República Bolivariana de Venezuela Ministerio del Poder Popular Para la Educación Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora UNELLEZ Vice-Rectorado de Planificación y Desarrollo Social Programa de Ciencias Sociales y Jurídicas. Aldea Universitaria del Municipio Sosa - Barinas. ENSAYO III DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO Cátedra: Derecho Internacional Privado. Profesor: Luis Escobar. Abogado. Alumno: Iván José Pérez Molero. Ciudad de Nutrias, octubre de 2020. Resumen El Derecho internacional privado comprende un conglomerado de normas que rige las relaciones de las personas en el ámbito internacional. Su objeto de estudio son las normas internas y determinar cuál norma o derecho aplicable a una persona. En este ensayo investigativo, tocaré todo lo relacionado a la norma Iusprivatista o norma de colisión, así como su estructura, sus clases, análisis del factor de conexión, estructura de la norma de colisión, la función de la norma de colisión, clasificación de las normas indirectas, y los problemas de las normas indirectas. Cada uno de esto tópicos los desarrollaré de forma breve y específica a fin de que sea de fácil compresión y entendimiento. Definitivamente; introducirse con buen pie por la senda propuesta en el presente trabajo, exige diferenciar y manejar de entrada el objeto del mismo, el cual no es otro que el de analizar la norma indirecta que rige en el Derecho Internacional Privado, y las distintas normas que rigen en el concierto de naciones y derechos existentes, claro está, sin quedarse anclado en la simple diferenciación y manejo de dichas causas. La dinámica propia de la investigación y los temas ya identificados en el resumen ut supra expuesto, permiten agregar valor a los elementos asignados. El balance investigativo de todos estos tópicos, debe indefectiblemente ser rico en dudas, cuya investigación debe saldar con las debidas respuestas y paráfrasis para el desarrollo y desenvolvimiento de los temas aquí presentados. Algunos de los planteamientos no requerirán mayores comentarios, otros, en cambio sí. Estos últimos trataré de analizarlos en forma más exhaustiva. Al final de esta indagatoria, incluiré adicionalmente un esbozo con mi opinión, en atención a los temas aquí expuestos y escritos. Cargado de todas estas tareas, acometo el inicio de esta labor, con el enorme deseo de responder a las necesidades propias como estudiante, por un lado, y por el otro, el de corresponder a las preocupaciones y altas expectativas que ha transmitido el docente a sus alumnos, viendo en esta materia un ámbito importante para el ejercicio profesional y un campo inagotable para la investigación. A ello debo sumar el desafío en tanto que, a los fines de cubrir las exigencias profesorales, deberé analizar con la cognición necesaria, las diversas implicaciones que la temática arroja en el amplísimo campo del DIPr., sobre manera, cuando se aborda un área específica y emblemática como lo representan el conglomerado de normas que rige las relaciones de las personas en el ámbito internacional, las norma Iusprivatista, sus clases y el análisis de sus factores de conexión. Entraré en materia de forma directa para abordar la Norma Iusprivatista Internacional, desarrollando frontalmente la Teoría de la Norma de Derecho Internacional Privado, su Definición, Estructura y sus clases. 1 Teoría de la Norma de Derecho Internacional Privado Existe una gran discusión acerca de la naturaleza o carácter principal de las Normas de Derecho Internacional Privado, ya que se toma en cuenta las posiciones que deben tomar dos Estados que se encuentran en duda acerca de la aplicación de un ordenamiento jurídico u el otro. Sin embargo, al llegar a la conclusión de cuál será el correcto ocurre una extra limitación al principio de territorialidad mencionado anteriormente, en donde un Estado asume según (Contreras Vaca, 2006 pp 91), “el rol de Estado pasivo, en donde debe permitir que otro Estado, el cual asume el rol de Estado activo, aplique una norma de su ordenamiento jurídico en él, situación que comúnmente sería romper la brecha en cuanto al principio de no intervención de Estados Extranjeros. Pero es esta la excepción debido a que el Estado activo sí se ve inmerso en el conflicto en mano, ya sea porque involucra a uno de sus nacionales o porque involucra a extranjeros que estuvieron en su territorio en un tiempo dado y ahora se encuentran en el Estado pasivo”. De allí que exista la necesidad de la aplicación extraterritorial de la norma, la cual posee dos aspectos: Activo: la norma jurídica de un Estado penetra, con vigencia, en el territorio de una entidad estatal diversa; y, Pasivo: el Estado sin sentir afectada su soberanía, permite la introducción de una norma extraña a su sistema jurídico. “Esta necesidad es imprescindible debido a que un Estado que tratase de evitar la aplicación en su territorio de la norma jurídica extranjera, o que no quisiera, la aplicación en el extranjero de sus disposiciones legales se aislaría jurídicamente. No se puede pensar en esto ya que todo país requiere del comercio internacional y al realizarse el intercambio de satisfactores entre naciones existen relaciones jurídicas entre sujetos de diversos países que ocasionarían problemas de elección entre normas jurídicas pertenecientes a otros Estados. Sin embargo; existe la posibilidad en que se pueda dar una extensión dentro del derecho Internacional Privado, ya que le corresponde a este derecho la facultad de determinar la norma jurídica aplicable en una relación jurídica que admite la posibilidad de regirse por reglas de Derecho de dos o más países y si tal situación concreta puede estar regida por normas de naturaleza civil, mercantil, administrativa, fiscal, constitucional, laboral, agraria y penal, dada la indudable y amplísima extensión del Derecho Internacional Privado”. (GOLDSCHMIDT, 1972, acápite último). La Teoría general del derecho internacional privado gira alrededor de la llamada regla de conflicto en sumaria pero expresiva terminología, que enfoca la estructura de la norma, fundamento, naturaleza, objeto, extensión y efectos. Para llegar a la aplicación cabal de la regla de conflicto deben resolverse varios problemas como el de las calificaciones, las cuestiones preliminares y el reenvío. Esclarecidos dichos problemas propios, que giran alrededor de la interpretación de la regla de conflicto, se habrá llegado a puerto, porque habrán determinado con precisión cuál es el derecho aplicable a la relación jurídica compleja en examen. Estarán entonces (así lo percibo), en el tema fundamental, nervio y vida de la disciplina: la aplicación del derecho extranjero, así precisado y delimitado. Luego surgirán otros problemas específicos, pero ya posteriores a la aplicación de la regla de conflicto, y que podrían llegar a excluir el derecho extranjero indicado por esa regla: el orden público y el fraude a la ley. Dentro de la teoría general de la materia, la norma