PROCESO CREATIVO – MÉTODO PROYECTUAL Fases del proceso creativo Todo proceso creativo nace siempre a partir de cualquier dilema o problema. Nuestra percepción creativa nos otorga la forma de asimilar la realidad y lograr la cercanía al problema. Nuestro pensamiento creativo se activa y nos hace imaginar soluciones frente a situaciones conflictivas, como ha sido el reto de la evolución y adaptación humana. Siguiendo la teoría De Bono, el proceso básico de creación permite convertir las imágenes percibidas de la realidad en ideas, transformadas mediante la imaginación en formas nuevas adaptándolas a las necesidades del pensamiento a cada momento. La creatividad permite aprovechar y conectar estímulos diversos con el problema en el que estamos pensando. El proceso creativo, dispone de un conjunto de fases sucesivas y en ocasiones simultáneas que se activan mediante la combinación de varias operaciones mentales. Tras las diferentes postulaciones consideramos como ya consolidada las 5 fases de: Preparación, incubación, intuición, evaluación y proceso de elaboración. a) Preparación: Se producen las primeras sensaciones y la toma de contacto. Se identifica el problema desconocido. Emocionalmente puede haber tensión por la frustración de las limitaciones. b) Incubación: Es una fase de distanciamiento del problema. Al relajarnos, de manera inconsciente, se realizan conexiones no sólo lógicas pero también asociaciones libres y relaciones relevantes, con combinaciones inesperadas. Emocionalmente es una etapa en la que no hay desgaste, aparentemente de ocio y centrada en otra actividad diferente. c) Intuición o Iluminación: Es un momento que de forma súbita, la persona toma conciencia de la idea o solución y se conectan los elementos que aparecen inconexos. Es el momento en que encontramos un camino al problema. Puede haber interacción entremezclada con las demás fases. d) Evaluación o verificación: Es la fase en la que decidimos si la intuición es valiosa o merece la pena. Corresponde a una fase emocional difícil en donde nos sentimos inseguros. Es un periodo de autocrítica y de examen introspectivo. Pueden actuar de forma indirecta otras opiniones o valoraciones de otras personas o clientes. Se trata de comprobar la utilidad de la idea. e) Elaboración: Sin duda, es la fase más costosa y que mayor esfuerzo y tiempo necesita. Consiste en darle forma a la idea para poder comunicarla a los demás de forma comprensible. Se somete a la verificación de manera constante. Deben activarse entonces todas las habilidades y destrezas que uno tiene en su campo. Conviene trabajar con una mentalidad abierta ya que constantemente puede verse interrumpida por las otras fases del proceso. Siempre surgen nuevas intuiciones, incubaciones y pequeñas iluminaciones. 1 Las fases del proceso creativo no constituyen una forma lineal pero más bien un proceso con forma de zigzag que se superponen durante todo el proceso continuamente. El aspecto temporal en el proceso creativo De Bono señala el proceso conlleva implícito un sentido temporal dentro de la teoría de la creatividad, como sería un sistema de ideación o generación de ideas, siguiendo siempre las mismas pautas repetitivas de pensamiento. Las pautas repetitivas pueden convertirse en un peligro de empobreci-miento creativo. Este fenómeno lo compensa con periodos de incubación que responderían a tiempos muertos que permiten asimilar la información activada y guardada anteriormente en el inicio del proceso creativo. Así pues, cuando en la realidad cotidiana se exige a los profesionales que sean creativos bajo presión o en un tiempo muy limitado se pueden plantear algunas lagunas habituales de falta de experimentación o de trabajo más profundo en las propios resultados ideados; lo que se traduce en falta de novedad, originalidad o de éxito en los resultados. Para compensarlo deberíamos valorar más la flexibilidad, la agilidad y el pensamiento divergente entre los profesionales del sector. Todo esto indica que es necesario un tiempo de dedicación mínimo en el proceso de dedicación, sin el cual no puede producirse ni ideas, ni soluciones creativas óptimas. Pero, ¿cuánto tiempo deberemos dedicarle? La respuesta es fácil. Todo el tiempo que nos sea posible o necesario para obtener realmente una eficacia productiva o emocional. ¿Cómo potenciar la creatividad? En general se puede considerar que la actitud creativa está relacionada con lo que los psicólogos Stemberg y Lubart denominan estilos de pensamiento. Estos estilos se basan en cómo utilizar nuestro propio potencial o inteligencia, según ellos. A continuación vamos a resumir algunas actitudes pro-creativas: PROCESO DE DISEÑO DE INDUMENTARIA. MÉTODO PROYECTUAL. El diseño de indumentaria es una actividad creativa que se dedica a