Necesitamos cimentar las bases para una banca sustentable El Comité Técnico de Alide para el Financiamiento Ambiental y Climático analizó en Mendoza los avances de la banca de desarrollo en materia de financiamiento de inversiones sustentables. La cita se dio en el marco de la 43ª Asamblea General. En la reunión del comité ambiental de Alide una de las principales conclusiones fue la necesidad de cimentar las bases para consolidar los proyectos financieros sustentables. En el encuentro también se revisaron los criterios para la profundización del aspecto de sustentabilidad ambiental en la banca, así como para su participación en los esquemas de financiamiento climático internacional, destacándose la alianza con los organismos internacionales especializados como la UNEP-FI y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a esos efectos. El tema de la reunión “La banca de desarrollo y el financiamiento de inversiones sustentables” respondió a la necesidad de incrementar las inversiones verdes que requiere el tránsito hacia economías de bajo carbono en la región, cometido en el cual los bancos de desarrollo pueden desempeñar un rol principal, no solo en el financiamiento de inversiones prioritarias como instrumento de las políticas públicas ambientales; sino igualmente catalizando la participación del sector privado mediante la contribución de las instituciones financieras de desarrollo (IFD) al mercado de negocios verdes que viabilice un camino de inversiones sustentables. Uno de los aspectos importantes que hay que considerar en una aproximación al problema, es que hay que empezar aunque parezca obvio por lo más simple y escalar hacia lo más complejo. De acuerdo con la experiencia de la Financiera del Desarrollo (Findeter), de Colombia, su proceso consideró tres criterios: el primero fue plantearse el concepto de eco-eficiencia interna a través de medir su huella de carbono; el segundo y más relacionado con su actividad crediticia consiste en preguntarse ¿cómo hago para que el financiamiento que otorgo considere adecuadamente los riesgos ambientales y sociales de las actividades que apoyo? Se desarrolla al efecto actividades de capacitación y productos como guías y manuales internos; una vez que he medido mi eco-eficiencia (y tomado pasos positivos para mejorarla), así como desarrollado estándares para gestionar los riesgos ambientales y sociales en mi giro de negocio, puedo escalar ahora a buscar oportunidades de negocios verdes y ese es el tercer paso, oportunidades que surgen muchas de ellas de la identificación de los riesgos ambientales y sociales de mis actividades. El mensaje para las IFD es entonces, primero cimentar las bases como banca sustentable lo que te dará la experiencia y fortaleza para seguidamente incursionar en la prospección de negocios verdes y su financiamiento. Una organización aliada de Alide que ayuda a las instituciones financieras a cimentar esas bases es UNEP-FI (la iniciativa financiera del programa de las Naciones Unidas para el medio ambiente), la cual procura identificar las mejores prácticas sostenibles y promover su integración en todos los niveles de las operaciones de las instituciones financieras. En América Latina destacan entre otras sus actividades de capacitación para el Análisis de Riesgos Ambientales y Sociales (ARAS) orientados a la implantación de sistemas de gestión de estos riesgos en las instituciones financieras. UNEP-FI y Alide han suscrito un Memorando de Entendimiento para promover la sustentabilidad en la banca y son varios bancos de desarrollo los que se han adherido a la iniciativa. Otro desafío que se plantea a la banca de desarrollo ahora en relación a su participación en el financiamiento para el combate al cambio climático, es el papel que estas instituciones pueden desempeñar en la intermediación de los recursos del financiamiento climático internacional disponible (fondos) que permita apalancar el financiamiento privado para proyectos de mitigación al cambio climático en los mercados de crédito local. En el gráfico se presenta de modo indicativo la arquitectura de los fondos a nivel internacional y su destilamiento hasta los niveles nacionales en los países receptores para ser aplicados a través de agencias implementadoras nacionales o bien formar parte de fondos climáticos nacionales. La idea es que las IFD participen como parte de la arquitectura en el nivel nacional junto a las agencias especializadas para la distribución y apalancamiento de estos recursos con el sector privado, para lo cual requieren fortalecer capacidades vinculadas a esta intermediación. El BID con la colaboración de Alide vienen ejecutando el programa “apoyo a los bancos de desarrollo en el financiamiento para la mitigación al cambio climático” abordando en una serie de talleres regionales aspectos críticos de esta participación. El próximo taller se efectuará en la ciudad de Cartagena de Indias, Colombia, el 17 y 18 de octubre de 2013 organizado localmente por Findeter y analizará “El rol de las garantías en la estructuración de financiamiento ambiental y climático: buenas prácticas en el desarrollo de instrumentos de transferencia de riesgos para inversiones verdes”. En esta transferencia de conocimientos a la banca de desarrollo se ha ganado importantes vínculos con instituciones de consultoría y asistencia técnica especializadas en temas climáticos y ambientales, como es el caso de Eco Ressources www.ecoressources.com que presentó al Comité sus soluciones en el diseño de políticas y estrategias en aspectos de sostenibilidad y clima.