ISSN 2007-1957 LA PROFESIONALIZACIÓN DOCENTE A NIVEL SUPERIOR EN EL IPN Leticia Andrea Morales Sánchez ESIQIE-IPN lmoraless@ipn.mx Virginia Morales Sánchez UPIICSA-IPN vmoraless@ipn.mx Guadalupe Laura Flores Negrete UPIITA – IPN gfloresn@ipn.mx Abstract El trabajo presenta un análisis de los elementos y factores que intervienen en la formación profesional docente y de las características específicas que en el Instituto Politécnico Nacional tienen la profesionalización docente. Se describen los factores a considerar en el modelo para la formación profesional docente en el IPN. Se hace una propuesta basada en la trayectoria docente y en una clasificación de los docentes del IPN. Profesionalización docente, nivel superior, IPN La formación profesional docente en los profesores del Nivel básico (preescolar, primaria y secundaria) es proporcionada desde el bachillerato. Pasan por el proceso de “alumno – maestro” cuando se gradúan, se convierten en “maestros con formación profesional docente”. Sin embargo, en el ejercicio docente de nivel superior no siempre sucede de esta forma, por ejemplo, en el Instituto Politécnico Nacional (IPN), el proceso de profesionalización docente es diferente. 1 laboratorio, el taller; para planear programar, llevar a efecto el proceso de enseñanza aprendizaje, conforme a los planes y programas de estudio aprobadas y de acuerdo con el programa de actividades que corresponde a su categoría En el reglamento de las condiciones interiores de trabajo del personal académico del IPN se define a la docencia como: “el conjunto de actividades que el personal académico desempeña en el aula, el El proceso del ejercicio docente1 (IPN, 1980) en el IPN inicia con la selección y contratación 1 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015 ISSN 2007-1957 de los docentes, lo cual se hace mediante un examen de oposición, cabe señalar que este proceso se implementó desde el surgimiento del IPN, en ese momento el modelo educativo en IPN era tradicional, después a finales de la en la década de los setentas, el modelo educativo se cambió a uno basado en la tecnología educativa y en 2003 se inició el cambio al modelo educativo basado en competencias, mismo que rige la educación que se imparte actualmente en IPN. No obstante, los cambios del modelo educativo del IPN, el proceso de selección y contratación de los docentes permanecieron sin cambios. Este proceso consiste en una convocatoria para un examen denominado de oposición, en él se solicita a los aspirantes den una clase acerca de un tema incluido en las ahora llamadas unidades de aprendizaje2 para la que concursan, el jurado del examen les evalúa algunos aspectos pedagógicos todos referidos a lo que sería una exposición oral, tales como: facilidad para explicar, dicción, material para la exposición, conocimiento del tema, responde correctamente a las preguntas, entre otras; y esa es toda la exigencia pedagógica que se le pide para su contratación. No le son solicitados elementos didácticopedagógicos como: planeación didáctica, un plan de evaluación de aprendizajes, la elaboración de materiales didácticos, una rúbrica, entre otros muchos elementos que son indispensables para un ejercicio profesional de la docencia dentro de un modelo educativo por competencias. Esta manera de contratación de académica. Además, el desarrollo de esta función incluye la preparación de clases, atención de alumnos, preparación de prácticas, aplicación y evaluación de exámenes.” (IPN, 1980). los docentes en el IPN, oculta tras de sí, el modo tradicional de ver al proceso enseñanzaaprendizaje, como simple transmisión de conocimientos en el que el alumno está vacío de conocimiento y hay que verterle información a través del discurso que después el deberá de reproducir textualmente. En este esquema el proceso de formación pedagógica del docente se considera que sucede durante el proceso mismo de la práctica docente, y es el caso de la formación docente que se da en el IPN, pero revisemos más detenidamente cómo se sucede este proceso. Sobre este tipo de formación profesional, se considera que los maestros aprenden a enseñar a través de su experiencia y de los otros maestros, pero sobre todo de los docentes que los enseñaron. En este patrón de formación “en muchos casos perdura lo que se hizo; lo que resultó antes que lo que trae dudas, lo nuevo” (Allanud & Duschatzky, 1992). Gimeno Sacristán dice acerca de la profesión de la docencia, que ésta se aprende a partir de los esquemas prácticos. Los docentes están adaptados a un sistema escolar y aprenden de las propias experiencias, de los esquemas prácticos que se han generado dentro del mismo sistema escolar. “La gran mayoría de esos esquemas están adaptados a un escenario o contexto escolar, que se han engendrado dentro del mismo y actúan como sus reproductores” (Sacrista & Allanud, 1992, pág. 113). 