ANEP Consejo de Formación en Educación CeRP del Centro, Florida 3º año, Literatura Didáctica II - Informática - Investigación Educativa Investigación: Lo que leen los estudiantes de 3º y 6º de Secundaria por fuera de la institución educativa y su relación con lo que influye sobre ellos para llevar a cabo dichas lecturas Docentes tutores: Prof. Silvia Benítez (silvia.enrich@gmail.com) Porf. Ana Cabrera (anacabreraborges@gmail.com) Prof. Nélida Rovetta (n.rovettaacosta@gmail.com) Responsables: Alexander Etchichury (alechechu14@gmail.com) Gabriel Fernández (fernandezjosegabriel02@gmail.com) Antonela Lazo (gianlazo@gmail.com) Noelia Martínez (noemartinezv223@gmail.com) Manuela Viera (manuelaviera7@gmail.com) 1 Índice ● Capítulo 1 1a. Tema 1b. Problema 1c. Pregunta investigación 1d. Objetivo general 1e. Objetivos específicos 1f. Hipótesis 2 ● Capítulo 2 2a. Fundamentación 4 ● Capítulo 3 3a. Antecedentes 5 ● Capítulo 4 4a. Marco teórico 11 ● Capítulo 5 5a. Marco metodológico 16 5b. Esbozo metodológico 16 5c. Enfoque metodológico 17 5d. Justificación del instrumento 19 5e. Validación del instrumento 20 5f. Decisiones de muestreo 21 5g. Análisis de datos y discusión 25 ● Capítulo 6 6a. Conclusión ● Referencias Bibliográficas 32 33 ● Anexo Fichas de lectura 35 Antecedentes 35 Marco teórico 45 Metodología de la investigación 57 Gráficas representativas de los resultados de encuestas 71 2 Capítulo 1 1a. Tema: “Lo que leen los estudiantes de 3º y 6º de secundaria por fuera de la institución educativa y su relación con lo que influye sobre ellos para llevar a cabo dichas lecturas”. 1b. Problema: La motivación de los estudiantes para leer recreativamente por fuera de la institución educativa. 1c. Pregunta de investigación: ¿Qué intereses de lectura recreativa tienen los estudiantes de 3º y de 6º de liceo en la ciudad de Florida, por fuera de la institución educativa? 1d. Objetivo general: Investigar las motivaciones e influencias que tienen los estudiantes de 3º y 6º de secundaria de la ciudad de Florida para llevar adelante lecturas recreativas. 1e. Objetivos específicos: ● Identificar cuáles son las lecturas de los adolescentes de 3° y 6° de liceo de la ciudad de Florida por fuera de la institución educativa, si es que las tienen. ● Analizar qué motiva a los adolescentes de 3º y 6º de liceo de la ciudad de Florida a las lecturas recreativas que realizan. ● Indagar sobre la manera en que la enseñanza de la literatura modificó / influyó en la lectura de los estudiantes. 1f. Hipótesis: ● Existe una fuerte presencia de los adolescentes en el mundo de la lectura recreativa en la actualidad. 3 ● Los adolescentes cuentan con las mediaciones de editoriales, pares e influencers como elementos motivacionales para llevar a cabo sus lecturas por placer. ● La clase de literatura también ha influido a los estudiantes en la elección de sus lecturas recreativas. 4 Capítulo 2 2a. Fundamentación El presente trabajo de investigación tiene como objetivo generar conocimiento sobre las lecturas recreativas de los adolescentes de tercero y sexto año de secundaria de la ciudad de Florida, que nos brinden herramientas que consideramos fundamentales para nuestra práctica docente. En el imaginario colectivo, se cree que los adolescentes no realizan lecturas recreativas sin una fundamentación empírica, nuestra intención es generar un antecedente que respalde o no esa creencia. Considerando la escasa investigación previa que existe sobre el problema a investigar, principalmente a nivel nacional, creemos que tenemos un apoyo firme para poder comenzar a construir nuestra línea de investigación respecto a este tema. Nuestras energías están puestas en lograr un aporte valioso, en poder convertir nuestro estudio en un futuro antecedente para quien desee seguir ampliando esta investigación, que consideramos de suma importancia para continuar comprendiendo a nuestros adolescentes y fomentando sus hábitos lectores por fuera de la institución educativa. 5 Capítulo 3 3a. Antecedentes Nuestros antecedentes se componen de tres estudios que relacionan de alguna forma a los adolescentes y la lectura recreativa (también nombrada como lectura por placer o lectura voluntaria). Este relacionamiento es el eje central de nuestra investigación, que busca conocer cuáles son los intereses de lectura recreativa de los adolescentes y qué motivaciones los impulsan a llevar a cabo esas lecturas. Todos los estudios coinciden en que este tema no ha sido investigado con suficiente profundidad todavía, por tanto la búsqueda de antecedentes que fueran tanto actuales como representativos se tornó dificultosa. Tratamos de abarcar la representatividad nacional, regional e internacional, pero no pudimos localizar estudios nacionales para incluirlos en esta sección. Los estudios regionales también son escasos pero, aunque no tenga quizás la actualidad que nos gustaría, encontramos una investigación realizada en adolescentes peruanos que decidimos incorporar: “Hábitos de lectura de los adolescentes peruanos: nuevas perspectivas” (2003), de la autoría de Carlos Vílchez Román. A nivel internacional, seleccionamos dos investigaciones españolas: “Lectura de frontera y frontera de la lectura” (2009) de Teresa Colomer y “El desencuentro entre los adolescentes y la lectura” (2004) de Julián Pindado Málaga. Dentro de esta selección, nos encontramos con aportes significativos y enriquecedores para nuestra investigación. Es nuestra intención describir a continuación cuáles fueron esos aportes. El artículo de Teresa Colomer, es un avance del libro que contiene el total de la investigación (el avance está compuesto por la introducción y estructura del libro). Por tanto no tenemos datos empíricos, cifras o conclusiones finales, pero sí tenemos un aporte teórico importante. Primero la autora nos contextualiza en la dificultad de los dos grandes tópicos que seleccionó para su estudio, que son los mismos que seleccionamos nosotros para nuestra investigación: adolescencia y 6 lectura (estos dos puntos serán desarrollados con mayor profundidad en el marco teórico). Lo importante es ver cómo en la introducción, Colomer define a la adolescencia como una etapa sobre todo en transformación, que implicó a su vez importantes cambios sociales y culturales, principalmente a nivel escolar. Esto llevó, siguiendo a la autora, al cuestionamiento de la función de la literatura. “Es decir, que tirando de los hilos de la lectura y la adolescencia nos podemos encontrar sin percatarnos en plena reflexión sobre el rumbo de las sociedades y la cultura occidental.” (Colomer, 2009, pág. 4). Las observaciones iniciales nos ponen alerta, seleccionamos un tema y un problema para trabajar que implica dimensiones muy amplias, y esto debe ser tomado en cuenta a la hora de decidir cómo proceder con la investigación. Luego, la autora define lo que sería la intención general de su estudio: “(...) ofrecer algunos elementos sobre la lectura de los adolescentes que permitan intervenir con mayor acierto al profesorado y demás adultos convocados a la tarea de mediar entre los jóvenes y la lectura.” (Pág. 4). Por tanto, según este estudio, los adolescentes y la lectura están constantemente mediados por redes educativas, comerciales y de política cultural. Este punto es importante en nuestra investigación, porque nuestro problema busca conocer qué motivaciones tienen los estudiantes para leer de forma recreativa, y qué rol tiene la clase de literatura en estas lecturas. Por tanto, contar con este estudio como antecedente nos permite poner sobre la mesa estos tres ejes principales que actúan como mediadores (el contexto cultural -que incluye la oferta editorial existente-, el contexto escolar y el contexto social) y son posibles elementos motivacionales. Los podremos tener en cuenta al momento de armar nuestro instrumento de recolección de datos y para el posterior análisis de los mismos. Lo que resta de este artículo es una explicación por parte de la autora del proceder de su estudio, que por razones de complejidad académica y disponibilidad de tiempo, nos serían imposibles llevar a cabo. Lo importante de la inclusión de este avance reside en la explicación que allí se propone sobre los hábitos lectores adolescentes (cambios sufridos, mediadores que los influyen, relacionamiento con el ámbito escolar) y la relación que existe entre esto y el problema que nosotros nos proponemos a investigar. Nos brinda un panorama inicial, es una óptica desde la 7 cual podemos posicionarnos para entender los hábitos lectores de los adolescentes y la complejidad de los mismos. Con base en este tipo de información podremos seleccionar un enfoque metodológico adecuado para poder llevar a cabo nuestro estudio de la lectura recreativa adolescente en la ciudad de Florida. El segundo artículo internacional seleccionado fue el de Julián Pindado Málaga (2004), titulado “El desencuentro entre los adolescentes y la lectura”. Este título es un gran adelanto de lo que esta investigación aplicada a adolescentes malagueños obtuvo como resultado. El autor parte desde una visión que establece que los hábitos lectores adolescentes se han modificado de modo significativo por las nuevas tecnologías y el entorno electrónico que los rodea. Esta nueva influencia hace que, si existen lecturas por parte de los adolescentes, estén orientadas a los medios no escritos (televisión, música, videojuegos, ordenadores). Mediante la aplicación de encuestas, Pindado Málaga obtiene y presenta datos interesantes con respecto a los hábitos de lectura adolescentes (malagueños, en este caso). Para poner un ejemplo que puede resultar un antecedente interesante relacionado con nuestra futura investigación, el autor menciona que, según resultados arrojados por niveles, son los estudiantes de bachillerato los mayores lectores de periódicos y libros. Los resultados orientados a los intereses de lectura de los adolescentes reflejan por ejemplo, que los diarios más leídos son los locales y deportivos. En las revistas, predominan las de motor y ocio electrónico en los chicos y las de “información rosa”, música y moda en las chicas. Varias de estas revistas son leídas en plataformas digitales. Todos los datos están divididos según las variables de género (masculino / femenino) y niveles educativos (global / secundaria / bachillerato / f. profesional). En cuanto a libros, el autor menciona que aunque estas lecturas están “en crisis”, existen. Según los resultados arrojados por la investigación, las adolescentes son las que leen con más frecuencia. Los tipos de lecturas que realizan, varían según el género: los chicos prefieren libros de acción, aventura, intriga/miedo (aunque esta temática es de interés general) y ciencia ficción. Las chicas se centran más en libros románticos y realistas. A modo de conclusión de esta investigación, el autor plantea que los chicos leen más periódicos y las chicas más revistas. Son ellas las que se llevan el 8 porcentaje más alto de lectura en general, principalmente de libros. También habla de los temas que cada uno prefiere, ya referidos anteriormente, agregando que en ambos casos hay una coincidencia en las preferencias temáticas tanto en medios escritos como audiovisuales. Este estudio nos muestra entonces que la lectura como un acto placentero se convirtió en una práctica minoritaria entre los adolescentes, teniendo como uno de los principales motivos la oferta de ocio electrónico. Aporta posibles categorías a utilizar en nuestra investigación, debido a que el tema de interés es el mismo en ambos casos (la lectura recreativa en adolescentes). Plantea por ejemplo, la posibilidad de incluir la lectura de diarios y revistas (y no solo de libros de literatura tradicional). Además nos hace poner el foco en la influencia del “entorno electrónico que envuelve al adolescente”, que en la actualidad es un medio de suma importancia. De esta investigación obtenemos datos concretos de varios puntos que queremos resolver en nuestro propio estudio. Podemos tomar las conclusiones a las que se llegó, y mediante nuestra investigación comprobar si estos elementos han cambiado o hay datos que se mantienen constantes. También sabemos que la influencia tecnológica hoy, 16 años más tarde es tremendamente mayor, será interesante ver cómo esto se manifiesta en los resultados. Siguiendo una línea teórica y metodológica bastante similar a la de Pindado Málaga, pero moviéndonos al ámbito regional, tenemos el artículo de Carlos M. Vílchez Román (“Hábitos de lectura de los adolescentes peruanos: nuevas perspectivas”, 2003). El mismo describe una investigación aplicada a 325 estudiantes varones de primer y segundo grado, pertenecientes a un colegio particular religioso. El autor fundamenta la elección del tema de esta investigación alegando que las actividades que los adolescentes llevan a cabo en su tiempo libre son de suma importancia, porque allí expresan sus intereses reales. Dentro de estas actividades, el autor busca la aparición de la lectura voluntaria, un tema que según su perspectiva, carece de variedad de estudios previos. Para el relevamiento de datos, el autor utilizó un cuestionario aplicado a adolescentes, donde propuso interrogantes orientadas a sus formas de entretenimiento preferidas. Dentro de esas formas de entretenimiento, les preguntó sobre “su interés en la lectura, el tiempo dedicado a 9 esta actividad y sus preferencias lectoras”. Se hizo una diferenciación del tiempo empleado para estas actividades entre los días de semana (lunes a viernes) y los fines de semana (sábados y domingos). También se les pidió a los encuestados que ordenaran sus preferencias de forma decreciente, colocando el número 1 a la que consideran