de derecho internacional privado, o la llamada regla de conflicto o norma de colisión, ocupa lugar destacado. Es que a través de ella llegamos al derecho extranjero, graduamos su aplicación o la impedimos. La extraterritorialidad del derecho es la sustancia del derecho internacional privado, su razón de ser. Para que exista el caso Iusprivatista internacional, la relación jurídica en cuestión debe tener uno o más elementos extraños al derecho local. Sobre la base de la comunidad jurídica de los Estados y del respeto a la personalidad humana se trabaja en procura del progreso científico de nuestra ciencia. Los esfuerzos de los juristas y, particularmente, de los internacionalistas, tienden a ese fin. Del mismo modo, en el seno de las organizaciones colectivas, como la extinta Sociedad de las Naciones y la actual entidad Naciones Unidas, que son estructuras de armonía, de convivencia pacífica y de buena fe, existen instrumentos, comisiones, organismos, que tratan de lograr aquella finalidad. Por eso el problema de la aplicación del derecho extranjero y de la naturaleza de la norma de colisión es analizado intensamente y las teorías a su respecto tienen amplia difusión. Basta para comprobarlo una rápida ojeada a la doctrina tradicional y a las corrientes contemporáneas. ¿De qué se trataba, por ejemplo, en la época estatutaria? De clasificar estatutos, de encasillar los casos en el estatuto real, personal, mixto, es decir, de resolver, en definitiva, a su manera y con su método, la mayor o menor medida en que un estatuto se extra territorializaba. En las escuelas clásicas de Mancini o de Savigny nos hallamos igualmente en presencia de la aplicación del derecho extranjero, ya nos enfrentemos con el derecho necesario o voluntario de Mancini, ya nos atengamos a la regla savigniana, tan enriquecedora y trascendental, de aplicar a cada relación jurídica el derecho más conforme con su naturaleza propia y esencial, sea nacional o extranjero. En cuanto a las corrientes contemporáneas, a decir de (Alvarez Gonzalez, 2014), “basta la lectura de las grandes elaboraciones doctrinales de Maury, Yanguas Messia, Frankenstein, Nussbaum y Goldschmidt, por ejemplo, para advertir cómo ponen el acento en la aplicación del derecho extranjero, así como en la estructura y naturaleza de la regla de conflicto. A ella se vinculan los grandes problemas de calificaciones. cuestión previa, reenvío. orden público, fraude a la ley: sobre su base habrán de analizarse las grandes cuestiones de la naturaleza, objeto y método de la materia”. En concreción; esta teoría me dice que, ese derecho extranjero que la ley ordena que se aplique, es derecho en cualquier parte, no solamente en el país donde el mismo fue creado, sino que al salir de ese país sigue siendo derecho, y esto es entendible al formar parte del concierto de naciones entendidas como una comunidad internacional organizada jurídicamente, donde los países que forman parte de dicha colectividad, no permiten que procesalmente traten los Derechos que les atañe como hechos, sino que por el contrario y como corresponde, se le otorgue el trato internacional acorde según el Estado de Derecho, verificando que se aplican esos Derechos de oficio, sin invocaciones ni dilaciones innecesarias. Ahora bien, esta teoría tiene dos vertientes a su vez, es decir, hay dos posibilidades de implementar este derecho, se puede ejercer como un Derecho Extranjero Propiamente Dicho, o se le puede tratar de tal manera que se convierta en un Derecho Nacional, estas son las vertientes: Como un Derecho Extranjero Propiamente Dicho: A la hora de aplicarse, tendrá que hacerse de acuerdo a como se hace o plica en el país del cual la normativa procede. No habiendo duda en cuanto a que el derecho extranjero es un Derecho, al momento de aplicarlo debe tratársele como un derecho extranjero, por tanto, es necesario indagar como se aplica dicha norma en el país en cuestión, como las interpretan, qué sentido tienen, que alcance poseen; y, en función de eso, aplicarlas en suelo propio. Para investigar el alcance de esas normas, se deberá no solamente estudiar el tenor de las mismas, sino también, consustanciarse con su exposición de motivos, su contenido y el sentido de dichas normas, para garantizar su correcta aplicación y desenlace, en definitiva; y, Como un Derecho Nacional: Esta posibilidad varía al ser un derecho extranjero para aplicarse a lo interno, aquí debe incorporarse directamente a nuestra legislación nacional cuando la norma lo dicte o determine. Al dársele cabida, al estudiar esas normas, deben ser consideradas automáticamente como parte de nuestro ordenamiento y como tal deben ser interpretadas y aplicadas. A partir de lo explorado en los párrafos que anteceden, bien podríamos preguntarnos, de estas dos teorías ¿Cuál acoge Venezuela? o ¿Cómo se aplica el derecho extranjero en Venezuela según su legislación? Las respuestas a estas interrogantes se aclaran, con la consulta del articulado contenido en la Ley de DIPr., en sus disposiciones 2, 60 y 61sucesivamente. En el caso del artículo 60, concatenado con los apartados 408, 409, 410 y 411 del Código de Bustamante. En cuanto al artículo 61, enlazado con el 412 ejusdem. De este conjunto de artículos se desprende como se aplica el derecho extranjero según la legislación venezolana, no solamente según la ley de DIPr., sino también, del Código de Bustamante que los obliga y es derecho en Venezuela. Concebido como rama del derecho, el internacional privado ha provocado múltiples discusiones entre diversidad de autores. No sólo por su contenido y la delimitación de sus propias normas, su definición incluso no ha escapado de esa diatriba. La Conceptualización del Derecho Internacional Privado puede enfocarse desde la óptica de autores diversos quienes lo preceptúan de manera similar anqué con ángulos disimiles, entre ellos iniciemos citando la definición del gran conferencista internacional Carlos Arellano García, quien define al DIPr., como: “El conjunto de normas jurídicas de Derecho Público que tienen por objeto determinar las normas jurídicas en los casos de vigencia simultánea de normas jurídicas de más de un Estado que pretenden regir una situación jurídica concreta”. (Arellano García, 1983pp720 y 820). Lo propio hace Guerra Iñiguez, al considerarlo de la siguiente forma: “Conjunto de disposiciones que determinan las normas aplicables a las relaciones jurídicas cuyos elementos subjetivos u objetivos se encuentran sujetos a las normas de varios Estados”. (Guerra Iñiguez, 1985, pp 89) Tal vez una de las definiciones más sencillas, no obstante, a mi parecer de las más asertivas, la aporta el gran maestro de Derecho Internacional Privado Werner Goldschmidt1 cuando asevera que el DIPr., en términos simples viene a ser un: “Conjunto de normas dirigidas a resolver los conflictos de derecho privado, que surgen de la disparidad legislativa de los Estados”. “El DIPr., es un Conjunto de principios que determinan la ley