Sermón Marcos 1: 29-34 Buenos días mis amados hermanos. Es un placer estar con ustedes y un honor compartir la palabra el día de hoy. Hoy continuaremos con la serie: Siervo de siervos //Estaremos viendo Marcos 1:29-34// //El tema lo he titulado: Pandemia espiritual// //Estaremos viendo tres pasos para sanar espiritualmente// ¿Saben que es una pandemia? Enfermedad que se extiende a muchos países y que ataca a casi todos los individuos de la población. Nosotros acabamos de pasar una pandemia de COVID-19 . ¿Cómo nos preparamos para la pandemia? Veamos unos ejemplos: Memes Pero nosotros no estamos enfrentando a otra pandemia. Una más grande, que es la pandemia espiritual. Video Pero veamos primero, que dice la palabra de Dios en este pasaje de la biblia: Marcos 1:29-34 29 Inmediatamente después de haber salido de la sinagoga, fueron[a] a casa de Simón y Andrés, con Jacobo[b] y Juan. 30 La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y enseguida hablaron* a Jesús de ella. 31 Él se le acercó, y tomándola de la mano la levantó, y la fiebre la dejó; y ella les servía.32 A la caída de la tarde, después de la puesta del sol, trajeron a Jesús todos los que estaban enfermos y los endemoniados. 33 Toda la ciudad se había amontonado a la puerta. 34 Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y expulsó muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque ellos sabían quién era Él[c]. Vamos a volver a leer Marcos 1: 29-30 y nos detendremos ahí. 29 Inmediatamente después de haber salido de la sinagoga, fueron[a] a casa de Simón y Andrés, con Jacobo[b] y Juan. 30 La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y enseguida hablaron* a Jesús de ella. Vemos como Jesús después de haberse retirado de la sinagoga donde expulsó un demonio, fueron a casa de Simón y Andrés. Recuerden que eran hermanos y probablemente compartían casa. Los acompañaba Jacobo y Juan. Este pasaje tiene la característica de que cuenta con versículos paralelos, Mateo 8:14 y Lucas 4:38 hablan de lo mismo. Si leemos Lucas 4:38 podemos tener un detalle importante: Lucas 4:38 38 Jesús salió de la sinagoga y fue a casa de Simón[a]. La suegra de Simón tenía una fiebre muy alta y le rogaron a Jesús que la ayudara. No sabemos que enfermedad tenía la suegra de Pedro. Lo único que nos revela Lucas es que la fiebre que tenía era muy alta. Y parece ser que estaban muy preocupados. Lucas era médico y pudo entender la gravedad de la situación. La fiebre nos alerta de que hay algo anormal en la persona. En general es debido a una infección. Durante el estado febril hay cambios importantes en el metabolismo. Por ejemplo, la frecuencia del corazón (o el pulso que podemos palpar), se acelera 16 latidos por cada grado de aumento de la temperatura. Pero no es sólo el corazón sino todo el organismo el que es afectado por la alta temperatura. Cuando ésta llega a cierto nivel, la persona puede empezar a delirar o aun a tener convulsiones. Aunque la Palabra aquí no específica, ella seguramente estaba sufriendo de “malaria” cual era una enfermedad común en ese entonces. . La “malaria” es una enfermedad que completamente incapacita a la persona afectada. La “malaria” es una infección bien seria de recaída, causada por parásitos de una sola célula (del género Plasmodium), y que es comúnmente transmitida por la picada de un mosquito. Éste parásito inicialmente penetra las células del hígado, donde se multiplica, y después se riega por el cuerpo infectando los glóbulos rojos. La rápida división o multiplicación de éste parásito causa la destrucción de los glóbulos rojos, y causa una gran variedad de sufrimientos o síntomas que incluyen, pero no se limitan a, ataques periódicos de frialdades y fiebre alta, anemia, esplenomegalia (ampliación del bazo), y otras complicaciones que menudo son fatales. Aunque existen algunas medicinas que son usadas para aliviar los síntomas y que destruyen el parásito, existen tipos de este parásito que resisten los tratamientos conocidos; en otras palabras, esta enfermedad con frecuencia no