitarras y es sumamente bailable. SOUL: En inglés “alma”, música negra que incorpora instrumentos de viento, marcó el primer auge de las discotecas en la segunda mitad de los años sesenta. TWIST: Básicamente un estilo de baile, aunque tuvo a comienzos de los sesenta una clara línea musical partiendo del rock and roll. DISCO: Música de discotecas, bailable, basada preferentemente en el ritmo y la repetición. El más importante “supergrupo” formado en 1968 fue Led Zeppelin, una banda que impuso el concepto de rock duro a través del personal estilo de tocar la guitarra de Jimmy Page. Otro gran mérito de Led Zeppelin fue el cambiar la estética del espectáculo en vivo. Durante los años 60 la mayoría de los grupos actuaban muy brevemente en sus respectivas apariciones en público los Beatles por ejemplo no solían tocar más de media hora, y en 1966 se retiraron del directo. Sin embargo con Led Zeppelin los espectáculos en directo llegaron a durar tres y cuatro horas, además estos se masificaron gracias a su puesta en escena en los grandes estudios. Fueron en definitiva el primer grupo en llevar al público la magia de lo que todavía hoy es un concierto en vivo. Este artículo en parte no ha sido difícil desarrollarlo, independientemente de disponer de una amplia documentación, el que esto suscribe se ha sentido, revitalizando esas vivencias musicales y sociales de los años sesenta y setenta, como pez en el agua, en todos sus comportamientos e improvisaciones. Sin que sea un agravio comparativo, la serie de televisión “Cuéntame como pasó”, y el posterior programa, “50 años de canciones”, es un fiel reflejo y demuestra que recordar, ver, oír y leer, es volver a vivir, por lo tanto y sobre todo hay que leer mucho, y de esta manera uno nunca estará sólo. Principales estilos del rock: BEAT: en inglés “golpe”, estilo marcado por el compás de la batería, base de la música entre 1962 y 1967. BLUES: término que expresa un estilo musical y también un sentimiento de tristeza, musicalmente es un ritmo primitivo y lento, heredado de los esclavos negros llevados a Norteamérica, tiene varias tendencias como el blues rural, el blues urbano, el country blues, y naturalmente el popular rhythm and blues. COUNTRY & WESTERN: música popular rural norteamericana, herencia del folk. 14 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CINE CLINT EASTWOOD Y EL CINE Daniel Martín-Moreno Romero “¿Inocente? ¿Inocente de qué?” Y es que, si tuviera que definir muchos de los papeles que Eastwood ha interpretado en sus películas, a nadie le sonaría raro que los catalogase como el más malo de los buenos unas veces, y otras como el más bueno de los malos. Si bien es cierto que personajes ambiguos que respondan a estos patrones han sido la base de un gran número de películas y libros, es en la filmografía de Eastwood donde se hace de estas figuras auténticos iconos. Así, por ejemplo, sólo siendo el más malo de los buenos el detective Harry Callahan puede anticiparse a los delincuentes y ganarles siempre la partida (“Sé lo que estás pensando: ¿he disparado cinco balas o seis?”), o el personaje conocido como “El reverendo” en “El Jinete Pálido” puede calzarse una sotana al mismo tiempo que reparte ostias, sin h, de las que duelen, a un salvaje grupo de mercenarios que están acosando a una población minera. De la misma manera, siendo el más bueno de los malos, el arrepentido Will Munny de “Sin perdón” puede recibir una somanta de palos sin delatar a sus compinches o hacer oídos sordos, por el recuerdo de su difunta esposa, a las insinuaciones de las prostitutas a las que ha acudido a ayudar; o el ladrón al que encarna en “Poder absoluto” renunciar a su libertad y complicarse la vida por desenmascarar a nada menos que al mismísimo presidente de los Estados Unidos. Reflexiones del sheriff Little Bill – Gene Hackman – al tiempo que le da una soberana paliza al forajido casi moribundo Will Munny Clint Eastwood – en “Sin perdón” Buena pregunta, por qué, a estas alturas de la película, si imaginamos que no va dirigida al pendenciero pistolero William H. Munny (asesino de mujeres y niños, dinamitador de trenes, etc., etc.) sino al conjunto de todos los personajes encarnados (y creados, también podríamos decir) por este genial actor y director… ¿de qué es inocente el bueno y viejo Clint Eastwood? Sin duda que, si cogiéramos los diez mandamientos, no habría uno sólo que no se hubiera saltado alguno de los personajes de sus films. Así, seguro también que más de un ficticio departamento de asuntos internos de San Francisco habría vivido con menos problemas sin las salidas de tono (y de gatillo) del detective Harry “El sucio” Callahan, que las feministas se hubieran sentido más cómodas sin las bravuconadas machistas del ranger de Texas Red Garnett de “Un mundo perfecto” y tampoco cabe ninguna duda que se pueden buscar instructores de marines y de policías más políticamente correctos que sus personajes de “El sargento de Hierro” o “El principiante”. Y eso, estando del lado bueno de la ley, porque, estando del otro lado, no podemos decir que el señor Eastwood haya sido un ladrón tipo Robin Hood (véase “El botín de medio millón de dólares”, o “Los violentos de Kelly”). Y… hablando de lado y lado, ¿Dónde situaríamos al pistolero conocido como “el hombre sin nombre” de la gran trilogía de Sergio Leone “El bueno, el feo y el malo”, “La muerte tenía un precio” y “Por un puñado de dólares”? Si, ese al que el pérfido personaje de “el feo” (encarnado por Eli Wallach) llamaba sencillamente “rubio”. No, no podemos decir que sea fácil que alguno de los personajes a los que ha dado vida el señor Clinton Eastwood Jr, más conocido como Clint Eastwood, pueda responder que sí, que es inocente (no importa de qué, claro está) sin sonrojarse. Y, sin embargo, es destacable la simpatía que estos personajes despiertan en el espectador. ¿Qué por qué? No lo sé. Supongo que la atracción que en la sociedad ejercen los chicos malos cuando se sabe que no son malos de verdad, sino que sólo lo parecen. La simpatía por el demonio, que dirían Los Rolling Stones. Y bien ¿se han fijado? ¿Por cuántos alias vamos ya? Hemos mencionado “el bueno”, “el rubio”, 15 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 “el reverendo”, “el sucio”, pero, y ¿qué decir del personaje al que durante todo el musical “La leyenda de la ciudad sin nombre” todos conocen como “el socio”? Para aquellos que no lo hayan visto seguro que no se imaginan al duro Clint interpretando a un humilde granjero reconvertido en enamoradizo buscador de oro cantándole sus desdichas ¡a los árboles!. Y por si no me creen, en el original : “I talk to the trees, but they don’t listen to me”. ¡Harry el sucio cantándole a los árboles! Hay que ver.... Pero no me desvío más, porque a medida que voy escribiendo este artículo me va resultando cada vez más difícil centrarme en lo que realmente pretendía, que no es otra cosa que presentar la biografía y filmografía de este gran autor y centrarme en la última etapa de ésta, en que se ha consagrado como director, equiparándose para muchos a auténticos clásicos de la misma talla que John Ford, Orson Welles, etc. pantallas de todo el país con la serie sobre el oeste Rawhide (Látigo), que se emite desde 1959 a 1966. Las últimas temporadas de la serie las compagina con el rodaje de las tres películas que rueda a las ordenes de Sergio Leone en Almería: “Por un puñado de dólares” (1964), “La muerte tenía un precio” (1965) y “El bueno, el feo y el malo” (1966). Decidido ya a dejar la pequeña pantalla y dedicarse de lleno al cine inicia el rodaje en 1967 de “Cometieron dos errores”, con su amigo Ted Post. Comienza de esta manera la etapa en la que encarna a diversos tipos duros sin escrúpulos, como en “La jungla humana” (1968), su primera colaboración con el director Don Siegel, o “Dos mulas y una mujer” (1969) también de Don Siegel. En 1971 dirige (y protagoniza) su primera película: “Escalofrío en la noche”, que recibe elogiosas críticas, y ese mismo año se pone de nuevo a las ordenes de Siegel metiéndose por primera vez en el papel de Harry Callahan en “Harry el sucio”. A lo largo de las décadas siguientes va compaginando sus trabajos como actor para otros directores, como en las películas de la saga de Harry el sucio; y sus trabajos como director, que se van dotando de cada vez más y más calidad. Destacan de esta época producciones como “El fuera de la ley” (1976) o “El jinete pálido” (1985). Y así, entre película y película, llegamos en 1992 a “Sin perdón”, su consagración como cineasta. Y la que se puede decir que inicia un ciclo que, sin despreciar las películas anteriores de Eastwood, podríamos catalogar como dorado o clásico. Pero antes de presentar las principales películas de este periodo, y para terminar de pincelar la biografía del señor Clinton Eastwood Jr., pues sólo decir que para la época en que rodó “Sin Perdón” ya se había casado cuatro veces, una de ellas con una actriz a la que dirigió en varias de sus películas: Sondra Locke. Con ella inició un idilio que puso fin a un matrimonio de treinta y cinco años con su primera esposa. Con el tiempo, también se divorció de Sondra Locke, y tras otro matrimonio fallido está casado actualmente con la periodista hispana Dina Ruiz. Entre tanto, y desde 1986 a 1988 fue alcalde de la localidad de Carmel, en California, por el partido republicano, renunciando en 1988 al cargo alegando falta de tiempo para sus compromisos profesionales. Como regidor, tuvo tiempo al menos, eso sí, de iniciar una política de apoyo al medio ambiente y al pequeño comercio de la localidad. Una vez dibujado a grandes rasgos el perfil de Eastwood, y centrándonos en su última etapa como director, a ella pertenecen, sólo por citar Pues bien, Clinton Eastwood Jr nació en San Francisco en 1930. En plena época de la depresión americana, su familia tuvo que recorrer diversas ciudades del oeste de Estados Unidos siempre en busca de trabajo para el padre. No destacó en sus estudios, aunque sí tenía otras aficiones que ha conservado hasta la actualidad, como el deporte y la música. Cuando terminó el servicio militar obligatorio se ganó la vida en diversos trabajos como albañil, bombero, pianista, etc. antes de comenzar su carrera como actor, animado por algunos actores amigos suyos, participando en típicas producciones de serie B de los años 50 (como “La venganza del monstruo de la laguna Negra”, de Jack Arnold, rodada en 1955). De ahí salta a la televisión y se hace popular en las 16 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 algunos, los siguientes films, que seguro irán sonando a cada vez más lectores a medida que avancemos en el tiempo: Dollar Baby” en su palmarés) fue su película más aclamada y laureada. Un drama con la mafia irlandesa como telón de fondo en un barrio marginal de Boston, con un soberbio elenco de actores: Kevin Bacon, Lauren Fishburne, Sean Penn, Laura Linney, Tim Robbins, Marcia Gay Harden, etc., etc. Million Dollar Baby (2004). Laureada película de Eastwood, en la que vuelve a coincidir con Morgan Freeman en este drama sobre la ascensión y caída de una joven púgil interpretada por Hillary Swank, que es entrenada por los personajes interpretados por estos dos veteranos actores. Gran Torino (2008). Con actores semiprofesionales, Eastwood rueda la historia, y se mete en la piel, de Walt Kowalski, un jubilado que, tras perder a su esposa, redescubre la amistad y las ganas de vivir de la mano de unos vecinos inmigrantes a los que antes había despreciado. El final de la película es antológico. También a destacar de esta película que, en su faceta de músico, además de crear la banda sonora del film, Eastwood se reserva la de intérprete de la canción con la que termina la película. Un mundo perfecto (1993). Con Kevin Costner, figura en alza en aquel momento, después de rodar “Bailando con lobos”, interpretando a un fugitivo de la cárcel que es perseguido a lo largo de varios condados del sureño Texas por un conservador ranger interpretado por el propio Eastwood. Los puentes de Madison (1995). Con Meryl Streep. Parecía que tocaba después de las violentas “Sin perdón” y “Un mundo perfecto” un canto al amor como el que vemos en esta película, en la que el director se reserva aquí el papel de un fotógrafo de visita en una población para rodar un reportaje fotográfico y se acaba enamorando de un ama de casa local. Poder absoluto (1997). Donde se vuelve a encontrar con Gene Hackman, tras “Sin perdón”, y cuenta por primera vez con Laura Linney, que hace de su hija, la hija de un ladrón de guante blanco que presencia un asesinato a manos del presidente de los Estados Unidos (interpretado por Hackman) y en lugar de huir con el botín lo sacrifica todo para desenmascarar al asesino. Medianoche en el jardín del bien y del mal (1997). Poco antes de protagonizar “American Beauty”, Kevin Spacey se ponía a las ordenes de Clint Eastwood para interpretar a un sibarita aristócrata envuelto en un oscuro crimen que un periodista interpretado por John Cusack está dispuesto a esclarecer. Como anécdota, comentar que en la película John Cusack se enamora de su vecina, una joven interpretada por la hija de Eastwood, Allison Eastwood. Ejecución inminente (1999). Ahora el director se reserva el papel de periodista en una trama en la que éste lucha contrarreloj y contra su jefe para evitar la injusta ejecución de un reo condenado a la silla eléctrica por un crimen que no cometió. Como rival, Denis Leary (el bombero de la serie “Rescue me”) interpreta al editor del periódico para el que trabaja el protagonista, empeñado en que haga su trabajo y se deje de altruistas investigaciones (y, ya de paso, de acostarse con su mujer). Deuda de sangre (2002). Basado en la novela de Michael Connelly, Eastwood se mete aquí en la piel del detective Terry MCcaleb en la investigación de un asesinato de cuya víctima ha recibido el corazón en donación, gracias a lo cual ha podido salvar la vida. Algo no le cuadra al viejo detective, y le ayudará a averiguarlo su estrafalario vecino, un muy cambiado Jeff Daniels. Mystic river (2003). Después de Sin perdón (que sería igualada posteriormente por “Million No está nada mal su evolución desde aquel oscuro pistolero de la trilogía de Sergio Leone, ¿verdad? Ahora bien, antes de terminar el artículo, decir que si bien lo he centrado en los roles de Eastwood como actor y director no hay que 17 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 dejar de lado otras dos importantes facetas suyas, las de músico y productor. Así, como músico, ha compuesto la banda sonora de muchas de sus películas, sobre todo de las últimas, y ha editado varios discos. A él le debemos, por ejemplo, el inolvidable tema de guitarra “Claudia’s theme” de Sin perdón (en colaboración con el compositor habitual de sus films, Lenni Niehaus). Y podemos mencionar también que fue nominado al globo de oro en el 2007 en el capítulo de mejor canción original para la película “La vida sin Grace”, de James C. Strouse. Además, se ha acercado también a la música en sus películas “Bird”, sobre el malogrado saxofonista Charlie Parker; y “Piano blues”, de la serie de documentales sobre el blues en la que también colaboraron entre otros Martin Scorsese o Mike Figgis. Como productor, por otra parte, creó en 1967 la compañía Malpaso productions, que ha producido o co-producido casi todos sus films desde “Cometieron dos errores”, la primera película que rodó después de la trilogía de Almería. Películas mencionadas. Como actor y director: 2008: Gran Torino. 