aplicable a relaciones jurídicas en las que al menos uno de sus elementos (sujeto, objeto, lugar), resulta extranjero, por lo que está conectado con más de una legislación”. (Alvarez Gonzalez, 2014). De todo este conjunto de eminentes opiniones y criterios, sobre el Derecho Internacional Privado, quizá algunas con más exactitud que otras (la expresión privado reduce su ámbito, sin tener en cuenta que los mismos problemas pueden presentarse en otros órdenes jurídicos), se puede deducir dos cosas con claridad, primero que, evocan a la luz de los conceptos emitidos, una auténtica teoría de colisión de leyes y, más que de leyes, de ordenamientos jurídicos, cuya finalidad sabemos, es señalar qué ley y qué autoridad son competentes para regular y actualizar una relación determinada; y, segundo que, permanece claro que el DIPr., no tiene que ver ya con la esfera pública o 1 Werner Goldschmidt Lange (1910-1987) Jurista, Profesor Universitario, eminente formador de discípulos, Especialista tanto en Derecho Internacional Privado como en Filosofía del Derecho, creador del Trialismo y mentor de ideas que mantienen plena actualidad en ambas disciplinas. política de cada región sino con problemas o cuestiones de índole privada y que se hacen a la vida, al fragor de cada individuo. La estructura de la regla de conflicto es tema de fecunda investigación en el campo filosófico y jurídico. No es la estructura común de la generalidad de las normas que advertimos en los códigos, las cuales nos dan la solución directa y de fondo del caso controvertido. Ejemplo: Según el artículo 18 de nuestro Código Civil: “Es mayor de edad quien haya cumplido dieciocho (18) años. El mayor de edad es capaz para todos los actos de la vida civil, con las excepciones establecidas por disposiciones especiales”. En cambio, en la norma de colisión advertimos tres partes o segmentos fundamentales, que podríamos llamar, gráficamente, dos segmentos extremos y uno intermedio. En un extremo está la relación jurídica; en el otro, el derecho aplicable. La relación jurídica es el supuesto de hecho que la norma considera y que se encuentra en toda norma jurídica; es la hipótesis que el legislador contempla; es el llamado tipo legal, el sector social a reglamentar. En el otro extremo está el derecho aplicable a esa relación jurídica; es la llamada consecuencia jurídica. En el derecho interno, el legislador contempla el supuesto de hecho y le da la solución directa y de fondo. Determina, así, en nuestro ejemplo, “que la mayoría de edad se adquiere a los 18 años (artículo l8 del CCV); o que se puede variar esa regla general en ciertos casos, como por ejemplo que se puede testar o disponer por testamento a los 16 años, todos los que no estén declarados incapaces por la Ley”. F.L.: Artículo 836 del CCV. En el DIPr., por lo común no sucede así. Tenemos la relación jurídica, pero para encontrar el derecho aplicable nos hace falta en la regla de conflicto, un segmento intermedio, el llamado punto de conexión. En nuestro Código Civil el punto de conexión para una cuestión de capacidad del sujeto en el orden internacional, es el domicilio, como en Francia, Italia o España lo sería la nacionalidad. Es así, entonces, que el artículo 9 prescribe: “Las leyes concernientes al estado y capacidad de las personas obligan a los venezolanos, aunque residan o tengan su domicilio en país extranjero”. F.L.: Artículo 9 del CCV. El artículo 10 sanciona con análogo criterio para el caso inverso, vale decir que, para resolver una cuestión de capacidad vinculada a una relación jurídica internacional de derecho privado, debemos buscar la ley competente a través del punto de conexión, que es, en la hipótesis, el domicilio. “Los bienes muebles o inmuebles, situados en Venezuela, se regirán por las leyes venezolanas, aunque sobre ellos tengan o pretendan derechos personas extranjeras”. F.L.: Artículo 10 del CCV. Otra de las peculiaridades de las normas del Derecho Internacional Privado en su estructuración, es el carácter formal que se opone a la norma de derecho material, que sí da la solución directa al problema planteado, ya que la consecuencia jurídica indica lo que debe aplicarse a la relación de derecho planteada, por eso se ha llamado a la norma de Derecho Internacional Privado, indirecta, porque en razón del factor de conexión que contiene, soluciona el problema jurídico indirectamente. Ahora; si bien la norma de derecho internacional privado es, preferentemente y por lo general, de estructura indirecta, tal característica no es absoluta y no puede servir como elemento único y definitorio para determinar los casos Iusprivatista que pertenecen al ámbito de esta disciplina. La estructura formal de la norma no puede predominar sobre el fondo substancial del derecho internacional privado, entendido como un régimen jurídico de las relaciones de derecho privado que tienen uno o más elementos extraños al derecho local. La tipología o clases existentes de las normas del Derecho Internacional Privado, se reducen a tres especies, a saber: La Norma Indirecta o de Conflicto, la Norma Directa o Material, y la Norma Internacionalmente Imperativa o de Policía. Esas reglas, tienen en cuenta la vida internacional de los sujetos, de allí que tienen en cuenta el elemento extranjero porque su función es, estar a su servicio cuando se vinculan internacionalmente. a) Norma de Conflicto (reglamentación indirecta): Es aquella norma de DIPr. que, para la regulación de la situación privada internacional, determina, de entre los distintos ordenamientos vinculados con el supuesto, cuál de ellos debe regular la situación. Esta norma emplea un método de reglamentación “indirecto”: su cometido es “localizar” la situación privada internacional en un país concreto, cuyo ordenamiento jurídico proporcionará la solución concreta a la situación privada internacional objeto del litigio. La norma de conflicto es el tipo normativo más utilizado por el DIPr. de todos los países para el sector del Derecho aplicable. b) Normas de DIPr. Directas o Materiales o “normas materiales especiales” (reglamentación directa): Estas normas proporcionan una respuesta jurídica directa, inmediata y sustantiva a las situaciones privadas internacionales. Funciona considerando al elemento extranjero y por esa circunstancia, describe una realidad social determinada y ofrece la solución legal. Con la aplicación de esas leyes no se consulta otro ordenamiento jurídico, se la emplea como la ley que ordena la relación jurídica. La solución se alcanza por la ley empleada, en virtud que se trata de normas que elaboran soluciones materiales donde se ha contemplado la conexión internacional. La mayor cantidad de estas reglas jurídicas se encuentran en tratados internacionales y en menor escala en el Derecho nacional. Este derecho, que enfrenta la internacionalidad, crece día a día porque es el resultado de la vida de relación internacional de los sujetos, que es acompañada por una labor constante por