Subido por cvilera

AVilera ArticuloTiempo Latinoamericano 2017

Anuncio
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100).
Agosto 2017
RLPO
Tiempo Latinoamericano. Etapa III.
Año 8. Número 77(100). Agosto,
2017
ISSN: 2393-6991
“Tenemos la obligación y la responsabilidad de crear un futuro propio”.
Declaración Final de la Conferencia Regional de Educación Superior en América
Latina y el Caribe (CRES) (2008, p. 13)
Informativo de la Red Latinoamericana de Profesionales de la Orientación
( http:// redorientadoresprofesionales.blogspot.com)
Afiliada a la International Association for Educational and Vocational Guidance (IAEVG)
(http://www.iaevg.org)
Editorial
Editor:
Miguel CarbajalUruguay
Julio González
Bello
Editor en JefeHonorario
Nuestro Boletín N. 100. En hora buena para todos…...Después de un
duro trajinar durante ocho años hemos podido cumplir una meta
inimaginable para nosotros: Lograr la publicación mensual número
100 en forma ininterrumpida. Estamos seguros que muy pocas
publicaciones pueden decir lo mismo. Sólo deseamos que las
próximas generaciones de profesionales de la orientación puedan
asumir como reto la publicación 200 de nuestro boletín….En esta
ocasión superespecial incluimos trabajos de dos connotados
profesionales: Aliria Vilera (Venezuela) y Carlos Borja (Colombia).
Agradecidos...
Si deseas pertenecer a la Red Latinoamericana de Profesionales de la
Orientación puedes solicitar tu afiliación directamente al Prof. Julio
González, al correo: relapro@gmail.com, indicando tu título universitario,
sitio de trabajo y país de origen.
Nota: Cualquier material para su publicación debe ser enviado a este
mismo correo institucional. Artículos breves: Extensión Máxima cuatro
(4) páginas.
PAISES AFILIADOS (a la fecha):
Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, Ecuador, El
Salvador, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico,
República Dominicana, Uruguay y Venezuela
PAISES INVITADOS:
España, Estados Unidos, Canadá, SudAfrica y Portugal
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
Número de afiliados: 719
COMUNICACIONES RECIBIDAS EN OCASIÓN DEL BOLETÍN 100….
Con gran entusiasmo y alegría me uno al coro de voces representado por los Profesionales de la Orientación Latinoamericanos, para expresar un merecido reconocimiento y felicitación por la edición No.
100 del Boletín “Tiempo Latinoamericano”. Especial mención, al Dr. Julio González Bello, quien
con su esfuerzo, perseverancia, optimismo y emprendimiento activo hizo posible, no sólo la creación
del Boletín, sino también, la sostenida producción, edición y continua publicación mensual del mismo.
La organización y elaboración del Boletín, es un digno ejemplo de desempeño profesional eficaz y, por
demás, afectivo, el cual representa la consolidación de la aspiración inicial que implicaba, en palabras
del Dr. González Bello, “Unión e integración… pensar como una unidad latinoamericana”. Mis sinceras y cordiales ¡Felicitaciones!... Y seguimos adelante haciendo caminos en el andar. Abrazos.
Aliria Vilera (Venezuela).
Saludos por los 100 números de “Tiempo Latinoamericano”,
Hago llegar mi abrazo de palabras desde Argentina, a quienes han formado parte de estos 100 números de “Tiempo Latinoamericano”, especialmente a Julio González (Venezuela) -su fundador- así
como a mis colegas Miguel Carbajal (Uruguay) y Amilkar Brunal (Colombia), por el constante y apasionado trabajo a favor de la orientación.
¡Felicidades!
Con admiración y afecto,
Silvia Gabriela Vázquez
Sec. Académica de Relapro
Dir. Cátedra de RSU UdeMM
Saludo desde Uruguay.
Amigos y amigas latinoamericano/as: vaya un abrazo fraterno en el ejemplar de Tiempo Latinoamericano. La Red Latinoamericana de Profesionales de la Orientación con sus distintas herramientas de
comunicación es fruto del trabajo de un conjunto importante de orientadores del continente que comparten ideales similares. Vaya un abrazo desde el sur de nuestro continente y un especial reconocimiento al estimado profesor Julio González Bello, que ha tenido un rol más que destacado que ha
hecho posible la continuidad de este medio de comunicación. RELAPRO ha sido además soporte y
fuente de inspiración para la concreción de la Red de Orientadores del Uruguay.
