ELEGIDOS Hoy no es un día cualquiera, ellos dos han luchado día a día por mucho tiempo para conseguirlo; sacrificio, tesón, pasión, aderezado con un poco de suerte y por fin el resultado esperado. Durante todo ese tiempo esa combinación es lo que les ha favorecido, sabiendo ambos manejar todas las situaciones y resolverlas con las mismas armas que han manejado y hecho alcanzar el fin por lo que han luchado. La alegría y satisfacción desbordan todo, no sólo en ellos, también en todos los que les apoyaron, sin importarles en absoluto la relación o interés. No hay en todos ellos más felicidad, no hay alegría mayor ni tampoco plena satisfacción, es éxtasis al haber conseguido lo soñado. Por años, por décadas, han venido pasando los años, restándolos y sumándolos completando décadas, las cuales van haciendo historia particular, ajena a la historia de las crónicas que rellenarán páginas universales para la posteridad. Las de ellos son páginas completas en su vida también particular, que es al fin la que les importa; las ajenas, aunque no extrañas, no les tuvieron piedad pero han logrado que nunca les doblegasen. Carlos y Rebecca nacieron y crecieron en sitios muy diferentes, muy distantes no sólo en distancia, en valores, cultura y en todo aquello que la sociedad ha hecho solamente para dividirse y tener que ser diferentes. 1 ELEGIDOS Él tenía casi todo para ser un robot, moderno, salido de la inmensidad de todo, exceso activo adulterado de ingredientes clonados, iluminado de bites y rodeado de negros augurios, pero recompensados éstos por mercados especulativos que llenaban la canasta completa más y más hasta desbordarse con sangre de pobres manos y cabezas adoctrinadas. Ella tenía el verde y sus tonos de pureza y grandeza tocando el azul del cielo y el ocre de la tierra húmeda y fértil. Corriendo por sendas ricas pero vulnerables encontraba día a día la libertad, hasta que la vulnerabilidad rompió en añicos y el verde y ocre pasó a ser gris, seco y cruel. La riqueza natural pasó a convertirse en miseria tan natural como la sangre derramada por los suyos intentando salvarla; con esa riqueza no había ahora canasta que llenar, no la había, la habían tenido siempre frente a ellos ofrecida virgen, entera, sin aditivos. En su dispares luchas competían al son del día a día, cotidiana abnegación, enfrentándolos con la destreza del momento; a cada uno de ellos le correspondía su lugar en sus hábitats, eran una pieza más del engranaje mayúsculo. El de él, adornado de artificiales diseños, engalanado de verdades falsas, aderezado con sabores agrios intentando conquistar lo ya conquistado; el de ella, abierto a la destrucción que poco a poco iba acechando, debía ser pecado el ser inocente y tener como premio todo natural. 2 ELEGIDOS Ahora que son adultos han llegado adonde querían, van a recoger al fin lo que han venido sembrando; la cosecha será el premio de sus luchas en forma de liderazgo. Desde sus puestos de mando tienen la posibilidad de dominar sus espacios blindados por ejércitos de trincheras, devoradores de presupuestos de lujo, repitiendo historias de batallas y guerras olvidadas. Desde esos mismos lugares van a tener la posibilidad de adivinar el futuro repitiendo el pasado de sus predecesores, olvidando de pronto tantas promesas repetidas incansablemente durante depredadoras campañas promocionales. Desde esos tronos serán pasto de agresores y destructores duendes y rufianes atolondrándoles, unos con sus bienes a fuerza de intereses del poder capital, y pasiones celestiales otros que adoctrinan castigando con el infierno. Con el tiempo se sentirán criaturas maniatadas con hilos de marionetas fingiendo obtusamente lo imposible. Pero eso podría pasarles en el futuro, cercano; ahora están saboreando el triunfo, el suyo, y el fracaso de los derrotados, inflados por la gloria, bronceados por el orgullo, saciados. En un pequeño país del continente negro una mujer ha conquistado la gloria y conseguido el triunfo a casi lo imposible; en la plena madurez de su vida adulta ha roto tabúes, saltado límites, jugándose más que la vida. Casi desde el 3 ELEGIDOS extremo más lejano de esos límites ha conseguido el salto por encima del vacío y alcanzado la cima del poder inimaginable. Desde ya siente que le quieren mover los hilos que la dirijan, que la conviertan en la marioneta maniatada. Desde el viejo continente se repite la historia, un candidato intelectual, adoctrinado pero con nuevas ideas y promesas para un progreso diferente, ha ganado a las vanagloriadas encuestas. Todos justifican el triunfo al descontento de los que por derecho pueden decidir, descontento repetido de últimas contiendas, y a la gran masa social que hasta el último momento continuaba indecisa y casi apagada en el iluminado glamour de la contienda. La oportunidad está servida a ambos lados paralelos del Globo. En uno la de la abuela, madre, hermana, tía, hija, prima, sobrina, nuera, amiga, compañera, conocida, la mujer personificada, en la grandeza y la dignidad. Futura presidenta de un país prácticamente roto por grietas que quiebran hasta el dolor. En el otro, el hombre, repitiendo historia llena de pecados, frente a un camino de esa historia que podría esquivar para empezar a saldar cuentas. En un viaje de estudios Carlos había viajado al país de Rebecca. Durante unos pocos días había podido ver con sus propios ojos la brutal injusticia presente en todos los rincones del país. 4 ELEGIDOS En uno de sus paseos por un mercado local, al que había escapado del protocolo del grupo, había visto a una mujer discutir con un policía defendiendo a unas vendedoras a las que trataban de engañar y quitarles partes de las mercancías mientras niños y niñas semidesnudos en medio de una selva de moscas corrían y gritaban alrededor. La curiosidad de Carlos hizo que la mirada de esa mujer se cruzara por unos instantes con la suya. Varios años después Carlos desde el hotel de guarida, donde se concentraba para esperar un remoto pero siempre posible triunfo, puede ver en un breve momento de descanso por la televisión el otro triunfo muy lejos de ahí de una mujer en un pequeño país olvidado de África. La noticia principal era por la novedad de ser una mujer. Carlos reconoce a esa mujer, produciéndole una sensación tal, que va a mover cielo y tierra para que uno de sus responsables de campaña intente hasta lo imposible por contactar y conseguir una comunicación con ella. Después de varios minutos y tras varios intentos, no sólo por hacerle desistir de su idea por parte de sus asesores sino también por la dificultad de conseguir la comunicación entre ambos, finalmente se encuentran a ambos lados del teléfono, pero los asesores de Carlos le indicaban que la principal cadena de televisión privada del país ya estaba lista esperando hacerle una primera entrevista en directo como presidente electo del país. Carlos no tenía prisa, sabía que no iba a demorar mucho en la conversación con Rebecca, ya habría tiempo después para hablar entre ambos, ahora quería 5 ELEGIDOS decirle y en la lengua materna de Rebecca una breve frase. La había aprendido del viaje que había hecho cuando era estudiante. - Sra. Rebecca, lo ha conseguido. Y en inglés continuó diciéndole brevemente que no había que parar ahí, que eso tenía que ser apenas el comienzo para ambos. 6