más importante; esto permitió que las preferencias de los adolescentes sean consideradas variables ordinales (lo que da acceso a un mayor número de técnicas de análisis). En el apartado donde se plantean conclusiones y recomendaciones el autor aclara que las conclusiones extraídas del análisis de los datos obtenidos son de carácter provisional, debido a la condición de aproximación inicial de naturaleza exploratoria de esta investigación, y que estas son válidas únicamente para la muestra estudiada. Las conclusiones que se centran en la lectura, muestran que leer libros y revistas es lo último que los estudiantes encuestados harían en su tiempo libre. La siguiente conclusión planteada por el autor, muestra que la lectura realizada en el tiempo libre de los adolescentes está asociada con otras actividades, donde prima el uso de aparatos electrónicos. En este sentido, el autor establece que los hábitos de lectura de los adolescentes han cambiado. El autor recomienda tomar este aspecto como una herramienta que necesariamente se debe incluir en el quehacer docente. Es interesante tomar este antecedente como referencia porque pertenece al nivel regional y aborda la temática que nosotros nos proponemos investigar, aunque desde una perspectiva más amplia. Es un aporte significativo para nuestra investigación por los datos que provee, tanto del método de investigación utilizado como de los resultados obtenidos y las conclusiones a las cuales se arribó. Podemos continuar la línea metodológica planteada y actualizarla con base en las nuevas tecnologías surgidas en nuestro tiempo. Si bien es bastante antiguo, los datos que arroja de la investigación nos servirán para realizar comparaciones, ampliando la muestra (incluyendo a mujeres) y aumentando el rango de edad. Este estudio revela que a los adolescentes no les gusta leer en su tiempo libre, por tanto no realizan, en su mayoría, lecturas espontáneas. Una de nuestras hipótesis y uno de los principales motivos impulsores de este estudio es la firme creencia de que los adolescentes sí leen, mucho más de lo que en el imaginario 10 colectivo se cree. Consideramos que les gusta leer y que poseen una oferta considerablemente alta para hacerlo. Por tanto, tomaremos las conclusiones de este estudio previo para ver qué tanto ha cambiado el panorama sobre esta temática. 11 Capítulo 4 4a. Marco teórico Abordar un trabajo de investigación, teniendo ejes teóricos tan amplios ciertamente implica todo un desafío. Hemos procurado la elección de un marco teórico que acompañe muy de cerca los cambios de la sociedad actual, es decir, desde paradigmas que atraviesen y deconstruyan los conceptos preexistentes sobre nuestros ejes temáticos: la lectura, los adolescentes y los aprendizajes. El eje central de nuestra investigación girará en torno a la lectura, ¿Qué es leer?. Daniel Cassany, (2006) quien estudia el campo de la comunicación escrita, opina que la definición de lectura debe ser actualizada, ya que según él “Todavía hoy muchas personas creen que leer consiste en oralizar la grafía, en devolver la voz a la letra callada.[...] Es una visión mecánica, que pone el acento en la capacidad de decodificar la prosa de modo literal.” (p.9) Cassany propone redefinir la lectura, teniendo en cuenta las nuevas dimensiones del contexto actual. No se trata de ver cuáles son los mecanismos mentales (cognitivos) para conocer qué es esa acción a la que llamamos lectura, ya que probablemente usemos las mismas habilidades mentales que las generaciones anteriores para leer y escribir “pero está claro que los discursos de hoy, del siglo XXI, sirven para hacer cosas distintas.” (Cassany p.9). Lo que hasta hoy se sabe, sobre las destrezas cognitivas de la comprensión acerca del acto de leer, es que es una de las macro habilidades fundamentales1 para desarrollar aprendizajes significativos de los individuos (Ausubel, 2000). El acto de leer no es para nada un acto ingenuo, sino que “la recepción supone principalmente la adquisición de nuevos significados a partir del material de aprendizaje presentado.” (Ausubel, 2000 p.25). Es evidente pensar entonces que si todos recepcionamos diferentes lecturas, adquirimos materiales de aprendizajes 1 Las habilidades comunicativas básicas: escuchar, hablar, leer y escribir. 12 heterogéneos, y con base en ello se gestaría la diversidad de pensamientos. Pero “¿todos leemos del mismo modo?” (Cassany 2006 p.22). El autor propone entonces, abordar la lectura desde otra perspectiva, como un hecho social, es decir, entender la lectura como algo que “[...] varía a lo largo de la historia, la de la geografía y de la actividad humana.[...] En cada lugar, en cada momento, leer y escribir han adoptado prácticas propias” (Cassany, p.23). Bajo este paradigma, la lectura, no es una cosa fija, mecánica ni universal, sino todo lo contrario “«Leer es un verbo transitivo» y no existe una actividad neutra o abstracta de lectura, sino múltiples, versátiles y dinámicas maneras de acercarse a comprender cada género discursivo, en cada disciplina del saber y en cada comunidad humana.” (Cassany, p.24) De lo anterior se desprende la necesidad de un estudio de las dinámicas de la lectura, dado que el panorama ha cambiado rápidamente, cabe preguntarse ¿de qué maneras leen los sujetos y en especial los jóvenes del siglo XXI? La lectura de los adolescentes, según Francisco Cruces, es un asunto activo y colectivo, él explica que “El acto de leer no tiene que ver sólo con los textos o los objetos por sí mismos, sino con lo que la gente hace con ellos ”(Cruces pág.14). Como ya mencionamos, nos centraremos en el lector adolescente. Como propone Vigotsky, el ser humano se ve marcado por esta etapa, observándose una revolución no solo a nivel físico sino también intelectual. Considera que la clave para caracterizar el pensamiento del adolescente es la formación de conceptos, ya que con esto logra apropiarse del pensamiento en conceptos y esto da paso a una nueva forma de actividad intelectual, luego de realizar un estudio donde obtuvo muestras de 300 personas: niños, adolescentes y adultos, llega a la siguiente conclusión: “El desarrollo de los procesos que pueden dar lugar más tarde a la formación de conceptos tiene sus raíces en la primera infancia, pero aquellas funciones intelectuales cuya combinación constituye el fundamento psíquico del proceso de formación de los conceptos maduran, se forman y se desarrollan sólo al llegar a la edad de la pubertad”. (Vygotski, 1934 – 1993 pág. 160) El autor destaca el desarrollo histórico cultural del individuo a la hora de obtener nuevos conocimientos en este desarrollo cognitivo. Adicionalmente, el autor 13 plantea que la estimulación de los adolescentes depende del medio en el que se encuentren, penderá de esto sus gustos y el desarrollo de habilidades, como se expone en la siguiente cita “(...) donde el medio no presenta al adolescente las tareas adecuadas, no le plantea exigencias nuevas, no despierta ni estimula el desarrollo de su intelecto mediante nuevas metas, el pensamiento del adolescente no despliega todas sus posibilidades, no llega a alcanzar las formas superiores o las alcanza con gran retraso”. (Vygotski, 1934– 1993, p. 133). Por lo tanto podemos preguntarnos ¿Qué leen los adolescentes? Encontramos en este punto una concordancia entre los teóricos, Cassany y Cruces, al afirmar que los adolescentes han cambiado la manera de leer. [....] los cambios más llamativos tienen que ver con el tipo de lectura que consumen, con la sustitución de los mediadores adultos por los influencers, incluso con la forma de obtener los libros, ya que han pasado del préstamo bibliotecario o la compra en la pequeña librería (donde existía la mediación de un adulto especializado) a la plataforma de compra virtual Amazon. En definitiva, se han reemplazado los espacios tradicionales donde habitualmente se practicaba la lectura (la escuela y la biblioteca) por la Red o, dicho con otras palabras, los lectores adolescentes y jóvenes atraídos por los influencers se han mudado de los edificios de ladrillos a la nube, de las estructuras fijas a las estructuras líquidas. (Cruces p.32). Lo que más nos interesa, es conocer cómo se abrieron camino esas lecturas por placer entre las generaciones más jóvenes y cómo se podrían diferenciar, para ello usamos como puntos de referencia dos grados: 3.er año de Ciclo Básico y 6.º de Bachillerato. Estas muestras nos permitirían visualizar si el pasaje por los cursos de literatura en Secundaria, influyó o no en su interés sobre la lectura de esos jóvenes. El planteo es que, si leer es un acto que trasciende, como lo propone Cassany, que atraviesa los límites y pasa de un ámbito a otro, al entender esto no es difícil pensar que los estudiantes de una institución puedan leer en su clase de literatura y trasladar sus lecturas al acto privado y también a la inversa, que sus lecturas recreativas atraviesen los aprendizajes que el docente le propone en la 14 institución. Queremos dejar en claro que, parafraseando a Colomer2, entendemos que la enseñanza con la literatura ha de trascender los clásicos y expandirse hacia nuevas formas de literatura a las cuales nuestros estudiantes se ven expuestos en el siglo XXI, lo cual tiene íntima relación con las motivaciones de los mismos a la hora de leer. Asimismo, en este punto del trabajo consideramos esencial volver a Ausubel, quien explica que: El aprendizaje significativo se da cuando el individuo incorpora nueva información a su estructura cognitiva, modificándola y resignificando tanto los nuevos conocimientos como los anteriores. Durante este proceso los nuevos contenidos se relacionan de manera no arbitraria y sustancial con lo que el aprendiz ya sabe. Palermo (2008) comentando esta teoría explica que después de este proceso, los conocimientos del estudiante no sólo adquieren un nuevo significado, sino que se ven enriquecidos. (Ausubel, 2000). Estas lecturas que los adolescentes realizan de manera voluntaria, libres han provocado un cambio en la comunidad juvenil, para quienes la lectura es: [...] siempre social, activa, holística, corporal, constructiva, afectiva y sensual [...] marcada por una relación indisociable con la escritura, la interactividad, la sociabilidad, la imagen, la oralidad, el ritual, la educación sentimental, el espacio cotidiano, la movilidad, la proliferación de dispositivos, la fragmentación de los tiempos y la multiplicación de ocasiones y motivos para leer. (Cruces p.16). Y, por último, volviendo a la teoría del aprendizaje, las lecturas por placer en los adolescentes, desarrollarían un conocimiento claro, estable y preciso que funcione de anclaje para la nueva información, cobrando principal importancia la estructura cognitiva del individuo. En este punto, en lo que refiere a nuestra investigación, será importante tener en cuenta que las muestras serán extraídas no sólo de jóvenes de distintas edades, sino que también de diferentes lugares socioculturales donde se produce su formación educativa, ya que abordaremos los 2 Teresa Colomer. La educación literaria. 2000 15 tres liceos de la ciudad de Florida. Podemos ver aquí lo que plantea Vigotsky sobre el desarrollo cognitivo, el cual nos presenta distintas etapas en las que se encuentra el adolescente, en 3.er año de ciclo básico se encuentra en una etapa media entre la adolescencia y la adultez lo que según el autor hace que el individuo esté en pleno desarrollo esta nueva fase cognitiva, mientras que en 3.er año de bachillerato se encuentran en la última etapa adolescente llegando casi a la etapa adulta. (Vigotsky 1934 – 1993). Teniendo en cuenta lo planteado anteriormente, las lecturas de los adolescentes estarían condicionadas por la formación educativa, la experiencia formativa e instructiva del joven, consolidando así una estructura cognitiva determinada. Y debido a sus conocimientos es que seleccionarían ciertos tipos de lecturas. En sentido contrario, Cassany (2006) plantea que no debería ser la principal preocupación, en estos tiempos, ver cuáles son los mecanismos mentales para conocer qué es lo que ellos hacen con sus lecturas es su interés. Este autor reconoce la importancia de las estructuras cognitivas, ya que esto explica cómo funciona nuestra mente para comprender, cómo formularnos hipótesis, y hacernos inferencias. Sin embargo, no nos brinda tanta información del contexto sociocultural y de las formas que asume la lectura según las variaciones socioculturales. Según este autor, la lectura es un hecho social que varía a lo largo del tiempo, el lugar y la actividad humana. Si bien el planteamiento de Cassany considera aspectos muy generales como para poder trasladarlos a nuestra investigación, aporta elementos que complementan la teoría de Ausubel y nos ayuda a comprender de una manera más completa el fenómeno de la lectura. Al aprendizaje significativo producido dentro de una institución, se le suman las características del contexto sociocultural con todas sus dimensiones, siendo condicionantes para las lecturas. También con el aporte de Cassany (2006), las lecturas de los adolescentes no solo reflejarán su nivel de aprendizaje o formación, sino que también vislumbrarán los temas de interés, el sentido e importancia de sus lecturas. 16 Capítulo 5 5a. Marco metodológico 5b. Esbozo metodológico Considerando las características de la investigación se ha optado por un enfoque metodológico mixto. Esto significa que se utilizarán variables cuantitativas y cualitativas, utilizando las hipótesis planteadas como guías de vital importancia que nos acompañen en el desarrollo exitoso o no de esta investigación. 