proyectar, planificar y desarrollar los elementos que componen la vestimenta. Las prendas que resultan de dicha actividad creativa deben atravesar un proceso productivo donde se combinan diferentes conceptos estéticos, técnicos y socioeconómicos. Por lo general, se suele asociar la tarea del diseñador con algo meramente creativo, sin embargo su función en el proceso de producción abarca otras responsabilidades ya que debe afrontar todo lo que un negocio implica. La actividad comercial del diseñador comienza con el diseño propiamente dicho, para lo cual debe observar y analizar las necesidades del público objetivo. En esta etapa del proceso, se interponen diversas variables tales como las expectativas del consumidor, las 2 ideas del diseñador, la competencia, la funcionalidad de las prendas, su aspecto estético, etc. Una vez diseñado el producto, el diseñador debe encargarse de comercializarlo. Es importante que el principio comercial esté presente durante todo el proceso productivo a fin de aportar mayor claridad y soltura en el desarrollo de la tarea creativa. Si el diseñador es consciente de ello sabrá qué diseñar, para quién y cuáles son sus recursos disponibles. Entre las principales funciones del diseñador de indumentaria se encuentra la creación de nuevas colecciones. Este proceso suele ser complejo y requiere de mucha inspiración y constancia para alcanzar un excelente producto final. Para lograr el éxito deseado, debemos plantear un proyecto que contemple cada etapa del proceso. Bruno Munari define “el método proyectual como una serie de operaciones necesarias, dispuestas en un orden lógico dictado por la experiencia”. No es correcto diseñar sin método, pensar de forma artística buscando una idea sin hacer previamente un estudio para documentarse sobre lo ya realizado en el campo de lo que hay que proyectar; sin precisar bien su exacta función. Creatividad no quiere decir improvisación sin método: de esta forma sólo se genera confusión, ya que no apuntamos a ser artistas libres e independientes. El método proyectual para el diseñador no es algo absoluto y definitivo; es algo modificable si se encuentran otros valores objetivos que mejoren el proceso. Y este hecho depende de la creatividad del proyectista que, al aplicar el método, puede descubrir algo para mejorarlo. En consecuencia, las reglas del método no bloquean la personalidad del proyectista sino, que, al contrario, le estimulan a descubrir algo que, eventualmente, puede resultar útil también a los demás. El objetivo del método proyectual es conseguir un máximo resultado con el mínimo esfuerzo. El método proyectual no es absoluto ni definitivo. Se puede cambiar el orden de alguna operación si se encuentran valores objetivos que mejoren el proceso. Este método proyectual, que se aplica a toda disciplina que requiere una planificación y control de etapas, también lo requiere el diseño de indumentaria. El crear una colección, es un proceso complejo que necesita una planificación adecuada, ya que el desarrollo de un concepto no es sencillo. Lograr que una idea rectora una todas las piezas, generando un hilo conductor que asocie los conjuntos y las diferentes propuestas de diseño requiere tener en claro los objetivos y etapas del proceso. Para lograr éxito y rentabilidad en los diseños, el diseñador debe analizar la tendencia que regirá en la próxima temporada, rescatar los conceptos que impone la moda y aplicarlos en 3 los nuevos diseños. Además, debe saber cuál es la mejor forma de comercializar sus productos, para ello debe analizar costos y otros aspectos como los tiempos de producción, el público comprador, la competencia, etc. Como podemos ver, el proceso productivo está limitado por la capacidad productiva de la empresa y por la disponibilidad de recursos humanos y textiles. Por eso el diseñador antes de comenzar su tarea debe asegurarse que su producto final no supere determinado costo, de lo contrario no podrá venderlo. Etapas del proceso de diseño En el diseño de moda el profesional a cargo de un taller de confecciones debe estar consciente que su principal función es adaptar los procesos a una metodología de trabajo que permita optimizar la mayor cantidad de recursos disponibles, de tal forma que se pueda generar un sistema de trabajo que impulse a la perfecta ejecución de las etapas que hacen parte del mismo. 1. DEFINICIÓN DEL CONCEPTO DE INSPIRACIÓN: El eje de toda colección lo constituye sin duda el elemento de inspiración como una plataforma de expresión y comunicación que permite la elaboración de diseños que sin perder su identidad individual hagan parte de un conjunto coordinado de prendas, sus significados pueden ser evidentes o abstractos de acuerdo a la percepción de los usuarios. Pueden tener en cuenta las tendencias globales o ir en correspondencia a los gustos del diseñador o las necesidades del mercado según el caso. 2. RECOPILACIÓN DE DATOS: El material gráfico y teórico hace parte fundamental de la recopilación de datos, ambos con una relación directa enfocada al elemento de inspiración elegido, ésta etapa motiva al diseñador a la búsqueda y personalización de todos y cada uno de los elementos que influirán en el proceso creativo. 