APRENDER DE JUAN EL BAUTISTA PREPARADOR DE UN PUEBLO Introducción TALLER DE FUNCIONARIOS. Adviento #2/ 2011 Es la segunda semana de Adviento tiempo de espera de la llegada de una presencia ya comenzada, Jesus, el Dios que todos los profetas anunciaban, el salvador. Tiempo de hacer camino en nuestra vida personal, familiar, laboral, hay que reconocer que antes que nosotros mismos él espera. ¿Señor que esperas? de mi vida, de mi familia, como quieres que espere en ti. El adviento que Dios quiere no es sólo un tiempo sin más, es una actitud profunda de lucha, esfuerzo, entrega. No es tiempo cronológico, de eficacia y de intercambio sino tiempo “kayrótico”1 que supera los límites del calendario al abrir espacio y generar caminos de humanidad en el aparente sin sentido que nos envuelve, simplemente porque Dios está de nuestra parte. Este tiempo de espera activa es aceptar la propuesta de despertar, de atrevernos a ser distintos porque está en juego la bondad de Dios que ha aparecido entre nosotros (Tito 3,4) y cuenta con nosotros porque no esperamos que llegue lo que tiene que llegar, sino que le abramos paso en nuestra vida. Jesús vino en un momento y lugar concretos… por eso, en este tiempo de Adviento aparece en el centro la fe y la esperanza, de que en medio de la realidad difícil, cruenta, abrumada y abatida por diversas situaciones del mal, hace presencia la liberación de Dios para los seres humanos como fuente de sentido y finalidad de toda la existencia humana y aun de la creación. Una espera comprometida que implica la sensibilidad mayor y una solidaridad y cercanía con tantos hombres y mujeres de diversas edades, pueblos, tradiciones y ambientes sociales que viven situaciones de sufrimiento, pobreza, soledad, enfermedad, injusticia, violencia. Juan el Bautista: Preparador de un pueblo Enfocaremos la mirada en Juan el bautista ¿Qué podemos aprender de él? ¿Quién era? ¿Qué características de su persona? Con una mirada contemplativa reconozcamos que le dice a nuestra vida. Aprendamos de él a preparar en nuestra propia vida la venida de Jesus como él lo hizo con su pueblo y desde ahí preparar también las personas que me rodean. Este hombre escogido por Dios es quien señala quién es el Mesías, que ya ha venido; así mismo con su estilo de vida es modelo de austeridad (Juan estaba vestido con una piel de camello y un cinturón de cuero, y se alimentaba con langostas y miel silvestre. Mrc 1.6) y de ardiente espera (así se presentó Juan el Bautista en el desierto, proclamando un bautismo de conversión para el perdón de los pecados. Mrc1. 4) 1 Existen dos maneras de describir el tiempo: Cronos que tiene que ver con medida y que podríamos decir es el tiempo de calendario o de reloj y el otro que es Kairos que significa tiempo de salvación y de más uso en la experiencia cristiana. Hay que reconocer una característica especial en el , su humildad, él se siente y se vive como precursor “Detrás viene uno con más poder que yo no soy digno de amarrarle las sandalias…” Mrc 1.7 Juan reconoce que es quien prepara el camino a su pueblo, que el anuncia la luz, que la luz está por llegar. La idea que para él está en la base de la preparación inmediata a la venida del Mesías y del anuncio del reino es la síntesis de todo el movimiento y de toda la predicación profética: el cambio de mentalidad, el camino en la rectitud hacia el día del Señor, la vigilancia en la espera y en la esperanza; todo esto tiene que ser al mismo tiempo la situación espiritual y la conducta del pueblo que acoge su predicación: “Preparar el camino al Señor, allanar sus senderos" Mc 1,1-3. El Bautista es signo de la intervención de Dios en su pueblo; como precursor del Mesías tiene la misión de preparar los caminos del Señor (ls 40,3), de anunciar a Israel el "conocimiento de la salvación" (Lc 1,77-78) y, sobre todo, de señalar a Cristo ya presente en medio de su pueblo (Jn 1,29-34) Características de su mensaje: -La fuerza de su presencia y la convicción de su mensaje llevan como insistencia la importancia de preparar los caminos del Señor, por eso es una invitación y estímulo a realizar una espera activa y eficaz. No espera pasivo la llegada del mesías ni con los brazos cruzados. Puso toda su vida para anunciarle. Es preciso poner en juego todos nuestros modestos recursos para preparar la venida del Señor. -Su palabra, tan impetuosa, se convertirá en la proclamación de la presencia de Cristo: "En medio de ustedes hay uno que no conocen" (Jn 1,26). El con su estilo propio de vida prepara a quienes buscan la luz, así mismo no busca atraer sobre si al pueblo, sino colocarlo en la senda del Mesías, por eso "No era él la luz, sino testigo de la luz" (Jn 1,18). Los ojos y el corazón de muchos de sus contemporáneos se mostraron obtusa y pertinazmente insensibles y cerrados a la presencia de luz… Invitación Final El camino que propone el adviento no se transita en soledad, sino en compañía de otros porque queremos aportar nuestro grano de arena para contribuir a un mundo distinto…a un tiempo distinto en muchas personas por eso, unimos nuestras manos y arrimamos nuestros hombros para que el Reinado de Dios siga presente. Aprendamos de Juan de su estilo de vida, de su anuncio, y apliquémoslo a nuestra vida, vivamos como él este tiempo, para hacer creíble con nuestra vida en los tiempos actuales, que el señor ya está, ya viene: viene cada día al corazón, y se acerca a nuestras vidas para acercarse atreves nuestro a un pueblo concreto: tu familia, amigos, compañeros de trabajo. Pidamos a nuestro Dios en esa época que tengamos la audacia de ser como Juan el bautista luz que brille y llama que caliente. Para estar dispuestos a dejarnos envolver por la luz del Señor, y estar encendidos por su amor. HOJA DE TRABAJO “Fue dirigida la palabra de Dios a Juan, hijo de Zacarías, en el desierto. 3. Y se fue por toda la región del Jordán proclamando un bautismo de conversión para perdón de los pecados, 4.como está escrito en el libro de los oráculos del profeta Isaías: Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas; 5. todo barranco será rellenado, todo monte y colina será rebajado, lo tortuoso se hará recto y las asperezas serán caminos llanos. 6. Y todos verán la salvación de Dios.” Lc 3.2-6 ¿Qué podemos aprender de este personaje, que es lo que quieres que aprenda de él? ¿Crees señor que preparo con mi testimonio y estilo de vida el camino para que otros se abran a tu presencia? ¿Qué paso me invitas a dar en mi vida? ¿Qué piensan los otros cuando ven mi manera de vivir, de hablar? ¿Soy creíble con mi testimonio?