17 5c. Enfoque metodológico Roberto Hernández Sampieri et al. (2014) en el capítulo 17 de su libro Metodología de la investigación d esarrollan las características esenciales de los “métodos mixtos” de investigación. Allí, los autores establecen como punto de inicio que “La meta de la investigación mixta no es reemplazar a la investigación cuantitativa ni a la investigación cualitativa, sino utilizar las fortalezas de ambos tipos de indagación, combinándolos y tratando de minimizar sus debilidades potenciales.” (Pág. 532). Por lo tanto, el enfoque mixto de investigación sería una tercera aproximación o enfoque investigativo, que implica que el proceso de recolección y análisis de datos de un mismo estudio sea desde una perspectiva de coordinación y amalgamiento de las técnicas tradicionales. Dependiendo del tipo de investigación que esté en juego y qué elementos predominan, hay distintas combinaciones específicas desde donde apuntar dicha investigación según la metodología mixta (establecidas en la página 535 del libro antes mencionado). En esta investigación hay una preponderancia cualitativa hasta ahora, y según las proyecciones realizadas esto se mantendrá de la misma forma hasta el final. Siguiendo a los autores, hay dos factores esenciales a tener en cuenta a la hora de seleccionar un enfoque metodológico. Uno de ellos implica: El enfoque que el investigador piense que armoniza o se adapta más a su planteamiento del problema. En este sentido, es importante recordar que aquellos problemas que necesitan establecer tendencias, se acomodan mejor a un diseño cuantitativo; y los que requieren ser explorados para obtener un entendimiento profundo, empatan más con un diseño cualitativo. Asimismo, cuando el problema o fenómeno es complejo, los métodos mixtos pueden ser la respuesta. (Pág. 536) Es necesario recordar que el problema de esta investigación es: “La motivación de los estudiantes para leer recreativamente por fuera de la institución educativa.”, por tanto se está ante un fenómeno complejo que implica grandes ejes 18 (adolescencia, lectura recreativa y motivación). De esos ejes, la adolescencia implica una realidad objetiva, en el sentido de que es un período vital cronológicamente definido y cuyas características son generalizables. La lectura recreativa y la motivación representan realidades subjetivas “compuestas de diversas realidades” (Pág 536). Hernández Sampierti et al. sobre esto, plantean que “ para poder “capturar” ambas realidades coexistentes (la realidad intersubjetiva), se requieren tanto la visión “objetiva” como la “subjetiva”. ” (Pág. 536). Teniendo en cuenta que la intención no es estudiar unos pocos casos en profundidad, sino tener conocimiento de una muestra lo más amplia posible. Pero, por limitaciones de tiempo y recursos (más aún en el contexto de pandemia en el que la sociedad se ve sumergida este año) se debe tener presente de antemano que esa muestra no será lo suficientemente representativa para establecer tendencias. A su vez, no se busca recabar solo datos cuantitativos, sino que se buscarán respuestas que los estudiantes puedan elaborar para expresar cosas que, por desconocimiento, no se tienen en cuenta. Se considera que es toda esta diversidad lo que le agrega complejidad al fenómeno planteado en el problema, y por tanto el enfoque mixto parece ser el más adecuado. El segundo factor de decisión que plantean los autores es “La aproximación en la cual el investigador posea más conocimientos y entrenamiento.” (536). En este caso, los responsables de la investigación son todos estudiantes en formación que realizan una investigación por primera vez, por tanto se cree que no tiene sentido seguir este criterio para decidir. 19 5d. Justificación del instrumento El método utilizado para la recolección de los datos es la encuesta, la cual consiste en “un conjunto de preguntas respecto a una o más variables a medir” (Sampieri, 2013). Se han aplicado dos tipos de preguntas en la encuesta, abiertas, las cuales no delimitan de antemano las opciones de respuesta (como por ejemplo las preguntas número tres, seis y siete); y preguntas cerradas, las que le presentan a los sujetos un número determinado de respuestas - Sampieri - (como es el caso de las preguntas uno, dos, cuatro y cinco). En esta investigación se utilizará la encuesta descriptiva ya que permite describir el fenómeno de la lectura adolescente. Es decir, permite medir y recoger información de manera independiente o conjunta sobre los conceptos o las variables. Su objetivo se limita a detallar cómo se manifiesta el fenómeno y no a brindar una explicación del mismo. En lo que refiere a la aplicación del instrumento, se llevará a cabo de forma autoadministrada, proporcionando la encuesta directamente a los sujetos de estudio, estos son estudiantes de tercero y sexto año de liceo de la ciudad de Florida. 20 5e. Validación del instrumento La validación del instrumento se llevó a cabo en dos instancias. La primera instancia consistió en la colaboración de las docentes de Rubik para un instrumento coherente con los objetivos. La segunda instancia de la validación se llevó a cabo a través de un pre-testeo del instrumento, aplicado a individuos aleatorios de la sociedad que se encontraran dentro de la población de estudio. Esta segunda instancia arrojó como resultado la modificación de las opciones de respuesta para la pregunta “¿Lees en tu tiempo libre?”, pasando a ser “Si/No” a las siguientes tres: Con mucha frecuencia; A veces; Nunca. 21 5f. Decisiones de muestreo Roberto Hernández Sampieri et al. (2014) comienzan el capítulo ocho de su libro Metodología de la investigación p lanteando lo siguiente: “Toda investigación debe ser transparente, así como estar sujeta a crítica y réplica, y este ejercicio solamente es posible si el investigador delimita con claridad la población estudiada y hace explícito el proceso de selección de su muestra.” (Pág. 170). Allí radica toda justificación necesaria para la redacción de este segmento metodológico que busca dejar en claro las decisiones de muestreo tomadas para la investigación. Estos autores definen la muestra como un “Subgrupo del universo o población del cual se recolectan los datos y que debe ser representativo de ésta” (Pág 173). Según su criterio, es necesario realizar este recorte para poder optimizar el tiempo y los recursos destinados a la investigación. Cuando se habla de muestra, el foco estará puesto en “qué o quiénes”: “es decir, en los participantes, objetos, sucesos, o colectividades de estudio (las unidades de muestreo), lo cual depende del planteamiento y los alcances de la investigación.” (Hernández Sampieri et al., Pág. 172). Entonces, el primer paso establecido para hacer el recorte que implica la muestra, es delimitar esta unidad de muestreo o análisis (o sea, definir si se trata de individuos, organizaciones, comunidades, etc.). En el caso de esta investigación, estuvo claro desde el primer momento que la unidad de muestreo se trataba de individuos, específicamente de estudiantes de secundaria. Luego, cuando la unidad de muestreo está definida, el siguiente paso es delimitar la población. La población se define como el “Conjunto de todos los casos que concuerdan con determinadas especificaciones.” (174). Los autores establecen que lo mejor para la investigación es describir de forma clara todas las características de la población; estas características incluyen contenido, lugar y tiempo. También se ha tenido en cuenta los objetivos y el problema en cuestión para tener en claro el alcance de nuestra población. Teniendo esto presente, se ha delimitado la población inicial, que estaría compuesta por los estudiantes de 3° y 6° de secundaria en la ciudad de Florida (Uruguay). Recapitulando, la unidad de muestreo al inicio estaba compuesta por individuos, concretamente estudiantes de 22 secundaria. De ahí, se procedió a delimitar la población, situando a los estudiantes de secundaria en un lugar específico (Florida), en un tiempo específico (2020). Luego se realizó otro recorte, seleccionando solamente dos grados (3° y 6°), y así, la población quedó delimitada. El paso final dentro de este proceso de decisiones de muestreo es seleccionar la muestra en cuestión. Los autores antes mencionados definen la muestra como “(...) un subgrupo de la población. Digamos que es un subconjunto de elementos que pertenecen a ese conjunto definido en sus características al que llamamos población.” (Pág. 175). Como la población dentro de las investigaciones suele ser muy amplia, pocas veces puede medirse en su totalidad, la muestra nos permite tomar una parte de la misma y usarla como modelo que puede ser representativo del conjunto total, o no, dependiendo del tipo de muestra que se utilice. En esta investigación, la muestra o el subgrupo seleccionado se compone por los grupos de práctica docente de los responsables de esta investigación. Son 5 grupos, y cada grupo está compuesto por un promedio de 30 estudiantes. Debido al contexto actual de pandemia por el que atraviesa la sociedad, y las limitaciones que eso implica a la hora de tener contacto con otros grupos ajenos a los nuestros, esta ha sido la mejor decisión para optimizar el tiempo disponible para aplicar el instrumento de investigación. Con respecto a los tipos de muestra, los autores distinguen entre dos principales: la probabilística y la no probabilística o dirigida. Si observamos la definición y las características de cada una, se puede evidenciar como la muestra de la corriente investigación encaja con las características de la “no probabilística”. Este tipo de muestra es un subgrupo de la población donde la elección de elementos no depende de la probabilidad, sino que se orienta a componentes relacionados con las características que posee la investigación o los objetivos del que investiga. “Aquí el procedimiento no es mecánico ni se basa en fórmulas de probabilidad, sino que depende del proceso de toma de decisiones de un investigador o de un grupo de investigadores y, desde luego, las muestras seleccionadas obedecen a otros criterios de investigación.” (Sampieri et al., Pág. 176). Este tipo de investigación “No pretende que los casos sean estadísticamente representativos de la población” (Pág. 171). 23 Para ilustrar los tipos de muestra, los autores utilizan tres ejemplos. Uno de ellos, es sobre una investigación en cárceles de Estados Unidos donde se usa una muestra no probabilística. En este ejemplo se utiliza este tipo de muestra porque “se trata de un estudio exploratorio y fundamentalmente cualitativo; es decir, no resulta concluyente, sino que su finalidad es documentar ciertas experiencias. Este tipo de estudios pretende generar datos e hipótesis que constituyan la materia prima para investigaciones más precisas.” (Sampieri et al., Pág. 176). La justificación de la muestra no probabilística de esta investigación es muy similar a la que plantean los autores en este ejemplo. Este trabajo de investigación se orienta a la identificación, al conocimiento de un tema que será de interés a futuros docentes de literatura. El objetivo esencial de esta investigación es conocer, saber, identificar qué leen los adolescentes y cuáles son sus motivaciones. Esta temática siempre está cargada por una cuota de subjetividad que no permite hacer grandes generalizaciones, y si bien se llegará a una o más conclusiones para presentar, estas no serán del todo concluyentes y ciertamente los casos seleccionados no funcionan como estadísticamente representativos. Sin dudas que esta investigación será materia prima para futuras investigaciones que quieran ahondar aún más en un factor que es importante y no ha sido lo suficientemente estudiado. Para finalizar, es necesario aclarar que una vez aplicado el instrumento de recolección de datos, la muestra se volvió a reducir. Como mencionamos antes en este capítulo, se estimaba contar con un promedio de 100 estudiantes que contesten la encuesta (deberían ser más, porque eran 5 grupos de 30 estudiantes, lo que deja un total de 150 estudiantes; pero teniendo en cuenta las condiciones actuales en las que se encuentra la población, en un contexto de pandemia mundial, donde no está establecida la obligatoriedad en secundaria, los estudiantes concurren poco, por lo que era considerable que se podría reducir a más o menos 100 respuestas). Sin embargo, al cerrar la etapa de recolección de datos para comenzar con el análisis de los mismos, se obtuvo como resultado final 77 respuestas a la encuesta, y será con ese número con el que nos manejaremos finalmente. Esto reduce el número de representación de estudiantes de secundaria de la ciudad de Florida con los que se pretendía realizar el análisis de datos. Igualmente, se han recabado datos cuantitativos y cualitativos muy interesantes que 24 ayudarán a comenzar un antecedente en la investigación de lectura recreativa en adolescentes. 