Qubit 15 - Scholar Commons - University of South Florida

Anuncio
University of South Florida
Scholar Commons
Digital Collection - Science Fiction & Fantasy
Publications
Digital Collection - Science Fiction & Fantasy
4-1-2006
Qubit 15
Cubit
Follow this and additional works at: http://scholarcommons.usf.edu/scifistud_pub
Part of the Fiction Commons
Scholar Commons Citation
Cubit, "Qubit 15 " (2006). Digital Collection - Science Fiction & Fantasy Publications. Paper 15.
http://scholarcommons.usf.edu/scifistud_pub/15
This Journal is brought to you for free and open access by the Digital Collection - Science Fiction & Fantasy at Scholar Commons. It has been accepted
for inclusion in Digital Collection - Science Fiction & Fantasy Publications by an authorized administrator of Scholar Commons. For more
information, please contact scholarcommons@usf.edu.
0.
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
8.
De frecuencia mensual y totalmente gratis
Índice:
¿Qué es el Cibersexo? de Wikipedia
El fantástico mundo del cibersexo.
Hecho en Cuba: Bondage 3D (para mayores de 18 años). Raúl Aguiar
Género y sexualidad en las comunidades virtuales. Egdar Gómez Cruz.
Rock on. Pat Cadigan
El cibersexo, una nueva adicción, dicen especialistas. Hernando Arango.
Adición al cibersexo. Marlene M. Maheu
Historia del cine ciberpunk. (Capítulo 13) Raúl Aguiar
¿Qué es el Cibersexo?
de Wikipedia
El cibersexo es un encuentro sexual virtual en que dos
o más personas conectadas a través de una red
informática se mandan mensajes sexualmente
explícitos que describen una experiencia sexual. Es un
tipo de juego de rol en que los participantes pretenden
que están teniendo relaciones sexuales, describen sus
acciones y responden a los mensajes de los demás
participantes con el fin de estimular sus deseos y
fantasías sexuales. La calidad de un encuentro de
cibersexo depende generalmente de la capacidad de
los participantes para evocar una imagen vívida en las
mentes de sus compañeros. Son asimismo claves la
imaginación y la suspensión de la incredulidad (ante
posibles contradicciones). El cibersexo se suele
practicar a través de un chat (como el IRC o los chats
de algunas páginas web) o un servicio de mensajería instantánea. La creciente
popularidad de las webcams ha dado lugar a un mayor número de parejas que las utilizan
para conferir al encuentro un aspecto más visual. El intercambio de correos electrónicos
sexualmente explícitos también se puede considerar como cibersexo. Se suele recurrir al
cibersexo para favorecer la masturbación o como introducción para una futura cita para
tener relaciones sexuales en la vida real. También se puede recurrir a encuentros
similares mediante el servicio de SMS a través del teléfono móvil.
El cibersexo se distingue del sexo telefónico en que tiene un mayor anonimato y es
más fácil encontrar una pareja. El cibersexo suele darse entre desconocidos o personas
que se acabar de conocer por Internet, y al contrario que el sexo telefónico, el
cibersexo rara vez es comercial.
En el cibersexo se puede intentar emular el sexo real de forma que los participantes
intentan que la experiencia sea lo más verosímil posible, aunque también se puede
considerar un tipo de juego de rol que permite a los participantes experimentar
sensaciones inusuales y experimentar actos sexuales que no intentarían en la vida real.
Entre participantes "serios", el cibersexo puede ser parte de una trama mayor: los
personajes pueden ser amantes o cónyuges, o un personaje podría ser violado para dar
comienzo a la historia. En estas situaciones, los participantes suelen considerarse
entidades diferentes de los personajes que están teniendo las relaciones sexuales.
Se suele ridiculizar el cibersexo porque los participantes no suelen tener ninguna
información sobre la persona con la que están hablando: la persona al otro extremo de
la línea podría ser un hombre o una mujer. Como el objetivo principal del cibersexo es
la simulación realista de una experiencia sexual, esta información no suele ser
necesaria ni deseada.
ÉTICA
Se debate sobre si el cibersexo supone un tipo de infidelidad. Aunque no hay contacto
físico, los críticos sostienen que las fuertes emociones que se experimentan pueden
suponer una presión añadida sobre las relaciones de pareja, especialmente cuando el
cibersexo culmina en un romance por Internet. Se han dado casos de divorcios
provocados por el cibersexo.
El cibersexo puede asimismo dar lugar a una adicción a la red, que se considera una
causa del aislamiento social y una pérdida de la productividad en el trabajo.
CIBERSEXO Y PEDOFILIA
Se sabe que algunos pedófilos y efebófilos han recurrido al cibersexo con menores de
edad. En el transcurso de estas conversaciones, a veces intentan enviar pornografía
infantil por la red u organizar citas.
En Estados Unidos, algunos agentes de policía se dedican a fingir ser menores de edad
para capturar a los pedófilos que intentan organizar citas con ellos. Esta práctica, por
otra parte controvertida, se ha vuelto popular entre internautas que no trabajan para la
policía, pero que registran las conversaciones y las suben a una página web, y en
ocasiones denuncian el hecho a la policía. Uno de estos sitios es PervertedJustice.com.
Obtenido de "http://es.wikipedia.org/wiki/Cibersexo"
EL FANTÁSTICO MUNDO DEL CIBERSEXO
Dejándome seducir con ritmo y gusto, armonizo mi
trabajo después de la implacable jornada laboral, mi
deseo es ostentoso por liberar un Clímax.
¿Acaso tanta economía, globalización y conflictos
generan tanta ansia?, ya apaciguada logro cortar la
señal de mi generoso equipo electrónico con
inmediatez y solo queda una revolucionaria ilusión
que le da libertad a mi cuerpo, alma, dejándola
brillar desnuda, en su espacio inter-espacial, “El
Internet”
De esta forma, es como identificamos varios de los
antecedentes que le dan vía libre al fuerte deseo de
consumir sexo virtual.
Historia
EL INTERNET
Es una revolucionaria tecnología de interconexión
de redes informáticas que permite a cada una de las
computadoras conectadas, comunicarse en enlace directo. Esta interconexión de redes, es un
vehículo al publico, teniendo acceso a redes informáticas de organismos oficiales, educativos y
empresariales.
SU FUNCIONAMIENTO
Existe un ordenador especial por dada red llamado Gateway, el cual permite que un conjunto
de redes locales se puedan conectar entre sí. Las interconexiones entre gateways utilizan
diversas vías de comunicación, como líneas telefónicas por cable, fibra óptica y enlaces por
radio.
El internet tiene distintos servicios mediante los cuales se utilizan muchos formatos de
dirección. Existe el formato decimal con puntos (123.47.25.87) o el formato que se describe
con el nombre del ordenador de destino y otras informaciones (“mayor, dia, fi,upm,es”)
Todas las redes que se encuentran fuera de Estados Unidos utilizan sufijos que van al final de
cada directorio, indicando el país donde se encuentra dicha dirección, el sufijo utilizado para
España es (es) para Argentina (ar) para Colombia (co). Dentro de los diferentes estados ya se
elige otro sufijo que permite especificar la organización a la cual pertenece.
La red informática que estamos indicando, lo observamos en instituciones educativas el cual es
(edu) en centros militares (mil) en oficinas de gobierno (gob)
Cuando se cite la dirección a la cual deseemos llegar, esta sale en su red de origen, allí en la
puerta es encaminada de puerta en puerta hasta llegar a la red local donde se encuentra la
maquina de destino y se envía la información; Hay que tener en cuenta que no existe ningún
control central de la información que la dirija, ella navega por todo el ciber-espacio y acepta a
los diferentes llamados de sus interesados.
SU SERVICIO
Son muchos los servicios a través del intercambio de información entre las diversas
computadoras, como es el transferir ficheros entre una computadora local y una remota, el
conectarse a un ordenador desde otro lugar (telnet) o leer e interpretar ficheros de ordenadores
remotos.
Uno de los servicios más recientes es el protocolo de transferencia de hipertexto conocido
como (Http) el cual puede leer e interpretar ficheros de maquinas remotas, en imágenes, en
sonidos o servicios de vídeo; la Word wide web conocida como (web o www) es la colección
de ficheros denominados lugares web o paginas web, que incluye también la variedad de
textos en vídeo, gráficos y sonidos.
Historia
El protocolo de internet y de control de transmisión fueron desarrollados en 1973 por el
informático estadounidense Vinton Cerf como parte de un proyecto dirigido por el ingeniero
norteamericano Robert Kahn patrocinado por la agencia de programas avanzados de
investigación (APAI) mediante la cual se conectaban redes de ordenadores de varias
universidades y laboratorios de investigación de Estados Unidos.
IMPACTO EN NUESTRA SOCIEDAD
En nuestra vida moderna se vinculan muchos niveles de interelación social ente los individuos
como el político, el económico, el religiosos, entre otros, los cuales le exigen una gran
valoración al tiempo y al espacio, debido a la simultanea aceleración de nuestro tiempo, la cual
busca una apropiación directa excelentes relaciones de comunicación que hemos logrado ver
reflejadas en los últimos años, gracias a las nuevas tecnologías y su gradual aumento de
velocidad en las transferencias de información mundial.
Observamos como el impacto social de este fenómeno social de este fenómeno permite
socializar individuos de diferentes lugares del planeta, intercambiando identidades culturales,
idiomas, religiones y muchos otros aspectos que son parte y esencia de costumbres y
tradiciones habituales.
No-solo son términos culturales los que hallamos inmersos en estas redes de datos, también se
ponen a nuestra disposición un objetivo teórico de comunicaciones informáticas que
proporciona a colegios, bibliotecas, empresas y hogares un acceso universal a información de
calidad que eduque, entretenga y que informe. Gracias al ofrecimiento de los diversos
servicios se incrementan mas las cifras de usuarios, haciéndose cada ves mas elevadas
permitiendo entrar a la super autopista de la información donde su acceso es universal.
LA ADICCION A INTERNET
Si bien socializar es un nivel básico de convivencia social, en las autopistas virtuales puede
llegar a convertirse en toda una “pesadilla” cuando de sueños se trata. El entretenimiento en
algunos aspectos del comportamiento individual se genera con impulsos excesivamente
desmesurados en la ejecución de ciertas labores.
La compulsión por el uso de internet puede tener índices de gravedad tan altos o más aun que
los que tiene un drogadicto, un alcohólico, un jugador o un depravado sexual. Lo podemos
llamar “utilización patológica de internet” donde encontramos un gran numero de empleados,
de estudiantes y de particulares que se internan en romances, en datos, en cifras, en música y
muchos otros aspectos de la vida que ofrece el ciber-espacio.
En investigaciones norteamericanas los abogados especializados en familia, reportan cifras
recods de divorcios relacionados con el cibersexo, como romances entre diferentes parejas. De
un muestreo realizado entre 1800 personas (en asociación con Abcnews.com) se encontró el 6
por ciento con criterios más estrictos de uso compulsivo de internet y el 4 por ciento adicional,
abusaban regularmente en su utilización.
ADICCION SEXUAL
El individuo medica con sus sentimientos o lidia con sus preocupaciones al grado que tal
comportamiento sexual se convierte en el mecanismo para trabajar la ansiedad de su vida. En
esos momentos es difícil detener por si mismo su comportamiento sexual por periodos
prolongados, ya que se busca desafortunadamente él estimularse por medio de fantasías
sexuales.
Cuando hablamos de una adición sexual al cibersexo, podemos señalar a tres clases de adictos,
el biológico, el sociológico y el espiritual, el biológico, es aquel que ha condicionado su
cuerpo a recibir químicos o sustancias cerebrales a través de unos procesos de reforzar unas
fantasías sexuales, con una eyaculación provocada gracias a una estimulación continua, de
gráficas, palabras, videos, etc. el adicto sociológico es aquel que tiene una necesidad de
medicarse para escaparse de sus situaciones físicas o emocionales, de esta forma el individuo
encuentra la mediana sexual y ella tiene prioridad antes que cualquier otra adicción (alcohol, el
juego, las drogas) por otro lado el adicto espiritual liga su ansiedad llenando su vació de Dios
que hay en su corazón, esto lo consuela, lo celebra y, Lo hace sentir realmente en paz con él,
con Dios y con su espíritu.