¡Felicidades!
Javier Lasida
Co-coordinador de la
Red de Orientadores del Uruguay.
Página 2
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
Con ocasión del boletín mensual No. 100 de RELAPRO; el Colegio de Profesionales en Orientación
de Costa Rica, le extiende una sincera felicitación y nuestro reconocimiento por el trabajo dedicado y tesonero que promueve el desarrollo de la Orientación
en Latinoamérica, contribuyendo con el crecimiento y mejoramiento de quienes ejercen esta profesión.
Les instamos a que continúen generando estos necesarios espacios de reflexión, análisis y proyección profesional, que contribuyen con la consolidación de una identidad latinoamericana de la Orientación.
Junta Directiva
Colegio de Profesionales en Orientación
Costa Rica
FELICITACIONES. "RECORDAR LA FUERZA DE LA ENERGÍA QUE FLUYE EN EL
ORIENTADOR EN CADA UNO DE SUS PROCESO ES DESDE EL AMOR. POR ESO EL
EXITO DE UDS. EN ESTA HERMOSA LABOR INFORMATIVA"
María Magdalena Zambrano.
Saludo de Brasil
A Rede Latino-Americana de Profissionais da Orientação teve início como um projeto liderado por
Júlio Gonzalez e que se concretizou numa reunião de orientadores/as latino-americanos/as por ocasião do Congresso da IAEVG em Lisboa (Portugal) em 2005. Juntamente com a fundação da Rede,
surgiu o Boletim que vem cumprindo um papel singular de divulgação e intercâmbio na nossa região
e chega ao número 100 pelo esforço árduo de muitas pessoas, mas principalmente pela persistência e
protagonismo de Júlio Gonzalez. Estas duas iniciativas têm auxiliado na organização dos/as orientadores/as da América Latina e nossa região vem se desenvolvendo muito desde então. Apontei em
2010 num dos Boletins da Rede, que tínhamos desafios de natureza teórica e epistemológica, organizacional, e política, e vejo que conseguimos avançar em todos eles, com o blog, com a Revista OrientAcción, com a organização do congresso da Rede e, agora, com a realização novamente de um
congresso da IAEVG na América Latina (México 2017) depois das iniciativas recentes da Argentina
em 2008 e da Venezuela em 2000. Parabéns orientadores e orientadoras latino-americanos/as e congratulações aos protagonistas neste processo de desenvolvimento da orientação na América Latina.
Marcelo Afonso Ribeiro (Brasil)
Ex- Secretário de Atas da Rede
Atual representante brasileiro na Rede
Página 3
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
Pá
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
Estrategias de Orientación para construir Cultura de Paz
Aliria Vilera Guerrero
Dra. Cs. S. (PHD)- Educadora-Orientadora
Investigadora Acreditada CDCHT - Universidad de los Andes-Venezuela
Miembro de la Red Latinoamericana de Profesionales de Orientación –RPLO-
I.- Aspectos introductorios
Puede decirse, por último, que la cancelación de la deuda externa de todo el Tercer Mundo y su recuperación económica durante
diez años, costaría poco más de la sexta parte de los gastos militares del mundo en ese mismo tiempo. Con todo, frente a este
despilfarro económico descomunal, es todavía más inquietante y doloroso el despilfarro humano: la industria de la guerra mantiene en cautiverio al más grande continente de sabios jamás reunido para empresa alguna en la historia de la humanidad. Gente
nuestra, cuyo sitio neutral no es allá sino aquí en esta mesa, y cuya liberación es indispensable para que nos ayuden a crear, en
el ámbito de la educación y la justicia, lo único que puede salvarnos de la barbarie: una cultura de paz.
Gabriel García Márquez (1986). El cataclismo de Damocles.
Discurso en el aniversario 41 de la bomba de Hiroshima
Atendiendo a la afirmación de García Márquez (1986): “… lo único que puede salvarnos de la barbarie: una cultura de paz”; es imperativo lograr que, desde la Orientación, continuemos consolidando en Latinoamérica, y, muy especialmente, en Venezuela, nuestro
quehacer comprometido para construir una Cultura de Paz con renovados fines humanistas, emancipadores, de emprendimiento activo y con evolución de existencia sustentado en la paz positiva. Una visión de cultura inspirada por una nueva consciencia de plenitud de la humanidad, potenciando la sabiduría de la vida en las energías del amor, la
compasión, la solidaridad, la luz de la armonía en merecimiento de un mundo pleno de
posibilidades.