25 5g. Análisis de datos y discusión Datos Pregunta 3: Lectura. ¿Leés en tu tiempo libre? Entre la población encuestada encontramos que un 59,7% de los estudiantes de 3° y 6° año liceal leen “a veces”, mientras un 7,8% lee “con frecuencia” y el 32,5% restante “no lee nunca”. Discusión Esta pregunta es importante para llegar a los demás resultados, ya que las siguientes interrogantes apuntan a los objetivos que nos formulamos al comienzo, identificar qué leen, qué los motiva y si la clase de literatura influyó en sus lecturas en primer lugar debíamos saber si leen en su tiempo libre. A pesar de que el porcentaje de adolescentes que no leen nunca en su tiempo libre es alto, no es el porcentaje mayor. Carlos M. Vílchez Román (2003), menciona que el avance de la tecnología ha generado que cambien los hábitos adolescentes, influyendo de esta manera en que la lectura adolescente disminuya. En los datos recabados podemos ver que esto no se da en absoluto, ya que los hábitos de lectura recreativa en adolescentes no ha caído por completo, aún el porcentaje mayor sigue siendo positivo. Incluso en muchos casos utilizan la tecnología para acceder a los libros mediante internet. En nuestro caso podemos ver que la lectura sí interviene en la vida de los adolescentes. Los resultados que arroja esta pregunta coinciden con lo que plantea Francisco Cruces (2017), quién afirma que la lectura adolescente perdura en la actualidad, simplemente ha cambiado de forma, es decir, el contexto y situaciones, “(...) los cambios más llamativos tienen que ver con el tipo de lectura que consumen, con la sustitución de los mediadores adultos por los influencers, incluso con la forma de obtener los 26 libros, ya que han pasado del préstamo bibliotecario o la compra en la pequeña librería (donde existía la mediación de un adulto especializado) a la plataforma de compra virtual Amazon”. Con esto podemos ver que los intereses han cambiado pero esto no quiere decir que ya no lean, sino que cambiaron la forma de hacerlo actualizando y adaptando a la época en que viven, a la era de la tecnología. Datos Preguntas 4 y 5: Tipos y preferencias de lecturas. De la siguiente lista, marcá las opciones de lectura que te interesan De todas las opciones previas, ¿cuál es la que más te gusta? ¿Por qué? Diarios y/o Revistas 9,1% - 7 R Libros de divulgación científica / histórica 7,8% - 6 R Biografías/ Autoayuda 7,8% - 6 R Cuentos y/o novelas 42,2% - 34 R Poesía 2.6% - 2 R Obras dramáticas y/o Cómics 15,6 % - 12 R Con esta pregunta se identifica en la muestra seleccionada tres tipos de lecturas preferenciales en los adolescentes: la que obtuvo mayor porcentaje fue la opción “Cuentos y/o novelas”, la cual fue seleccionada por 34 estudiantes de los 77 encuestados, constituyendo el 42,2 % de la muestra final. En segundo lugar, la opción “Obras dramáticas y/o Cómics” que obtuvo 12 respuestas, el 15,6 % de la muestra final. Y en tercer lugar tenemos “Diarios y/o revistas” con 7 respuestas un 9,1%. Discusión En la encuesta se dedicó una pregunta exclusivamente para Identificar cuáles son los tipos de lecturas de los adolescentes de 3° y 6° de liceo de la ciudad de Florida, por fuera de la institución educativa, si es que las tienen. Como puede 27 verse, esta pregunta alude a nuestro primer objetivo específico, el cual fue planteado partiendo de nuestra hipótesis de que los adolescentes leen. Desde nuestro lugar como futuros docentes de literatura estamos satisfechos por el hecho de que las lecturas que más se realizan por fuera de la institución educativa, sean de ficción. Las dos opciones más seleccionadas corresponden lecturas de índole meramente literario. El cuento y la novela pertenecen a lo que Miguel Ángel Garrido, entre otros teóricos literarios, denominan género épico, uno de los tres géneros fundamentales de la historia literaria. Mientras que el “cómic”, otro tipo de lectura que realizan con más frecuencia debido a que así se refleja en las respuestas individuales de la siguiente pregunta. En la cual de los 12 adolescentes que seleccionaron “Obras dramáticas y/o Cómics”, 9 aclararon que leen comics. Garrido plantea que es un subgénero de la épica, lo que nos da una señal de que los gustos de los adolescentes van dirigidos hacia las ficciones donde se plantea la figura de un héroe, un problema/obstáculo y una solución. También podemos decir que dichas preferencias por ese tipo de géneros está enfocado por la gran carga de acción y dinamismo de los hechos legendarios o ficticios relativos a las hazañas del héroe y a las luchas reales o imaginarias en las que han participado estos héroes. Consideramos que esto es un dato muy importante que enriquecerá nuestra labor docente, y nos guiará para la selección de los textos de trabajo. Otro aspecto importante que arrojan estos resultados es que la mayoría de las lecturas realizadas por fuera del liceo, pueden clasificarse como “recreativas”, justamente el tipo de lecturas a las que apunta nuestra investigación. Atendiendo a la clasificación estipulada por Ángel Rivas, la lectura recreativa es la que realizamos por el gusto de comunicarnos con diversas sensibilidades e ideas diferentes o afines a nosotros. Podemos apreciar este gusto de comunicarse con diversas sensibilidades e ideas, en las respuestas individuales de la siguiente pregunta: “De todas las opciones previas, ¿cuál es la que más te gusta? ¿Por qué?”. En las respuestas a esta pregunta predominan construcciones sintácticas cómo: “Me gustan porque”, “Porque me gusta”, “Me llama la atención” y “Me interesa”. 28 Datos Pregunta 6: Motivaciones e influencias. ¿Cómo llegaste a esas lecturas?¿Quién o qué te motivó? De los 77 estudiantes, 24 de ellos respondieron que descubrieron solos las lecturas; 19 respondieron que el núcleo familiar ha sido la influencia para sus lecturas; 12 respondieron que las películas o series los han llevado a la lectura; 8 respondieron que llegaron por “influencers”; 6 que fueron influidos por amigos; 6 respondieron que llegaron a sus lecturas por un profesor; y finalmente 2 estudiantes respondieron que llegaron por otras influencias. Los estudiantes llegan a la lectura, mayoritariamente, por motivación propia. La segunda influencia que los estudiantes declaran tener es el núcleo familiar, seguido por las películas y series. Discusión De estos resultados, podemos interpretar que la autonomía de los estudiantes para seleccionar las lecturas es posibilitada seguramente por el uso de internet puesto que, como plantean Lluch et al, “internet rompe con los muros del aula”, permitiendo más flexibilidad y libertad en cuanto a sus elecciones. Al mismo tiempo, esto se alinea con lo que plantea Cruces con respecto a los cambios en la lectura, como hemos mencionado en la discusión de datos de la pregunta 3. Podemos ver también, con estos resultados, una relegación del rol del docente como influencia con respecto a la selección de lecturas recreativas. Entendemos que esto puede deberse a la menor cantidad de horas que un docente comparte con cada estudiante, en comparación con la cantidad de horas que cada estudiante comparte con las demás opciones planteadas en las respuestas. Esto deja abierta una posible línea de estudio a futuro, cuyo enfoque sea la influencia de los docentes de literatura en los estudiantes en relación al tiempo que comparte, en comparación con otras posibles influencias. 29 Podemos decir también que la presencia de los “influencers” no está excluida de las influencias para las lecturas de los estudiantes, sin embargo, tampoco tiene un rol protagónico como lo ha tenido, por ejemplo, el núcleo familiar o más aún, la propia autonomía del estudiante. Esta pregunta, y los resultados de la misma, han sido fruto de la hipótesis “Los adolescentes cuentan con las mediaciones de editoriales, pares e influencers como elementos motivacionales para llevar a cabo sus lecturas por placer”, puesto que nos ha guiado a ellos. A su vez, hemos construido esta pregunta con el fin de cumplir el siguiente objetivo: “Analizar qué motiva a los adolescentes de 3º y 6º de liceo de la ciudad de Florida a las lecturas recreativas que realizan”. Datos: Pregunta 7: Motivaciones e influencias. La clase de literatura, ¿modificó tus preferencias en las lecturas que realizás de forma voluntaria / placentera? Los resultados a esta pregunta corresponden a las siguientes cifras: Un 58,4% de los encuestados, es decir, unas 45 personas, respondieron que NO. El 41,6% que conforman un total de 32 personas, respondieron que SÍ. Si bien los porcentajes tienen un grado de diferenciación muy estrecho, podemos partir de ellos para llegar a las siguientes conclusiones: Discusión Discutiremos, en primer lugar, las respuestas de los estudiantes respondieron que SÍ, es decir, que tras el pasaje por alguna clase de literatura en su ciclo estudiantil, ha sentido que la asignatura ha modificado de alguna forma sus preferencias en sus lecturas voluntarias y placenteras. Las respuestas de los encuestados dejan en evidencia que la clase de literatura “abrió” un mundo que antes era desconocido para ellos. Encontramos que 11 de las respuestas utilizan una serie de expresiones que hacen alusión a esa experiencia de apertura, y de adición de contenidos nuevos, que en su tiempo libre no elegían, ya sea porque lo desconocían o porque les resultaba difícil la lectura. Tras esas expresiones, 30 confirmamos lo que la autora Teresa Colomer, quien forma parte de nuestro marco teórico, afirma y propone, y esto es recordar que el lenguaje es, esencialmente, aquello con lo que damos sentido a la realidad que “la literatura explora las posibilidades del lenguaje en múltiples ámbitos del saber y la experiencia” (pág. 73). Esto es de vital importancia, ya que en muchas de las respuestas de los encuestados, también se hacía alusión a la incorporación de lenguaje nuevo y la ampliación de vocabulario en su lengua materna, es decir, nuevas formas expresivas que los estudiantes han adquirido tras su paso por la clase de literatura. Otro punto importante tiene que ver con la experiencia de la clase de literatura, la cual no solamente abrió el horizonte a nuevos conocimientos y modificó sus preferencias a la hora de elegir sus lecturas voluntarias, sino que también los encuestados han expresado que han descubierto nuevas formas de compartir la lectura con sus pares dentro y fuera del aula, y eso ha generado toda una serie de conductas sociales muy llamativas. La lectura de los jóvenes, según Francisco Cruces, es un asunto activo y colectivo, él explica que dicha lectura “Es siempre social, activa, holística, corporal, constructiva, afectiva y sensual.”(p.16) Tras estas reflexiones, vemos cumplido nuestro objetivo el cual era “Indagar sobre la manera en que la enseñanza de la literatura modificó o influyó la lectura de los estudiantes”. A continuación discutiremos las respuestas que han sido negativas, es decir, las que indican que la clase de literatura no modificó ni influyó en sus lecturas por fuera de la institución educativa. ¿Por qué no lo hizo? Los encuestados que han respondido que No, han justificado su respuesta diciendo que ya habían señalado que no les gustaba la lectura, es decir, son parte del 32% que no lee nunca, y por ende tampoco les gusta la clase de literatura. Pero también encontramos que muchas de las respuestas iban dirigidas hacia los contenidos que le ofrecía la clase, es decir las obras, ya que en sus expresiones con frecuencia se manifestaba el tema de sus intereses en tensión con el contenido curricular. Nuestra reflexión con respecto a este punto, parte de que en primer lugar creemos que los gustos y preferencias de los adolescentes de hoy en día se inscribe en los cambios sociales producidos en las sociedades hiper conectadas a 31 las redes globales de información a la carta, que entran en conflicto con un desajuste evidente entre la educación tradicional y las nuevas necesidades sociales. La clase de literatura, según lo que podemos deducir de las respuestas de los encuestados, no aporta nada que les interese, ya que sus intereses están dirigidos a otras actividades más acordes a la realidad digital en la que están inmersos. Por otro lado, encontramos varias respuestas en las que se expresaba que la clase de literatura no había modificado en nada sus preferencias, ya que ellos ya tenían esos gustos de lecturas y tras el paso por el curso, aun así se hallaban en la misma posición. Entendemos que, con estos resultados, hemos recogido datos muy valiosos para nuestra función como docentes, la opinión de los estudiantes encuestados ha dado luz sobre el estado actual de la relación entre los estudiantes con la asignatura y con los contenidos de la clase, lo que además deja, como proyección a futuro, la posibilidad de investigar sobre el programa curricular de la asignatura y los gustos de los estudiantes, así como la manera de integrarlos y vincularlos. 32 Capítulo 6 6a. Conclusión Con base en los resultados de este trabajo se puede concluir que las hipótesis planteadas fueron una guía útil para sostener la investigación y alcanzar los objetivos planteados. Es menester recordar que esta investigación es de carácter descriptivo y que la muestra de la misma era pequeña y no representativa de la sociedad, por lo tanto, no es posible hablar de comprobación o refutación de hipótesis. Sin embargo, se han recogido datos valiosos para la función de los docentes, la opinión de los estudiantes encuestados ha dado luz sobre el estado actual de la relación entre los estudiantes con la asignatura y con los contenidos de la clase. Asimismo, los resultados de esta investigación permiten, como posible proyección, futuras investigaciones sobre la autonomía de los estudiantes a la hora de leer recreativamente, así como la posibilidad de integración de las preferencias de lecturas de nuestros estudiantes con los programas oficiales. Referencias bibliográficas 33 Achilli, E. (2009). El proceso de investigación. En E. Achilli, Módulo: Taller de investigación (págs. 24-38). Ander-Egg, E. (1995). Técnicas de investigación social. Buenos Aires: Lumen. Ausubel, D. (2000). Adquisición y retención del conocimiento. Barcelona: Paidós. Cano de Faroh, A. (2007). Cognición en el adolescente según Piaget y Vygotsky. ¿Dos caras de la misma moneda? Boletim Academia Paulista de Psicologia, 158-166. Cassany, D. (2006). Tras las líneas. Sobre la lectura contemporánea. Barcelona: Anagrama. Colomer, T. (2009). La educación literaria. En C. Armendano, & I. Miret, Lectura y bibliotecas escolares (págs. 73-82). Madrid: OEI. Colomer, T. (2009). Lectura de frontera y frontera de la lectura. En T. Colomer, Lecturas adolescentes (págs. 5-16). Barcelona: Graó. Cruces, F. (2017). ¿Cómo leemos en la sociedad digital? España: Ariel y Fundación Telefónica. Hernández Sampieri, R., Fernández Collado, C., & Baptista Lucio, P. (1991). Metodología de la investigación. México: McGraw-Hill. Píndado Málaga, J. (2004). El desencuentro entre los adolescentes y la lectura. Comunicar, 167-172. Rodríguez Palmero, M. L. (2008). La teoría del aprendizaje significativo en la perspectiva de la psicología cognitiva. Barcelona: Octaedro. 