CONSECUENCIAS DE LA ADICCION AL CIBERSEXO
Una de las consecuencias al cibersexo es que el individuo adquiere ciertos comportamientos
que son algo exagerados dentro de una vida normal, como es la función excesiva de la
masturbación, como primer acto sexual que se convierte en un habito descontrolado.
Otra de las consecuencias es la dependencia sociológica, que se presenta cuando un individuo
se habitúa al uso de internet allí surge una controversia entre profesionales de la salud, los
cuales señalan que una persona debe de tener una integración entre mente y cuerpo para
comprender las interrelaciones entre todas las partes del organismo, mientras que el internet es
algo completamente artificial en le que se vive una fantasía, que es frustrada con posterioridad
al no contacto carnal, esto puede generar cualquier comportamiento de morbo, de abuso sexual
y en casos extremos al de una violación sexual.
Se ha podido comprobar mediante algunos estudios que varios de los adictos al internet, son
generalmente personas que viven dentro de una fantasía virtual, existiendo en ellos objeciones
morales, sociales y éticas para mostrarse de manera real, escudándose entonces en un
anonimato profundo y seguro como lo es el internet. Allí podemos ver como individuos
frustrados por algún complejo se expresan con libertad y no es difícil ver a un hombre que
pese mas de 180 Kg. haciendo el amor con una mujer de 58 años.
Aunque numerosos estudios psiquiátricos no especifican si la adicción sexo ciberespacial es
una enfermedad o un simple desorden en la conducta del individuo, varios de los médicos si
establecen diferencias y otros tantos de los adictos son atendidos en clínicas para la
rehabilitación por un consumo excesivo. En Estados Unidos el ministerios “Heart to heart
Counseling Center” provee información en el ámbito mundial sobre diferentes estudios
realizados.
Varios de los estudios en Norteamérica, concluyen que aquellas personas que dedican mas de
11 horas semanales a buscar pornográficas en internet tienen problemas mentales. Es así como
aquellas personas que dedican mas de 1 hora y media diaria, según el estudio, denotan
problemas de índole sexual o personal. Una de las revistas norteamericanas la Webworl, según
su publicación, estableció que el 8 % de los consultados se sitúa en el grupo con problemas de
tipo personal u otra índole, también se estableció que la mayoría de los internautas que visitan
sitios web lo hacen por diversión, y no necesariamente para buscar excitación, permaneciendo
algunos minutos. También se detecto que el 86% de los hombres consultados admite haber
consultado sitios pornográficos y el 13% restante es equivalente a mujeres que se vinculan al
medio cibernético.
EL NEGOCIO
El cibersexo mueve en todo el mundo 1,2 billones de dólares al año, y tiende a aumentar aun
más, el sexo en cualquier soporte vende y en internet los clientes pueden ver contenidos
pornográficos, sin visitar el cuarto de atrás del vídeo club de su barrio, pueden ver lo que
quieran a la hora que elijan y en el lugar que prefieran.
Los sitios porno utilizan técnicas de Marketing que las grandes empresas harían bien en imitar.
Si no, haga la prueba: teclee en cualquier buscador la palabra Sexo, y verá como la pagina
correspondiente se llena de publicidad x. Son, además, empresas fuertemente capitalizadas que
invierten hasta dos millones de dólares en la campaña de lanzamiento en la web, siendo en la
actualidad vanguardia tecnológica de internet.
Gracias a esta política agresiva de inversiones, los web porno se han trasformado en auténticos
shows digitales, para una cuota mensual de 10 dólares, los clientes pueden ver desnudarse a
chicas en vídeo y en directo.
Dos de los reyes del comercio on-line tienen 24 y 27 años, ellos son Seth Wahavsky y Dannie
Ashe. El primer propietario de Penthouse es conocido como el rey del Ciberporno, Danni es
propietario del web erótico, entre otros.
3D-Bondage
(para mayores de 18 años)
Por Raúl Aguiar
Al llegar a casa ella me estará esperando, dispuesta a cumplir todos mis deseos, los
más nobles y los más retorcidos. Por eso no escatimo y regreso en taxi, y hasta soy
capaz de darle una buena propina al chofer por dejarme antes de lo que esperaba. Todo
el viaje lo he pasado lleno de fantasías sexuales y hasta tengo que simular mi erección
al descender del vehículo. Ya en el apartamento no me demoro ni cinco minutos en
comer un bocadillo, vestirme con el traje de licra, conectarme los biosensores,
vibradores, difusores de calor, los captadores de sensaciones táctiles, el casco de RV y
sentarme de inmediato frente al ordenador.
Tecleo mis preferencias en la ventana de opciones, salvo la nueva configuración y
ejecuto el programa. La renderización es instantánea.
Esta vez me encuentro en la oficina principal de la Corporación millonaria Dreamtech,
de la que soy su presidente ejecutivo. La mando a llamar, “Helga, ven aquí
inmediatamente” por el dictáfono y ella aparece tímida y con la mirada baja, vestida de
negro de la cabeza a los pies.
- Sí, señor Philipe. ¿Deseaba verme?
Tan puta como siempre., pienso No sé a quien espera engañar con esa carita de
desamparada. Yo me entretengo un rato en humillarla como se merece, le devuelvo la
carpeta de los informes estadísticos para que los rehaga, la llamo inútil, incapaz, y la
amenazo con despedirla sin contemplaciones si tengo que devolverle sus informes de
nuevo. Ella palidece en el acto. “No, por favor, señor Philip, yo le prometo...” pero yo
no quiero escuchar sus excusas y promesas.
-Estoy cansado de darte oportunidades, siempre es igual. Creo que mejor busco a una
secretaria más eficiente, que no me haga perder tanto tiempo y dinero. Es más, me lo
he pensado mejor. Estás despedida. Ve a recoger tu cheque y....
-¡No, por favor!, ¡No me haga eso, señor Philipe!, yo estoy dispuesta a hacer todo lo
que usted me diga, se lo juro señor..
- ¿Cualquier cosa?
-Lo que usted desee señor..
Sonrío. Así es como siempre he querido tenerla, a mis pies y rogando. Esta es la
oportunidad que esperaba.
-Demuéstramelo.
- ¿Cómo? – Ella seguramente ya adivina lo que le voy a pedir a continuación.
-Desnúdate.
Vacila pero yo sé que en el fondo lo desea, lo compruebo cuando se inclina un poco
más de la cuenta al sacarse el vestido. Al rato ya está frente a mí, totalmente desnuda y
abierta de piernas.
-Acércate. –le ordeno.
La acaricio un poco y ella se estremece, mira hacia la puerta sin poder ocultar su
nerviosismo, luego se acerca, me abre la bragueta y pugna con mi verga en su boca,
pero eso no me excita. Siempre he necesitado de emociones más fuertes, así que la
separo de mí halándola por el cabello y le ordeno ponerse el respaldo de la silla a
altura del abdomen, doblarse sobre él y apoyar los brazos y manos en el asiento.
Saco de una gaveta varias sogas y la ato en esa posición, cuidando de que las cuerdas
queden bien apretadas para observar como se le amorata la piel. Luego le tapo los ojos
con mi corbata oscura, para que no pueda ver y así sienta más y no pueda saber ni
dónde yo estoy o con qué voy a golpearla. Ella no sabe todo lo que le espera. Me quito
el cinturón y empiezo a acariciarle las nalgas, piernas y espalda. Ya comienzan a
molestarle las cuerdas, sobre todo las que le cruzan sobre los senos, que imagino ya
deben estar rojísimo. De repente la azoto en el culo, le escuece, ella da un respingo y
un grito de dolor.
-Cállate, puta, no quiero oírte, si no eres capaz de aguantar, mejor lo dejamos aquí y te
largas de la empresa.
-No, señor Philipe, por favor, no chillaré, se lo prometo, -me contesta llorosa, pero yo
necesito humillarla todavía más.
- A partir de ahora, me vas a llamar “Mi Amo”
Ella no dice nada y le fustigo nuevamente las nalgas con más fuerza. Noto como sus
manos aprietan los bordes de la silla.
- ¿Quién yo soy?
- Mi...mi amo, señor.
-Así me gusta, esclava.
La sigo azotando rítmicamente. Empiezo por golpes más suaves, para activar la
circulación, pero luego quiero que entienda que esto es un castigo verdadero, no un
juego, así que en cada zona o con cada instrumento le pego desde el inicio con fuerza y
con saña. Es también una venganza y no sólo un castigo. En todos los casos fustigo
amplias zonas de su piel, pero insistiendo en algunas para acentuar el dolor y la
consecuente marca posterior, que tanto me gustan. Algún gemido muy apagado me va
indicando dónde más le duele y ahí es donde yo más insisto en el escarmiento.
Acaricio su espalda y está empapada de sudor. Solloza de nuevo y le pregunto:
- ¿No te gusta? ¿Quieres irte?.
Niega con la cabeza y le doy permiso para hablar.
- Sólo quiero ser tu esclava, castígame.
Acerco mi mano a su vagina, meto un par de dedos y compruebo que está mojada
como nunca. Le digo: "Quizás te gustaría que te follara, ¿verdad?". Ella afirma con la
cabeza sin hablar. Separo sus nalgas, coloco mi verga en su ano, y la penetro sin
contemplaciones. Helda grita de dolor. Bombeo entre sus nalgas golpeándolas con el
reverso de mis manos con toda mi fuerza. Yo quiero que le duela por dentro y por
fuera, así que la embisto repetidas veces con toda mi rabia, sin miramientos y. al final
eyaculo en sus entrañas. Esta vez me quedo unos instantes ante ella, para que pueda
adorar mi miembro todavía en erección, haciéndole lamerlo, para limpiarlo de los
restos de semen y de la suciedad de su culo.
-Eres mi puta, - le digo. – Quiero que me lo digas.
-Soy tu puta. Soy una puta.-repite como si comenzara a gustarle -. Haz conmigo lo que
tú quieras.
No me conformo. Necesito humillarla todavía más. Hasta el límite. La desato y le
ordeno ponerse de rodillas. Después, tomo una soga y se la anudo al cuello.
-Ahora eres una perra. Vamos para donde te diga. Anda, perra.
Tirando hasta casi asfixiarla, la llevo hasta el cuarto de baño. La mando a meterse en
la bañera, boca arriba y con los ojos cerrados. Me encaramo en los bordes y comienzo
a orinar sobre su rostro. Le digo que abra la boca y se lo beba y ella obedece, tragando
parte del orine, temiendo mi ira.
La mando lavarse, mientras me abrocho la portañuela. Al fin, satisfecho de su
obediencia, le digo que se seque. Ya seca, la hago sentarse en el borde de la bañera y,
sentándome yo sobre la tapa del inodoro, le digo que estoy contento de ella, que es una
buena esclava, y que no la voy a despedir, pero que en lo adelante deberá estar
dispuesta a seguir cumpliendo todos mis deseos. Helga se apresura a contestar:
- Sí, mi amo. Lo que usted quiera.
- Ahora lárgate, puta.
- Sí, mi amo.
Ella desaparece antes de que me arrepienta. Yo me siento plenamente satisfecho. Por
fin me decido y con un poco de pesar, levanto la manga izquierda de mi camisa y
aprieto un botón a un costado del rólex de oro..
Y vuelvo al mundo real.
Al mediocre y estúpido mundo real. Donde no llevo un rólex de oro y mucho menos
soy el presidente de la corporación Dreamtech.