tiene cura, y es por eso que alrededor del mundo millones de personas mueren anualmente. ¿Te has sentido tan enferma o enfermo como la suegra de Pedro? ¿Consideras que esa enfermedad hizo que Jesús entrará a tu casa? Por que les hablo de esto. Porque, así como a nivel físico, a nivel espiritual podemos ser infectados. De hecho, estamos enfrentando una pandemia increíble de enfermedad espiritual. Existen muchos que sufren de pandemia espiritual; estamos hablando acerca de la enfermedad del espíritu que es el pecado. Al igual que el parásito de la malaria que consiste de una sola célula y que es transmitido por un insecto tan pequeño que cómo un mosquito, el pecado suele reproducirse o multiplicarse cuando no aprendemos a reconocerlo, y en ocasiones llega a infectar y afectar la vida de aquellos que nos rodean. Digo esto porque el pecado puede comenzar, y en numerosas ocasiones comienza con algo tan insignificante o pequeño como lo es un pensamiento. La respuesta a esta pregunta es bien fácil; nuestro enemigo sabe muy bien que cuando se logra controlar de la manera que una persona piensa, entonces es fácil manipular de la manera que una persona se siente y actúa. En otras palabras, se puede manipular el espíritu de una persona. Satanás tratara de emplear pensamientos terrenales y carnales como un arma eficaz para tratar de alejarnos de la presencia de Dios. Esto significa que debemos tener cuidado con lo que empezamos a pensar. Es más fácil caer en la tentación cuando dejamos que nuestra mente se detenga; por ejemplo, cuando creemos en la mentira de que el pecado que estamos contemplando es mejor que lo que Dios nos instruye a hacer, que no tendrá consecuencias y que realmente nos traerá bien. Así como la fiebre es un síntoma. Así también existen muchos síntomas que indican que estamos enfermos espiritualmente. Digo esto porque con frecuencia envés de alejarnos de esas cosas que nuevamente infectan nuestro espíritu, envés de deshacernos de esas costumbres, amistades y demás cosas que sabemos que solo sirven para agobiarnos, robarnos la paz, y enfermar nuestro espíritu, persistimos en ellas. Ahora pregunto, ¿quiere Dios que actuemos de esta manera? Cuáles son los síntomas que he sido contagiado por la pandemia espiritual? Elaborar imágenes deben de decir: Título Obras de la carne y al final poner Gálatas 5:19-20. 1.- Pecados sexuales: Adulterio, Fornicación, Inmundicia, Lascivia Si te encuentras en una relación inmoral o en pornografía, esto es un buen síntoma de que tu espíritu ha sido infectado nuevamente. 2.- Pecados de adoración equivocada: Idolatría, Hechicería Si te da lo mismo venir a la iglesia para alabar y escuchar la Palabra de Dios que no venir, esto es un buen síntoma de que tu espíritu ha sido infectado nuevamente. Si le das prioridad a cualquier cosa antes de venir al Servicio, hay síntomas de idolatría. 3.- Pecados contra el prójimo: Enemistades, Pleitos, Ira, Contienda, Disenciones, Herejias, Envidias, Homicidios: Si permitimos ser dominados por el egoísmo, el orgullo, la ira, la contienda esto es un buen síntoma de que nuestro espíritu ha sido nuevamente infectado. Si no generamos la confianza para nuestra pareja propiciando desconfianza y contienda estamos siendo infectados. 4.- Pecados de excesos: Borracheras, Orgías. Si estamos más preocupados con los placeres y gusto que ofrece éste mundo envés que en nuestra relación con Dios, esto es un buen síntoma de que nuestro espíritu fue nuevamente infectado. Tenemos que reconocer que estos síntomas solo indican un diagnostico, y ese diagnostico es que nuestro espíritu ha sido infectado por el virus mortal que es el pecado. Primer paso para ser sanado espiritualmente: Reconocer que estamos enfermos de pecado. 1 Juan 1:8-9 8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. 