APUNTES DE FILOSOFIA T.15 1.De la ética a la política 1.1. La realidad social y el orden político Una característica básica del ser humano es su carácter social. La formación de nuestra propia identidad personal no puede nunca producirse de manera aislada. Es dentro de la familia, la escuela, los amigos, el trabajo, etc., como conseguimos entendernos a nosotros mismos y a los demás. Nos hacernos personas a través de los valores y normas que contiene toda tradición cultural. Necesitamos organizarnos y crear diferentes prácticas sociales, grupos, organizaciones, etc. Mientras que la naturaleza se rige por leyes que no podemos cambiar, como es el caso de la gravedad, la realidad social es el resultado de la actividad conjunta de las personas. La realidad social depende de los individuos que la componen, de sus capacidades y de su libertad para transformarlas. Por eso decimos que toda realidad social tiene un carácter moral, esto es, pretende ser correcta o justa. 1.2. Los retos de la filosofía política La filosofía política se ocupa de reflexionar acerca de cuál es la mejor organización que podemos dar a la realidad social. Es la parte de la filosofía que trata de pensar y diseñar una comunidad donde todos puedan vivir de forma pacífica y justa, donde todos puedan llevar una vida que merezca el calificativo de «digna». Mientras que la ética o filosofía moral se ocupa de la aclaración, fundamentación y aplicación del saber moral, de lo que debe ser, por su parte la filosofía política se centra en las instituciones y los argumentos que fundamentan el poder político, es decir, en la autoridad necesaria para convertir en realidad aquel deber ser, de modo que su realización práctica sea lo más completa y efectiva posible. El término «política» se refiere, al Estado, a los partidos políticos al Gobierno y a la oposición, a los procesos electorales, a las leyes y a su obligatorio cumplimiento, etc. Pero también se refiere, por otra parte, a los derechos humanos, a la pretensión de justicia que acompaña a las leyes, a la legitimidad que requiere la legalidad, etc. No es posible hablar de política sin referirnos a la pretensión de justicia que todo poder instituido reclama y necesita. A diferencia de los principios morales, los principios políticos no tienen validez para todos los seres humanos. Están ligados a una sociedad determinada, a circunstancias sociales y económicas concretas y, en consecuencia, son siempre variables y dependientes de los problemas de cada momento histórico. 1.3 Legalidad y legitimidad El orden social se aprecia de forma clara cuando distinguimos entre la legalidad de una decisión, acción o institución -si cumple con las leyes- y su legitimidad -si está justificada-. tres perspectivas diferentes: Validez moral: define la moralidad o justicia de la norma. Nos dice si la norma es correcta o justa según criterios morales, es decir, universales. Por ejemplo, el respeto a las personas, la prohibición de matar, el no mentir, etc. Validez jurídica: se refiere a la legalidad de la norma, si está recogida en la legislación correspondiente y su cumplimiento viene respaldado por la fuerza o coacción de las leyes. Cuando no cumplimos este tipo de normas decimos que la conducta es ilegal. Vigencia social: nos referimos a la eficacia social que acompaña a las normas, a su aceptación por parte de los miembros de la sociedad. Algunas normas tienen mayor vigencia, y otras menos. Por ejemplo, en algunos lugares los conductores detienen su vehículo en los pasos de peatones, mientras que en otros lugares no suelen hacerlo. Cuando hablamos del sistema político nos referimos al conjunto de individuos e instituciones encargados del gobierno de una sociedad. El Estado ocupa el lugar central en este sistema, precisamente por su poder para elaborar y hacer cumplir las leyes. El orden social no se puede mantener sin este poder, sin la capacidad de influir en la conducta de los demás. 2.Los fundamentos del Estado 2.1. Rasgos básicos del Estado moderno El Estado moderno es la institución social que tiene la autoridad necesaria para garantizar los derechos y obligaciones de los miembros de una comunidad política y para definir y desarrollar políticas públicas, como asegurar el abastecimiento de agua potable, construir puentes y carreteras, etc. Nicolás Maquiavelo filosofo renacentista (Italia, 1469-1527), su enfoque teórico se denomina «realismo político»: dado el egoísmo y la ambición de los seres humanos, es necesaria una estructura de poder, una organización jerárquica estable, que asegure el orden social y permita la supervivencia, el comercio y la prosperidad general. En su obra, El Príncipe, Maquiavelo describe que al gobernante (el príncipe en este caso) le piden que: Que mantenga el orden en un estado, y para ello necesita un ejército. Que mantenga al pueblo unido, la religión mantiene al pueblo unido. Cuando el gobernante lo vea necesario será: Como un león, fiero. Como un zorro, astuto. El gobernante debe aparentar tener grandes cualidades humanas. El fin de un buen gobernante debe ser mantenerse en el poder, y por eso se dice que el fin justifica los medios. Max Weber filósofo y sociólogo (Alemania, 1864-1920) define el Estado como «una asociación de tipo institucional que trata con éxito de monopolizar la violencia legítima como instrumento de dominio en un territorio determinado». El dice que para mantenerse en el poder: 1.Tiene que tener cualidades, carisma, tiene poder de liderazgo (legitimidad carismática). 