Me quito el casco y los dispositivos biosensores. Ahora tendré que lavar el depósitovulva donde ha ido a parar mi semen y el orine de la escena final. Compruebo que
estoy empapado de sudor y me meto a la ducha. Esta sesión de hoy me ha relajado más
que nunca y cuando ya estoy dispuesto a irme a la cama suena el pitido que indica un
mensaje urgente de la empresa.
En la pantalla del ordenador aparece el rostro real de Helga, mi jefa de despacho.
- Señor Philips, ¿Dónde están los informes que le pedí estuvieran listos hoy para las 7
en punto? ¿Hasta cuando vamos a esperar porque comprenda la importancia de...?
¿No sabe que por su ineficiencia la corporación podría perder...? ¡Venga
inmediatamente para acá!
Yo asiento a todo lo que dice. No puedo poner en peligro mi empleo así que corro a
vestirme temblando por no poder llegar a tiempo. Por dios, como la detesto, siempre
con su aire superior, tratándome como a un títere, llamándome ineficiente, mediocre,
poniéndome en evidencia... ¡Dios, como la odio!
Mientras trato de conseguir un taxi, casi imposible a estas altas horas de la noche, me
consuelo pensando que en la próxima sesión podría coger a la muy zorra y llenarle el
cuerpo de alfileres, o meterle un cable con electricidad en la vagina, o picarla en
pedacitos e írmela comiendo mientras ella se va desangrando lentamente, o...
. Género
y Sexualidad en las Comunidades Virtuales
Autor: Edgar Gómez Cruz
1.Cuerpos y cyborgs
"Los hombres quieren forzar a las computadoras a someterse. Las mujeres sólo quieren las
computadoras para trabajar"
Deborah Tannen
En su novela Frankenstein realizada en el siglo XIX, Mary Shelley habla de un científico que
"crea" un ser humano con partes de diferentes cuerpos y mediante un proceso bioeléctrico le
da vida. Esta podría ser una buena metáfora para ejemplificar lo que sucede en los sistemas de
Comunicación Mediada por Computadora (CMC), en donde una persona "crea" a otra persona
que aunque diferente a ella misma, es un reflejo de su personalidad (igual que Frankenstein del
doctor que lo creó) pero que está también construida de partes, sólo que no son partes físicas
sino construcciones cognitivas compartidas, fragmentos de imaginación expresados en
palabras y decodificados en sueños e ilusiones. "Penetrar en la pantalla envuelve un estado de
cambio, del espacio físico y biológico del espectador corpóreo al simbólico, metafórico, de
una "alucinación consensual" del ciberespacio; espacio que es locus de un intenso deseo de
reconfigurar la corporización" (Stone, 1992, p. 109).
Aunque el referente físico está ausente, se tiene un "cuerpo virtual", una parte de esa
construcción social compartida, lo que algunos autores llaman "Cyborg" (Haraway, 1996), que
en estricto sentido es un ser compuesto de un componente humano y uno mecánico
(electrónico en este caso) o en palabras de Kember (1998).
"El cyborg es un híbrido de humano y máquina, o una encarnación de la diferencia. No es un
sujeto sino una posición de sujeto, y su existencia es altamente contingente" (p. 362).
Stone (1992) señala que los participantes de la CMC "construyen sus cuerpos en línea
describiéndolos, ya sea espontáneamente o como respuesta a preguntas, y articulan sus
discursos alrededor de esta asunción" (p. 105) siendo entonces un proceso de construccióndeconstrucción. En este sentido, se abren posibilidades nuevas para aquellas personas con
descontento con su propio físico, ya sea por razones psicológicas o reales, lo que puede ser el
caso de personas con discapacidad física, psicológica o social
"La gente cuyas desventajas físicas le dificultan tener nuevas amistades, encuentra que las
comunidades virtuales los tratan como siempre quisieron que se les tratara, como pensadores
y transmisores de ideas y seres que sienten y no como vasijas carnales con una cierta
apariencia y una manera de hablar y de caminar o de no hablar o de no caminar" (1992).
Resulta lógico señalar entonces el carácter cuasi terapéutico e inclusive catártico que puede
generar el medio.
"Los participantes aprenden a delegar sus agencias a cuerpos representativos que existen en
el ciberespacio, pero las interacciones que ellos tienen en esos espacios son mucho más como
interacciones en el mundo real. Los niños tímidos desarrollan habilidades sociales en línea
que después pueden aplicar en interacciones cara a cara con amigos "reales"" (Shina y Stone,
1995, pag. 273).
La pregunta sobre el cuerpo nos lleva necesariamente a cuestionarnos sobre el género y la
sexualidad a través del Internet, siendo el segundo uno de los temas que más debate suscita y
preocupa en cuanto al uso de la red.
2. Género en las comunidades en línea, algunas consideraciones
Si bien este no pretende ser un metanálisis exhaustivo de los estudios de género sobre CMC, si
podemos afirmar que la mayoría coincide en que si bien las tecnologías ofrecen oportunidades
de igualdad y desarrollo femenino, tanto el diseño, el acceso y el uso de dichas tecnologías
siguen siendo una construcción masculina. Herring (1996) defiende la idea de que al contrario
de lo que se piensa sobre el hecho de que la CMC neutraliza la distinción de género, "las
mujeres y los hombres tienen diferentes y reconocibles formas de escribir sus mensajes
electrónicos" (p. 144) por lo que al haber reconocimiento, sigue existiendo la diferencia.
Kember (1998) por su parte afirma que "El ciberespacio es el lugar donde las jerarquías de las
relaciones sociales se ven intensificadas" (p. 367) por lo que propone que "para el feminismo
es importante reconocer la multiplicidad de identidades y experiencias femeninas para
proporcionar una crítica adecuada a las formas dominantes de la ciencia y la tecnología y para
poder lograr el cambio" (p. 350). Aunque Plant (1996) lo pone en un plano mayor cuando
señala que la economía masculina es la culpable de una falta de desarrollo para las mujeres,
centrando su análisis en las nuevas tecnologías.
Hablando específicamente de la CMC hay que señalar que un elemento básico de dicho
análisis es que la conectividad sigue siendo en su mayoría de hombres con formación media
mínimo (aunque en algunos países se nivele más, en México sigue siendo esta la situación), lo
que reduce en mucho la participación femenina en dichos sistemas. Sin embargo, tomando
como base la afirmación de que la ausencia de una representación física es una característica
de la CMC, se puede pensar que las distinciones de género no existen, si bien es cierto que
elementos como el nick, o la información que se inserta en el sistema para validar las cuentas
pueden dar pistas, estas pueden ser informaciones falsas. Por ejemplo, alguien que se pone el
sobrenombre de "el macho" puede ser en realidad una mujer (de cualquier edad).
Dado el anonimato, se pueden generar situaciones en las que incluso se experimenta con la
creación de un ser virtual del otro sexo (o un personaje asexual). Bruckman (1996) dice que
"el género es sólo un ejemplo de un aspecto de la identidad personal que la gente explora en
los MUD" (p.445) y que interpreta como una mínima parte de un cambio mucho mayor: "El
intercambio de sexos es un ejemplo extremoso de algo fundamental: la red está en el proceso
de cambiar, no solamente la manera en la que trabajamos, sino la forma en la que pensamos
sobre nosotros mismos, y finalmente, quienes somos." (p. 446).
Una aportación importante desde la psicología es la de Turkle (1995) quien menciona distintos
casos de personas que utilizan un sistema de CMC para llevar a la práctica roles que en algún
momento juegan en su interior y que se basan en personas cercanas que quisieran ver
comportarse de esa manera. Por ejemplo, si la madre de una de las usuarias es incomprensiva y
violenta, el personaje creado por la hija podría ser el de una madre comprensiva y tranquila. Al
analizar esto, Turkle menciona la existencia de mundos alternativos que cubren necesidades o
situaciones deseadas que no pueden existir en la vida real. Intentando atenuar el sentido tan
trascendente de lo que pudiera acontecer al interior del BBS Argyle y Shields (1995) dicen:
"Los cuerpos y las experiencias de la vida cotidiana son, ambas, el contenido de la
comunicación por Internet (en la banalidad del chisme o las discusiones sobre sexo) y
contiguo por su uso (en la forma de los cuerpos de los usuarios). El Internet por si mismo es
parte de la vida cotidiana; es parte de los aspectos más banales de la interacción social (p.
58)".
Por supuesto, existe mucho terreno que explorar en cuanto a la relación de mujeres y hombres
en la red, se tienen que encontrar caminos desde el acceso para buscar una igualdad entre los
sexos en cuanto al uso de la tecnología y específicamente de Internet y la CMC. Kember cita a
Plant y señala que:
"Enganchado a las pantallas y conectado a las pletinas el hombre se convierte en usuario y en
adicto, y ya no puede insistir más en su soberanía y separación soberana de la naturaleza.
Cada vez más integrado con el entorno del que siempre se había considerado diferenciado, se
encuentra a sí mismo viajando en redes que ni siquiera sabía que existían y entrado en
espacios en los que sus concepciones de la realidad y la identidad quedan destruidas. Es el
retorno de lo reprimido, de lo femenino, incluso quizá la venganza de la naturaleza (p. 369)."
Quizá así sea.
3. Cibersexo en las cv
Ningún cuerpo virtual, sin importar que tan bello sea, podría retardar la muerte de un
ciberpunk con SIDA. Aun en la era de los sujetos tecnosociales, la vida se vive a través de
cuerpos.
Alluquere Stone
Todos los bits son iguales, pero algunos son más cachondos que otros.
Van Deur Leun
4. Sexo en internet; mito o realidad
Andrés de Luna, quizá una de las personas que desde México mas ha entendido la sexualidad
como una parte de la expresión de lo llamado humano, cuenta que existe un programa de
televisión en una emisora local de Nueva York, en donde una mujer recibe llamadas del
público (que por supuesto tiene que pagar una cantidad considerable por minuto), y actúa en
vivo lo que el público le va diciendo, claro está, relacionado con el sexo, un programa que
propone una especie de voyeurismo interactivo.
Van Der Leun (1996) habla de que siempre ha habido en la historia una relación estrecha entre
la tecnología y el uso sexual que se da de esta, en ello coincide con Rheingold (1995) y con
Tsang (2000) quien señala que "conforme la humanidad crea nuevas invenciones, las personas
encuentran formas de erotizar la nueva tecnología". Sin embargo, parece que esta búsqueda no
es exclusiva de la tecnología disponible, como dice Miranda (1994) Existen "dos aspectos
inherentes al ser humano, su aspiración al placer erótico y la diversidad de formas en que éste
puede manifestarse"
Sin embargo, la prueba del incremento en la oferta que involucra contenidos sexuales y
tecnologías es comprobable porque en últimos tiempos ha habido una importante movilidad
social para frenar la expansión del uso sexual de las nuevas tecnologías de comunicación,
mientras que las ofertas crecen a diario (desde CD-ROMs pornos hasta sitios con videos, fotos,
animaciones y demás herramientas sexo-tecnológicas). Eso sin hablar de la vieja lucha contra
la violencia y el sexo en los mensajes televisivos y cinematográficos.
Una de las maneras para conocer el uso que se da al Internet es precisamente el de conocer la
oferta existente y para ello, las pistas que nos pueden dar los buscadores (o motores de
búsqueda) son muy interesantes. Utilizando el Google, que es la nueva generación de
buscadores y uno de los más avanzados, realicé la búsqueda de una serie de conceptos y
palabras claves para saber el número de menciones que estos tienen en los sitios de Internet.