los Estados que se proponen la integración y cooperación. Beat Walter Rechsteiner2, profesor de la Universidad de San Pablo de Derecho internacional privado, indica que: “el derecho uniforme sustantivo (norma directa) se está expandiendo a una velocidad cada vez mayor y procura alcanzar una unidad del derecho dentro de su campo de aplicación”. Las fuentes donde se producen estas normas directas son: (a) Normas de Derecho internacional privado materiales de Derecho internacional o convencional, y (b) Normas de Derecho internacional privado materiales de Derecho interno o nacional. Las primeras, provienen de tratados internacionales que celebran los Estados para facilitar y garantizar los derechos de sujetos y sus bienes cuando se vinculan mundialmente y las segundas son creadas por cada Estado para situaciones específicas. Varias observaciones son precisas en torno a las normas materiales especiales, dentro de ellas: RECHSTEINER, Beat Walter. Derecho Internacional Privado. Teoría y Práctica. Editorial Saraiva, San Pablo, 2003, p. 52. 2 Regulación de Aspectos Concretos: La mayor parte de estas normas regulan exclusivamente aspectos concretos de las situaciones privadas internacionales. Escasez de estas Normas: Las normas materiales especiales de producción interna son muy escasas, la explicación a este hecho la encontramos en que no es sencillo elaborar un texto legal para “casos internos” y otro para “casos internacionales”. Por el contrario, son más abundantes las normas materiales especiales contenidas en Convenios internacionales e instrumentos legales comunitarios. Ello se explica porque, de ese modo, se crean auténticos “cuerpos normativos uniformes”, válidos para multitud de Estados, que ofrecen soluciones verdaderamente internacionales, distintas de las previstas para “situaciones meramente internas”. Clases de Normas materiales especiales: Las normas materiales especiales pueden ser de varios tipos: 1) “Normas Materiales Especiales Independientes”: se aplican con independencia de la norma de conflicto y de la Ley nacional que rija la situación; 2) “Normas Materiales Especiales Dependientes”: sólo se aplican si la norma de conflicto del país cuyos tribunales conocen del asunto conduce a la aplicación de la Ley de un concreto país en el que están vigentes tales normas materiales especiales; y, 3) “Normas Materiales Especiales con Indicador Espacial”: sólo se aplican en ciertos casos “conectados” con el país cuyos tribunales conocen del caso. c) Norma Internacionalmente Imperativa o Norma de Policía: Estas normas están fundadas en nociones de orden público, su presencia excluye la aplicación y funcionamiento tanto de normas directas, como indirectas. La tesis es: hay materias, que por razones y motivos esenciales excluyen el sistema de Derecho internacional privado de cada Estado. La norma de policía atrae en su tipo legal un elemento extranjero que lo somete al derecho nacional, imponiendo expresamente su ámbito de aplicación territorial. Esta regla, se justifica en aquellas áreas fundamentales que el Estado ve la conveniencia que no sea regulada la relación jurídica por un Derecho extranjero. Es una norma unilateral3, inderogable, que remite al derecho propio de modo exclusivo, característica que impide también el ejercicio de la autonomía de la voluntad; es decir, las partes se ven impedidas de crear derecho convencional en los temas calificados como esenciales por cada Estado. Hay actos que realizan particulares, donde 3 A diferencia de la norma indirecta que es norma bilateral. el Estado sólo admite que se concreten bajo su propia reglamentación. El legislador no deja, en limitadas cuestiones, que convencionalmente tenga validez la autonomía privada.4 Werner Goldschmidt denominaba estas disposiciones como normas rígidas expresas,5 Berta Kaller de Orchansky como leyes de una naturaleza positiva rigurosamente obligatoria,6 Inés Weinberg como normas imperativas de aplicación inmediata,7 Raúl Alberto Ramayo como norma indirecta unilateral específica8 y en España, Alfonso Luís Calvo Caravaca y Javier Carrascosa González como normas de extensión.9 Lo importante no es como se le llame, sino que la característica distintiva es que su contenido materializa una cuestión importante, sustancial, trascendental para la Nación y por esa razón el Estado sólo admite su propia regulación y evita la aplicación del derecho extranjero.10 Después de identificar de forma concisa las clases de Normas existentes en el DIPr., en esa misma línea y con igual brevedad, citaré los factores que hacen parte o se conjugan para darle marco a la normativa del Derecho Internacional Privado, el cual consta en su distribución con los siguientes tres elementos a saber: Relación Jurídica; Punto de Conexión; y, El derecho aplicable. 4 FRESNEDO AGUIRRE, Cecilia, cita a FRANCESKAKIS quien enumera una serie de normas que, si bien contienen un elemento extranjero, son normas que se deben aplicar inmediatamente: la prohibición de exportar cereal para evitar el hambre, la prohibición de enajenar inmuebles a favor de extranjeros, la regulación de los pesos y medidas, la legislación sobre cambio, las leyes sobre locaciones urbanas, leyes sobre educación, etc. Aspectos generales del sector del derecho aplicable. En: Derecho Internacional Privado de los Estados del Mercosur. Editorial Zabalía, ob. cit., p. 309. 5 GOLDSCHMIDT, Werner. El orden público internacional en el derecho internacional privado, en E.D. 109-889. 6 KALLER de ORCHANSKY, Berta. Nuevo Manual de derecho internacional privado, ob. cit, p. 139. 7 WEINBERG, Inés M. Derecho Internacional Privado. Editorial LexisNexis, Buenos Aires, 2002, p. 133. 8 RAMAYO, Raúl Alberto. Derecho Internacional Privado, ob. cit., pp. 70/73. 9 CALVO CARAVACA, Alfonso Luís y CARRASCOSA GONZALEZ, Javier. Derecho Internacional Privado, ob. cit. volumen I, p. 139. 10 KALLER de ORCHANSKY, Berta. Código Civil y normas complementarias. Análisis doctrinario y jurisprudencial, Bueres Highton. Editorial hammurabi, Buenos Aires, 1995, tomo 1, pp. 25 y ss. 2 Análisis Especial de los Factores de Conexión: Los factores de conexión son circunstancias o elementos que ayudan a determinar el derecho aplicable a una situación determinada. El factor de conexión, genera conflictos de leyes, pues necesariamente determina la aplicación de un ordenamiento jurídico de dos a mas potencialmente aplicables. Esto era lo que los estatutarios conocieron dentro de las relaciones con el nombre de cuestiones mixtas, o sea aquellos hechos en los cuales las personas, los bienes o un acto jurídico cualquiera, por estar involucrado uno de estos factores de conexión, plantea un caso de un conflicto de leyes, ya que el juez al ir a aplicar su propia ley se encuentra con un elemento extraño o jurisdicción local que hace que escape de sus manos el derecho que usualmente aplica. Explicaré y Definiré a los Factores de Conexión o puntos de conexión, a través del cristal con el cual fue visto por