2.Por motivos históricos, o tradición, los reyes (legitimidad tradicional). 3.O por votación, por decisión del ciudadano, el medio racional (legitimidad racional). 2.2 La legitimación del poder político Hipótesis: estado inicial o de naturaleza “sin estado”. T.Hobbes: “ el hombre es un lobo para el hombre” J. Locke: Iusnaturalismo; “El hombre posee defectos naturales” J.J. Roussean:” El ser humano es bueno por Naturaleza” Función del estado según: T.Hobbes: el estado limita los abusos. J. Locke: el estado debería ayudar a respetar los derechos naturales. T.Hobbes: el estado debería garantizar: libertad e igualdad CONTROL POLÍTICO (John PODER SOBERANO (Thomas Locke) Hobbes Situación inicial Contrato político Fines del Estado resultante PARTICIPACIÓN DEMOCRÁTICA (JeanJacques Rousseau) Igualdad natural de individuos aislados, pero hay problemas de subsistencia. No hay derechos previos al contrato. Guerra de todos contra todos: miedo e inseguridad. No hay normas, ni derechos, ni obligaciones. Paz precaria. Todos tienen derechos naturales a la vida, libertad y propiedad, pero no hay un juez común con autoridad. Entre todos los individuos a favor de un soberano con poder ilimitado. Doble contrato: entre todos los individuos para crear el Estado y entre los individuos y los gobernantes. Entre todos los ciudadanos a favor de la comunidad. Estado como garante de la paz, del resultante orden y de la seguridad. Estado como agencia protectora que evite que cada individuo tome la justicia por su mano. Estado como expresión de la voluntad general de la comunidad unida. El pueblo ha de participar en las decisiones. Kant, considera en su obra “la paz perpetua” que el estado moderno debe preservar o garantizar la libertad del ser humano. Ante la ley todos somos iguales, pero somos en tercer lugar súbitos de la ley. Estábamos por de bajo de ella, ante la que somos iguales. 1. Principio de la libertad de cada miembro de la sociedad (en cuanto hombre). 2. Principio de la dependencia de todos respecto a una única legislación común (en cuanto súbditos). 3. Principio de la igualdad de todos los súbditos (en cuanto ciudadanos). 2.3. La evolución del Estado moderno El Estado absolutista. En esta primera forma, la de monarquía absoluta, el rey acaparaba todo el poder. De él dependían tanto las leyes como su aplicación. No existían controles ni límites para evitar posibles abusos. No hay participación ciudadana. No hay derechos reconocidos. Acumulación de los poderes en manos del monarca. El Estado liberal de derecho. Serán las revoluciones liberales las que se encargarán de acabar con ese poder absolutista y de implantar la idea de que nadie, tampoco el monarca, puede estar por encima de las leyes Esto es lo que se denomina «imperio de la ley», y es lo propio de un «Estado de derecho». Se establece un marco legal que proteja los derechos individuales. Para alcanzar estos objetivos se establece una Constitución. Iusnaturalismo (derechos naturales) Locke: Igualdad Propiedad privada Participación Derecho a reunirse y crear asociaciones Constitución = Imperio de la ley El Estado democrático de derecho. La tradición democrática, mantiene que la mejor manera de controlar el poder de los gobernantes y garantizar así la libertad es la participación en la política de los gobernados. El principio democrático señala que nadie debería ser excluido de participar de forma eficaz en la elaboración y aplicación de las leyes que le afectan. La libertad entendida como independencia, que es la capacidad de per-seguir nuestros objetivos individuales. La libertad como participación en los asuntos públicos, como capacidad de intervenir de forma efectiva en la vida política. El Estado social y democrático de derecho. Las luchas sociales lleva-das a cabo por el movimiento Obrero a lo largo de los siglos XIX XX mostraron que no es suficiente con que las leyes recojan el reconocimiento de ciertos derechos. La tradición socialista introduce en nuestra comprensión de la democracia el valor de la igualdad. para hacer real la igualdad de oportunidades. Esto ha provocado la expansión progresiva de los servicios sociales: educación, asistencia médica, protección de la vejez, del deseen leo de los grupos más débiles Como respuesta a los problemas propios del sistema económico. La economía requiere una coordinación estatal para asegurar la eficacia y evitar las tendencias a la crisis. TIPO DE ESTADO GARANTÍA DE DERECHOS Estado absolutista Ninguna: el monarca acumula todo el poder y está por encima de la ley. Estado de derecho liberal Derechos civiles (libertad de conciencia, igualdad ante la ley, garantía legal, libertad de culto, libertad de expresión, etc.) Estado de derecho liberal y democrático Estado de derecho liberal, democrático y social Derechos civiles y políticos (sufragio universal, asociación política, a elegir y ser elegido, a ocupar cargos públicos, etc.) Derechos civiles, políticos y sociales, económicoculturales, educación, salud, vivienda, empleo, jubilación, etc.) 3.La democracia de hoy Hoy la democracia se caracteriza básicamente como un sistema representativo, el cual es posible si se dan las siguientes condiciones: 1.Sufragio universal (igualdad política = un ciudadano, un voto). 