Diseño del extremo libre Componentes de la Prótesis Parcial Removióle una muestra tomada en los laboratorios que servía a los dentistas. BURNS hizo su investigación con base en cuestionarios repartidos en un congreso de especialistas, donde se entregaron 195, entre los asistentes al Meeting del American College of Dentists. Williamburg VA (20 de Octubre de 1987). La mayoría de los asistentes (60%) colocan el apoyo oclusal en mesial en el extremo libre, otros dicen que la ubicación del apoyo VARIA de acuerdo a la oclusión. 7 2 % usa retenedores rompefuerza como el DPI, DPA y el de alambre adaptado y una estructura rígida. El autor dice que las experiencias de FRANTZ y TAYLOR están basadas en una información usada para guiar a los dentistas, sin base científica y sin datos sólidos, generados por la investigación. Muchos de los conceptos que generaban controversia cuando eran descritos por primera vez, hace décadas, para el diseño de la PPR y su construcción, han venido a establecerse con el tiempo, como una manera convencional de pensamiento. Con esto en mente es más fácil comprender la confusión con respecto a los procedimientos de tratamiento y filosofías apropiadas. SIKORA238, en 1995, mandó modelos, superiores e inferiores de Clase 11 modificación 1, a 15 laboratorios comerciales de Canadá, solicitando diseñar los modelos. Se acompañaron con una carta explicativa del proyecto y un cuestionario sobre las técnicas comúnmente usadas por los dentistas en la construcción de PPR así como los procedimientos de laboratorio que ellos piden a los técnicos. Comparado con el reportaje de MC CRACKEN239 sobre diseño de PPR inferior, y el de SIKORA y CALIKKOCAOGLU240, que señalan una gran variación en el diseño de la prótesis parcial para modelos idénticos que fueron enviados a laboratorios dentales comerciales, el autor señala una marcada mejoría en la comprensión de los principios fundamentales del diseño de una PPR. Sin embargo, el cuestionario reveló sólo una pequeña mejoría de la comunicación entre el dentista y el técnico dental. La necesidad de que los dentistas comprendan los principios básicos del diseño y construcción de una PPR, como se enseña en las escuelas dentales, y lleven estos principios a su práctica general, es tan válida ahora, como hace años236. En una investigación hecha en Inglaterra y Suecia en 1982, solamente el 0.6% de los laboratorios encuestados, reportaron que sus clientes dentistas aceptaban comúnmente la absoluta responsabilidad del diseño 241 . 7 7 % de los laboratorios afirmaron que el diseño era ejecutado solamente por el técnico dental. Estudios hechos por BASKER y DAVENPORT242 (1978) y BASKER y col. 243 (1988), encontraron que en un periodo de 10 años se hizo un muy modesto progreso en la práctica del diseño: (26% de diseño detallado, sin instrucción 5 4 % ; en 1990, 40.3% diseño detallado, 2 8 % sin instrucción). En la segunda investigación el 6 0 % de los casos no presentaban instrucción, por lo que el investigador concluye que la situación está muy lejos de ser satisfactoria. Autores de esta parte de América, también afirman que los dentistas no asumen la responsabilidad del diseño de las dentaduras parciales que construyen para sus pacientes244. OLIVEIRA y col, luego del análisis del desempeño de las prótesis parciales removibles, muestran la existencia de más fracasos que éxitos. Pero esos fracasos son consecuencia de no observar principios biomecánicos de planeamiento, con respeto de los tejidos de sustentación. Uno de esos principios se refiere al alivio que debe existir entre el conector mayor y la mucosa con que se relaciona245. Otro autor de la región dice que el poco éxito de la PPR se debe a la falta de profesionalismo en el diseño, planeamiento y ejecución en este tipo de rehabilitación oral 246 . En el Perú no hay un estudio sobre el nivel de compromiso del dentista con respecto al diseño de la PPR, que es la base para un buen plan de tratamiento, una buena preparación de la boca y una elaboración de la PPR con respecto de principios biológicos y mecánicos aceptados. A pesar de que no existe este tipo de estudio, hay dos indicadores fáciles de comprobar; primero, llamar a los laboratorios dentales que hacen bases metálicas para dentaduras removibles y preguntarles, más o menos, a cuántos dentistas dan servicio y cuántos mandan los modelos diseñados, o por lo menos con alguna instrucción escrita; indagaciones personales permiten afirmar que no llegan al 2% los dentistas que asumen la responsabilidad del diseño. El segundo indicador es llamar a los negocios de productos dentales y preguntarles cuántos paralelígrafos venden en comparación con otros equipos e instrumentos dentales, la respuesta es alarmante, la mayoría no vende ni uno y no lo tienen en stock, porque no tienen demanda. Estos hechos ameritan una investigación formal para tener datos precisos al respecto.