UNIVERSIDAD CAMPUS EMPRESA Por Carlos Amtmann y Sergio Cervantes El adagio dice: “Caballo que alcanza gana”, seguramente se debe a la potente inercia de caballo y jinete en sincronía. Lograrlo, es cuestión de técnica, habilidades y cuerpos bien dotados. Así ha de continuar el impulso alcanzado entre trabajo, capital y gobierno que en México ha reducido el índice Ginii de 53.7 a 49.5 en los últimos diez años. FACTORES CLAVE DEL ÉXITO En la investigación realizada para determinar la influencia de la administración de primera clase en la productividad, demuestra que la inversión en los trabajadores trae grandes beneficios a la empresaii. En investigación hecha en colaboración con la Universidad de Londres en 100 empresas entre 1994 y 2002 dentro de Alemania, Inglaterra, Francia y EUA, para determinar la influencia de la computación en la productividad, se encontró que más que la computación, la administración de primera clase, ha elevado significativamente la productividad al cambiar la forma de operar. Tres prácticas resultaron ser la esencia de la transformación, independientemente de su localización, tamaño, sector o desempeño histórico. El análisis incluyó empresas seleccionadas al azar para calificar del 0 al 5 en (I) qué tan bien habían aplicado la manufactura de clase mundial, restringiendo al máximo el desperdicio en los procesos productivos o lean manufacturing; (II) la administración del desempeño o performance management que establece metas claras y recompensa a los empleados que las alcanzan, así como (III) programas de administración del talento para reclutar a los mejores y desarrollar a la gente de alto calibre. Los resultados muestran que un punto de mejora en la escala, se correlaciona con un incremento del 25 por ciento en el factor que mide el nivel de productividad total de la empresa, medida que incluye la mano de obra y el capital. Para ponerlo en otra perspectiva, los resultados comparan con los que daría un incremento en la inversión de 70 por ciento, como pasar de 10 plantas a 17 o bien equivalente a un incremento en la fuerza de trabajo de 25%. Este resultado se obtuvo en empresas de la más diversa índole dentro de la muestra. En otras palabras, las compañías reciben un gran impulso a partir de estos esfuerzos. Como es de esperarse el impacto en los resultados económicos de las empresas también es impresionante. Un punto de incremento en la escala se correlacionó con un incremento de cinco puntos de crecimiento en el retorno sobre el Capital invertido. Por tanto, dado que las ganancias sobre el capital eran de 12%, las empresas que incrementaron un punto en la escala, hicieron crecer sus resultados en 42 por ciento. LA PRÁCTICA HACE AL MAESTRO Temas como lean manufacturing, perforamance management o tantas otras metodologías encuadradas en múltiples acrónimos (CPM, BPM, ABC, BSC; etcétera.) pueden dejar confundido a cualquiera. Son representativos de temas especializados que se enseñan en las diversas maestrías a las que tienen acceso los funcionarios de las empresas que otorgan becas parciales o totales para sus empelados. Sin embargo, la velocidad de la aplicación de los conocimientos y las diversas técnicas que un funcionario aprende dentro de una maestría o doctorado, requiere asimilarlas, la adaptación de ellas para hacerlas aplicables al giro de la empresa en que se desenvuelve y sin lugar a dudas del eco que encuentre en el dueño y los colegas en el negocio. Las cifras globales del entorno empresarial se muestran en la Tabla 1. El impacto en las mejoras a la competitividad tiene una amplia oportunidad entre la empresa media, la pequeña y mediana, ya que en ellas se encuentra el 60% de la población económicamente activa y aún no logran, por definición, las escalas de productividad que ya tiene la empresa grande. Un incremento en sus ingresos es un incremento en un amplio sector laboral. La condición de país en desarrollo se encuentra relacionada con dos variables fundamentales: el ingreso per cápita promedio y la distribución del ingreso en la población. En el caso de México, la relación del ingreso entre el quintil de población más alto y el más bajo es de 30.6 veces, mientras que en el resto de Latinoamérica es de 27.5, muy alejada del de los EUA de 16.9 veces y del de Europa de 7.5 veces. iii Es ahí donde el segundo hallazgo del estudio tiene aplicabilidad: recompensar a los trabajadores que alcanzan las metas propuestas y que a su vez están alineadas a la estrategia de la empresa. Se vuelve un círculo virtuoso remunerar por incrementos en la productividad. (Ver figura 1). Eso hará que los trabajadores mejoren sus percepciones y participen más del gasto que mueve la demanda de las empresas, ese acercamiento entre los que más ganan y los que menos ganan es factor clave para incrementar la demanda interna y atraer la inversión en empresas que la satisfagan. Nuestro índice Gini mejoró en los últimos años gracias a la inflación contenida, los salarios reales crecieron para los que menos ganan y los ingresos por intereses disminuyeron para los que pertenecen a quintiles de ingresos más altos de la población. En materia de distribución del ingreso pasamos de ser el país 121 al 113 entre 138 países, estamos muy por debajo de un término medio. Por ejemplo, en PIB per cápita somos el país número 47 