5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com Sombras sobre vidrio esmerilado 1 Juan José Saer ¡Qué complejo es el tiempo, y sin embargo, qué sencillo! Ahora estoy sentada en el sillón de Viena, en el living, y puedo ver la sombra de Leopoldo que se desviste en el cuarto de bao "arece muy sencillo al pensar #ahora#, pero al descubrir la e$tensión en el espacio de ese #ahora#, me doy cuenta enseguida de la pobre%a del recuerdo &l recuerdo es una parte muy chiquitita de cada #ahora#, y el resto del #ahora# no hace m's que aparecer, y eso muy pocas veces, y de un modo muy (uga%, como recuerdo )omemos el caso de mi seno derecho &n el ahora en que me lo cortaron, *cu'ntos otros senos crec+an lentamente en otros pechos menos gastados por el tiempo que el m+o - en este ahora en el que veo la sombra de mi cuado Leopoldo proyect'ndose sobre los vidrios de la puerta del cuarto de bao y llevo la mano hacia el corpio vac+o, relleno con un (also seno de algodón puesto sobre la blanca cicatri%, *cu'ntas manos van hacia cu'ntos senos verdaderos, con temblor y delicia "or eso digo que el presente es en gran parte recuerdo y que el tiempo es complejo aunque a la lu% del recuerdo pare%ca de lo m's sencillo .oy la poetisa Adelina /lores *.oy la poetisa Adelina /lores )engo cincuenta y seis aos y he publicado tres libros0 #&l camino perdido#, #Lu% a lo lejos# y #La dura oscuridad# Ahora veo la sombra de mi cuado Leopoldo proyect'ndose agrandada sobre el vidrio de la puerta del bao La puerta no da propiamente al living, sino a una especie de antec'mara, y solamente por casualidad, porque est' m's cerca de la puerta de calle, que he dejado abierta para tomar aire, he tra+do el sillón de Viena a este lugar y estoy hamac'ndome lentamente en él &l sillón de Viena cruje levemente 1o pod+a soportar mi cuarto, y no 2nicamente por el calor "or eso vine aqu+ &s di(+cil soportar encerrada entre libros polvorientos los atardeceres de este terrible enero .usana ha salido 1o sale nunca, pero hoy dijo que su pierna derecha le dol+a y pidió turno para el médico As+ que est' a(uera desde las seis 3amac'ndome lentamente veo como Leopoldo se desabrocha con cuidado la camisa, se la saca, y después se da vuelta para colgarla de la percha del bao Ahora comien%a a desabrocharse el pantalón Advierto que tengo la mano sobre el puado 1 "ublicado por primera ve% en el libro de cuentos Unidad de Lugar, de 4uan 4osé .aer, por la editorial 5alerna, 6uenos Aires, 789: http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com de algodón que le da (orma al corpio en la parte derecha de mi cuerpo, y bajo la mano 3e visto crecer y cambiar ciudades y pa+ses como a seres humanos, pero nunca he podido soportar ese cambio en mi cuerpo 1i tampoco el otro0 porque aunque he permanecido intacta, he visto con el tiempo alterarse esa aparente inmutabilidad he descubierto que muchas veces es lo que cambia en una lo que le permite a una seguir siendo la misma - que lo que permanece en una intacto, puede cambiarla para mal La sombra de Leopoldo se proyecta sobre el vidrio esmerilado, de un modo e$trao, moviéndose, ahora que Leopoldo se inclina para sacarse el pantalón, encorv'ndose para desen(undar una pierna primero, irguiéndose al conseguirlo, y volviéndose a encorvar para sacar la otra, irguiéndose otra ve% en seguida ;#.ombras# #.ombras sobre# #<uando una sombra sobre un vidrio veo# 1o= &se chico, *cómo se llamaba )omatis >l me dijo una ve% lo que piensa de m+, en la mesa redonda sobre la in(luencia de la literatura en la educación de la adolescencia -o no quer+a estar en ese escenario de la universidad "ero vino el editor y me dijo0 #*1o te parece que si te presentaras m's seguido en p2blico para e$poner tus puntos de vista #La dura oscuridad# podr+a salir un poco m's, Adelina# As+ que me vi sentada en el escenario (rente a la sala llena 3ab+a cientos de caras que me miraban esperando que yo diera mi opinión, en ese salón (r+o y lleno de ecos )omatis estaba sentado en el otro e$tremo de la mesa 3ice una corta e$posición, aunque la presencia de toda esa gente e$pectante me inhib+a mucho ;Leopoldo acomoda cuidadosamente el pantalón, sosteniéndolo desde las botamangas, con el bra%o al%ado para conservar la raya ?espués lo dobla y comien%a a pasarlo por el travesao de una percha@ lo veo= <uando terminé de hablar, )omatis se echó a re+r #La seorita /lores dijo, riéndose y poniéndose como pensativoB ha dicho hermosas palabras sobre la condición de los seres humanos L'stima que no sean verdaderas ?igo yo, la seorita /lores, *ha estado saliendo 2ltimamente de su casa# Los cientos de personas que estaban sentadas contempl'ndonos se echaron a re+r -o no dije una palabra m's@ y cuando terminó la mesa redonda y (uimos a la comida que nos o(reció la universidad, )omatis se sentó al lado m+o .e lo pasó todo el tiempo charlando y riendo, (umando y tomando vino - en un aparte se volvió hacia m+ y me dijo0 #*Csted no cree en la importancia de la (ornicación, Adelina -o s+ creo &so les pasa a ustedes, los de la vieja generación0 han (ornicado demasiado poco, o en su de(ecto nada en absoluto *.abe .e dice que usted tiene un seno de menos 