Resumen Cuarta parte Capitulo “Compromisos y tareas para una nueva acción educativa” Por: Psic. Jaime Magdiel Torrecillas García 5º A Sección: Primaria Me parece que uno de los secretos para fortalecer al individuo frente a las adversidades que presenta la cotidianidad de la vida, es enseñarle a programarse y desprogramarse por sí mismo, mostrar al individuo que es más que un humano, más que una identidad destinada a un solo camino, sino que es un SER dinámico variable, transmutable y consiente que es capaz de incluirse en situaciones complejas y que él mismo es el gerente de las soluciones. Es increíble a estas alturas de la humanidad que aún se eduque a las sociedades como dependientes de sistemas ajenos a la propia persona, siendo el alma y sus complejidades las que generan sus propios hechizos del intelecto es ahí mismo donde se encuentran las soluciones, pero aún en estos tiempos existen sistemas que educan para encontrar resoluciones fuera de la propia persona. El ser humano es el centro de su propio universo, el centro de cada pensamiento del sí mismo, el centro de cada emoción propia, es así que es una irresponsabilidad dejar en manos de las instrucciones ajenas las soluciones propias; si bien el ser humano es el foco de atención cada uno de sí mismo la responsabilidad de los educadores debería ser re direccionar la atención sobre el sí mismo y no sobre los objetos o fenómenos como causas de una situación compleja, las formulas matemáticas se encuentran dentro del sí, las reflexiones de las lecturas siempre tendrán como titulo principal el sí mismo, los resúmenes sobre el pasado de cada quien siempre serán sobre el sí de cada uno. De lo que estoy hablando es de lo siguiente: la gravedad de que al ser humano se le utilice de forma materialista y utilitaria es poco relevante en comparación con que el ser humano actúe como cómplice del mismo utilitarismo. Me parece que en cierto sentido el ser humano se está permitiendo acompañar al utilitarismo económico por una especie de comodidad espiritual, porque es mucho más sencillo entender el sistema simple de: (acción – reacción) del “tengo – puedo” que el sistema mucho más sencillo y por eso complejo del: “soy – puedo” . El respeto a la libertad me parece el más grande de los valores en la actualidad, un valor que considero no está siendo observado en la gran mayoría de los seres vivos y en gran medida por los educadores, ya que el educador por lo regular “indica”, “ordena”, “dirige”, dice “cómo” son las cosas y como deben “ser” y es un poco raro encontrar educadores que en consideración total de la libertad del ser vivo utilicen las habilidades de cada estudiante como principios de donde se habrá de extraer las más altas virtudes y valores que les elevaran por encima del sí mismo para ir mas allá de la ignorancia del propio yo. Me parece que la verdad del propio yo es la siguiente: “hacer siempre las cosas que me hagan sentir bien” y la fatalidad de esta verdad es: “hacer las cosas que no me hagan sentir bien”, en este sentido el educador que no se apega a transmitir con sus enseñanzas las formas permutables de llevar a cabo las acciones que me generen sensaciones de gozo, considero yo que está faltando a su vocación original. Es probable que la presencia de los padres sea una base fundamental para la educación, pero existen miles de situaciones donde el individuo se educa sin el ejemplo de los guías primarios, y es ahí donde se encuentra la excepción a la regla, ya que existe una gran variedad de seres que se educan con diferente gama de “comandantes de la vida”, y es en ello donde me atrevo a decir que existe una guía superior a la de la acción del hombre, me atrevo a decir que es la guía del “yo soy” la que en verdad lleva de la mano al ser humano para mostrarle lo que necesita complementar en el viaje de la vida.