EDIFICIO INTELIGENTE SEGMENTACION El consumidor, sea extranjero o del interior del país, en los últimos 10 años ha cambiado gracias a los avances de la tecnología, permitiendo al consumidor tener más información y de una forma más accesible, para la toma de mejores decisiones y pueda a si ser más eficiente con su tiempo y sus recursos económicos. El presente plan de negocios beneficiara a las personas que vacilan entre los 20 a 45 años de edad, muchos de ellos son de la generación milenio. Los tipos de consumidores son: Personas entre los 20 a 45 de años de edad Personas de clase media, media alta y alta. Los estudiantes universitarios del país y del exterior Jóvenes profesionales. Parejas de entre los 24 y 40 años de edad. Personas que perciben un ingreso promedio mensual de 6 a 10 mil Personas sujetas a créditos de vivienda en entidades financieras. Por lo general estos consumidores perciben ingresos de 6 a 10 mil bolivianos mensuales y califican para créditos de vivienda. Hoy en día los jóvenes ya no esperan tener hijos para independizarse y tener una casa o departamento propio. La Cámara Inmobiliaria de Santa Cruz, devela que las parejas jóvenes son las que están dando un dinamismo al sector inmobiliario que se halla desarrollando condominios, edificios con monoambientes y departamentos de uno a dos dormitorios. Las maneras de búsqueda de requerimientos inmobiliarios de los consumidores, en su mayoría la realizan mediante las redes sociales, ya sea por el buscador Google, Facebook o en algún portal inmobiliario como “UltraCasas” o “InfoCasas”. PROPUESTA DE VALOR Actualmente son muy pocas las personas que se enteran de los progresos relacionados con la tecnología y la arquitectura, y por ende no se ven interesados en saber lo relacionado con los edificios inteligentes. La tecnología está avanzando a grandes pasos y no es de extrañarse que en un futuro ya todas las casas y edificios tengan este sistema inteligente. Otro problema que vemos ya dentro de todo lo que tiene que ver con los edificios inteligentes son los detectores, la falsa alarma que se ha tratado de resolver en la combinación de los diversos tipos de censores. Por otro lado, existen los sistemas operados por detectores para compuertas de compartimentación, el control de la presión positiva en ductos de escaleras y elevadores, el control programado de sistemas de acondicionamiento de aire, la iniciación de las alarmas y el voceo a la par de los sistemas de supresión de fuego por agua, espuma, polvo químico y gas. Por otro lado, hay que reconocer que los edificios convencionales perdieron vigencia y quedaron en la obsolescencia. Un edificio convencional no tiene en cuenta: El clima del lugar. Su posición relativa y la de su ambiente respecto a la trayectoria del sol. El uso de materiales de bajo contenido energético. El uso de materiales no contaminantes. No evalúa el impacto ambiental que causará en el sitio. Utiliza energía de las redes públicas sin prever la demanda. Sólo se considera el costo inicial de construcción y no el costo que tendrá durante la vida útil del edificio. No implementa estrategias para mejorar su eficiencia energética. Desecha residuos y efluentes sin tratamiento al ambiente. No recicla las aguas grises. No utiliza energías renovables.