1o, no estoy borracho D s+, capa% que un poco s+ *&s cierto *1o piensa que usted misma lo ha matado -o pienso que s+ *.abe Csted me cae muy simp'tica, Adelina )iene un par de sonetos por ah+ que http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com valen la pena "erdóneme la (ranque%a, pero yo soy as+ Csted deber+a (ornicar m's, Adelina, sabe, romper la camisa de (uer%a del soneto porque las (ormas heredadas son una especie de virginidadB y empe%ar con otra cosa Ee juego la cabe%a de que usted es capa% de salir adelante Csted que la tiene cerca, p'seme esa botella de vino 5racias# Fecuerdo per(ectamente el lugar0 un restaurante del centro con manteles cuadriculados, rojos y blancos, los platos sucios, los restos de pescado, y las botellas de vino tinto a medio vaciar Ahora Leopoldo se ha sacado el cal%oncillo y lo observa 3a quedado completamente desnudo .e inclina para dejarlo caer en el canasto de la ropa sucia que est' en el costado del bao, junto a la baadera "uedo ver su sombra agrandada, pero no desmesuradamente, sobre los vidrios esmerilados de la puerta del bao que da a la antec'mara &n este momento, 2nicamente esa sombra es #ahora#, y el resto del #ahora# no es m's que recuerdo - a veces, tan di(erente del #ahora#, ese recuerdo, que es cosa de ponerse a llorar &s terrible pensar que lo 2nico visible y real no son m's que sombras .i pienso que en este mismo momento los baistas se pasean en traje de bao bajo los 'rboles tranquilos del parque del .ur, sé que eso no es ahora, sino recuerdo "orque es posible que en este momento no haya ni un solo baista en el parque del .ur, o, si hay alguno, no esté pase'ndose precisamente bajo los 'rboles que yo creo recordar@ hasta es probable que estén todos echados en la arena de la playa, o en el agua, mientras el sol del crep2sculo vuelve roja la laguna y dos chicos se tiran uno al otro una pelota de goma que retumba en medio del silencio cuando choca contra la tierra "ero me gusta imaginar que en este momento, en los barrios, las chicas se pasean en grupos de tres o cuatro tomadas del bra%o, recién baadas y per(umadas, y que grupos de muchachos las contemplan desde la esquina "uedo ver las calles del centro abarrotadas de coches y colectivos y a .usana bajando lentamente, con cuidado por su pierna dolorida, las escaleras de la casa del médico &s como si estuviera aqu+ y al mismo tiempo en cada parte ¡&s tan complejo y sin embargo, tan sencillo! Ahora vuelvo ligeramente la cabe%a y veo la mampara que da al patio &ntreveo los vidrios encortinados y el 2ltimo resplandor de la tarde que penetra en el living a través de las grandes cortinas verdes )ambién veo los sillones vac+os, abandonados B ¡y cu'ntas veces nos hemos sentado en ellos .usana, Leopoldo, o yo o las visitas! B (orrados en proven%al (loreado Las (lores son verdes y a%ules, sobre (ondo blanco 3ay una l'mpara de pie, al lado de uno de los sillones, apagada "ero yo me he tra+do el viejo sillón de Viena de mam' desde mi habitación y me he sentado en él Bestoy hamac'ndome lentamenteB para que el aire de la http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com calle atraviese el living y se impregne como agua (r+a o como un olor sobre mi cuerpo Ahora que no veo la puerta de vidrios esmerilados del bao, *qué estar' proyect'ndose sobre ella .eguramente el cuerpo desnudo de Leopoldo B ¡el cuerpo desnudo de Leopoldo! B, pero *en qué posición *)endr' los bra%os al%ados, se rascar' el pecho con las dos manos, se tocar' el cabello, o se habr' echado ligeramente hacia atr's para mirarse en el espejo &s terrible, pero ese ahora, tan cercano, no es m's que recuerdo@ y si vuelvo la cabe%a otra ve% hacia la puerta que da a la antec'mara el #ahora# de los sillones de (unda (loreada, vac+os y abandonados, y las cortinas a través de las cuales penetra la lu% crepuscular, no ser' m's que recuerdo Vuelvo la cabe%a@ ahora La sombra de Leopoldo ha desaparecido 3a de estar sentado, haciendo sus necesidades ;#Veo una sombra sobre un vidrio# #Veo# #Veo una sombra sobre un vidrio Veo#= &n el vidrio vac+o no se ve m's que el resplandor di(uso de la lu% eléctrica, encendida en el interior del cuarto de bao &s uno de esos d+as terribles de enero, de lu% cenicienta@ no est' nublado ni nada, pero la lu% tiene un color ceni%a, como si el sol se hubiese apagado hace mucho tiempo y llegara al planeta el re(lejo de una lu% muerta Ei sencillo vestido gris y mi pelo gris condensan esa lu% h2meda y muerta, y est'n como nimbados por un resplandor p2trido@ y como acabo de baarme no he hecho m's qué condensar humedad sobre mi vieja piel blanca llena de vetas como de cuar%o )engo los bra%os apoyados sobre la madera curva del sillón de Viena <on el tiempo, si es que estoy viva, tomaré el color de la esterilla del sillón, me iré volviendo amarillenta y lustrosa, pulida por el tiempo &n eso (undo su sencille% &n que solamente pule y simpli(ica y preserva lo inalterable, reduciendo todo a simplicidad Ee dicen que destruye, pero yo no lo creo Lo 2nico que hace es simpli(icar Lo que es (r'gil y pura carne que se vuelve polvo desaparece, pero lo que tiene un n2cleo sólido de piedra o hueso, eso se vuelve