Salvarnos de la barbarie, como destacó García Márquez, significa asumir una realidad que, lo comprendamos o no, representa nuevos desafíos para lograr la paz positiva.
Aspecto que vinculamos con la No-violencia activa de Gandhi (1913): “Es una acción social
liberadora y conciliadora; integra acción sin violencia –Ahimsa, convicción en la dignidad
humana –Satyagraha-, resistencia civil y ética creando un clima de confianza y seguridad
-Ley suprema de existencia-…Se consolida con la sostenibilidad de los principios que rigen la ley de la vida: Paz, Justicia, Orden. Libertad, Dignidad Personal y Amor”(21/44).
En el Informe Regional de Desarrollo Humano 2013-2014 (PNUD, 2013), se insiste
en la necesidad de desarrollar políticas nacionales integrales que combatan y erradiquen
la inseguridad, violencia, crimen e injusticias sociales (las dictaduras o regímenes políticos totalitarios, las violencias de la pobreza, la desigualdad, el racismo, la exclusión social
y la explotación de la mujer, los niños y el medio ambiente). Priva, con urgencia, acciones
que permitan construir cultura de paz, seguridad ciudadana y convivencia pacífica.
Página 5
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
Por su parte, Figueroa Rivera (2008), destaca que: “La verdadera razón de ser de la
educación para la paz es desaprender constantemente las consignas de una cultura basada en la intolerancia, la competitividad, la falta de solidaridad y el belicismo (p. 418)
En ese reto de construir cultura de paz, el ejercicio profesional de la Orientación,
debe garantizar la vigencia plena del derecho a la vida; y, para ello, las acciones orientadoras deben estar estructuradas y articuladas para que las personas aprendan a vivir en
paz y participen, con reflexiva convicción, en construir cultura de paz.
En ese contexto anteriormente expuesto y en atención al tema construir paz, consideramos necesario interrogar ¿Qué nos define a los profesionales de la orientación como constructores de paz? Al respecto, precisamos que si bien no hay respuestas únicas, si
queremos destacar que nos define el amor a la vida, el sentido sensible y de comprensión
hacia las necesidades humanas, las libertades y el respeto a la dignidad humana, la evolución y el derecho a construir sociedades pacificas reconociendo la importancia de la voluntad de acción para lograr el bienestar pleno con florecimiento de la humanidad. Una
propuesta de Orientación desde una visión aspiracional y de inspiración, transformadora y proactiva.
La cultura de paz desde la labor profesional y social de la orientación educativa,
compromete el ser e identidad profesional (ontología y axiología); por tanto, el quehacer
y deber ser, destacando la condición científica especializada en materia de desarrollo humano, educación emocional, educación en valores y bienestar. Se trata de una confirmación que tiene por finalidad validar, construir y sostener Cultura de Paz orientando procesos de humanización en existencia cotidiana: respeto a los derechos humanos, equidad, libertad y Estado de Derechos con justicia social (fortalecimiento y oportunidades en
el continuum de cada ciclo vital del ser humano), en evolución integrada: mente, cuerpo,
espíritu y cuidado de la madre tierra. Al respecto, sustentar la premisa, con fuerza de acción orientadora, en cuanto a “El respeto de la diversidad cultural y el compromiso de crear, a
escala local y mundial, una cultura de tolerancia, no violencia y paz” (UNESCO: 2005 p.18).
II.-Enfoque transformacional de la Orientación Educativa:
El enfoque de Orientación Transformadora es un compromiso por un desempeño
profesional social laboral comprensivo, de análisis reflexivo, crítico- creativo, innovador
e inter-relacional, en pro de positivas condiciones de vida de los seres humanos, de crecer
en el proceso de ser persona, de obtener oportunidades, plenitud y florecimiento (Vilera,
2008). Constituye un hacer, creer, valorar y emprender de forma concreta las realidades
de coexistencia humana desde propósitos educativos que doten de sentido los significados de la vida humana en positivo en un marco de bienestar común (respeto, solidaridad,
bondad y amabilidad)
Página 6
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
2.1.- Orientación para la Cultura de Paz: Políticas y Estrategias de Acción
Política I.-Fomentar la capacidad de toma de decisiones informadas acerca de la Cultura de
Paz en la Institución Educativa en el marco de los derechos humanos.