2004: Million Dollar Baby 2002: Deuda de sangre. 1999: Ejecución inminente. 1997: Poder absoluto. 1995: Los puentes de Madison. 1993: Un mundo perfecto. 1992: Sin perdón. 1990: El principiante. 1986: El sargento de hierro. 1985: El jinete pálido. 1976: El fuera de la ley. 1971: Escalofrío en la noche. Como director: 2003: Mystic river. 1997: Medianoche en el jardín del bien y del mal. 1988: Bird. Como actor: 1974: Un botín de 500.000 dólares, de Michael Cimino 1970: Los violentos de Kelly, de Brian G. Hutton 1969: Dos mulas y una mujer, de Don Siegel. 1969: La leyenda de la ciudad sin nombre, de Joshua Logan. 1968: La jungla humana, de Don Siegel. 1967: Cometieron dos errores, de Ted Post. 1966: El bueno, el feo y el malo, de Sergio Leone. 1965: La muerte tenía un precio, de Sergio Leone. 1964: Por un puñado de dólares, de Sergio Leone. 1959: Rawhide (Látigo) (serie de televisión). 1955: La venganza del monstruo de la laguna Negra, de Jack Arnold. Y bien, querido lector de este artículo, sé lo que estás pensando. ¿He mencionado todas las películas de Clint Eastwood? ¿O me he dejado alguna? La verdad es que con tanto darle a la tecla yo también he perdido la cuenta, pero tratándose de Clint Eastwood, posiblemente el cineasta de renombre más completo existente en la actualidad, ¿no crees que merece la pena echarle otro vistazo al artículo, encontrar alguna película de las que se mencionan que no hayas visto (o que te apetezca volver a ver), hacerte con ella y pasar un buen rato con el bueno y viejo Clint? 18 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 CINE DUKE ELLINGTON Y EL CINE Jesús Fernández Vallejo La música es un cedro, un árbol perenne de madera fragante y duradera. DUKE ELLINGTON (“¿Qué es la música?”) Para MARTA. Por llamarnos a veces a través de la música. Por su encanto. 1. El cine, un arte global. su poética del arte musical. Recordamos ahora con especial emoción, y simplemente a modo de ilustración, dos títulos muy significativos en las relaciones entre jazz y cine: El trompetista / Young Man with a Horn (1950), de Michael Curtiz, y Bird (1988) de Clint Eastwood. En el primer filme, uno de los músicos más carismáticos en el cine de mediados de los años 20, Hoagy Carmichael, narra –en su papel de William “Smoke” Willoughby- la carrera artística del músico Rick Martin (Kirk Douglas), quien, a su vez, representa al mítico trompetista de jazz Bix Beirbecke. El segundo filme, Bird (1988), dirigido por Clint Eastwood, uno de los cineastas más apasionados por el jazz, dentro y fuera de sus películas, desarrolla con brillantez y emoción la trágica vida del saxofonista Charlie Parker, en la que ocupa un lugar muy importante su relación con el músico Dizzy Gillespie. Desde sus inicios, a finales del siglo XIX, el cine ha mantenido unas relaciones muy estrechas y muy fructíferas con las artes plásticas y las musicales. Los responsables del llamado “séptimo arte” no ha dudado en recurrir a especialistas de la música, del diseño artístico, de la arquitectura y de la pintura, sobre todo, para afianzar una puesta en escena, o en algún caso un estilo personal (el cine de autor), que mostrara a través de la imagen mundos e historias muy concretos. Y es que el cine es el arte de la confluencia, a pesar de la importancia que se ha venido dando, sobre todo desde la revista francesa Cahiers de Cinema, la publicación de cine por antonomasia, a la figura del director. No habría películas sin el concurso, a veces no suficientemente reconocido, de músicos, de diseñadores, de especialistas en vestuario y en maquillaje, por no hablar de los miembros del equipo técnico. 2. Cine y jazz. No es el momento de presentar los principales aportes de la música al cine, o, dicho de otro modo, de señalar cómo y de qué manera el cine ha utilizado la música con fines estrictamente narrativos o funcionales. (De ello ya se trató de manera muy clara y concisa en un artículo recogido en el primer número de esta revista.) Sí queremos afirmar, no obstante, que de todos los estilos musicales, el jazz es sin duda alguna, quizás por el hecho de ser coetáneo, uno de los que ha estado más presente en el cine. Todas las filmografías, especialmente la estadounidense, han recurrido una y otra vez a las melodías jazzísticas para ambientar historias especialmente de carácter melodramático. No han faltado tampoco algunas muestras muy interesantes de biografías (biopics) de músicos de jazz ilustres, en las que, sobre todo, directores y guionistas buscaban más el lado morboso de la vida (casi siempre difícil y con un final trágico) del músico, y atendían menos a Fotograma de “Bird” En cualquier caso, el estudio en profundidad del mundo musical de una figura de jazz, desde Louis Armstrong hasta Miles Davis, o desde Dizzy Gillespie hasta John Coltrane o Bill Evans, por citar sólo a mis músicos preferidos, sólo se puede llevar a cabo a través de un género como el documental (o el llamado “falso documental”), que apunta a otras expectativas de crítica y de público. A este respecto, no podemos dejar de citar la maravillosa serie cinematográfica producida por Martin Scorsese que responde al título de “MARTIN SCORSESE Presents THE BLUES”: en ella varios directores de reconocido prestigio se 19 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ocupan de figuras emblemáticas en la historia del blues. Como aficionado, a partes iguales, al cine y al jazz, uno desearía encontrar algún día algo parecido a la serie producida por Scorsese, esto es, un acercamiento del mundo del jazz, con un análisis pormenorizado de estilos, de escuelas y de músicos, realizado por productores, directores y guionistas que estén, por supuesto, muy identificados con la música de John Coltrane, Miles Davis, Bill Evans, Dizzy Gillespie y compañía. de músicos en los que se apoyó “Duke”, con los que colaboró hasta convertirse en uno de los grandes de la historia del jazz. Este “viaje” (el texto tiene algo de “road movie”) nos lleva a conocer sus orígenes en Washington, con una presentación y comentario de los miembros familiares, sus primeros conciertos en los locales de Harlem (Nueva York), y luego sus actuaciones en Chicago. En los lugares más remotos de la tierra la banda de Ellington ofreció conciertos emblemáticos con motivos muy diferentes (Asia, Latinoamérica, pero sobre todo Europa, a donde la banda del Duke llega por primera vez en 1933). La narración de estos hechos (pero sobre todo el panegírico de sus acompañantes) ocupa prácticamente la totalidad del libro. Lo cierto es que en muy escasas ocasiones Duke Ellington se detiene a valorar su trabajo en el medio cinematográfico. El compositor – digámoslo claramente: un tipo muy humilde, muy sencillo y muy generoso- deja claro que componer para el cine no es su especialidad ni su cometido especial en su quehacer musical. En el “Epílogo” de La música es mi amante, una especie de acopio de ideas sobre temas muy diversos, planteado en forma de entrevista ficticia, “Duke” considera que, aunque un compositor por lo general tiene sus propias ideas, éstas se pueden alterar por las intenciones del director de la película. Las piezas musicales –continúa el músico- deben servir de fondo de la historia, y no deben interferir en la acción o en los diálogos. En el siguiente apartado comprobaremos cómo, efectivamente, estas afirmaciones se cumplen en sentido estricto en las diferentes aportaciones de Duke Ellington al cine: no sólo en lo referente a la composición de piezas musicales destinadas a servir de “fondo”, sobre todo en secuencias musicales, sino también en sus escasas apariciones en la pantalla, casi siempre en escenas en las que actúa en el papel de pianista de una banda de jazz. Al parecer sus primeros contactos con el cine se remontan a principios de los años cuarenta, cuando el músico viaja con su banda a la costa oeste (sobre todo en Los Ángeles) para dar algunos conciertos que resultaron ser todo un éxito. Allí empieza a relacionarse con algunos guionistas de Hollywood, cuyas simpatías concordaban con las suyas y también con sus intereses. Y en este contexto, en 1941, surge Jump for Joy: un intento de combatir el racismo en Estados Unidos por medio del espectáculo musical. El respaldo financiero procedía de personas del mundo del cine, como Joe Pasternak, John Garfield, William S. Burnett, entre otros. 3. Duke Ellington y el cine. Este artículo pretende ofrecer un panorama general de la aportación del legendario músico y compositor de jazz Duke Ellington al cine de su época a partir de su propia valoración, cifrada en testimonios breves que han quedado recogidos en su libro de memorias. No es por tanto un análisis minucioso ya que, si nos atenemos a lo dicho por el propio músico, sus aportes fueron muchos y muy dispares. No es tampoco un análisis para expertos en musicología, sino más bien un acercamiento descriptivo de las películas en las que en mayor o menor medida participo “Duke”. Duke Ellington El voluminoso texto memorístico, publicado en 1973 bajo el título de Music Is My Mistress (La música es mi amante), se ocupa sobre todo de historiar cronológicamente la evolución de las diferentes agrupaciones de Duke Ellington. Más aún, al lector el texto le parece un auténtico recuento de agradecimientos dirigidos a decenas 20 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 La música es mi amante no presenta de manera exhaustiva la aportación de Ellington al cine. En varios momentos del libro el músico menciona algunas películas en las que trabajó (Un día en las carreras, Black and Tan Fantasy, Check and Double Check y Change of Mind), sin entrar, en absoluto, en detalles del guión ni de la realización del filme. Lamentablemente no hemos podido ver tres de estas películas: Black and Tan (1929), un corto musical escrito y dirigido por Dudley Murphy, en el que, al parecer, Duke Ellington y su orquesta intervienen con cuatro piezas musicales; Check and Double Check (1930), una comedia de la RKO dirigida por Melville W. Brown, en la que intervienen Amos y Andy, una pareja de humoristas de la radio muy famosos por entonces, y Duke Ellington y la Cotton Club Orchestra, una de sus formaciones más conocidas y prestigiosas; Change of Mind (1969, Robert Stevens), un filme de ciencia ficción, con un reparto poco conocido, en el que Duke Ellington aparece acreditado como responsable de la música. Un día en la carreras / A Day at the Races (1937), un filme cómico dirigido por Sam Wood, el séptimo de los hermanos Marx, se desarrolla en dos espacios: primero, en un hospital dirigido por un falso doctor, en realidad un veterinario (Groucho), y, segundo, en un hipódromo, donde dos tipos extravagantes (Chico y Harpo) ejercitan sus apuestas para mantener a toda costa, y con todo tipo de argucias, el centro hospitalario. En el desarrollo de la película se insertan varios números musicales, en los que intervienen los propios protagonistas: Chico toca un piano de cola, luego Harpo ocupa su lugar, pero termina destrozándolo, lo destripa, y extrae de él las cuerdas e interpreta con ellas un solo de arpa. Son escenas añadidas que aportan bien poco al desarrollo de la trama. Y que sólo buscan la lucidez de los personajes. Destacaríamos ahora, por el tema que nos ocupa, una escena coral, maravillosa e inolvidable, también estrictamente musical, en la que Harpo moviliza con su flauta a una comunidad negra que canta y baila una pieza de góspel a ritmo de swing. En fin, una pieza maestra de algo más de siete minutos –en la que alternan el uso del travelling y de planos fijos, pero, sobre todo de primeros planos de la solista de jazz- que dignificaría hoy en día un montaje musical de contenido jazzístico. Pues bien, observamos que en los títulos de crédito no se menciona a Duke Ellington y su orquesta entre los responsables de la música (algo, por otra parte, que sí veremos en filmes posteriores en los que interviene el músico). El director musical es Franz Waxman, la música es de Bronislav Kaper y de Walter Jurman, las canciones de Gus Kahn y los arreglos musicales de Roger Edens. Pero descubrimos, ya en la parte final del reparto de personajes, el nombre de una voz clave del jazz asociada a la trayectoria de Duke Ellington: Ivie Anderson. En sus memorias