Esta búsqueda dio como resultado la siguiente tabla:
Business (negocios) 76,900,000
Computer (computadora) 45,100,000
Art 37,200,000
Sex 34,700,000
Power (poder) 32,800,000
Money (dinero) 30,300,000
Love (amor) 29,800,000
Religion 2,520,000
Vemos que si bien el sexo tiene un número muy importante de menciones, dista mucho de la
oferta dedicada a los sitios de negocios o de la industria de la computación. Incluso es
interesante ver que existe un mayor número de sitios dedicados al arte que a cuestiones
relacionadas con el ámbito sexual, aunque valga el comentario de que no todos los sitios con
referencia al sexo son necesariamente pornografía, y pueden ser desde consultorios médicos
hasta trabajos académicos sobre el tema. Aunque, la mayoría si tienen que ver con contenido
sexual gráfico y explícito. Quise también hacer una búsqueda con palabras cuyo significado
remita a los valores morales. Siendo la religión (por mucho) la de menor número, mientras que
sitios con palabras como poder, dinero, y amor están por debajo de los dedicados al sexo. Cabe
señalar un dato por demás interesante; realizando la búsqueda en español, la palabra "amor"
tiene 1,600,000 páginas mientras que la palabra "sexo" sólo tiene 1,050,000, dato que dejo a la
libre interpretación del lector.
Definitivamente estos datos no tienen representatividad alguna, pero si son indicativos del uso
que se da al Internet (si pensamos en la ley de la oferta y la demanda en donde a mayor
demanda, mayor oferta). Por otro lado, son conceptos aislados que no significan
necesariamente algo en sí mismos. Sin embargo, considero interesante el saber que si bien el
Internet ha desarrollado en muchos de sus nodos, puertos donde los usuarios puedan tener
desahogos físicos o emocionales relacionados con cuestiones sexuales, es el comercio el que
sigue teniendo la batuta de lo que sucede en su interior (de hecho la mayoría de los sitios
sexuales, son comerciales).
5. La sociedad civil y el internet como objeto sexual
Ahora bien, más que establecer un análisis minucioso de los diversos ámbitos sexuales de las
nuevas tecnologías o el Internet, mi interés radica en conocer las formas en que las personas
comunes y corrientes utilizan al Internet para desarrollar actividades psico y socio sexuales y
de qué forma se dan estos usos en los sistemas de Comunicación Mediada por Computadora
(CMC). Sin embargo, considero importante como un marco de referencia el apuntar algunas de
las situaciones que implican cuestiones sexuales en el uso del Internet.
Por un lado podríamos hablar de contenidos sexuales a los cuales se busca el acceso,
sobretodo, páginas de Internet, servicios de video en demanda, o incluso audios. Un ejemplo
que podría ser útil para ilustrar esto es un servicio de video por Internet en donde una
presentadora da las noticias al mismo tiempo que se desnuda (las noticias son serias). Por otro
lado tenemos aquellos mensajes con contenido sexual que no son necesariamente buscados,
como correos electrónicos, o resultados de búsquedas, y que, aunque pueden no ser vistos, si
es importante mencionarlos como parte del tráfico sexual de la red. Esta distinción es
importante porque nos puede decir a que grado está impregnado el Internet con una carga
sexual, si bien hay personas a las que no les ha sucedido, una gran parte de la población que
tiene correo electrónico ha recibido por lo menos alguna vez, un texto, una imagen, una
fotografía o hasta un video con contenido sexual, ya sea de carácter erótico o simplemente
irónico pero con contenido sexual. También aquellos que están suscritos a algún sistema de
CMC han recibido alguna vez una invitación a visitar páginas con contenido sexual explícito.
Todos los informantes coincidieron que existía un gran número de contenidos sexuales y que
todos ellos habían recibido ya sea invitaciones o archivos electrónicos.
Ahora bien, hablando específicamente de las llamadas comunidades virtuales ya vimos que
éstas se caracterizan por la capacidad de cohesión y agrupamiento de personas con intereses en
común, de esta forma, se convierten en verdaderos nichos de intercambio de información en
donde, basándose en elementos de unión, es muy fácil establecer lazos que desemboquen en
diversos tipos de relaciones. El Internet se está posicionando como una opción muy recurrida
para encontrar compañía amistosa, romántica, sexual, platónica o de cualquier tipo. Ya las
historias de parejas que se han conocido de esta forma y que están casados (o que dejaron a sus
esposas o esposos por alguien más) no son la novedad y cada vez son más las almas solitarias
(y las no tanto) que encuentran en el Internet el medio idóneo para conocerse, enamorarse y
porqué no, satisfacerse. El analizar las relaciones en general que se dan vía Internet es un
trabajo sumamente interesante y necesario. Sin embargo, este texto se centra únicamente en el
plano de relaciones sexuales y no de otro tipo (que por supuesto muchas veces se mezclan;
relaciones sexuales entre amigos, entre parejas románticas etc.). Algunos piensan que no hay
sexo más seguro que el cibernético. Plant habla de esta visión y la describe de esta manera:
"Sexo libre de contacto, sin secreciones en una zona de total autonomía. Un ambiente libre de
los efectos secundarios y de las complicaciones de las cópulas reales; enfermedades
transmitidas, concepciones y abortos, y la triste obligación de las necesidades emocionales.
Un circuito cerrado, sellado del exterior, un espacio virtual para acceder a voluntad" (p.460).
Y sin embargo, ella critica esta visión argumentando que finalmente las personas se exponen
igual que en una relación normal. Pero para sacar una conclusión debemos conocer en
principio qué es exactamente y cuáles son las posibilidades del sexo virtual o también llamado
"cibersexo".
Cibersexo: ¿la última frontera del eros?
La base de los sistemas de CMC en un principio era únicamente textual, es decir, las
posibilidades de erotización eran únicamente las que pudieran desarrollarse con palabras. Sin
embargo, con la llegada de programas más avanzados como el ICQ o los "messengers" de
Hotmail o Yahoo se tiende a tener más elementos audiovisuales, en donde la videoconferencia
es el punto máximo de desarrollo hasta el momento. Pero aunque se tiene la posibilidad de
mostrarse físicamente (mediante fotos o videos), las personas siguen utilizando recursos para
recrear o construir una identidad ficticia (ponen fotos de artistas, caricaturas, fotos retocadas
digitalmente etc.). Aunque el grueso de la interacción sigue siendo textual. Por ello, la
sexualidad se recrea diferente, los usuarios inventan y reinventan formas discursivas que
funcionan como interacción social, esto permite recrear la sexualidad física con la referencia
de la vida real. Llegando a un grado de inmersión en donde surgen situaciones difíciles de
entender, por ejemplo casos de "sexoservidoras" (Van Der Leun, 1996) y "violaciones"
(Dibell, 1996) en línea.
El concepto clave y medular de esta cuestión es el cibersexo o sexo virtual, Branwyn (2000)
señala que hay tres tipos de sexo virtual; el real que se da cuando dos personas en un espacio
bidireccional (que podría considerarse la forma íntima de interacción; dos personas "hablando"
en un espacio sin que alguien más pueda acceder a él, aunque también puede ser en un espacio
con mayor flujo de personas, una cuestión muy parecida al teléfono), comienzan a describir
una relación sexual a la vez que (y no necesariamente) concretan con contacto físico personal
esta dinámica. Si bien en un principio esto pudiera parecer antinatura, frío, insensible e
impersonal, dadas las características de inmersión en el sistema, en algún momento puede
hacerse transparente la comunicación, y la erotización mutua puede llegar a niveles
sorprendentes; una mezcla entre literatura erótica, plática de pareja o terapia sexual que con la
ayuda de la imaginación puede alcanzar niveles de sensibilidad muy fuertes (y por supuesto
orgasmos ya que existe un estímulo físico). Miranda lo apunta claramente al hablar de la
"fantasía central alucinatoria":
"Cuando el "otro" dador de placer está ausente se utiliza la satisfacción alucinatoria, la
activación de la huella que en la memoria dejó la primera experiencia de placer, éste es el
mecanismo precursor de la capacidad creativa, de inventar e imaginar al "otro satisfactor""
(1994, p. 524).
Y continúa diciendo "Un compañero es sólo un acompañante con quien compartir la
experiencia pero la calidad y disfrute de la misma depende únicamente de la propia persona"
(pág. 531). Por ello, el cibersexo encuentra un eco en las fantasías para desarrollarse, llegando
a ser tan extrema esta situación que incluso hay engaños "permitidos" como lo señala una
informante que tiene relaciones lésbicas mediadas por computadora:
"...hay que jugarsela pues es parte del juego, pero hay limites, tu crees que estas con una
mujer y te salen con otra cosa, y eso por lo menos te enfria un poco pues te cambia toda tu
fantasia que venias creando, aparte de que yo sinceramente cuando los descubro antes de
terminar, les pido que sigan actuando como mujeres para poder continuar mi fantasia, aunque
he de confesar que es muy probable que ya haya tenido cibersexo con un hombre que se hace
pasar por mujer y no me di cuenta nunca."
Quien continúa diciendo "si la otra persona no me agrada mucho fisicamente simplemente
busco cualquier foto de otra persona en Internet o me la imagino a mi gusto" de manera que
queda perfectamente claro el hecho de que la fantasía es el componente principal del
cibersexo.
Precisamente, la segunda forma del cibersexo es la fantasiosa, que podría describirse igual que
el anterior pero con la diferencia que éste no se basa en la descripción detallada de los
movimientos que se efectúan a los extremos de una conexión (aunque al hablar de una cópula
necesariamente el primero también tiene una carga de fantasía) sino se basa en una descripción
fantasiosa ya sea del lugar donde se lleva a cabo la relación sexual (en una playa, una montaña,
una nube), de personas en específico (Romeo y Julieta, escena de amor en Titanic etc.) o
pudiendo ser también una construcción mayor (una orgía, encuentros sadomasoquistas etc.).
Y finalmente, está el teleoperado, este es un tipo de relación sexual en donde una persona
"guía" a otras dos (o más), que se encuentran del otro lado de la pantalla, sobre qué hacer y
cómo hacerlo, este tipo de relación sexual se da en algunas parejas que quieren sentir ser
"swingers" (personas que intercambian parejas) sin que exista algún problema con
enfermedades o desconocidos, o, como una forma de estimulación externa.
El sexo virtual no es sólo un acto individual como pudiera ser el caso de una experiencia
sexual con otro tipo de medios como una revista, un video o algún objeto (incluso las mismas
páginas Web). La diferencia, como lo señala Turkle, es el hecho de que aquí, se requiere una
fantasía compartida que requiere atención no sólo de la imaginación y el cuerpo propio sino de
la idealización del otro. Esta fantasía además está construida en conjunto, sea horizontal o no,
plena y mutua o no, se requiere una serie de factores que son realizados por las personas, que
no están estáticos, sino al contrario, se desarrollan gracias a la capacidad de imaginación de las
personas y al flujo constante de información de unos a otros. Una informante lo apunta así en
su página de consejos a los que quieren tener cibersexo:
"Si no encuentras qué decir, bueno, ¡a lo mejor el cibersexo no es para ti! Ve a rentar una
película porno, o encuentra una línea de teléfono sexual donde le puedas pagar a una
profesional para que te entretenga. A lo mejor incluso leer (gulp) una novela erótica."
Stone (1991) hace una similitud entre los trabajadores del sexo por teléfono y las personas que
trabajan sobre realidad virtual que bien pudiera servir para aplicarse al análisis de lo que
sucede en el cibersexo, "el trabajo de ambos es acerca de la representación del cuerpo humano
a través de limitados canales de comunicación, y ambos grupos hacen esto al codificar
expectativas culturales como significados" (p. 102). Continúa diciendo:
"El sexo telefónico es el proceso de provocar, satisfacer, construir deseo a través de una sola
forma de comunicación, el teléfono. En el proceso, los participantes dibujan con un repertorio
(repertoire) de códigos culturales para construir un escenario que comprima largas
cantidades de información en un espacio muy pequeño. El trabajador codifica verbalmente
gestos, apariencias, y proclividad, y expresa estos como signos reconocibles, que muchas
veces no son más que una palabra. El cliente descomprime estas evidencias y construye una
densa y compleja imagen interaccional" (p. 103).
Stone señala que este acto es completo "individual e interpretativo (ya que) el cliente
construye significados que son densos, situados localmente y socialmente particular" (p. 103).