suave y l+mpido con el tiempo y permanece Ahora .usana debe estar bajando lentamente las escaleras de m'rmol blanco de la casa del médico, agarr'ndose del pasamanos para cuidar su pierna dolorida@ ahora acaba de llegar a la calle y se queda un momento parada en la vereda sin saber qué dirección ;porque sale muy poco y siempre se desorienta en centro de la ciudad@ est' con su vestido a%ul, sus anteojos ;siempre creen que Adelina /lores es ella, por anteojos, y no yo= y sus %apatones negros de grueso taco bajo, que tienen cordones como los %apatos masculinos, mira como desconcertada en distintas direcciones, porque por un momento no sabe cu'l tomar, mientras a la lu% del crep2sculo pasa gente apurada y vestida de verano por la vereda, y un estruendo http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com de colectivos y automóviles por la calle Ahora con un movimiento de cabe%a y un gesto que no revela el menor sentido del humor, sac'ndose los dedos de los labios, donde los hab+a puesto mec'nicamente al adoptar una actitud pensativa, .usana recuerda en qué dirección se encuentra la esquina donde debe tomar el colectivo y comien%a a caminar con lentitud, decrépita y reum'tica, hacia ella 3ay como una (iebre que se ha apoderado de la ciudad, por encima de su cabe%a y ella no lo nota en este terrible enero "ero es una (iebre sorda, recóndita, subterr'nea, estacionaria, penetrante, como la lu% de ceni%a que envuelve desde el cielo la ciudad gris en un c+rculo mórbido de claridad condensada ;#Veo una sombra sobre un vidrio Veo#= Veo a .usana atravesar lentamente el aire pesado y gris dirigiéndose hacia la parada de ómnibus donde debe esperar el dieciséis para volver en él a casa &so si es que ya ha salido de lo del médico porque es probable que ni siquiera haya entrado todav+a al consultorio y esté sentada leyendo una revista en la sala de espera &l techo de la sala de espera es alto, yo he estado ah+ cientos de veces, muy alto, y el juego de sillones de madera con la mesita central para las revistas y el cenicero es demasiado (r'gil y chico en relación con ese techo alt+simo y la e$tensión de la sala de espera, que originariamente era en realidad el vest+bulo de la casa ;#algo que amé# #Veo una sombra sobre un vidrio Veo# #algo que amé# #hecho sombra, proyectado# #hecho sombra y proyectado# #Veo una sombra sobre un vidrio Veo# #algo que amé hecho sombra y proyectado#= "uedo escuchar el crujido lento y uni(orme del sillón de Viena .é pasarme las horas hamac'ndome con lentitud, la cabe%a reclinada contra el respaldar, mirando (ijamente un punto del vac+o, sin verlo, en el interior de mi habitación, rodeada de libros polvorientos, oyendo crujir la vieja madera como si estuviera oyendo a mis propios huesos ?esde mi habitación he venido escuchando durante treinta aos los ruidos de la casa y de la ciudad, como celajes de sonido acumulados en un hori%onte blanco Ahora escucho el ruido s2bito de la cadena del inodoro y el del agua en un torrente r'pido, lleno de tintineos como met'licos@ después el chorro que vuelve a llenar el tanque La sombra de Leopoldo reaparece en los vidrios esmerilados de la puerta@ se pone de per(il@ ha de estar mir'ndose en el espejo *.e a(eitar' Veo cómo se pasa la mano por la cara 3a mantenido la l+nea, durante tantos aos, pero se ha llenado de endeble% y (ragilidad Al hamacarme, yendo para adelante y viniendo para atr's, la sombra da primero la impresión de que avan%ara, y después la de que retrocediera Vino a casa por m+ la primera ve%, pero después se casó con .usana )odo es terriblemente literario, ;#en el re(lejo oscuro#= /ue un alivio, después de todo "ero los primeros dos aos, antes de que se casaran y http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com Leopoldo empe%ara a trabajar como agente de publicidad del diario de la ciudad, Bel primer agente de publicidad de la ciudad, creo, y en eso (ue un verdadero precursor B los primeros dos aos nos divertimos como locos, sin descansar un solo d+a, yendo y viniendo de d+a y de noche por la ciudad, en invierno y verano, hasta un d+a cuya v+spera pasamos entera en la playa, en que Leopoldo vino a la noche a casa y le pidió al (inado pap' la mano de .usana después de la cena "ero el d+a antes hab+a sido una verdadera (iesta /ue un viernes, me acuerdo per(ectamente Leopoldo pasó a buscarnos muy de maana, cuando recién hab+a amanecido, estaba todo de blanco, igual que nosotras, que llev'bamos unos vestidos blancos y unos sombreros de playa blancos como estoy segura de que ni hasta hoy se ha atrevido a llevar nadie en esta bendita ciudad -o llevaba conmigo los versos de Al(onsina GVa a a(eitarse, s+ Ahora ha abierto el botiqu+n y mira su interior buscando los elementos ;#en el re(lejo oscuro# #sobre la transparencia# #del deseo#= Al%a los bra%os y comien%a a sacar los elementosH -a era diciembre, pero hac+a (resco de maana -o misma manejaba el .tudebaIer de pap', y .usana iba sentada al lado m+o &n el asiento de atr's iba Leopoldo al lado de la canasta de la merienda, tapada con un mantel blanco &l aire ;#sobre la transparencia del deseo# #como sobre un cristal esmerilado#= (resco, limpio, resplandec+a, penetrando