2 Durante el modelo educativo tradicional los programas de estudio recibían el nombre de materias, cuando operó el modelo educativo basado en la tecnología educativa recibieron el nombre de asignaturas, ahora en el modelo basado en competencias reciben el nombre de Unidades de Aprendizaje. 2 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015 ISSN 2007-1957 Cuando se habla de esquemas que se adecúan a los sistemas escolares, entonces se está hablando de cultura la cual se define desde las ciencias sociales como: un conjunto de ideas, comportamientos, símbolos y prácticas sociales, rituales, aprendidos de generación en generación a través de la vida en sociedad. Sería el patrimonio social de una comunidad, institución, sociedad. Desde la mirada de la antropología, la cultura se concibe como el conjunto de patrones aprendidos y desarrollados por los seres humanos. La cultura desde la perspectiva antropológica busca alcanzar o representar el conocimiento, como experiencia de una comunidad, aprendido por la organización de su espacio, la ocupación de su tiempo, en el mantenimiento y la defensa de sus formas de relación y conceptos humanos, llegando a lo que podríamos llamar su alma cultural, en el sentido de los estándares ideales estéticos de comportamiento y formas de presentación, todos ellos diseñados para sus necesidades. Obviándose estos resultados todos los días fortuitamente y regularmente, pero también en sus expresiones de celebración, fiesta, honor, homenaje y sacrificio. Así, la cultura es el mecanismo de adaptación, es decir, es la capacidad que tienen los individuos para dar respuesta al entorno de acuerdo con cambios de hábitos. La cultura además es un mecanismo de acumulación, debido a que las modificaciones aportadas por una generación pasan a la siguiente generación, donde se transforma, se pierden y se incorporan otros aspectos que buscan mejorar la vivencia de las nuevas generaciones. Con base en lo antes expuesto, inferimos que en el Instituto Politécnico Nacional los docentes se forman en un modelo reproductor inmerso en la cultura del trabajo profesional de la enseñanza dentro del mismo instituto. Hargreaves afirma que, la cultura escolar es un conjunto de supuestos básicos como las actitudes, valores, creencias, prácticas y formas de relación e interacción entre los diferentes actores: maestros, alumnos, metodologías de enseñanza, autoridades, currículo, planes de estudio, sistema admirativo, niveles de afectividad entre otros con el conocimiento (Allanud & Duschatzky, 1992). Los elementos de la cultura escolar, son transmitidos por los profesores a los alumnos que posteriormente serán los nuevos docentes encargados de la educación superior en el IPN. Esta transmisión implica una cultura en el IPN como institución. Por lo que podemos hablar de una cultura propia y única del Instituto Politécnico Nacional. Esta cultura del IPN es compartida por los docentes, es una cultura en donde el docente por medio de la adaptación asimila y reconstruye los escenarios dentro de la institución. Para Bourdieu, en el Capital cultural, escuela y espacio social nos indica que: “la institución escolar aludiendo que ésta contribuye a la reproducción del capital cultural, y con esto a la reproducción de la estructura del espacio social, operando este mecanismo en la dinámica de las estrategias de la familia y la lógica de las instituciones escolares, a las que llama estrategias de reproducción” (Bourdieu, 2005). El campo universitario es el terreno donde se determinan las circunstancias y los criterios de la posesión y de las jerarquías legítimas. Es el escenario donde se adquieren las características en lo económico y simbólico para que funcionen como capital para producir los beneficios específicos, que el mismo campo universitario proporciona. De esta manera es como los diferentes integrantes de la comunidad universitaria se definen por estas circunstancias y criterios, con estos se constituyen en grupos, y toman partido en 3 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015 ISSN 2007-1957 diferentes posiciones, con la intención de que se les reconozca en el campo universitario, con el fin de modificar las disposiciones de formación de los valores característicos del mercado universitario y acrecentar de esta manera sus oportunidades de beneficio. En el campo universitario es importante el