N9RMATIDAD Y ANORMALIDADBN EL COMPORTAMIENTO DEt NIÑO Carlos Vazquez Velasco+ La problematica del comportamiento humano tiene tres proyecciones: la jurídica, la social y la médica. La jurídica está claramenteestablecida desde el momento en que hay un código que califica los comportamientos. Este código varía histórica y geográficamente.No es igual en todas las épocas ni en todos los países o, incluso regiones pero, en un momento dado un comportamiento se sale o no de 'la ley siendo taxativo si es o no normal. La proyección social es menos evidente, pues no está escrito y se influencia por la ética,la costumbre, la religión,la moda, etc. y para que un comportamiento se repute "asocial" tiene, casi, que pasar al terreno anterior o seaal jurídico. Pero un comportamiento, normal o anormal, desdeel punto de vista médi*Dcl Instituto Nacional de Psicología, Ciudad Universitaria, ¡vfadrid, España. co es mas flexible aún, salvo en casos extremos, pues plantea el problema de la salud o la enfermedad, en su aspecto psíquico. .. Alain Serrante se ha planteado, recientemente, este ya viejo problema psiquiátrico, que viene arrastrándose desde los tiempos de Kraeppelin con sus estudios en pueblos primitivos y que recoge las observacionesde Roger Bastide sobre la riregalomaniade los Kwakintl, la paranoia de los Dobu, la conducta de los Puebla, los Navajos, los Zuni, a veces psicopáticas, con la variación de conductas.en las diferentes culturas y las observaciones de Margatet Mead y Malinowski sobre la falta de enfermos mentales en los pueblos primitivos de Polinesia. Todo ello ha dado origen a la llamada psiquiatría transcultural, ya entrevista, como dijimos por Kraeppelin, especialidad con categoría propia, cuyo más reciente representan- N O F M A L I D A D Y A N O R M A L I D A D E N E L C O Í ! | P O R T A M I E N T OD E L N I Ñ O F ü te, Wing, ha puesto de manifiesto las diferencias diagnósticas en enfermos rnentales ingleses o norteamerica¡ros. Leighton y colaboradores ha¡r demos. trado que hay procesos específicos dc r¡na cultura estudiando.diagnósticos de Canadá, Suecia y Nigeria, que ha llevado a la Organizacifin Mundial de la Salud a un informe, en curso Present State Examination (P.S.E.)con un cuestionario traducido al chino, checo, danés, hindú, español, ruso y yoruba. Pero si hay estasdificultades culturales para el diagnóstico psiquiátrico de los enfermos mentales adultos, el problema de los "trastornos de comportamiento" en niños, cajón de sastre donde se echa a todo niño cuya conducta molesta es ya inenarrable, pues el niño vive en el seno de una familia y es ésta la que lleva al pequeño paciente y nunca mejor dicho porque la impaciente es la familia -aI médico, con sus quejas de no ajustarse a un arquetipo pre-juzgado. Pero dada la