el músico le dedica palabras muy elogiosas a esta vocalista que “se convirtió en una de las estrellas y uno de los pilares del grupo, y [que] realizó algunas interpretaciones inolvidables”. Pero ahora, sobre todo, queremos llamar la atención sobre el hecho de que Duke Ellington en su libro de memorias soslaya –no sabemos por qué motivo- otros títulos, a nuestro juicio muy interesantes, en los que aparece, en una determinada escena, el músico acompañado de su orquesta. No se trata, en cualquier caso, de una actuación estelar: antes, al contrario, Duke siempre interviene de manera muy breve, interpretando el piano muy alegremente y sin abrir la boca. Vamos, no dice una palabra. Son, en concreto, tres títulos de indefinición genérica, o quizás más bien se trata de películas híbridas en las que alternan elementos del cine negro, del melodrama y del cine social, y que siguen ciertos parámetros, eso sí, del género musical. Veamos, pues, cuáles son estas películas en las que está acreditada la Duke Ellington’s Orchestra, y analicemos brevemente estas escenas musicales en las que aparece. El primer filme, Murder at the Vanities (1934, Mitchell Leisen), está basado en un musical de la época estrenado en Broadway –Earl Carroll’s 21 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Vanities- y desarrolla una trama policiaca muy interesante, en la que alternan a partes iguales el misterio y el drama romántico-familiar, con un montaje alterno absolutamente prodigioso, de escenas que se desarrollan íntegramente en un teatro, y que por momentos nos ha recordado al cine del maestro Alfred Hitchcock y al Francis F. Coppola de El Padrino. La actuación de Duke Ellington y su orquesta (“and His Band”) se integra en la parte central de una larga secuencia musical titulada “THE RAPE OF THE RHAPSODY”. Nos gusta especialmente el montaje irreverente de esta secuencia musical: tras los prodigiosos cantos de los solistas, en el más puro estilo operístico, irrumpen los sonidos de una banda de jazz que sorprenden a propios y a extraños. De pronto todo es júbilo y desconcierto: Duke Ellington toca sin parar, mira a un punto fijo, en pleno éxtasis interpretativo, dirigiendo al mismo tiempo a la banda. Y lo que parecía una ópera se convierte en un musical negro con mucho swing. Y las trompetas, y los trombones, y los saxofones, y el contrabajo… toman el poder de la escena teatral. No habíamos visto nunca una confluencia de música clásica y de música moderna tan peculiar y tan convincente. este caso, del subgénero de las películas de boxeo). De este filme sólo comentaremos los números en los que intervienen al unísono Mae West y la Duke Ellington’s Orchestra, que están –y no exageramos-, en líneas generales, entre los homenajes más hermosos y honestos realizados desde el cine al jazz. De nuevo un espacio musical es la pieza clave del relato, el enclave en el que se plantea y se resuelve la trama. En el escenario del teatro-residencia “La Sensación”, regentado por un tipo mafioso y sin escrúpulos, Mae West interpreta maravillosamente varios blues del delta del Mississippi provocando la emoción de los asistentes al espectáculo. (Y, por supuesto, del que redacta este artículo en una mañana otoñal de niebla y de frío.) A Mae West –nos gusta su voz a lo Billie Holiday, no su contoneo- le piden que cante su canción preferida; ella duda durante unos segundos, pero lo tiene ya decidido: Duke Ellington –primero de espaldasy su banda arrancan, ella los sigue de inmediato con este blues: “Aquel antiguo amor. Aunque he olvidado su nombre, es curioso como a veces me vuelve al pensamiento aquel antiguo amor. Aquel antiguo amor. Mis nuevos amores me parecen tan sosos. No ha habido otro hombre más apuesto y más elegante que aquel antiguo amor. He conocido a muchos hombres fascinantes, de mirada fascinante, que me han subido la moral, pero amando, no eran más que una mala imitación de aquel antiguo amor. He olvidado su nombre, pero no volveré a ser la misma, hasta averiguar qué fue de aquel antiguo amor.” (Duke Ellington en sus memorias apunta que el blues más que tristezas “expresa el fracaso en el amor”.) En el siguiente número musical ya sí, por fin, vemos claramente a Duke Ellington, una vez más pletórico, juguetón con los miembros de su banda, y de nuevo a Mae West interpretando una pieza que habla de cómo se unió a una banda “estupenda” de un tal Handy que venía de Memphis (“aquellos morenos eran pura armonía”) y de cómo se quedó prendada de la canción “Memphis Blues”. El resto de la pieza musical es un homenaje a cada miembro de la banda, y que concluye –cómo no- con la alusión al pianista: el director nos ofrece en un leve picado, en plano general, a un Duke Ellington, sonriente por las elogiosas palabras de la solista. Otra vez más, Duke sólo habla a través del piano. Por último, hablemos de Cabin in the Sky / Una cabaña en el cielo (1943, Vincente Minnelli), otro filme basado en una pieza musical de Broadway, en la que también intervienen brevemente Duke Ellington y su banda. Del filme, una muy peculiar versión del mito de Fausto, destacamos de manera especial el elenco de personajes de raza negra, y, asimismo, su naturaleza de película coral o de personaje La segunda película, Belles of the Nineties / No es pecado (1934, Leo McCarey), es un musical escrito y protagonizado por Mae West (en el papel de Ruby Carter, “The most talked about woman in America”), con elementos procedentes del melodrama y del cine negro (en 22 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 colectivo. (Es magistral la secuencia inicial en la que una cámara en un plano grúa –no es realmente un plano secuencia- pasea a través de la iglesia, y pasa, y salta, de un personaje a otro mientras se interpreta una pieza religiosa. )“Tonight Only Duke Ellington and his Orchestra” reza el cartel de la sala de fiestas: la cámara sigue a los jóvenes desde la calle, se adentra en la sala y el maestro de jazz arranca – primero en un solo- la pieza “Going Up”; luego le sigue otro solo magistral del trombonista de la banda con un Ellington puesto en pie. De las tres películas analizadas es, sin duda alguna, la más original y curiosa, la que más nos ha sorprendido tanto por el planteamiento temático como por una puesta en escena dinámica –la cámara no para de moverse- y, sobre todo, porque no es habitual en el cine americano de principios de los cuarenta encontrar una película con predominio de actores afroamericanos. Toda una sorpresa de obligada “revisitación”. 4.1. Anatomy of a Murder / Anatomía de un asesinato. El filme Anatomía de un asesinato (1959) se ubica en la segunda etapa de la filmografía de Otto Preminger: poseedor de un estilo depurado y personal, basado en una puesta en escena de planos largos y suntuosos, un cine coral, donde el texto literario (y por tanto el actor) cobra especial importancia (era –dicen- un director durísimo, a veces muy cruel con los actores). El director vienés se convierte con el tiempo en un productor independiente de muy reconocido prestigio. En este momento, por el tema que nos ocupa, queremos detenernos en algunos momentos especialmente significativos del filme. (Despacho del abogado interpretado por James Stewart. Música de jazz con mucho swing procedente de un gramófono.) LAURA: Es usted un abogado muy raro, por la música, ¿sabe? PAUL: ¿A los abogados no les gusta la música? LAURA: No este tipo de música. PAUL: Entonces tiene razón, soy un abogado muy raro. James Stewart, en el papel de un antiguo fiscal de un apacible pueblo de Michigan, es un amante apasionado de la música jazz. Junto a los mamotretos de leyes y de juicios históricos de la historia de Estados Unidos, que pueblan sus estanterías, el personaje atesora en su apartamento una colección de discos de este estilo musical y, además, un piano que toca en sus momentos más íntimos, tomando una copa de whisky al lado de un viejo amigo. Stewart tiene fama de raro entre sus amigos, ya que no es habitual este tipo de gustos musicales entre gente de su profesión. Pero a él le apasiona el jazz. (En un momento de la película, tras hacerse cargo del caso, lo vemos en un garito tocando alegremente el piano junto al propio Duke Ellington.) Si analizamos la utilización de los aportes jazzísticos de Duke, Anatomía de un asesinato presenta dos partes claramente diferenciadas: antes del juicio y durante el proceso judicial. Pues bien, es sobre todo en la primera parte, que sirve para presentar a los personajes, y los respectivos espacios o lugares en los que se desenvuelven diariamente, y el tipo de relación existente entre ellos, donde encontramos una mayor presencia de la música y un uso más específico. Lo cierto es que la segunda parte, que quizás se haga algo larga y pesada, abarca un amplio metraje en el que apenas aparece la Fotograma de “Una cabaña en el cielo” 4. Music by Duke Ellington. En su libro de memorias Duke Ellington sólo se detiene a valorar sus aportaciones como responsable de la música en tres filmes americanos (Anatomía de un asesinato [1959], Paris Blues [1961] y Asalto al Queen Mary [1966]), además de comentar con entusiasmo su estrecha colaboración con un jovencísimo, pero ya famoso Orson Welles, en un documental inacabado titulado It’s All True. Pero estos comentarios lo hace siempre desde su condición de aficionado, o inexperto, en el mundo del cine, sin entrar en disquisiciones de tipo técnico. En las siguientes procederemos a comentar algunos aspectos del contenido y de la forma de estas tres películas, e incidiremos en las principales aportaciones de Duke Ellington. 23 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 música. Sólo al final con la resolución del juicio. Preminger y no duda en calificar esta experiencia de agradable y muy provechosa. 4.2. Paris Blues / Un día volveré. El director Martin Ritt (1920-1990) es uno de los principales representantes de la llamada “Generación de la Televisión” del cine americano. A principios de los años cincuenta, surge un grupo de jóvenes directores que más tarde se convierten –en palabras de Aguilera [2000]- “en una clase de enfants terribles de la industria cinematográfica norteamericana, que debutaron en la segunda mitad de los años cincuenta y a principios de los sesenta”. Más concretamente, Ritt pertenece a la primera promoción en la que encontramos, además, a directores como Sidney Lumet, Robert Mulligan, Delbert Mann, John Frankenheimer y Fielder Cook. Todos ellos debutan en el cine en el año 1957. (Realmente Mann lo hace dos años antes con Marty.) A partir de mediados de los años 50 las compañías productoras se encuentran en manos de actores, de directores y de productores independientes, lo que permite, entre otros aspectos, abordar en los filmes temáticas hasta entonces poco tratadas por los grandes estudios. Destacamos, de una larga lista, la Jodelle Productions de Paul Newman y Martin Ritt. Fotograma de “Anatomía de un asesinato” Ilustremos, pues, cómo se presentan los temas de Duke en el filme. Para ello analizaremos la secuencia inicial. La película arranca con acordes de trompeta al que se añaden de inmediato los sonidos de otros instrumentos (piano, saxofón, pero sobre todo de batería) para configurar una pieza musical que sugiere algo así como el inicio de un relato de misterio, de suspense. La misma música continúa in crescendo en la secuencia primera del filme, que nos ofrece un retrato cotidiano del abogado, antiguo fiscal, James Stewart: éste llega en coche a su casa con una botella de whisky para compartirla con su mejor amigo, al que llama “consejero”. La pieza musical, cuya parte final corresponde a la interpretación del piano por el propio Duke Ellington, absolutamente maravillosa, se interrumpe en el preciso momento en el que Stewart habla por teléfono. Así ocurrirá en sucesivas secuencias: esto es, la música sirve de prólogo a la historia y se difumina con la presencia del texto verbal, del diálogo: la secuencia segunda presenta a la secretaria del abogado (además, de consejera personal); la tercera, con acordes que sugieren cierto sentido erótico, relata el primer encuentro de Stewart con una sensual y arrebatadora mujer, Lee Remick (Laura); juntos visitan al marido de ésta, Ben Gazzara (teniente Manion), que está en la cárcel acusado de asesinar al dueño de un bar tras violar a su esposa. Después vendrá la parte del largo y brillante juicio en el que James Stewart se enfrenta al fiscal, interpretado por George C. Scott, y consigue la absolución de su cliente. Pero ésta ya es otra película. (Por cierto, no todas las escenas de la primera parte tienen apoyatura musical. Véase, a este respecto, la secuencia magistral en la que el abogado y su “consejero” discuten sobre las dificultades de este caso, y mientras tanto se comen unos huevos cocidos de manera parsimoniosa.) Duke Ellington se extiende en sus memorias a la hora de valorar su aportación al filme de La película Paris blues [1961] está localizada en la primera etapa de la larga e irregular filmografía del director neoyorquino, “un cineasta –dice Aguilera- con vocación de sindicalista”. De su biografía destacamos, en primer lugar, su labor como docente en el Actors Studios, de Elia Kazan, Cheryl Lawford y Lee Strasberg. Una vez superados sus problemas con el Comité de Actividades Antinorteamericanas –el director aparece en una lista no oficial que comprende unos doscientos nombres-, Ritt debuta en 1957 como director de cine con el drama psicológico Donde la ciudad termina; a continuación, entre 1958 y 1964, colabora estrechamente con el actor Paul Newman en una serie películas de corte muy realista (algo, por otra parte, que no abandonaría del todo a lo largo de su carrera llena de títulos comprometidos): The Long Hot Summer / El largo y cálido verano (1958), Paris Blues / un día volveré (1961), Hemingway’s Adventure of a Young Man / Cuando se tienen veinte años (1962), Hud / Hud, el más salvaje entre mil (1963) The Outrage / Cuatro confesiones (1964) y Hombre / Un hombre (1967). En 1960 Duke Ellington se establece en París para componer la música de Paris Blues. El contrato con la productora MGM le obligaba a estar doce semanas en la capital francesa, pero 24 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Creemos que el filme está lleno de homenajes más o menos explícitos al mundo del jazz. Para el tema de la labor ardua y no siempre satisfactoria del compositor musical, Ritt y su guionista quizás estuvieran pensando en el propio Duke Ellington, responsable desde sus inicios de la mayor parte del repertorio de sus numerosas bandas de jazz. Más aún, sería un homenaje a la pareja Duke Ellington - Billy Strayhorn. Por otra parte, está el homenaje a una de las grandes figuras de la historia del jazz, Louis Armstrong, que interpreta a un exitoso trompetista llamado Wild Man Mooer que llega a Paris para dar unos conciertos. En realidad, sólo tiene dos escenas en todo el filme, y no destaca precisamente por su interpretación; la segunda escena desarrolla una jam sesión memorable en la que Armstrong reta primero a Poitier (saxo), luego al Gitano (un guitarrista en clarísimo homenaje, otro más, a Django Reinhardt, pero también a tantos genios del jazz que lamentablemente estuvieron enganchados a la heroína, como Charlie Parker, John Coltrane o Miles Davis y tantos otros), y, por último, a Newman (trombón). A propósito de la relación entre el Gitano y Sam, que desarrolla el filme en términos de solidaridad, amistad y complicidad profesional, recordamos ahora unas palabras de Ellington harto elocuentes: “Entre los que Billy Strayhorn, su más fiel y estrecho colaborador desde 1939, le representó durante las cuatro primeras semanas de rodaje: “Para él, encontrarse en París con un encargo así era comparable al champán y el caviar, o a la tarta y el helado, si lo preferís.” Paris Blues es, ante todo, una película metamusical, esto es, un filme en el que se narra la vida cotidiana de un sexteto de jazz (contrabajo, piano, saxo, guitarra, batería, trombón) y que, además, y de manera simultánea, como trataremos de explicar, reflexiona sobre el arte de la composición musical. El primer aspecto está presente ya en el mismo prólogo del filme: asistimos a una escena de comunicación absoluta entre público y músicos, una felicidad generalizada (con una puesta en escena basada sobre todo en primeros planos) gracias a la interpretación de una pieza musical con mucho swing del repertorio musical ellingtoniano. De inmediato, finalizados los títulos de crédito, nos encontramos con la primera de las numerosísimas disquisiciones sobre la composición musical. La secuencia primera nos recuerda muchísimo a algunos filmes de Alfred Hitchcock que se abrían con una panorámica general de la ciudad (en este caso ofrece los tejados de París con la Torre Eiffel al fondo), un plano largo descriptivo con un ritmo muy ralentizado, y un plano grúa que desciende hasta la entrada del club de jazz en el que ya de mañana, sin haber dormido nada, Sam compone música (Paul Newman), y su compañero de grupo Edi (Sidney Poitier) comenta y arregla la melodía. Sam representa al músico de jazz insatisfecho, un creador en busca del sonido perfecto, de la pieza que sublime su conocimiento de la música. Veamos, a este respecto, un diálogo muy significativo entre los dos personajes: vienen a mi mente como ciudadanos de París se encuentra Django Reinhardt, que fue un amigo mío muy querido y al que considero como uno de los pocos artistas inimitables de nuestra música. Django me acompañó en una gira de conciertos en 1946, de forma que pude disfrutar más que nunca de su compañía.” (pág. 172) SAM: ¿Qué te parece? EDI: Sabes cómo voy a instrumentar esta parte, para Owen. Repítelo otra vez. SAM: Pero qué opinas. EDI: Que aligerará la melodía y producirá efecto. SAM: Bueno, di algo. EDI: Es buena. (Con tono resignado y muy serio.) SAM: Solo buena. EDI: Es mejor que mala. SAM: Pero no crees que valga la pena, ¿eh? EDI: No he dicho eso. SAM: Has dicho que la melodía es pesada. EDI: Tampoco he dicho eso… Está bien, vamos a dejarlo, estamos demasiado cansados. SAM: Si no te gusta, por qué no lo confiesas. EDI: Me gusta tu música, me gusta muchísimo. Fotograma de “Paris Blues”. Pero, además de la música, en el filme que nos ocupa se trata con profundidad el problema racial en la sociedad americana y la necesidad 25 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 de una “lucha social” y de un compromiso desde dentro y por la propia población afroamericana. Ritt, que según Aguilera, “siempre fue un luchador en contra de las desigualdades sociales y raciales”, desarrolla estos contenidos en varias secuencias protagonizadas por los amantes afroamericanos: la turista americana representa el compromiso, mientras que el saxofonista simboliza el exilio del artista descreído y falto de ilusiones. Un ejemplo claro de lo que los críticos llaman perspectivismo narrativo. (Lamentablemente, Christian Aguilera deja fuera de su amplio análisis de la filmografía de Martin Ritt la película Paris Blues.) Pero, para nosotros, la secuencia clave del filme, en lo que se refiere a los aportes musicales de Ellington y a su funcionalidad en el desarrollo de la historia planteada por los guionistas, es sin lugar a dudas la tercera. En un primer momento, antes de que comience el concierto, asistimos a un ensayo de la sección rítmica del sexteto de Sam. El guitarrista del grupo tiene problemas para conseguir sus dosis de droga y Sam acude a su auxilio. (En adelante se convertirá en su ángel de la guarda, en su protector y en su conciencia.) Pues bien, para estos momentos más intimistas del filme, los conciertos en los que los músicos interpretan jazz para un público selecto, muy reducido, Ellington ha recurrido a sus piezas más famosas (las llamaremos “de cámara”), como por ejemplo “Mood Indigo”. Y los guionistas y el director se prodigan en el empleo del travelling y de los primeros planos, en uno y otro caso para mostrar caras radiantes de felicidad y de éxtasis por la música que escuchan. (No nos hemos recuperado aún del primer plano de Joanne Woodward, mujer de Paul Newman en la vida real, que en el filme de Ritt interpreta a una turista americana que acude su primera noche en París al club de jazz donde toca Sam y se enamora de éste de manera inmediata. ¡Qué siete segundos de placer!) Finalizado el concierto de jazz, en una escena nocturna memorable, Edi y Sam pasean por las calles de París en compañía de las dos hermosas turistas americanas, con las que por cierto terminaran intimando. Para estos momentos Ellington ha elegido como fondo musical unas melodías más orquestales, concebidas para ser interpretadas por una big band y no tanto por un grupo pequeño. Un sonido con mucho swing que recuerda al jazz de Chicago o al de Kansas City. Más adelante, en otra secuencia antológica, Newman y Woodward pasean por la ribera del Sena, con este fondo jazzístico, entre arrumacos y muestras de amor. Newman y Woodward despiertan después de una noche muy especial. (Ella lo considera un amante muy “especial” por ese magnetismo que irradia a su alrededor.) Sam da muestras aún de su carácter introvertido y difícil, casi huraño, y no muestra especial interés por hablarle a su amante americana de su pieza “Paris Blues” en la que últimamente está trabajando. Sobresalen en esta escena las palabras en las que Sam manifiesta su pasión por la música. Por cierto, este mismo amor y este respeto por la música en general, y por el jazz en particular, es el leit motiv central de las memorias de Ellington. No queremos concluir el comentario y reseña de este filme sin antes destacar la labor del responsable del diseño artístico por haber sabido ambientar de manera tan convincente el club de jazz en el que cada noche actúa el quinteto de Sam (Paul Newman). Mientras los músicos tocan, la cámara de Martin Ritt, en frecuentes travellings y planos largos, muestra cada rincón del garito parisino, y se detiene para mostrar las caras felices de los amantes del jazz. 4.3. Assault on a Queen Mary / Asalto al “Quen Mary”. Lo decimos sin tapujos: Asalto al Queen Mary (1966) no es un filme interesante, no percibimos la labor del director, un tal Jack Donohue, de quien poco o nada sabemos, la interpretación de los actores aburre en demasía (incluso el propio Frank Sinatra), y, en fin, el uso de la música en la película responde a criterios muy manidos, muy convencionales. Básicamente, con ella se pretenden subrayar ciertos momentos importantes de esta historia de “piratas” modernos, un grupo de aventureros que primero quieren rescatar de las profundidades del océano un submarino alemán, y, después, utilizarlo para secuestrar y robar el trasatlántico QUEEN MARY. Así, por ejemplo, los acordes de jazz – muchas veces sorprendentemente imperceptibles- surgen cuando Sinatra, que interpreta a un ex militar, teniente buceador, sumergido en el mar no termina de lograr su objetivo de reflotar el submarino. La música in crescendo crea el suspense que no consigue por sí misma la historia. Además, el filme desarrolla una historia de amor entre el teniente (Sinatra) y una atractiva y seductora italiana (Virna Lisi), cuyo dinero sirve para sufragar esta increíble aventura. El empleo de la música en este caso –concretamente, en tres secuencias- responde a tópicos muy evidentes: un jazz dulce, muy melódico, ambienta las escenas románticas en las que los amantes, tras contarse recíprocamente sus respectivas vidas, tras analizar las ventajas y las dificultades de esta aventura marítima, se funden en un abrazo (el beso se nos niega). En un hermoso poema titulado “¿Qué es la 26 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 música?” el propio Duke Ellington ha señalado: se hubiera implicado lo suficiente ante una historia tan inverosímil y previsible. La música puede dictar estados de ánimo,/ puede inquietar o serenar,/ subyugar, fatigar, anonadar el corazón. 5. The End. En su conjunto la música preparada por Ellington para este anodino e irregular filme de Jack Donohue es orquestal. No hay aquí, a diferencia de Paris Blues, temas interpretados por una sección rítmica o por un quinteto o sexteto. Es el típico jazz concebido para una big band. En esta época de culto al ego, en donde proliferan los premios y el arribismo asoma por doquier, nos llama poderosamente la atención la humildad y la generosidad de uno de los mejores músicos de jazz, Edward Kennedy Ellington, ante todo, como reconoce él en sus memorias, un profesional que trabajó toda su vida por y para la música. A Duke Ellington le honra el hecho de asumir su condición de artesano en el cine, un arte que, como afirmábamos al principio, es simplemente “global”: en él confluyen los aportes de personas de diferentes oficios e intereses muy diversos. En los párrafos de este artículo está implícito mi más sincero aprecio por la aportación del pueblo norteamericano a la cultura contemporánea a través del cine y del jazz. Un país, Estados Unidos, en otros aspectos muy tradicional, excesivamente ensimismado en sus ideales y en valores cuestionables, que ha crecido y que se ha afianzado, a mi juicio, con individuos muy grandes, como por ejemplo el compositor y pianista Duke Ellington. Sinceramente, no entiendo la vida sin el cine de John Ford o el de Orson Welles, sin la música de John Coltrane o la de Bill Evans. Soy feliz porque una mañana cualquiera, al levantarme, me esté esperando una novela de Philip Roth o de Paul Auster. Soy dichoso porque muy cerca puedo tener siempre a mi amigo Jack Daniel’s, si es posible escuchando con mis amigos “Money Jungle” de Duke Ellington, Charlie Mingus y Max Roach. Duke Ellington se extiende en sus memorias en el momento de explicar el proceso creativo de la banda sonora de Asalto al Queen Mary. Cuando le hicieron el encargo, el rodaje ya había concluido. Es Frank Sinatra quien lo llama a Las Vegas para indicarle qué música quiere y con qué fines: “En el momento en que abrimos la BIBLIOGRAFÍA AGUILERA, Christian: La Generación de la Televisión. La conciencia liberal del cine americano, Editorial 2001, 2000. caja fuerte que hay en el barco, quiero que la música suene A TOPE”. Ellington se siente muy ELLINGTON, Edward: Duke Ellington. La música es mi amante [1973], traducción de Antonio Padilla, Barcelona, Global Rhythm, 2009. orgulloso del trabajo de sus músicos –por ejemplo, nos ilustra cómo ambientó una escena de persecución con música de clarinete-, de haber sido capaz de aumentar el grupo con unos catorce músicos de Hollywood, gente como Bud Shank y Buddy Colette. “El resultado- afirma GINER, Juan, SARDÀ, Joan y VÁZQUEZ, Enric: Guía universal del jazz moderno, Barcelona, Ma Non Troppo, 2006. Duke- fue tremendo”. Lamentamos discrepar de la opinión del maestro. Nos queda, más bien, la sensación de que los productores no han aprovechado la genialidad de Ellington para crear una auténtica banda sonora, o que, simplemente, “Duke” no Villarrubia de los Ojos – Ciudad Real, julio – diciembre, 2009. 