Immanuel Kant (1724-1804) (Königsberg, hoy Kaliningrado, actual Rusia, 1724 - id., 1804) Filósofo alemán. Hijo de un modesto guarnicionero, fue educado en el pietismo. En 1740 ingresó en la Universidad de Königsberg como estudiante de teología y fue alumno de Martin Knutzen, quien lo introdujo en la filosofía racionalista de Leibniz y Christian Wolff, y le imbuyó así mismo el interés por la ciencia natural, en particular, por la mecánica de Newton. Obras La Crítica de la razón pura (1781) Los Prolegómenos a toda metafísica (1783) La Crítica de la razón práctica (1788) La crítica del juicio (1790) La Religión dentro de los límites de la mera razón (1793) La lectura de sus obras presenta dificultades por la complejidad de los temas tratados y por los tecnicismos que utiliza el autor. Razón pura y teoría práctica La Kant compartió los presupuestos que caracterizan al movimiento ilustrado. Es la razón la instancia suprema y la ausencia de racionalidad la responsable de todos los males del pasado, de nuestra minoría de edad. Ha de responder las siguientes preguntas: ¿Qué puedo conocer? ¿Qué debo hacer? ¿Qué me cabe esperar? Imperativo categórico Es un concepto central en la ética kantiana; y de toda la ética deontológica moderna posterior. Pretende ser un mandamiento autónomo (no dependiente de ninguna religión ni ideología) y autosuficiente, capaz de regir el comportamiento humano en todas sus manifestaciones. En la primera sección de esta obra, Kant especifica el contenido de este principio y argumenta que se encuentra implícito en las prácticas y razonamientos morales de las personas comunes y corrientes. En la segunda sección nos explica de qué manera este imperativo es vinculante para nosotros (de manera incondicional) e ilustra, mediante ejemplos, que este principio efectivamente identifica deberes morales. En la tercera sección de la Fundamentación Kant ofrece precisamente este argumento, de acuerdo con el cual el imperativo categórico es necesariamente el principio propio de una voluntad libre, y que, en tanto que somos sujetos de acción, tenemos que considerarnos a nosotros mismos como voluntades libres; por tanto, que debemos regirnos por este principio. Una máxima es cualquier regla de acuerdo con la cual alguien actúa; por ejemplo, la máxima de no trabajar un día a la semana para recuperar energías, de regresar a tiempo los libros a la biblioteca para evitar sanciones, de cumplir las promesas para mantener una buena reputación, o bien de cumplir las promesas por respeto a los demás, etcétera. Una máxima siempre contiene las razones conforme a las cuales alguien actúa; en los ejemplos anteriores, las razones son recuperar energías, evitar sanciones, mantener una buena reputación y respetar a los demás. Lo que el imperativo categórico hace es decirnos si nuestras razones para la acción son buenas o malas. Imperativo hipotetico Es un principio de racionalidad práctica porque nos dice en qué consiste actuar racionalmente: una persona racional toma los medios para realizar sus fines, una personal irracional no. A diferencia del imperativo hipotético, el categórico exige incondicionalmente que hagamos ciertas cosas o que las dejemos de hacer, esto es, sin suponer ninguna condición: uno debe, por ejemplo, respetar a los demás sin importar lo que uno piense, quiera o desee. Parece ser que Kant supone que, al ser seres libres y racionales, nos tiene que parecer claro que la obediencia incondicional a la ley debe de ser obvia. En la teoría de Kant no es el caso que la persona moral actúe moralmente porque quiera ser racional; la persona moral actúa moralmente porque valora a la humanidad como un fin en sí mismo, en su persona y en la de los demás. El fin o la aspiración de la persona moral no es ser racional, sino tratar a la humanidad siempre como un fin y nunca como un mero medio. Actividad 4 REALIZA UN ENSAYO PARTIENDO DE LA SIGUIENTE PREGUNTA GENERADORA: ¿ES POSIBLE REALIZAR UN GENOCIDIO SIGUIENDO EL IMPERATIVO CATEGÓRICO? Introducción: El imperativo categórico explica las acciones de la buena voluntad. Pretende ser un mandamiento autónomo (no dependiente de ninguna religión ni ideología) y autosuficiente Existe un único imperativo categórico, pero Kant lo formula de cuatro modos diferentes entre los cuales los que más destacan son los siguientes: “Actúa de tal manera que la máxima de tu conducta pueda convertirse en ley universal.” - Kant se refiere a la forma de los principios morales, los cuales deben ser universales porque es precisamente esa universalización que guía la acción la que permite determinar si una acción es buena o no “Procede de modo que trates a la humanidad, tanto en tu persona como en la de los demás, siempre como un fin en sí mismo y nunca como un medio” - Kant establece la diferencia fundamental entre el ser humano y la Naturaleza…la dignidad. Y por ello, precisamente, toda acción moral tiene en consideración la dignidad del resto de personas como principio fundamental que hay que respetar. Desarrollo: Yo digo que sí se puede realizar un genocidio siguiendo el imperativo categórico, ya que también habla sobre “lo que debo hacer”, un genocidio siempre tiene una persona la cual es líder y le da la orden a las personas que trabajan para él, las cuales tienen como obligación obedecer las órdenes, aunque también se basa en lo razonal y no tanto en la moral, si el en su razón piensa que esta haciendo lo correcto ante el imperativo categórico esta bien. Conclusión: El hecho de participar en un genocidio o liderar un genocidio no estaría cumpliendo del todo con lo que se dice de “debes obrar con buena voluntad”, ya que el hecho de hacerle mal a una persona no es moralmente correcto, además de si el hacer mal fuera una ley universal no confiaríamos en nadie ya que estaríamos constantemente con la duda de que podría hacernos la otra persona, pero por otro lado, las personas que son mandadas a realizar el genocidio simplemente están cumpliendo su trabajo, en el cual no deben cuestionar el porque ya que es su obligación como trabajadores el seguir órdenes.