Recorrido histórico del termino cultura El texto siguiente no sigue a Bauman al cual conozco y adscribo, recorro el concepto cultura desde otra multiplicidad de autores y escuelas. (El texto es mío y pertenece a un examen de antropología socio cultural de la escuela de historia de la UNC) Para comenzar podemos citar que para la Real Academia Española cultura es: “(Del latín cultura). F. Cultivo. 1). Conjunto de conocimientos que permiten a alguien desarrollar su juicio crítico. 2). Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc. 3.) Popular. Conjunto de manifestaciones en que se expresa la vida tradicional de un pueblo” (Diccionario de la Real Academia Española, 2001, 714). Esto permite pensar que el concepto de cultura, tal como lo expone Diego Díaz involucra “una multiplicidad de significados” que nos llevan desde la etimología de la palabra que remite a la cuestión agrícola, “cultivo”, pasando por aquellas otras formas que la resumen en Artes, o cuando nos referimos a alguien culto como poseedor de cierta intelectualidad. Sin excluir que también puede ser la manera en la cual se manifiestan los modos de vida y costumbres dentro de un contexto social o espacios específicos que relacionan a la actividad humana como elemento dinamizador. Fue, Edward Tylor quien acuñó una de las definiciones más clásicas de la cultura, en 1871, en Cultura Primitiva: "La cultura o civilización, en sentido etnográfico amplio, es aquel todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre en cuanto miembro de una sociedad”. (Tylor, E. 1876:1). Tylor resalta aquí desde lo descriptivo de su interpretación que la cultura involucra tanto la noción de totalidad como la de partes componentes. Y estas como “…medio de estudiar las leyes del pensamiento y actividad humana” (ibíd.:1). La definición deja clara que toda “…expresión humana es cultural…” tal como la explica Diego Díaz al agregar que “…toda manifestación cognitiva es parte de la cultura y el hecho de ser miembro de un sociedad implica necesariamente la adquisición de un legado cultural”. La crítica a las ideas del evolucionismo el cual Tylor defendía, proviene del pensamiento de Franz Boas que define a la cultura como: …”la totalidad de las reacciones y actividades mentales y físicas que caracterizan la conducta de los individuos componentes de un grupo social, colectiva e individualmente, en relación a su ambiente natural, a otros grupos, a miembros del mismo grupo, y de cada individuo hacia sí mismo. También incluye los productos de estas actividades y su función en la vida de los grupos (…) la cultura. Es más que todo esto, pues sus elementos no son independientes, poseen una estructura.” A partir de Boas (Harris, 2011) y su particularismo, nos encontramos con el relativismo cultural que permitió abordar el estudio de las diferentes culturas evitando un enfoque etnocéntrico, haciendo hincapié en la evolución particular de cada sociedad; donde la noción de estructura (Diego Díaz) de la que habla es la que hace que cada cultura sea única e irrepetible; igualando las culturas al ponerlas en el mismo nivel de complejidad. Sistemas estructurales donde Lévi-Strauss contempla a la cultura como “sistemas simbólicos compartidos que son acumulativas creaciones de la mente “y Harris propone al hablar de cultura como…”repertorio aprendido de pensamientos y acciones expuesto por los miembros de los grupos sociales” (1979:47). Hoy las ideas cognitivistas por medio de Kroeber Alfred nos proponen a la cultura como “estructuraciones, explicita e implícitas de y para la conducta, adquiridas mediante símbolos, que constituyen un logro definitivo de los grupos humanos”, observándose aquí la utilización de símbolos como medio de adquisición y transmisión de la cultura, donde” todo lo social sólo puede tener existencia gracias a la mente”. (Kroeber, 1952: 119). Sin embargo Leslie White ve en la cultura un carácter dinámico desde lo espacial y temporal “… El proceso cultural es acumulativo (…) y progresivo (…) en consecuencia, un proceso simbólico, continuo, acumulativo y progresivo.” (White, L. 1982:143) Adhiero a la definición de Diego Díaz que considera a la cultura como “aquella manifestación conductual que posee un componente simbólico y otro material que le sirve de canal y expresión y que se transmite por un medio no genético” , donde la evolución cultural no depende del azar y los cambios en la cultura pueden ser dirigidos con un propósito consciente donde la cultura no se separaría de la acción siendo esta además de producto, producción tal como lo expresa William Roseberry, al establecer su crítica sobre las posturas de Geertz y Harris “que tratan a la cultura como producto mas no como producción”. Clifford Geertz propone un método que evoca la metodología de un filólogo, al estudiar las culturas como quien interpreta los antiguos textos. Su interés recae en cuestiones del significado, el simbolismo y la interpretación. Tomando la idea de Paul Ricoeur, la acción social o los productos culturales pueden ser leídos como textos escritos, donde ver la cultura “como acervo de textos, (…) es sustraer a la cultura del proceso de su creación”, tal como lo expone Roseberry. La cultura se compone de palabras, acciones, opiniones, etc, más o menos homogéneas, las cuales poseen connotaciones simbólicas, donde el significado de cada símbolo dependerá de la cultura que impregna la vida social de esa sociedad. Dicho lo anterior se deduce que la cultura es simbólica y adaptativa ya que las costumbres humanas tienden a favorecer a la supervivencia, siendo la cultura nunca una conducta aislada y azarosa. Por ello voy a citar a Néstor García Canclini, que ve a la cultura como una construcción remarcando que” la cultura abarca el conjunto de los procesos sociales de significación, o, de un modo más complejo, la cultura abarca el conjunto de procesos sociales de producción, circulación y consumo de la significación en la vida social” (García, 2004, 34) .La definición desde toda su amplitud alude a las relaciones cotidianas que se desarrollan en procesos dando lugar a su posterior significación, que nos devuelven al proyecto de Geertz en “Thick Description”, donde este autor trabaja un concepto de cultura como algo “socialmente constituido y socialmente constituyente” enunciando una conexión y no una separación que puede llevar a construir nuevas composiciones en los textos.