enorme variación de las familias- vease el libro de Enrico Altavilla "Proceso a la familia" - es el médico el que debe diagnostica¡ si su comportamiento es o no anormal. Ante las dificultades expuestas anteriormente pensamos que la mejor distinción, la menos influída por factores culturales, religiosos, morales o jurídicos, seria la estadística, estudiando comportamientos clave o pautas de cornportamiento mediante un interrogatorio clínico-psicológico de los padres, en presencia del hijo, para comprobar conductas actuales y en niños y niñas de diferentes edades para constata¡ diferencias sexuales y cronblógicas. Pa¡a facilita¡ el contaje subrayamos la pauta correspondiente en la hoja tiue figura en el cuadro No.l. Para witar personalismos,colaboraron con nosotros y aquí queremos cxprelxrr nuestro agradecimiento, los psicólogos y médicos Sr. Mallart, Srtas. García Villegas, Sr¡.írez y Ca¡rdal, Dr. Gutiérrez Gómez, Dr, Hugo Mendoza y Dra. Tellez. En la actualidad tenemos 300 casos de niños, de 5 a 17 años y otros 300 de niñas de 5 a 15 años, con una totalidad, por consiguiente de 2,200 casos, con muestreo correcto socioeconómico y con distribución gaussiana de sus cocientes de inteligencia. Como era de esperar, estas pautas de comportamiento habitual va¡iaban extraordinariamente, desde una grarl frecuencia hasta su casi ausencia,pues encontramos ulg.ttt comportamiento gle ni figuraban en la hoja tipo (obsesivg, homosexual, sádico, etC.). Creírnos conveniente da¡ una penalización estadística a estos comportamientos, según su frecuencia, penalización, arbitraria como toda medida, que figura en el Cuadro No.2. Suma¡rdo la penalización de cada rasgo obtenemos una cifra de "desviación de comportamiento estadístico,' que para simplificar y teniendo en cuenta que el comportamiento es una proyección externa del caracter según Kretchmer, llama¡nos a esta desviación, Desviación Ca¡acterial (D.C.) encontrando que comportamientds infantiles como hablador, terco, tímido, sucio, desordenado, inquieto, emotivo, irritable, son nonnales, aunque puedan ser molestos en ocasiónes. Otros, en cambio tienen la más alta penalización (5) como vemos en elba¡emo del Cuadro No.3. Estudiando las Desviaciones ia¡acteriales en los 7,200 chicos m¡u¡aque 129 Carlos Vázquez Velesco CUADRO No. I lNsrmno N cÍtN/r|, DE l!¡lcoloclA /t?t¡c DA Y llilGorlcMA Ht¡.Ld.30rEt - l||ADllD-l AIE¡¡IDOS ¡tAflrl tDADr-..---.-.- rfq¡ L -_ E GrlDo D! nBdA¡aZA ItcÍA Dl¡. ' l)' *litatü. fu.bL $l¡io. Abn',l' Tñ* A 6) Egalu ftteF¡to. Cariioú 5I tl Ae'i,oDi&. 2) AenooPav¡n. 3) 3) IIM¡ Tln¿¿oQd4¿o. xuuo_ 4) R¡c¡ú. 4) 6) !ryoton. FñdirD. 2) Illio¿r,n. 3) Apá'ko. 4) Col¿rie. 5) Mín¡a. il-' ---ll-U^kii. 12) RM¿¿. 13) Hou. tO) páll,¿ha*. lll Cqiúon.' [6) I¡pülr.. Ihdb TatoCotfu. Saág. -il Ebúh .7) 8t¿tr4. q Aetryt¿t&. 