semejante al de la competitividad; no nos enorgullece, pero en distribución del ingreso estamos peor. Hay que hacer un esfuerzo dirigido por más y mejor empleo formal. Lo comentaba la agregada comercial Chog Ku Chun de la embajada de Corea del Sur: “el embajador no gana mucho más, ni su asistente mucho menos que yo”. Ellos, los Coreanos vienen creciendo a paso veloz gracias a la campaña cultural que emprendieron después de la guerra, llamada –pueblos limpios– en el que habitantes de cada poblado se involucraron en el progreso afanándose en mantenerlos limpios y agrícolamente productivos. Por otro lado, el gobierno, en vez de quedarse con los apoyos financieros internacionales, los trasladó a los empresarios para industrializar al país, en vez de engrosar monopolios estatales. Ellos van alcanzando a Japón, ¿y nosotros? PROBLEMAS NUEVOS SOLUCIONES NUEVAS Vivimos los tiempos de la post-crisis económica. El aparato gubernamental quedó obeso, pero con mejores ingresos. Podría, después de ofrecer jubilaciones anticipadas para adelgazar el aparato de gobierno, ofrecer mejores salarios. El salario mínimo de 1970 equivale a $158.29 pesos de hoy, nadie debería ganar menos de eso, es cuestión de justicia…, y de demanda agregada. Pero en cuanto a productividad todos tenemos mucho por hacer, para eso hay que ser buenos administradores de empresas. Sin embargo, si la administración de empresas es planear la estrategia, planear la operación, ejecutar y evaluar el desempeño, el resultado de la encuesta aplicada entre los miembros del IMEFiv muestra resultados desalentadores. La investigación consistió en preguntar en 159 empresas qué tan bien se encuentran los cuatro músculos que fortalecen esos cuatro elementos de la columna vertebral: la metodología, las tecnologías de información o sistemas, lo difundido y comunicado que están y si llevan registro de las mejores prácticas, calificándolas de menor a mayor. En el Cuadro 2 se muestra el resultado de tal encuesta. Por ejemplo, la respuesta en cuanto a metodología de la planeación estratégica es 8, posiblemente porque está de moda del Balanced Scorecard, pero tienen un 2 para las herramientas y 6 y 5.5 para su comunicación y conservación de las mejores prácticas, lo que deja un promedio de 5.3 para el tema de planeación de la estrategia. El en tema de planear la operación el resultado es similar, pero en la ejecución y, sobre todo, en la evaluación del desempeño, vamos muy, muy bajo. Queremos subrayarlo, porque en ellas están contenidos dos de los tres hallazgos de la investigación. Nos parece tan importante que nos ha llevado a un concepto: Revolucionar la consultoría v. Hoy, hemos encontrado que al integrar a un grupo de profesores, maestros y doctores como consultores de empresas medianas coordinando indicadores y proyectos en las juntas de la llamada Oficina para Administración del Desempeño Estratégico, OpADE, a través de ella es posible aterrizar de manera veloz la implantación de metodologías, lo que saldría muy caro introducirlas con proyectos de consultoría externa o muy lento si se espera a que los empleados terminen sus maestrías e incorporen lo aprendido. CONCLUSIÓN Le llamamos desde un inicio Universidad Campus Empresa, para ello firmamos convenio con un prestigiado instituto universitario que complementará los servicios con la formación académica de los participantes, prácticas profesionales de los alumnos y documentando la práctica, estamos ciertos que sin experimentación, no hay investigación, es una necesidad para generar, la inercia necesaria para conducirnos a alcanzar y ganar en la carrera del desarrollo. Tabla 1. Cifras globales del Entorno Empresarial Tamaño de empresas Número de empresas Porcentaje Grande 5,843,000 0.2% Mediana 21,941,000 0.8% Pequeña 83,232,000 3.1% Micro 543,367,000 20.1% Micro sin local fijo 2,046,800,000 75.8% Cuadro 1.Resultados de la Encuesta aplicada a Miembros del IMEF Metodologías: •BSC… •ABB,… •Six Sigma PE 1 Planeación Estratégica Cultura Estructura Liderazgo Comunicación PE 2 PE 3 8 PO 1 Planeación Operativa 2 PO 2 5.5 Ejecución 6.5 6 5.5 5.3 5.1 5.6 5.5 5 2.2 PO 4 EJ 3 EV 2 EV 1 6 5.5 3 Nuevas y Mejores Prácticas PE 4 PO 3 EJ 2 EJ 1 Evaluación del desempeño Herramientas de Tecnología Comunicación EJ 4 5.5 EV 3 EV 4 4 1 2 2 5.1 3.6 6.2 4.7 REFERENCIAS: i Para evaluar con mayor profundidad la desigualdad económica, se analiza la concentración del ingreso mediante la construcción de la curva de Lorenz y el índice de Gini. La curva de Lorenz refleja el porcentaje acumulado de ingreso (%Yi), asociado a un determinado grupo de población (%Pi ), ordenado en forma ascendente en función de su ingreso. La línea de igualdad perfecta representa la ausencia de desigualdad. El cálculo del índice de Gini se efectúa a partir de observaciones agrupadas, con el fin de poder realizar comparaciones entre conjuntos de datos. La fórmula utilizada es la siguiente: Stephen J. Dorgan and John J. Dowdy , “When IT lifts productivity”, The McKinsey Quarterly, 2004, No.4 iii Ardavín Migoni Bernardo, El Incremento de la Competitividad de la Empresa Media, El Mercado de Valores, NAFIN, Año LXII, No. 12 iv Casas Alatriste, José Antonio, Hacia organizaciones de alto rendimiento, Ejecutivos de Finanzas, No. 44, IMEF, agosto 2006 v Programa ADE+ Global Intelligence, S.A. de C.V. ii