TPR: Temperatura, Pulso y Respiración. Las constantes vitales normales de un caballo sano deberían de ser: Caballo adulto: o Temperatura: 38º C. o Pulso en reposo: 32 a 44 pulsaciones por minuto. o Respiración: 8 a 16 respiraciones por minuto. Potro: o Temperatura: 38 a 38,6º C. o Pulso en reposo: 50 a 100 pulsaciones por minuto. o Respiración: 20 a 30 respiraciones por minuto. Para tomar la temperatura de un caballo pediremos a alguien conocido que nos lo sujete por el ramal, evitando atarlo. Nos colocaremos lateralmente a él, desde donde podamos observarlo para evitar cualquier giro o patada. Levantaremos la cola hacia un lado e introduciremos en el ano la punta del termómetro que habremos previamente engrasado con vaselina o saliva. Hoy en día existen termómetros digitales mucho más seguros que los antiguos de mercurio. El termómetro se ha de sujetar bien ya que se puede llegar a introducir por completo en el recto. Mantendremos el termómetro en lugar por lo menos medio minuto o hasta que pite. Al sacarlo lo limpiaremos y bajaremos la temperatura para que esté preparado para la próxima vez. Con una temperatura de 39º C o superior llamaremos al veterinario. Para tomar la temperatura de un potro lo sujetaremos por el pecho y la cola tal y como se hace para inmovilizarlo, procurando mantenerlo relajado pero sin perder la atención. Mientras una segunda persona procederá como para con el caballo. Para tomar el pulso se sujetará al animal como para tomarle la temperatura. Intentaremos buscar el pulso con los tres dedos centrales: Primero sobre la arteria facial, debajo de la mandíbula superior, en su parte interna. Segundo sobre la arteria que pasa justo por encima y detrás del ojo. Tercero en la parte interna del antebrazo, un poco más arriba de la rodilla, donde la arteria cruza por encima del hueso. 1 Apretaremos un poco y contaremos las pulsaciones durante treinta segundos. En resultado lo multiplicaremos por dos. Con un estetoscopio escucharemos el corazón en el lado izquierdo, entre la cincha y el codo. Cada pulsación consta de dos golpes: sístole y diástole que cuentan como uno. Nos costará un tiempo habituarnos al ritmo. Es importante recordar que un caballo nervioso suele tener el ritmo cardiaco alterado por lo que es imprescindible esperar a que se calme. Después de un gran esfuerzo las pulsaciones podrán aumentar de 4 a 6 veces, pero si el caballo está en forma y sano deberán de volver a la normalidad en un máximo de 30 minutos. Para contar las respiraciones colocaremos el dorso de la mano cerca del ollar, o los contaremos observando el subir y bajar de la caja torácica, 2 movimientos que cuentan como uno. El caballo deberá de estar relajado. Con los potros las lecturas pueden ser algo más altas de lo normal. Las constantes vitales de un caballo indican su estado de salud general y son una guía útil en su entrenamiento, pero para que sean verdaderamente indicativas y evaluativas deben de tomarse todos los días en el mismo sitio y a la misma hora. 2