14) Fú*t. l5l l-ottut. OBSERI¡¿ICIONES, sirvieron para gbtenerlas, más otros 800 para completar los 8,000 casos tenemos el Cuadro No.4. Vemos que hay un descensobrusco a partir de los 4 puntos por lo que consideramos anorrnal la desviación superior a 3 puntos y, tanto mas cua¡rto mayor sea la cifra de Desviación Caracterial. Con arreglo a ello encontr¿rmosque el 12'5 por 100 de la masa de niños son anorrnales en su comportamiento, 130 CUADRO No.2 Desviación Caracterial Senalización) Mas de 25 f, De25 a,t5/' De L4 a 10 {' De 9 a 5f, 11" De 4a Of, O 1 2 j 4 5 Puntos tl il m n I N o R M A ü I D A D Y A N O R M A L I D A D E N E L C O M P O F T A M I E N T OO E L N I Ñ O i F b Fq trl < l:d Hl O > gUlh cts¡ H tsr'i, pc¡ rd= :d t ts lE Fl d5 3 ir o o o o t¡u l4 orno¡ Plrrd pdr,J o 5 5 @ pro OOPOr E(/lecrr o' oo s r P . do o r:io x.5 É . OÉ. . lD. g B O l . JP . + O cFO fl lto ir.-r ü O C, : clo l¡ o t. p¡. o .. O.. c+.lP l¡O @ POTPP.O l'JFl F, P.U¡ !l PO 0 0 < |¡ o 50 O<. O(AooO . O O O O O. .. O }{P.O B O O l¡o o O. .. Éuc,r\,u El¡ÉOl¡ 0, FrrO F, O 5t4¡J.Oc| p o o N FJ l},' OF }¿ts. @ l¡ . O p. FJ o::.o . P. <+ O . '::o:: ¡tr lp lP |r a a a a a . . . a a a . a a a ¡ a a a a a o a a a a a a a a a a a l a a a a a . a . a a a a a a a o a a a a a a a a a o a a a a a a a . a a a a a a a . a a a a a o . a a a a a a a a a a a o a a a a a a a a a a a a a a a a o a a a a o a a a a a a a a a \¡ vt vr vr vr vt \'rvr t'EJor,(aa tlfrPOOF O P.PIJ), pOts}at¡¡C o )r <|o é. Oi, p. o fr. . F¡. vr t\¡ vr vr O u u., \¡ F \,r O Jf\)o^: ¡ ot¡rfutrtuvl ¡I vr r.n \'r\'t \¡ vr vt \'r vr \Jr \¡ \¡ O vl r vr vr vl J \Jr \¡ vrvr \¡vr vr\¡ \Jr \'r urr\n vt\trvrv¡ \¡ \tvr \¡ O ¡ rvr\¡\r \t vr vt vr r ut rvl J \Jr v[ r Oatr, O ¿ ¡ J.r O5O¡¡ Ourrtr{5 ()fO¿O ¿t¡r¡5JF rus ru\Jr !,]\ lI l@ I vr vr \nvr vr vr vr vr vr 5 vr ut ¿vr ¿vrvl\' tu OF O { O rl¡r étt¡/ ó.F ¡.O a \r \,r vrvr \,rvr vr \Jr \Jr\n vrvr vt vrvr\¡ ulvt vr 5 \'t S r \¡ N L'r 5 5 { \J|vr vr 5 ats¡{5 é 5 ru[ A { 5 vrvrvrvrvrvrs 1b un { { Ñ)vr$s \'r \'t \rrv¡ \'l r\,l \,l \,| t\tl .F 5 5 { \f J aF 5 F ¿ oFooo * ¡ ¡ u etss _r s c¡TTOOO JrrOrrrF OtTOOO rJOruOF S 5 tu OFOOO -NO¿OF:É vr \'r \Jr\'r vr vt vrvrvt vt 5 5 r :::- NA S F fu OtTOOO rJO-O.tr \'r \Jt vrvrvrvr-\¡vr\¡ vr5 OtuOOO O¡N¿<D N 5 5 5 w \Jl \n \'l \,l \,r \'l \rl \Jl \tl \tl \,l lltl lU Vl r"¡ Ú'r 5 5 r.f¡ l- ;o 14 l* ii l- l:{, llo !Ñ lrn I l|; 5 5 5 tut.1¡ fus F |u f 5 rl¡rc' vr vrvrvr \¡ \'t \nvr\,r ü w- cltrc¡¿O l I U ü¡ F 9 c) H iü I 9u OroOOt, iX c¡o luNooOvl h t- v tsz lDo c) F:l L' @ H b E{ vt \¡ \'rvr vt vt vt\'t \¡ \¡ vt \'r o t rr N\n\tvl vr vr \'rvr \Jrvr vr vr vr 5 vrvr vr vr vrlJr vt vr \¡vr O vr évr o vl vr O \n vr vt \n o vl r vl.r vr o \¡ vr vrvrvr OAr¿O ¡l¡, tUaF rñ ñ)\,l r lo l- rs N5 lo I 5 ovt {\'l S t\'l O ()lúróOO Jt, ¿(, Ns t" l'o O g¡.rOO {(JJ r.ts s+' F o OFrOO ¿1, ¿1, ¡5 O OFruoO J |u jt'^, Js 0 oswoo Jtú, \tl \¡ rrJl\rl r \Jl t¡, \Jl 5 \rl O O5t,, O O 19+,$ur r5 vr vl vl \,| Jvl Orr5 r r\¡ \¡ vrvrvr our vr 5 \n vr Ovl vr vtvrvt lJt vrvl Nt, ¡r.r t',;lr.