Cuidado, compañía y atención de... Steve Paxton La pequeña danza. El soporte. Relájate profundamente dentro del cono de la cavidad ocular. Imagina una línea que corre entre los oídos. Es allí donde descansa el cráneo. Haz el movimiento, muy pequeño, para “Sí”. Esto hace balancear el cráneo sobre la vértebra superior, el atlas. Debes intuir los huesos. Como una rosquilla, la sensación que los rodea los define. Haz el movimiento para “No”. Entre ambos movimientos podrás determinar la longitud de dicha vértebra. Inflando los pulmones. Respira desde el fondo del pulmón hacia la clavícula. ¿Puedes expandir las costillas hacia afuera, hacia arriba y hacia atrás con facilidad? Definiendo el diafragma en términos de sensación. Fondo del pulmón. Dos cúpulas de músculo. Con cada respiración brindas masaje al intestino. Lo que el diafragma está haciendo es una señal para el resto del cuerpo. Cielo arriba, tierra abajo... En este trabajo, la cabeza es un miembro. Tiene masa. La masa puede ser la sensación específica más importante. El sentimiento de gravedad. Continúa percibiendo la masa y la gravedad mientras te sostienes. La tensión en el músculo enmascara la sensación de gravedad... Has estado nadando en la gravedad desde el día que naciste. Cada célula sabe dónde es el abajo. Fácilmente olvidado. Tu masa y la masa de la Tierra se llaman entre sí... Fuerza ascendente de los huesos. Los omóplatos caen por la espalda, relajando los intestinos en el cuenco de la pelvis. En dirección hacia donde cuelgan los brazos, sin modificar tal dirección, haz el estiramiento más pequeño que puedas percibir. ¿Puede ser aún más pequeño?. ¿Puedes hacer menos? La iniciación del estiramiento, a lo largo de la longitud de los huesos, va hacia donde la fuerza ya está yendo. La pequeña danza: te estás relajando y te sostiene. Los músculos mantienen el peso a través del esqueleto. Compensando el peso de una pierna a otra; interfaz: toma el peso, comprime. Estira a lo largo de la línea de compresión. Es el centro de la pequeña danza. Posición vertical... Columna erecta... Siente el fondo del pulmón, el diafragma, siéntelo dando masaje a los órganos, descendiendo dentro del cuenco de la pelvis, relajando los genitales y el ano... Inhala profundamente... Exhala lentamente... Siente la pausa en la exhalación... Aguarda el inicio de la inhalación. Es un tiempo pleno en aceleración y pausa... Siente el tiempo pasar a través de la respiración... No inicies la respiración... Tan sólo observa el periodo... Trata de atrapar tu mente en el exacto momento en el que la inhalación vuelve a comenzar... Sostente... Relájate de pie, erguido, con el peso dirigido hacia la mitad posterior de la rodilla, por un poco de peso en los metatarsos... Relaja el cuero cabelludo... Relaja los párpados... Relaja la zona posterior de los ojos... Relaja profundamente el interior de la cuenca ocular... No malgastes energía bloqueando o tratando de enfocar... Deja que fluyan tus ideas... Porque ciertas cosas enmascaran otras cosas y es mejor por ahora no tener concentración... Siente el juego de aceleración y pausa de la pequeña danza que sostiene tu verticalidad cuando te relajas... A través de la simple masa y el equilibrio... 60% en el metatarso, algo le toca a los dedos de los pies, el resto atrás... Rodillas un poco relajadas... Deja que tu respiración guíe tu torso, haciéndote simétrico... Permite que tus costillas se abran a medida que vas inflando los pulmones... Los brazos cuelgan en los costados... Siente la pequeña danza... Siempre ha estado allí... Piensa en la alineación de los huesos, los miembros, hacia el centro de la Tierra... Percibe la longitud de los huesos... Lleva tu peso sobre la pierna izquierda... Cuál es la diferencia... En el muslo, en la articulación de la cadera... Llama a esta sensación... Toma ahora la sobre la pierna derecha, siente el cambio... La bajando a lo largo del hueso... Lleva tu cuerpo a la posición neutral... Inclínate hacia adelante... La en el área delantera, el estiramiento en la