2. Elecciones periódicas regulares, en las que los gobernantes puedan ser sustituidos o reelegidos. 3. División de poderes: legislativo (reside en el Parlamento y se encarga de promulgar las leyes), ejecutivo (es el poder encargado de hacer cumplir las leyes y de proponer al Parlamento las reformas necesarias; lo ejercen los ministros, que toman las decisiones de acuerdo con el programa de su partido) y judicial (desempeñado por los jueces y jurados, que deciden si los comportamientos se ajustan o no a lo prescrito por la ley, e imponen castigos a los infractores). 4. Garantía de libre discusión pública: para lo cual se requiere la libertad de expresión, de reunión y asociación, la igualdad ante la ley, la transparencia en la toma de decisiones públicas, la información plural necesaria para la deliberación, la educación básica para todos, etc. 5. Igual posibilidad de que todos puedan ser candidatos y ocupar cargos públicos. Libre competencia entre todos los candidatos y sus Partí-dos políticos, lo que implica el acceso equitativo a los medios de información públicos, subvenciones para gastos electorales, etc. 6. Aceptación de la regla de la mayoría como instrumento básico para la toma de decisiones, pero con limitaciones para evitar que las mayorías puedan abusar de su poder. 7. Límites constitucionales a la regla de la mayoría: conjunto de derechos civiles y políticos que garanticen el respeto a las minorías y la posibilidad de que puedan convertirse en mayorías. 4. La sociedad civil 4.1 un espacio para libertad La sociedad civil es una densa red de asociaciones y organizaciones culturales, educativas, religiosas, lúdicas de ayuda mutua, de defensa de intereses universales, etc. Dos características básicas definen esta esfera: El eje central de la sociedad civil es el carácter no coactivo, sino libre y voluntario de sus asociaciones y organizaciones. Es nuestra voluntad de ayuda mutua y nuestro compromiso con los demás lo que nos mueve a reforzar la sociedad civil, y no la búsqueda de beneficios o de poder. En esta esfera las personas colaboran para satisfacer determinados intereses comunes, que afectan a muchas personas. En algunos casos, esos intereses son grupales, como ocurre con los clubes deportivos y los sindicatos, mientras que en otros casos se defienden intereses generales, como sucede con las asociaciones cívicas humanitarias que trabajan en favor de la paz, del medio ambiente o de un desarrollo económico más justo. 4.2 Dos visiones de la sociedad civil El concepto de sociedad civil se utiliza para referirse a dos realidades diferentes: La sociedad civil como mercado: se entiende como sinónimo de «sector privado», donde individuos económicamente autosuficientes establecen lazos contractuales para alcanzar sus fines particulares. Todas las relaciones se explican desde el interés particular, por lo que los demás son percibidos corno meros instrumentos o medios para mis objetivos egoístas. Las relaciones sociales se identifican con las relaciones comerciales. La sociedad civil como «tercer sector» (además del sector estatal y del económico): los individuos actúan orientándose por valores cívicos compartidos y las relaciones que la conforman se entienden desde el interés común. Ya no se trata de la estrategia (usar al otro como un medio al ser-vicio de mis objetivos egoístas), sino de la solidaridad como mecanismo básico de coordinación de la acción. 5.El futuro de la democracia 5.1 La desafección democrática Las causas de esta situación (que se llama desafección) nos remiten a diferentes factores, entre otros: (explica porque pasamos de todo) La frustración por la mala gestión de algunos gobernantes, incapaces de solucionar los problemas que afectan a todos los ciudadanos. El descrédito de unos representantes políticos que, en muchos casos, están lejos de la necesaria honestidad y honradez que requiere la gestión pública, junto a la percepción de que la corrupción está generalizada y suele quedar impune. La insatisfacción por el incumplimiento de las expectativas depositadas en el sistema democrático, en la garantía de los derechos sociales y económicos, por ejemplo: educación, sanidad, vivienda, etc. La percepción de que quienes tienen el poder para cambiar la realidad no son quienes elegimos. Por ejemplo, el Fondo Monetario Internacional. El colonialismo económico, que hoy se manifiesta a través de grandes em-presas transnacionales capaces de imponer sus criterios al poder político. La falta de democracia interna de los partidos políticos que repercute tanto en su papel de principal canal de participación política, como en su función de selección de liderazgos.