por el hueco de las ventanillas bajas que vibraban con la marcha del automóvil -o pod+a ver por el retrovisor la cara de Leopoldo vuelta ligeramente hacia la ventanilla mirando pensativa el r+o 1os (uimos a una playa desierta, lejos de la ciudad, por el lado de <olastiné 3ab+a tres sauces inclinados hacia el r+o Bla sombra parec+a transparenteB y arena amarilla 1adamos toda la maana y yo les le+ poemas de Al(onsina0 y cuando llegué a donde dice #Cna punta de cieloJro%ar'Jla casa humana#, me separé de ellos y me (ui lejos, entre los 'rboles, para ponerme a llorar &llos no se dieron cuenta de nada ?espués e$tendimos el mantel blanco y comimos charlando y riéndonos bajo los 'rboles 3ab+amos preparado rión Ba Leopoldo le gustan mucho las achurasB y yo no sé cu'ntas cosas m's, y hab+amos dejado toda la maana una botella de vino blanco en el agua, justo debajo de los tres sauces, para que el agua la en(riara /ue el mejor momento del d+a0 est'bamos muy tostados por el sol y Leopoldo era alto, (uerte, y se re+a por cualquier cosa .usana estaba e$traordinariamente linda Lo de re+rnos y charlar nos gustó a todos, pero lo mejor (ue que en un determinado momento ninguno de los tres habló m's y todo quedó en silencio ?ebemos haber estado as+ m's de die% minutos .i presto atención, si escucho, si trato de escuchar sin ning2n miedo de que la claridad del recuerdo me haga dao, puedo o+r con qué nitide% los cubiertos chocaban contra la porcelana de los platos, el ruido de nuestra densa respiración http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com resonando en un aire tan quieto que parec+a depositado en un planeta muerto, el sonido lento y opaco del agua viniendo a morir a la playa amarilla &n un momento dado me pareció que pod+a o+r cómo crec+a el pasto a nuestro alrededor - en seguida, en medio del silencio, empe%ó lo de las miradas &stuvimos mir'ndonos unos a otros como cinco minutos, serios, (rancos, tranquilos 1o hac+amos m's que eso0 nos mir'bamos, .usana a m+, yo a Leopoldo, Leopoldo a m+ y a .usana, terriblemente serenos, y después no me importó nada que a eso de las cinco, cuando volv+a sin hacer ruido después de haber hecho sola una e$pedición a la isla By volv+a sin hacer ruido para sorprenderlos y hacerlos re+r, porque cre+a que jugaban todav+a a la escoba de quince, los viese abra%ados desde la male%a y oyese la vo% de .usana que hablaba entre jadeos diciendo0 #.+ .+ .+ .+ "ero ella puede venir "uede venir &lla puede venir .+ .+ "ero puede venir# Los vi, claramente0 él estaba echado sobre ella y ten+a el traje de bao m's abajo de las rodillas La parte de su cuerpo que yo no hab+a visto nunca era blanca, lechosa, y a m+ se me ocurrió lisa y la idea de tocarla alguna ve% me revolvió el estómago &n ese momento se oyó un crujido en la male%a y Leopoldo se paró de un salto, dejando ver enteramente a .usana que hab+a dejado correr los breteles de su traje de bao y hab+a sacado los bra%os por entre ellos de modo tal que el traje de bao hab+a bajado hasta el vientre -o conoc+a ya esas partes del cuerpo de .usana que no estaban tostadas, las hab+a visto muchas veces "ero cuando Leopoldo saltó, di(icultosamente, con el traje de bao m's abajo de la rodilla, se volvió en la dirección en que yo estaba, por pudor, ya que el ruido se hab+a o+do en dirección contraria al lugar donde yo estaba Vi eso, enorme, sacudiéndose pesadamente, desde un matorral de pelo oscuro@ lo he visto otras veces en caballos, pero no balance'ndose en dirección a m+ /ue un segundo, porque Leopoldo se subió en seguida el traje de bao y se sentó r'pidamente (rente a .usana y no pude ver en qué momento .usana se al%ó el traje de bao, se acomodó el pelo y recogió los naipes, pero ya lo estaba esperando cuando él se sentó manoteando apresuradamente dos o tres cartas del suelo Ee quedé inmóvil m's de quince minutos, hasta que los vi tranquilos, y yo misma me sent+ as+ ?espués nos baamos desde el crep2sculo hasta que anocheció Bme parece o+r todav+a el chapoteo de nuestros cuerpos h2medos que relumbraban en la oscuridad a%ul By al otro d+a Leopoldo le pidió al pobre pap' la mano de .usana &n este momento puedo ver cómo Leopoldo, imprimiendo un movimiento circular a su mano, se llena la cara de espuma con la brocha Lo hace r'pidamente@ ahora baja el bra%o y la sombra de su cara, sobre el vidrio esmerilado que re(leja también la lu% http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com con(usa del interior del cuarto de bao, se ha trans(ormado0 la sombra de la espuma que le cubre las mejillas parece la sombra de una barca, un matorral de pelo oscuro Al%a el bra%o otra ve% y con la punta de la brocha se golpea el mentón, varias veces y suavemente, como si se hubiese quedado pensativo@ pero eso no puede verse ?eja la brocha y después de un momento al%a otra ve% las dos manos, en una de las cuales tiene la navaja, y comien%a a rasurarse lentamente, con cuidado Lentamente, con cuidado, .usana ha de estar bajando ya las escaleras blancas de la casa del médico, en dirección a la calle Va a pararse un momento en la vereda, para orientarse, porque no va casi nunca al centro La sombra de Leopoldo se proyecta ahora mostrando cómo se rasura, lentamente, con cuidado, con la navaja@ ahora cambia la navaja de mano y se pasa el dorso de la mano libre por la mejilla, a contrapelo, para comprobar la e(icacia de la rasurada .