27 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 HUMOR 28 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ENSAYO LA MUJER EN LA SOCIEDAD Fabián Martínez Redondo Siempre se ha mencionado el comportamiento del hombre, en su conjunto, como nombre genérico de la sociedad, sin que aparezca el papel que la mujer ejerce en nuestra civilización como elemento fundamental de la misma, por lo que hago ahora una pequeña referencia, de la vida que llevaba hasta las décadas centrales del siglo XX. A lo largo de la historia, a la mujer se la ha considerado como un personaje útil en la casa, con unos derechos y deberes exclusivamente con fines maternales al servicio de la conservación y propagación del linaje humano, como salvaguarda de una descendencia. Además debía ser buena esposa, buen ama de casa y trabajadora infatigable en las tareas del hogar. La mujer, como madre, daba a luz en casa, y el parto era un acontecimiento muy peligroso, debido a que cualquier complicación era tratada con remedios caseros, que remediaban muy poco. Una pequeña infección en el parto podía tener complicaciones y consecuencias fatales. La parturienta que necesitaba una cesárea casi siempre moría sin remedio. Las complicaciones post-parto se llevaban por delante a un buen número de mujeres. La fiebre puerperal era muchas veces mortal, y se consideraba que su vida estaba en peligro hasta que no pasaba la cuarentena. La vida de la mujer, incluso de la señora burguesa, resultaba muy dura. Su principal función parece que era parir, darle al marido un gran número de hijos con peligro de su vida, como ya he dicho. La fisiología femenina era prácticamente desconocida para la medicina de la época. La propia menstruación era un fenómeno mal conocido, y a nivel popular el desconocimiento adquiría proporciones monstruosas, y no era extraño que en un alarde de especulación fisiológico-moral, se relacionara con desórdenes de conducta, deseos pecaminosos, etc. Las jovencitas, por su puesto, no recibían ninguna información sobre el asunto. Los muchos hijos y las largas lactancias la envejecían rápidamente. En la mujer los 30 años marcaban el final de la juventud y el comienzo de la madurez. La edad crítica se situaba entre los 35 y 40 años. A partir de los 45 años se tenía conciencia de vieja. Naturalmente había muchas diferencias según las clases sociales, pero en líneas generales la segunda mitad de los cuarenta se consideraba más período de decadencia que época de plenitud o madurez vital. La mujer como madre, ha venido transmitiendo a sus hijas, de generación en generación, las tareas propias del hogar; como la de lavar, barrer y limpiar, planchar la ropa y coser, y, además de enseñarles a cocinar, les ha enseñado a hacer sus prendas de vestir. La habían educado en la sumisión y en la pasividad, y su formación estaba encauzada en la recta moral y en la religión. La chica decente tenía como objetivo que le saliera un novio, que constituía su aspiración fundamental. En este aspecto, como en tantos otros, debe dejarse aconsejar por su madre, pues, el amor de madre es eterno, no conoce límites, y ella es la que primero debía ver si conviene o no el pretendiente de su hija. La posición social y su posible aportación al matrimonio resultaba determinante. A este respecto, en la clase media alta y burguesa, para sus hijas, mentalmente circulaban las condiciones que debía reunir tal pretendiente, pues cuando tenían de 15 a 20 años se decía: el que venga que tenga y que convenga, si no que no venga; de 20 a 25 años se decía: que venga, que tenga y que convenga; de 25 a 30 años, se decía: que venga aunque no tenga ni convenga, pero que venga. Esto último era por el temor a quedarse solteras cuando pasaban de los 30. El tiempo de ocio que tenían lo dedicaban a hacer tareas de costura, jerséis de lana o puntillas, que en los días soleados de primavera y otoño por las tardes salían a realizarlas a las puertas de las casas o en las esquinas, donde daba el sol, donde se reunían familiarmente varias vecinas; reuniones que les servían para charlar de los acontecimientos cotidianos surgidos en el entorno más inmediato, para alabar o criticar el comportamiento de alguien. Costumbre que ya se ha perdido, por lo que ya no existe aquella familiaridad. Quisiera resaltar aquí una frase, de autor anónimo, que dice: "El hogar no se construye sobre el suelo, sino sobre la mujer". Creo que esta frase, por sí sola, dice todo sobre el papel preponderante de la mujer en la sociedad. Además la mujer es fuente de vida, nos ha traído al mundo, son signo de admiración; a nuestras madres le debemos nuestra existencia. 29 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ENSAYO REALIDAD Y CURIOSIDADES QUE TRASCIENDEN Francisco J. Serrano López A lo largo de la vida ¿cuántas vivencias, realidades anécdotas y curiosidades han trascendido en las personas, enriqueciéndolas en todas sus facetas? Sí han sabido coger de ellas su lado positivo aunque como es sabido han existido y existen intelectuales que aprovechan su estatus humillante hacia los demás, a gentes de mediana y baja cultura, pero con una superior escala de valores que es lo que verdaderamente prima en el ser humano. Cada uno con su aplicada sabiduría o manera de conocer, aprender y exponer las cosas. Lo que en este espacio se escribe no trata sobre un artículo determinado, crónica o editorial, sino una serie de historias extraídas de los libros y posteriormente argumentadas. Porque absolutamente todo está en ellos, sólo se trata de ser un modesto e incansable lector sobre todo de la historia, que es una novela que existió en realidad. Carlos Fisas, un infatigable estudioso de la historia, conferenciante de singulares dotes en universidades y centros culturales de toda Europa y colaborador durante varias décadas, con el número uno de la radio, Luis del Olmo, contaba entre sus miles de anécdotas: Terminaba un día mi intervención en Radio Nacional de España, cuando del auditorio (las emisiones eran públicas) se levantó un señor que vino a mi encuentro – quería saludarle – me dijo, - porque encuentro maravillosas sus intervenciones. Son extraordinarias, pero me gustaría saber algo ¿De dónde saca usted esas cosas? – De los libros – respondí, y él, desilusionado, contestó – así cualquiera -. Y tenía razón el buen hombre, así cualquiera, cualquiera que tenga el vicio como yo de leer, está al alcance de todo el mundo. Lo difícil para mí sería no poder leer, pasar un día sin lectura, leer y releer es mi mayor distracción, mi mayor afición, por ello lo que hago, digo y escribo. No tiene más valor que el de haber escogido, y así lo deseo, algo que interese al oyente primero y ahora a ti lector y amigo. Y basándonos en esta filosofía de contar cosas, penetramos con el examen o análisis de un asunto de apellido Fleming. Era un pobre granjero escocés. Un día oyó un grito que venía de una ciénaga, corrió allí aterrorizado, atascado en el fango hasta la cintura. Estaba un niño tratando de liberarse. El granjero lo salvó de una terrible muerte. Al día siguiente un vistoso carruaje se acercó al solitario lugar del escocés. Un hombre elegante y de aristocrático aspecto salió de él y se presentó como el padre del niño salvado. Quiero pagarle por haber salvado a mi hijo – No puedo aceptar un pago por lo que hice – dijo el granjero en el momento que llegaba su hijo a la puerta de su pobre casita. Te hago un trato – continuó el noble – déjame que yo me ocupe de tu hijo, que tenga la misma educación que tendrá el mío. Si el chico es como su padre no hay duda de que será un hombre del que ambos estaremos orgullosos -. Así se hizo, el hijo del granjero estudió medicina en Londres y llegó a ser conocido en el mundo entero como Sir Alexander Fleming, el inventor de la penicilina. El chico salvado sería con el tiempo Sir Winston Churchill. Alexander Fleming Con la llegada de las primeras heladas, diciembre era el mes idóneo para desarrollar las familiares y festivas matanzas del animal mejor aprovechado que existe sobre la tierra. Costumbre ya en extinción, del cual existe un famoso dicho que dice “del cerdo gustan hasta los andares”. Dichos andares son la consecuencia del flaquear de los brazuelos por lo que no pueden asentar las manos con igualdad. También es conocido gracias a la 30 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 riqueza del castellano, por otros sinónimos como cochino, marrano, gorrino, puerco, guarro… toda una contradicción ante tanto insulto y su posterior utilidad gastronómica, aunque a los porcinos les puede quedar el consuelo que en el ser humano existen en gran porcentaje de seres desaliñados, sucios y groseros sin cortesía ni crianza. Solía ser en fin de semana, cuando desde las primeras horas de la madrugada el gruñido de los cerdos se convertía en un orquestal lamento de muerte. Existe una fábula del asno y del cochino creada por el cronista Félix María de Samaniego, que relata la siguiente historia: Envidiando la suerte del cochino, un asno maldecía su destino – yo trabajo – decía – y como paja, él come harina y berza y no trabaja. A mí me dan de palos cada día, a él le rascan y halagan a porfía. – Pero luego que advierte que a la pocilga, alguna gente avanza armada de cuchillo y de caldero y que con maña fiera dan al gordo cochino fin sangriento, dijo entre sí el jumento – Si en esto acaba el ocio y los regalos, al trabajo me atengo y a los palos -. El creciente abandono en los estudios de los jóvenes nacionales ha disparado el fracaso escolar. La comunidad escolar se pregunta si aumentar la permanencia a los 18 años resolvería de veras o sólo estadísticamente. El fracaso en la ESO y el abandono educativo rondan el 25-30%. Las pellas o novillos están a la orden del día. Existen en poblaciones importantes patrulla exclusivas de policía local para controlar e informar a las familias de las andanzas de sus hijos. Aquella madre despertó a su hijo a las 7 de la mañana – no quiero ir al colegio – pero hijo mío – le dice la madre muy comprensiva – ¡tienes que ir! – ¡no, no y no, no voy a ir al colegio! ¡Me da mucho miedo ir! mamá, no quiero ir! – Pero hijo mío, nunca quieres ir al colegio, ¡todos los días estamos con lo mismo! ¿Qué está pasando? ¿Por qué no quieres ir al colegio? – Porque los niños me tiran tizas, me roban cosas de mi mesa, se meten conmigo y me insultan – solloza – ¡y se burlan de mí, los maestros también me maltratan! ¡No quiero ir mamá! – Mira hijo – se pone firme la madre – ¡esto no puede continuar así! Tienes que ir al colegio por cuatro razones. La primera precisamente para enfrentarte a ese miedo que te acosa y superarlo. La segunda porque es tu responsabilidad y lo exige tu autoestima. La tercera porque ya tienes cuarenta y cinco años y la cuarta porque ¡tú eres el director! Hay palabras, locuciones o signos externos que cuando las expresamos conllevan un significado originario y que nos gustaría conocerlo. “¡Estar en Babia!”: Esta expresión hace referencia a aquella persona que está distraída o que parece ausente cuando se le requiere concentración. Babia es una comarca de la provincia de León que los antiguos reyes de León eligieron como punto de reposo, particularmente para alejarse de los problemas de la corte, siempre complicada con las intrigas palaciegas de los nobles. Los reyes aprovechaban las bondades del lugar para “desentenderse de su ardua tarea”. Estas ausencias del rey motivaban la inquietud de los súbditos, a quienes, cuando preguntaban por él se les respondía Una de las escenas características y a la vez macabras, puesto que se participaba de lo feo y repulsivo de la muerte, era la de invitarlo a morir mediante el engaño. En la puerta de la gorrinera con el cubo de cebada como reclamo y el material al lado con el gancho a punto de clavarlo en la papada. De aquí nace una de las expresiones características del villarrubiero “¡no me encebes!”, rechazando engaño o camelo de todo tipo. A cada cerdo le llega su San Martín, este dicho popular que se aplica a cochinos y a humanos, anuncia la fecha del 11 de enero como límite de las matanzas. El cerdo fue la despensa de las zonas rurales. Del cerdo se aprovecha todo y durante mucho tiempo fue reserva de proteínas. Los orígenes de la matanza, parecen remontarse al siglo XV y son los moriscos quienes potencian esos festejos. Tal vez para confirmar su conversión al cristianismo. El pimentón, polvo que se obtiene moliendo pimientos encarnados o secos, tamizado el polvo se usa principalmente como condimento para confeccionar adobos y como elemento conservador en la fabricación de embuchados. Precisamente porque el pimentón es fundamental en la matanza, se cree que esta práctica es posterior al descubrimiento de América. De allí trajimos esta especie. Si usted ha conocido lo que es una matanza casera querrá volver cada San Martín, los cochinos no. 31 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 evasivamente que el rey “estaba en Babia”. La expresión se hizo coloquial y pasó al lenguaje común para significar toda disposición de ánimo desentendida. También puede ser equiparable a “Estar en el limbo”. Se dice que es el lugar donde las almas de los justos del antiguo testamento. Esperaban redención del género humano, o el lugar donde van las almas de los que antes del uso de razón mueren sin bautismo. De manera más vulgar se puede definir como que el Limbo es la estancia situada entre el cielo y el infierno, existente desde la época de San Agustín 354-430. El Limbo era el sitio donde iban a parar los justos y los niños sin bautizar. Un lugar neutro para descansar toda la eternidad, ni brutal como el infierno, ni gozoso como el cielo. Una cavidad entre dos luces, sin frío ni calor, sin pena ni gloria. “Darla con queso”. El origen de esta popular expresión es muy antiguo. Ya desde la Edad Media los bodegueros manchegos eran famosos por vender vino de gran calidad. Taberneros de toda España se desplazaban a esa región para comparar vinos. Antes de pagar tenían la costumbre de probar el género. Para disimular el posible sabor a vino picado, los bodegueros ofrecían al comprador queso en aceite. El fuerte y delicioso sabor del queso manchego hacía más difícil poder distinguir un vino malo de uno bueno. “Muchos humos”. Usamos esta expresión para describir la actitud arrogante y presuntuosa de una persona que se da mucha importancia. Parece que viene nada menos que del tiempo de los romanos. Entre ellos existía la costumbre de adornar el atrio de las viviendas con bustos y retratos de toda ascendencia, con el objeto de demostrar la longitud y la importancia de su linaje. Ante estos objetos a veces se encendían fuegos o se