Valores éticos en Odontología Ma. del Pilar Adriano Anaya Tomás Caudillo Joya. Profesores de Tiempo Completo de la FES-Z UNAM. Resumen S e presentan los valores éticos presentes con respecto a los paradigmas biológico unicausal, ecológico multicausal, e histórico social o integral en el desarrollo de las ciencias de la salud en general y en particular de la Odontología. Fomentar los valores éticos es un desafío que debemos asumir todos los profesionales en nuestros diferentes ámbitos de competencia ya sea como formadores de sujetos humanos, en las instituciones prestadores de servicios o en la investigación. enfoque cartesiano positivista (Morín, 2012, p.9-10); con el desarrollo de las fuerzas productivas, en la Revolución Industrial, el paradigma unicausal cobra nuevas fuerzas. El inmenso desarrollo tecnológico permitió el avance de la medicina sustituyendo a las explicaciones mágica y religiosas, dándose una recursividad con los descubrimiento microbiológicos, el parásito, la bacteria y posteriormente el virus pasando a ser los microorganismos las causas únicas de la enfermedad, en esta propuesta teórica se ve reflejado los principios que sustentan a la ciencia clásica como son: • Principio de un determinismo absoluto: donde se hace énfasis que son las ciencias de la naturaleza las únicas y necesarias para que se generen los problemas de la enfermedad. • Principio del determinismo que se conoce como de reducción: se buscan elementos primarios. En el caso de este paradigma sería la bacteria, el virus o el hongo, el factor único y necesario para producir las enfermedades. Estableciendo una relación dialógica entre microorganismoenfermedad, siendo ésta el objeto de estudio de la unicausalidad (Morín, 2008 p.28); existe una visión simplificante, en la que evidentemente la causalidad es simple; es exterior a los objetos; les es superior; existe una relación lineal entre el microorganismo-enfermedad (Morín, 2012, p.28-29). Palabras claves: Valores éticos, paradigma, unicausalidad, multicausalidad, histórico social. Desarrollo En el desarrollo de la ciencia desde el siglo XVII, el conocimiento científico se erigió en patrón normativo de conocimiento y paulatinamente desplazó otro tipo de saber, hasta constituirse casi exclusivamente en representante único y legítimo del saber humano (Sagal Carl p.27). René Descartes estableció los presupuestos básicos de la ciencia disciplinaria como parte del ideal clásico de racionalidad, la separación absoluta de la objetividad-subjetividad, la universalidad del conocimiento y la disyunción. Si buscamos cualquier obra que estudie la ciencia, el método científico aparece como una constante; es una forma de objetivación que permite distinguir las suposiciones y creencias, de aquello que puede ser objetivado es decir, excluyendo al sujeto que produce el conocimiento. (Delgado Carlos, 2012 p.7) Con respecto a la ética, la ciencia occidental, a partir del siglo XVII, necesitaba de su eliminación y sólo salvaguardar la única ética de conocer por conocer. ¿Y por qué debía hacerse esta eliminación? porque en el siglo XVII y en los primeros siglos de la ciencia, debía plantear su autonomía, frente a los grandes poderes teológicos y políticos, la ciencia debe tener únicamente juicios de hecho y no juicios de valor. Este pensamiento del paradigma Cartesiano permeó también a las Ciencias de la Salud con la Teoría Unicausal. Su surgimiento se dio en la segunda mitad del siglo XIX y principios del siglo XX bajo este 58 Odontología Actual / año 10, núm. 124, Agosto de 2013 El cuerpo humano es considerado como una máquina a la que hay que reparar en caso de que se enferme. El mismo pensamiento reduccionista llevó a las especializaciones médicas, esto es descomponer el cuerpo humano en partes cada vez más pequeñas sin lograr la integración de las mismas. Esto llevó a la deshumanización (contravalor), del ser humano, separándolo también del contexto en el que se desarrolla. En lo que se refiere a las Escuelas y Facultades de la Carrera de Cirujano Dentista, como parte de las Ciencias de la Salud, los valores en las que se fundamentaron son: 1. Se fomenta la atomización del organismo por medio del surgimiento de las especialidades y la desintegración con respecto a su contexto. 2. La investigación es un proceso rígido y excluyente, tiene un carácter impersonal de sus resultados. 3. La formación de sus recursos humanos es individual, intrahospitalaria, separa lo clínicobiológico. 