Estrategias de acción:
-Motivando la participación activa de los directivos, profesorado, estudiantes y demás agentes educativos y comunitario para la generación de los lineamientos que orientan la cultura de paz en
la Institución Educativa: misión, visión, valores e identidad, responsabilidad social.
-Promoviendo metas de gestión socio-afectiva en la Institución Educativa en el marco de los derechos humanos para construir cultura de paz, activando y consolidando climas comunicacionales
de relación armónica, empática, sentido de escucha, bienestar y beneficios comunes.
-Generando propuestas interdisciplinarias e integradas en los planes, programas y proyectos de
plantel de la Institución educativa en el marco de la cultura de paz.
-Creando programas de prevención y promoción (difusión, transmisión multimedios) con temas
de Cultura de Paz, entre ellos: formas de sentir, pensar, saber hacer, aprender a convivir y trascender desde la paz
-Realizando campañas académicas permanentes para construir cultura de paz todos los días y cada
día; por ejemplo: la frase o la reflexión del día.
Política II.- Orientar la consolidación de un clima organizacional sustentado en postulados
de paz: beneficencia, no-violencia, pacto de honor y lenguaje asertivo con espíritu pacifista sembrar la paz-.
Estrategias de acción:
-Creando en todos los espacios de la institución educativa ambientes que simbolicen los postulados de paz que enmarcan la misión y visión del recinto escolar.
-Introduciendo, impulsando e incentivando la capacitación y el aprendizaje de los conceptos y
principios que guían los postulados de paz en todos los actores educativos de la institución y de la
comunidad.
-Incrementando el sentido de conciencia reflexiva acerca de los valores personales de alta estima,
reciprocidad, lazos de confianza, sana convivencia y afectividad .
-Desarrollando las competencias socioemocionales requeridas que permitan incentivar comportamientos,
actitudes, comunicación y diálogo en correspondencia con los valores democráticos (participación, cooperación y solidaridad), en el marco de los postulados de paz de la institución educativa.
-Promoviendo los comités de apoyo para la participación escolar en actividades de acción social
comunitaria que enarbolen los postulados de paz.
Política III.- Orientar la canalización de esfuerzos hacia una praxis de labor profesional
aspiracional y transformadora, reflejo de energía de vida desde la Paz Positiva.
Estrategias de acción:
Página 7
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
-Orientando los baluartes de la cultura de paz tomando en cuenta los aportes en el campo de la
neurociencia y el aprendizaje con todo el cerebro.
-Registrando experiencias de vida comprendiendo la importancia de defender derechos de protección, prevención y seguridad integral (jurídica, normativa, ciudadana y de dignidad humana).
-Concientizando (sensibilizando) a la comunidad educativa y sociedad en general, mediante proyectos pedagógicos extracurriculares acerca de la importancia de las capacidades, las oportunidades y el enfoque de derechos en la construcción de sociedad pacificas (superar las creencias y pensar limitante).
-Generar escenarios de desarrollo social comunitario, educativo y pedagógico, a través de metodología cualitativa con grupos de discusión para la disertación crítica y reflexiva en el manejo de
conflictos atendiendo a las diversas formas de trasgresión que se ocultan mediante prácticas de
dominación, alienación e ideologización. Llevar registro, sistematizar las propuestas y los resultados
III.- Reflexiones: Orientación en el marco de Cultura de Paz
La propuesta esbozada constituye un reto profesional en el ámbito de la Orientación Profesional, en un claro compromiso con motivaciones sensibles, afectivas y de cooperación solidaria
para la promoción de cambios con visión de futuro positivo y hacer posible la creación de sociedades pacíficas.
Ciertamente, para construir relaciones de paz y generar cultura de paz, en y desde el quehacer profesional en Orientación, exige estar en armonía con nuestra mejor manera de ser personas; es decir,
en la vida cotidiana, obrando en conciencia
activa y disposición motivacional integrada con la mejor versión de nosotros mismos. Requiere que nos “miremos” por dentro y nos demos a la tarea de equilibrar y de
armonizar el sentido de nuestras vidas, nuestros propósitos para vivirla y, con ello, nuestra propia paz interior.
Precisamente, en la propuesta que se ha presentado en este trabajo, aspiramos haber contribuido con ese andar de la paz como camino. Un compromiso profesional y humano decididamente reflexivo, pleno de sensibilidad que abraza el sueño de lo siempre
posible por hacer desde el ingenio creador y de lo humanamente dado en la fuerza de la
voluntad de espíritu esperanzador.