34 Vílchez Román, C. (2003). Hábitos de lectura de los adolescentes peruanos: nuevas perspectivas. Revista Interamericana de Bibliotecología, 1-13. 35 Anexo Fichas de lectura Antecedentes empíricos: - Colomer, T. (2009). Lectura de frontera y frontera de la lectura. En T. Colomer, Lecturas adolescentes (págs. 5-16). Barcelona: Graó. https://www.academia.edu/38086461/Lecturas_adolescentes_lectura_de_fron tera_y_frontera_de_la_lectura Ficha de antecedentes Antonela Lazo Autor(a): Teresa Colomer Editorial: Graó Título: Lectura de frontera y frontera de Cuidad: Barcelona la lectura Páginas de referencia: 5-16 Año: 2009 Este material se relaciona directamente con nuestro proyecto de investigación, ya que trata sobre las lecturas adolescentes, muestra determinados cambios en la cultura que influyen en los adolescentes, y cómo a través de los años han cambiado los hábitos lectores. Hace algunos años la principal influencia en cuanto a la escritura y lectura venía del núcleo familiar, cosa que ha ido cambiando con la globalización y nuevas tecnologías. 36 -En primer lugar trata de dar una definición de adolescencia y lectura, ya que son términos demasiado amplios de gran dificultad a la hora de definir. -Desde la sociología al definirla se habla de un cambio con respecto al modelo de identificación; ahora no tratan de reproducir la trayectoria de los adultos sino de experimentar cosas nuevas. -Menciona la autora que múltiples datos revelan que la deserción escolar o los hábitos lectores tienen que ver con los sectores sociales y allí están: la posesión de libros o el nivel de estudio de la familia. Esto demuestra que la escuela debe encontrar formas de nivelación social más efectivas que las actuales. Y en cuanto a la tradicional división de escuela pública y privada se añade la división de tiempo de atención (con mejores resultados en alumnos escolarizados a los tres años), espacio (centro y enormes periferias urbanas) y población atendida (autóctona o inmigrante). Citando a Robin (2005) explica que los jóvenes son herederos de un recorrido familiar, escolar y social, allí están las connotaciones entre si siente o no interés por lo escrito. -Trata de situar la lectura de los jóvenes en el espacio de frontera personal y social que define la construcción de una práctica lectora que se encuentra entre el ocio y la obligatoriedad escolar; la ficción literaria y la ficción vehiculada a través de la imagen y las pantallas; la construcción del yo y la socialización en comunidades cada vez más complejas; o bien el tiempo vital de la niñez y el acceso a la vida adulta. De este modo, se destacan determinadas líneas de producción correspondientes a estos espacios: la narrativa situada entre los códigos del texto y la imagen, así como la aventura fantástica y su relación con las ficciones audiovisuales y de juego; la narrativa centrada en temas de construcción personal, tanto en cuanto a los modelos de género, como a la convivencia en sociedades multiculturales; y también la narrativa situada entre un destinatario adolescente y un público popular de amplio espectro. 37 “(…) la adolescencia es la representación moderna de una etapa de vida formada a partir de la prolongación de los estudios secundarios a toda la población y del retraso de la independencia familiar y social”. (pág. 5) - Píndado Málaga, J. (2004). El desencuentro entre los adolescentes y la lectura. Comunicar, 167-172. https://www.redalyc.org/pdf/158/15802327.pdf Ficha de antecedentes Autor(a): Julián Pindado Málaga Título: El desencuentro entre los Editorial: Comunicar, Revista Científica de Comunicación y Educación adolescentes y la lectura Ciudad: Huelva (España) Año: 2004 Páginas de referencia: 167-172 Este artículo publicado en la revista española Comunicar, es de interés significativo para nuestra investigación porque estudia la relación de los adolescentes con los medios escritos (cómo se han modificado los hábitos lectores y las nuevas influencias en los adolescentes relacionadas al ámbito electrónico). Por tanto, se vincula directamente con el tema que seleccionamos para nuestra investigación y el problema que nos proponemos investigar. Los datos allí presentados pertenecen a España, pero nos pueden servir como base para la elaboración de medios de recolección de datos para el análisis. 38 - En la primera parte del artículo, titulada “Los hábitos lectores de los adolescentes”, el autor comienza estableciendo como las nuevas tecnologías y el entorno electrónico afectaron de forma significativa a “lo impreso” es decir, a la lectura tradicional. El autor continúa mencionando que esta nueva influencia hace que, si existen lecturas por parte de los adolescentes, estén orientadas a los medios no escritos (televisión, música, videojuegos, ordenadores). (Págs. 167-168) - Luego, el autor presenta los resultados de algunas investigaciones previas realizadas en España respecto a la frecuencia de utilización de los medios escritos. Para poner un ejemplo que puede resultar un antecedente interesante relacionado con nuestra futura investigación, el autor menciona que, según resultados arrojados por niveles, son los estudiantes de bachillerato los mayores lectores de periódicos y libros. (Pág. 168) - El segundo apartado del texto se titula “Medios y temas preferidos”. Allí el autor describe nuevamente los resultados de la recolección de datos de una investigación, orientados esta vez a los intereses de lectura de los adolescentes. Estos resultados reflejan por ejemplo, que los diarios más leídos son los locales y deportivos. En las revistas, predominan las de motor y ocio electrónico en los chicos y las de “información rosa”, música y moda en las chicas. Varias de estas revistas son leídas en plataformas digitales. Todos los datos están divididos según las variables de género (masculino/femenino) y niveles educativos (global/secundaria/bachillerato/f. profesional). (Págs. 169-170) - En cuanto a libros, el autor menciona que aunque estas lecturas están “en crisis”, existen. Según los resultados arrojados por la investigación, las adolescentes son las que leen con más frecuencia. Los tipos de lecturas que realizan, varían según el género: los chicos prefieren libros de acción, aventura, intriga/miedo (aunque esta temática es de interés general) y ciencia ficción. Las chicas se centran más en libros románticos y realistas. (Pág. 171) 39 - A modo de conclusión de esta investigación, el autor plantea que los chicos leen más periódicos y las chicas más revistas. Son ellas las que se llevan el porcentaje más alto de lectura en general, principalmente de libros. También habla de los temas que cada uno prefiere, ya referidos anteriormente, agregando que en ambos casos hay una coincidencia en las preferencias temáticas tanto en medios escritos como audiovisuales. (Pág. 171) “El resquicio dejado al mundo de la palabra se acota cada vez más en medio de una extraordinaria oferta audiovisual y electrónica.” (Pág. 167) “Como bien decía Martín Serrano, <<la juventud lee menos libros impresos, menos periódicos y revistas. Pero invierte cada vez más tiempo en otras lecturas>>” (Pág. 168) “Resulta evidente que la lectura como un acto placentero se ha convertido en una práctica minoritaria.” (Pág. 170) “Si hubiera que recoger estas notas en un titular, éste podría ser que el perfil del lector adolescente es el de una chica que estudia bachillerato.” (Pág. 171) - Vílchez Román, C. (2003). Hábitos de lectura de los adolescentes peruanos: nuevas perspectivas. Revista Interamericana de Bibliotecología, 1-13. https://brapci.inf.br/index.php/res/download/97579 40 Ficha de antecedentes Manuela Viera Autor(a): Carlos M. Vílchez Román Título: Hábitos de lectura de los adolescentes peruanos: nuevas perspectivas Editorial: Revista Interamericana de Bibliotecología Ciudad: Medellín (Colombia) Páginas de referencia: 57-71 Año: 2003 Este antecedente, si bien no es tan vigente como quisiéramos, es un aporte significativo para nuestra investigación por los datos que provee, tanto del método de investigación utilizado como de los resultados obtenidos y las conclusiones a las cuales se arribó. Podemos continuar la línea metodológica planteada y actualizarla con base en las nuevas tecnologías surgidas en nuestro tiempo. Además, podremos comparar las conclusiones aquí planteadas con las que surjan en nuestro estudio, y ver si existe una evolución en los hábitos lectores adolescentes o si continúa en los mismos parámetros. - El autor fundamenta la elección del tema de esta investigación alegando que las actividades que los adolescentes llevan a cabo en su tiempo libre son de suma importancia, porque allí expresan sus intereses reales. (Pág. 57) - Dentro de la fundamentación teórica, el autor establece que como los profesores muestran una preocupación general y constante con respecto a la comprensión lectora de los adolescentes, las investigaciones realizadas hasta entonces sobre lectura adolescente están centradas en este punto. La investigación de la lectura voluntaria de los adolescentes en su tiempo libre no tiene mucha variedad de estudios previos (para esta afirmación el autor se centra 41 en el país en el que aplicará su investigación, Perú). Luego, el autor cita dos antecedentes a modo de ejemplo -Mary Moffitt y Ellen Wartella (1992); Mihalyi Csikszentmihalyi y Reed Larson (1984)- donde la lectura aparece como una actividad relativamente popular entre los estudiantes de secundaria. También menciona un antecedente nacional, realizado en Perú por el sociólogo Martín Santos en 1998, que buscaba conocer en qué ocupaban su tiempo libre los adolescentes de 18 a 25 años de la ciudad de Lima. En esta investigación, los datos mostraron que la “lectura de periódicos y revistas” y la “lectura por placer” ocuparon un lugar significativo. El autor se propone continuar con estas líneas de investigación, a través de preguntas como: “¿cuánto tiempo le dedican a la lectura voluntaria (que es diferente de la lectura obligatoria, aquella que dejan los profesores)? ¿con qué frecuencia leen en su tiempo libre? ¿qué otras actividades acompañan la lectura voluntaria?”. (Págs. 58-60) - En el apartado sobre el método de investigación, el autor detalla el instrumento de recolección de datos y su contenido. Utilizó un cuestionario aplicado a adolescentes, donde propuso interrogantes orientadas a sus formas de entretenimiento preferidas. Dentro de esas formas de entretenimiento, les preguntó sobre “su interés en la lectura, el tiempo dedicado a esta actividad y sus preferencias lectoras”. Se hizo una diferenciación del tiempo empleado para estas actividades entre los días de semana (lunes a viernes) y los fines de semana (sábados y domingos). También se les pidió a los encuestados que ordenaran sus preferencias de forma decreciente, colocando el número 1 a la que consideran más importante; esto permitió que las preferencias de los adolescentes sean consideradas variables ordinales (lo que da acceso a un mayor número de técnicas de análisis). (Págs. 60-61) - El instrumento de recolección de datos, tenía como componentes las siguientes variables: *Edad y grado de estudios *Actividades o pasatiempos preferidos *Tipos de programa de televisión preferidos 42 *Juegos o deportes preferidos *Tipos de músicas preferidos *Temas de lectura preferidos *Tiempo dedicado a cada: a) actividad o pasatiempo preferido, b) tipo de programa de televisión preferido y c) deporte o juego preferido (de lunes a viernes y los sábados y domingos). (Pág. 61) - El autor aclara que el cuestionario se aplicó en abril de 2001, en una muestra inicial de 513 estudiantes varones pertenecientes a un colegio particular religioso, que estaban cursando los tres primeros grados de educación secundaria. Para este estudio particular, el autor aclara que se tomó una submuestra de 325 estudiantes, pertenecientes a primer y segundo grado. En promedio, demoraron 10 minutos en llenar el formulario y no tuvieron mayores dificultades. El autor también cree pertinente aclarar que casi todos los encuestados de la muestra provienen de estratos socioeconómicos medios y altos, con las comodidades que eso implica y, en general, con padres formados en educación superior. Por el tipo de educación que recibieron, donde se aplicaban ciertas prácticas que fomentaban la lectura y la escritura, estos estudiantes tienen incorporada en gran parte a la “lectura por placer”. (Págs. 61-62) - En el siguiente apartado, correspondiente a el comentario sobre resultados y discusión, el autor comienza explicando que la lectura no se posicionó dentro de las actividades preferidas por los adolescentes; incluso el 34.8% de los encuestados reveló que “lo último que haría sería leer libros o revistas”. Este dato es inconsistente con algunas investigaciones previamente citadas. El autor menciona que esto tiene que ver con el tipo de muestra seleccionada, debido a que en las investigaciones anteriores se incluyó a hombres y mujeres, y esta muestra solo se componía de varones. Luego de un análisis de los resultados, el