COMO DEFINIRIAMOS LA CULTURA DE CALIDAD EN EL SERVICIO TURISTICO. Podemos decir que el turismo es un fenómeno dinámico y cambiante, y este a su vez ha estado relacionado o ligado con la cultura y este turismo se ha considerado como una práctica turística hasta nuestro tiempo en el llamado siglo xx. Desde el consumido sol y playa se le conoce como turismo cultural, totalmente reconocida y estrategia diferenciando de todos aquellos destinos turísticos conocidos y saturados hoy en día. El sector cultural es de un total aislamiento ante esta sociedad que demanda productos que respondan a cada una de las expectativas de los clientes llamada turismo-cultural; por este la calidad en otros sectores industriales se podría decir que se perfila como una estrategia adecuada para conseguir una mayor competitividad. El Turismo cultural podemos decir que es un producto con auge gracias al creciente interés de la sociedad por conocer el pasado de nuestras civilizaciones así también la realización de actividades durante el viaje y el gusto por la preservación de nuestras culturas y han supuesto que este producto se ha posicionado como uno de los más exitosos. Es por esto que los turistas muestran interés, en encontrar en sus viajes experiencias o actividades relacionadas con la cultura, la historia, el arte y monumentos del pasado. Podemos basarnos en ciertas estadísticas donde menciona que un 81% de viajeros Estadounidenses se consideran turistas culturales gracias a esto se considera que el turismo cultural se presenta como un producto con gran potencial en el mercado turístico. Aunque esto no corresponde con el estado actual de la oferta ya que como por ejemplo podemos mencionar a España que es un país con mucha riqueza cultural y con el mayor número de Patrimonio de la Humanidad en el mundo, a pesar de esto se dice que solo un 10% de estos recursos se consideran productos turísticos para un perfecto consumo. Con una debida gestión y una correcta plantificación de la oferta cultural pueden convertirse en los dinamizores del turismo. Para ello y como se mencionaba anteriormente la Especialización debe de ir de la mano de la Calidad. La calidad se podría decir que es una herramienta de gestión, por esto se podría definir como: la capacidad de un conjunto de características inherentes al producto, sistema o proceso para cumplir los requerimientos del cliente y otras partes interesadas. Esto quiere decir que la calidad hace referencia a la gestión de la empresa y de todos los procesos relacionados que por consiguiente su objetivo principal; a la satisfacción del cliente. Como en otras clases hemos podido discutir que el grado de calidad se puede medir por la precepción del consumidor de que sus expectativas han sido cubiertas, es por esto que en el ámbito turístico se considera que se venía introduciendo recursos complementarios como hoteles, restaurantes, etc. Y en algunos caos, en recursos geoturísticos como en las playas. Al igual que en las playas, el patrimonio cultural es un recurso turístico de primer orden, y está ligado al territorio y a la naturaleza, al que se le debe de aplicar criterios de calidad para garantizar su sostenibilidad y disfrute. Podemos mencionar que la planificación y conservación del turismo en las áreas de Patrimonio, debería garantizarse que la experiencia del visitante valga la pena y sea satisfactoria y agradable. También deberían ofrecer contenidos de calidad para optimizarla comprensión del visitante y la necesidad de proporcionarle su protección, posibilidades adecuadas de confort, y de sentirse a gusto de modo que aumente el disfrute de su visita sin ningún contratiempo, para las características significativas y ecológicas del lugar. Existen 2 tipos de calidad como calidad del visitante y calidad para él bien: 1.- Calidad para el visitante: Para la finalidad última de calidad es la satisfacción del cliente y así mismo diferenciamos dos tipos: a).- Calidad técnica: aquí la gestión cultural permite que el usuario comprenda y experimente las características significativas del patrimonio aumentando su competitividad. b).- Calidad de servicios: esto sería las prestaciones de calidad de cualquier competitividad. El turismo cultural garantiza una mejor gestión de los recursos para transformarlos en producto. 2.- Calidad para el bien: está calidad nos habla de la creación de una oferta competitiva que garantiza un consumo óptimo cultural. La importancia del ciclo de acciones garantiza satisfacción del cliente que radica en su aplicación continua y para garantizar el éxito a largo plazo del producto y su competitividad, se aplica un ciclo en la mejora mediante el cual se estará de la evolución del mercado, de los productos, y de todos los factores que afectan a la oferta turística. Concluyendo podemos comentar que la gestión del patrimonio cultural, empleando la calidad como parte de los procesos, permitiendo un desarrollo adecuado para crear una oferta competitiva que asegura su uso de manera sustentable. Para ello es necesario desarrollar programas de investigación para la aplicación de calidad cultural, para garantizar una mejor oferta competitiva en el ámbito de la difusión y conservación de la cultura. Esto debe ser una de las metas inmediatas de los responsables de la Gestión Patrimonial. Bibliografía Juan Fco. Castro León es lic. En Historia del arte por la Universidad de Santiago de Compostela y Mater. Universitario en Turismo Cultural. Badia Gimémez, Albert. 2002 ISO 9001 Deusto. Bilbao Ballarta Hernández, Josep. Jordi Juan y Tresserras.