CAPACIDAD JURÍDICA UNIVERSAL María Silvia Villaverde “La interpretación del derecho al igual reconocimiento como persona ante la ley ha evolucionado, de forma que ahora se entiende que la capacidad jurídica es un atributo universal inherente a todas las personas en razón de su condición humana. Por lo que, negar a una persona su legitimación para actuar también afectará a su condición como persona ante la ley”. (A/HRC/37/56, 12/12/2017) 1. Los apoyos de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) –firmada en Naciones Unidas en diciembre de 2006, aprobada y ratificada por el Estado Argentino en 2008 y jerarquizada constitucionalmente en 2014– es un tratado de derechos humanos cuyos propósitos son el goce pleno de los derechos humanos y libertades fundamentales de las personas con discapacidad, en igualdad de condiciones con los demás, y su participación plena efectiva en la sociedad en el marco del proceso de creación y fortalecimiento de sociedades democráticas basadas en el estado de derecho desde una perspectiva de derechos humanos, en las que las personas y los pueblos tengan la oportunidad de configurar su propio destino. (art.1 CDPD, leyes 26.378 y 27.044). En pos de ello, la Convención desplaza el“modelo de la sustitución de la voluntad de las personas con discapacidad en el ejercicio de la capacidad jurídica”, que afecta desproporcionadamente a las personas con discapacidad cognitiva o psicosocial, por el “modelo de ejercicio de la capacidad jurídica con apoyos y salvaguardias, que respete la autonomía, la voluntad y las preferencias de las personas”, con miras a que las personas con discapacidad se conviertan en verdaderos sujetos de derecho; vale decir que no basta con reconocerles la aptitud de ser titulares de ciertos derechos si no se les garantiza, al mismo tiempo, la facultad de poder ejercerlos por si mismos. (art.12 CDPD) Como lo ha expresado el Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad –órgano del tratado encargado de su interpretación y de la supervisión y orientación a los Estados Partes sobre las derechos y obligaciones que dimanan de los artículos del tratado– y también la Relatora Especial sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (ONU), entre otros, la capacidad jurid́ ica implica ser titular de derechos y obligaciones (capacidad legal) y ejercer esos derechos y obligaciones (legitimación para actuar). Así, el apoyo es la institución, consagrada por el art.12 de la Convención, para que las personas con discapacidad no sean sustituidas por otras personas (tutores o curadores) a la hora de adoptar decisiones sobre su vida, “incluidas aquellas que necesitan un apoyo más intenso” (Preámbulo, j). En la Observación General Nro 1, el Comité ha reforzado este último aspecto de los apoyos, al afirmar que el apoyo debe estar disponible para todos, y que el grado de apoyo que necesite una persona –especialmente cuando es elevado– no debe ser un obstáculo para obtener apoyo en la adopción de decisiones (párr.. 29 a) CRPD/C/GC/1). Agrega que, incluso en las formas más intensas, todas las formas de apoyo deben basarse en la voluntad y preferencias de la personas, no en lo que se suponga que es su interés superior objetivo (párrs.29 b) y 20-22, CRPD/C/GC/1). Por otra parte, el Comité afirma que la prestación de apoyo “no debe depender de una evaluación de la capacidad mental”, pues para el apoyo en el ejercicio de la capacidad jurídica “se requieren indicadores nuevos y no discriminatorios de las necesidades de apoyo” (párrs.29 i) y 15, CRPD/C/GC/1). Asimismo, el órgano del tratado ha explicitado que “crear sistemas de apoyo a las adopción de decisiones manteniendo paralelamente los regímenes basados en la adopción de decisiones sustitutiva no basta para cumplir con el art.12 de la Convención” (párr.28, CRPD/C/GC/1) y que despojar a la persona de la capacidad jurídica, “ aunque sea con respecto a una única decisión” es una característica de los regímenes sustitutivos (párr.28, CRPD/C/GC/1). En este nuevo marco normativo, los Estados deben adecuar su legislación y sus prácticas a los compromisos contraídos al ratificar el tratado; lo que implica que, a la luz del ordenamiento jurídico vigente, los parámetros de la legislación en todas las ramas del derecho deben ser revisados y reformados teniendo en cuenta que todas las personas con discapacidad son sujetos de derechos, con capacidad jurídica –tanto de derecho como de hecho o de ejercicio–, y que una de las obligaciones asumidas por el Estado es la de proporcionales acceso al apoyo que puedan necesitar para el ejercicio de su capacidad jurídica, en todas las aspectos de la vida, de conformidad con las disposiciones de la Convención (art.4 y 12 CDPD y art.27 Convencion de Viena sobre el Derecho de los Tratados, 1969). Considerando la importancia de la armonización legislativa para el reconocimiento pleno de la “capacidad jurídica universal” de las personas con discapacidad, se presta especial atención al proceso de reforma legislativa de los Estados Partes, en particular me referiré sucintamente al caso de Argentina. 