Se derogó el art. 178 de la ley 16713: empresas unipersonales Finalmente, el poder ejecutivo promulgó la ley 18783, la cuál tiene un único artículo: “Derógase el artículo 178 de la ley No. 16713 de 3 de setiembre de 1995”. Con esto se cierra un capítulo de más de quince años, en los que el país vivió contradictoriamente la figura de las llamadas empresas unipersonales o trabajadores independientes. Este tema fue motivo de dictámenes, resoluciones, apelaciones y diversas instancias en vía administrativa y judicial. Rigen los artículos 172 a 177 de la citada ley 16713 en cuanto a la aportación de las unipersonales, pero desaparece la protección sustanciada en el numeral 2 del art. 178 (“no constituyen materia gravada...las retribuciones por concepto de servicios prestados por empresas unipersonales, toda vez que conste por escrito...la ausencia de relación de dependencia y que las mismas cunmplan además, con las obligaciones tributarias...” Por tanto, a partir de la vigencia de la ley 18783, en los casos en que se determine que los servicios prestados por una unipersonal encubren una relación de dependencia, la facturación será considerada desde su inicio como materia gravada a todos los efectos de obligaciones incumplidas con las correspondientes multas y recargos. Lo que sigue, lo escribimos en Junio de 2010, en pleno debate de la comisión parlamentaria tratante del proyecto de ley. Adquiere plena vigencia, en especial por lo que resta a resolver. 14 años después, vuelve el debate sobre las unipersonales Por: Redacción de Grupo de Consultoría Está en debate parlamentario un proyecto de ley cuyo único punto es la derogación del art. 178 (empresas unipersonales) de la ley 16713 (seguridad social) vigente desde 1996. Resulta interesante una atenta lectura a las posiciones expuestas en las reuniones de la Comisión de Legislación de la Cámara de Representantes, las que transcribimos en el anexo. En el anexo se transcriben las exposiciones de representantes de empresarios, trabajadores, laboralistas y tributaristas, y del Ministerio de Trabajo. Recomendamos también el trabajo del Dr. Américo Pla Rodríguez, “Experiencia uruguaya de empresas unipersonales”. Seguramente a quiénes son o han sido asesores empresariales en estos años les resultará más simple digerir el debate, reanalizar la norma y evaluar la realidad de su aplicación en la actividad privada y estatal. No se puede obviar el uso genuino de esta figura, del mismo modo que no se debe desconocer su desnaturalización en no pocos casos desde 1996. La figura de las empresas de servicios unipersonales comenzó a utilizarse algunos años antes de su protección mediante la norma legal. No hemos encontrado series estadísticas que identifiquen la cantidad de unipersonales registradas en BPS entre 1993 y 1998, tampoco de las altas y bajas de contratos registrados de acuerdo a los requerimientos legales. Estos datos constituyen materia prima para una elaboración documentada. Grupo Internacional de Consultoria de Uruguay (socio ICG) Agosto 2011 1 Si la intención del legislador es proteger el trabajo dependiente derogando el art. 178 de la ley 16713, debe atender en nuestra opinión a dar curso a las siguientes cuestiones que ofrezcan certezas a todos los actores: Establecer un período de adaptación y transición para regularizar aquellas denominadas unipersonales sin personal que en realidad estén constituídas por trabajadores dependientes. Definir con mayor precisión al trabajador independiente y a las empresas unipersonales prestadoras de servicios personales. Así como se articuló a nivel impositivo la “regla candado” no debiera descartarse algo similar en lo laboral y tributario de seguridad social, limitando las posibles distorsiones en la contratación de estas entidades unipersonales. El objetivo sigue siendo formalizar la economía y el trabajo, por lo que el sacrificio recaudatorio del fisco también es una contribución al mismo. Contribuyen a avanzar en lo anterior el dec. 136/009, el programa Objetivo Empleo, las importantísimas exoneraciones en la normativa relativa a inversiones, las bonificaciones fiscales a los programas de capacitación, así como otras disposiciones. La simple derogación del citado art. 178 dejaría un riesgoso vacío legal. Parece conveniente su modificación, separando los aspectos laborales de los relativos a la materia gravada en caso de probarse fehacientemente la relación de dependencia. Incorporamos un tema que aunque no está planteado es sensible a las contrataciones y vía de regularización de esa forma original del trabajo que es el Trabajo a Domicilio. La legislación es obsoleta, no considera los nuevos procesos tecnológicos, data de muchos años y se refiere a las industrias de la vestimenta y en cierto modo al calzado. Otro aspecto que guarda relación conceptual y legal con la formalización del trabajo dependiente e independiente, es el de los jubilados que precisan ingresos complementarios a su jubilación para sobrevivir, y como la normativa no les permite trabajar amparados por la misma Caja por la que se retiraron, deben hacerlo informalmente. No nos referimos únicamente a serenos o trabajadores de la construcción, muchas otras áreas también. El terreno laboral continúa siendo enormemente complejo y resbaladizo. Cuando hemos mencionado en más de una oportunidad la necesidad de modernizar y sistematizar la normativa en un texto ordenado es con la finalidad de que se otorguen garantías y certezas, no dejando librado más que el mínimo a la interpretación de los organismos competentes administrativos o jurisdiccionales. El mejor camino sigue siendo el crecimiento y desarrollo del país, la baja tasa de desempleo, las medidas para superar la desocupación. La normativa debe dar pautas y garantías que eviten, neutralicen y castiguen las distorsiones abusivas del mercado de trabajo, procurando su normal funcionamiento en todas las circunstancias. Grupo Internacional de Consultoria de Uruguay (socio ICG) Agosto 2011 2 Grupo Internacional de Consultoria de Uruguay (socio ICG) Agosto 2011 3