espalda... No tengas en los brazos, no hay peso allí... Inclínate hacia adelante otra vez... Siente la diferencia... Relájate... Neutral... Inclínate hacia atrás... Estírate conforme la longitud de tu cuerpo... Neutral... Estírate... Deja que la columna vertebral suba a través de los hombros... Deja que la cabeza se sostenga en una línea entre los oídos... Haz el movimiento para “Sí”... Balancea la cabeza... El atlas... Haz una conexión con el estiramiento, una larga línea de estiramiento entre el metatarso y el atlas, entre los dedos de los pies, el metatarso, por la pierna hacia la columna vertebral, hacia el atlas... Has estado cayendo en la gravedad desde el día que naciste... Imagina, pero no lo hagas, imagina que estás a punto de dar un paso hacia adelante con tu pie izquierdo. ¿Cuál es la diferencia? De nuevo sostente, erguido... Imagina, pero no lo hagas, imagina que estás a punto de dar un paso ahora con tu pie derecho... Tu pie izquierdo... Tu pie derecho... Izquierdo... Derecho... Izquierdo... Vuelve a sostenerte, erguido. Lentamente, deja que tu cuerpo se derrumbe hacia una posición en la que esté en cuclillas... Soltarte en una caída voluntaria. Respira, en cuclillas, con las manos en el suelo, el cuello relajado... Observa si es que puedes relajarte en esta posición... Y sube. FIN. Originalmente publicado por la revista Contact Quarterly, estas instrucciones para la pequeña danza fueron transcritas durante una reunión de trabajo que, en 1977, celebraron Steve Paxton, Nita Little, Lisa Nelson, Curt Siddall, David Woodberry y Nancy Stark Smith en la Costa Oeste de los Estados Unidos. Notas agregadas por Paxton en abril de 2008. 1.Una rosquilla o dona es un toroide. Una forma circular con un hoyo en el centro. La idea aquí es que los músculos alrededor del cuello poseen sensación y el hueso tiene muy poca. Las sensaciones de movimiento entre el cráneo y el atlas son vagas, inespecíficas, por lo que la imaginación proporciona el sitio exacto de la acción. Comprender la anatomía del sitio brindará mayor poder a la imaginación para proporcionar una imagen de esta acción entre las orejas, donde el cráneo se apoya en la columna vertebral. En general, los huesos pueden detectarse durante el movimiento articular y cuando están bajo compresión (transfiriendo peso al piso). Pero estas sensaciones son mucho más sutiles que las del tejido circundante. 2.Se trata de una frase para dotar de conciencia a una región aproximada del diafragma. Se trata de dos cúpulas musculares que deben conocerse anatómicamente. Además, muchas personas no saben que el diafragma se eleva durante la exhalación y desciende durante la inhalación. Este movimiento respiratorio proporciona presión y liberación, lo que se describe como un masaje a los órganos y los intestinos. “El Cielo arriba, la Tierra abajo”, una figura tomada del taoísmo. El punto es que el aire de los pulmones y los órganos debajo del diafragma guardan entre sí una relación cambiante pero siempre sensible e íntima, dividida y definida por el movimiento del diafragma; así como recordar el interior del torso, desde la clavícula al isquion por medio de la suave presión y relajación. 3.La gravedad es una fuerza natural, la masa es aquello sobre lo que actúa esta fuerza. Las relaciones entre gravedad y masa son idénticas, otro ejemplo de una relación íntima y cambiante. En general, recordar la masa y la gravedad permite la relajación de las tensiones musculares. Otra forma de acercarse a esta sensación es tensar los músculos (sujetándose contra la fuerza de gravedad) y luego liberar la tensión. De pie, erguido, a través de este proceso se revelará la Pequeña Danza, los reflejos que permiten el equilibrio al estar de pie. Al igual que la respiración, es un evento natural en el cuerpo que puede ser observado y manipulado, tal y como cuando decides caer hacia el piso: un equilibrio intensificado. 