Sigmund Freud en contraste con Alfred Adler Introducción “La vida es lo mismo que aprender a nadar ¡No tengas miedo de cometer errores, ya que no hay otra manera de aprender a vivir”! -Alfred Adler-. Adler y Freud, ambos tenían enfoques diferentes, Adler nunca acepto la teoría de Freud de que la materia sexual reprimida e inconsciente reprimida de la niñez fuera el centro de toda la neurosis. Adler quien veía la sexualidad como una expresión de la personalidad no como motivador; a diferencia de Freud, Adler creía que el hombre tiene posibilidades de mejorarse y de progresar en la vida, de reducir sus problemas y, con el tiempo, de llegar a un ajuste casi perfecto de su proceso vital. Freud ofrece explicaciones causalistas, Adler subraya la importancia del fin en las personas en la forma de organizar su presente. Basados en este orden de ideas contrapuntearemos la teoría psicoanalítica de Freud con la teoría de Adler. “Y que es en el mundo traidor nada es verdad ni mentira: todo es según el color del cristal con que se mira” -Ramon de Campoamor-. El psicoanálisis puede inferir en la teoría de la personalidad y así mismo la teoría de la personalidad inferir en el psicoanálisis, si estas son codependientes, usando cada una para refutar otra. Desarrollo Por lo tanto, al comparar ambas teorías que dan paso al comportamiento humano, una basándose en una amplia gama de deseos tratando al yo, como punto de partida para tratar las desviaciones socialmente aceptadas del comportamiento humano y otra teoría usando al super yo, como una versión donde podemos escoger y nuestra forma de actuar no solo se basa en deseos si no en ideas, una forma de como vivir, una forma en como ser mejores, no solamente para la sociedad si no para nosotros mismos. Sin embargo, para lograr la comprensión de ambas teorías ahondaremos en ambas a manera de grandes rasgos para lograr una mejor idea de comparación. El psicoanálisis: Freud buscaba el sentido de aquellos síntomas psíquicos que se denominan histéricos. Y comprobó que tales síntomas tienen realmente un sentido, aunque éste es inconsciente, es decir no lo conoce ni el propio enfermo, pero no es inconsciente del mismo modo que lo es algo que se olvida; lo que sucede es que se reprime, se lleva al inconsciente, eliminándolo y manteniéndolo apartado de la conciencia. Además, Freud creía poder demostrar que el contenido de tales vivencias inconscientes, reprimidas, está en relación con la vida sexual. Este hecho es, según Freud, la causa que provoca la represión de las correspondientes vivencias. Tenemos que recordar que el psicoanálisis da al término “pulsión sexual” un sentido amplio, y que, en definitiva, a lo que hace referencia es a la impulsividad o energía vital. El tratamiento psicoanalítico pretende eliminar la neurosis suprimiendo la represión y haciendo de nuevo conscientes los procesos inconscientes. De la escuela psicoanalítica derivó una segunda orientación importante, también en Viena, denominada: Psicología individual: de Alfred Adler. Éste partía en sus investigaciones de lo que él denominaba la inferioridad orgánica, con concepto bajo el que entendía una inferioridad congénita, innata, d e los órganos. Observó que esta inferioridad repercute en el ámbito de lo psíquico y provoca lo que la psicología individual designo con el conocido término de: “complejo de inferioridad”. Se abrió entonces una interesante perspectiva para Adler: podía demostrar que, aparte de la inferioridad orgánica, hay otras circunstancias que pueden provocar un complejo de inferioridad, ya que desde la primera infancia: por ejemplo, una salud general delicada, una debilidad general y, sobre todo, una deformidad real o sólo en mayor o menor medida; lo tiene como hombre, es decir, como el ser que en los primeros años de su vida necesita más que, los animales, la ayuda de los demás, de los adultos, de los padres. La psicología individual se fuerza en tales casos en atacar de raíz el excesivo afán de valimiento de estas personas, nerviosas, inseguras, en