El primer nivel es el microsistema y es el más cercano al sujeto, incluye comportamientos, roles y relaciones de los contextos cotidianos de las personas (Torrico et al, 2002). Por lo tanto, en este nivel se encuentran los compañeros, familiares, profesores y el colegio, ya que es aquí donde los estudiantes participan de manera activa en cuanto al desarrollo de su sexualidad. La familia es considerada como el núcleo más primario del ser humano, por lo que cumple un rol fundamental en el desarrollo sexual de niños y adolescentes (Domínguez, 2011). Por otro lado, los colegios y profesores también juegan un papel de suma relevancia para promover la Educación Sexual, ya que, estos de alguna manera, buscan y deben entregar a niños, niñas y adolescentes el conocimiento, competencias y valores que les permitan asumir responsabilidad sobre su vida sexual y social (González et al, 2015). Por último, los compañeros de curso y amigos son una de las principales vías mediante las cuales los adolescentes reciben información sobre Educación Sexual, lo que se justifica por el relevante papel que juega la comunicación entre pares en la etapa escolar (Soltani et al, 2017). En segundo lugar, el mesosistema comprende las interrelaciones entre dos o más entornos en los que la persona participa activamente, aquellos mencionados en el microsistema (Dwi & Indartono, 2019). En este caso, podemos encontrar, por un lado, la relación entre profesores y apoderados, ya que, muchas veces, por distintas razones, puede que los apoderados no estén de acuerdo con distintos temas que puedan surgir en clases acerca de Educación Sexual, o no se vean interesados en promover sobre esta, a diferencia de los profesores, por lo que puede ocurrir un dilema entre estos. Además, según lo que mencionaba Daniel, a los padres se les hacen charlas, a las cuales no llegan y se les entrega material gratuito mediante una plataforma, sin embargo, solo ingresa el 10% de estos (D. Seguel, comunicación personal, 8 de septiembre de 2021). Por otro lado, existe una relación entre compañeros y colegio, ya que, muchas veces los estudiantes exigen una Educación Sexual no sexista, por ejemplo, a través del centro de alumnos para que así llegue a los distintos estamentos del colegio (D. Seguel, comunicación personal, 8 de septiembre de 2021). En tercer lugar, el exosistema se refiere a diferentes entornos que excluyen a la persona como participante activo. Sin embargo, en estos entornos se generan hechos que afectan a lo que ocurre en el entorno de la persona (Torrico, et al., 2002). En este lugar se encuentra tanto el Ministerio de Educación como el Ministerio de Salud los cuales han implementado distintos programas de Educación Sexual. Por otro lado, la fundación CESI, incluyendo todas sus áreas, también vendría siendo parte del exosistema, ya que, su objetivo es promover la Educación Sexual capacitando a profesores y apoderados para poder llegar a los alumnos, sin embargo, no trabajan directamente con ellos, por lo que no hay una interacción como tal con los estudiantes. En cuarto lugar, el macrosistema tiene relación con los factores influyentes ligados a características culturales e históricas (Torrico, et al., 2002). Aquí se puede apreciar que existen distintas creencias ligadas a lo que es la sexualidad, por un lado, religiosas, ya que, el catolicismo sigue teniendo fuerte influencia en nuestro país, por lo que la visión sobre sexualidad humana que ha tenido este y las religiones en general han tenido un gran impacto cultural, trayendo repercusiones sociales, políticas y personales (Hernández, 2002). También existe una visión médica, según comentaba Daniel Seguel, en donde la medicina trató de analizar el sexo siempre desde lo genital, lo que dificulta la comprensión de lo que realmente es la sexualidad (D. Seguel, comunicación personal, 8 de septiembre de 2021). Por último, el cronosistema hace referencia al tiempo o época histórica en el cual vive y se desarrolla la persona (Dulcey, 2010). Aquí podemos encontrar las distintas etapas del ciclo vital en que se encuentran los estudiantes, en donde existen distintas maneras de entender y vivir la sexualidad, además entendiendo el contexto actual de COVID-19, lo que también implica una influencia.