Finalmente, queremos cerrar estas líneas de trabajo haciendo uso de una breve cita
del Premio Nobel de la Paz en 1987, el ex -presidente de Costa Rica, Oscar Arias, quien
en su discurso titulado “…Al menos deberían dejarnos en Paz”, destacaba:
“Les debemos a las futuras generaciones el comprender que, más que nunca, la paz solo
puede alcanzarse con sus propios instrumentos: diálogo y entendimiento, tolerancia y perdón, libertad y democracia”.
Página 8
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
UNA BASE DE DATOS DE CORREOS QUE SE TRANSFORMÓ EN RED DE CONOCIMIENTOS
Ningún hombre -o mujer- puede ser un buen
maestro a menos que tenga sentimientos de
cálido afecto hacia sus estudiantes y un legítimo deseo de inculcarles lo que cree de valor. (Bertrand Russell, 2010:75, “Las Funciones de un Maestro”, Ensayos Educativos
SED).
Carlos Borja
Orientador Escolar
colíder Red Orientadores y Orientadoras
Secretaria de Educación del Distrito
Bogotá, Colombia
cborja@educacionbogota.edu.co
Días después de realizada la posesión -octubre de 2011-, los Orientadores recién nombrados, nos
conocimos ahí, espontáneamente, con los que ya venían (van 43 años, según Resolución 1084 de
1974) nos comenzó a unir un vínculo común, que más adelante entenderíamos. Eran las particularidades, a pesar de tener diferentes pregrados, posgrados, especialidades y posturas… Compartimos un mismo sentir: ¡SER ORIENTADORES Y ORIENTADORAS!
Esta conexión intangible fortaleció, a través de emails entre Orientadores Escolares, la más poderosa Red de comunicaciones, como no hay en ninguna parte. Por la cual ha circulado información,
documentos, reflexiones, discusiones, propuestas, instrumentos creados, escritos propios de diversa índole, con tanta frecuencia, que inevitablemente ha llevado a generar aprendizajes, experiencias, trabajos investigativos y quehaceres, en un cumulo de saberes y conceptos situados tan valiosos y conocimientos tan especializados como no lo tienen otros grupos académicos; que si cada
uno de nosotros documentara y escribiera todo lo que ha hecho y hace actualmente, creo, tendríamos muchos libros, y hasta una enciclopedia de la Orientación.
Podemos citar las normas y jurisprudencia, enumerar un listado oficial de funciones y competencias (por ejemplo, las del acuerdo 151 de 2010 CNSC), o listar las situaciones y casos atendidos en
los planteles educativos, los cuales han sido ampliamente discutidos y sistematizados en las mesas
locales, divulgados y publicados desde nivel central (Directorio de rutas).
Contextualizado con las normas/legislación que promueven y alientan hacer investigación; analizar y discutir (en pequeños grupos) las posibilidades reales no solamente de hacer trabajos investigativos en las escuelas desde la Orientación Escolar, sistematizarlos, publicarlos en una revista
especializada -generando conocimientos epistemológicos /pedagógicos-, pero sobre todo impacto
en la Escuela, aportes a las políticas educativas distritales y nacionales, estrategias para la orientación escolar, entre otros aspectos. Adicionalmente que sea una propuesta de Maestría/Doctorado
(como comisión, licencia remunerada, beca), tener incidencia en la evaluación de desempeño, en la
evaluación de ascenso, recibir apoyo económico y de tiempo –gubernamental o universitario- permanente para continuar investigando, como una función y quehacer del(a) Orientador(a) Escolar
reconocido y visibilizado, agrupado además en una Red Distrital de Docentes Orientadores/as Investigadores
Hemos desarrollado un trabajo en equipo, permanente y comprometido, que ha llevado a la consolidación de propuestas alternativas, aportando en la reconstrucción de las comunidades escolares,
de manera que se puedan atender las diferentes realidades que se presentan en la
Página 9
Escuela de hoy, que nos exige mantenernos en constante evolución y transfor-
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
de riesgo que a diario enfrentan las niñas, niños y adolescentes, mitigando las consecuencias que
éstas traen a nivel personal, familiar y social, a través del diseño de estrategias, herramientas, instrumentos, proyectos, rutas, protocolos y acciones pedagógicas. El rol y la acción del docente
Orientador en la vida escolar, no es simplemente describir como el conocimiento adquirido, por
este profesional, sea aplicado a las actividades educativas, sino que sus acciones cobran importancia, porque se dirigen a atender las necesidades de los niños, niñas y adolescentes, reconociendo la
trascendencia de trabajar directamente con ellos, sus familias, el cuerpo docente, los directivos y
con la comunidad.