é qué va a hacer cuando termine de a(eitarse y de baarse0 va a llevar la pere%osa al patio, entre las macetas llenas de begonias, de helechos, de amarantos y de culandrillos, y va a sentarse en la pere%osa en medio del patio@ va a estar un rato ah+, (umando en la oscuridad@ va a decir0 #*Quedan espirales, .usana, querida # y después va a ponerse a tararear por lo bajo )odos los anocheceres de setiembre a mar%o hace e$actamente eso ?espués de un momento va a servirse el primer vermut con amargo y yo podré saber cu'ndo va a llenar nuevamente su vaso porque el tintineo del hielo contra las paredes del vaso semivac+o me har' saber que ya lo est' acabando Va a ;#&n con(usión, s2bitamente, apenas#= .iento crujir los huesos del sillón de Viena Apenas se haya a(eitado y se haya baado lo va a hacer0 va a llevar la pere%osa al centro del patio de mosaicos, la pere%osa de lona anaranjada, después de ponerse su pijama recién lavado y planchado y va a (umar un cigarrillo antes de ;#vi que estallaba# #vi# #vi el estallar de un cuerpo y de una# #y de su # #la e$plosión# #vi la e$plosión de un cuerpo y de su sombra# #&n con(usión, s2bitamente, apenas#, #vi la e$plosión de un cuerpo y de su sombra#= La brasa del cigarrillo, un punto rojo, va a parecer un ojo 2nico, insomne y sin parpadeos, aviv'ndose a cada chupada - cuando escuche el tintineo del hielo contra las paredes (r+as del vaso, voy a saber que ha tomado su primer vermut con amargo y que va a servirse el segundo &l tiempo de cada uno es un hilo delgado, transparente, como los de coser, al que la mano de ?ios le hace un nudo de cuando en cuando y en el que la (luencia parece detenerse nada m's que porque la vertiente pierde linealidad D como una l+nea recta marcada a l'pi% con una cru% atraves'ndola de trecho en trecho, que se alarga ilusoriamente ante los ojos del que mira porque su visión divide la l+nea en los http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com (ragmentos comprendidos entre cru% y cru% Lo de la cru% est' bien, porque cru% signi(ica muerte "ap' y mam' murieron el cuarenta y ocho, con seis meses de di(erencia uno del otro &l peronismo se llevó a pap'0 (ue algo que no pudo soportar - mam' terminó seis meses después que él, porque siempre lo hab+a seguido #?espués del primer ao de casados Bme dijo mam' en su lecho de muerteB nunca tuvo la menor consideración conmigo "ero, *qué puedo hacer sin él# -o estaba con un traje sastre gris, me acuerdo per(ectamente@ mam' se incorporó y me agarró de las solapas, y me atrajo hacia ella@ ten+a los ojos e$traordinariamente abiertos y la cara apergaminada y llena de arrugas, y eso que no era demasiado vieja 1unca la hab+a visto as+ - no era que le tuviese miedo a la muerte 1unca se lo hab+a tenido <omen%ó a hacer un es(uer%o terrible, jadeando, pestaeando, estirando los labios gastados y lisos que se le llenaban de saliva o de baba Bno sé qué eraB y me di cuenta de que quer+a decirme algo 1o lo consiguió Eurió a(errada a las solapas de mi traje sastre gris y ;#ahora el silencio teje cantilenas#= ?urante todos estos aos no hago m's que re(le$ionar sobre lo que mam' trató de decirme )uve que hacer un es(uer%o terrible para arrancar de mis solapas sus manos a(erradas@ y estaban tan tensas y blancas que yo pod+a notar la blancura (ero% de los huesos y de los cart+lagos <uando doce aos después me cortaron el pecho, yo soé que arrancaba de mis solapas las manos de mam' ;#m's largas# #ahora el silencio teje cantilenas#, #m's largas#= y que una de sus manos se llevaba mi pecho "ero no se lo llevaba para hacerme mal, sino para protegerme de algo &se sueo vuelve casi todas las noches, como si una aguja (ormara con mi vida, de un modo mec'nico y regular, un tejido con un 2nico punto .é que esta noche va a volver Voy a despertarme jadeando y sollo%ando apagadamente en mi cama solitaria, rodeada de libros polvorientos, cerca de la madrugada, pero después voy a respirar con alivio <ada uno conoce secretamente el signi(icado de sus propios sueos, y sé que si mam' quiere llevarse mi pecho a la tumba, hay algo bienintencionado en ella, aunque su acto pueda parecer malo By capa% que lo sea 1o podemos ju%gar nuestros actos m's que en relación con lo que hemos esperado de la vida y lo que ella nos ha dado A mam' y a m+ nos dio también esa maana Bese nudo, esa cru%B en la que pap' se sentó muy temprano a desayunar con nosotros /ue al d+a siguiente de haberse a(iliado al partido peronista ;#Ahora el silencio teje cantilenas# #m's largas#= "ap' estaba sentado en la cabecera y no le dirig+amos la palabra porque nos d'bamos cuenta de que estaba muy nervioso ;#que duran m's#= 1o nos hablaba cuando estaba irritado .iempre me hab+a llamado la atención la piel de su cara por lo blanca que la ten+a y cómo sin embargo, en la parte alta de las mejillas, cerca de los pómulos, se le http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com hab+an ido (ormando unas redes