Caja de herramientas Las claves de la producción de conocimiento Claves para escribir artículos académicos Autor: Leonardo Ordóñez Díaz Claves para escribir artículos académicos ¿Qué es un artículo académico? El cultivo del pensamiento crítico es un ingrediente indispensable para el desarrollo de las ciencias. Desde los inicios del mundo moderno, el examen crítico de las teorías y el escrutinio público de las hipótesis han sido pieza clave para la producción de conocimiento. Mediante el ejercicio de la crítica, la comunidad científica de cada área examina los resultados del trabajo investigativo y se pronuncia sobre ellos, sea para impugnarlos, corregirlos o ratificarlos. Pero sin difusión no puede haber crítica. Por eso uno de los componentes centrales del quehacer académico es la publicación de resultados de investigación. Mediante la publicación, el investigador somete su trabajo a examen abierto y revisión detallada por parte de la comunidad académica. Esto indica que el desarrollo del conocimiento no surge del trabajo aislado o la intuición genial de algunos estudiosos, sino que es fruto de un esfuerzo colectivo. En la actualidad, el artículo académico es el formato más común para publicar resultados de investigación, casi siempre en revistas científicas especializadas. Su finalidad principal es “presentar en sociedad” los resultados del desarrollo de una hipótesis. Este tipo de artículo es “especializado” porque no está dirigido al público en general sino a una comunidad académica específica. Esto supone que la discusión de la hipótesis se vale de marcos teóricos particulares y métodos propios de un área del conocimiento o una disciplina; por eso sus lectores más plausibles son los especialistas o expertos en temáticas afines. Los resultados que contiene un artículo académico son originales en un sentido amplio de “originalidad”: pese a que muy pocos artículos han revolucionado la historia de la ciencia, la mayoría de ellos han aportado a su modo. La estructura del artículo académico El camino para elaborar artículos académicos pasa por la escritura de reseñas críticas y ensayos de opinión. En la reseña crítica, el objetivo es plantear un problema y formular una hipótesis propia; este objetivo corresponde, en el artículo académico, a la introducción. En el ensayo de opinión, el objetivo es debatir el problema examinando sus pros y sus contras; este objetivo corresponde, en el artículo académico, a la sección central, en la cual se efectúa el desarrollo de la hipótesis. Además, el artículo académico incluye una evaluación final de la hipótesis a la luz del debate previo y del estado de los conocimientos. La elaboración de este tipo de artículos se apoya así en técnicas de escritura correspondientes a formatos académicos más sencillos, pero las lleva a un mayor nivel de exigencia, precisión y rigor; por eso, cuanto más se practican los formatos básicos de escritura, más se facilita la escritura de artículos. Claves para escribir artículos académicos 01 Un buen artículo académico explora una hipótesis de trabajo a partir de una selección estricta de datos o bibliografía. Este tipo de indagación requiere un trabajo de documentación muy dirigido y exhaustivo. En especial, es preciso documentarse a fondo sobre el estado del arte en los puntos relevantes para el desarrollo de la hipótesis (para más detalles al respecto, ver la ficha Claves para documentarse y hacer estados del arte). “What is research but a blind date with knowledge?” Will Harvey He aquí algunas orientaciones para elaborar las partes principales de un artículo académico: TÍTULO El título es la «carta de presentación» de los resultados investigativos; por eso, dado el carácter especializado del artículo académico, tiene que ser muy preciso en la formulación del tema. A la hora de elegirlo, es importante tener en cuenta que: Por lo general, es mejor que las primeras palabras del título indiquen el tema central, de modo que futuros lectores puedan ubicarlo con facilidad en archivos, índices o bases de datos. Por ejemplo, en el título “Gérmenes y armas de fuego: un estudio de su evolución” la palabra clave está al final; he aquí una formulación preferible: “La evolución de los gérmenes y las armas de fuego”. El título debe ser específico. Para darle especificidad al título conviene redactarlo con base