Las perspectivas de trabajo dentro de una RED como la nuestra –vista desde la gestión del conocimiento/aprendizaje como comunidad académica, apoyada por las TIC-, apuntan a compartir e intercambiar experiencias sistematizadas. Participando en eventos académicos, foros, simposios, paneles, debates, congresos, seminarios, talleres, capacitaciones; formación posgradual diseñada especialmente para orientadores.
Nuestra meta permanente, es consolidar la Red de Orientación a nivel de Colombia, visibilizándonos como unidad (pasamos de 4.300 colegas); incidiendo en la educación del país, apoyando los
estamentos de la comunidad educativa y fortaleciendo la Red Distrital de Docentes Orientadores y
Orientadoras apasionados por la investigación, Or!entaReddi (quien nació de la Red general, hace
3 años), desde la cual se han ido sistematizando nuestras acciones, contribuyendo con el empoderamiento de la Orientación Escolar y el rol de los Orientadores. Esta sistematización y visibilización de experiencias exitosas contribuyen al desarrollo humano, la construcción de la paz, la ciudadanía y la convivencia desde lo escolar (sin olvidar lo sindical y lo laboral), aplicables a nuestra
realidad, además de impactar en la construcción de políticas públicas educativas. Nuestra labor ha
ido mucho más allá de lo tangible, de lo visible, de lo jurídico, de lo evidenciable… Hemos trascendido más allá de las instituciones educativas, incluso hasta la sociedad.
El apoyo principalmente es para nuestros/as estudiantes y sus familias (teniendo en cuenta la connotación de lo que significa familia actualmente), indefectiblemente también asesoramos a docentes, directivos, funcionarios de otros entes estamentales dentro de la red interinstitucional de apoyo, incluso el apoyo entre nosotros mismos(as), somos comunidad de cuidado y autocuidado.
Y como siempre estamos proponiendo, entre estas propuestas de investigación e innovación, se
pueden mencionar algunas recientes, como:
El fracaso escolar en grado sexto, principalmente.
La orientación familiar.
La incidencia del maltrato desde la niñez, pasando la adolescencia, hasta la vida adulta y las maneras de superar/mantener algunos traumas.
El desarrollo de herramientas virtuales que faciliten y promuevan la vinculación de las familias en
los procesos de orientación escolar.
El desarrollo histórico de la orientación escolar en Colombia, marco legal y conceptual.
La creación de un aplicativo donde se sistematice la atención del servicio de orientación escolar;
de una agenda de investigación, problemas sociales a la vez objetos de estudio; de una revista
digital de orientación y otros mecanismos de divulgación.
La construcción de subjetividad, como otra mirada a los proyectos de vida, desde algunas categorías principales: discursos de desarrollo y realización, sentido de la escolaridad, desarrollos y
otra escolaridad. También la relación del desempeño escolar con hábitos y rutinas de estudio en
casa, atención y concentración entre otros.
Página 10
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
mimarnos, tolerarnos, conocernos, salvarnos (porque no) la lista sigue y es larga. Dejando de lado
las barreras del aprendizaje, con humildad, les digo que he aprendido tanto de ustedes, como ni se
imaginan. No existe experto, capacitador, formador o interlocutor, como nosotros mismos. ¿Quién
nos conoce más? sino entre nosotros; sin ser malinterpretado -y siendo desubicado e impertinente
como siempre-, creo que muchas veces nos comportamos como autistas (en el sentido crítico del
término, y respetando a nuestros estudiantes de inclusión).
Para mí, no existe tema, situación o problema, que no sea manejado con experticia por uno de
nuestros pares, colegas o camaradas orientadores, con pertinencia para el quehacer diario, que mejora nuestro desempeño. Si cada uno de nosotros documentara y escribiera todo lo que ha hecho y
hace actualmente, creo, tendríamos, no solo un libro, sino toda una enciclopedia desde y para la
orientación, tan valiosa como un conocimiento situado histórica y culturalmente en el Distrito.