estamento del que se provine académicamente, desde donde y en qué grupo realizó su formación, pues este define lo que Bourdieu llama el capital académico. Este tiene relación con el capital de autoridad científica o de notoriedad intelectual que se funda en el orden, en la autonomía científica e intelectual que está directamente relacionado con el capital que poseen sus formadores: otro capital en el campo universitario es el temporal y político. Estos capitales generalmente son antagónicos con el académico. Bourdieu explica cómo se reproducen en su estructura las relaciones de poder en el campo universitario, esta estructura favorece a reproducir por su propia acción de selección e inculcación, es el lugar, en y por su funcionamiento entre dichas posiciones donde se lleva a cabo (Olvera, 2009). En la magnitud en que existe una correlación entre posición de clase, cultura, capital social, académico, económico y político donde las relaciones de poder se confirman, se reproducen y renuevan. En la cultura del IPN, existen relaciones de poder entre maestros y alumnos, en el sector político se encuentran las relaciones entre autoridades, maestros y alumnos (director, jefes de departamento de carrera, presidentes de academia, docentes, alumnos). En docencia las relaciones de poder entre pares, las formas como se entrelazan entre lo económico y lo simbólico, esto tiene que ver con el nivel que ostenta cada profesor, de acuerdo a su nivel académico (licenciatura, maestría, doctorado y el lugar en donde lo realizó), nivel de categoría en el Instituto (interinato, técnico, asociado, titular “A, B, C”). Otro tipo de orden es por las actividades que realiza, ya sea de docencia, donde puede ser becario del programa de Estímulo al Desempeño Docente; de investigación, que se acreditan por su pertenencia al Sistema de Becas por Exclusividad SIBE, o al sistema de Estímulos al Desempeño de los Investigadores (EDI) con proyecto, y al Sistema Nacional de investigadores (SNI); por último están las actividades administrativas: directores, subdirectores, jefes de departamento de carrera, presidentes de academia, coordinadores de unidades de aprendizaje entre otros. El concepto de habitus de Bourdieu nos permite relacionar lo objetivo y lo subjetivo en el campo universitario. El habitus es “un sistema de disposiciones durables y transferibles -estructuras estructuradas- predispuestas a funcionar como estructuras estructurantes que integran todas las experiencias pasadas y funciona en cada momento como matriz estructurante de las percepciones, las apreciaciones y las acciones de los agentes cara a una coyuntura o acontecimiento y que él contribuye a producir" (Bourdieu, 1972: 178). En este caso lo objetivo es la posición en la estructura social en el IPN a la que llega el docente y con el tiempo el mismo y el grupo va construyendo y resignificando. La estructura del grupo es la que marca los determinantes y criterios en la formación del docente. También favorece para reproducir por su propia acción de selección e inculcación de los valores del grupo al que pertenece o desea pertenecer ya sea solo la docencia, la investigación o la administración. Una vez definida su posición en la estructura escolar su papel es meramente reproductor de esquemas y patrones aprendidos, a través de la cultura escolar y del capital escolar. El problema de esta forma de formación docente es que perpetúa el modelo educativo tradicional y no permite las transformaciones necesarias en formación docente que lleve a una correspondencia entre el modelo 4 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015 ISSN 2007-1957 educativo vigente y la formación docente que responda a los requerimientos del modelo. Propuesta de formación docente para IPN. profesional El logro en el IPN de la adaptación entre modelo educativo y formación docente requiere una re conceptualización del docente y pensarlo con necesidades de aprendizaje, si se quiere potencializar los efectos de su enseñanza, es decir, habría que preguntarse primero cómo facilitar el aprendizaje de los maestros antes que cómo lograr que enseñen mejor. Es necesario contemplar el espacio escolar al que se incorporará como profesional, hay que considerar también la escuela que vivió como alumno. Las reflexiones precedentes parte de considerar la docencia como una actividad que requiere, además de conocimientos y estrategias metodológicas, un aprendizaje de oficio ligado directamente con la acción que sólo acontece en la medida que se realiza: el maestro aprende a enseñar enseñando pero también aprende y aprendió a enseñar aprendiendo cuestiones