2. Los apoyos del Código Civil y Comercial de la Nación: En el caso de Argentina, el Código Civil y Comercial de la Nación (CCCoN), que rige desde el 1 de agosto de 2015, ha regulado la materia en el Libro Primero sobre Parte General, Título 1 sobre Persona humana, Capítulo 2 sobre Capacidad (arts.22 a 24 y 31 a 50), especialmente en la Sección 3ª de este Capítulo titulada “Restricciones a la capacidad”, integrada por cinco parágrafos: 1) Principios comunes, 2) Sistemas de apoyo al ejercicio de la discapacidad, 3) Actos realizados por persona incapaz o con capacidad restringida, 4) Cese de la incapacidad y de las restricciones a la capacidad y 5) Inhabilitados. En el Código argentino reformado se adopta un modelo basado en la restricción judicial excepcional al ejercicio de la capacidad para determinados actos de las personas mayores de trece años, que padecen una adicción o una alteración mental permanente o prolongada, de suficiente gravedad, siempre que se estime que del ejercicio de su plena capacidad puede resultar un daño a su persona o bienes. En relación con las funciones y los actos que se restringen, se procurará que la afectación de la autonomía personal sea la mínima posible. En estos casos, el Código Civil y Comercial introdujo la figura del o de los apoyos: “el juez debe designar el o los apoyos necesarios, previstos en el art.43 del Código, especificando las funciones con los ajustes razonables en función de las necesidades y circunstancias de la persona” (arts.31, 32, 38, 43 CCCoN). Excepcionalmente, se prevé la anulación de la capacidad jurídica, mediante la declaración de incapacidad con designación de curador, cuando “la persona se encuentre absolutamente imposibilitada de interactuar con su entorno y expresar su voluntad por cualquier modo, medio o formato adecuado y el sistema de apoyo resulte ineficaz.”(art.32 in fine CCCoN) Cabe señalar que la capacidad general de ejercicio de la persona se presume, que la intervención estatal es siempre interdisciplinaria, y que la persona tiene derecho a participar en el proceso judicial con asistencia letrada, que será proporcionada por el Estado si se carece de medios, y que se garantiza el derecho a la información efectiva a través de los medios adecuados para su comprensión (art.31 CCCoN). Asimismo, el Código garantiza: a) la inmediatez de la persona con el juez/la jueza durante el proceso y b) la entrevista personal “antes de dictar resolución alguna” (art.35 CCCoN), lo que resulta trascendente para el cumplimiento de la garantía judicial de los “ajustes al procedimiento” emergente del artículo 13 de la Convención. Por la relevancia que reviste esta garantía para la tutela judicial efectiva de las personas con discapacidad, no deben confundirse los conceptos “ajustes de procedimiento”(art.13 CDPD) y “ajustes razonables”(art.2 CDPD). En la Sesión del 13/9/2006, el Comité Especial de Redacción del tratado adoptó la expresión “ajustes de procedimiento y adecuados a la edad” y decidió descartar el término “razonable” porque, a diferencia de los “ajustes razonables”, los ajustes de procedimiento no están sujetos al criterio de proporcionalidad. En efecto,“[l]a falta de ajustes de procedimiento vulnera el derecho a un juicio imparcial y puede propiciar la exclusión efectiva de la persona con discapacidad de las actuaciones judiciales o dar lugar a que se dicten sentencias injustas” (párrs.24-32, A/HRC/37/25, Informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre Derecho de Acceso a la Justicia en virtud del art.13 de la CDPD). 3. Conclusión La figura del apoyo se ha introducido en el Código Civil y Comercial de la Nación, como consecuencia o “en relación” con los actos y funciones que se restringen o limitan judicialmente a las personas con discapacidad. En tanto que, el apoyo previsto en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad tiene como objetivo evitar toda restricción a la capacidad de ejercicio de las personas con discapacidad, psicosocial o intelectual, para el cumplimiento del propósito del tratado basado en los principios generales establecidos en el art.3 de la CDPD, en particular para asegurar su participación en la sociedad como agentes en todos los asuntos que les afectan. Por ello, el Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad ha destacado que un regimen en el que “se despoja a la persona de la capacidad con respecto a una única decisión” es aún un regimen basado en la sustitución en la toma de decisiones. Documentos: 1) Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (ONU): Observación General 1 sobre el art.12 Igual reconocimiento como persona ante la ley (CRPD/C/GC/1) 2) Informes de la Relatora Especial sobre Derechos de las Personas con Discapacidad (ONU): a) Acceso al apoyo (A/HRC/34/58) b) Derecho a igual reconocimiento como persona ante la ley (A/HRC/37/56) 3) Informe del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (ONU): Derecho de acceso a la justicia en virtud del art.13 de la CDPD (A/HRC/37/25)