Branwyn apuntala esta comparación y dice que "el sexo computacional es una curiosa mezcla
de sexo telefónico, cita computarizada y voyeurismo hi-tech" (p.398). Pero no hay que perder
de vista el hecho de que a diferencia del sexo telefónico, en el cibersexo no hay las mismas
limitantes (de tiempo y dinero. Aunque no debemos olvidar que tiene sus propias limitantes) y
se requiere de dos personas para llevarlo a cabo.
7. Cibersexo; una visita al interior
Dadas las características que proporciona la CMC (anonimato, privacidad, y en algún
momento transparencia) ésta se puede tornar en un espacio lúdico para la experimentación de
nuevas sensaciones, una especie de laboratorio de la sexualidad en donde se interpretan, crean,
recrean, construyen y destruyen tabúes y mitos, lo que De Luna (1997) llama "obsenario". Una
informante lo ilustra diciendo:
"El ciberespacio es el lugar donde tu y yo podemos disfrutar placeres "prohibidos", que en la
realidad podrían no ser placenteros… en el ciber(sexo), tu puedes hacer cosas sucias, locas o
humillantes que nunca podrías hacer en la vida real, ni quisieras hacer. Vamos disfrutando
esa libertad."
Esta libertad llega a niveles extremos, por ejemplo el caso de un grupo de mujeres que crearon
un club basado en juegos de rol en donde el tema es la violación. Es decir, se exponen en línea
a violaciones sexuales actuadas porellas mismas. Esto tiene una explicación, en palabras de
Turkle (1995) "Para que la realidad virtual sea interesante tiene que emular lo real. Pero
también tiene que ser posible hacer en lo virtual lo que no puedes hacer en el real" (p.219). En
ello todos los informantes coinciden ya que para ellos esa arena de significación socio-sexual
les da la oportunidad de "probar" situaciones o relaciones que no podrían ser posibles en la
vida real. Sin duda la red es un lugar que propicia el descubrimiento, no sólo propio, sino
compartido, es un terreno de experimentación, de juego, de riesgo y eso atrae a muchas
personas, como una de las informantes que en su página con contenidos sexuales tenía la
siguiente descripción:
"Recientemente he descubierto el mundo de la red y he tomado el riesgo de poner una página.
No se si ha sido una buena idea, estaría bien que me escribieras y me dijeras lo que dices.
Quisiera conocer personas como yo: sin miedo a las apariencias, libre y que les guste el sexo
y las experiencias nuevas."
Debo aclarar también que no todas las personas que entran a sistemas de CMC están
interesadas en el cibersexo, de hecho, una gran mayoría está en contra (sobretodo mujeres que
son molestadas continuamente por hombres que les piden tener relaciones). Una informante
apunta "La única razón para el cibersexo es porque la gente no puede tener alguno". Incluso
existen voces que critican al cibersexo desde el temor que éste pueda llegar a ser un sustituto
del sexo normal, en realidad parece que el cibersexo es únicamente una opción más ya que
todos los informantes que tienen actividad sexual mediada por computadora hablan de que
prefieren el sexo real, por mucho, al virtual, un informante dice "El cibersexo tiene que ver
con la fantasía, no es un substituto del estar con alguien". Sin embargo, la mayoría coincide en
el hecho de que el cibersexo es más una opción intermedia entre la abstinencia y el desenfreno.
Una informante del estudio de Hamman (1996) lo ejemplifica adecuadamente al decir que
prefiere el sexo real al cibersexo, pero que prefiere el cibersexo a la masturbación solitaria, en
lo que todos mis informantes coinciden. Una de ellas en su "perfil" señala:
"A TODOS MIS CIBERAMIGOS Y AMANTES; CONTÁCTENME PERSONALMENTE. Fotos,
webcam (cámara de video para web), conversación con voz, peticiones de citas personales.
Esto es lo real para mí. Cuando quiero real (físico) mi novio se encarga perfectamente de
ello."
Entonces, dadas las enfermedades y las complicaciones del sexo casual, y o la falta de parejas,
el cibersexo parece ser una opción válida para muchas personas. Dorian Sagan dijo en la
revista Wired "no hay sexo más seguro que el cibersexo". Ahora, dentro de este nivel, también
se encuentran aquellas personas que utilizan al cibersexo como un laboratorio para explorar las
posibilidades de su propia sexualidad, sus alcances y gustos, como una informante apunta "Lo
hago sólo por ver y sentirme a mi misma, sólo para hacer algo nuevo". Al respecto Turkle
(1995) habla del concepto de "depaysement" (despaisarse), lo que sucede con los
antropólogos, cuando después de dejar su propia cultura para estudiar otra que no les es
familiar, regresan y ven la suya con ojos más "frescos", Hamman (1996) habla de que esto
puede suceder con el cibersexo, ya que las personas se atreven a ir más allá y con ello pueden
ganar seguridad, estabilidad y reconocimiento. Por supuesto que las condiciones determinan
también aspectos negativos, incluso pudiendo ser totalmente contrarios a los señalados,
llegando a la decepción (Donath, ?) y en determinado nivel a un ultraje Hamman (1996). Pero
esto no parece ser una limitante para las personas que tienen relaciones, tanto emocionales
como sexuales, mediadas por computadora. Una informante incluso lo recomienda porque "es
ideal para las personas jóvenes que quieren saber y aprender un poco del sexo, por lo menos
una idea de cómo puede ser usado". De esta manera vemos, algo que he señalado en diversos
momentos, que el uso de una tecnología en realidad no transforma las vivencias de las
personas y su relación con el mundo, en realidad las potencía rompiendo algunas barreras
(tiempo, distancia, rapidez, realismo) y esto puede ser para bien o para mal, como señala Lull
(2000):
"La gente común de todos los estilos de vida infunde regularmente y con mucha habilidad sus
mundos culturales y relativamente no mediados con recursos culturales distantes (nuevos,
mediados, simbólicos), para formar las múltiples trayectorias de su vida diaria. Estos
ejercicios creativos producen resultados positivos para sus "autores". Representan
aplicaciones culurales complejas de "poder simbólico"".
Sin embargo, es necesaria una contraparte reflexiva para que no se vaya a configurar (o a
desfigurar) una visión demasiado optimista y por ello poco realista de la situación, por ello,
apunto algunos factores a continuación.
8. Cibersexo y libertad; voces encontradas
Por supuesto existen preocupaciones en torno al uso de estos sistemas para fines sexuales.
Primero que nada, no debemos olvidar que la mayoría de usuarios de estos sistemas son
hombres entre los veinte y los treinta años y que prácticamente (por ejemplo en los chats de
cibersexo) son los únicos que deambulan por ahí en busca de relaciones sexuales mediadas por
computadora. Esta cifra se balancea un poco en sistemas de otros países, sin embargo en
Latinoamérica es totalmente notoria la presencia masculina mayoritaria y que además llevan la
batuta. Esta y otras son situaciones que preocupan a varios autores [(Tsang200), (Branwyn
2000)] que señalan que lo virtual no deja afuera el racismo y el sexismo implícitos en la vida
cotidiana. Wilbur (2000) desde una posición más fuerte dice:
"La comunidad virtual es la ilusión de una comunidad en donde no hay personas reales y no
hay comunicación real. Es un término utilizado por idealistas tecnofílicos que no alcanzan a
comprender que lo auténtico no puede ser engendrado por medios tecnológicos. La
comunidad virtual vuela en la cara de la ´naturaleza humana´ que parece ser, esencialmente,
depravada" (p.50).
Otro de los grandes problemas que el cibersexo puede traer consigo es el de la explosión de
una economía basada en la explotación de la sexualidad. El hecho de que la exposición del
cuerpo y la propia sexualidad al público se convierta en una forma de negocio, nos lleva a
pensar que esta "revolución" tecnológica no es precisamente acorde a esa visión idealista en la
que cada uno puede ser productor de sentido en potencia, a menos claro, que esto signifique la
reproducción de esquemas de comercio capitalistas y degradados, por ejemplo la pornografía.
En realidad yo creo que aprovechándose de esta "mercadotecnia" tecnofílica, de que
cualquiera es creador de contenidos y por lo tanto el acceso a ellos es democrático, horizontal
(y gratuito), profesionales de la sexualidad encuentran en ello una forma de asegurarse mayor
número de clientes (y no me refiero sólo a sexoservidoras quienes sólo tienen un dispositivo
más para su oficio, sino estudiantes, amas de casa y de manera preocupante menores de edad).
Es muy común que se tienda una especie de trampa para captar la atención de las personas
hablando de servicios gratuitos y amateurs, como una informante apunta en su página de
pornografía:
"Este sitio es totalmente gratis sin molestas barreras o cobros y estoy intentando conservarlo
de esta manera, pero por favor tómate tu tiempo para entrar a las páginas de mis
patrocinadores y dejar tus datos para recibir fotografías de sexo duro (hard core) en tu correo
electrónico ya que esto ayuda a pagar los gastos de mantenimiento. Tu correo electrónico está
totalmente a salvo y no pasa por terceras personas de ninguna forma. Tu obtienes una
selección de fotos gratis cada día como resultado. Ayúdame a seguir dándote un sitio web de
sexo amateur. Gracias."
No hay que olvidar que la venta de información es quizá uno de los negocios más rentables de
la red. Con ella se crean grandes bases de datos con correos electrónicos y preferencias de
consumo o gustos y son vendidas a compañías que a su vez realizan cruces de información y
venden estos resultados a diferentes compañías. Si bien se está intentando regular esta y otras
situaciones aludiendo a la privacidad, el hecho de que Internet esté en varios países hace que lo
que es delito en uno no lo sea en otro.
Ahora bien, dentro de los sistemas de CMC, la sexualidad no sólo encuentra su camino
mediante el uso de la propuesta, el erotismo o el flujo de emociones causadas por el anonimato
o las posibilidades del sexo virtual. Un poco como respuesta a aquellos sumamente
preocupados por el uso del Internet como medio de desenfreno sexual, sobretodo algunas ligas
moralistas, o asociaciones civiles que lo señalan incluso como una patología, como algo
dañino, abordando el fenómeno con una visión simple y moralina, pero sin ningún intento por
abarcarlo en su contexto, analizarlo y dar un juicio objetivo, se puede decir que el sexo
también encuentra su lugar de reflexión, de seriedad, de preocupación ante la falta de
precauciones, información, conocimiento, y responsabilidad. Prueba de ello son los foros de
reflexión sobre sexualidad, género, SIDA etc. En donde la reflexión, el debate y el intercambio
de información encuentran su espacio propio y propicio. Lo interesante es la forma en la que
se combinan experiencias personales, dudas, comentarios, juicios y datos científicos. Y
sobretodo que la relación entre el ser virtual y el real, está íntimamente ligado, ya que por un
lado existe como espacio de juego y aislamiento de la realidad (en el sentido de experimentar
lo que no se puede en la vida cotidiana) y por otro lado se utiliza como un espacio de reflexión
sobre los mismos temas que causan una preocupación y una problemática en la realidad.
Complementando lo anterior está el hecho de poder hablar de temas socialmente censurados o
difíciles de una forma en la que se tengan las características de separación entre el ser virtual y
el real. Nuevamente, ante el anonimato, las personas pueden tener mayor libertad de cuestionar
cosas o entablar conversaciones que de otra forma podrían resultar embarazosas, lo cual es
muy positivo dada la apertura que se puede dar en cuanto a los tópicos dejando a un lado los
juicios de valor que suelen darse por este tipo de temáticas y la aceptación libremente de una
relación con ellos por parte de alguna persona. Así, la homosexualidad y las prácticas sociales
también tienen una cabida tanto de libre expresión como de ayuda y apoyo, como dice Sharf
(1997):
"Hay poblaciones vulnerables para quienes "el intercambio vía computadora se ha convertido
en la principal fuente de información y soporte social. En el espíritu de alianza terapéutica y
catarsis humana, ellos vierten sus sentimientos más profundos uno en el otro" (p. 246).