primer lugar, haciéndolas conscientes de lo que se oculta detrás, esto es, del complejo de inferioridad que ellas mismas no conocen, y, en segundo lugar, enseñándolas a superar ese complejo; en una palabra, estimulándolas y volviéndolas a integrar en la comunidad humana. Debemos admitir también que Freud estaba ligado al naturalismo de su época. Es decir, veía en el hombre un ser natural, sin tener en cuenta su carácter espiritual. El hombre tiene impulsos, pero su esencia no se puede definir sólo a partir de estos impulsos, Freud veía correctamente, pero no lo veía todo, sino que simplemente generalizaba todo lo que había visto. El hombre tiene impulsos; pero cuando esta impulsividad sale a la luz, el hombre ya no está sano, si no que se trata de un caso especial, de una persona que tal como se mantiene dicho “se deja llevar por sus impulsos”, Freud quería explicar el conjunto de la cultura humana a partir de la impulsividad. La terapia individual es el encuentro entre el terapeuta y el paciente en donde un ambiente de aceptación, confidencialidad y apertura el paciente puede expresar sus problemas y emociones. En la terapia se logra cambiar el concepto de uno mismo y sanar las hullas que aún nos afectan. 1. Ningún radiólogo se le ocurriría afirmar que el hombre se compone sólo de huesos, si no que sabe que en realidad existen también otros tejidos. Se puede ir incluso más lejos: siempre que se le ve un hueso a un hombre vivo, ese hombre ya no está sano, si no que tiene una fractura abierta. 2. Nietzsche dijo en cierta ocasión: “Quien tiene un porqué para vivir soporta casi cualquier cómo”. Es decir, a quien encuentra un sentido a su vida, esto le ayudará más que cualquier otra cosa a superar las dificultades exteriores y los sufrimientos interiores. 3. La manera de actuar de cada persona se puede dar de una forma social e individual, hoy en día lo podemos hacer notar con la complejidad de la pandemia por Covid-19, la sociedad se deja influenciar por el miedo, la desesperación e incertidumbre, pero el ser individual es inteligente, y puede encontrar una solución a los problemas de salud físicos y mentales que deja a su paso esta pandemia. Entonces al ser seres sociales e individuales al mismo tiempo, ya que lidiamos con nuestras pulsiones como ser físico al no poder satisfacerlas en la sociedad actual que vivimos, pero así mismo ser un ser que puede controlar su destino y su forma de actuar para entender un propósito de vida, Alfred y Adler así vieron al ser humano, en una forma generalizada y en una forma singular, ambos en lo cierto hasta cierto punto ya que ambos vieron a través de distintas ventanas del comportamiento humano. Conclusión. En síntesis, la psicología individual de Adler contrasta con el psicoanálisis de Freud en que una ve a la persona de una manera generalizada tomando en cuenta aspectos básicos de la vida diaria y comportamiento general en la sociedad. Sin una necesidad de ver más haya de la situación, contexto y encerrando la mayoría de los problemas en una forma natural de vida, más sin embargo Adler toma la psicología individual como ya es propiamente dicho más haya de lo natural, encerrando a la persona la necesidad de salir de la inferioridad que adopta, una manera de encontrar su propósito en la vida al superar cada obstáculo que se le presenta en una manera singular, viendo cada aspecto emocional de su vida, creencias, esperanzas, metas. Así pues, decimos que ambas son necesarias a pesar de la contrariedad ya que ambas infieren una de la otra en los aspectos de vida que tenemos, tanto social como individual, por que eso somos, seres sociales y así mismo individuales. ¿A dónde nos encaminamos como sociedad e individuos con la actual manera en que se desarrolla nuestro comportamiento? Lista de referencias. Frank V. (1905-1997) neurólogo y psiquiatra austriaco fundador de la logoterapia. La psicoterapia al alcance de todos; II El psicoanálisis y la psicología individual. Disponible en: http://www.conoze.com/doc.php?doc=8002