Dictamen de la Procuración General: La Sala III de la Cámara de Apelación en lo Criminal y Correccional de Mar del Plata condenó a Sebastián Estévez a la pena única de cinco años de prisión, accesorias legales y costas, como autor responsable de robo simple en grado de tentativa y robo calificado por efracción de un lugar habitado, hechos que concurren materialmente entre si y que se investigaron en la presente causa; y corno autor responsable de robo en grado de tentativa y robo en grado de tentativa en concurso real, que se investigaron en la causa nro. 27.032 del Juzgado en lo Criminal nro. 3 departamental, arts. 42, 55, 58, 164 y 167 inc. 3 del Código Penal (fs. 213/219). Contra este pronunciamiento se alza el defensor oficial del encausado, que interpone recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley (fs. 222/226). Denuncia transgresión del art. 42 del Código Penal y quebrantamiento de la doctrina legal de esa Suprema Corte en materia de tentativa. Postula, de conformidad con lo reglado por el art. 365 del Código de Procedimiento Penal, se case la sentencia impugnada y se condene a su instituyente a una pena sensiblemente menor que la impuesta por el fallo recurrido. Sostiene la defensa que el encausado no llegó jamás a tener la libre disposición de la “res furtiva”, por lo que tampoco logró el disfrute sin riesgo de lo robado. Esto último, porque su accionar ilícito quedó frustrado por motivos extraños a su voluntad. Formula reparos al razonamiento del camarista que lleva la palabra en el acuerdo, cuando éste afirma que el despojo se habría consumado respecto de aquellos objetos que no pudieron ser recuperados y quedaron en poder de los codelincuentes prófugos. Opino que el recurso no puede prosperar, y desde ya adelanto mi dictamen en tal sentido. La calificación legal sustentada por el decisorio en crisis no admite cuestionamiento, toda vez que el sentenciante afirma coherentemente (fs. 216) que el delito se encuentra consumado al haber sido desapoderado el damnificado de un reloj pulsera y una minicalculadora que no fueron recuperados. Las especulaciones que la defensa plantea en torno de si alguna otra persona, aprovechando el infortunio del damnificado y la confusión reinante, podo apoderarse de los objetos sustraídos y, de ese modo, “hacer su agosto”, son puramente conjeturales y, en tal sentido, ineficaces para cuestionar lo resuelto por la Cámara en el plano de los hechos. Al respecto V.E. tiene dicho que es improcedente el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley si la aplicación del art. 166 inc. 2 del Código Penal obedeció a que la Cámara resolvió que el hecho llegó a la consumación y la defensa no impugna adecuadamente lo así resuelto en el campo fáctico, pues en función de la ley penal si el hecho se consumó, bien desplazado estuvo el art. 42 de dicho cuerpo legal (conf. lo resuelto en P. 37.361, del 4-IV-89). Y también que “es insuficiente el recurso de inaplicabilidad de ley que no cuestiona adecuadamente el aspecto fáctico del fallo referido al perfeccionamiento del núcleo —apoderarse— de la figura del robo y, por consiguiente, tampoco evidencia que fuese aplicable el art. 42 del Código Penal “ (causa P. 38.367, del 3-V-88). En virtud de lo expuesto, y atento la manifiesta insuficiencia que exhibe el recurso en análisis, propicio que V.E. proceda a su rechazo. La Plata, 8 de junio de 1990—Francisco Eduardo Pena A C U E R D O En la ciudad de La Plata, a 27 de agosto de 1991, habiéndose establecido, de conformidad con lo dispuesto en el Acuerdo 2078, que deberá observarse el siguiente orden de votación: doctores Mercader, Ghione, Laborde, Rodríguez Villar, Vivanco, se reúnen los señores jueces de la Suprema Corte de sentencia Justicia en definitiva acuerdo en la ordinario causa P. para 44.412, pronunciar “Estévez, Sebastián. Tentativa de robo y tentativa de robo agravado”. A N T E C E D E N T E S La Cámara de Apelación en lo Criminal y Correccional, Sala III, del Departamento Judicial de Mar del Plata condenó a Sebastián Estévez a la pena única de cinco años de prisión, accesorias legales y costas, por ser autor responsable de los delitos de robo simple en grado de tentativa y robo calificado por efracción de un lugar habitado, en concurso real; comprensiva de la impuesta en la causa nro. 27.032 del Juzgado en lo Criminal nro. 3 departamental por los delitos de robo en grado de tentativa en concurso real con robo en grado de tentativa. El señor Defensor Oficial interpuso recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley. Oído el señor Procurador General, dictada la providencia de autos y hallándose la causa en estado de pronunciar sentencia, la Suprema Corte decidió plantear y votar la siguiente C U E S T I O N ¿ Es fundado el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley interpuesto ? V O T A C I O N A la cuestión planteada, el señor Juez doctor Mercader dijo: Como el señor Procurador General opino que el recurso es insuficiente. La defensa sostiene que el robo quedó en grado de tentativa porque el procesado fue detenido sin que, a su criterio, hubiera perfeccionado el robo. Pero el recurrente no sólo no cuestiona, con el debido apoyo legal, lo resuelto sobre los hechos por la Excma. Cámara en cuanto a que los autores “se apoderaron” de los efectos (fs. 215) sino tampoco que los prófugos llevaron, como también lo decidió el tribunal en el terreno de los hechos, algunas de las cosas sustraídas. Voto por la negativa. Los señores jueces doctores Ghione, Laborde, Rodríguez Villar y Vivanco, por los mismos fundamentos del señor Juez doctor Mercader, votaron también por la negativa. Con lo que terminó el acuerdo, dictándose la siguiente S E N T E N C I A Por lo expuesto en el acuerdo que antecede, de conformidad con lo dictaminado por el señor Procurador General, se resuelve rechazar el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley interpuesto; con costas (art. 69, C.P.P.). Regístrese, notifíquese y devuélvase.