El 6 de Abril del corriente año nació por cesárea una ternera de raza Jersey, con la particularidad de ser un clon bitransgénico. Dicho nacimiento se produjo en la Estación Experimental Agropecuaria INTA Balcarce, en el marco de trabajos conjuntos entre el Grupo de Biotecnología de la Reproducción de esta Institución y el Laboratorio de Biotecnología de la Reproducción del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas de la Universidad Nacional de San Martín y CONICET. La investigación fue llevada a cabo por MSc. Germán Kaiser, MSc. Nicolás Mucci y el Dr. Adrián Mutto bajo la coordinación del Dr. Ricardo Alberio y el Dr. Rodolfo Ugalde. La ternera es el primer bovino nacido en el mundo al cual, por técnicas de ingeniería genética, se le han insertado dos genes humanos importantes para la nutrición de los lactantes. Dichas proteínas son la lactoferrina y la lisozima humanas, las cuales tienen funciones antibacterianas, de captura de hierro y son inmunomoduladores entre otras características. De este modo, la leche bovina se asemejará a la leche humana, ya que en su estado natural casi no contiene lisozima y la actividad de la lactoferrina es específica de especie. La tecnología utilizada para generar esta ternera se encuentra actualmente en etapa netamente académica y de investigación científica, y el trabajo tuvo como fin lograr poner a punto una plataforma tecnológica para futuros ensayos. En forma resumida, las biotecnologías utilizadas son dos: la obtención de células transgénicas para las proteínas de interés y la clonación por transferencia de células somáticas. Para obtener células transgénicas, es decir, con los genes humanos incluídos en su ADN, se utilizaron métodos de ingeniería genética. Aquí se encuentra lo novedoso del trabajo, ya que se logró incluir dos genes humanos en un solo sitio del genoma bovino mediante la utilización de un vector bicistrónico, pudiendo expresarse ambas proteínas sólo en glándula mamaria al momento de la lactación por la inclusión del promotor de Beta caseína. Mediante la técnica de clonación se reemplazó el núcleo de un ovocito por el de la célula transgénica. Los embriones obtenidos fueron transferidos a vacas receptoras, resultando en preñeces y el nacimiento de Isa (I de INTA, SA de San Martín). Se corroboró que la ternera era clon por métodos de secuenciación de ADN y utilización de microsatélites (filiación) y transgénica por hibridización in situ mediante el uso de sonda específica marcada (se observó presencia de una sola inserción en el cromosoma 7).