autor formuló la siguiente hipótesis: “(...) con relación a las actividades realizadas en sus ratos libres, a medida que pasan de un grado a otro los estudiantes se vuelven más sedentarios y pasivos”. Con respecto a esto, es importante aclarar que el autor distingue dos maneras de utilizar el tiempo libre: actividades 43 productivas (hacer deportes, jugar, leer) y actividades pasivas (ver televisión, dormir). A continuación el autor muestra datos graficados y tabulados que son consistentes con la hipótesis planteada. (Págs. 62-63) - En la investigación se aplicó un instrumento (coeficiente r de Spearman) para poder analizar el cambio de los hábitos de lectura. Para esto se buscó la posible correlación de “leer libros y revistas con otras actividades”. También, mediante el mismo instrumento, se buscó la posible correlación de “leer libros y revistas” con programas de televisión y con tipos de música. A continuación el autor describe los resultados de estas tres posibles correlaciones que también se presentan tabulados. (Págs. 65-67) - Para finalizar, en el último apartado donde se plantean conclusiones y recomendaciones el autor aclara que las conclusiones extraídas del análisis de los datos obtenidos son de carácter provisional, debido a la condición de aproximación inicial de naturaleza exploratoria de esta investigación, y que estas son válidas únicamente para la muestra estudiada. Las conclusiones que se centran en la lectura, muestran que leer libros y revistas es lo último que los estudiantes encuestados harían en su tiempo libre. La siguiente conclusión planteada por el autor, muestra que la lectura realizada en el tiempo libre de los adolescentes está asociada con otras actividades, donde prima el uso de aparatos electrónicos. En este sentido, el autor establece que los hábitos de lectura de los adolescentes han cambiado. El autor recomienda tomar este aspecto como una herramienta que necesariamente se debe incluir en el quehacer docente. (Pág. 69) “(...) el tema de la lectura como una actividad voluntaria, realizada en el tiempo libre de los adolescentes no ha sido estudiada con mayor profundidad.” ( Pág. 59) “El avance de la tecnología y el crecimiento imparable de los medios de comunicación y de Internet está transformando la manera como los estudiantes aprenden lo que les enseñan en el colegio y también como emplean su tiempo 44 libre. En este contexto es interesante saber cómo han cambiado los hábitos de lectura de los adolescentes en edad escolar.” ( Pág. 60) “Esta lectura voluntaria y libre se reflejaba en el interés de los adolescentes por los libros de aventuras, deportes, misterio y magia, guerras o inventos. Es decir, el tema de la lectura no respondía a una obligación que el alumno debía cumplir (...)” (Pág. 62) “Queda claro que la lectura voluntaria (también conocida como “lectura por placer”) no es una de las opciones preferidas por los adolescentes encuestados. Es más, el desinterés por la lectura voluntaria disminuye conforme se pasa de un grado a otro.” (Pág. 69) “(...) los hábitos de lectura de los adolescentes han cambiado. El clima propicio para la lectura (silencio y tranquilidad) ha sido reemplazado por otro caracterizado por los estímulos visuales y auditivos, los cuales afectan la concentración de los estudiantes y su capacidad de comprender lo que han leído.” (Pág 69) 45 Marco teórico: - Ausubel, D. (2000). Adquisición y retención del conocimiento. Barcelona: Paidós. https://issuu.com/luisorbegoso/docs/ausubel_-_adquisicion_y_retencion_d Ficha de lectura Lector: Alexander Etchichury. Título: Adquisición y retención del conocimiento. Autor: David P. Ausubel. Páginas: 25 - 48 Fecha de publicación: 2000 Lugar de publicación: España – Barcelona. Datos adicionales: Editorial Paidós. Traductora: Ganls Sánchez Barberán. Libro recuperado desde: https://issuu.com/luisorbegoso/docs/ausubel_-_adquisicion_y_retencion_d Tema: Aprendizaje significativo. David P. Ausubel dice: El aprendizaje significativo basado en la recepción supone principalmente la adquisición de nuevos significados a partir del material de aprendizaje presentado. Requiere tanto una actitud de aprendizaje significativo como la presentación al estudiante de un material potencialmente significativo. (2000, pág 25). En este capítulo el autor plantea que existen dos tipos de aprendizajes significativos basados en la recepción: el aprendizaje representacional, de conceptos y preposiciones, y aprendizaje subordinado, superordenado o combinatorio. Habla también de los procesos de aprendizaje significativo en contraste con los procesos de aprendizaje memorista. Del aprendizaje basado en la recepción frente al aprendizaje basado en el descubrimiento. 46 Habla sobre el lenguaje y su función de facilitador del aprendizaje significativo basado en la recepción y el descubrimiento. También postula que el proceso de este tipo de aprendizaje no se realiza de manera pasiva, sino que implica cierto grado de criticismo por parte del aprendiz. En otros apartados explica cómo y por qué el aprendizaje significativo se basa principalmente en la recepción y sin embargo difiere en varios aspectos de la enseñanza expositiva. También explica cómo se desarrolla el proceso de asimilación a través de tres etapas: anclaje de las nuevas ideas a la estructura cognitiva existente, la interacción entre las nuevas ideas con las ya incorporadas, y el enlace en la memoria de los nuevos significados emergentes con sus correspondientes ideas de anclaje. Desarrolla algunos aspectos particulares de este proceso y sucesivamente trata el tema de desarrollo cognitivo y preparación, destacando que la capacidad del estudiante para procesar ideas potencialmente significativas, es una función de su nivel evolutivo general referido a su capacidad o funcionamiento intelectual. Además, habla de las etapas de la madurez cognitiva y la preparación para aprender sosteniendo que esta influye sustancialmente en los procesos de aprendizaje. Por último, habla de la importancia del aprendizaje y la retención del carácter significativo en la educación. Según Ausubel estos dos aspectos son importantes para la educación porque son los mecanismos por excelencia para adquirir y almacenar la información. Y termina destacando la relevancia de la práctica en la enseñanza. Opinión: La teoría del aprendizaje de Ausubel nos es útil para teorizar algunos aspectos del aprendizaje en los adolescentes. Aprendizaje que puede reflejarse a la hora de seleccionar una lectura de índole recreativa. Además esta teoría nos permite comprender de qué manera podemos generar un contexto propenso para un aprendizaje sustancial. 47 - Cruces, Fernando.et at (2017). ¿Cómo leemos en la sociedad digital? España: Ariel y Fundación Telefónica. https://www.fundaciontelefonica.com/cultura-digital/publicaciones/como-leemo s-en-la-sociedad-digital/601/ Ficha de lectura Lector: Noelia Martínez Título: ¿ Cómo leemos en la sociedad digital? Lectores, booktubers y prosumidores Autor: Francisco Cruces (Dir.) et at. Fecha de publicación: 2017 Datos adicionales: Editada por Ariel y Fundación Telefónica, en colaboración con Editorial Planeta Páginas: Introducción, Capítulo 1.1 pp 13-20, Capítulo 2.2 pp 31-36 Tema: Se trata de una investigación sobre las formas de lecturas en la era de la digitalización, es un proyecto con foco etnográfico sobre las prácticas de lecturas de los jóvenes en el siglo XXI. Francisco Cruces (2017), director del proyecto, explica que dado que el panorama de la lectura está cambiando rápidamente, cabe preguntarse ¿de qué maneras leen los sujetos y en especial los jóvenes del siglo XXI? “En qué contextos y situaciones lo hacen; con quién comparten lo leído; qué posición ocupa esa dedicación en relación con las otras muchas cosas que nos permiten edificar una cotidianidad. El acto de leer no tiene que ver solo con los textos o los objetos por sí mismos, sino con lo que la gente hace con ellos, y en especial los jóvenes”(p.14) La lectura de los jóvenes, según Francisco Cruces, es un asunto activo y colectivo, él explica que dicha lectura “Es siempre social, activa, holística, corporal, constructiva, afectiva y sensual [...] marcada por una relación indisociable con la escritura, la interactividad, la sociabilidad, la imagen, la oralidad, el ritual, la educación sentimental, el espacio cotidiano, la movilidad, la proliferación de 48 dispositivos, la fragmentación de los tiempos y la multiplicación de ocasiones y motivos para leer.”(p.16) En el punto 2.1 cuyo título es “Cuando los adolescentes y los jóvenes tomaron la lectura”, el autor explica cómo, con base en diferentes investigaciones, se logra afirmar que el número de lectores jóvenes (de 12 a 20 años) ha aumentado significativamente y no solo eso sino que ellos han cambiado la manera de leer. “[...] la fuerte presencia de adolescentes y jóvenes en el mundo de la lectura como fuente de autoridad, ejerciendo tareas que tradicionalmente han realizado los adultos (los críticos literarios) y legitimando un «nuevo» canon (en el sentido de una lista de lecturas que hay que conocer y socializar).” (p.31) La explicación a este fenómeno se trabaja en detalle en el capítulo, lo que más nos interesa a nosotros, es el punto en que se aclara cómo se abrieron camino esas lecturas por placer entre la generación más joven. “El pasaje de los espacios mediados por adultos (la escuela o la biblioteca) a los espacios aparentemente libres (Internet).”(p.31) Estas lecturas voluntarias, libres -como le dice el autor- han provocado un cambio de paradigma, y en la comunidad juvenil [...] los cambios más llamativos tienen que ver con el tipo de lectura que consumen, con la sustitución de los mediadores adultos por los influencers, incluso con la forma de obtener los libros, ya que han pasado del préstamo bibliotecario o la compra en la pequeña librería (donde existía la mediación de un adulto especializado) a la plataforma de compra virtual Amazon. En definitiva, se han reemplazado los espacios tradicionales donde habitualmente se practicaba la lectura (la escuela y la biblioteca) por la Red o, dicho con otras palabras, los lectores adolescentes y jóvenes atraídos por los influencers se han mudado de los edificios de ladrillos a la nube, de las estructuras fijas a las estructuras líquidas. (p.32) Opinión: Este material aporta información, no solo teórica sobre el tema de la lectura juvenil, encarada desde una perspectiva social, sino que también actúa como un antecedente en lo que tiene que ver a la investigación, que se hace a una determinada población juvenil; la cual lee, escribe y socializa sus prácticas. Es de 49 destacar en este material, la afirmación de que la lectura juvenil ha aumentado, y que además estas lecturas voluntarias han roto con muchos paradigmas de siglos de tradición. Los jóvenes han yuxtapuesto sus gustos, ante las lecturas dirigidas por los adultos. En este material, se trabaja en profundidad en los procesos de socializar el hecho de leer, la transformación de la lectura privada y solitaria, a una conversación globalizada en foros y chats, con blogueros, influencers, speakers, tuiteros, booktubers y prosumidores. Ciertamente, este material tiene profunda relación con nuestra investigación y hace aportes significativos en muchos sentidos. 50 - Colomer, T. (2009). La educación literaria. En C. Armendano, & I. Miret, Lectura y bibliotecas escolares (págs. 73-82). Madrid: OEI. Ficha de marco teórico Gabriel Fernández Autor(a): Teresa Colomer Editorial: OEI Título: La educación literaria En C. Ciudad: Madrid Armendano, & I. Miret, Lectura y Páginas de referencia: 73 - 82 bibliotecas escolares Año: 2009 La autora aborda en este artículo la importancia de la literatura como asignatura en las instituciones educativas, y con ello, la relación entre la literatura y la cultura, así como la construcción de significados culturales con base en ella. Consideramos este artículo de suma importancia, puesto que establece una conceptualización de la literatura que puede sostener nuestra investigación. Esto se debe a que establece la conexión entre la cultura (en la cual están circunscritos nuestros estudiantes) y la literatura, y el entendimiento de distintas construcciones culturales a partir de ella, lo cual puede significar una motivación para la lectura. Colomer comienza delimitando la importancia de la enseñanza de la literatura en las instituciones educativas. Para esto, la autora propone recordar que el lenguaje es, esencialmente, aquello con lo que damos sentido a la realidad que “la literatura explora las posibilidades del lenguaje en múltiples ámbitos del saber y la experiencia” (pág. 73). Asimismo la autora afirma que, por este motivo, la educación de la literatura no puede ser relegada por asignaturas “más urgentes”, sino que lo urgente ha de ser “rescatar a la literatura de su anquilosamiento en antiguos modelos didácticos” y, parafraseando a la autora, alejar el objetivo de la educación literaria de la idea del traspaso de una especie de “legado cultural” donde se enseñan textos clásicos, sin prescindir completamente de ellos, sino actualizando la enseñanza de los mismos de una manera reflexiva; además, 51 plantea tener en cuenta la inclusión de nuevas maneras de exposición a la literatura (tales como la televisión, la consola, las computadoras y el cine) a las cuales los estudiantes pueden tener acceso. - Cano de Faroh, A. (2007). Cognición en el adolescente según Piaget y Vygotsky. ¿Dos caras de la misma moneda? Boletim Academia Paulista de Psicología, 158-166. https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=94627214 Ficha para marco teórico. Autor(a): Alida Cano de Faroh Título: Cognición en el adolescente según Piaget y Vygotsky. ¿Dos caras de la misma moneda? Editorial: Academia Paulista de Psicologia Ciudad: Sao Pablo Páginas de referencia: 158-166 Año: 2007 Vygotsky nos brinda importantes aportes a la hora de explicar la adolescencia y los cambios que se generan a nivel intelectual durante la misma. 