3. ANÁLISIS DE DATOS: Dentro de esta etapa el diseñador elabora un cuaderno de ideas que será el diario sobre el cual se detallará la esencia investigativa como reflejo del trabajo que tiene por meta sustentar los procesos y el enfoque personal respecto a un concepto previamente determinado. 4. BOARD CONCEPTUAL: Básicamente está constituido por un collage donde se reúnen todos los aspectos visuales del elemento de inspiración, compone el lienzo sobre el cual se plasma la síntesis de la temática, este board generalmente se elabora en soportes rígidos dentro de los cuales se incluye la paleta de colores y los materiales con los cuales se tienen pensado gestionar la colección. 4 5. MATERIALES Y TECNOLOGÍAS: Textiles, insumos, herramientas, máquinas y mano de obra son seleccionados en esta etapa, la disponibilidad de recursos es analizada de tal forma que al prever la fabricación de la colección a gran escala, esta sea factible y su reproductividad no se vea comprometida, es decir, el diseñador debe asegurase que todos los recursos con los que se cuenta pueden ser utilizados de principio a fin. 6. PARTIDO DE DISEÑO: Es el traslado de la inspiración a las prendas, en esta etapa se definen los elementos en común que compartirán las piezas de diseño en la colección, sus preceptos pautan las normas bajo las cuales se trabajarán las prendas con la aplicación inteligente del detalle en cada una de ellas. 7. EXPERIMENTACIÓN: En este punto el diseñador juega con las texturas de los tejidos que tiene a su disposición, analiza su caída, la forma en la que se amolda, las posibles siluetas que genera y las combinaciones de viable aplicación e inclusive puede alterar aspectos como el tacto para mejorar el acabado de las telas, de tal forma que se logre innovar a partir del uso de nuevas tecnologías y métodos manuales estratégicos para brindar así un matiz diferenciador. 8. DISEÑO: En esta fase las prendas adquieren una identidad propia que tiene mucha relación con los principios que caracterizan a una marca dentro del mercado, se establecen normativas que más tarde influirán en el corte, confección y acabados, el resultado siempre buscará ser vendible sin embargo se puede introducir a una colección una prenda de vanguardia que refleje toda la esencia del concepto de inspiración y a partir de la cual se desplieguen las prendas que harán juego dentro de una colección coordinada. 9. MOLDERÍA: Es básicamente el despiece de las prendas en un espectro bidimensional, cada pieza obtenida debe inscribir la simbología y la nomenclatura correspondiente para su perfecto ensamble, por eso es importante disponer previamente de un cuadro estándar de medidas corporales que permita la elaboración de los básicos (piezas simples sin diseño) que posteriormente se transformarán durante la interpretación de diseño en los diferentes tallajes para su posible producción en serie. 10. FICHA TÉCNICA: Es hoja de ruta que detalla todas las especificaciones en cuanto al corte, confección, acabados y terminados, ésta puede estar resumida en una o varias hojas de acuerdo a la necesidad como una guía que indica los materiales con los cuales se trabajarán los diseños, las tallas, los colores y los procesos que intervienen en la obtención de cada 5 prenda de tal forma que la metodología de trabajo se mantenga estándar indistintamente del operario que ejecute las acciones de fabricación. 11. CONSTRUCCIÓN: La piezas bidimensionales se ensamblan para generar atuendos tridimensionales, de manera que los bocetos puedan ser llevados a la realidad mediante la aplicación de las diferentes técnicas de confección, esta etapa brinda al diseñador la posibilidad de inspeccionar los detalles de costura con un control de calidad que influya positivamente en la elaboración de acabados y terminados de primera. Los pasos anteriormente enumerados son pautas de trabajo que pueden ayudar a los expertos a mejorar sus metodologías de trabajo, como parte de un sistema lógico y ordenado que busca la obtención de nuevos y mejores resultados, que a criterio de cada diseñador se exponen para el mejoramiento continuo en sus actividades. FUENTE: Análisis escrito por Gabriela Heredia basado en la lectura del documento PDF “Fundamentos para el diseño de moda – Universidad de Palermo” Bruno Munari - ¿Cómo nacen los objetos? - Editorial Gustavo Gili, SA - Barcelona 6