¡ Ur Vr f¡ $ O \n r vr \'l 5 \'r \'l \rl\Jl \rl \!l \tl\'l r5 OSrrO \¡ vt trJr\,r \'r\'r \n \n\¡vr\n O.rrrrs¡$\¡ ()F{éo s vt o vrvr vi 5vr \n\¡ r -vl vt vt\rvrvrvr \¡ \'r vrvr\Jrvr i!', ovl \t vr vtvr vt vt \rtvl vt vr vlvl w¡ vrut¡uüvrvr J!J Fvt S {vt rvr,.¡r N\¡ 5+ f\)\'l 5 5 F \¡ svr ¡\, r O Jt, N tut, J.F la lI. l=l; ls ti ¡¡5 It 131 Carlos Vázguez Velasco CUADRO No.4 Desviacion O pnntos 1, rr il 3.279 1.936 en B.O0O niños masa Caracterial Ct a s o s ll 18 tg puntos n 8 casos 1,3 n TL ll tf 20il 3"697 tf 2t rr 7 tt 4n252 n 22 rl ) It 5"t76 lf 23 rr tf 6nL32 tl 24 fl t 2 765 n 25 tr ) gtt61 il 26il 9n55 10n44 t-l' " tl 27 rt 3 2 ll 28 rl o tf It 29 rf 2 It t, jO ft 1 tf 31' rr 2 1"4 n 31' 26 ft 32 rt 0 L5 tt 7,7 tl 55 rt o 1"6 " n !.5 r It t tz tl 2 L2il37 t 1,5 1-7 1.089 33 cifra indicadora de la gravedadde este aspectode la psicología infantil. Por otra parte, en 10,000 casosde mi material psico-patológico infantil, solo el 62 por 100 tienen D.C. alta o seaque hay muchos (motóricos,oligofrénicos, hipoacúsicos, epilépticos, etc.) que no son caracteriales. Y también, los padres y maestros reputaú como caracteriales a niños que no lo son. Esto sucedeen el 25 r32 34 por 100 de los vistos en la Inspeccion médico-escolar y hasta en el 5 por 100 de los de la consulta privada. Ya solo esto, distinguir lo normal de lo anormal, más traducir en cifras lo que hasta ahora era cualitativo pero no cuantitativo, prestándose a la elaboración estadística, como veremos y obteniendo cuadros sindrómicos de alteraciones de conducta, creemos da importancia a este estudio, NOFMALIDAD Y ANORMAL!DAD EN EL COMPORTAMIENTO DEL NIÑO t RESUMEN _El autor presenta su experiencia valorando la conducta infantil mediante un cuestionario clínico psicológico a los padres en presenci* áel niñá v "penalizando" las desviacionesde conducta en forma de poder cuantitificarla estadísticamente,pudiendo asi separar lo normal de lo anormal. Se señáh mediante este estudio que ell2.b%de los niños "normales" presentan una conducta anormal y el 629ode los niños con organicidad cerebral. SUMMARY The author presents his experiences evaluating the children behivior by mean of a clinical psychological questionaire given to the p-.rrl, in fiont ..penalting" of the the behavio9hild, ral deviation in a quantitative statisti_ cal way, separating the normal behavior from the abnormal one. It is pointed out by this ;;"*;h;t tne L2,5% of ..normal,' children have and abnormal behavior and the 62%of the children with organic brain disorders. - 133