tenues, complicadas, de venillas rojas "ap' tomó su segunda ta%a de ca(é y después se recostó sobre el respaldar de la silla y empe%ó a roncar &ran unos ronquidos silbantes, secos, recónditos y cavernosos ;#que duran m's que el cuerpo# #y que la sombra# #que duran m's que el cuerpo y que la sombra#= "rimero vi la mosca recorriendo la red de venillas rojas sobre la mejilla derecha, como una seal negra despla%'ndose por una red (erroviaria dibujada en l+neas rojas en un mapa proyectado en una pared transparente "ero no empecé a murmurar #Eam' Eam'# Bsin desviar ni un momento la mirada del rostro de pap'B hasta que no vi cómo la mosca comen%aba a bajar, con la misma (acilidad con que podr+a haberlo hecho sobre una piedra, desde el pómulo hasta la comisura de los labios, y después entraba en la boca 1o parec+a haber entrado en la boca de pap', haber estado recorriendo el cuerpo de pap', sino nada m's que una reproducción en piedra de él, porque ya ni siquiera roncaba Ahora Leopoldo vuelve a cambiar la navaja de mano y sigue rasur'ndose <uando se inclina hacia el espejo para verse mejor el per(il de su sombra desaparece, cortado rectamente por el marco de madera de la puerta, y sobre el vidrio se ve re(lejo di(uso Bcomo unas escaras de lu% dispuestas de un modo concéntrico, puntillistaB de la lu% eléctrica Ee balanceo suavemente en el sillón de Viena ?oy vuelta la cabe%a y veo cómo la lu% gris penetra en la habitación a través de las cortinas verdes, empalideciendo todav+a m's Los sillones vac+os saben estar ocupados a veces Bpero eso no es m's que recuerdo <on levantarme y llegar al patio y al%ar la cabe%a, podr+a ver un (ragmento de cielo, vaci'ndose en el hueco que dejan las paredes de musgo, agrisadas .aliendo a la puerta mirar+a la calle vac+a, sin 'rboles, llena de casas de una planta, en(rent'ndose en dos hileras rectas y regulares a través de la vereda de baldosas grises y de la calle empedrada ?e noche, en las pro$imidades de la lu% de la esquina se ve relucir opacamente el empedrado Los insectos revolotean alrededor de la lu%, ciegos y torpes, chocan contra la pantalla met'lica con un estallido, y después se arrastran por el adoqu+n con las alas rotas "uede vérselos de maana aplastados contra las piedras grises por las ruedas de los automóviles ?e noche sé escuchar su murmullo - cuando hab+a 'rboles en la cuadra, a esta hora empe%aba el estridor monótono de las cigarras <omen%aban separadamente, la primera muy temprano, a eso de las cinco, y en seguida empe%aba a o+rse otra, y después otra y otra, como si hubiese habido un millón cantando al un+sono -o no lo pod+a soportar &l haber cedido y venirme a vivir con ellos ya me resultaba insoportable )en+a miedo, siempre, de abrir una puerta, cualquiera, la del cuarto de http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com bao, la del dormitorio, la de la cocina, y verlo aparecer a él con eso a la vista, balance'ndose pesadamente, apuntando hacia m+ desde un matorral de pelo oscuro 1unca he podido mirarlo de la cintura para abajo, desde aquella ve% "ero lo de las cigarras ya era verdaderamente terrible As+ que me vest+a y sal+a sola, al anochecer@ a ellos les dec+a que me (altaba el aire "rimero recorr+a el parque del .ur, con su lago inmóvil, de aguas p2tridas, sobre el que se re(lejaban las luces sucias del parque@ atravesaba los caminos irregulares y después me dirig+a hacia el centro por .an Eart+n, penetrando cada ve% m's la %ona iluminada@ de all+ iba a dar una vuelta por la estación de ómnibus y después recorr+a el parque de juegos que se e$tend+a (rente a ella antes de que construyeran el edi(icio del <orreo@ iba hasta el palomar, un cilindro de tejido de alambre, con su c2pula roja terminada en punta, y escuchaba durante un largo rato el aleteo tenso de las palomas 1unca me atrev+ a caminar sola por la avenida del puerto para cortar camino y llegar a pie al puente colgante Al puente llegaba en ómnibus o en tranv+a Ee bajaba de la parada del tranv+a y caminaba las dos cuadras cortas hacia el puente, percibiendo contra mi cuerpo y contra mi cara la brisa (r+a del r+o Ee gustaba mirar el agua, que a veces pasa r'pida, turbulenta y oscura, pero emite un relente (r+o y un olor salvaje, inolvidable, y es siempre mejor que un millón de cigarras ocultas entre los 'rboles y ;#Ah#= Volv+a después de las once, con los pies deshechos@ y mientras me apro$imaba a mi casa, caminando lentamente, haciendo sonar mis tacos en las veredas, prestaba atención tratando de escuchar si o+a alg2n rumor proveniente de aquellos 'rboles porque ;#Ah si un cuerpo nos diese# #Ah si un cuerpo nos diese# #aunque no dure# #una seal# #cualquier seal# #de sentido# #oscuro# #oscura# #Ah si un cuerpo nos diese aunque no dure# #una seal# #cualquier seal oscura# #Ah si un cuerpo nos diese aunque no dure# #cualquier seal oscura de sentido# #Veo una sombra sobre un vidrio Veo# #algo que amé hecho sombra y proyectado# #sobre la transparencia del deseo# #como sobre un cristal esmerilado# #&n con(usión, s2bitamente, apenas#, #vi la e$plosión de un cuerpo y de su sombra# #Ahora el silencio teje cantilenas# #que duran m's que el cuerpo y que la sombra# #Ah si un