Tatiana Maekelt, al apreciar que este componente: “es un elemento esencial de la norma de conflicto y su misión consiste en localizar la relación jurídica con elementos extranjeros, en uno de los ordenamientos jurídicos con los cuales se encuentra conectada. El factor de conexión expresa la relación de las personas, las cosas o los actos con un determinado ordenamiento jurídico estatal, tomando en cuenta la circunstancia que sirve para evidenciar la vinculación entre el supuesto de hecho y la consecuencia jurídica. Por ello se dice que es el mecanismo técnico que permite localizar una determinada relación o situación en un determinado ordenamiento jurídico. Así, por ejemplo, el elemento que se toma en cuenta para localizar la situación referente a la existencia, estado y capacidad de la persona es en el Artículo 16 de la Ley de DIPr., el domicilio de la misma, pero, bien podría haberse tomado otras circunstancias como: la nacionalidad o la residencia de la persona. Esto significa que los proyectistas de la Ley consideraron que el domicilio es la circunstancia más adecuada para localizar ese supuesto de hecho o como lo denominaría Savigny «el asiento o sede de la relación jurídica”. (Maekelt, 1984 pag 78). Para la Clasificación de los factores de Conexión, esta se hará a fines didácticos, en base a los criterios fijados por catedra, es decir, de acuerdo a su contenido, a su naturaleza, y de acuerdo con el carácter de conexión. De Acuerdo con su Contenido: Personales: Nacionalidad, domicilio, residencia; y, Reales: estos a su vez están referidos a: a) En relación con los bienes: lugar de la situación; bandera de las naves o aeronaves. b) En relación con los actos: lugar de celebración, lugar de ejecución, lugar donde se cometió el delito, lugar del proceso. De Acuerdo con su Naturaleza; y, Factores que son hechos reales: lugar de la situación de un inmueble. Factores que son conceptos jurídicos: la nacionalidad, el domicilio. Factores susceptibles de una u otra calificación jurídica: El lugar de la celebración de un contrato cuando el desplazamiento de las partes se ha realizado dentro de un territorio y el resultado se ha producido en otro territorio. De acuerdo con el carácter de conexión. Únicos: Cuando hay un solo factor de conexión, por ejemplo, el domicilio en el caso de capacidad; y, Múltiples. Cuando combino varios factores de conexión y guarda estrecha relación con el caso de los mixtos o combinados. Estos elementos no son excluyentes, el mismo factor de conexión puede estar en varias clasificaciones. Desde la propia estructura de la Norma de Derecho Internacional Privado, y en atención a las características de su funcionamiento, se construyen unos problemas específicos que reclaman especial consideración en el estudio de la disciplina: a) El primero de ellos elude a la cuestión de las Calificaciones, pues este problema consiste en la determinación de la ley competente para definir los términos empleados por la norma. Toda regla de Derecho es una formación léxica que hace referencia a sucesos reales y a categorías jurídicas, de donde resulta necesario definir y precisar el sentido de los términos usados en su construcción para alcanzar el objetivo que dichos términos refieren. b) En segundo lugar encontramos el problema que plantea la característica negativa del supuesto de hecho: El Fraude a la Ley. c) El tercer problema está representado por las características negativas de la consecuencia jurídica: El Orden Público Internacional, institución que es capaz de paralizar la voluntad de la norma orientada hacia la aplicación del Derecho Extranjero. d) Otro problema consisten en la determinación de la “cantidad” del Derecho Extranjero aplicable. Cuando la consecuencia jurídica de la norma indirecta declara competente un cierto Derecho Extranjero, se trata de fijar si tal designación de competencia comprende todo el ordenamiento extranjero designado o si se limita al sector del derecho material de ese ordenamiento. Esta confrontación sirve de base al surgimiento del reenvío. e) En último término aparecen los problemas propios del factor de conexión, cuales son: la conexión fallida y la conexión reproducida. La primera surge cuando el factor de conexión empleado por la norma (nacionalidad) no logra hacer la localización del derecho aplicable, en virtud de que la persona interesada en el caso que se trata de regular carece de nacionalidad. En el segundo caso, la posesión de varias nacionalidades por el sujeto de la relación es lo que impide al factor de conexión realizar la vinculación efectiva del supuesto de hecho con una determinada ley nacional. 3 La Norma Ius Privatista Internacional (o norma de colisión) Como Norma Indirecta. En el Derecho Internacional privado existen dos tipos de normas: las reglas indirectas o normas características de derecho internacional privado y las normas o reglas directas. Toda norma jurídica tiene dos segmentos: en uno describe el hecho, en el otro lo reglamenta. Toda norma tiene como finalidad regular un sector social. Para cumplir con su objetivo, el derecho internacional privado utiliza normas de colisión o indirectas. La norma de colisión, como cualquier norma jurídica, comprende un tipo legal y una consecuencia jurídica. Si hacemos un paralelo entre norma de colisión de derecho internacional privado y una norma de derecho privado interno, se deduce que en el tipo legal hay similitud entre ambas, puesto que en las dos se plantean casos Iusprivatista. Claro está, que las normas de derecho internacional privado siempre contienen elementos extranjeros, enfocando casos relativa o absolutamente internacionales. La diferencia entre una norma directa y una norma indirecta radica en que esta última no soluciona el caso, sino que únicamente nos remite al ordenamiento jurídico aplicable al caso el que, a su vez, en su norma directa, nos indicará la solución. La norma jurídica directa nos indica que cuando se produce un hecho se da una consecuencia. Si A es, debe ser B en la terminología kelseniana. La apreciación de la realización de la condición y la consecuencia pertenecen al mismo ordenamiento jurídico. En la norma indirecta, la condición alude a un conflicto posible de leyes y la consecuencia, a la ley aplicable. La norma indirecta o de colisión era hasta 1960, la única y típica regla del Derecho internacional privado, pero por diversas cuestiones jurídicas disminuyó su desempeño y se incorporaron a la materia normas directas y de policía. Las razones, entre otras, fueron: (a) mayor cantidad de Tratados internacionales que contienen normas directas o materiales; (b) porque existe cada vez más soluciones de casos de Derecho internacional privado basados en el Derecho judicial; y, (c) mayor resguardo de cada Estado en ciertas áreas, motivo del funcionamiento de normas de policía y (d) está más presente el ejercicio de la autonomía de la voluntad en la creación del Derecho. Para establecer la Estructura de la Norma de Colisión, se debe partir por el hecho de que la norma del derecho internacional privado es aquella que es de carácter distributivo, debido a que la misma distribuye la competencia de resolver un determinado conflicto cuando existe una colisión entre varios ordenamientos jurídicos, dicha norma es quien determina, cuál de los ordenamientos es el competente para solucionar dicho conflicto, de allí nace ese carácter distributivo. Ahora bien, es importante mencionar que estas normas tienen una estructura formal, es decir, se opone a la norma de derecho material, que sí da la solución al problema planteado en una forma directa, ya que la consecuencia jurídica indica lo que debe aplicarse a la relación de derecho planteada, por eso se ha llamado a la norma de Derecho Internacional Privado, indirecta, porque en razón del factor de conexión que contiene, soluciona el problema jurídico indirectamente. 