ALCACHOFA La alcachofa es una de las verduras de temporada del otoño y el invierno, ya que su recolección abarca desde octubre hasta abril. Se trata de un alimento muy completo, ya que además de poderse cocinar de un sinfín de formas, las propiedades de la alcachofa son muy beneficiosas para el ser humano. La alcachofa es en realidad la flor, no madura, de la alcachofera. Su forma se asemeja a un conjunto de hojas en forma de escamas, unas superpuestas encimas de las otras. Y a pesar de que existen miles de variedades, pocas de ellas se cultivan. Esta verdura tiende a ser de color verde en la mayoría de los casos, aunque también las hay de color violeta. Entre los países con mayor producción de alcachofas en el mundo se encuentra España. Concretamente las zonas de Murcia y Comunidad Valenciana son las que más alacchofas cultivan. Dentro de nuestra territorio se cultivan y producen más de 30% de las alcachofas del mundo, siendo el segundo país más productor de este producto. Por encima solo está Italia, aunque Francia y las zonas del norte de África también son lugares en los que la alcachofa se produce en grandes cantidades. En definitiva, los países de la cuenca del mediterráneo son los que más lo cultivan. Estamos hablando de un alimento histórico, ya que se tiene constancia de él desde tiempos egipcios. Ya por aquél entonces se valoraba enormemente su composición, con unas propiedades de la alcachofa que beneficiaban el organismo de las personas. Su alto contenido en agua, fibra e inulina lo relacionan directamente con un producto positivo para la digestión, la quema de grasa y el control del colesterol. Las propiedades de la alcachofa para prevenir el colesterol alcachofas-fritas-02 Una de las enfermedades cardiovasculares más comunes en la actualidad es, sin duda el colesterol. Se trata de un problema que, a su vez, puede derivar en otras enfermedades más graves, como la angina de pecho o el infarto de miocardio. El sedentarismo y un consumo muy elevado de grasas animales pueden propiciar un colesterol más alto, mientras que existen otras prácticas alimentarias que pueden ayudar a prevenirlo e incluso, reducirlo. Esto es lo que ponen de manifiesto diferentes estudios, como por ejemplo este titulado ‘Utilidad del extracto de hojas del alcuacil en el tratamiento de la hipercolesterolemia’, de una alumna de Nutrición de la Universidad Isalud de Argentina. De él se desprende que las hojas de la alcachofa,“tanto en gotas, en cápsulas o también en la versión de extractos secos está recomendado para el tratamiento del colesterol elevado leve a moderadamente en sangre”. En este estudio también se matiza que esta efectividad está ligada a personas con índices de colesterol leves o moderados. Por lo tanto, se recomienda su consumo para este fin a este grupo de personas, así como a aquellas que quieran prevenir esta enfermedad. También son susceptibles de tomar hojas de alcachofa quienes tengan elevados índices de colesterol, dado que no es algo negativo, aunque en estos casos deberán completar un tratamiento recomendado por su médico, ya que la efectividad no es tan acusada con el consumo único de hojas de alcachofa. Lo mismo manifiesta este otro estudio, en este caso proveniente de una investigación de la Universidad de Reading, Reino Unido.