Actualmente tenemos como propósito unificar los abordajes articulándonos con todos los entes de
apoyo interinstitucional a nivel nacional, con el fin de fortalecer nuestra labor y brindar una respuesta y apoyo más eficiente y oportuno a los estudiantes y sus familias. Buena parte de las acciones conjuntas e individuales realizadas han sido sistematizadas, publicadas, socializadas y presentadas en eventos y encuentros académicos (con apoyo de Nivel Central, universidades públicas o
privadas, fundaciones, IDEP, entre otros). Muchos de estos trabajos investigativos, han enriquecido nuestros conocimientos, nos han cualificado y además han servido de consulta entre pares, docentes de aula, profesionales de apoyo, coordinadores y rectores.
Las y los orientadores además de impactar en la comunidad, el barrio, el colegio (hasta la sociedad), es el impacto que tenemos en otras personas, principalmente nuestros estudiantes (niños, niñas y jóvenes), sus padres, madres, familiares, cuidadores y acudientes, seguido de las y los docentes de aula, los directivos, e incluso impactamos en nuestros pares orientadores y orientadoras.
Influimos en las normas, leyes y conceptos jurídicos, dando una posición diferente, haciendo que
se modifiquen y transformen los imaginarios, creamos conceptos, proponemos estrategias, intentamos aportar a la pedagogía y a la educación, impactamos en las teorías y epistemologías (somos
humanistas, somos constructivistas, somos positivistas, somos eclecticistas, buscando soluciones
macro), la cual estamos constantemente enriqueciendo, desde nuestros conocimientos experienciales (como teoría fundamentada en los datos).
Diseñamos procesos, protocolos, unificamos posturas, discutimos, analizamos, reflexionamos sobre la escuela, sus actores y políticas públicas educativas, al mismo tiempo que nos vemos como
sujetos de investigación, participantes inmersos en la cotidianidad de las instituciones Educativas,
como una auto-etnografía de nuestro quehacer y rol.
No nos conformamos con solucionar los casos particulares, deseamos cambiar, transformar, el
país, con propuestas sociales más ambiciosas, desde la investigación, desde la agremiación, desde
la asociación, desde el sindicalismo, desde lo laboral…
Pero si nos apartamos uno del otro, si nosotros mismos nos quedamos en la individualidad, –sin
que el tener diferencias sea una justificación, ya que siempre las tendremos y es sano que así sea,
el conocimiento lo hemos construido gracias a estas diferencias-, pero, si permitimos la desunión,
si nos invisibilizamos entre nosotros, y desconocemos o desaprobamos el trabajo del otro; irremediablemente nos iremos apagando, oscureciendo, opacándonos, enfriándonos, hasta dejar de brillar
y alumbrar con nuestra luz interior, el camino, los pasos de los estudiantes, de los padres, docenPágina 11
Tiempo Latinoamericano. Etapa III. Año 8. Número 77(100). Agosto, 2017
.
rectores y por supuesto los nuestros. Hago aquí un comentario sarcástico -como un chiste flojo-:
“lo único en lo que estamos de acuerdo, es precisamente que no estamos de acuerdo”.
Por todo esto nuestro principal propósito es: “Investigar Orientar Transformar, de la Escuela a la
Sociedad. Pensándonos la Educación y el Colegio desde la Orientación Escolar". La investigación
como una práctica de la Orientación Escolar, en la Instituciones Educativas.
Esa ilusión que se encendió en cada uno de nosotros desde que comenzamos a trabajar en los colegios, no se ha apagado, ¡está más brillante! Somos en si mismos, una comunidad de cuidado y autocuidado (desde la ética/cultura del cuidado): ¿Quién orienta un orientador?
Para continuar el debate, dejo las siguientes preguntas: ¿Que significado histórico tiene ser Orientador… específicamente, ser docente con funciones de Orientación en esta época? ¿Cuál es el modelo epistemológico de la Orientación en la Escuela? ¿Qué deudas tiene la Orientación Escolar con
la educación? ¿Es Orientación Escolar u Orientación Educativa? ¿Cuál debe ser el perfil del psicólogo educativo? ¿Es Psicopedagogía o Psicología y Pedagogía?
Una cuestión que debe ser deliberada en Colombia y toda Latinoamérica: ¿Cuál es el paradigma
conceptual en el cual se sostiene la Orientación Escolar? ¿Tenemos una epistemología propia (es
decir, desde el sur)¿ Finalmente, citando a Brunal (2016), ¿Cuál es el modelo latinoamericano de
la Orientación?.
Página 12
Descargar