EN BUSCA DEL PARIENTE PERDIDO DE NEANDERTALES Y SAPIENS En la búsqueda de un antepasado común entre Homo sapiens y Homo neandertales los arqueólogos creyeron en un principio que podría tratarse de una especie proveniente del Homo rhodesiensis, pero tras los hallazgos de Atapuerca, se pudo comprobar de que lo más seguro es que proviniese del Homo antecesor al tener unos rasgos más modernos. Sin embargo, los hallazgos arqueológicos acostumbran más a liar que a aclarar, surgiendo nuevas hipótesis e incógnitas. Y es que durante las excavaciones se encontraron seis individuos con unos senos frontales más grandes de lo normal, formulando infinidad de posibles causas que poco a poco han ido descartándose. Dando lugar a la hipótesis de que podrían usarse como rasgo diferenciador entre otras especies. Con lo cual, podríamos estar ante una nueva especie que convivió con sapiens y neandertales. Algo totalmente revolucionario que rompe con lo que estaba, hasta entonces, aceptado académicamente. Sin duda, este nuevo método de identificación será de ayuda para en un futuro poder poner algo de luz entre un mar de sombras. Por Álvaro Pérez López