Se encuentran respuestas variadas en forma de consejos, citas de textos (principalmente
científicos, aunque de otro tipo también), otras anécdotas y respuestas precisas. Se retoman
espacios más relajados y con menos censura que en la vida real. Mensajes que generan una
discusión en torno a ellas en donde se dan consejos, direcciones y teléfonos de especialistas,
organizaciones y demás grupos que pueden proporcionar ayuda, aunque en el mismo foro
personas con conocimiento suficiente dan recomendaciones y conceptos claves.
Vemos entonces que por un lado existe una búsqueda lúdica de nuevos espacios de
experimentación que tienen que ver con el cuerpo, el deseo, las relaciones, el amor, la
colonización de territorios inexplorados, tecnológicos, virtuales y por otro, con las mismas
herramientas de las que se sirve el anterior, y utilizando el mismo medio y espacio, se
encuentra un intercambio de información que ayuda a adquirir mayor consciencia sobre
cuestiones relacionadas con la vida en pareja, la juventud, el sexo y el amor, lo cual puede
desembocar acciones directas o posiciones ante cierto fenómeno en la vida cotidiana, real.
Algunos autores anteponen el humanismo al proceso de tecnologización de lo llamado social:
"Al crear una realidad sintética y adentrarnos en un entorno simulado por la computadora,
socavamos el deseo humano de penetrar lo que nos elude radicalmente, lo nuevo e
impredecible. La visión computacional demiúrgica puede llegar a robarnos la libertad de ser
plenamente humanos" (Piscitelli, 1995, p. 223).
Aunque otros autores como Fernback (1997) dicen que:
"Podemos estar solos con nuestras computadoras mientras escribimos, pero estamos
participando en una forma de vida pública; una vida pública que deviene de la desconfianza
de nuestros vecinos y nuestros intensos deseos de privacidad que nos obliga a re-examinar
nuestras vidas atomizadas" (p. 38).
Estamos en la antesala de una sociedad cada vez más tecnológica y tenemos que estar de cerca,
no sólo viviendo los cambios sino, proponiéndolos con una visión más igualitaria y real.
(Tomado de http://www.cibersociedad.net)
ROCK ON
Pat Cadigan
La lluvia me despertó y pensé: mierda, aquí estoy, con la Señora Lluvia en la cara porque es justo
ahí donde me alcanza, sobre mi vieja jeta. Me senté y vi que todavía estaba en Newbury Street.
Contempla el hermoso centro de Boston. ¿Middlebury Street es el centro de Boston? ¿Esto
importaba mucho en mitad de la noche? No, realmente no. Y no se veía un alma por los alrededores.
Como dijo alguien, emborrachemos a Gina, y mientras esté inconsciente, nos iremos todos a
Vermont. ¿Amo Nueva Inglaterra? Es un gran lugar para vivir, pero que no te gustaría visitar.
Me aparté el pelo de los ojos y me pregunté si alguien me estaría buscando en ese momento ¡Eh!
¿Hay alguien que se asuste de una pecadora del rock and roll de cuarenta años?
Me precipité a uno de esos curiosos y viejos edificios en los cuales hay tiendas con la entrada a un
nivel más bajo que el suelo. Una pequeña marquesina guarecía de la lluvia, pero producía un
enloquecedor golpeteo al canalizarla hacia abajo. Escurrí el agua de mis ajustados pantalones y de mi
pelo y, sin más, me senté toda mojada. También tenía frío, supongo, pero no lo notaba demasiado.
Me senté un buen rato con la barbilla apoyada en las rodillas, ¿sabes?, y eso me hacía sentirme de
nuevo como una cría. Comencé a mover la cabeza y entonces empecé algo; algo primitivo, llevando
el ritmo sorprendentemente bien. Hombre-de-Guerra, ¡si pudieras verme ahora! Cuando los chicos
de azul me encontraron, estaba haciendo un rock and roll bastante bueno.
Y eso fue la puntilla. Nunca intenté levantarme e irme, pero si lo hubiera hecho, habría descubierto
que estaba atrapada en aquel lugar; un sitio pegajoso pensado para capturar en el acto a los chavales
b&e hasta que los chicos de azul pudieran llegar, entrar y cogerlos. Estaba sentada en una trampa y
haciéndola cada vez más profunda. La historia de mi vida.
Fueron amables conmigo. Me guiaron, me llevaron, me dejaron exhausta. Me pusieron una multa
de cien pavos y me dejaron seguir mi camino, a tiempo para el desayuno.
Mala hora para ver y ser vista, sinceramente horrible. Durante las tres primeras horas después de
levantarte, la gente puede saber si tienes el corazón roto o no. La solución es, o bien que te levantes
realmente pronto, para que tu camuflaje esté en su sitio a la hora en que todo el mundo sale, o bien
no acostarse. No acostarse debería funcionar siempre, pero no es así.
Algunas veces, cuando no te vas a la cama, la gente puede saber durante todo el día si tienes un
corazón roto.
Dejé eso de lado, para buscar una cafetería no demasiado concurrida y evitando mirar a cualquiera
que me mirara. Pero apareció el impulso de parar a un peatón al azar y decirle:
—Sí, sí, es verdad, pero fue el rock and roll el que rompió mi corazón, no una persona, así que no
llores por mí o te parto la cara.
Di un rodeo, subí y bajé, fui por todos lados, hasta que me encontré en Tremont Street. Fue el
batería de aquel grupo de Detroit Cráter; be olvidado su nombre pero la herida seguía sangrando, da
igual, fue él quien me dijo que Tremont tenía las mejores cafeterías del mundo, especialmente
cuando salías de una de esas curdas de las que no recuerdas nada.
Cuando los oficinistas comenzaron a marcharse, encontré un sitio; un agujero griego en el muro.
Cerramos a las diez y media, lárgate en cuanto acabes, servicio sólo en la barra, tómalo o déjalo. Me
gustan los sitios con carácter. Tomé asiento y pedí un café y una tortilla de queso feta. Lo
acompañaban patatas fritas caseras de la montaña de patatas que había junto a la plancha (no basura
de microondas, ¡hurra!). Impresionaron mis retinas antes incluso de que me trajeran el café, y mientras me servía la leche, comprobaron mi crédito. ¿Era una impertinencia? Lo era. ¿Me importaba?
No. Nada sofisticado, nada de máquinas cuando un humano podía hacer la tarea, y además, comida
auténtica, no ese poliéster comestible que lo mismo te entra que te sale, gracias a lo cual, cariño,
puedes acabar pareciendo una víctima de la desnutrición.
Llegaron cuando casi había terminado la tortilla. Por su aspecto y por el tono de su voz habían
estado de pie durante toda la noche, pero no comprobé en sus caras si tenían roto el corazón. Me
pusieron nerviosa pero pensé: bueno, están cansados, ¿quién se va a fijar en esta vieja dama? Nadie.
De nuevo, me equivocaba. Me hice visible para ellos en cuanto abrieron los ojos. Un chico de unos
diecisiete años, con las mejillas tatuadas y una lengua bífida, proyectándola hacia delante, siseó
como una serpiente.
—¡Pecadooooora!
Los otros cuatro se reanimaron al instante.
—¿Dónde? ¿Quién? ¿Aquí?
—¡Una pecadooora del rock and roll!
La dama me identificó. No se parecía a nadie en absoluto: ni siquiera había sufrido una ligera
taquicardia si es que realmente tenía corazón. Con un pecador, seguramente iría de Gran Dama.
—Gina —dijo con toda seguridad.
A mi ojo izquierdo le entró un tic. ¡Por favor! El queso feta cavó en mis pantalones. Qué
demonios, pensé, asentiré con la cabeza, y ellos también lo harán, terminaré de comer y saldré
corriendo. Y entonces, alguien susurró la palabra «recompensa».
Solté el tenedor y salí corriendo.
Creí que funcionaría. ¿Irían a cazarme antes de comerse mi desayuno griego? No, no lo liarían.
Enviaron a la dama tras de mí.
Era mucho más joven que yo y me agarró en medio de un paso de cebra, justo cuando cambiaba el
semáforo. Un coche se nos echó encima, y frenó justo con su parachoques rozando su duro pelo
cobrizo.
—Vuelve y termínate tu tortilla. O te invitaremos a otra.
—No.
Me agarró y me sacó de la calle.
—Vamos —la gente estaba mirando, pero Tremont está lleno de teatros. Se ven este tipo de cosas
por aquí; teatro al aire libre; todavía se representa. Puso una esposa en mi muñeca y me llevó con
ella de vuelta a la cafetería, donde los otros habían vendido rebajado el resto de mi tortilla a un
vagabundo. La dama y su grupo me hicieron un hueco entre ellos y me trajeron otra taza de café.
—¿Cómo puedes comer o beber con una lengua bífida?
—pregunté a Mejillas Tatuadas, y él me lo mostró. Tenía un pequeño dispositivo debajo de la
lengua, como una cremallera. Pesopluma, a la izquierda del chicarrón y al otro lado de la dama, se
inclinó sobre mí y me dijo enojado:
—Danos una razón por la que no deberíamos llevarte para cobrar la recompensa del Hombre—
de—Guerra.
Sacudí la cabeza.
—Estoy en ello. Esta pecadora ha sido perdonada.
—Legalmente aún estás bajo contrato —dijo la dama—. Pero podríamos apañar algo. Deshazte de
Hombre—de—Guerra o demándalo tú misma por no cumplir el contrato. Somos Malnacida Oley —
se señaló a sí misma—, Pidge —el tipo silencioso que había a su lado—, Percy —el chicarrón—,
Krait Señor Lengua, Gus Pesopluma. Nosotros te cuidaremos.
Sacudí de nuevo la cabeza.
—Si vais a devolverme, hacedlo va y cobrad. El beneficio debería bastaros para comprar al mejor
pecador que haya existido.
—Podemos serte útiles.
—Ya no me queda nada más. Ha desaparecido. Todos mis pecados de rock and roll han sido
perdonados.
—Falso —dijo el chicarrón. Automáticamente me volví, le miré para pararlo en seco—. Hombre—
de—Guerra te habría despedido si hubiera desaparecido del todo. Entonces no tendrías por qué
correr.
—No quise decírselo. Dejadme en paz. Sólo busco seguir y no pecar más, ¿entendéis? Decididlo
vosotros. No voy a ayudaros —me agarré al taburete con ambas manos. De este modo, ¿qué podían
hacer?, ¿arrancarlo y sacarme fuera?
Y de hecho, así lo hicieron.
Al principio, pensé, y el efecto de su eco fue estupendo. En el principio... principio... principio...
En el principio, el pecador no era humano. Lo sé porque soy lo suficientemente vieja como para
acordarme.
Estaban todos allí, poco más que fantasmas. Malnacida. ¿ De dónde sacarán esos nombres? Soy lo
suficientemente vieja como para acordarme. Oingo—Boingo y Bow—Wow—Wow. Tengo
cuarenta, ¿ lo he mencionado antes? Oooh, sólo unos pocos más, y entonces estará un poco más
cerca de ser una barbaridad. Los viejos rockeros nunca mueren, sólo siguen tocando rock. Nunca vi a
los Who. Moon estaba muerto mucho antes de que yo naciera. Pero recuerdo, cuando apenas era lo
suficientemente mayor como para estar meciéndome3 en los brazos de mi madre, mientras miles de
individuos gritaban y aplaudían bailando en sus asientos. Start me up... if you start me up, I´ll never
stop... «763 Cuerdas» se rindió a la música para ascensores y para las salas de espera de los
dentistas. Y eso no fue lo peor.
Se agarraron a mis recuerdos, extrayendo más de mí, dándome la vuelta. ¿Tienes experiencia?...
Pues sí.