en el problema o en las variables tematizadas en el artículo. Ejemplos de ello son títulos como: “¿Qué es un acto de habla?” – “Por qué se necesita una nueva física para comprender la mente” – “Persona, tiempo y conducta en Bali” – “La empresa como comunidad moral: un modelo para armar” – “Memoria, motricidad e inteligencia en niños de 5 a 7 años” – "Perspectivismo y multiculturalismo en la América indígena" - "Ecología y ciencias humanas: Sobre los retos de las humanidades en el marco del orden climático emergente". No es recomendable iniciar el título con palabras como “investigación”, “estudio”, “proyecto” o “informe”; éstos y otros términos análogos por lo general no proporcionan ninguna orientación precisa sobre el tema del artículo. Por ejemplo, “Una indagación entorno a los dos dogmas del empirismo” se vuelve un título mucho más contundente y certero formulado así: “Dos dogmas del empirismo”. Nota: Para más detalles sobre este punto, ver la ficha Claves para poner títulos (y subtítulos). Claves para escribir artículos académicos 02 RESUMEN / ABSTRACT El resumen es como un título un poco más extenso, compuesto de varias frases; en él se hace una síntesis del contenido del artículo en la que se destacan los elementos centrales del texto. Por medio del resumen, el autor del artículo entabla un contacto crucial con sus posibles lectores. En efecto, un buen lector científico siempre revisa artículos académicos motivado por un problema que quiere resolver y no por simple curiosidad. Con el título le indicamos al lector si nuestro artículo cubre la misma área problemática; con el resumen, lo persuadimos de que, además, abordamos el problema de forma interesante. Esta es la razón por la cual existen índices de resúmenes. Por eso también las revistas de calidad exigen resúmenes de los artículos que van a publicar. Un buen resumen (i) señala el objetivo de la investigación, (ii) describe el marco teórico y los métodos utilizados, (iii) sintetiza el desarrollo de la hipótesis y (iv) enuncia los resultados obtenidos. En ningún caso un resumen debe contener información o conclusiones que no figuren en el artículo. En suma, para escribir esta parte del artículo es clave tener en cuenta que: El resumen es decisivo como “primera impresión”; si está redactado de un modo complicado y farragoso, sus lectores supondrán que el artículo que sigue es similar y tendrán reparos para leerlo. En cambio, un resumen claro y sencillo suele predisponer favorablemente al lector. Es mejor escribir el resumen después de finalizar la redacción del resto del texto; así se minimiza la posibilidad de discordancias entre el resumen y los contenidos del artículo. El resumen consta de un sólo párrafo de aprox. 150 palabras (esta cifra puede variar según las políticas editoriales de cada revista) y suele ir seguido de 4 o 5 palabras o descriptores claves (key words); por lo general, primero va el resumen en español y luego su traducción al inglés. INTRODUCCIÓN En la introducción se expone brevemente el problema y el estado de la investigación en el tema, se explica el método o enfoque teórico que se utilizará, se plantea la hipótesis de trabajo y se presenta un esquema de la organización que tendrá el debate. “Cuanto más grande es la dificultad, tanto mayor la alegría de superarla.” Epicuro Claves para escribir artículos académicos Recordemos que la introducción de un artículo académico tiene el mismo objetivo que una reseña crítica: plantear una hipótesis o pregunta propia. Por eso es conveniente que la introducción sintetice el estado de la investigación y describa el camino que conduce a la hipótesis. Al leer el artículo, el lector espera que la introducción lo ponga al tanto de los antecedentes necesarios para comprender y evaluar el debate que viene luego. Un modo eficiente de estructurar la introducción consiste en redactarla respondiendo cuatro preguntas: 03 [a] ¿Cuál es el problema y por qué es importante? [b] ¿De qué trabajos anteriores o de qué hechos se deriva el problema? [c] ¿Cuál es la hipótesis de trabajo? [d] ¿Cómo está organizado el debate? El orden en que se responden estas preguntas puede variar. En todo caso, lo usual es finalizar la introducción explicándole a grandes rasgos al lector cuál será el contenido de cada una de las partes del debate. Antes de imprimir o de publicar el