CONOZCA LOS RIESGOS DE ESTOS FáRMACOS QUE EN MANOS DE JóVENES PUEDEN OCASIONAR DAñOS A LA SALUD MENTAL, Y EN EL CASO DE MUJERES EMBARAZADAS EL EFECTO SOBRE EL FETO PUEDE SER FATAL. LA VENTA DE ESTOS MEDICAMENTOS SOLAMENTE DEBE REALIZARSE CON RECETA MéDICA, LA MISMA QUE DEBE SER RETENIDA POR EL FARMACéUTICO. Los más restringidos: flunitrazepam, diazepam, alprazolam y misoprostol Por: jhenny nava b. informeespecial@opinion.com.bo | 24/04/2011 El flunitrazepam, diazepam y todas las benzodiasepinas (psicotrópicos que actúan sobre el sistema nervioso central) son calificados como medicamentos peligrosos que, utilizados de manera inadecuada, pueden causar cambios de personalidad y conducta. Los neurólogos y psiquiatras recetan estos medicamentos para diferentes tratamientos en los que los pacientes sufren de insomnio o ansiedad, pero en dosis determinadas para cada caso, pues estos fármacos pueden crear dependencia en el paciente. El flunitrazepam, por ejemplo, es un medicamento hipnótico y es utilizado quirúrgicamente como un sedante por vía intravenosa. En el caso de las pastillas su efecto se empieza a sentir a los 15 minutos de haberla tomado y la persona puede llegar a dormir entre seis y ocho horas. Los efectos del flunitrazepam en personas que no requieren de este medicamento puede reflejarse en las alteraciones psíquicas, indicó la presidenta del Colegio de Farmacia y Bioquímica de Cochabamba, Ana María Aguirre. Al igual que el flunitrazepam, el diazepam es un medicamento que es utilizado para tratamientos de ansiedad y tensión, además de tener bondades para tratar espasmos musculares. Sus funciones son las mismas que las que ocasiona el flunitrazepam, pero en menor nivel. Su consumo en altas dosis puede crear dependencia física y psíquica e incluso dejar en coma a una persona que se automedique. Ambos medicamentos también ocasionan trastornos gastrointestinales y daños al hígado. La comercialización se realiza sobre todo en farmacias grandes, pero también en algunas que están ubicadas en zonas periféricas de la ciudad. Estos fármacos son también usados por algunos jóvenes para cometer violaciones. La persona que está bajo el efecto del flunitrazepam o diazepam pierde el control de sus actos. El alprazolam es la benzodiasepina que tiene más presencia en las farmacias de nuestro medio. Este medicamento es usado para resolver problemas de ansiedad y ataques de pánico, pero su administración no está autorizada para las personas con problemas pulmonares ya que puede ocasionar la muerte en estos casos. Los efectos que puede ocasionar el alprazolam por una mala administración u automedicación son: alteración en la coordinación motora, somnolencia y alteración del habla. La automedicación de alprazolam también puede ocasionar la dependencia a esta droga. Aguirre señaló que la comercialización de estos medicamentos es necesaria en nuestro país porque existen pacientes que requieren de estos tratamientos para curar su ansiedad, insomnio o pánico. “Todo medicamento mal utilizado es peligroso. Lo importante es advertir a la gente sobre los riesgos que puede ocasionar la automedicación”, explicó la representante de bioquímicos. La pastilla abortiva y sus efectos La pastilla de misoprostol no es un medicamento de venta controlada con receta valorada o retenida. Sin embargo, muchas jóvenes adquieren el fármaco para provocarse abortos. Muestra de ello son los innumerables casos que han sido detectados en el Maternológico Germán Urquidi, donde muchachas acuden con complicaciones tras el suministro del misoprostol tanto por vía oral como vaginal. Su comercialización en Bolivia está autorizada, pero para realizar tratamiento de úlceras gástricas y duodenales. Una de las contraindicaciones de este medicamento es su utilización en la etapa de embarazo puede ocasionar contracciones uterinas que provocan que el feto se desprenda del útero de la madre y sea expulsado, sobre todo si se lo toma antes de las 12 semanas de gestación. El potencial abortivo que tiene este medicamento hace que sea internado en el país de manera ilegal, por la vía del contrabando. Algunas farmacias especulan con el precio real del misoprostol que no debe superar los Bs 8, pues es vendido en Bs 10, 20 y hasta 40 en diferentes droguerías. Su comercialización es legal en Bolivia. Sólo una importadora es la que provee el producto en blisters de 28 tabletas. Sin embargo en las farmacias del país existe el fármaco de contrabando en grandes cantidades, y es distribuido en envases de hasta cien unidades. Fuente: http://www.opinion.com.bo/opinion/informe_especial/2011/0424/suplementos.php?id=646