(Pues sí. )
Cinco contra una, no pude quitármelos de encima. En justicia, ¿puedes llamarlo violación cuando
sabes que te va a gustar? Bueno, como no pude quitármelos de encima, entonces tuve que darles el
momento de su vida. Jerkin' Crocus no me mató pero casi...
El chicarrón fue el primero en caer, era gránele y salvaje pero resultó demasiado jodido para él. Lo
saqué, lo mantuve apretado, mostrándole el ritmo de la noche en la lluvia. Se lo di, se lo metí hasta el
corazón e hice que lo viviera. Luego vino la dama, desplegando el tema para el bajo. Ella se puso
frenética, pero casi siempre en el sitio adecuado.
Entonces vino el Krait, deslizándose sinuosamente con el sonido, entrando y saliendo. No
importaban sus mejillas tatuadas, no, sólo eran un anzuelo para los tontos. Sabía, no lo hubieras
imaginado, pero sabía.
Pesopluma, un tipo silencioso, llevaba la melodía y primera armonía. Muy malo. Pesopluma era un
desastre, pero no sabía qué hacer o a dónde ir cuando se metió en este asunto, estaba huyendo hacia
adelante con la melodía, como si fuera el «S. S. Suicidio».
¡Dios! Si me iban a violar, ¿ no podían haberme conseguido a alguien más adecuado? Los otros
cuatro continuaron, negándose a perdérselo, y tuve que hacerlo lo mejor posible para todos nosotros.
Algo vulgar, no demasiado original, pues Pesopluma no estaba haciendo rock. Era un crimen, pero
todo lo que podía hacer era agarrarlos y sacudirlos. Dioses del rock en manos de una pecadora
furiosa.
Nunca estuvieron mejor. Un pequeño cambio que les daba un atisbo de lo que sería tener un
montón de pasta. Si no hubiera sido por Pesopluma, lo hubieran logrado. Ahora hay más grupos que
nunca, y todos ellos están seguros de que si tuvieran el pecador adecuado a su lado, derribarían la
luna con su rock.
Quizás la hicimos vibrar un poco antes del final. ¡Pobre Pesopluma!
Les di más de lo que se merecían, y ellos también se dieron cuenta. Por eso, cuando les supliqué,
me mostraron respeto y finalmente me dejaron ir. Sus técnicos fueron amables conmigo, sacando las
conexiones de mi pobre cabeza, latiendo por el exceso, con el corazón roto, y cubrieron los
implantes. Tenía que dormir y me lo permitieron. Oí a un hombre decir:
—Esto sí es una grabación; va directa. Hay que darse prisa para distribuirla. ¿Dónde diablos
encontrasteis a esta pecadora?
—Sintetizadora —murmuré ya en sueños—. La palabra auténtica, chico, es «sintetizadora».
Viejos y locos sueños. Estaba de vuelta con Hombre-de-Guerra en la gran California, y lo
abandonaba de nuevo, que básicamente era lo que había pasado, pero ya sabes cómo son los sueños.
La mitad de su salón estaba al aire libre, la otra mitad cubierto y todas sus paredes, abombadas.
Hombre—de—Guerra estaba casi sin ropa, como si se le hubiera olvidado acabar de vestirse. Oh,
pero eso no pasaba nunca. ¿Hombre—de—Guerra olvidando siquiera una lentejuela o un adorno? Le
encantaba actuar, como al Krait.
—Nunca más —decía yo, y él contestaba:
—Pero tú no sabes hacer otra cosa. ¿No la estarás cagando?
—Chicos, en la gran California nadie la caga, como mucho echan zumo.
—Tu contrato dura otros dos años y tengo la exclusiva, siempre tengo la exclusiva. Y te encanta,
Gina, lo sabes, no te sientes bien sin esto.
Y luego hubo una vuelta hacia atrás en el tiempo, y estaba de nuevo en el «tanque» con todos mis
implantes enchufados, haciendo rock, mientras Hombre—de—Guerra y sus máquinas lo grababan
todo, sonido y visión, para que todos los «niños-tv» del mundo pudieran tocarlo en sus pantallas
siempre que quisieran. Olvídate de la carretera y olvídate de los espectáculos, demasiado follón, y,
además no tienen comparación con las cintas, nunca son tan excitantes, incluso aunque tengan los
mejores efectos especiales de láser, naves espaciales, explosiones; nada tan bueno. Y las cintas a su
vez tampoco eran tan buenas como el material en la cabeza, visiones de rock and roll directamente
de tu mente. Sin necesidad de horas y más horas de montaje en el estudio. Pero tenías que hacer que
todo el mundo en el grupo soñara de la misma manera. Necesitabas una síntesis, y para eso,
conseguías un sintetizador, no el antiguo, el instrumento musical, sino algo, alguien, para dirigir el
grupo, para golpear en las pequeñas almas alimentadas por el tubo de rayos catódicos, para mecerlos
y hacerlos rodar de tal manera que ellos nunca podrían hacerlo por sí mismos. Y así cualquiera podía
ser un héroe del rock and roll. ¡Cualquiera!
Al final, no tenían que tocar instrumentos a no ser que se quisiera, y además, ¿para qué
molestarse? Dejemos que el sintetizador guíe su imaginación y los suba al Monte Olimpo.
Sintetizador. Sintecador. Pecador.
No todo el mundo puede hacerlo, pecar por el rock and roll. Y yo puedo.
Pero no es lo mismo que saltar toda la noche con el típico grupo de bar que todavía nadie conoce...
Hombre—de—Guerra apareció de nuevo en su abombado salón y me dijo:
—Tú me has reventado las paredes de mi casa con tu rock. Nunca te dejaré ir.
Y yo dije:
—Me voy.
Luego aparecí fuera, corriendo al principio, porque él vendría tras de mí a toda velocidad.
Pero debí de perderlo, y entonces alguien me agarró del tobillo.
Pesopluma trajo una bandeja, era una hermanita de la caridad. Se golpeó en la rodilla contra una
pata de la cama y me incorporó despacio. Ella se levanta de su tumba, no puedes acabar con una
buena pecadora.
—Toma —dejó la bandeja en mi regazo y acercó una silla. Medio un cuenco con una especie de
sopa espesa, con galletitas integrales para que las partiera y las pusiera dentro—. Pensé que te
gustaría algo suave y sencillo —cruzó su pie izquierdo sobre la pierna derecha y lo estuvo mirando
durante un buen rato—. Nunca me habían roqueado, nunca de esa manera.
—No te hace falta, no importa quién te roquee en este mundo, sea quien sea. Corta y déjalo,
conviértete en un representante. El dinero de verdad está en ser representante.
Se mordió, el pulgar.
—¿Siempre puedes saberlo?
—Si los Stones volvieran mañana, no serías capaz ni de llevar el ritmo con el pie.
—¿Qué tal si ocuparas mi lugar?
—No soy un payaso. No puedes pecar y hacer la coreografía al mismo tiempo. Ya se ha intentado.
— Tú podrías. Si es que hay alguien que puede hacerlo.
—No.
Su rubio flequillo le cayó sobre la cara, y él lo retiró de nuevo.
—Tómate la sopa. Quieren que vuelvas enseguida.
—No —me toqué el labio inferior, hinchado como una salchicha—. No pecaré para Hombre—
de—Guerra y no lo haré para vosotros. Por favor, sacúdeme un implante y provócame una afasia.
Así que se fue pero volvió con todo un ejército de técnicos y esbirros, que vertieron la sopa dentro
de mi garganta y me dieron una dosis. Luego me llevaron al tanque para conseguir que éste fuera el
año de la explosiva revelación de Malnacida.
Supe, tan pronto como salió la primera cinta, que Hombre-de-Guerra captaría mi aroma.
Estaban haciendo funcionar la maquinaria para mantenerme lejos de él. Y me cuidaron
bien, en la habitación donde su antiguo pecador había cumplido su pena, me dijo la dama.
Su pecador también vino a verme. Pensé: veneno goteando de sus colmillos, amenaza de
muerte. Pero era sólo un tipo de mi edad con un montón de pelo para ocultar sus implantes
(a mí nunca me importó, no me preocupaba que se vieran). Sólo vino a presentarme sus
respetos, ¿que cómo aprendí a hacer rock de la forma en que lo hacía?
¡Idiota!
Me cuidaron bien en aquella habitación. Borracheras cuando quería y una dosis para volver a estar
sobria, otra dosis de vitaminas, y otra más para quitarme los malos sueños. Dosis, dosis, dosis, estaba
completamente ciega todo el día. Tenía marcas como los antiguos B&O y ni siquiera ellos sabían
qué quería decir con eso. Se deshicieron de Pesopluma, consiguieron a alguien más apropiado,
alguien con quien pudiera salir y hacer ejercicio, una chica esbelta de dieciséis años con la cara de
una mantis religiosa. Y ella rockeaba y yo rockeaba y todos rockeábamos hasta que Hombre-deGuerra vino y me llevó de vuelta a casa.
Entró pavoneándose en mi habitación, con todo su plumaje, con su pelo cardado (para ocultar sus
implantes), y dijo:
—¿Quieres presentar cargos, Gina querida?
Bien, entonces discutieron alrededor de mi cama. Cuando Malnacida dijo que ahora yo era suya,
entonces, Hombre-de-Guerra sonrió y dijo:
—Así es, pero resulta que yo te he comprado a ti. Ahora tú también eres mía del todo. Tú y tu
pecadora. Mi pecadora —era verdad. Hombre—de—Guerra lanzó a su compañía a comprar
Malnacida, justo después de que saliera la primera cinta. El trato estaba cerrado para cuando
terminamos la tercera, y ellos nunca lo supieron. Las compañías estaban comprando y vendiendo
todo el tiempo. Todo el mundo estaba en apuros, excepto Hombre—de—Guerra. Y yo, según dijo.
Hizo que tocios se marcharan y se sentó en mi cama para confirmarme mi relanzamiento—, Gina...
—¿has visto alguna vez miel extendida sobre el filo de una cuchilla de diente de sierra? ¿Alguna vez
has oído hablar de algo así? Él no podía cantar sin hacer daño a alguien, y tampoco podía bailar, pero
podía rockear por dentro, sólo si yo rockeaba para él.
—No quiero ser una pecadora, ni para ti ni para nadie.
—Todo te resultará diferente cuando vuelvas a «Si Ei».
—Quiero ir a un bar de mala muerte y agitar mis sesos hasta que se salgan por los implantes.
—Nunca más, querida. Por eso estás aquí, ¿no es así? Todos los bares han desaparecido, y también
los grupos. Los últimos, hace años. Todo está aquí arriba, aquí arriba —se dio unos golpecitos en las
sienes—. Eres una anciana dama, no importa cuánto me esfuerce en mantener joven tu cuerpo.
¿Acaso no te doy de todo? ¿No te he dicho que tengo de todo?
—No es lo mismo. No se suponía que me pondrías en un tubo catódico para que la gente me
mirara.
—Pero, amor, esto no significa que el rock duro se haya muerto.
—Pero tú lo estás matando.
—Yo no. Tú sí intentas enterrarlo en vida. Pero te mantendré en activo durante mucho, mucho
tiempo.
—Pues me escaparé otra vez. O bien haces rock and roll por tu cuenta o lo dejas, pero no lo sacaré
más de mí. Este no es mi estilo, no es mi época. Como dijo aquél: «Yo no vivo en el presente».
Hombre—de—Guerra se rió.
—Y como dijo aquel otro: «El rock and roll nunca olvida».
Entonces llamó a sus esbirros y me llevó a casa.
El cibersexo: una nueva adicción, dicen los especialistas
Hernando Arango
Para una inmensa cantidad de usuarios, la
Internet se ha convertido en una
comunidad virtual en la que las fantasías
sexuales abundan y la distancia entre la
adicción y la realidad cada día es más
grande, de acuerdo con un estudio
adelantado por Consejo Nacional sobre
Adicciones Sexuales y Compulsivas.
