HISTORIA DEL HEBREO El Hebreo tiene su origen influenciado por varias lenguas-raíz semíticas Arameo (antecesores y derivados; las mismas que originaron el árabe, por ejemplo), además de que fue altamente enriquecido por el babilónico y el Fenicio. El hebreo es una lengua con casi 30 siglos de historia escrita. Obviamente en un período tan largo la lengua ha sufrido procesos de cambio lingüístico que hacen del hebreo antiguo y el hebreo actual, más que la misma lengua puedan considerarse lenguas emparentadas pero que difieren en pronunciación, gramática y léxico. Los hebreos, copiaron de los cananeos el arte de la escritura. Al producirse las diferentes invasiones a la Tierra de Israel, y en consecuencia las deportaciones de israelitas a otros territorios, el hebreo se vio influenciado por los dialectos de las zonas dónde se vieron obligados a asentarse. De esta manera, el hebreo antiguo, conocido popularmente, pasó a utilizarse principalmente como una lengua escrita, ritual y sagrada. Así se le calificó como hebreo bíblico y también hebreo clásico. Los rabinos y el pueblo de Israel, por su utilización masiva en la liturgia religiosa, la llamaron también: lengua sagrada. El alfabeto hebreo, algunas veces denominado mediante su forma hebrea álef-bet (בֵּ ית- )אָ לֶףes la serie formada por las consonantes hebreas. Está compuesto por 22 caracteres, de los cuales cinco tienen una grafía distinta en final de palabra. Se utiliza para escribir el idioma hebreo, el yidis y, en menor medida, el judeoespañol.