quemaba incienso y por ello, por efecto del humo y del paso del tiempo adquirían una coloración oscura de las que los habitantes de la casa solían estar orgullosos. Tal suciedad se convertía en señal de rancio abolengo, así que a más humos más estatuas tiznadas. Pero los “humos” no son cosa de aquellos tiempos, hoy en día algunas personas también tienen muchos, sobre todo los salidos del mundo del ladrillo, sobrados de prepotencia y arrogancia. Damos paso a un poco de humor, puesto que hay disposición de ánimo para ello, bien con anécdotas reales o a través del relato falso, ficción en que se encumbre una verdad, como puede ser la contada fábula en este artículo del asno y el cerdo. Una llamativa rubia entró en aquel banco de Nueva York y preguntó por el departamento de créditos, explicó que se iba a Europa para dos semanas y que necesitaba un crédito de 5000 dólares. Le pidieron algún aval o señal para la operación. La rubia puso sobre la mesa las llaves de un Rolls Royce nuevecito que estaba aparcado a la puerta del banco. Todo estaba en regla y el banco aceptó la garantía. Un empleado condujo el Rolls al parking subterráneo del edificio, mientras los bancarios se reían de la rubia que había usado un Rolls de 250000 dólares como garantía de un crédito de 5000. Dos semanas más tarde volvió la rubia, devolvió la cantidad de 5000 dólares y pagó los intereses que ascendían a 15 dólares con 50 céntimos. – ¿Puedo preguntarle una cosa? – Le dijo el gestor de los créditos – estamos un poco sorprendidos. Hemos sabido que usted es multimillonaria y lo que no entendemos es como es que usted se ha molestado en pedir un crédito de 5000 dólares… - ¿Y en qué otro sitio del centro de Nueva York puedo aparcar durante dos semanas por sólo 15’50 dólares y encontrar el coche en su sitio a mi vuelta? El general Juan Vicente Gómez fue famoso en América Central. El jefe civil de un pueblecito del interior se le fue a quejar de que le había nombrado un secretario que no sabía leer. - Y usted ¿sabe leer? – Preguntó el general – yo sí, mi general. – Pues entonces – dictaminó Gómez en tono salomónico – póngalo a él de jefe civil y usted se pone de secretario. Emilio Arrieta, el insigne autor de la obra musical Marina, falleció en febrero de 1894. La noche antes de morir bromeaba con los amigos y discípulos que sabedores de la gravedad en que el ilustre músico se encontraba rodeaban su lecho. – Maestro ¿Cómo se encuentra? – preguntó pesaroso un recién llegado – Muy mal, muchacho, muy mal – dijo el músico – Tan mal me encuentro que si al amanecer me dicen que he muerto no me chocará nada. Emilio Arrieta 32 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 El gran torero cordobés Guerrita tenía fama de valentísimo y lleno de seriedad cordobesa. Guerrita se hizo rico en los toros, pero era casi analfabeto, lo que se le notaba cuando hablaba y más cuando escribía. En cierta ocasión alguien le preguntó: - Maestro ¿Qué hay que tener para ser un gran torero? – a lo que Guerrita contestó secamente – Echarle al toro las tres “bes” – ¿y qué quiere decir con las tres “bes” maestro? – Pues muy sencillo – contestó – “Boluntad”, “balor” y “buebos”. Se encuentran volando en un avión el profesor de aviación y el alumno que quiere aprender a pilotar – supongamos – pregunta el profesor que estás pilotando el avión y se produce una tormenta que con su fuerza arranca un motor al aparato. ¿Qué harías? – Sigo pilotando el avión con el otro motor – responde el alumno. – Muy bien, pero, si otra tormenta arranca el otro motor, ¿que harías? – Seguiría con el tercer motor – contesta impertérrito el alumno – Muy bien, pero llega otra tormenta y te arranca el tercer y cuarto motor – el profesor se impacienta - ¿Qué harías? – Seguiría con el quinto – Pero ¿de dónde sacas tú tantos motores? – A lo que responde el alumno – ¿Y de dónde sacas tú tantas tormentas? Se cuenta que en un lugar, un grupo de gente se divertía con el tonto del pueblo, un pobre infeliz de poca inteligencia que vivía de pequeñas chapuzas y de limosnas. Diariamente llamaban al idiota al bar donde se reunían y le ofrecían escoger entre el billete de 20 euros y una moneda de dos, y él siempre escogía la moneda menos valiosa, pero más bonita y brillante. Lo que era motivo de risas para todos. Cierto día, uno de los miembros del grupo le llamó y le preguntó si todavía no se había dado cuenta de que la moneda valía menos, bastante menos que el billete de papel. – Lo sé – respondió – no soy tan bobo. La moneda vale bastante menos pero el día que escoja el billete el jueguito acaba y ya no voy a ganar más una moneda. Se pueden sacar varias conclusiones de esta pequeña historia: 1) Quien parece idiota, no siempre lo es. 2) ¿Cuáles son los verdaderos idiotas de la historia? 3) Si tú fueses ambicioso ¿acabarías cortando tu fuente de ingresos? El mayor placer de una persona inteligente es aparentar ser idiota, delante de un idiota que aparenta ser inteligente. Terminamos con algo simpático, con algo parecido a un decálogo, sobre las diferentes maneras de ver las cosas, enjuiciadas por distintas clases sociales, sobre todo de tiempos ancestrales. Los ricos van a la peluquería, los pobres a la barbería. Los ricos se embriagan, los pobres se emborrachan. Los ricos hurtan, los pobres roban. Los ricos tienen bebés, los pobres hijos. Los ricos van al colegio, los pobres a la escuela. Los ricos contrastan pareceres, los pobres discuten. Los ricos tienen labios, los pobres morros. Los ricos tienen water, los pobres retrete. Los ricos tienen amante, los pobres querida. Los ricos miran, los pobres trabajan. Los ricos se mueren y los pobres también. Por lo tanto la igualdad solo existe al nacer y morir. Felices Pascuas y hasta el próximo número. 33 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ACTUALIDAD INCULCAR EN EL SISTEMA EDUCATIVO EL HÁBITO DE LA LECTURA, ES LA ÚNICA FORMA DE ERRADICAR LA FALTA DE INTERÉS POR LOS LIBROS Cirilo Manzanares Barchino Los informes son determinantes: la mitad de los españoles que saben leer no leen libros. Los principales problemas son la televisión, la falta de comprensión lectora y la poca motivación del sistema educativo, a juicio de alumnos, profesores y editores. Los españoles leemos poco, nos lo repiten continuamente a través de estadísticas, informes, etc…; leemos mucho menos de lo que corresponde a nuestro índice de renta; y ello se aplica tanto a libros como a periódicos, y que en Europa sólo los griegos y portugueses nos superan en aversión a la letra. Educadores, padres, políticos… siempre recomendándonos que reparemos en nuestros malos hábitos, pero nunca se nos ha planteado seriamente los dos problemas prácticos que el bajo índice de lectura ofrece: en primer lugar qué tiene de malo el leer poco; y en segundo lugar, y suponiendo que el leer no sea malo, cómo se corrige eso. Se acostumbra a dar por sentado que se debe leer, pero casi nunca se nos explica por qué. Y por consiguiente siempre nos queda la duda: si no se lee habrá que argumentar razones: ¿Podrían ser estas?... - Se vive en un mundo en que las alternativas a leer son cada vez más numerosas: electrónica e informática nos ponen al alcance de la mano medios de comunicación modernos y eficientes. - La lectura parece una actividad anticuada. - Los libros son objetos arcaicos. - Los libros son ecológicamente incorrectos: la fabricación de papel amenaza las reservas forestales. - Una imagen vale más que mil palabras: la Historia puede aprenderse mejor viendo una película histórica; ¿por qué voy a leer una novela, cuando puedo ver en menos tiempo una película?; ¿por qué leer el periódico cuando puedo ver las noticias televisadas? - España ha crecido en los últimos años sin cambiar sus hábitos iletrados. A primera vista parece ser que hay suficientes argumentos a favor del rechazo a la letra escrita: Los que no leen, creo que defenderán tales argumentos o, sencillamente: no leen, sin plantearse los supuestos anteriormente mencionados. Pero, sinceramente, creo que hay que profundizar para ver las cosas de otro modo. Lo primero que parece sospechoso es que los países más adelantados tengan los más altos índices de lectura. Habría que preguntarse, si leen porque son ricos o, son ricos porque leen. Leer es un placer que requiere un nivel de bienestar previo. Pero no es sólo eso; desde un punto de vista práctico, leer tiene dos vertientes: la lúdica y la productiva. En términos económicos, es un acto de consumo, pero también de inversión. LO IMPORTANTE AQUÍ ES QUE LEYENDO, INCLUSO CUANDO NOS DIVERTIMOS, APRENDEMOS. Se puede asegurar, que leyendo, una palabra vale más que mil imágenes. Es nuestra imaginación la que realmente trabaja y la que “da vida” a lo que se lee; en las películas, todo nos viene dado e impuesto. Comparado con la pantalla, el libro requiere un esfuerzo intelectual que pocos están dispuestos a hacer, pero es un esfuerzo tremendamente formativo, sobre todo en la infancia y en la adolescencia, porque la lectura nos hace reflexivos y racionales, nos enseña a escribir, nos enseña a pasar por el filtro de la crítica y de la observación cualquier circunstancia o hecho que se produzca a nuestro alrededor. Y un argumento más en defensa de la lectura, sería el defender el libro ante los avances tecnológicos; difícilmente estos últimos podrán sustituir al libro. Primero porque las alternativas al libro son malas y caras; y en segundo lugar, el dominio y comprensión de la palabra escrita distinguirá a aquellos países capaces de mantener el liderazgo económico, y de mejorar el nivel de vida de sus habitantes, de aquellos países que irán a remolque de los demás. Por todo ello, ¿qué se debe hacer para estimular el hábito de leer? Algo muy sencillo en teoría, pero dificilísimo en la práctica: mejorar el nivel educativo en las escuelas, institutos y universidades, inculcando seriamente el hábito de estudio y la formación de criterio independiente. Se requerirán muchos años, esfuerzo y paciencia. Villarta de San Juan, octubre de 2009 34 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ACTUALIDAD DE LAS TABLAS DE DAIMIEL O COMO HACER POLÍTICA DE AGUAS CON UN PARQUE NACIONAL (Cuaderno de campo. 26 de noviembre de 2009) Carlos Villanueva Fernández-Bravo Recorrido por el camino de Griñón a Molemocho, margen derecho del río Guadiana. Cinco perforadoras buscando agua en las inmediaciones de Molemocho, unas 500 grullas vuelan sobre un Guadiana humeante, trabajadores en el antiguo molino de Molemocho rehacen el viejo puente sobre el río Guadiana. El canto de las grullas en su vuelo se mezcla con el tintineo de las perforadoras. Al menos 8 conductos de agua salen de una tubería que enfila hacia las fumarolas del bosque de tarayes en el que se ha convertido el Guadiana, al otro lado del puente un hilo de agua procedente del pozo de Molemocho dibuja un atisbo de río. 17:30 h.: varios coches de trabajadores salen del Parque Nacional con destino a los municipios de Villarrubia y Daimiel, los poceros y los bomberos siguen con la tarea para ganarle la partida al fuego que surge de la tierra, mientras, las grullas buscan dormidero. endógenos, que hoy bien podría ser modelo del programa MAB ( hombre y biosfera), de la UNESCO, estaba a punto de sucumbir por las amenazas de un proyecto de desecación, con objeto de ganar terreno a la agricultura. El modelo de desarrollo sustentable, en armonía con el medio natural, se perdió. A cambio nació un Parque Nacional en un entorno de economía agrícola cambiante basado en la explotación del agua como recurso. Lo que sin duda permitiría un desarrollo económico del entorno de las Tablas. Pero a un precio impagable. En los ochenta las tablas empezaron a arder, ya que como consecuencia de las obras de desecación realizadas, el agua que discurría por los ríos Guadiana y Gigüela no podía encharcar Las Tablas. A esto hay que sumar la sobreexplotación del acuífero 23 que se estaba produciendo como resultado de un aumento considerable de los cultivos de regadío en la cuenca Alta del Guadiana, íntimamente relacionada con el acuífero 23. A la sazón se puso en Marcha el Plan de Regeneración hídrica de las Tablas de Daimiel, (1987) con objeto de mantener la superficie del Parque Nacional encharcada garantizando su existencia. El Plan consistente en la derivación de agua desde el trasvase Tajo Segura, hasta 60 Hm³ en tres años, y la realización de una batería de pozos en el entorno del Parque como medida de emergencia, resulto ser un “éxito”. El agua llegaba a las Tablas y gracias a las obras hidráulicas que se realizaron en el propio Parque el agua quedaba retenida en su extremo Sur, con lo que se garantizaba una superficie mínima encharcada. Por tanto este Plan se amplió durante tres años más, de 1991 a 1993, para a partir de 1994 hacerse permanente, con un coste total hasta entonces, que podría alcanzar los 2.000 millones de las antiguas pesetas. Mientras tanto los cultivos de regadío seguían creciendo de manera exponencial en la Mancha Occidental, incluso al auspicio de subvenciones públicas, y en 1987 el Acuífero 23 se declaró sobreexplotado por la Confederación Hidrográfica del Guadiana. Los Ojos del Guadiana dejaron de ser afloramiento del acuífero y por tanto el río Guadiana se secó. También lo hizo el Gigüela como consecuencia de los descensos del nivel freático. Molino de Molemocho Guardo recuerdos de mi infancia de cómo unos braseros incandescentes iluminaban la noche en el entorno de Las Tablas. Cuando preguntaba qué era eso, mi padre me contestaba que las Tablas estaban ardiendo. Yo entonces no sabía qué eran Las Tablas, más tarde supe que constituían un Parque Nacional cuyo ecosistema era único en Europa. Cuando Las Tablas nacieron como Parque Nacional en 1973, lo hicieron bajo unas circunstancias ya complicadas y por el impulso del por entonces incipiente movimiento ecologista español. Por aquellos años un modelo