De acuerdo con esa institución, en
Estados Unidos existen cerca de 60
millones de usuarios de más de 300 millones de páginas, de los que dos millones son
sexualmente adictos a los lugares pornográficos de la Internet.
Para el doctor Al Cooper, psicoterapeuta de la Universidad de Stanford y director
clínico del Centro Marital y Sexual de San José, California, quien realizó la primera
encuesta nacional sobre "sexo electrónico compulsivo", existen 200.000 usuarios de la
red que visitan asiduamente los sitios pornográficos. Para el doctor Cooper cualquier
persona que pase más de 11 horas semanales buscando lugares de sexo en la red, es un
adicto.
Empero, Howard Fienberg, investigador del Servicio de Evaluación Estadística de
Washington, una organización dedicada a mejorar el conocimiento público sobre las
investigaciones científicas y sociales, dijo a SALUD.COM: "la afirmación carece de
bases serias y sólo tiene que ver con un intento por parte de una cadena nacional de
televisión de darle un soporte a una serie sobre sexo".
"El problema fundamental tiene que ver con el significado de la palabra "adicción".
Cuando se lleva su significado más allá de una connotación física, necesariamente
tiene que estar relacionada también con aspectos sexuales. Aún estamos lejos de una
definición clara de lo que es una adicción sexual", añadió Fienberg.
Pero el doctor Dana Putnam, experto en adicciones sexuales, asegura que el problema
es real. "La conducta sexual compulsiva puede tener relación con problemas de
relaciones interpersonales, abuso sexual pasado, mezcla de amor y sexo, el uso del
sexo como un escape de las emociones negativas y muchos otros factores".
"Es importante anotar que las causas de una adicción incluyen factores únicos en cada
individuo y no parece tener un solo factor verdadero en cada persona", agregó Putnam.
(tomado de www.salud.com)
Adicción al cibersexo
POR MARLENE M. MAHEU, DOCTORA EN PSICOLOGÍA
Jerry trabaja diligentemente en su programa “Quickbooks” hasta que su esposa se
acuesta. Cuando ella le da las buenas noches y se dirige al dormitorio, él entra en su
chat favorito, la sala de conversación individual, y comienza a sentir cómo su
excitación va en aumento. Él busca a “Sweet Roll”, una mujer con la que se reunió la
noche anterior. Espera encontrarla, pero no se preocupa demasiado, porque sabe que si
ella no está allí alguna otra habrá. No le importa realmente quien esté allí, porque sabe
que de todas formas logrará encontrar una conversación estimulante. Al cabo de unas
horas él se acuesta y permanece despierto mientras escucha como respira su esposa.
Intenta no sentir su apetito por el contacto sexual real y fija su mirada en la oscuridad
preguntándose qué es lo que está fallando.
Si usted o alguien que usted aprecia muestra señales de adicción cibersexual, le
mostraré cómo puede intentar ayudarse o ayudarle. Estas sugerencias se basan en
técnicas que se han mostrado útiles con otros procesos adictivos. Si usted no tiene
éxito con ellas, inténtelo de nuevo y haga un esfuerzo por hablar cada vez con más
personas de los esfuerzos que realiza para superarlo. El apoyo de los demás a la hora
de cambiar los modelos adictivos es una de las claves fundamentales para el éxito. Tal
y como un experto en adicciones declaró “Estamos tan enfermos como nuestros
secretos”.
1. Pregúntese por qué está buscando esta estimulación en línea. ¿Qué hecha de menos
en su vida real, cuando está desconectado?. Si tiene una relación estable, ¿hay algo que
no pasa en esa relación y que usted necesita que pase?.
2. Reciba una dosis de realidad de un amigo o amigos. Hábleles sobre sus actividades
on-line y pregúnteles lo que ellos ven de su vida que quizás explique su problema. A
menudo los amigos ven cosas en nosotros que uno mismo no puede ver.
3. Decida qué tipos de websites/chat y grupos de noticias serán aceptables cuando se
conecte. Haga un pacto consigo mismo y si viola ese plan, permanezca sin conectarse
para nada durante al menos dos semanas.
4. Cuéntele a un amigo su plan de permanecer sin conectarse y pídale que le apoye
haciéndole preguntas sobre cómo y cuando está evitando con éxito esos impulsos; que
le anime hacia otras actividades en el mundo del cara a cara; y que se centre y le
muestre cómo usted está superando muchos de esos impulsos. Evite que ellos se
conviertan en sus policías –deben estar para apoyar cada uno de sus pasos positivos y
no para hacer su vida miserable si usted resbala.
5. Si hasta ahora usted se ha conectado para encontrarse repetidamente con una
persona específica, comuníquele que quiere dejar de mantener esas reuniones.
6. Mientras permanezca desconectado tenga a mano un papel y haga lo siguiente.
Anote los pensamientos y sentimientos que tiene sobre la evitación del sexo on-line
y/o las relaciones sexuales on-line. Perciba las circunstancias que generan los impulsos
para conectarse. Busque nuevas maneras de enriquecer su vida, puesto que ello será un
factor clave para el éxito. Inicie una nueva actividad, deporte, pasatiempo, club, o
busque apoyo acudiendo a algún tipo de reuniones de grupo.
7. Antes de conectarse para algo que no sean cuestiones de trabajo, decida donde irá y
cual será la máxima cantidad de tiempo de ocio que dedicará a estar conectado. Ponga
una alarma que le avise cuando se pasa del tiempo establecido.
8. Si encuentra que usted no puede controlarse y dejar de coquetear, tener
conversaciones sexuales, o cualquier otra conducta de tipo sexual, como por ejemplo
masturbarse mientras permanece despierto, conéctese exclusivamente para cuestiones
laborales (únicamente si es indispensable) y busque la ayuda de un grupo de apoyo online y/o de una clase on-line para la adicción sexual en línea. Mientras tanto, puede ir
aplicando lo mencionado en el punto 4.
9. Si usted tiene una relación estable, dígale a su pareja lo que le gustaría hacer (no lo
que encuentra a faltar) en su relación, e intente hacerlo con el/ella. Fije un momento en
que tenga una fecha especial y diga las cosas que ha estado evitando decir, pero
asegurándose de recordar las reglas de cortesía y bondad comunes. Recuerde que es
probable que su compañero/a no quiera tener relaciones sexuales si usted detalla los
defectos de él o ella. Ponga énfasis en las cosas que le gustan de su pareja y construya
su relación sobre esos aspectos.
10. Si estas fuentes de auto-ayuda no le son útiles, busque la ayuda de un profesional
que tenga experiencia en trastornos compulsivos y/o adicciones. Dado que la adicción
al cibersexo es una nueva área de tratamiento, le será más fácil encontrar a alguien que
tenga experiencia en el tratamiento de otras adicciones; con él podrá conversar
libremente acerca de su experiencia.
La Dra. Maheu es escritora, portavoz e investigadora en Cyber-affairs, CyberRomance y CyberSexo.
Artículo publicado en Self-Help Magazine.
HISTORIA DEL CINE CIBERPUNK.
(Capítulo 13)
Mad Max 3, Más Allá de la Cúpula del Trueno
(1985) (Mad Max Beyond the Thunderdome - 1985) Dos hombres
entran en la Cúpula del Trueno. Sólo uno sobrevivirá. Así
es la ley en Negociudad. "Mad Max más allá de La Cúpula
del Trueno", desarrolla la tercera y más espectacular
aventura de Mad Max, protagonizada por Mel Gibson
("Arma Letal", "Maverick") en su tercera entrega como el
héroe que termina con los bárbaros en un mundo postapocalíptico, convirtíendose a su vez en el salvador de una
tribu de niños perdidos que luchan por sobrevivir. La
estrella internacional Tina Turner interpreta a Tía Ama, una
poderosa gobernante determinada a utilizar a Mad para
hacer más poderoso su dominio sobre Negociudad.
El director George Miller y George Ogilvie crean una emocionante historia sobre un
mundo post-nuclear y una de las mejores escenas de acción, en la que Max y el
gladiador Blaster se enfrentan cara a cara en una lucha mortal haciendo uso de todo un
arsenal de armas futuristas dentro de la Cúpula del
Trueno. Una vez visto "Mad Max más allá de La
Cúpula del Trueno" ya no se necesitará otro héroe.
La hasta ahora última entrega de las aventuras del
solitario Max retoma la esencia de la segunda parte y
nos presenta un mundo aún más apocalíptico, donde
todo rastro de sociedad civilizada a sido sustituido
por la más violenta anarquía. Las
señas de identidad que la
hermanan con la anterior película se quedan solo en lo estético, ya
que argumentalmente el film es muy inferior al resto de la saga.
Destaca la presencia de la cantante Tina Turner, que además
interpreta el tema musical de la película.
1985. City Limits. Dirección: Aaron Lipstadt. En un futuro
apocalíptico, una plaga ha acabado con los ancianos y la ciudad está
dividida y dominada por bandas rivales de motoristas. Además, un
fascista quiere hacerse también con el control. 1985.
Weird Science. Dos jóvenes adolescentes que no gozan de popularidad entre las
chicas, aprovechan la ausencia de sus padres durante un fin de semana, para crear por
computadora una mujer irresistible y explosiva, con poderes ilimitados, que se
convierte inmediatamente en su maestra del amor. El mito de Frankenstein da un giro
inesperado en esta comedia del guionista y director John Hughes, dando al loco de los
ordenadores Ilan Mitchell-Smith y a su mejor amigo Anthony Michael Hall, el poder
de crear a la "Mujer Perfecta" (Kelly LeBrock). Como una madrastra generada por
ordenador, la creación de este peculiar dúo, les guiará a
través de los placeres y decepciones de la adolescencia.
John Hughes fue uno de los máximos dominadores de las
comedias juveniles de los 80 y con La Mujer Explosiva
(título en español) dio uno de sus mayores bombazos. La
película es una de las más recordadas de su época, claro
exponente de un cine de entretenimiento netamente
ochentero, con rasgos muy definidos. Nunca se han vuelto
a hacer películas juveniles como esas. Kelly LeBrock
protagonizó los sueños de muchos adolescentes a lo largo
de la década gracias a su interpretación de Lisa. El habitual
en las películas de Hughes, Anthony Michael Hall, protagoniza junto a Ilan MitchellSmith la estrambótica aventura.
Aliens, el Regreso (Aliens - 1986) del director James Camerón. Alien es el perfecto
organismo. Una máquina de matar cuya excelencia física sólo puede competir con su
hostilidad. La oficial Ripley y la tripulación de la nave "Nostromo" se enfrentaron a
esa monstruosa criatura. Sólo Ripley sobrevivió a la masacre.
Después de vagar por el espacio durante varios
años, Ripley es rescatada. Durante ese tiempo
L.V. 426, el mundo en donde Ripley se
enfrentó con el Alien, ha sido colonizado.
Cuando se pierde la comunicación con la
colonia, se decide enviar para investigar a un
equipo de fornidos marines espaciales, con
Ripley al mando de la expedición.
Lo que les espera allí no es sólo una criatura,
son miles. El Alien se ha reproducido y esta vez
la lucha es por la supervivencia de la
Humanidad.
Extraordinaria secuela de la no menos
espectacular Alien. Aliens es una de esas pocas
continuaciones que, aunque no superan al
original, tampoco desmerecen de su
predecesora. Con un planteamiento más
convencional, misión de rescate y marines de
por medio, el film de Cameron se centra más en
el espectáculo de efectos especiales que en el terror propiamente dicho, pero es que
Aliens ya no transcurre en una nave y ya no se presta al juego del gato y el ratón de la
primera película, esta vez el escenario es un planeta y el alien ya no es uno, sino miles
y miles que atacan como un verdadero ejército. El ambiente vuelve a ser el mismo, es
decir, corredores oscuros y enormemente largos, naves tenebrosas y húmedas, en las
que puede pasar de todo. Actuaciones memorables y un largo y excepcional final
completan esta obra.
Descargar