9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad Algo importante que podemos aprender también es que Lucas nos menciona que los que estaban ahí le rogaron por ella. Debemos de rogarle a Jesús que nos sane. Salmos 18:6 En mi angustia invoqué al SEÑOR, Y clamé a mi Dios; Desde Su templo oyó mi voz, Y mi clamor delante de Él llegó a Sus oídos. Segundo paso para ser sanado espiritualmente Rogarle a Jesús que nos limpie Continuemos ahora con los siguiente versículo: Marcos 1:31 La palabra de Dios dice: 31Él se le acercó, y tomándola de la mano la levantó, y la fiebre la dejó; y ella les servía. Allí tirada sobre el lecho está una mujer muy enferma; viene Jesús de Nazaret, aquel que es Dios manifestado en carne, y se inclina sobre ella y le toma la mano que está ardiendo con la fiebre. Jesucristo sin duda mira a esta pobre enferma y reprende la fiebre. La ayuda a incorporarse, ella queda sana, y termina sirviéndoles. ¡Qué cambio profundo hizo Jesucristo en esta mujer! De estar en la cama sin fuerzas y consumida por la fiebre ahora les estaba sirviendo. Sin duda que ella escucha lo que el Mesías habla. Vuelvo a pensar en estas palabras tan preciosas: "les servía". También se puede traducir: "ella les ministraba o les ofrecía su ministerio o diaconado", pues esta es la palabra griega "diakoneo" de donde tenemos la palabra diácono. ¡Qué precioso es cuando tenemos el deseo de servir o ministrar al Señor! Hebreos 12:28 Así que nosotros, que hemos recibido un reino inconmovible, debemos ser agradecidos y, con esa misma gratitud, servir a Dios y agradarle con temor y reverencia (Heb 12:28). Lo que sucedió con la suegra de Pedro en este momento no es muy diferente a lo que nos sucedió a todos nosotros. Digo esto porque cuando una persona genuinamente acepta a Cristo como su Rey y Salvador, y permite que Él toque su corazón, entonces nuestro espíritu enfermo es sanado y liberado. ¿Se acuerda alguien de lo que sucedió en su vida cuando el Señor llego a ella? Yo diría que la mayor parte del cuerpo de Cristo consiste de personas que una vez estuvieron sedientos y hambrientos; necesitados y sufriendo; debido a las circunstancias difíciles que se presentan en éste mundo. En otras palabras, Él llego cuando más lo necesitábamos, cuando más angustiados y llenos de dolor estábamos. Jesús llego y toco nuestro corazón, y nuestro espíritu fue sanado de inmediato. Pero desdichadamente, en ocasiones, a muchos se les olvida el milagro que Él hizo en nuestra vida, y lo que está haciendo actualmente. Digo que se nos olvida el milagro que hizo en nuestra vida, y que ignoramos lo que está haciendo actualmente, porque con frecuencia dejamos de ser el ejemplo a seguir; con frecuencia dejamos de servirle de la manera que Él espera y demanda. ¿Cómo te gustaría servir en el reino de Dios? ¿Cómo espera el Señor que le sirvamos y actuemos? Colosenses 3:23-24 Cualquiera sea el trabajo de ustedes, háganlo de todo corazón, teniendo en cuenta que es para el Señor y no para los hombres. Sepan que el Señor los recompensará, haciéndolos sus herederos. Ustedes sirven a Cristo, el Señor. ¿Cómo podemos nosotros evitar ser nuevamente infectados, o recaer en nuestra condición original? La respuesta es bien fácil, y es encontrada aquí cuando leemos: “…y ella se levantó, y les servía…” La suegra de Pedro se levanto y empezó a servirles. Y esto es exactamente lo que todos nosotros debemos y tenemos que hacer para evitar ser nuevamente infectados o recaer en nuestra condición original. Éste es el ejemplo que todos debemos seguir. Él llega a nosotros, nos sana, y tenemos que empezar a genuinamente y de todo corazón servirle de inmediato. No hay tiempo que perder, no existen excusas para no hacerlo. Tercer paso para sanar espiritualmente Servirle a Jesús de todo corazón Juan 6:28-29 28 Entonces le preguntaron: «¿Qué debemos hacer[a] para poner en práctica las obras de Dios?». 29 Jesús les respondió: «Esta es la obra de Dios: que crean en el que Él ha enviado». Ejemplos de servicio a Dios Hacer tú trabajo de la mejor forma Conducirte con honestidad y sinceridad Ser paciente y tolerante con los demás Ser buenos padres educando y proveyendo a los hijos Ser buen esposo amando a tu esposa Ser buena esposa respetando a tu esposo Respetando tu cuerpo y evitar el consumo de alcohol y drogas Ser buen hijo honrando a tus padres El mejor servicio es AMAR a tu prójimo como Cristo nos amó. Continuemos con los versículos restantes: Marcos 1:32-34 32 A la caída de la tarde, después de la puesta del sol, trajeron a Jesús todos los que estaban enfermos y los endemoniados. 