Narrador: Hace mucho tiempo atrás vivía en la cercanía de un bosque un niño llamado Juan a
quien le fascinaba cocinar.
Un día él preparaba uno de sus platillos favoritos cuando se percató que le faltaba un
ingrediente muy especial y particular.
Juan: AHI!! Me falta un ingrediente muy importante sin este no podré terminar de cocinar.
Narrador: Por lo cual decidió emprender una búsqueda a través de lo más profundo del
bosque. En su camino por el bosque observo como un arbusto se movía, se acercó
curiosamente y de pronto (el conejo salió del arbusto y cayó con Juan)
Narrador: De repente Juan se levantó y ayudo a la Sra. Coneja
Juan: Lo siento mucho por asustarla señora coneja
Sra. Coneja: No te preocupes pequeño, pero ¿se podría saber la razón de tu repentina
expedición?
Juan: Ay Sra. Coneja lo que sucede es que estoy buscando un ingrediente pues sin él no podré
terminar de cocinar.
Sra. Coneja: Pequeño este bosque muy peligroso para ti, déjame acompañarte en tu viaje. Así
podremos juntos salir.
Juan: Esta bien es mejor estar con una amiga que estar solo y sin compañía
Narrador: Cuando juan y la Sra. Coneja caminaban por el bosque ella le explicaba a juan
algunas cosas
Sra. coneja pequeño niño se dónde está tu ingrediente para esto necesitamos cruzar el rio
pero este es custodiado por una criatura mágica
Narrador: A lo lejos divisaron un caudaloso rio, pero para su buena suerte al acercarse vieron
un puente. Lo que no mientras tanto oculto detrás de un árbol un duende el cual los
observaba muy atento.
Juan: mira puedo ver el rio y no encuentro a ninguna criatura mágica, podemos cruzar.
Narrador: De repente el duende salió de su escondite
Duende: Hey!! Si el puente quieren cruzar este acertijo tendrán que contestar o sino ustedes
dos mi cena serán.
“De lunes a sábado me podrás encontrar pero menos en el domingo porque me voy a pasear “
Narrador: Tras pensar demasiado pasaron la prueba
Juan: Es cierto duende me hiciste pensar de lunes a sábado te puedo encontrar y la
respuesta que quieres te voy a dar porque el domingo la S no podrás encontrar
Duende: Muy bien ahora pueden pasar pero el ingrediente nunca podrán encontrar porque el
camino correcto soló lo sé yo en realidad
Juan: Es cierto duende nos lograste engañar pero ahora seremos nosotros los que rían al final,
pues el acertijo que te vamos a dar no lograrás contestar y tendrás que guiarnos al camino
final.
Sra. Coneja: “Tengo nombre de mujer, crezco en el fondo del mar, en la arena de la playa tú me
podrás encontrar”
Duende: Oh rayos la jugada ganaron al final ahora seré yo quien tenga guiar.
Narrador: El duende guío a Juan y a la Sra. Conejo hacia su camino final. Y al llegar a un gran
árbol lograron observar. Juan el ingrediente le pidió al árbol y este le dijo:
Árbol: Mi pequeño niño ese deseo no te podré conceder, pues aquel ingrediente muy esencial
es. Si te lo doy todo lo mágico desaparecerá y con ello el camino hacia casa desaparecerá.
Juan: O gran árbol entiendo todo y te pido disculpas por esta terrible ofensa. Agradezco tu
sinceridad y delicadeza. Tal vez no haya logrado conseguir el ingrediente pero me llevó una
gran aventura que no podré olvidar pues en este viaje encontré una amiga más.
Narrador: Y así Juan regresó a casa feliz y contenta junto a su nueva amiga.