4.Esto refiere a la noción de que los huesos soportan el peso, lo que es notorio si los músculos se relajan un poco. Esta es la sensación de resistencia a la gravedad y con esto, y con la Pequeña Danza, se torna una forma de reconocer el apoyo del esqueleto y las variantes de postura. “Los huesos se elevan, los músculos se relajan”, es una descripción de un estado de movimiento en el que no hay tensión muscular innecesaria. La tensión y el tono necesarios se mantendrán activos de forma natural. También se trata de lograr una relación “íntima y sensible” con la pareja durante la práctica de Contact Improvisation, y también con la superficie sobre la que bailas. 5.-Estira a lo largo de la línea de compresión. Asumiendo que se ha sentido la compresión, por ejemplo en las articulaciones de las piernas, los huesos largos y los pies - es decir, la sensación de masa sostenida por los huesos, un efecto sutil -, entonces uno puede sentir la resistencia a la fuerza de gravedad, un empuje hacia abajo. Es un ajuste ascendente de la postura a lo largo de las líneas de compresión esquelética. El esfuerzo muscular involucrado puede dejarse caer una vez que se logra la alineación ascendente. 6.Normalmente, cuando hablo de me refiero al centro de masa en la pelvis. Pero esta frase es ambigua: puede significar la línea central de la forma tubular del cuerpo, o puede referirse a la actividad mental no consciente que mantiene el equilibrio. Actualmente, percibo la pequeña danza como un evento central del campo corporal. 7.Las rodillas están ligeramente dobladas. Si la rodilla está bloqueada, la percepción del peso estará dirigida en torno a la parte frontal de ella. Generalmente, durante las posturas, las rodillas están ligeramente dobladas hacia adelante y la pelvis ligeramente sentada hacia los pies. 8.compresión . Trasladar el peso de una pierna a otra es algo susceptible a sentirse. Central este sentir en los huesos de las piernas produce compresión, o sea: relajación muscular. Lo anterior debería revelar la sutil sensación esquelética. 9.compresión Todos los materiales relacionados con el concepto de son simples observaciones de sensaciones o eventos del cuerpo. Llevar peso hacia adelante hace que los músculos de la espalda se tensen, mientras que los músculos de la parte frontal del cuerpo se relajan. Proporciona una clara diferencia de las sensaciones provenientes del frente y de la parte posterior del cuerpo, lo que extrañamente muchas personas no notan. Este evento de inclinación está relacionado con el movimiento de la cabeza con el que comienza este texto, y está implicado con la sensación de comenzar a emprender un avance. 10.Debido a la tensión permanente de los hombros, los músculos tienden a enmascarar la compresión y el empuje de la columna, a medida que esta es el soporte del cráneo. Pensar en la columna vertebral elevándose a través de la cintura escapular debería provocar que los hombros se relajen y, con suerte, que la cabeza gire ligeramente hacia adelante. 11.Tan sólo un hecho, un recordatorio. Como es una constante, solemos ignorar la gravedad. Esta imagen tiene como propósito recordarnos que el movimiento y la gravedad constituyen otra de esas “íntimas y sensibles” relaciones: cada movimiento establecerá un lazo con la gravedad al ser esta dramatizada por la idea de que sólo la superficie sobre la que se apoya la fuente de dicho movimiento está causando una pausa en la caída. Mientras que estamos de pie, estamos cayendo hacia nuestros pies; es decir, la fuerza de gravedad permanece operativa. 12.. Por medio de este evento, observamos el poder de la imaginación con respecto al inicio del movimiento. Actualmente, los escáneres cerebrales revelan que milisegundos antes del deseo de moverse, el cerebro ya ha comenzado a disparar estímulos que apoyarían el movimiento correspondiente. Es cierto que nuestra sensación de deseo de dar un paso es bastante diferente a la cadena de eventos que se suscitarían al emprender los movimientos del caso. Pero se trata de observar esa etapa precedente. * Versión y edición, a partir del original en lengua inglesa, de Gustavo Emilio Rosales. Revista DCO 2020.