52 En primer lugar para Vygotsky el adolescente es considerado ante todo como un ser pensante, al contrario de otros autores. Da vital importancia al desarrollo histórico cultural del adolescente y considera las funciones psíquicas superiores como producto de desarrollo histórico de la humanidad, considera que el aspecto clave para caracterizar el adolescente es la capacidad de asimilar el proceso de formación de conceptos, lo que da paso a una superioridad intelectual. Para estudiar el proceso de desarrollo de formación de conceptos, aplica el experimento “método de la doble estimulación funcional”, explicando que en él analiza el desarrollo y funcionamiento de los procesos psicológicos superiores mediante dos series de estímulos. El determinante esencial que obliga al sujeto a dar el paso decisivo en el desarrollo del pensamiento adolescente está considerado en aspectos externos al sujeto juegan ese papel. Con el desarrollo del pensamiento en conceptos, este va a cobrar un significado central, decisivo y básico para todas las funciones y procesos restantes. Los cuales se reestructurará debido a los éxitos que alcanza el pensamiento adolescente, influenciando la personalidad y a concepción del mundo de la persona que inicia esta etapa de transición. El hecho de que las funciones psíquicas superiores no fueran una simple continuación de las funciones elementales, ni tampoco su conjunción mecánica, sino una formación psíquica cualitativamente nueva que se atiene en su desarrollo a leyes especiales, a regulaciones totalmente distintas, no ha llegado aún a ser patrimonio de la psicología infantil (Vygotsky, 1931 – 1996) (pág. 160) El desarrollo de los procesos que pueden dar lugar más tarde a la formación de conceptos tiene sus raíces en la primera infancia, pero aquellas funciones intelectuales cuya combinación constituye el fundamento psíquico del proceso de formación de los conceptos maduran, se forman y se desarrollan sólo al llegar a la edad de la pubertad Vygotski (1934 – 1993) (pág. 160) (...) donde el medio no presenta al adolescente las tareas adecuadas, no le plantea exigencias nuevas, no despierta ni estimula el desarrollo de su intelecto mediante nuevas metas, el pensamiento del adolescente no 53 despliega todas sus posibilidades, no llega a alcanzar las formas superiores o las alcanza con gran retraso. (Vygotski, 1934– 1993) (pág. 160) - Cassany, D. (2006). Tras las líneas. Sobre la lectura contemporánea. Barcelona: Anagrama (págs. 21 - 43) https://www.academia.edu/39414225/Tras_las_líneas_Sobre_la_lectura_cont emporánea_EDITORIAL_ANAGRAMA_BARCELONA Ficha de lectura Lector: Noelia Martínez Autor: Cassany, Daniel Título: Tras las líneas. Sobre la lectura contemporánea Fecha de publicación: 2006 Datos adicionales: Editorial Anagrama, Barcelona, Páginas: pp. 01 - 43 Tema: ¿Qué es leer? Con esta pregunta, Daniel Cassany, inicia el primer capítulo del libro Tras las líneas... El autor explica que leer se ha convertido en un acto común y cotidiano, y que por esta razón, muchas veces no pensamos que sea un hecho dinámico, que pueda cambiar con el tiempo. Cassany propone repensar de lectura, como un acto que puede ser redefinido, teniendo en cuenta las nuevas dimensiones que la era digital nos proporciona. No se trata de ver cuáles son los mecanismos mentales (cognitivos) para conocer qué es esa acción a la que llamamos lectura, por que “quizá también usemos las mismas estrategias mentales que usaron nuestros padres para leer y escribir, pero está claro que los discursos de hoy, del siglo XXI, sirven para hacer cosas distintas.” (p.9) Cassany apunta a desmitificar la concepción arcaica sobre la lectura, donde se destacaba una posible universalidad del acto de leer. Es entonces cuando el autor plantea la siguiente pregunta “¿todos leemos del mismo modo?” (p.22). “Lo que hasta hoy sabemos sobre las destrezas cognitivas de la comprensión es muy importante [...]. Explica cómo funciona nuestra mente para comprender, cómo formulamos hipótesis y 54 hacemos inferencias, [...]. Pero nos dice más bien poco o nada del componente sociocultural, de las formas particulares que adopta la lectura en cada contexto”(p.23). El autor pone entonces, abordar la lectura como un hecho social, es decir, entender la lectura como algo que “[...] varía a lo largo de la historia, la de la geografía y de la actividad humana.[...] En cada lugar, en cada momento, leer y escribir han adoptado prácticas propias”(p.23) Bajo este paradigma la lectura, no es una cosa fija, mecánica ni universal, sino todo lo contrario “«Leer es un verbo transitivo» y no existe una actividad neutra o abstracta de lectura, sino múltiples, versátiles y dinámicas maneras de acercarse a comprender cada género discursivo, en cada disciplina del saber y en cada comunidad humana.” (p.24) Opinión: Este material aporta información teórica, necesaria para enmarcar nuestro trabajo de investigación. Es decir, es un punto de vista paradigmático, por medio del cual, podemos obtener herramientas importantes para nuestro proyecto. - Rodríguez Palmero, M. L. (2008). La teoría del aprendizaje significativo en la perspectiva de la psicología cognitiva. Barcelona: Octaedro. http://otrasvoceseneducacion.org/archivos/264940 Ficha de lectura Lector: Alexander Etchichury. Título: “La teoría del aprendizaje significativo en la perspectiva de la psicología cognitiva” Autor: David P. Ausubel. Organizadora: María Luz Rodríguez Palmero. Páginas: 7 – 46. Fecha de publicación: 2008. Lugar de publicación: España: Barcelona. Datos adicionales: © Derechos exclusivos de edición: Ediciones Octaedro, S.L. © De la presente edición: Ediciones Octaedro, S.L. C/ Bailén, 5 - 08010 Barcelona Tel. 93 246 40 02 Fax 93 231 18 68 e-mail: octaedro@octaedro.com http://www.octaedro.com/. PDF: 55 https://drive.google.com/file/d/1-LD6Vp6OS5tTRHMV-Oak03nb8MrG2FTs/view?usp =sharing Tema: Aprendizaje significativo. David P. Ausubel es el creador de la Teoría del Aprendizaje Significativo, una teoría que ha tenido una gran trascendencia en la enseñanza y en la educación. Es una teoría de aprendizaje que centra la atención en el alumno. Aprendizaje significativo, su constructo esencial, constituye una pieza clave para comprender el constructivismo moderno. (Palermo, 2008, pp 7) En este capítulo se aborda el concepto de “aprendizaje significativo” desde una postura crítica. Primero se lo define como el proceso en el que se relaciona un nuevo conocimiento con la estructura cognitiva de la persona que aprende. Se plantea que el resultado de este proceso, el enriquecimiento de los conocimientos anteriores y de los nuevos que se incorporan a la estructura cognitiva, también forma parte de lo que denominamos “aprendizaje significativo”. Tal enriquecimiento resulta de la interacción en el proceso de asimilación. En este capítulo se postula también que para el éxito de este proceso deben darse dos condiciones: predisposición para aprender de una manera significativa y la presentación de un material potencialmente significativo. Además, estas dos condiciones tienen que estar acompañadas por un conocimiento claro, estable y preciso que funcione de anclaje para la nueva información, cobrando principal importancia la estructura cognitiva del individuo. También se presentan los diferentes tipos de “aprendizaje significativo” de acuerdo a al criterio que se considere. Si nos centramos en el objeto aprendido podemos clasificar aprendizaje representacional, de conceptos y preposicional. Si nos centramos en la organización jerárquica de la estructura cognitiva, los tipos de aprendizaje que tenemos son: subordinado, superordenado o combinatorio. El lenguaje es considerado, en lo que refiere al proceso de aprendizaje, cómo vehículo o facilitador. Se mencionan las aportaciones de Novak a la teoría del aprendizaje significativo, entre ellas, el carácter humanista. También se mencionan los aportes de Gowin que 56 plantea la responsabilidad compartida en el proceso de aprendizaje, considerando que hay cuestiones que le corresponden a los docentes y otras a los alumnos. Además, propone la compatibilidad de la teoría del aprendizaje significativo con otras teorías del constructivismo. Incluso, se habla de la criticidad en el proceso de aprendizaje significativo, donde variables como las motivaciones, intereses y predisposición del aprendiz, adquieren gran importancia. Encontramos también, un apartado en el que se reflexiona sobre el uso adecuado algunos términos y expresiones que encontramos en la definición de aprendizaje significativo: Actitud de aprendizaje, subsumidores, material de aprendizaje, tiempo, corrección, facilitación, lenguaje e interacción. Hablando de algunos aspectos de naturaleza pedagógica Palermo dice: “Se trata, pues, de una teoría constructivista dinámica, en la que es la propia persona la que determina si quiere aprender significativamente o no. En este contexto, y precisamente por lo expuesto, adquiere especial importancia el hecho de que como docentes seamos capaces de lograr una predisposición favorable…” (2008, pp 38). Palermo explica que la teoría de Ausubel sigue siendo un referente teórico vigente pero aún así tiene sus limitaciones, cómo por ejemplo que trata sólo de algunos <cómo> y de algunos <por qué> de los procesos de atribución de significado. Otra falencia que encuentra la autora es que nos es convincente a la hora de explicar cuestiones referidas a los mecanismos o procedimientos implicados en la interacción. Opinión: los conceptos de esta fuente nos serán útiles cuando estudiemos los tipos de lecturas de los estudiantes, cómo llegaron a ellas, sus motivaciones y su vínculo o no con las lecturas brindadas por el centro educativo. Podríamos llegar a visualizar cómo un aprendizaje significativo influye sobre la elección de las lecturas recreativas. 57 Metodología de la investigación: - Achilli, E. (2009). El proceso de investigación. En E. Achilli, Módulo: Taller de investigación (págs. 24-38) Ficha de lectura Lector: Alexander Etchichury. Título: “EL PROCESO DE INVESTIGACIÓN (iniciando el proceso de construcción de una problemática a investigar)”. Autor: Elena Libia Achilli. Páginas: 24 – 38. Fecha de publicación: 2009. Datos adicionales: Modulo: Taller de investigación.PDF: https://drive.google.com/file/d/16FzfB7sfs23ZjTh9jMYCD00VsbM2GZb9/view?usp=s haring Tema: En este módulo se plantean y explican los elementos constitutivos de un proyecto de investigación: A- Tema, preguntas de investigación. (Achili, 2009) BFormulación del problema y sus implicancias: búsqueda de antecedentes, revisión bibliográfica y contacto con el campo empírico. C- Los objetivos (generales y específicos), diferenciación entre objetivos y propósitos. D- Los referentes conceptuales: funciones de los referentes teóricos y los antecedentes. E- El diseño metodológico, las tres resoluciones que supone. F- Los referentes empíricos, aclaraciones sobre el recorte del universo geográfico y poblacional. I- Selección de estrategias de recolección/construcción y análisis de la información, posibles opciones para desarrollar el proceso de investigación. J- Cronograma y recursos necesarios, actos meramente burocráticos. También habla de la idea de proceso, movilidad/transformación en el desarrollo de la investigación. 58 Opinión: Este material es útil para organizar y ordenar el documento investigativo, además de servir para diferenciar y comprender los diferentes elementos constituyentes de la investigación. 