4. El servicio que presta es de tipo curativo, costoso y excluyente. La Revolución Científico Técnica que se desarrolla después de la Segunda Guerra Mundial, no tiene en su centro sólo el cambio en las prácticas internas de la ciencia, sino el cambio de la ciencia y la tecnología en todo el sistema de producción y en la modificación de la vida cotidiana, se dan los cambios en la agricultura, química, la cibernética, las comunicaciones, microeléctrica, el conocimiento comienza a desempeñar un papel más creciente en el cambio social y se automatiza como objeto de valor en sí mismo. Así, cuando se incorporan los avances tecnológicos y la especialización, se inicia el redescubrimiento del carácter social y cultural de la enfermedad y su articulación con la estructura de la sociedad, superando la reducción de causalidad lineal y reconociendo los diferentes procesos de la causación de las enfermedades (La complejidad como desafío, p.3). Con la incorporación de los aspectos sociales, se da una recursividad, (La estrategia Meta-paradigmática, p.2); permitiendo el surgimiento de la teoría multicausal, perfeccionada a través del paradigma de la historia natural de la enfermedad y se consolida, en la década de los sesentas, en el paradigma ecológico o sea la relación de la triada: huésped, agente y medio. El paradigma Multicausal, que surge en la década de los sesentas del siglo XX, tuvo como mayor exponente a Brian Mac Mahon (Gómez Castellanos, 1992, p.6). Este autor rompió las ataduras del molde unicausalista, argumentando que la enfermedad no era resultado automático del ingreso al cuerpo saludable de un agente patógeno sino que la etiología de una enfermedad tiene una secuencia que consta de dos partes: 1) eventos causales que ocurren antes de cualquier respuesta corporal; y 2) mecanismos intracorpóreos que conducen desde la respuesta inicial hasta las manifestaciones características de la enfermedad. Con lo que se plantea una cadena de causalidad, asociadas a la aparición de un trastorno. Con respecto a los valores de los sujetos humanos (Adriano, Caudillo, Gómez, 2002, p.28-29), se da una declaración de responsabilidades y proyección social de las profesiones sanitarias, que busca crear sensibilidad y conciencia sociales tanto en estudiantes como en profesores. Reconocimiento de la prevención y promoción para la erradicación de las enfermedades. Elaboración y ejecución de los programas extramuros para servicios a la comunidad, conocidos como prácticas de campo. Aceptación de la existencia de factores sociales en la producción de las enfermedades. Se generan los departamentos preventivos y sociales en las diferentes facultades y escuelas. En las currículas de éstas se yuxtaponen disciplinas de la Salud Pública, Administración, Epidemiología, Estadística, Saneamiento Ambiental, Educación para la Salud, que se manejan al margen de los componentes biológico-clínicos de los planes de estudio. Sin embargo, el hombre biológico se sigue estudiando en el Departamento de Biología, y el hombre cultural en los Departamentos de Ciencias Humanas y Sociales. Nos olvidamos que uno no existe sin el otro; más aún, que uno es, al mismo tiempo, el otro (Morín, 2001, p.8). Si bien el paradigma de la multicausalidad identifica diferentes factores para el origen de la enfermedad, no existe una priorización, ni la búsqueda de las causas de los factores que están ocasionando la enfermedad, cayendo en un nuevo reduccionismo al todo, contrario al reduccionismo de las partes. (Moreno et. al. 2002, p.9). La práctica odontológica hasta la fecha actual sigue teniendo los siguientes valores: individual, curativa, mutiladora, mercantilista, excluyente, deshumanizada, al paciente se le ve como un objeto didáctico que le sirve a los alumnos únicamente para cumplir con sus objetivos, es inequitativa, y es una profesión que no cumple con las expectativas que tiene la población sobre nosotros que es “la satisfacción de sus necesidades bucales”. Los alumnos que hemos formado o estamos formando en Odontología hasta este paradigma ¿los hemos formado o deformado? ¿Los hemos formado para la vida? porque los maestros no hemos podido incidir en la formación de nuestros alumnos que cambie el sentido de los conocimientos que se les da a lo largo de la carrera para que los humanice con valores éticos. Por qué no hemos podido romper en la Odontología con los valores que ha caracterizado a nuestra profesión desde inicios del siglo XX hasta la actualidad. Desde 1980 en toda América Latina, la necesidad de crear alternativas teórico metodológicas que permitan entender el proceso salud enfermedad en su dimensión histórico social, fue abriendo espacios hacia otras interpretaciones cuyas bases no fueran fundamentalmente clínico-biológicas, sino que se abordaran los determinantes sociales de la problemática salud-enfermedad, conociéndose esta área como de la historia social del Proceso Salud Enfermedad- Epidemiología Crítica, el cual pasa a ser considerado como uno de los procesos de la totalidad social. La salud ya no es entendida como un estado; es un proceso de construcción permanente en el que se reconoce lo cultural y lo social como manifestaciones simbólicas y materiales que comprometen Odontología