1. Factor conectable o supuestos de hecho o tipo legal: supuesto de la vida real con elementos extranjeros. 2. Factor receptivo de la conexión, conectado o consecuencia jurídica: aplicación de una determinada ley. 3. Factor de conexión: elemento que determina la ley aplicable. A la hora de hablar de la Función de la Norma de Colisión, es imperativo reconocer que la norma indirecta mantiene su finalidad de regular situaciones privadas internacionales, cuando no tengan vigencia tratados o sean insuficientes para acceder a soluciones jurídicas. La función de las normas de conflictos o indirectas se hacen presentes en todos los ordenamientos jurídicos de los Estados, ya que son imposible Tratados que prevean cada una de las situaciones que se generan por la movilidad social, comercial, turística, industrial, tecnológica, financiera. En lo atinente a la Clasificación de las Normas Indirectas, es necesario entender que la norma indirecta como norma extraterritorial vincula a dos ordenamientos jurídicos, por ese motivo se clasifica, según el sistema jurídico que delimita, en: Unilateral o Cierta; y, Bilateral o Problemática. La primera se presenta cuando el punto de conexión designa competente el Derecho nacional del juez; es decir la lex fori. En ese caso la situación será resuelta en el ámbito del derecho propio y por esa razón es una norma que no presenta dificultad porque es un sistema de derecho con el que el juez está familiarizado, capacitado y el cuál conoce; de allí su denominación de cierta y unilateral. En concreto: la norma indirecta es unilateral o cierta cuando ordena aplicar Derecho nacional, es decir, que será aplicable la ley de la nacionalidad del juez que conoce del asunto o, dicho de otra manera, la ley de su Estado (Ley del foro). La segunda, regla bilateral o problemática, en cambio, elige como derecho aplicable el ordenamiento jurídico extranjero; es decir, dispone que el derecho foráneo sea quien brinde la solución. Esa característica es la dominante de la norma indirecta y se la denomina bilateral ya que vincula la ley del juez (norma indirecta) con el derecho extranjero y porque es un derecho extraño, foráneo se vuelve problemático cuando se aplica; pienso que habrá que investigarlo, estudiarlo de manera más exhaustiva para usarlo como derecho extranjero extra territorializado. La Norma Indirecta plantea numerosas contrariedades; en efecto, la aplicación de un Derecho extranjero por parte de un tribunal venezolano, como resultado de la remisión realizada por la norma de conflicto, plantea tres tipos de problemas. 1º) Problemas inherentes a la aplicación de todo sistema jurídico. Siendo aplicable un Derecho extranjero, éste opera como el "marco jurídico en el que las partes pueden satisfacer sus Problemas de aplicación derivados de la mecánica de la norma de conflicto. 2º) La aplicación de un Derecho extranjero está condicionada por una serie de correctivos propios de la norma de conflicto: reenvío, fraude de ley, orden público internacional, remisión a sistemas pluri legislativos, etc. Ello añade complejidad a la aplicación en España de un Derecho extranjero. 3º) Problemas de "tratamiento procesal" del Derecho extranjero. El modo en que el Derecho extranjero se introduce y se acredita en el proceso que se sigue ante tribunales venezolanos está sujeto a una serie de particularidades que dificultan su aplicación. En relación con este tercer aspecto, se abren una serie de interrogantes, dentro de estas incógnitas podemos citar los Problemas de aplicación de la propia norma de conflicto, referidos al: Supuesto fáctico o de hecho: La Delimitación y La Calificación. Recordemos: la estructura de la norma de conflicto: Supuesto de hecho + punto de conexión + consecuencia jurídica. a) La Delimitación: Se trata de situar la norma dentro del supuesto de hecho de la regla de conflicto. El utilizar supuestos de hecho tan genéricos hace que ciertas situaciones sociales sean susceptibles de ser encuadradas en varias normas de DIPr. 1. La delimitación consistiría en establecer el ámbito de aplicación de cada norma de DIPr. Ejp.: materia contractual/materia extracontractual. La delimitación es previa a la puesta en funcionamiento de la norma de conflicto. 2. La delimitación puede estar orientada materialmente; ciertas situaciones se incluyen en una norma de conflicto determinada para favorecer ciertos intereses: capacidad de la mujer casada, o problemas de capacidad incluidos en el ámbito de la Convención de la Haya del 61, sobre ley aplicable a la forma de las disposiciones testamentarias contenida en su Artículo quinto. b) La Calificación: Consiste en calificar jurídicamente el hecho o la relación jurídica, lo que conlleva una subsunción del hecho social dentro del supuesto de hecho de la norma de conflicto. La calificación debe realizarse ex lege fori, a partir de la calificación jurídica que esas situaciones reciben en el Derecho nacional del Juez. Justificación de la elección de la lex fori (en detrimento de la lex causae): El problema se plantea en un momento en el que no es posible precisar cuál será la lex causae; La calificación ex lege fori proporciona un catálogo de categorías jurídicas único; y, Por el carácter interno de la mayoría de normas de conflicto. c) Correcciones a la calificación ex lege fori: Calificación autónoma: en supuestos en que la calificación se debe de hacer de acuerdo con categorías autónomas de DIPr y no respeta de las categorías de Derecho interno. Calificación a través de Convenios Internacionales. Calificación funcional: calificación realizada a partir de la función social que cumple, ello implica un examen en profundidad del Derecho Extranjero; y, visto el papel que cumple la institución, se califica de acuerdo con las instituciones del derecho del foro que cumplen la misma función. Se utiliza: - Para instituciones con la misma nomenclatura pero que cumplen una función diferente. - Para instituciones desconocidas: Técnica de la transposición de instituciones. El límite a esta técnica es el orden público: trust, talaq (repudio unilateral por el marido), kafala (acogimiento), ketubah (promesa de ventajas materiales para la mujer en caso de fallecimiento del marido, instituciones de derecho tribal. Problemas Relativos al Punto de Conexión a) Cuestiones generales sobre el punto de conexión. 