Orden de sucesión si no hay testamento: 1º.- Hijos y descendientes. 2º.- Padres y ascendientes. 3º.- Cónyuge. 4º.-Hermanos e hijos de hermanos. 5º.-Resto de parientes colaterales hasta el cuarto grado de consanguinidad. 6º.- El Estado. ¿Qué son las legítimas? Por disposición legal, parte de la masa hereditaria se reserva para los hijos y demás descendientes. En el derecho civil común, la masa hereditaria se divide en tres partes iguales –en el derecho foral varían estos porcentajes– de las cuales dos terceras partes se reservan para los hijos y descendientes. LA HERENCIA La herencia, como señala el Código Civil Federal en su artículo 1281, "es la sucesión en todos los bienes del difunto y en todos sus derechos y obligaciones que no se extinguen por la muerte". Esto significa que al morir una persona, otras personas (físicas o morales) pueden recibir todo su patrimonio, incluyendo por supuesto sus deudas. A la persona que fallece y hereda su patrimonio, se le conoce dentro del procedimiento respectivo como autor de la herencia o “de cujus”. Una vez que esto ocurre, el patrimonio del "de cujus" se conoce como acervo hereditario. Este se determina mediante un inventario que deberá presentarse dentro del juicio en que se demande la herencia. ¿Quién son los herederos forzosos? ¿Qué ocurre con la herencia cuando una persona fallece sin testamento? Cuando una persona fallece sin testamento, la Ley determina quienes van a ser sus herederos –se llaman herederos ab intestato o herederos forzosos–, por lo que hay que acudir al orden establecido legalmente. Nuestro derecho civil prevé la posibilidad de que el causante no haga testamento. En el momento de su muerte se produce el llamamiento a suceder de los denominados herederos forzosos. Se denominan así porque la ley –y no la voluntad del testador– los instituye herederos del fallecido y en algunos casos les reserva de forma obligatoria –para el testador aún con vida– una parte de la masa hereditaria; las legítimas. El ser heredero forzoso no significa que tengas que aceptar la herencia si no que la ley te avala como sucesor del fallecido. Pueden rechazarse las herencias, en cuyo caso se haría el llamamiento a suceder al siguiente heredero forzoso que la ley determina.