cuerpo nos diese, aunque no dure# #cualquier seal oscura de sentido#= .i pod+an o+rse, entonces, me volv+a y caminaba sin ninguna dirección, cuadras y cuadras, hasta la madrugada "orque estar sentada en el patio, o echada en la cama entre los libros polvorientos, oyendo el estridor un'nime de ese millón de cigarras, era algo insoportable, que me llenaba de terror Ahora la sombra sobre el vidrio esmerilado me dice que Leopoldo ha terminado de a(eitarse, porque ya no tiene la navaja en las manos y se pasa el dorso de las manos http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com suavemente por las mejillas ;#como un olor# #salvaje# #como un olor salvaje#= 3ab+a migas, restos de comida, manchas de vino tinto sobre el mantel cuadriculado rojo y blanco &ra un salón largo, y el sonido pol+tono de las voces se (iltraba por mis t+mpanos adormecidos, atentos 2nicamente a las (luctuaciones hondas de m+ misma, parecidas a voces Ee he estado oyendo a m+ misma durante aos sin saber e$actamente qué dec+a, sin saber siquiera si eso era e$actamente una vo% 1o se ha tratado m's que de un rumor constante, sordo, monótono, resonando apagadamente por debajo de las voces audibles y comprensibles que no son m's que recuerdo, ;#que perdure#= sombras >l me daba (recuentemente la espalda, mientras hablaba a los gritos con el resto de los invitados "arec+a reinar sobre el mundo -o lo hubiese llevado conmigo esa noche, me habr+a desvestido delante de él y agarr'ndolo del pelo le hubiese inclinado la cabe%a y lo hubiese obligado a mirar (ijamente la cicatri%, la gran cicatri% blanca y llena de rami(icaciones, la marca de los viejos suplicios que (ueron carcomiendo lentamente mi seno, para que él supiese "orque as+ como cuando lloramos hacemos de nuestro dolor que no es (+sico, algo (+sico, y lo convertimos en pasado cuando dejamos de llorar, del mismo modo nuestras cicatrices nos tienen continuamente al tanto de lo que hemos su(rido "ero no como recuerdo, sino m's bien como signo - él no paraba de hablar #*?e veras, Adelina *1o le parece, Adelina *Qué cómo me siento ¡<ómo quiere que me sienta! 3arto de todo el mundo, lógicamente 1o, por supuesto, ?ios no e$iste .i ?ios e$istiera, la vida no ser+a m's que una broma pesada, como dice siempre 3oracio 6arco .omos dos generaciones di(erentes, Adelina "ero yo la respeto a usted Ee importa un r'bano lo que digan los dem's y sé que a la generación del cuarenta m's vale perderla que encontrarla, pero hay un par de poemas suyos que (uncionan a las mil maravillas ?ir'n que los dioses los han escrito por usted, y todo eso, sabe, pero a m+ me importa un r'bano 3'game caso, Adelina0 (ornique m's, aunque en eso vaya contra las normas de toda una generación# &ra una noche de pleno ;#contra las diligencias#= &ra una noche de pleno invierno Los ventanales del restaurante estaban empaados por el vaho de la helada - cuando nos separamos en la calle la niebla envolv+a la ciudad@ parec+a vapor, y a la lu% de los (ocos de las esquinas parec+a un polvo blanco y h2medo, una mir+ada de part+culas blancas girando en lenta rotación Apenas nos separ'bamos unos metros los contornos de nuestras (iguras se desvanec+an, carcomidos por esa niebla helada Ee acompaaron hasta la parada de ta$is y )omatis se inclinó hacia m+ antes de cerrar de un golpe la porte%uela0 #La casualidad no e$iste, Adelina#, me dijo #Csted es la 2nica art+(ice de sus sonetos y de sus mutilaciones# ?espués se perdió en la niebla, como si no http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com hubiese e$istido nunca Lo que desaparece de este mundo, ya no (alta "uede (altar dentro de él, pero no estando ya (uera &$isten los sonetos, pero no las mutilaciones0 hay 2nicamente corredores vac+os, que no se han recorrido nunca, con una puerta de acceso que el viento sacude con lentitud y hace golpear suavemente contra la madera dura del marco@ o desiertos interminables y amarillos como la super(icie del sol, que los ojos no pueden tolerar@ o la hojarasca del 2ltimo otoo pudriéndose de un modo inaudible bajo una gruta de helechos (r+os, o papeles, o el tintineo mortal del hielo golpeando contra las paredes de un vaso con un resto aguado de amargo y vermut@ pero no las mutilaciones Las cicatrices s+, pero no las mutilaciones &l ta$i atravesaba la niebla, reluciente y h2medo, y en su interior c'lido el cho(er y yo parec+amos los 2nicos cuerpos vivos entre las sólidas estructuras de piedra que la niebla apenas si dejaba entrever, ;#las (ormaciones# #contra las diligencias# #contra las (ormaciones#= A(uera no hab+a m's que niebla@ pero yo vi tantas cosas en ella, que ahora no puedo recordar m's que unas pocas0 unos sauces inclinados sobre el agua, proyectando una sombra transparente@ unas manos a(erradas Blos huesos y los cart+lagos blanqu+simosB a las solapas de mi traje sastre@ una mosca entrando a una boca abierta y dura, como de m'rmol@ algunas palabras le+das mil veces, sin acabar nunca de entenderlas@ un millón de cigarras cantando monótonamente y al un+sono ;#del olvido#=, en el interior de mi cr'neo@ una cosa horrible, llena de venas y nervios, apuntando hacia m+, balance'ndose pesadamente desde un