4.- PRUEBA DIRECTA REFLEJADA Prueba directa: La violación de un derecho fundamental es nulo de raíz y por tanto genera responsabilidad a los infractores, sean particulares, policía o jueces. No es necesario por tanto la aplicación de la doctrina del fruto del árbol envenenado si la regla de exclusión puesto que su prohibición es clara, sin embargo, se desarrolla el principio de unidad de acto el cual desarrolla el supuesto de que al realizarse un acto ilegal y del cual han de derivar determinadas pruebas, existe una licitud que ha de tener un periodo de duración y luego de la cual ha de ser posible aplicarse la teoría desconexión de la antijuricidad, para un correcto entendimiento de esta teoría nos agenciamos de la explicación de MARTÍNEZ GARCÍA, quien nos dice que será importante a la hora de observar la teoría de la desconexión de antijuricidad postulada por el Tribunal Constitucional, pues no debieran tratarse como pruebas independizables, sino que la antijuricidad se extiende hasta el momento en que cesa la ilicitud originaria”. La garantía de inadmisión de estas pruebas podemos decir que si han sido obtenidas inmediatamente con violación de un derecho o libertad fundamental son inadmisibles por colisionar con el proceso y las garantías reconocidas en un Estado Social y Democrático de Derecho. Cabe mencionar que no todas las fuentes de prueba pueden ser inadmitidas puesto que se han ido gestando posiciones que han de constituir una excepción para poder ser admitidas en juicio como es el caso de la buena fe policial, el consentimiento voluntario y espontáneo del detenido, entre otras. Incluso la prueba por indicios está sujeta a las reglas de exclusión, tal como lo ha esbozado GARCÍA CAVERO para quien la doctrina procesal establece que el medio de prueba del indicio o hecho base debe ser directo” . Prueba refleja: Está vinculada con la doctrina norteamericana del fruto del árbol envenenado, según la cual se aplica sobre aquellas fuentes o medios de prueba obtenidos lícitamente, pero que han derivado de un acto originariamente contrario a los derechos fundamentales, se trata entonces de negar los efectos de estas pruebas así como su inadmisión. Ante este tipo de pruebas surge la necesidad de potenciar las garantías procesales, por lo que surgen excepciones a la exclusión probatoria, las mismas que según lo desarrollado por MARTÍNEZ GARCÍA, quien manifiesta que: “esto resulta razonable pues, de otra forma, también podría llegar a propiciarse que un detenido, por ejemplo, utilizara el sistema procesal para dar lugar a pruebas ilícitas ante la policía con el fin de lograr con posterioridad la nulidad de todo lo actuado tras su obtención”. 5.- EXCEPCIONES La protección de los derechos fundamentales y del individuo frente a la persecución penal del Estado tiene uno de sus indicadores más importantes cuando se revela el contenido conceptual de la prueba ilícita y el modelo teórico explicativo que determina los fundamentos, la naturaleza y los efectos de la regla de exclusión probatoria. Si bien la regla de exclusión de las pruebas ilícitas se ha universalizado, lo cierto es que su naturaleza, alcance y efectos depende de cuál sea la explicación que se ofrezca acerca de su fundamento. El análisis de dicho fundamento puede hacerse desde dos modelos teóricos explicativos. En el estudio de las excepciones a la exclusión probatoria se trata de buscar aquellos argumentos a partir de los cuales se frene la aplicación automática e inexorable de la consecuencia jurídica de la regla de exclusión o la teoría del fruto del árbol envenenado, y se pueda establecer su fundamento (normativo o jurisprudencial). Precisando que en el Perú las excepciones tienen un fundamento jurisprudencial, tal como se ha establecido en el Pleno Jurisdiccional Penal de 2004. Excepciones a la exclusión probatoria tenemos: Remedio contra las actividades incorrectamente realizadas Carece de sentido mantener los efectos inhabilitantes de la regla cuando esta no conlleva al logro de su finalidad. La promoción de resultados precisos. Cuestión ética e integridad judicial. Función preventiva, ante este argumento surgen respuestas que es importante resaltar, puesto que la misma doctrina norteamericana al encontrar fallos en su sistema de justicia opta por emplear las excepciones que a continuación se mencionan y han sido extraídas de la obra de MARTÍNEZ GARCÍA. Teoría de la fuente independiente (independent source), la cual logra justificar la independencia causal entre dos pruebas aparentemente derivadas la una de la otra. Doctrina del hallazgo inevitable (inevitable descovery), según la cual se quebranta la ilicitud de esa prueba derivada de la ilícita ya que era inminente su descubrimiento por otros medios que si son legales, por tanto justifica su admisión. La buena fe policial, empleadas para el caso de obtención de pruebas directas, según la cual el error cometido en la obtención de la prueba justificaría su admisibilidad en el proceso. Teoría del nexo causal atenuado (purged taint), supuesto intermedio entre la prueba ilícita y la teoría de la fuente independiente en donde la ilicitud de la prueba se disipa o atenúa, por ejemplo, por efectos del paso del tiempo. XIII. REGULACION ACTUAL DE LA PRUEBA PROHIBIDA EN LA LEY PERUANA Como su nombre lo indica, “prueba prohibida” es todo elemento que contribuye a demostrar la concurrencia de un hecho a condición de haber sido obtenido violando o contradiciendo