1. Determinación del punto de conexión. 1.1. En el caso de punto de conexión jurídicos: El concepto jurídico debe rellenarse a partir de la lex fori . Excepción del criterio nacionalidad: ley del país cuya nacionalidad se pretende. 2. Puntos de conexión abiertos. Corresponde al juzgador valorar los contactos en cada caso concreto con uno u otro ordenamiento; Dicha valoración no se refiere únicamente a la cantidad de contactos sino a la calidad de los mismos. En razón de la rama del Derecho considerada, unos contactos tienen más valor que otros (lugar de ejecución en contratos, nacionalidad en familia). b) El llamado “Conflicto móvil”. 1) Se produce por la alteración del elemento fáctico o jurídico que integra el punto de conexión (cambio de nacionalidad, cambio en la localización del bien); y, 2) También puede producirse como consecuencia de un cambio de Soberanía, como por ejemplo en la desintegración de Yugoslavia o Checoslovaquia. Debe diferenciarse: - Puntos de conexión determinados en el tiempo: evitan el problema. - Puntos de conexión mutables. Dos posibles soluciones: Debe entenderse que la norma se aplica en el momento del nacimiento de la situación jurídica; y, Asimilación al problema de la sucesión de normas de conflicto. Problemas referidos al Fraude de ley 1) Alteración fraudulenta del elemento fáctico o jurídico que integra el punto de conexión con el fin de conseguir una modificación del Derecho Aplicable que favorezca los intereses de una persona: utilización de medios lícitos para conseguir un fin ilícito. 2) Elementos: Material e Intencional: ejemplo, la obtención de la nacionalidad de otro país, o el cambio de lugar de residencia para obtener el divorcio. Dos críticas al Fraude de ley en DIPr: Falta de sanción al fraude. Por analogía debe aplicarse la ley que se ha tratado de eludir; y, Objeto limitado del fraude: sólo se prevé el fraude de las leyes imperativas venezolanas, y no el de las leyes imperativas extranjeras. La Solución al respecto, debería ser la bilateralización o se debe entender que el fraude se produce a la norma de conflicto nacional. 3) Diferenciación de la figura del forum shopping. Este se predica del sector de la competencia judicial internacional, mientras el fraude de ley está referida al sector del Derecho aplicable. Después de leer lo anterior, solo queda preguntarse ¿Existe realmente fraude de ley en Dipr? Problemas Relativos a la Consecuencia Jurídica 1) En el caso de Reenvío; surge cuando la norma de conflicto del DIPr. del país cuyos tribunales conocen del asunto remite, para la regulación del caso, a un Derecho extranjero, ordenamiento que contiene una norma de conflicto que, a su vez, remite la regulación de la situación privada internacional al Derecho de otro país, que puede ser el Derecho del país cuyos tribunales conocen del asunto o el Derecho de un tercer país. En la situación de Reenvío de primer grado o reenvío de retorno, se produce este tipo de reenvío cuando, pendiente un caso ante un tribunal venezolano, la norma de conflicto nacional remite la regulación de la situación privada internacional a un Derecho extranjero y la norma de conflicto de dicho ordenamiento vuelve a remitir la regulación de la cuestión al Derecho venezolano. En el caso del Reenvío de segundo grado o reenvío ulterior, la norma de conflicto venezolana remite la regulación de la situación privada internacional a un Derecho extranjero y la norma de conflicto de dicho ordenamiento, a su vez, remite la regulación de la cuestión a un tercer ordenamiento. Éste es un reenvío de segundo grado. Pero, en teoría, pueden plantearse igualmente reenvíos de tercer grado y sucesivos. La salida pudiera ser, la Remisión a un sistema pluri legislativo "ad extra". Cuando la norma de conflicto venezolana remite, para la regulación de una situación privada internacional, al ordenamiento jurídico de un Estado en cuyo seno coexisten a su vez distintos sistemas jurídicos (Estados pluri legislativos), surge la necesidad de determinar cuál de dichos sistemas jurídicos debe regir la situación privada internacional. Dichos Estados pluri legislativos pudieran ser de base personal, es decir, aquel donde cada comunidad de personas disponga de un "Derecho propio", como se observa en países como Egipto, India, Marruecos, o de base territorial, donde cada unidad territorial goce de su propio ordenamiento, como sucede en Estados Unidos de América, Reino Unido de Gran Bretaña, Suiza, México, entre otros. Finalmente quedan dos áreas afectadas en su ejercicio por los problemas generales ocasionados por la norma de conflicto, a saber: Problema de la Cuestión Previa: aquí se debe explicar el tipo legal de la norma indirecta. Es menester precisar con toda claridad a qué sector social hace referencia. Pero, además de las características positivas del tipo legal de la norma indirecta, debe hacerse el examen de su característica negativa. Así, se llega al fraude a la ley como característica negativa general del tipo legal; y, La Imperatividad de las normas de DIPr., (aplicación ex officio de la norma de conflicto ante una situación privada internacional) versus las normas de conflicto dispositivas (sólo sería aplicada si las partes la invocan). La aplicación imperativa en el Derecho venezolano, no está exenta de problemas, se puede ver comprometida por dos cuestiones procesales: Ocultación del elemento extranjero por las partes: lo que justifica la no aplicación de la norma de conflicto en beneficio de la lex fori. Se reclama una actitud activa del juez que indague dichos elementos (diligencias para mejor proveer). Prueba del Derecho extranjero: corresponde a las partes (necesidad de revisar las consecuencias de la supresión. Si no lo hacen, o no pueden hacerlo, el juez aplicará el derecho del foro. Para solucionar el problema es necesario fijar el ámbito de aplicación temporal de la norma de conflicto. El DIPr., venezolano no tiene una solución concreta, dos vías son aplicables: Algunas normas contienen disposiciones concretas, como los convenios internacionales; y, Si no fuera así, se aplica la regla general del artículo 3 del Código civil. “La irretroactividad de la ley”. A la hora de aplicar la norma, se presentan dos situaciones: Situaciones que se desarrollan instantáneamente: aplicación de la norma en vigor en el momento en el que se verifica el acto en cuestión (ejp.: celebración del contrato, o del matrimonio). Relaciones duraderas: aplicación de ambas normas de conflicto en su ámbito temporal específico. Soy del criterio que el derecho extranjero debe aplicarse porque tiene vigencia el sistema de derechos humanos, cuyos titulares son los sujetos y está dispuesto por la comunidad internacional. El artículo 28 