ENZIMAS – II. Introducción a la acción enzimática Hemos visto que los enzimas son biocatalizadores que aumentan la velocidad a la que sucede una reacción, pero ¿cuáles son sus características? 1. No se alteran. Esto es, no son ni reactivos ni productos de la reacción que catalizan. P + Enz. R + Enz. De nuevo disponible !! 2. Son altamente específicas. Solo actúan ante un determinado reactivo. Se produce algo parecido a una compartimentación virtual, es decir, aunque las reacciones se encuentren localizadas en un mismo sitio físico ocurren independientemente unas de otras, ya que cada enzima atiende a su producto, y no a otros. 3. Tienen una acción óptima a temperatura ambiente. Esto era de esperar, ya que es la temperatura a la que se desarrolla la vida. 4. Su acción puede ser regulada. Esta última característica es sumamente importante, pues permite que las reacciones ocurran cuando y a la velocidad que el organismo necesita. Ya sabemos sus características, vale, pero ¿cómo actúan los enzimas? Para explicar primero debemos de conocer la hipótesis del estado activado o estado de transición de las reacciones químicas, la cual dice que para que uno o varios productos se transformen en los reactivos, siempre es necesario aplicar una cantidad inicial de energía que desestabilice a dichos reactivos y que sus enlaces se debiliten lo suficiente como para que ocurra la reacción y obtengamos los productos. Propone, por tanto, un estado intermedio o de transición, más energético que los reactivos. R E Ea R P Pues bien, la acción enzimática se fundamenta en rebajar la energía de activación necesaria para llegar al estado activado. A más la rebajen más fácil es obtener los productos y más rápida ocurre la reacción. Esto pueden hacerlo de dos maneras principales: A. Se unen al sustrato de modo que debilita sus enlaces internos favoreciendo la formación del estado activado. B. Atrayendo a los reactivos de modo que aumentan su probabilidad de encuentro y formación del estado activado.