artículo, es preciso verificar que la versión final cumpla efectivamente con la organización anunciada en la introducción. DEBATE / DISCUSIÓN Esta es la sección central y más extensa del artículo, en la cual se prueba o se invalida la hipótesis de trabajo. El esfuerzo aquí se enfoca en explicar el significado de la hipótesis y argumentarla, aclarando los vínculos entre el marco conceptual, el método utilizado, los hechos observados y la restante información pertinente para validar la hipótesis. La reconstrucción de los pasos respectivos tiene que ser detallada, a fin de que el lector pueda revisar cualquier punto de la argumentación y evaluar su solidez. Por lo general, el debate consta de varias secciones encabezadas con subtítulos que reflejan la organización anunciada en la introducción. La argumentación de la hipótesis se suele estructurar según la siguiente secuencia: 1) Enfoque teórico. Primero hay que reconstruir las fuentes teóricas de las cuales se nutre el debate. Hace falta explicar, por ejemplo: ¿Cuáles son los fundamentos conceptuales del debate? ¿En qué sentido se utilizan en el artículo las palabras clave? ¿Por qué los conceptos o los argumentos provenientes de las fuentes son relevantes para el desarrollo de la hipótesis? 2) Métodos. En los trabajos de investigación empírica es necesario además describir los métodos cuantitativos y/o cualitativos utilizados para obtener datos y recoger información; también hay que explicar los criterios con base en los cuales se eligieron los métodos y se diseñaron los instrumentos para la recolección de las muestras. Si la investigación involucra la realización de experimentos (empíricos o mentales) u otro tipo de pruebas, hay que describirlos y mostrar su pertinencia para el desarrollo de la hipótesis. 3) Discusión. Luego viene la discusión de la hipótesis de trabajo. En esta sección se sistematiza la argumentación y se prueba o invalida la hipótesis, incluyendo citas y referencias bibliográficas para respaldar partes del hilo argumentativo. Cuanto más amplia sea la discusión en torno a la hipótesis de trabajo y a las fuentes, tanto más convincentes serán las conclusiones. Claves para escribir artículos académicos 04 En aras de la amplitud, es buena idea abordar en la discusión preguntas como: ¿Por qué razones la hipótesis constituye una respuesta adecuada al problema? ¿De qué manera el análisis de los datos o de los conceptos respalda la hipótesis? Si la hipótesis es válida, ¿qué otras hipótesis pierden validez? Si la hipótesis sólo es válida en parte, ¿qué aspectos del problema quedan sin respuesta y por qué? En todo caso, la discusión tiene varios desenlaces posibles:la validación total o parcial de la hipótesis, su reformulación o su refutación. Cualquiera que sea el resultado, es preciso detallarlo y comentarlo al final, ya que constituye un aporte al conocimiento. Nota: Para más detalles sobre este punto, ver la ficha Claves para armar hilos argumentativos. CONCLUSIONES Las conclusiones son el momento de recapitular los resultados más importantes del trabajo realizado. Por eso es esencial que sean claras y precisas: ellas le están proponiendo nuevos conocimientos a la comunidad académica. Hay que abstenerse de reiterar detalles ya sometidos a discusión, limitándose a presentar los resultados y comentarlos de forma breve, y evitando a toda costa formular conclusiones que no estén sustentadas en el debate previo. Esta parte final del artículo se puede estructurar respondiendo un par de preguntas: [a] ¿Cuáles fueron las conclusiones más importantes o significativas? [b] ¿Qué consecuencias y horizontes de trabajo se derivan de los resultados obtenidos? Vale la pena tener presente que no siempre las conclusiones corresponden a las expectativas iniciales; a menudo, el debate pone en evidencia limitaciones o excepciones que obligan a replantear, corregir o incluso abandonar la hipótesis de trabajo. Si esto sucede, hay que señalarlo con claridad en las conclusiones; los investigadores no son infalibles y nadie puede hacerles reproches por admitir los límites de su investigación, pero en cambio sí pueden hacérselos si se empeñan en ocultarlos. Nota: Para más detalles sobre la introducción y la conclusión, ver la ficha Claves para introducir y concluir un texto. Claves para escribir artículos académicos “¡Cuantas