de la Declaración Universal de Derecho Humanos establece que: “Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social e internacional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan plenamente efectivos”. De ese principio extraigo, que en situaciones privadas internacionales el orden jurídico como resultado de lo social, es un Derecho fundamental (ius cogens) del sujeto humano y jurídico que se le aplique, en sus relaciones privadas, la regla normativa de su Derecho subjetivo. La persona cuando actúa internacionalmente, presenta debilidad jurídica y procesal por lo que debe ser equiparada por la aplicación del sistema de Derecho internacional privado que restablece los efectos extraterritoriales de sus Derechos subjetivos. Los títulos de las prerrogativas legales, se obtienen mediante la aplicación de tratados universales o regionales, normas indirectas o de conflicto, caso contrario sólo se aplicaría una sola ley: la nacional de juez (lex fori). En consecuencia, el fundamento de la extraterritorialidad del Derecho privado está dado por los Derechos fundamentales que imponen reconocer a las personas en su humanidad y derechos, identificando a esa doctrina como normas imperativas inderogables por cada sistema jurídico nacional. Con respecto a su calificación, me adhiero a la teoría del Derecho extranjero como hecho procesal y que el juez debe oficiosamente fijar su contenido, dictando una sentencia con el mayor grado de aproximación y acierto del Derecho aplicable, para lo cual no sólo tendrá en cuenta la ley extranjera sino esa jurisprudencia y doctrina. Al emprender mi salida desde este ángulo conclusivo, quiero mencionar que, para la realización de la presente investigación, efectué una investigación con un tenor bastante extenso, mucho más allá del que en definitiva logré plasmar en estas dúctiles hojas, mucha tinta quedó en el tintero, no obstante, espero que el contenido de estos apuntes, puedan ser de utilidad para satisfacer algunas inquietudes que se puedan tener a la luz de lo investigado. Estoy claro en que los mismos son solo una idea general de la magnitud de corrientes y pensamientos críticos existentes en la materia, motivo este que me impulsa a seguir profundizando sobre el tema por demás interesante y vital en mi condición de abogado en proceso, debatiendo, cuestionando, pero, sobre todo, asumiendo la ineludible tarea de consustanciarme con una disciplina apasionante y en constante evolución. Deseo adicionalmente rescatar como punto de salida, lo escrito en el aparte último del tercer párrafo del aspecto introductorio de este ensayo, cuando acotaba: “Al final de esta indagatoria, incluiré adicionalmente un esbozo con mi opinión, en atención a los temas aquí expuestos y escritos”. Siendo este el momento y colocado ante esa circunstancia, dejaré aquí plasmada mi humilde y embrionaria opinión sobre un par de aspectos referentes a este ensayo, sin pretensión ulterior, jamás, y siempre teniendo en cuenta que mi luz es apenas una débil llama, en cuya soledad, jamás mostrará el brillo que, si resurgirá, de la conjunción de la propia luz, con la luminiscencia de otros brillos. Sin duda alguna, en los albores del siglo XXI, al Derecho Internacional Privado le corresponde la gran misión de adecuarse, relanzarse y refrescarse ante el avance incesante de las normas y dinámicas propias del devenir de una comunidad cada día más viva y demandante, para ello, dentro de otras adecuaciones, le corresponde al Derecho Internacional Privado, por un lado, regular aquellos supuestos de hecho relacionados con dos o más ordenamientos jurídicos, bajo ese fin, es necesario repetir, que toda exposición sobre las normas de esta rama del Derecho debe partir de la existencia de una pluralidad de métodos, los cuales se deben complementar para reglamentar a tales supuestos de hecho. Tal pluralidad debería derivar de una diversidad de normas, susceptibles de una clasificación primaria que atienda a la manera como se deduce, en cada una de ellas, la consecuencia jurídica. Así encontramos, en primer lugar, a las denominadas normas formales o indirectas, también denominadas indicadoras, conflictuales, de conflicto, de colisión, de conexión, de remisión, de atribución y, en segundo lugar, a las normas materiales o sustantivas que reglamentan de modo directo este tipo de supuestos o que auxilian a las primeras. Por otro lado; para resolver cada uno de los diferentes aspectos que pueden estar involucrados en un caso vinculado con dos o más ordenamientos jurídicos, debería corresponder al foro en el desempeño de la misión organizadora de la norma, dar los siguientes pasos: 1) verificar si el supuesto de hecho en discusión cae bajo el imperio de un cierto tipo de norma material que le debe ser aplicada necesariamente, comúnmente designadas como: normas de aplicación inmediata, normas de aplicación necesaria, leyes de policía o imperativas internacionales; 2) En segundo lugar, el juez, tomando en cuenta la prelación de las fuentes que le imponga su propio sistema de Derecho Internacional Privado, debería revisar la existencia de normas que regulen directamente el aspecto concreto, por lo general contenidas en convenios vigentes entre el Estado juzgador y los vinculados a la situación; 3) En caso de no comprobarse la existencia de las precitadas normas, proceder a hacer uso de la norma indirecta o formal, que localizará al supuesto en uno de los ordenamientos con los cuales esté vinculado, que podrá ser el del foro o uno extranjero; y, 4) Por último, el Juez debería, además, tomar en cuenta disposiciones materiales que coadyuven a la aplicación de la norma de conflicto. Finalizo con una cita perteneciente a Yuri Emilio Buaíz Valera, Jurista y Docente Universitario, desde donde ejerció una gran influencia en el desarrollo de las doctrinas jurídicas modernas, al considerar al Derecho más como un producto social que como una elaboración doctrinal. De su libro “La finalidad en el Derecho”, desprendo la frase de cierre: “Nuestra disciplina está llamada, dentro de los procesos de integración, entre otros, a contribuir como marco regulador e interpretativo y como instrumento imprescindible, para el logro de la armonización de las legislaciones de los países que conforman un esquema determinado de integración… En este sentido existe una recíproca influencia entre el Derecho Internacional Privado y los denominados procesos de integración regional”. (Buaíz Valera Yuri, 2006 pp 143). En esta dirección, compartimos las palabras de Buaíz Valera, toda vez que el Derecho Internacional Privado es una herramienta, un instrumento de insustituible valor para la integración jurídica, que permite en última instancia el logro de los más variados objetivos de diversa índole útiles sin duda alguna para los propósitos de cualquier proceso de integración regional. La integración requiere para concretarse de una estructura jurídica que incluya entre otras ramas, al Derecho Internacional Privado.