ligadas a ese oficio durante su trayectoria escolar previa, como alumno del profesorado y en su rol de maestro de escuela. Nuestra propuesta concreta es una clasificación de las necesidades de la formación docente profesional al interior del IPN, basada en las diferencias de requerimientos de cada tipo de docente que cohabitan en la institución: los docentes de nuevo ingreso, los docentes con pocos años de experiencia docente y los docentes que han hecho de la docencia una profesión, con más de 20 años y que incluso cuentan con posgrados en el ámbito educativo, además de su formación técnica en la rama en que ejercen la docencia. Los docentes de nuevo ingreso son quienes tienen una más amplia gama de requerimientos de formación profesional docente, sus demanda están relacionadas en primer lugar con sus necesidades de formación pedagógica, didáctica, manejo de grupos, manejo de conflictos, metodología de investigación, expresión oral, inteligencia emocional, programación neurolingüística, manejo de tecnologías de la información y telecomunicaciones. En segundo lugar está la adquisición de los aprendizajes provenientes de su propia práctica docente y de las experiencias de sus compañeros. Con sus pares se aprende a través de las conversaciones y el intercambio de experiencias, materiales y relatos de anécdotas. Los programas de formación institucional deben propiciar estos encuentros entre pares, desde salas de café, bibliotecas especializadas, seminarios de experiencias, hasta talleres para desarrollo de materiales de apoyo por academia. Por su parte los docentes con una experiencia entre 5 a 20 años ya han incorporado los saberes del oficio, las experiencias propias obtenidas a través de ensayar diferentes metodologías de enseñanza, los aciertos, problemas, comentarios y resultados obtenidos en cada curso y cada grupo, todo ha aportado un aprendizaje que se acumula e impulsa una mejora continua de la propia práctica docente, misma que se enriquece cuando se comparte con los pares. Para este grupo de profesores es importante permanecer actualizados en su área técnica y actualizarse en tecnologías novedosas de telecomunicaciones que enriquezcan, faciliten y hagan más interesante para sus estudiantes los contenidos del curso y mejore su práctica docente. La promoción de cursos y 5 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015 ISSN 2007-1957 diplomados que le permitan actualizarse en su área técnica y en TIC´s son ideales para ellos. fin de hacer coincidir los requerimientos del modelo educativo y las trayectorias docentes. El grupo de docentes de más de 20 años en el ejercicio docente, en su mayoría, tienen cubiertas los requerimientos de formación educativa y tecnológica, generalmente están incursionando en funciones vinculadas con la dirección y gestión institucional, o bien se hayan en actividades de producción científica o de producción educativa. Sus necesidades de formación están dirigidas hacia estos campos y en una fase de producción discursiva, ya para la elaboración de planes y programas de estudio, o bien para la publicación de artículos científicos, pedagógicos, educativos o técnicos. También se hallan realizando mejoras organizacionales y requieren cursos, diplomados sobre cuestiones directivas, organizacionales y de gestión. Por su parte quienes realizan investigación requieren cursos y diplomados sobre gestión tecnológica, escritura de materiales científicos, gestión de productos científicos como patentes, propiedad intelectual, medios de difusión, producción editorial, entre otros. Referencias. La estratificación de los docentes con base a sus trayectorias en el ejercicio docente, debe ser el mapa con base en el cual los programas de formación profesional docente en el IPN deberían diseñarse. El otro elemento a considerar es el modelo educativo en turno, a Allanud, A., & Duschatzky, L. (1992). Maestros formación, práctica y transformación. Buenos Aires: Miño Dávila Editores. Bourdieu, P. (2005). Capital cultural, escuela y espacio social. México: Siglo XXI. Cornejo, J. A. (Enero-Abril de 1999). Profesores que se inician en la decencia:algunas reflexiones al respecto desde América Latina. Revista Iberoaméricana de Educación(19). Obtenido de http://www.rieoei.org/oeivirt/rie19a 02.htm IPN. (1980). Reglaento de las condiciones interiores de trabajo del Instituto Politecnico Nacional. Obtenido de http:// Sacrista, J., & Allanud, A. (1992). Fomación docente y el cambio educativo. En A. Allanud, & L. Duschatzky, Maestros formación, práctica y transformación. Buenos Aires: Niño Dávila Editores. 6 Ejemplar 13. Julio-diciembre de 2015