59 - Ander-Egg, E. (1995). Técnicas de investigación social. Buenos Aires: Lumen. https://epiprimero.files.wordpress.com/2012/01/ander-egg-tecnicas-de-investi gacion-social.pdf Ficha de metodología Gabriel Fernández Autor(a): Ezequiel Ander-Egg Editorial: LUMEN Título: Técnicas de investigación social Ciudad: Buenos Aires Año: 1995 Páginas de referencia: 29-39 Ander-Egg plantea en el capítulo 5 los elementos básicos del método científico, elementos que sustentarán gran parte de nuestro proceder en la investigación presente. -En el apartado titulado “El sistema conceptual” el autor establece la diferencia entre el sistema conceptual de las ciencias naturales y las ciencias sociales. Si bien ambas son ciencias, y por lo tanto comparten el método científico, los conceptos que se manejan tienden a ser distintos por la propia naturaleza de cada ciencia. -En el apartado bajo el nombre “La definición”, Ander-Egg menciona los distintos tipos de definiciones que pueden ser utilizados en la ciencia, no sin antes mencionar que, en términos generales, en la ciencia se aplica la definición operacional. -A continuación el autor procede a explicar qué es una hipótesis, las cinco formas de realizar una hipótesis, los siete tipos de hipótesis (varían según el criterio que se utilice). Así mismo, y citando a Bunge, menciona los cuatro niveles conjeturales de una hipótesis. Continuando con su cita a Bunge, Ander-Egg plantea los 60 distintos tipos de producción de hipótesis, es decir, el nivel de precisión y detalle que tiene una hipótesis al ser planteada. Para finalizar con la hipótesis, el autor menciona las características esenciales que debe tener la misma, siendo estas las siguientes: respuesta probable; claridad conceptual; operacionalidad; generalidad y especificidad (cualidades antitéticas que deben mantenerse "en un adecuado y prudente equilibrio"); referencia empírica, comprobabilidad y refutabilidad; referencia a un cuerpo de teoría. -En el siguiente apartado, Ander-Egg aborda las variables, un concepto que es extraído de las matemáticas (más precisamente de los estudios estadísticos) y que suele utilizarse con cierta elasticidad en las ciencias sociales. Continúa definiendo los distintos tipos de variables (los cuales dependen de la forma en que se presenten las mismas) siendo estas las siguientes: cualitativas o cuantitativas; continuas o discontinuas; dependientes o independientes; explicativas o externas; generales, intermedias o empíricas. -Para finalizar el capítulo, el autor define a los indicadores, los cuales son un instrumento operacional que, como su nombre establece, indica las subdimensiones de las variables. “En el ámbito de las ciencias, las hipótesis son tentativas de explicación de los hechos y fenómenos a estudiar que se formulan al comienzo de una investigación mediante una suposición o conjetura verosímil destinada a ser probada por la comprobación de los hechos”. (pág. 33) “Constituyen un elemento básico de las hipótesis puesto que éstas se construyen sobre la base de relaciones entre variables referentes a determinadas unidades de observación.” (Sobre las variables. pág. 36) 61 - Hernández Sampieri, R., Fernández Collado, C., & Baptista Lucio, P. (2014). Metodología de la investigación. México: McGraw-Hill. https://www.uv.mx/personal/cbustamante/files/2011/06/Metodologia-de-la-Inv estigaci%C3%83%C2%B3n_Sampieri.pdf Ficha de metodología Manuela Viera Autor(a): R. Hernández Sampieri, C. Fernández Collado y P. Baptista Lucio Título: Metodología de la investigación Editorial: McGraw-Hill Ciudad: México Páginas de referencia: - Año: 1991 El libro Metodología de la investigación busca ser, en palabras de sus autores, una guía paso a paso para la realización de investigaciones sociales. Está pensado desde una perspectiva didáctica, para ser utilizado en todo tipo de cursos y seminarios sobre investigación o metodología. Su enfoque incluye las ideas más básicas (como el concepto de investigación) y abarca todas las etapas posibles que una investigación debe poseer. Todo esto -sumado a la sencillez de su escritura, lo que facilita la lectura y su comprensión- son motivos suficientes para que sea tomado como libro metodológico de referencia en nuestra investigación. - En la introducción, los autores de este libro establecen que dentro de él, hallaremos todos los pasos necesarios para poder llevar a cabo una investigación social y todas las actividades que el investigador (o grupo de investigación) debe realizar en cada etapa. - El tipo de investigación a la que se avoca el libro es la investigación científica. 62 - Los autores también mencionan que como la investigación científica es un proceso, implica una serie de etapas para su ejecución que se deben respetar rigurosamente. De otra forma, la investigación puede verse seriamente afectada, incluso considerarse no válida. - El libro consta de la introducción y once capítulos que describen esta serie de etapas antes mencionadas, y las nociones más importantes necesarias para futuras investigaciones. - Capítulo uno: “La idea: nace un proyecto de investigación”. - Capítulo dos: “El planteamiento del problema: objetivos, preguntas de investigación y justificación del estudio”. - Capítulo tres: “La elaboración del marco teórico: revisión de la literatura y construcción de una perspectiva teórica”. - Capítulo cuatro: “Definición del tipo de investigación a realizar: básicamente exploratoria, descriptiva, correlacional o explicativa”: - Capítulo cinco: “Formulación de hipótesis”. - Capítulo seis: “Diseños experimentales de investigación: preexperimentos, experimentos ‘verdaderos’ y cuasiexperimentos”. - Capítulo siete: “Diseños no experimentales de investigación”. - Capítulo ocho: “¿Cómo seleccionar una muestra?” - Capítulo nueve: “Recolección de los datos”. - Capítulo diez: “Análisis de los datos”. - Capítulo once: “Elaboración del reporte de investigación”. 63 “La investigación científica es esencialmente como cualquier tipo de investigación, sólo que más rigurosa y cuidadosamente realizada. Podemos definirla como un tipo de investigación ‘sistemática, controlada, empírica, y crítica [...] Es decir, llevar a cabo una investigación científica es hacer investigación en forma cuidadosa y precavida.” ( Págs. XXI-XXII). “Con la aplicación del proceso de investigación científica se generan nuevos conocimientos, los cuales a su vez producen nuevas ideas e interrogantes para investigar, y es así como avanzan las ciencias y la tecnología.” (Pág. XXIV) Hipervínculos de las fichas de lectura: Ficha de Antecedentes - Antonela Lazo Ficha de Antecedentes - Manuela Viera Ficha de Antecedentes II - Manuela Viera Ficha de Marco teórico - Alexander Etchichury Ficha de Marco teórico - Noelia Martínez Ficha de Marco teórico - Gabriel Fernández Ficha de Marco teórico - Antonela Lazo Ficha de Marco teórico II - Noelia Martínez Ficha de Marco teórico II - Alexander Etchichury Ficha de Marco Teórico III - Alexander Etchichury Ficha de marco teórico IV - Alexander Etchichury Ficha de marco teórico V - Alexander Etchichury Ficha de Metodología - Alexander Etchichury Ficha de metodología - Gabriel Fernández Ficha de Metodología - Manuela Viera 64 Tablas de antecedentes y marco teórico Ficha de antecedente s Nº1 Título País Autor/es Año Población y metodología Aportes empírico s Aportes teóricos Cuál es la relación con el estudio que se propone Aportes a la justificaci ón Lectura de frontera y frontera de la lectura España (Barcelona ) Colomer, Teresa 2009 Primera parte: PAdolescentes cursando educación secundaria (cerca de un millar de chicos y chicas entre los 12 y 16 años en el municipio de Cerdanyola de Vallès). MCuestionario sobre lectura libre. -----------------Segunda parte: PInvestigadores de educación y docentes de educación secundaria y universidad MCotejo de programas curriculares oficiales de 7 países. Interrogación por medio de cuestionario a investigadores. Cuestionario a diferentes sectores del profesorado de secundaria y universidad. Las respuestas se completaron - Conceptualiz ación de adolescencia y de lectura. Por ser solo un avance del libro que contiene la investigación , el aporte de este antecedente a nuestro estudio es más bien teórico. La explicación que allí se propone sobre los hábitos lectores adolescentes (cambios sufridos, mediadores que los influyen, relacionamie nto con el ámbito escolar) se relaciona directamente con el problema que nos proponemos estudiar en nuestra investigación . Brinda un panorama inicial a nuestra investigaci ón, es una óptica desde la cual podemos posicionar nos para entender los hábitos lectores de los adolescent es. Con base en este tipo de informaci ones podremos selecciona r un enfoque metodológ ico adecuado para poder llevar a cabo nuestro estudio de la lectura adolescent e en la ciudad de Florida. Aspectos históricos, sociales y culturales que influyen en los hábitos lectores de la población adolescente. Relacionamie nto de adolescencia y lectura (y elementos que funcionan como mediadores entre ambos elementos). El contexto cultural, escolar y social como ejes. 65 con debates en grupo. Ficha de antecedente s Nº2 El desencuentr o entre los adolescente s y la lectura España (Huelva) Pindado Málaga, Julián 2004 PAdolescentes malagueños. MEncuesta. Cifras sobre el porcentaj e de consumo de medios escritos por niveles y género. Cifras sobre lecturas preferida s por género. Este estudio nos muestra que la lectura como un acto placentero se convirtió en una práctica minoritaria entre los adolescentes, teniendo como uno de los principales motivos la oferta de ocio electrónico. Aporta posibles categorías a utilizar en nuestra investigación , debido a que el tema de interés es el mismo en ambos casos (la lectura recreativa en adolescentes) . Plantea por ejemplo, la posibilidad de incluir la lectura de diarios y revistas (y no solo de libros de literatura tradicional). Además nos hace poner el foco en la influencia del “entorno electrónico que envuelve al adolescente”, que en la actualidad es un medio de suma importancia por donde se practica la lectura recreativa por parte de adolescentes. De esta investigaci ón obtenemos datos concretos de varios puntos que queremos resolver en nuestro propio estudio. Podemos tomar las conclusion es a las que se llegó, y mediante nuestra investigaci ón comprobar si estos elementos han cambiado o hay datos que se mantienen constantes . También sabemos que la influencia tecnológic a hoy, 16 años más tarde es tremenda mente mayor, será interesante ver cómo esto se manifiesta en los resultados. 66 Ficha de antecedente s Nº3 Hábitos de lectura de los adolescente s peruanos: nuevas perspectiva s Colombia (Medellín) Vílchez Román, Carlos M. 2003 P325 estudiantes varones de primer y segundo grado, pertenecientes a un colegio particular religioso. MCuestionario y coeficiente R de Spearman. Aproximación inicial de naturaleza exploratoria. “El 34.8% de los encuesta dos reveló que lo último que haría sería leer libros o revistas” Correlaci ón de leer libros y revistas con otras actividad es. Correlaci ón de leer libros y revistas con program as de televisió n y con tipos de música. La investigación muestra un cambio en los hábitos de lectura de los adolescentes. Dentro de las actividades preferidas por los adolescentes para realizar en su tiempo libre, la lectura ocupa los últimos lugares. El autor también incluye la oferta tecnológica como un factor a tener en cuenta respecto a este cambio, y recomienda buscar formas de abordar esta problemática en el aula. Es interesante tomar este antecedente como referencia porque pertenece al nivel regional y aborda la temática que nosotros nos proponemos investigar, aunque desde una perspectiva más amplia. Si bien es bastante antiguo, los datos que arroja de la investigación nos servirán para realizar comparacion es, ampliando la muestra (incluyendo a mujeres) y aumentando el rango de edad. Este estudio revela que a los adolescent es no les gusta leer en su tiempo libre, por tanto no realizan, en su mayoría, lecturas espontáne as. Una de nuestras hipótesis y uno de los principale s motivos impulsore s de este estudio es la firme creencia de que los adolescent es sí leen, mucho más de lo que en el imaginario colectivo se cree. Considera mos que les gusta leer y que poseen una oferta considerab lemente alta para hacerlo. Por tanto, tomaremo s las conclusion es de este estudio previo para ver que tanto ha cambiado 67 el panorama sobre esta temática. Estudiante Título Autor Año Aporte Conceptual Aporte a la justificación Alexander Etchichury Adquisición y Ausubel, D. 2000 Teoría del aprendizaje significativo La teoría del aprendizaje de Ausubel nos es útil para teorizar algunos aspectos del aprendizaje en los adolescentes María Luz Rodríguez Palmero 2008 -Se complementa con nuevos conceptos la teoría del aprendizaje significativo planteada por Ausubel -Se establece una relación entre la teoría del aprendizaje significativo y la teoría del aprendizaje cognitivo Los conceptos de esta fuente nos serán útiles cuando estudiemos los tipos de lecturas de los estudiantes, cómo llegaron a ellas, sus motivaciones y su vínculo o no con las lecturas brindadas por el centro educativo. Podríamos llegar a visualizar cómo un aprendizaje significativo influye sobre la retención del conocimiento Alexander Etchichury La teoría del aprendizaje significativo en la perspectiva de la psicología cognitiva 68 elección de las lecturas recreativas. Antonela Lazo Cognición en el adolescente según Piaget y Vygotsky. ¿Dos caras de la misma moneda? Noelia Martínez Tras las líneas. Sobre la lectura contemporánea Cano de Faroh, Alida. 2007 -Plantea la potencialidad del pensamiento adolescente siempre y cuando sea expuesto a los estímulos necesarios que propicien su progreso intelectual Vygotsky nos brinda importantes aportes a la hora de explicar la adolescencia y los cambios que se generan a nivel intelectual durante la misma. Puesto que nuestra investigación se centra en este rango etario, hallamos esencial este material. Cassany, Daniel. 2006 -Conceptuali za y replantea el significado de “leer” en el siglo XXI - Este material aporta información teórica, necesaria para enmarcar nuestro trabajo de investigación. Es decir, es un punto de vista paradigmático, por medio del cual, podemos obtener herramientas importantes 69 para nuestro proyecto. Noelia Martínez ¿Cómo Francisco 2017 -Plantea de qué manera leen los jóvenes en el siglo XXI Este material es considerado relevante debido al rango etario sobre el cual se ha realizado la investigación que lo sustenta y por los resultados de la misma. 2009 -A través del planteo de una función del lenguaje (dar sentido a la realidad) la autora plantea la esencialidad de la literatura -Se plantea una relación entre la literatura y la cultura más allá de ser un “legado” -Expone nuevas formas de interactuar con la literatura que tienen estrecha relación con la motivación de los estudiantes Consideramos este artículo de suma importancia, puesto que establece la conexión entre la cultura (en la cual están circunscriptos nuestros estudiantes) y la literatura, y el entendimiento de distintas construcciones culturales a partir de ella, lo cual puede significar una motivación para la lectura. leemos en la Cruces (Dir.) et sociedad al. digital? Lectores, booktubers y prosumidores Gabriel Fernández La educación literaria En C. Armendano, & I. Miret, Lectura y bibliotecas escolares Colomer, Teresa. 70 Gráficas representativas de los resultados de la encuesta 71 72