una norma legal o un principio de derecho positivo (Midón, 2005: 30). La prueba prohibida actualmente en nuestro país cuenta con una regulación expresa en el artículo octavo del título preliminar del nuevo código procesal penal que, solamente está en aplicación en la ciudad de Huaura, por tanto solo podríamos aplicarlo a nivel nacional en una interpretación conforme a la constitución, al artículo segundo, inciso 24, donde tendremos algunas disposiciones que tienen que ver con este tema que se tiene que trabajar por parte de la policía, respetando los derechos fundamentales de los imputados. El nuevo Código Procesal Penal asume un concepto estricto de prueba ilícita cuando señala en el artículo VIII.2 del Título Preliminar: “Carecen de efecto legal las pruebas obtenidas, directa o indirectamente, con violación del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona”. Al prescribir el artículo 159°: “El Juez no podrá utilizar, directa o indirectamente, las fuentes o medios de prueba obtenidos con vulneración del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona”. Por otro lado, la prueba es ilegal o irregular toda vez que su obtención configure violación de normas legales o principios generales del ordenamiento de naturaleza procesal o material. Cuando la prohibición fue colocada por una ley procesal, la prueba será ilegítima (o ilegítimamente producida); cuando, por el contrario, la prohibición fue de naturaleza material, la prueba será ilícitamente obtenida. Basándome a este tema muy importante para nuestro país, en la prueba prohibida encontramos tres niveles de análisis, el primero, establece si se admite o no ordenamiento jurídico de la prueba prohibida, el segundo, si hay casos o no de prueba prohibida y el tercero que da lugar a las excepciones a la nueva admisión de la prueba prohibida. Tenemos en cuenta que la policía interviene cuando se produce investigaciones preliminares, por lo que tiene que actuar con respeto a los derechos fundamentales de todos los imputados que estén involucrados en este tema, pero a pesar de que eso tendría que ser así, en realidad en la práctica esto no es así, esto no ocurre, entonces esto en las investigaciones que se realicen deberán o no ser eliminadas del material probatorio y por lo tanto, en los casos que se dan durante la investigación preliminar, la policía no ha cumplido con respetar los derechos fundamentales y por tanto si aplicamos la teoría de la prueba prohibida, tendríamos que decir, que no vayan esas investigaciones y que hay que poner en libertad a todas las personas que estén involucradas en el delito. Los ciudadanos preguntarán por que el estado va a responsabilizar de la ineficiencia que la policía tiene cuando no respeta los derechos fundamentales al hacer las investigaciones, que el estado debería mandar mensaje de respeto a la constitución y a las leyes, además de los agentes que pertenecen al estado, que es empezar dando el ejemplo, por lo tanto así surge la regla de exclusión de la prueba prohibida inutilizando todas aquellas fuentes de prueba que haya sido obtenida vulnerando el material probatorio, el punto es, encontrar un punto donde se pueda combinar garantías y eficiencias, es decir, garantía por un lado que se respeten los derechos de los imputados pero por otro lado también que no haya impunidad. A criterio de BARBOSA MOREIRA, existen dos opiniones radicales sobre las pruebas obtenidas mediante infracción a una norma jurídica. Para la primera, debe prevalecer en cualquier caso el interés de la justicia por el descubrimiento de la verdad, de modo que la ilicitud de la obtención no le quita a la prueba el valor que presenta como elemento útil para formar el convencimiento del juez; la prueba es admisible, sin perjuicio del castigo que corresponda al infractor. Para la segunda, en cambio, el derecho no puede prestigiar una conducta antijurídica, ni consentir que de ella se derive un provecho para quien no haya respetado el precepto legal. Por consiguiente, el órgano judicial no reconocerá eficacia a la prueba ilegítimamente obtenida. Entre estos extremos se han propuesto soluciones más matizadas. Piensan muchos que la complejidad del problema repele el empleo de fórmulas apriorísticas y sugiere posiciones flexibles. Sería más prudente conceder al juez la libertad de evaluar la situación en sus varios aspectos. Las pruebas ilícitamente prohibidas debe admitirse en el proceso y ser eficaz pudiendo por tanto ser objeto de apreciación por el juez sin perjuicio de que se castigue a las personas que obtuvieron de esa forma la prueba. Cuando decimos prueba, hacemos mención a impunidad de verdad, a aquella actividad que realizan las partes procesales, dirigida a ocasionar la evidencia necesaria a esto se le llama “actividad de demostración”, las partes realizan una actividad de demostración y esta actividad busca obtener la convicción del juez decisor, el juez que va a emitir sentencia sobre los hechos que las partes afirman, esto significa entonces que la actividad probatoria, las partes realizan una actividad de demostración, que es propio de un sistema de actividad de parte de una lógica que primeramente parte en la prueba, y el Juez al tribunal, al órgano jurisdiccional le corresponde una actividad de verificación, verifica a través de su examen probatorio de la veracidad de las afirmaciones y de este intento de este intento demostrativo por parte de las partes procesales y esta actividad