COL·LABORACIONS LITERÀRIES FESTES LOCALS CARCAIXENT 2015 EL GRAN NICOLÁS Todos los jugadores y simpatizantes del Club d’Escacs de Carcaixent Hombre casi alto, delgado, en verano enjuto, de facciones marcadas, pelo lacio y blanco; bien peinado y sonrisa perenne. Humildemente vestido, por convicción, pero tremendamente pulcro, por higiene. Gustaba de ir en su vieja bicicleta, siempre la misma, yo no le conocí otra. Tremendamente trabajador, defensor a ultranza de los derechos sindicales, y habiendo desempeñado varios oficios en su vida, yo diría que fue pintor de brocha gorda, pero con la misma meticulosidad que uno de brocha fina, pues se relamía cuando conseguía un resultado perfecto. De apariencia seria, pues serios parecen los que están pensando, su trato era tremendamente afable. Cabezota con razón y cabezota sin ella, era imposible escapar de su argumento pues su generosidad y su ejemplo siempre iban por delante. Un “no”, para él, era un no para hoy y un “sí” para mañana. De gustos sencillos, se pirraba por la tortilla de atún, en buena compañía, ¡joder!, la nuestra en tantas y tantas cenas. Y ahora que he dicho un taco, no recuerdo que nunca saliera uno por su boca, lo que da una pista sobre lo educadas que eran sus formas. Un gran hombre y sin duda, la más importante figura del ajedrez en la historia de Carcaixent. Tal vez no sentado, no fue un Spassky o un Korchnói, las grandes figuras de su época, que se llevaron la gloria, la fama y el dinero. Carcaixent no brilla en los olimpos ajedrecísticos, pero lo que sí es cierto, que lo poco, lo nada, o lo mucho, que el ajedrez de Carcaixent ha conseguido se lo debe íntegramente a D. José Nicolás Almiñana. Este hombre durante cincuenta años, ha trabajado tan incesantemente como desinteresadamente en la promoción del ajedrez en nuestra ciudad, sin pedir nada a cambio o decir esta boca es mía. Ha realizado todas las labores que esconden las sombras, desde el mantenimiento de las instalaciones, la dirección, la organización, la tesorería, arbitraje, la gestión federativa… la capitanía y encima si los equipos no estaban COL·LABORACIONS LITERÀRIES FESTES LOCALS CARCAIXENT 2015 completos también jugaba, con partidas muy serias por cierto. Ha sido profesor de la mayoría de los integrantes del club y se ha congratulado como nadie de ser esparrin cuando el talento de uno de sus chavales le ha superado. Ha trabajado tanto en esto, que me daría pena contarlo si no fuera porque todos somos conscientes que su felicidad iba implícita en cada uno de los momentos que nos ha dedicado. Sin duda, no conozco a nadie, ni espero conocer, que le gustara más una cosa, en este caso el ajedrez. Él sufría de una auténtica pasión por esto, un idilio que ha durado toda una vida. Y es muy justo que su recuerdo detone las paredes del club y se reconozca su labor, su labor de “aficionado”. De nada sirve toda la genialidad de un campeón del mundo sin personas como esta, que monta las piezas, que arregla la silla, que prepara los relojes, que rellena el acta con letra absolutamente caligráfica, para asombro de todos los equipos visitantes, y que disfruta con el acierto y el desacierto de sus propios campeones, de su equipo, más allá de la victoria o la derrota, porque él supo comprender mejor que nadie que el ajedrez es un más allá. Y me gustaría recordarle a usted, en una de sus partidas infinitas, en uno de eso finales que tanto le gustaban jugar, y decirle tras mucho meditarlo… que me rindo. –Me rindo ante la evidencia, es usted un peón pasado, uno de esos tan lentos como imparables que ganan partidas. Uno que al llegar a octava, al final de su camino, decidió coronarse en una idea, en un recuerdo, en un legado, en puro ajedrez. Y marchar y marchar para siempre satisfecho, como el jugador que ha ganado esa tarde se va a casa. Que yo me quedo muy tranquilo sabiendo que de azul siempre va a haber alguien que pinte el cielo.- COL·LABORACIONS LITERÀRIES FESTES LOCALS CARCAIXENT 2015