Actual 59 todas las relaciones del hombre y por lo tanto de su vida misma; la realización de un campo de salud implica una intervención sobre la vida más que sobre la enfermedad (Rosado A. 2006, p.30). Abordar al proceso salud-enfermedad como objeto de estudio en las Escuelas y Facultades de Odontología, es un proceso complejo que está llevando a la reforma de los planes y programas de estudio, con el propósito de integrar el conocimiento en sus áreas de conocimiento biológica, clínica y social, como dice Morín E. (Citado por Malinowki N. 2012, p.6), ubicar al hombre y a la humanidad en el centro de nuestra reflexión y desarrollar una concepción integradora del conocimiento, como lo es la transdisciplina integrando desde una perspectiva de interconexión a la disciplina, multidisciplina y a la interdisciplina. Ante el objeto de estudio Proceso Salud–Enfermedad fenómeno altamente complejo surgido de una realidad cambiante y dinámica, para su comprensión ante el avance continuo y permanente, los valores que debemos asumir son: la humildad, la responsabilidad, y honradez para el acceso del conocimiento, ya que éste se genera día a día, en consecuencia habrá propuestas teórico metodológicas diferentes para su abordaje y comprensión. Nuestros profesionistas maestros y alumnos deben reconocer al paciente como una persona que tiene necesidades, que sufre, siente y llora por lo que debemos asumir con responsabilidad cada una de las Referencias bibliográficas 1. Adriano P. Caudillo T. Gómez A. (2002). Epidemiología estomatológica. Facultad de Estudios Superiores Zaragoza UNAM, México: p. 15-28. 2. Delgado Carlos. Tema 1 Ideales de racionalidad, saber científico e historia cultural de la ciencia. Doctorado en Pensamiento Complejo 2012. P.7 3. Gómez Castellanos A. (1992). Educación permanente. Folleto FES-Z UNAM México p.6. 4. La complejidad como desafío. Complemento del Módulo III: Doctorado en Pensamiento Complejo Multiversidad Mundo Real. Edgar Morín. Hermosillo Sonora México. P.3. 5. La estrategia Meta-paradigmática. Doctorado en Pensamiento Complejo. Módulo 4: Multiversidad Mundo Real. Edgar Morín. Hermosillo Sonora México. p.2. 6. Moreno J. et. al. (2002). Manual de iniciación Pedagógica al Pensamiento Complejo. Un marco para la complejidad. UNESCO. 60 Odontología Actual / año 10, núm. 124, Agosto de 2013 acciones odontológicas realizadas a sus pacientes a partir de la libertad que les da el conocimiento para elegir y llevar a cabo determinadas actividades que él priorice, de tal manera asumir que el paciente es un ser humano que recurre a nosotros con necesidades sentidas y reales en donde debemos actuar de una manera profesional para satisfacer sus problemas bucales donde odontólogo–paciente encuentren satisfacción por los resultados. Debemos tener el compromiso social para satisfacer las necesidades odontológicas sin importar la clase social o la religión a la que pertenezcan nuestros pacientes, actuando con equidad y justicia a nivel individual y colectivo y con respeto a la diversidad. Asimismo, tener la honestidad y humildad para reconocer nuestras limitaciones en los problemas odontológicos complejos que no estén a nuestro alcance el poder resolverlos, y requerirá de la participación de otros profesionistas. El desarrollo científico tecnológico debe ser una prioridad en nuestra profesión debido a que dicho conocimiento avanza de manera permanente, por lo que siempre debemos permanecer actualizados. La tecnología debe estar al servicio de la sociedad para la solución de sus problemas odontológicos y no actuar negociando su salud. Fomentar los valores éticos es un desafío que debemos asumir todos los profesionales en nuestros diferentes ámbitos de competencia ya sea como formadores de sujetos humanos, en la Instituciones prestadores de servicios o en la investigación. Instituto colombiano para la Educación superior: p.19. 7. Malinowski N. (2012). Bibliografía Indicativa del Módulo 9. Doctorado en Pensamiento Complejo. Multiversidad Edgar Morín. Hermosillo. P.6 8. Morin E. (2001). Introducción al pensamiento complejo. GEDISA, España: p.8. 9. Morín E. (2008). pensando la complejidad. Cátedra de complejidad No. 5 año 2 Instituto de Filosofía. Consejo de Ciencias Sociales. Academia de Ciencias Cuba. p. 28. 10. Morín E. (2012). Introducción al pensamiento Complejo. Doctorado en pensamiento Complejo, Módulo 1, Multiversidad Mundo Real. Edgar Morín. Hermosillo Sonora México: p.9-10. 11. Morín E. (2012). Epistemología de la complejidad: doctorado en Pensamiento Complejo Multiversidad Mundo Real. Edgar Morín. Hermosillo Sonora México: p.28-29. 12. Rosado A. (2006). La investigación cualitativa en la promoción de la salud. Un nuevo paradigma en Salud Pública. Paradigmas de promoción de la Salud. Enfoque Integral en la intervención de la salud. FES-Zaragoza UNAM. México: P.30