LA CASA MATUSITA (Lima) Hace muchísimo tiempo en esa casa vivía un señor muy perverso, y con él vivían sus dos sirvientes: la cocinera y el mayordomo; el señor era muy perverso con estos sirvientes, los maltrataba, los insultaba..., los sirvientes se llenaron de odio, y un día en que el señor brindaba una cena a unos amigos los sirvientes decidieron ponerle a la cena un líquido que hiciera que los invitados y el mismo dueño de la casa se volvieran locos, y alucinaran, sólo por venganza hacia el señor. Cuando todos estaban sentados en la mesa, la cocinera ya había servido los platos con el líquido alucinógeno en ellos, el mayordomo sirvió la cena y al salir de la habitación (comedor) cerró la puerta por fuera. Pasados unos 15 minutos escucharon gritos, insultos, platos que se rompían, murmullos, y personas completamente aterradas. Después de un largo escándalo empezó un silencio sepulcral. Los sirvientes pensando que ya todo estaba más calmado decidieron abrir la puerta del comedor, y para su sorpresa al abrir la puerta vieron el más macabro panorama: miraban a su alrededor y veían sangre, pedazos de cuerpo, ojos, manos, órganos internos, charcos de sangre, las caras de los invitados mostraban algún terror, otros odios, cabezas cortadas, era tan feo lo que veían que los mismos sirvientes se volvieron locos y se mataron en el mismo salón donde estaban el dueño y sus invitados. Y se dice que desde esa época se escuchan conversaciones, luego gritos, amenazas tal cual pasó la noche de la masacre, y toda persona que ahí va se vuelve loca ya que vuelve a vivir lo que un día ahí pasó. En la casa Matusita de lima, estaba habitaba una familia de chinos. El señor trabajaba mucho para mantener a la familia y es por eso que volvía tarde a su hogar; claro está que su esposa e hijos se quedaban en casa. Pues resuelta que un día el señor salió temprano de su trabajo y fue entonces que al llegar a su casa encuentra todo en silencio, pero cuando entro a la habitación encontró a su esposa con otro hombre. De pronto el señor enfureció, se dirigió a la cocina, cogió un cuchillo, volvió a la habitación en donde estaban los amantes y los mató. Todo iba bien hasta que llegaron sus hijos, entraron y vieron todo lo espantoso que había hecho su padre. Él dijo: Ustedes no me van a entender, será mejor que todos descansemos en paz. Y fue por eso que mató también a sus hijos y se apuñaló él también mismo. Como siempre la policía fue a investigar encontrando a ese lugar un panorama espantoso y tétrico. Más adelante decían que en ese lugar penaban y aparecían fantasmas y que se escuchaban cadenas arrastrarse, es por eso que intentaron bendecirla por medio de un cura, pero éste se mató y dicen que la persona que entra a ese lugar se vuelve loco o se mata. La Casa Matusita se encuentra aislada y lo ha estado desde hace mucho tiempo, sin embargo, desde ya hace unos años en su primer piso se encuentra una tienda importadora de productos de plástico, ferretería, etc. Ningún trabajador de esta empresa se atreve a hablar de la historia que lo que día a día sucede sobre sus cabezas. Quizá el temor a cruzarse cualquier día con un fantasma condiciona su respuesta.