de economía sostenible basado en los recursos 35 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 El periodo de sequía a principios de los noventa acucio aún más la situación, como se ha dicho anteriormente, nuevos trasvases aparecieron en escena, algunos de los cuales no pudieron realizarse por la falta de recursos hídricos en la cabecera del Tajo. Y más informes y artículos sobre la necesidad de salvar Las Tablas saltaron a la palestra. Como consecuencia se aprobó el Plan de Compensación de Rentas (1993-1997), financiado en un 70 % por la Unión Europea, en un 12.5 % por el Ministerio de Agricultura y el restante 12.5 % por la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha. Con un coste de 16.200 millones de pesetas, pretendía la loable que no célebre intención de disminuir la superficie de regadío. Pero la situación de las Tablas no mejoraba y el acuífero seguía en déficit, por lo que se declaraba definitivamente sobreexplotado en 1995. El modelo agrícola continuaba siendo el mismo, basado en cultivos de regadío, y en producciones excedentarias. Asentado en un recurso escaso y del que dependía, al tiempo que se provocaba un daño medio ambiental irreparable. Por último, aparecería el Plan Especial del Alto Guadiana como última solución al probablemente mayor desastre ecológico de Europa en el siglo XX, con un presupuesto de 3.000 millones de euros y casi 20 años por delante para conseguir recuperar el acuífero y dotar a la Mancha de un modelo de economía sostenido. De nuevo se vuelve a hacer política de aguas utilizando un Parque Nacional como cabeza de turco pretendiendo recuperar un ecosistema del que solo quedan recuerdos. Después de más de 30 años de esas imágenes de las Tablas ardiendo, las Tablas vuelven a arder, debido a la autocombustión de la turba. El ecosistema sigue su proceso natural después de varios años seco. Después de hace más de 30 años, el modelo agrícola de la Mancha sigue siendo el mismo, cultivos que requieren agua y regadíos en cultivos tradicionales de secano como el viñedo, cuya producción, la mayor de toda Europa, provoca excedentes que no entran en los mercados. Con un agravante, el recurso principal en el que se basa este modelo, el agua, está agotado. Cada vez es menos rentable seguir esquilmando el acuífero, y cada vez tiene menos sentido, ya que se obtiene un bajo beneficio por un producto que no tiene el rendimiento económico deseado. Disminuyendo la renta de los agricultores a pesar de las ayudas públicas, sin las cuales éstas serían negativas. Como problema añadido, uno más, y por cuyo motivo real surge el Plan Especial del Alto Guadiana, está el incumplimiento de la Directiva Marco del Agua. Toda la Mancha Occidental está bajo la declaración de zona contaminada por nitratos, todo el acuífero 23, más de 5000 km² y más de 600.000 habitantes. Lo que supone un considerable problema de salud pública, además de económico; dotar a la población de agua potable para su consumo. Autocombustión de turbas en Las Tablas. Bajo este escenario se hizo imprescindible recuperar la obra de la famosa tubería manchega, un proyecto que dormía el sueño de los justos en un cajón desde principios de los años noventa, y que ahora se ha rescatado bajo un coste que supera los 500 millones de euros. ¿Y de paso por qué no incluir a las Tablas en el proyecto como justificación ambiental del desastre? Mientras tanto las Tablas siguen ahí como hace 30 años, sirviendo de moneda de cambio para hacer política de aguas en esta región, como escudo proteccionista para conseguir fondos de la Unión Europea que justifiquen su conservación y recuperación y continúen subvencionando un modelo agrícola sin perspectivas, sin alternativas y sin capacidad de reacción. Pero después de tantos años, parece que alguien en Europa se ha dado cuenta de que el coste acumulado para recuperar un espacio natural como las Tablas es demasiado alto para los resultados que se están obteniendo, que son nulos. Motivo por el cual la Unión Europea le ha dado un plazo al Gobierno Español para recuperar Las Tablas de Daimiel. No es el primer ultimátum y presumiblemente no será el último. Sin Tablas no hay Dinero y no hay excusas. Después de todo este tiempo, parece que sí ponemos en un extremo de la balanza coste/beneficio los aportes económicos para salvar el humedal a lo largo de su historia, las ayudas a los agricultores y el coste medioambiental y social del descalabro en la política agraria y de aguas en la Mancha. Y en el otro extremo de la balanza el beneficio obtenido; las rentas agrarias y el mayor o menor conformismo de la población que redunda en un beneficio político. El balance tal vez no sea del todo positivo, sino más bien lo contrario. 36 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 También da la sensación que desde el gobierno central, el autonómico, y las organizaciones agrarias no se ha hecho ni se está haciendo mucho para cambiar un modelo agrario que se ha demostrado que es insostenible y que debe ser renovado. Un modelo que en gran medida se encuentra subsidiado por la propia Unión Europea. Inclinando aún más la balanza del coste/beneficio. Ya no cuela el lema de “salvemos Las Tablas”, cuando no se ha hecho nada eficaz para ello desde su declaración como Parque Nacional en 1973, salvo destinar fondos públicos en gran parte procedentes de Europa para realizar actuaciones que no han sido determinantes, salvo para seguir utilizando este espacio natural como moneda de cambio, agravando el deterioro ambiental y prolongándolo en el tiempo. Debemos de tener en cuenta que “salvar las Tablas” no significa que tengan agua, y agua de calidad. Así sólo tendremos un recurso turístico que puede ser más o menos deseable o recomendable. Salvar las Tablas significa recuperar un sistema que no funciona desde hace décadas. Sólo de esta forma recuperaremos un Parque Nacional no un Parque recreativo o de ocio. Toca ahora (más bien tocaba hace tiempo) no salvar las Tablas, sino salvar la Mancha. Las Tablas son un enclave único, pero forman parte de un todo, la Mancha húmeda, de la que ya queda poco, por no decir nada. Cualquiera que hubiera abandonado esta tierra en los años 70, y volviera ahora, no la reconocería. Toca ahora (o más bien tocó hace tiempo) cambiar el modelo agrícola de la comarca Manchega. Por varias razones fundamentales; porque es insostenible en sí mismo, y ya no da más de sí, porque el abastecimiento de agua potable en la Mancha para sus habitantes se está convirtiendo en un problema de salud pública y porque hemos provocado un daño medioambiental sin precedentes. Sólo así se garantizará la supervivencia de la Mancha y las Tablas se salvarán solas. De poco sirve que se sigan comprando terrenos aledaños al Parque Nacional, ya van 1.400 Has., para disminuir el consumo de agua en las inmediaciones del Parque, salvo que se compre por parte de la Administración toda la Mancha Occidental. Creando otro problema más; qué hacer con esta superficie. Hasta ahora estos terrenos se han convertido en un erial, en el que se realizan repoblaciones., o trabajos de “rehabilitación” de la arquitectura rural. Su único aprovechamiento derivado de la actual crisis económica es dar trabajo eventual a las poblaciones locales limítrofes con el Parque. Convirtiéndose en la contrapartida de este Parque Nacional, un centro de empleo para los parados locales, en su mayoría procedentes del sector de la construcción, en el marco del plan E del gobierno. Provocando más gasto y ofreciendo pocas soluciones al problema social, económico y ambiental de la comarca de la Mancha. En la punta de este iceberg a la deriva encontramos al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, en su base una agricultura subsidiada y excedentaria, entre ambos una sociedad que parece no darse cuenta hacia donde se dirige o no querer hacerlo, bajo el auspicio de unas administraciones cada vez más politizadas. Si marcásemos aquí el final del camino de este Parque Nacional, que no ha de serlo, tendríamos que preguntarnos si ha merecido la pena haber malgastado tantos recursos, económicos y naturales, para transformar un paisaje, olvidar una cultura y continuar siendo una comarca “pobre” en términos económicos, dentro de España y de Europa. Para este viaje no se necesitan estas alforjas Villarrubia de los ojos 28 de noviembre de 2009. 37 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 ARQUEOLOGÍA LA NECRÓPOLIS VISIGODA DEL SANTUARIO DE LA VIRGEN DE LA SIERRA. APORTACIONES DESDE LA ARQUEOLOGÍA A UN PERIODO POCO CONOCIDO DE NUESTRA HISTORIA. Honorio Javier Álvarez García / Luis Benítez de Lugo Enrich / Jaime Moraleda Sierra (ANTHROPOS S.L.) En 2005 se desarrolló una intervención arqueológica de carácter puntual en el entorno del Santuario de la Virgen de la Sierra en Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real), con la exhumación de un sarcófago de caliza de cronología visigoda. La tumba contenía una inhumación de un individuo masculino adulto. En el lugar se ubica una necrópolis rural, aún pendiente de investigación. Los análisis radiocarbónicos y antropológicos realizados, así como la tipología de la sepultura documentada, permite, en este momento, dar un paso más en el conocimiento de los hábitos funerarios de la Meseta Sur para este periodo histórico. En cumplimiento de la legislación vigente el día 5 de Noviembre de 2004 se comunicó a la Consejería de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha la aparición de estructuras arqueológicas no aparentes en superficie, detectadas con motivo de la realización de unas obras de acondicionamiento en una zona destinada para el aparcamiento de vehículos en el Santuario de la Virgen de la Sierra (Villarrubia de los Ojos, Ciudad Real). El tiempo transcurrido desde la aparición del hallazgo hasta el inicio de nuestra intervención (más de dos meses) facilitó la remoción del enterramiento, la fractura de algunos huesos y, tal vez, la sustracción del posible ajuar, por parte de desconocidos. Una vez finalizado el estudio de la tumba estamos en condiciones de asegurar que se trata de una estructura funeraria perteneciente a un colectivo mayor, que puede ser calificado como necrópolis. De forma preliminar es posible inclinarse por una adscripción cultural visigoda, sin que sea posible descartar también una cronología medieval más amplia para este yacimiento. La investigación desarrollada aquí resulta de una importancia más que notable, toda vez que el conocimiento sobre este espectro cronológico en Ciudad Real no es lo suficientemente amplio, entre otras cuestiones porque el análisis del mundo funerario de época visigoda en la provincia resulta sumamente complejo. Ello se debe, en buena parte, a la escasa información histórica existente sobre este periodo. Los datos disponibles sobre esta época son aportados por contados hallazgos de materiales constructivos o, en su mayor parte, por intervenciones arqueológicas realizadas en tumbas aisladas y necrópolis. Algunas de ellas fueron llevadas a cabo con dudoso rigor científico y falta de metodología; en otros casos, por efectuarse mediante el procedimiento de urgencia, se excavó únicamente una parte muy reducida de la necrópolis. Conviene señalar que la mayoría de los datos arqueológicos que poseemos del periodo hispanovisigodo en nuestra región provienen de las áreas cementeriales ubicadas en su territorio. Llegados a este punto, conviene diferenciar entre necrópolis propiamente visigodas -en las que aparecen ajuares materiales y elementos indisolublemente unidos a esta adscripción cultural-, necrópolis tardorromanas -anteriores al siglo VII- y necrópolis hispanovisigodas pertenecientes a los siglos VII y VIII-. La división entre unas y otras resulta muy complicada, atendiendo en algunos casos a la escasez de datos arqueológicos extraídos de la excavación o, en otros, por la posibilidad de darse una continuidad en los tipos y usos que impide realizar una adscripción concreta. También resulta importante establecer una división entre necrópolis urbanas, que habitualmente se ubicaban extramuros de la ciudad, y necrópolis rurales, que se ubicaron en las inmediaciones de iglesias rurales, junto a pequeños núcleos de población o simplemente en las cercanías o cruces de caminos. Junto a estas necrópolis existen toda una serie de hallazgos de inhumaciones aisladas que estarían relacionadas con el tipo de organización social y su escasez demográfica. En la provincia de Ciudad Real, predominan los hallazgos aislados y las necrópolis rurales, ubicados generalmente junto a cursos de agua, relacionados en algunos casos con iglesias o zonas de culto indígena, aprovechando, en ocasiones, materiales constructivos de antiguas villae tardorromanas. Ejemplos destacados de necrópolis investigadas en Ciudad Real son, entre otros, Oreto (Granátula de Calatrava); La Cruz del Cristo en 39 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Malagón, (29 kms. al oeste de Villarrubia de los Ojos); en Alhambra Las Eras y la Necrópolis Paleocristiana Arroyo de la Poza; la Loma de las Sepulturas en Puertollano; en Villanueva de la Fuente la necrópolis urbana de Mentesa Oretana; y en Terrinches La Ontavia. Escasa información proporcionan varias sepulturas visigodas en 1962, en Porzuna “La Vieja”. En fechas recientes se ha producido el hallazgo de necrópolis en La Bienvenida/Sisapo y en las instalaciones del Aeropuerto de Ciudad Real. A toda esta información hay que añadir que se han registrado en la provincia toda una serie de enterramientos aislados: Albaladejo, Montiel, Santa Cruz de los Cáñamos, Villamayor de Calatrava, Fuencaliente, Viso del Marqués, Villanueva de la Fuente, Puebla del Príncipe… y un buen número de sarcófagos de dudosa cronología, (Albaladejo, Puebla del Príncipe, Santa Cruz de Mudela, Villanueva de la Fuente, etc.). Estos hallazgos vienen a demostrar la debilidad demográfica