20/09/18 NICO cuento corto Lo que le quillaba era que le viniera ahora con esa. Como si fuera una adolescente, coño. Dizque que no se había dado cuenta. Lo sospechó al inicio de la penetración, porque le dolió un chin, le dijo ella. Como si fuera la primera vez que tiene una infección vaginal. Como si eso fuera algo muy extraño en este país, no jodas. Claro, él manejó el asunto con tacto, no quería que ella se sintiera mal, era una jevita muy bien con él. Además le contaba cada cosa, con las que le hacía gozar casi tanto como con el sexo. Por ejemplo, esa última del pastor evangélico gringo, que quería que le organizara un trío con dos negritas flaquitas, tenía 400 para cada una. Bueno, por historias como esa él le aguantaba sus actitudes de diosa empobrecida y uno que otro descuido. Me miró riendo con todos los dientes, se dio un shot de tequila, me dijo que tenía que mear y se fue para el baño. José Vásquez Green