maravillas descubriríamos si la cobardía y la pereza no entorpecieran nuestra curiosidad!” Mary Shelley 05 BIBLIOGRAFÍA En la bibliografía se referencian todos los libros, artículos, documentos y demás materiales que hayan sido consultados para la elaboración del artículo. Dada la experticia que seguramente tendrán en el tema los lectores potenciales del texto, es necesario que la lista final de referencias bibliográficas sea exhaustiva y muy exacta en todos sus detalles (para una mayor información al respecto, ver la ficha Claves para citar, hacer referencias y elaborar bibliografías). El artículo académico suele tener entre 14 y 20 páginas (unas 6000 a 10000 palabras). Algunas indicaciones finales Elaborar un artículo académico, en suma, es una de las tareas más desafiantes y a la vez más productivas en el marco de un proceso de formación superior. Con ello se nos abre una oportunidad única para someter a un escrutinio profundo las implicaciones teóricas de nuestro trabajo, así como cualquier posible aplicación práctica. Para asumir con razonables posibilidades de éxito este tipo de esfuerzo intelectual (válido en diversos escenarios académicos como monografía de grado), lo mejor es tener presentes las siguientes recomendaciones: En un artículo académico, casi siempre es aconsejable ir al grano, pues rara vez hay licencia para explayarse en asuntos secundarios. Explicar y desarrollar una hipótesis en tan sólo 10, 12 o 15 páginas exige una disciplina especial; los preámbulos históricos, los resúmenes de contenidos y las discusiones periféricas por lo general malgastan un espacio que es mejor reservar para lo esencial. También es de suma importancia seguir un hilo conductor claro en la exposición de las ideas, ordenándolas según su grado de importancia o según su pertinencia en los distintos pasos de la exposición. En concordancia con ello, hay que evitar en lo posible las digresiones y los saltos de un tema a otro, pues, además de confundir al lector, eso puede ser un indicador de que el propio autor está confundido. Por último, es muy buena idea frecuentar la lectura de artículos de revistas especializadas; en efecto, en el mundo académico ‒al igual que en otras áreas de la actividad humana‒ se aprende bastante por imitación. Si sólo leemos libros, podemos pensar que lo normal es escribir libros. Si leemos una amplia variedad de artículos especializados, pronto aprenderemos a concentrarnos en lo sustancial. Claves para escribir artículos académicos 06 Esquema sugerido para el artículo académico Título (subtítulo opcional) Resumen / Abstract (1 párrafo de aprox. 150 a 200 palabras) Introducción (1 a 2 páginas) • • • Planteamiento y justificación del problema Presentación de la hipótesis de trabajo Descripción de antecedentes y anuncio de la organización del debate Debate / Discusión (aprox. 10-15 páginas) • • • Reconstrucción de las fuentes teóricas empleadas Descripción de los métodos cuantitativos y cualitativos utilizados Revisión y argumentación de la hipótesis de trabajo Conclusiones (1 a 2 páginas) • • Recapitulación y comentario breve de los resultados más importantes Consecuencias y horizontes de trabajo derivados de los resultados Bibliografía Criterios evaluativos más comunes de los artículos académicos 1- ¿El título del artículo es específico y formula con precisión el tema principal? 2- ¿El resumen sintetiza bien el contenido del artículo y destaca los puntos esenciales? 3- ¿La introducción plantea con claridad el problema y explica por qué es importante? 4- ¿Indica cuál es la hipótesis de trabajo y anuncia cómo se organizará el debate? 5- ¿La parte central del artículo reconstruye las fuentes teóricas que nutren el debate? 6- ¿Describe los métodos cuantitativos y/o cualitativos utilizados y justifica su elección? 7- ¿Efectúa una discusión amplia y bien argumentada de la hipótesis de trabajo? 8- ¿Sigue un hilo conductor claro y sólido en la exposición de la ideas y los argumentos? 9- ¿La conclusión recapitula los resultados alcanzados más importantes? 10- ¿Señala qué consecuencias y horizontes de trabajo se derivan de dichos resultados? 11- ¿La lista de referencias bibliográficas es exhaustiva y precisa en todos sus detalles? 12- ¿El artículo está bien escrito y respeta las normas de la gramática y la ortografía? Claves para escribir artículos académicos 07