y, en ocasiones, la falta de medios económicos, reflejados en la pobreza de las tumbas y lo exiguo de los ajuares. A estos enterramientos hay que sumar un buen número de objetos dispersos, como cerámicas y elementos de adorno personal procedentes de Villanueva de la Fuente, Arenas de San Juan, Fontanarejo, Alhambra, Porzuna, así como elementos arquitectónicos en Argamasilla de Alba, Santa Cruz de los Cáñamos, la pilastra de mármol de Daimiel y la placa con motivos vegetales de Villarrubia de los Ojos, que puede relacionarse con la necrópolis hallada en el Santuario de la Virgen de la Sierra. población de épocas más remotas, entre los que se incluirían los fundadores de la necrópolis hallada. Abordar una aproximación histórica sobre el periodo visigodo en esta zona supone un importante reto debido a la escasez de fuentes. En un contexto general, desde el siglo VI la provincia de Ciudad Real se convirtió a la vez en una importante zona de paso y en lugar estratégico situado entre los importantes centros de Toledo, Mérida y la Bética, especialmente cuando Toledo se convirtió en capital del reino Visigodo. Fue ésta una época de continuas guerras y disputas territoriales, que contribuyeron, más si cabe, a la decadencia Entorno, contexto histórico y caracterización de la necrópolis del Santuario de la Virgen de la Sierra. La necrópolis se encuentra junto al Santuario de la Virgen de la Sierra, edificado a media ladera de la denominada “Sierra de la Virgen”. De interés evidente resulta el hecho de la existencia en el propio santuario de un manantial de agua de excelente calidad, que conforma el posterior “Arroyo de la Virgen”, cuya existencia marcó, sin duda, la implantación del centro de culto (del que se tienen noticias ya en el siglo XIII) o, incluso, la existencia de asentamientos de 40 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 económica y, por qué no, social, de los territorios que actualmente conforman la provincia de Ciudad Real, en un momento en que la densidad demográfica era sumamente débil. El período de paz, documentado desde las últimas campañas de Leovigildo hasta la llegada de los contingentes musulmanes, no supuso una mejora de las condiciones socioeconómicas, como demuestran la ausencia de cecas o hallazgos de monedas en la provincia y la demostrable escasez de comercio debido a la pobreza de la zona y a las plagas de langosta que asolaron la región, damnificando tanto a agricultores como a ganaderos. Por lo que esta zona fue presa fácil ante la invasión musulmana. En el término municipal de Villarrubia de los Ojos existen una serie de asentamientos con indicios claros de poblamiento en el periodo comprendido entre los siglos V a VIII. Muchos de ellos tienen origen romano bajoimperial, manteniendo su existencia hasta los albores de la Edad Moderna. Las fechas ofrecidas por los análisis radiocarbónicos de los restos óseos exhumados del sarcófago del Santuario de la Virgen de la Sierra, indican la existencia de una comunidad visigoda en un territorio ya conquistado por los musulmanes, que bien pudo mantenerse por pactos con los nuevos moradores de la provincia de Ciudad Real tras la victoria de Tarik en la Batalla de Guadalete. Cercanos al Santuario de la Virgen de la Sierra, con una cronología similar a la necrópolis, existen dos yacimientos mencionados por las fuentes, que pueden estar directamente relacionados con el enclave. El primero de ellos es Jétar (Xetar o Gétor), situado a dos kilómetros y medio al sur de la ermita. Se encuentra directamente conectado por el “Camino de Veladores”, topónimo que puede ser bastante esclarecedor. El segundo es Renales, emplazado tres kilómetros al sudeste. Además de estos dos yacimientos conocidos desde antiguo existe un conjunto mayor de enclaves recientemente documentados, que bien pudieran estar relacionados, en uno u otro sentido, con la necrópolis. Destaca Cabezo de Renales, comunicado con la necrópolis a través del denominado “Camino de la Virgen”, junto al cual se aprecia una estructura fortificada en la que, junto a galbos cerámicos de la Edad del Bronce, se ha recuperado también cerámica a torno. Es un lugar en donde fuentes orales 41 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 afirman el hallazgo de monedas datadas en el Bajo Imperio. Otros enclaves, como Rodeo del Moro, Manciporras o El Plancho, son claros ejemplos de la continuidad del poblamiento de la zona entre la época romana y la medieval. La necrópolis del Santuario de la Virgen de la Sierra debe relacionarse con una pequeña aldea o “vicus”, a un “fundi” señorial o, incluso, a “castella” (pequeñas agrupaciones urbanas fortificadas) establecidas bien en el mismo lugar que la necrópolis, bien en lugares relativamente alejados, pero conexos mediante caminos. Cabe, por tanto, la opción de que la necrópolis pueda estar separada de la población de la que depende, para entre otras cosas, evitar el ambiente insalubre que puede provocar una zona de enterramientos cercana al lugar de hábitat. Dentro de esta línea argumental podría estar asociada a varios enclaves históricos cercanos, como Jétar (Xetar o Gétor), Renales y Cabezuela de Renales. Las poblaciones de época visigoda se ubican preferentemente en las cercanías de vías de comunicación o en las vegas fluviales. En el caso que nos ocupa sería destacable la presencia de dos vías de comunicación este-oeste, que se encontrarían íntimamente relacionadas tanto con la necrópolis como con los yacimientos de Gétor, Renales y Cabezuela de Renales. Estas vías son conocidas actualmente como “Sendilla de la Virgen” y “Vereda de Malagón”. Ambas buscan transitar por las zonas llanas cercanas a las vegas de los ríos Guadiana y Cigüela, formando parte de vías históricas de origen remoto, jalonadas en su recorrido por yacimientos arqueológicos. La “Vereda de Malagón” puede ejercer de nexo de unión entre dos necrópolis: la del Santuario de la Virgen de la Sierra y la de la Cruz del Cristo de Malagón. Intervención arqueológica Esta intervención ha permitido inventariar un sarcófago del tipo calificado como “de bañera”, elaborado con caliza local. No presenta epigrafías ni motivos ornamentales. En lo tocante a su aspecto es característica su tosquedad. Esa tosquedad se ve acentuada en la parte correspondiente a los pies, ya que ésta corresponde a piezas individuales añadidas al cuerpo principal. No obstante, la reparación, reutilización y amortización de este tipo de sepulcros está atestiguada en múltiples casos. En cuanto al contenido del sarcófago, éste albergaba en su interior los restos óseos de un individuo adulto, en posición de decúbito supino, orientado en posición oeste a Este (cabeza al oeste y pies al Este), con las manos cruzadas sobre la cintura. La costumbre de colocar la sepultura orientada al sol naciente está en relación con la idea del sol como símbolo del renacimiento. Éste es el patrón tipo para las inhumaciones características de cronología visigoda, tal y como se ha observado en otras necrópolis similares excavadas en el ámbito meseteño El estado de los restos óseos era bueno en el momento del descubrimiento de la tumba. Sin embargo, en el momento de iniciarse la excavación se observaron alteraciones que habían dañado el esqueleto del cadáver. Las partes más dañadas correspondían al cráneo (especialmente faz y mandíbulas) y a los huesos largos de las piernas (fémures y tibias). Conviene reseñar que la lápida del sepulcro pudo haberse reventado hace ya tiempo. Por tanto, el cadáver estaba alterado tanto por diversas causas: expolio, ambientales (agua), roedores, raíces, etc. Un minucioso análisis antropológico ha revelado que se trata de un individuo de sexo masculino y edad madura (entre 40 y 50 años), de estatura mediana (160,5 cm.), complexión robusta y desgaste en las tibias (consecuencia de montar en caballería). Uno de los datos más relevantes es que el individuo presenta una lesión de politraumatismo que afecta a numerosas costillas del lado izquierdo que podría estar relacionada con la causa de su muerte, afectando órganos vitales como los pulmones. Este traumatismo viene dado por una caída -no un golpe-, bastante aparatosa, como bien podría ser desde una caballería. Las lesiones traumáticas con evolución desfavorable debieron ser muy frecuentes en esta época debido a los límites de la medicina antigua. Nos encontramos, a tenor de ello, ante un hombre relativamente bien alimentado y, por tanto, de un nivel económico medio-alto. Nivel económico que tiene su reflejo en una capacidad Sarcófago antes de intervenir . 42 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 adquisitiva plasmada en un sepulcro, a pesar de su tosquedad, costoso. Y en un más que probable acceso a disponer de una montura. Es posible reconstruir con enorme fidelidad el rito de inhumación. En el terreno arcilloso del entorno se excavó una fosa rectangular. Posteriormente fue depositado en ella el sarcófago, que fue a su vez calzado y asegurado con mampuestos medianos de cuarcita para asegurar su inmovilidad. Más tarde se colmató la fosa con tierra del entorno. Desconocemos si se instaló algún tipo de señalización sobre la tumba. En esta época se ha abandonado ya por completo la práctica de la incineración de los difuntos, típica del mundo romano altoimperial, en favor del rito de la inhumación, auspiciado por la creencia en la resurrección de la carne. El ritual funerario aparece recogido en el Liber Ordinum y en algunas normas sinodales, según los cuales, tras el fallecimiento del individuo, el cuerpo se lavaba y vestía convenientemente. Después se conducía al difunto a la iglesia y de allí se trasladaba al cementerio. Si el sepulcro era nuevo se procedía a su bendición. Seguidamente se enterraba el cadáver, acto que ponía fin a la acción ritual. 43 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 Diversos materiales arqueológicos inventariados en el entorno, entre ellos tegulae (teja plana de tradición romana) confirman la ocupación del solar desde época tardorromana al menos, con proyecciones medievales y modernas, y cuyo resultado más visible es el propio santuario. La antropización del lugar desde época antigua está doblemente atestiguada, en la tradición y en la bibliografía. Pero podríamos añadir algunos elementos relevantes más, como son la existencia de restos constructivos de carácter edilicio en caliza similar a la del sepulcro estudiado (el descansadero de la Virgen sería un magnífico ejemplo de ello), la aparición de un sarcófago similar en décadas pasadas, la existencia de figurillas de terracota alusivas a divinidades protectoras “de filiación claramente romana”. dejado excesivas huellas, ni artefactuales ni documentales en éste área de la región. Ya para concluir querríamos reseñar que este tipo de investigaciones se revelan de una importancia de primer orden, puesto que la, denostada en ocasiones, Arqueología de la Muerte analiza todo tipo de restos funerarios y obtiene una información excepcional para el estudio de las sociedades antiguas: estructura social, demografía, relaciones de parentesco, organización familiar, costumbres de matrimonio, economía, religiosidad, etc. De esta forma, observando la variedad de personas sociales presentes en la necrópolis, es posible rastrear, primero, e identificar, después, los principios organizativos de una sociedad. En definitiva, ese es el objetivo último del arqueólogo: arrojar luz sobre la dinámica de las sociedades en el pasado; sólo así éste podrá ser comprensible. BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA: ÁLVAREZ GARCÍA, H.J. y BENÍTEZ DE LUGO, L. (2007): "Necrópolis tardoantigua e islámica de Mentesa Oretana (Villanueva de la Fuente, Ciudad Real), en Homenaje a Victoria Cabrera. Espacio, Tiempo y Forma. U.N.E.D. En prensa. BARRAL, X. (1976): La circulation des monnais suèves et visigothiques. Contributión à l´histoire du Royaume visigot. Zurich-Munich. BELTRÁN TORREIRA, F.M. (1992): "Romanidad tardía y germanismo", en La Provincia de Ciudad Real II. Historia, pp. 131148. Diputación Provincial. Ciudad Real. BENÍTEZ DE LUGO, L. y RODRÍGUEZ MORENO, A. (1999): "Los enterramientos tardorromanos del Talar de la Vega (Villanueva de la Fuente, Ciudad Real)", XXIV Congreso Nacional de Arqueología (Cartagena, 1997), vol. IV, pp. 611-622. Cartagena. BEÑO, P. A.: (1973): “Hallazgos arqueológicos en el paraje conocido por Santa María de Argamasilla de Alba”, en Cuadernos de Estudios Manchegos (época II), nº 4, pp. 159163. Ciudad Real. CABALLERO, A. (1998): “Arqueología”, en Parque Nacional Las Tablas de Daimiel, pp. 332 y ss. Esfagnos. Talavera de la Reina (Toledo). CABALLERO, A. (1996): "Arqueología e Historia Antigua", en Ciudad Real y su Provincia II, pp. 89-92. Gever. Sevilla. FERNÁNDEZ CALVO, C. (2000) “La necrópolis de época Visigoda de la Cruz del Cristo. Malagón (Ciudad Real)”, en Benítez de Sarcófago excavado. La datación del conjunto se basa en los resultados del análisis de Carbono 14 aplicado a los restos óseos, que arrojan una cronología situada a caballo entre los siglos VIII y IX. Así pues, estamos ante contingentes de población que vivieron en los últimos momentos de la época visigoda, cuando ese “viejo mundo” languidece o bien ante población hispanovisigoda no islamizada (al menos culturalmente, como así lo atestiguan sus ritos de inhumación), que habitó la zona en el primer siglo de dominación musulmana. Periodo, éste, de transición, que es poco conocido en la provincia de Ciudad Real, toda vez que el proceso de arabización del territorio no ha 44 DESDE EL ÁRBOL GORDO Nº 4 – DICIEMBRE 2009 FOTOGRAFÍA VISTA DE LA HONTANILLA Mediados del siglo XX. Actualidad. 46 CAJA CASTILLA LA MANCHA VENTA DE VEHÍCULOS USADOS Y KM. 0 Tlf.-Fax: 926 266 624 - Móvil 649 979237 Paseo del Cordón, 92 - VILLARRUBIA DE LOS OJOS COLABORAN: AYUNTAMIENTO VILLARRUBIA DE LOS OJOS Concejalía de Educación y Cultura