33 Toda la ciudad se había amontonado a la puerta. 34 Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y expulsó muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque ellos sabían quién era Él[c]. Marcos dice que cuando llegó la tarde, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos. A pesar de su cansancio, nuestro Señor no pudo ignorar la gran necesidad que estas personas tenían de ser liberados de su aflicción. Su compasión siempre fue más allá de cualquier necesidad de descanso, su ministerio fue exhaustivo y orientado a ayudar a los más necesitados. Marcos una vez más trata de enlazar los acontecimientos que están pasando con las profecías mesiánicas del Antiguo Testamento, ya que no olvidemos que su propósito principal es demostrar que Jesús es el Mesías profetizado en la ley, los profetas y salmos. Veamos como cuenta este pasaje Mateo: Mateo 8:16 16 Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; 17 para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: Él mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias. Definitivamente esta profecía se hizo realidad cuando Jesús vino a esta tierra, todas las sanidades divinas que realizaba eran un fiel cumplimiento de Isaías 53:4, y lo presentaban como el Mesías tan esperado. Hoy en día, como cristianos gozamos de esta gloriosa promesa, ya que la forma de cómo llevo todas nuestras dolencias y enfermedades fue a través de su muerte en la cruz del Calvario. La principal enfermedad que el se lleva es la enfermedad espiritual: 1 Pedro 2:24 24 Él mismo llevó nuestros pecados en Su cuerpo sobre[a] la cruz[b], a fin de que muramos al pecado[c] y vivamos a la justicia, porque por Sus heridas[d] fueron ustedes sanados. ¿Consideras que necesitas sanidad espiritual? Hermanos, esto está disponible para todos los que hemos aceptado a Jesús. Nuestras llagas han sido sanadas. Pero si hemos descuidado nuestra vida personal, hoy el es día de rogarle a Jesús y pedirle que te sane. Esto está disponible para todo cristiano. Pero, ¿has nacido de nuevo? Muchos que no son cristianos pueden tener muchas buenas obras, hacen obras de caridad, ayudan a los necesitados, dan dinero en el teletón, apoyan en lo programas de redondeo, no son adulteros, educan a sus hijos y dicen que creen en Dios. Algunos de ellos puede decirnos tu que te dices cristianos no haces nada por los necesitados, pues yo hago más que tu. En el versículo 34 dice que no dejaba que los demonios hablarán porque sabían quien era él. No basta con saber quién es Jesús. Hay que aceptarlo en el corazón. Aquí está mencionando que no basta en tener el conocimiento intelectual, no basta en creer que hay un sólo DIos o que existe Jesús, los demonios lo saben y también saben que serán juzgados, tiene que haber una fe genuina en Cristo. Una fe genuina que produzca obras de justicia, una fe genuina que obre en amor, que genere compasión por los necesitados. Sólo através de Jesús podremos tener frutos de justicia, podremos manifestar ese verdadero amor... Si no has recibido a Cristo hoy es el dia Romanos 10:9-10 9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Arrepientete y cree en Jesús, en el hay salvación, en el hay una fe genuina que obra en Amor. Si alguno quiere recibir a Cristo, levanta tu mano y permiteme orar por tí. Señor Jesús, te necesito. Gracias por morir en la cruz para pagar por mis pecados. Te pido perdón por mis pecados y te recibo como mi Señor y Salvador. Gracias por darme el regalo de vida eterna. Deseo cambiar y vivir una nueva vida contigo como mi Señor y Salvador , Escribe mi nombre en el libro de la vida y prometo serte fiel y justo .Gracias Jesús. Amé Si lo que escucharon fue motivo de alegría en su corazón...denle aplauzos al Señor.