matorral de pelo oscuro@ una imagen borrosa, impresa en papel de diario, hecha mil peda%os y arrojada al viento por una mano enloquecida )odo eso era visible en las paredes mojadas por la niebla, mientras el ta$i atravesaba la ciudad - era lo 2nico visible &n este momento ;#- que por ese olor#= &n este momento .usana debe estar bajando lentamente, con cuidado, las escaleras de m'rmol blanco de la casa de médico "uedo verla en la calle ;#y que por ese olor recono%camos#=, en el crep2sculo gris, parada en medio de la vereda, tratando de orientarse ;#el solar en el que# #dónde debemos edi(icar# #el lugar donde levantemosK #cu'l debe ser el sitio#= &st' con su vestido a%ul, que tiene costuras blancas, semejantes a hilvanes, alrededor de los grandes bolsillos cuadrados y en los bordes de las solapas .us ojos marrones, achicados por las (ormaciones adiposas de la cara, como dos pasas de uvas incrustadas en una bola de masa cruda, se mueven inquietos y perplejos detr's de los anteojos &st' tratando de saber dónde queda e$actamente la parada de colectivos Leopoldo pasa ahora a la baadera Lo hace de un modo di(icultoso, ya que advierto que su sombra se bambolea y se mueve con lentitud )rata de no resbalar ;#de la http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com casa humana#= Ahora .usana descubre por (in cu'l es la dirección conveniente y comien%a a caminar con di(icultad, debido a sus dolores reum'ticos Aparece envuelta en la lu% del atardecer0 la misma lu% gris que penetra ahora a través de las cortinas verdes y se condensa en mi batón gris y a mi alrededor, como una masa tenue que resplandece opaca y se adelanta y retrocede r+gidamente adherida a m+ mientras me hamaco en el sillón de Viena Atraviesa las calles de la ciudad, pesada y compacta "uedo escuchar el rumor inaudible de su despla%amiento Las calles est'n llenas de gente, de coches y de colectivos &l rumor de la ciudad se me%cla, se uni(ica y después se eleva hacia el cielo gris, disip'ndose, ;#el lugar de la casa humana# #cu'l es el lugar de la casa humana# #cu'l es el sitio de la casa humana#= Ahora la escalera en la casa del médico est' vac+a La vereda delante de la casa del médico est' vac+a .usana e$tiende el bra%o delante del colectivo n2mero dieciséis, que se detiene con el motor en marcha .usana sube di(icultosamente Alguien la ayuda .usana siente ;#como reconocemos por los#= en la cara el calor que asciende desde el motor del colectivo .e tambalea cuando el colectivo arranca Le ceden el asiento y ella se sienta con di(icultad, agarr'ndose del pasamanos, sacudiéndose a cada sacudida del colectivo, tambale'ndose, resoplando, murmurando distra+damente #5racias#, sin saber e$actamente a quien ;#por los ramos#= &staba verdaderamente ;#por los ramos# #de lu% solar#= hermosa esa tarde, alrededor de las cinco, cuando Leopoldo se levantó de un salto, volviéndose hacia m+ con el traje de bao a la altura de las rodillas Bla cosa, balance'ndose pesadamente, apuntando hacia m+B, dejando ver al saltar las partes de .usana que no se hab+an tostado al sol 1o era la blancura lisa y morbosa de Leopoldo, sino una blancura que deslumbraba "ero no piensa en eso 1o piensa en eso 1o piensa en nada Eira la ciudad gris Bun gris ceniciento, p2tridoB que se despla%a hacia atr's mientras el colectivo avan%a hacia aqu+ Leopoldo abre la ducha y comien%a a enjabonarse )odos sus movimientos son lentos, como si estuviera tratando de aprenderlos ;#de lu% solar la piel de la maana#= <omo si estuviera tratando de aprenderlos y grab'rselos .e re(riega con duros movimientos el pecho, los bra%os, el vientre, y ahora sus dos manos se encuentran debajo del vientre y comien%an a re(regar con minucia@ eso es lo que me dice su sombra re(lej'ndose sobre los vidrios esmerilados de la puerta del cuarto de bao Eis huesos crujen como la madera del sillón, pulida y gastada por el tiempo, mientras me inclino hacia adelante y vuelvo hacia atr's, hamac'ndome lentamente, rodeada por la lu% gris del atardecer que se condensa alrededor de mi cabe%a como el resplandor de una llama ya muerta ;#- que por ese olor recono%camos# #cu'l es el http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf 5/22/2018 Saer,Juan Jose-Sombrassobrevidrio esmerilado.pdf-slidepdf.com sitio de la casa humana# #como reconocemos por los ramos# #de lu% solar la piel de la maana#= &1VD .é que lo que mam' quiso decirme antes de morir era que odiaba la vida Ddiamos la vida porque no puede vivirse - queremos vivir porque sabemos que vamos a morir "ero lo que tiene un n2cleo sólido Bpiedra, o hueso, algo compacto y tejido apretadamente, que pueda pulirse y modi(icarse con un ritmo di(erente al ritmo de lo que pertenece a la muerteB no puede morir La vo% que escuchamos sonar desde dentro es incomprensible, pero es la 2nica vo%, y no hay m's que eso, e$cepción hecha de las caras vagamente conocidas, y de los soles y de los planetas Ee parece muy justo que mam' odiara la vida "ero pienso que si quiso dec+rmelo antes de morirse no estaba tratando de hacerme una advertencia sino de pedirme una re(utación /1 http://slidepdf.com/reader/full/saer-juan-jose-sombras-sobre-vidrio-esmeriladopdf